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Introducción

Tema: La Revolución De Mayo De 1810

Objetivo: cumplir con la solicitud de la profesora Verónica L. Moreira.

Informarnos sobre dicho tema.


Brindar Información que podamos comprender.

El trabajo es presentado impreso.

Fuentes: Encarta 2007

El trabajo esta destinado a la profesora del área de Ciencias


Sociales Verónica Moreira y a los alumnos.

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Desarrollo
Investigando en distintas bibliografías nos encontramos con estos
aspectos de la Época Colonial:

Pulpería: fue hasta inicios del siglo XX, era una tienda comercial para
varias regiones de Hispanoamérica, también era un centro social de
las clases humildes y medias del pueblo.
Gaucho: es un tipo de campesino originado de las llanuras Argentina,
Uruguay, el sur de Brasil y la Patagonia Chilena. Se caracteriza por
ser hábil con el caballo y por su vínculo con la proliferación, es decir
el crecimiento celular, de vacunas en la región y las actividades
económicas.
Casa/Calles: En el Buenos Aires colonial las casas eran bajas, muy
iguales entre sí, sus paredes eran gruesas pintadas con cal, tenían
tejas rojas, ventanas con rejas de hierro y para adornar, macetas con
flores típicas. Sólo muy pocas casas tenían planta baja y planta alta,
estas casas ubicadas alrededor de la plaza mayor pertenecían a
familias adineradas. Las denominaban “altos” las cuales llevaban el
apellido de sus dueños por ejemplo: Los altos de O´Gorman y
Perichon. Estas tenían muchas habitaciones, con ventanales
señalando a un patio con muchos árboles, En el cual se reunían las
familias a tomar mate, conversar y comer ricos pastelitos.
Las calles carecían asfalto y las veredas eran hechas con pavimento
de piedra pero no tan anchas. Cuando llovía se hacía bastante difícil
transitar por las calles. Sólo las calles principales estaban alumbradas
por las noches con un farol de vidrio y en el interior se colocaba una
vela de grasa, que era encendida por un persona llamada farolero.
Los muebles de las casas eran muy pocos, sólo las familias más
adineradas tenían gran cantidad de estos pero no tenían estilo o no
combinaban entre si. En los salones tenían muebles bajos con puertas

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de vidrio donde se podían ver la vajilla y adornos de plata muy
comunes en esa época. Los platos y vajilla de loza o porcelana traídas
de Europa eran muy caras sólo las familias adineradas e importantes
de la colonia las tenían y eran utilizadas en ocasiones especiales ya
que si se rompía, casi no se podía arreglar.
Vida Cotidiana: En esa época a los porteños les gustaba como mejor
pasatiempo dormir la siesta. Tampoco había tanto que hacer. Las
actividades principales eran la ganadería y el comercio, que se
manejaban con poca mano de obra y una visita cada tanto a los
lugares de producción y servicio. Ir de compras llevaba muy poco
tiempo. Bastaba atravesar la Plaza de la Victoria y recorrer la Recova
donde estaban los puestos de los “bandoleros” (nombre de los
merceros en esa época) frente a una doble fila de negocios de ropa y
novedades.
Para la vida nocturna las tertulias era su expresión más elegante. Las
casas de las familias más “acomodadas” recibían a viajeros, vecinos y
amigos para divertirse y hacer negocios. Las tertulias siempre
terminaban a las una entre empanadas, recitales de poesía y música,
comentarios políticos y de moda. Una de las más famosas era la que
ofrecían frecuentemente los O´Gorman. A Don Tomás O’Gorman y a
su esposa Anita Perichon les gustaba tener la parte elegante de la
sociedad, entre ellos al Virrey Cisneros. Además la ocasión indicada, y
casi la única, para que las adolescentes encontraran novio.
Una vez por semana “la parte más sana del vecindario” (así Los
denominaba a los propietarios porteños el cabildo), concurría al
teatro para asistir a paquetas veladas de opera y a disfrutar de las
obras de teatro de Lvardén. Convocaban a ricos y pobres las corridas
de toros. El lugar era en una plaza de toros (ubicada en la actual
manzana de 9 de julio y Belgrano) con una capacidad para unas dos
mil personas. Pero se demolió y se construyo ahí mismo una plaza
con capacidad de diez mil personas en el Retiro en la que alguna vez
supo torear don Juan Lavalle. En su breve paso por Buenos Aires, los

