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Diagrama de la anatomía general de un perro: 1. frente, 2. hocico, 3. barboquejo, 4. hombro, 5. codo, 6. pata
anterior, 7. punto más alto de la grupa, 8. muslo, 9. corvejón, 10. patas traseras, 11. cruceta, 12. babilla, 13.
patas, 14. cola.
Al igual que los lobos, los perros tienen un pelaje, una capa de pelos que los
cubre el cuerpo. El pelaje de un perro puede ser un «pelaje doble», compuesto
de una capa inferior suave y una capa superior basta. A diferencia de los lobos,
los perros pueden tener un «pelaje único», carente de capa inferior. Los perros
con un pelaje doble, como los lobos, están adaptados para sobrevivir en
temperaturas frías y tienden a provenir de climas más fríos.
Los perros suelen presentar vestigios de contrasombreado, un patrón
de camuflaje natural común. La base general del contrasombreado es que un
animal iluminado desde arriba aparece más claro en la mitad superior y más
oscuro en la mitad inferior, donde normalmente tiene su propio color.[27][28] Este
es un patrón que los predadores pueden aprender a reconocer. Un animal
contrasombreado tiene una coloración oscura en la superficie superior y una
coloración clara en la inferior. Esto reduce la visibilidad general del animal. Un
vestigio de este patrón es que muchas razas tienen un lado, una raya o una
estrella de pelaje blanco en el pecho o en la parte inferior.
Esqueletos de perro gran danés y chihuahua en un museo de osteología.
Cola
Hay muchas formas diferentes de cola de perro: recta, recta hacia arriba, forma
de hoz, rizada o en tirabuzón. Tradicionalmente a algunas razas de perro se les
amputa la cola (caudectomía), lo cual se está comenzando a prohibir en varios
países, ya que se considera una forma de crueldad hacia los animales.[29][30] En
algunas razas, algunos cachorros nacen con una cola corta o sin cola. Esto
sucede más a menudo en ciertas razas, especialmente en aquellas en las que a
menudo se corta la cola y que por tanto no tienen estándar de raza en cuanto a
la cola.
Aparato locomotor
Como la mayoría de mamíferos predadores, el perro tiene músculos potentes,
un sistema cardiovascular que permite una alta velocidad y una gran resistencia y
dientes para cazar, aguantar y desgarrar las presas.
El esqueleto ancestral de los perros les permite correr y saltar. Sus patas se han
desarrollado para impulsarlos rápidamente hacia delante, saltando cuando sea
necesario, con el fin de cazar y atrapar las presas. Por tanto, tienen pies
pequeños y apretados y caminan sobre los dedos (digitígrados). Sus patas
traseras son bastante rígidas y sólidas, mientras que las anteriores son laxas y
flexibles, estando unidas al tronco únicamente por músculos.
Aunque la cría selectiva ha cambiado la apariencia de muchas razas, todos los
perros conservan los elementos básicos de sus antepasados. Los perros
tienen omóplatos desconectados —carecen de clavícula— que permiten hacer
zancadas más largas. La mayoría de razas conservan las garras vestigiales —
espuelas— en las patas anteriores y a veces en las posteriores. Algunas de
estas razas, como el perro pastor catalán, pueden presentar un espolón doble en
una o más patas. En algunos casos, se les quitan esas garras para evitar que el
animal se las arranque sin querer durante la persecución de una presa, pero
esta práctica es ilegal en algunos países.
Sentidos
Los sentidos del olfato y del oído del perro son superiores a los del humano en
muchos aspectos. Algunas de sus habilidades sensoriales han sido utilizadas
por los humanos, como por ejemplo el olfato en los perros de caza, perros
buscadores de explosivos o perros buscadores de drogas. Además son
capaces de diferenciar e identificar sonidos concretos como palabras y
asociarlos a estímulos externos, como por ejemplo un premio.
Vista
La visión del perro parece adaptada para la caza: No tiene gran agudeza visual
de detalles, pero tienen excelente percepción de movimientos. Tiene excelente
visión nocturna o crepuscular, debido al uso del tapetum lucidum —una pantalla
reflectiva dentro del ojo—.[31]El campo visual del perro se encuentra entre los
240 - 250 grados, mucho mayor que el humano que es de aproximadamente
180 grados.
La visión del perro es sensible a los objetos en movimiento o con desplazamiento repentino, y cuenta con una
excelente visión nocturna o crepuscular.