Quiero ver el mar

En mi jardín hay un árbol. Un árbol muy pequeño.

Lo invito a beber cuando hace calor.

Capturo las orugas que sueñan con mordisquear sus hojas.

El arbolito está inquieto.

"¡Canta, por favor! ¡Canta la canción del pequeño barco en la inmensa madre!"

Cuando la canción ha terminado, el arbolito suspira: "Qué grande debe ser el mar"

Juntos miramos las nubes

El arbolito está inquieto.

"¡Quiero ver el mar!"

"¡Es imposible! El mar está lejos, muy lejos de aquí. Y tú, ni siquiera puedes caminar".

El arbolito ya no se mueve. Se enfurruña

Entonces puse el arbolito en una maceta.

Estoy buscando mi pala de plástico rojo y mi boya.

Conozco el arbolito. En la playa; él querrá hacer un castillo.

Cuando vea el mar, se bañará.

Cerca del estanque, el pato busca gusanos.

"¿A dónde vas?"

"Vamos a ver el mar"

El pato mira el estanque. Es un pequeño estanque.

"Voy con usted

Estamos caminando hacia el mar

Pronto, el pato está cansado. Él quiere descansar. Nos detenemos a la sombra de un arbusto.
Juntos miramos las nubes.

Pato susurra

"Puede ser un cazador. ¡Caza patos! ¡A su esposa le encanta el paté de pato!"

El arbolito con temblor

"¿Si se tratara de un vahe? Con gusto mordería pequeñas hojas muy tiernas.

Pequeñas hojas de árbol "

Apenas me atrevo a respirar.

"Probablemente sea un lobo. ¡Un lobo hambriento! No ha comido nada en semanas".

Juntos decidimos ir

Regresamos a casa Me siento al borde del estanque

El arbolito está de rodillas. El pato se acurruca contra mí.

Canto la canción del viejo chalet, allá arriba en la montaña.

Cuando termina la canción, el pato suspira: "¡Qué alta debe ser la edición!

Juntos miramos las nubes.