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ingleses habían impuesto el Cricket, un juego similar a la “chueca”
deporte preferido de los pampas que se sorprendían al ver como los
huincas lo practicaban. El pato, las riñas de gallo, las cinchadas y las
carreras de caballo eran las diversiones de los suburbios orilleros a
las que de tanto en tanto iban los habitantes del centro. Allí podían
escucharse los “cielitos”, que eran los mejores cantos acompañados
de danza sobre la situación política y social de la época.
La ruleta y los juegos de azar tenían se jugaban en la casa de Martín
Echarte una especie de casino colonial donde también se jugaba al
ajedrez y por supuesto se hablaba de política. Los cafés eran los
ámbitos naturales de discusión política y la sede de las distintas
facciones que discutían acaloradamente en mayo de 1810. Los más
famosos eran el Café de Marco, la Victoria, el de los Cartalanes y el
de Martín. Tenían mesas de billar y amplios patios. A la hora de
comer afuera no había mucha variedad. Podías ir en la Confitería
Francesa, pero La fonda de Los Tres Reyes era el único restaurante
de Buenos Aires. Su única competencia era la casa de Monsieur
Ramón, un auténtico Chef francés que preparaba comidas y
entregaba a domicilio. Muchas señoras mandaban a sus esclavos a
aprender a cocinar con Monsieur Ramón. Con la revolución se produjo
una deshispanización que se vio reflejada en las costumbres, la forma
de hablar y la vestimenta. Las mujeres mantuvieron la mantilla, el
peinetón y el abanico pero vistieron cada vez más a la francesa. Los
hombres, en cambio se vestían a la inglesa, con galera y todo.

Protagonistas: los protagonistas de la revolución de mayo fueron


Presidente: Cornelio Saavedra
Secretarios: Mariano Moreno y Juan José Paso
Vocales: Juan José Castelli, Manuel Belgrano, Manuel Alberti,
Miguel de Azcuenaga, Juan Larrea y Domingo Matheu.

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Rol del niño: Los niños asistían a la escuela y debían portarse bien o
si no debían pagar las consecuencias siendo azotados.

Rol de la mujer: era muy importante la industria doméstica, que


estaba a cargo de las mujeres de la familia y la servidumbre. En las
casas se preparaban dulces, conservas, arrope, velas de cebo, jabón
con semillas de zapallo, polvo de arroz para la cara, almidón de trigo
para la ropa, y muchos productos más. Las mujeres alternaban estas
tareas productivas con el cuidado del hogar y de los hijos, así como
bordados, costuras y tejidos. Aparte sus otros roles eran madres y
educadoras.

Cuadro comparativo

Epoca 1810 Ahora 2010


Las mujeres se quedaban en las Las mujeres de hoy trabajan para
casas a cuidar de sus hijos, se ayudar a mantener sus hogares,
encargaban de educarlos y de la mayoría educan y llevan
esperar a sus esposos con los adelante sus hogares solas.-como
quehaceres listos.- jefas de sus hogares
Los niños eran sumisos debían ir Hoy los niños van a escuelas que
a las escuelas y portarse bien.- ofrecen tecnología, y se divierten
se divertían con juguetes hechos con juegos electrónicos, tienen
en casa, pelotas de trapo, celulares, mp3, play station,
muñecos de tela, et.
Los bailes de antes se llamaban Los bailes de ahora son mas
minué, cielito entre otros informales, tecno, electro,
regueton, cumbia.-
Las vestiduras eran mas tapadas, La vestimenta es totalmente
formales, y decorosas.- se usaba informal, se usan jeans, remeras,
frac, trajes, vestidos largos.- camisas, mucho mas liberal y
diseños mas atrevidos, zapatillas,
etc.-

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Conclusión

Al realizar el trabajo de investigación nos encontramos con aspectos


de vida de la época colonial que no conocíamos. Nos resulto
interesante porque pudimos compararlos con los de la vida actual. Lo
positivo es ampliar nuestro conocimiento en el tema referenciado no
solo en lo histórico sino también en otros ámbitos, vida social,
costumbres, etc.
Lo negativo el no haber coordinado correctamente el tiempo para
desarrollarlo con mayor información.-

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Información Complementaria

Los bailes
Los porteños eran famosos porque
¡les encantaba bailar! Algunos de los
bailes preferidos eran la contradanza
española, los valses y los minuetos.
Pero próximo a la época de la
Revolución cuando empezó a hacer
furor una danza que se acompañaba
con cantos y en la cual la mujer
avanzaba cantando "cielito, mi
cielo". ¿Cómo se llamaba?
Justamente: Cielo.

Las tertulias
Otro momento de diversión eran las
tertulias, reuniones que se hacían a la
noche, en las casas de los vecinos, y
que terminaban alrededor de las once.
Iban amigos de toda la vida y también
forasteros, quienes eran "la gran
novedad", ya que traían las últimas
noticias del exterior. En estas reuniones
estaban siempre las mujeres de la
familia y, a veces, el dueño de casa. Es
que, por lo general, éste se divertía
más hablando de política en el café.

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Bibliografía

Encarta 2007

Revistas de Billiken

Revistas de Anteojito

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