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 Berasaluze Correa, A. (2009).

El devenir del trabajo social en clave de


género. Escuela universitaria de trabajo social. Este trabajo nos muestra
como el trabajo social lo han feminizado debido a que se considera una
invención de la mujer y por lo tanto se ha desvalorizado por el género
masculino. Dicha investigación, no obtuvo sus datos a través de encuestas,
sino a partir de documentos sobre el posicionamiento de la carrera. Esto
nos ayuda a ver que la carrera de trabajo social posiblemente ha sido
desmeritada desde sus inicios porque se considera una profesión creada
por la mujer.

 Coral del Río y Olga Alonso-Villar. (2007). Universidad de Vigo. “Diferencias


entre mujeres y hombres en el mercado de trabajo: desempleo y salarios.”

Este trabajo hace una reflexión desde la teoría económica del porqué de
dichas diferencias y del significativo papel que juega la discriminación en
contra de las mujeres en la explicación de esas brechas y los efectos que
ello genera en términos de desigualdad y pobreza. La ponencia incorpora
hasta doce tablas, que reflejan las diferencias que se observan en las tasas
de participación, desempleo, tipos de contratos, nivel salarial, duración
media de la dedicación a las actividades cotidianas, y en ella se entiende
que esas diferencias se explican por la discriminación respecto de las
mujeres en una doble vertiente: antes de su entrada en el mercado de
trabajo y después, una vez en él, examinando los factores a los que se le
suele atribuir la generación de las diferencias y las variadas teorías
explicativas que se han venido dando para entender el fenómeno.

Diseño metodológico ellos se basan en la teoría económica sobre la


diferencia entre hombres y mujer y la discriminación que hay hacia la mujer
entre las brechas salariales y en la desigualdad.

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