La tercera raíz, la raíz olvidada.

Recordando mis épocas en la primaria, hace muchos años, vino a mi mente la pregunta
“inocente” de uno de mis compañeros, “Oye Belén, ¿tu papá es de África?” y lo que en ese
momento consideré como una ofensa, ahora que lo pienso, pudo ser un cuestionamiento
totalmente válido, aunque cargado de estereotipos, pues no toda la población negra es
africana y no todos los africanos son negros; pero lo que mas llamó mi atención con esa
pregunta fue el desconocimiento del mexicano sobre la existencia de los afromexicanos o
afrodescendientes y en efecto, esta etnia ha sufrido la invisibilización por parte de la
población mexicana durante mas de 200 años.
Si bien, mi padre pertenece a la población negra de la costa chica de Oaxaca, para las
demás personas que lo vieran o ven en la calle, él no es mexicano, la gente piensa que es
de otro país, la gente piensa que él es extranjero; no es que el mexicano se avergüence de
sus raíces africanas sino que simplemente no las conoce; mientras que en Estados Unidos
la esclavitud, la segregación racial y las constantes violaciones a los derechos de la
comunidad afroamericana han formado parte de su historia. En México pasa todo lo
contrario pues en la historia de nuestro país la población negra sólo fue tomada en cuenta
para describir el comercio de esclavos durante la conquista y como se formó el sistema de
castas – lo que cabe en apenas dos renglones en los libros de texto – y eso es todo, a
partir de ese momento la población negra desaparece de la historia de nuestro país, es a
partir de ese momento que la población negra ni siquiera paso a formar parte de ese
México tan rico en historia, cultura y gastronomía.
Y es hasta el Censo de Población y Vivienda del 2020 del INEGI que los afromexicanos por
fin pudieron ser tomados en cuenta y ser formalmente reconocidos como una raíz étnica y
cultural, en la que representan el 1.16% de la población nacional que se encuentra
establecida en los estados de Veracruz y en las costas de Guerrero, Oaxaca y Chiapas, sin
embargo y a pesar de eso, siguen siendo uno de los sectores de la población mas
olvidados, ya que lamentablemente el reconocimiento de la población negra en nuestro
país ha sido tardío y no se le ha dado la importancia que realmente ha tenido a través de
la historia, no sólo en el ámbito político, sino también en el cultural.
Es importante considerar que el pueblo afromexicano ha sufrido el olvido de los gobiernos
y sus políticas públicas, sus derechos han sido vulnerados y su historia es prácticamente
nula para muchos de nosotros.
Dime tú a que afromexicano importante en la historia conoces. En estos momentos no te
viene ninguno a la mente y eso es porque para la identidad del mexicano sólo existen “la
raza cósmica” y “la raza de bronce”, es decir indígenas y españoles, para el orgulloso mexa
los negros no existieron; para el orgulloso mexicano, los negros no tuvieron injerencia en
la historia.
Tú, quizá en este punto, te preguntarías cual ha sido la gran contribución de los negros a
nuestra historia, a nuestra cultura y déjame darte los siguientes datos importantes:

1. El primer presidente afrodescendiente de la historia fue Vicente Guerrero

2. Géraro Vázquez, líder sindical y guerrillero del estado de Guerrero, también era
afrodescendiente.
 3. Carmen Robles, revolucionaria, quien lucho al lado de Álvaro Obregón y en el
Ejercito Libertador del Sur, sabia perfectamente del uso de armas (para la época),
recibió el grado de coronela por parte del mismísimo Emiliano Zapata.
4. Emiliano Zapata tenia raíces afromexicanas por parte de su mamá.
5. José Ma. Morelos y Pavón, el siervo de la nación y quien escribió “Sentimientos de
la Nación” también era afrodescendiente.
6. Álvaro Carrillo, cantante y autor de “Pinotepa” y “El Andariego” era
afrodescendiente.
7. A la población afro del sur de México debemos “el Baile de los diablos” y las
“chilenas”
8. Los jarochos y sus sones, de la región del sotavento, también tienen raíces
afrodescendientes.

Con todo esto no estoy tratando de meterte hasta por los oídos la cultura afro, pues la
intención de este texto es que la conozcas y aprendas de ella, no que la hipervisibilices,
que sepas que en nuestro país no solo existen los mestizos o indígenas, sino que también
existe una tercera raíz, rica en historia y cultura, una etnia con un chiquito pero
importante 1% de la población nacional y a la que debemos mucho de nuestra historia y a
la que no podemos seguir dejando en el olvido pues la invisibilización también es una
forma de discriminación.
Cuando era niña, no lograba comprender cuando mi padre me decía que tenia que amar
mi cabello y mi color de piel, ahora comprendo sus palabras, pues son esos pequeños
detalles los que nos hacen darnos cuenta que nuestras raíces afro siempre estuvieron ahí,
ignoradas por nosotros y por el resto. De mi padre aprendí mucho del caló afro costeño,
de mi padre aprendí a bailar chilenas, de mi familia paterna aprendí a estar orgullosa de
mis orígenes y mi color de piel y mi deuda con ellos, de ahora en adelante, será hacerle
saber a los mexicanos que ellos también existen, que siempre han existido, que son…la
tercera raíz.