Unidad 2

Riesgos generales
y su prevención
Índice de la unidad
2.1 Riesgos ligados a las condiciones de seguridad

2.1.1 Conceptos de seguridad laboral

2.1.2 Materialización del riesgo

2.1.3 Estadísticas de accidentalidad

2.1.4 Principales riesgos relacionados con la seguridad

2.1.5 Medidas preventivas

2.2 Riesgos ligados al medio-ambiente de trabajo

2.2.1 Higiene industrial

2.2.2 Calidad del aire interior

2.2.3 El ruido

2.2.4 El ambiente térmico

Índice de la unidad
2.3 La carga de trabajo, la fatiga y
la insatisfacción laboral

2.3.1 La carga de trabajo

2.3.2 La fatiga

2.3.3 Diseño ergonómico del puesto de trabajo

2.3.4 La insatisfacción laboral

2.4 Planes de emergencia y evacuación

2.4.1 Plan de emergencia

2.4.2 Plan de evacuación

2.5 El control de la salud de los trabajadores

2.1
Riesgos ligados a las
condiciones de seguridad
2.1.1
Conceptos de seguridad laboral
Las condiciones
de seguridad
La seguridad en el puesto de trabajo no debe dejarse
a la suerte. Debe ser fruto de un gran esfuerzo en
prevención que trate de recopilar
minuciosamente los posibles riesgos del entorno.
Los accidentes se evitan teniendo estos riesgos en
cuenta y desarrollando soluciones a modo de
medidas preventivas.
Algunas de estas medidas son muy elementales
(prevención de caídas a distinto nivel, eliminación de
objetos salientes, choques con elementos móviles…)
y otras serán más difíciles de detectar.
Para conseguir un entorno laboral mucho más
seguro, las prevenciones básicas que
recomendamos serían las siguientes:
• Mantener las distancias de separación suficientes entre la maquinaria
y los trabajadores.
• Delimitar el espacio de trabajo de cada empleado.
• Contar con zonas de paso como pasillos, escaleras o corredores
suficientemente amplias para no impedir o entorpecer el paso.
• Liberar de obstáculos las zonas de paso.
• Buen estado de conservación de instalaciones como electricidad,
agua, gas, etc.
• Buen estado de conservación del edificio.
• Disponer de una zona de paso para personas y otra para vehículos.
• Pavimentos no resbaladizos.
2.1.2
Materialización del riesgo
Materialización
del riesgo
Todos los riesgos contemplados anteriormente pueden
llegar a materializarse en cualquier momento.
Por este motivo, es muy importante tener claros los
riesgos para poder prevenirlos con la mayor eficacia y
para que, si de forma inevitable, se produce un
accidente, podamos reaccionar de la mejor forma
posible.
2.1.3
Estadísticas de accidentalidad
 A pesar de lo que pueda parecer, el sector químico es uno de los sectores económicos más seguros
gracias a los esfuerzos en prevención de riesgos laborales. Según encuestas del INE recopiladas por la
Federación Empresarial de la Industria Química Española (FEIQUE).
Para ver este estudio, puedes hacer clic aquí:
2.1.4
Principales riesgos
relacionados con la seguridad
Los agentes
químicos
Los agentes químicos que se manejan en
muchas profesiones son sustancias que
pueden llegar a ser absorbidas por el
organismo y que, con el tiempo, pueden
causar perjuicios para la salud.
Por ello, es fundamental tener un buen control
para evitar efectos secundarios en los
trabajadores.
Las reacciones sobre el cuerpo humano de
algunos agentes químicos pueden ser más o
menos severas con efectos:
• Corrosivos. Provocan en la piel un
efecto destructivo.
• Irritantes. Producen una irritación de
la piel o mucosas con las que toma
contacto.
• Neumoconióticos. Producen
anomalías pulmonares por partículas
sólidas.
• Asfixiantes. Se da un desplazamiento
o alteración del oxigeno del aire.
• Anestésicos y narcóticos. Generan
una depresión del sistema nervioso
central que suele desaparecer cuando
el afectado se aleja de la fuente
contaminante.
• Sensibilizantes. Generan efectos
alérgicos (asma, dermatitis).
• Cancerígenos, mutágenos y
teratógenos. Llegan a desencadenar
cáncer, modificaciones hereditarias o
malformaciones en la descendencia.
• Sistémicos. Producen alteraciones en
órganos o sistemas específicos.
Vías de entrada
La contaminación por parte de los agentes químicos se puede
producir por varias vías de entrada:
• Vía dérmica: a través del contacto con la piel.
• Vía respiratoria: a través de la boca, nariz o pulmones.
• Vía digestiva: ingesta por vía oral.
• Vía parenteral: tras el contacto con heridas, llagas, etc.
Agentes físicos
En cuanto a los agentes físicos que
pueden entrañar problemas para la salud
de los trabajadores, podemos agruparlos
en diferentes categorías en función del
tipo de energía implicada en la
generación de ese riesgo:
01. Energía mecánica.
02. Energía electromagnética.
03. Energía calórica.
01. Energía mecánica
Agrupamos en el apartado energía mecánica
aquellos efectos negativos en la salud de los
trabajadores derivados de ruidos o vibraciones
provocados por el uso de maquinaria.
El ruido excesivo es un sonido molesto e
indeseado que se mide en decibelios (nivel de
presión acústica), y hercios (nivel de
frecuencia).
Sus efectos en la salud son negativos por
varias razones. Un exceso de ruido puede
provocar una pérdida de audición, un aumento
del tiempo de reacción ante estímulos e
incluso otro tipo de alteraciones o trastornos
como irritabilidad, cansancio, problemas
respiratorios o cardiovasculares…
Las vibraciones transmiten en el cuerpo
del trabajador un movimiento oscilante o
repetitivo con diferentes tipos de
frecuencia. No es igual una frecuencia baja
como puede ser la oscilación de un vagón
de tren que una alta frecuencia como
supone la utilización de un martillo
neumático.
Los efectos dependerán de la zona que
sufra tales vibraciones. Si es una vibración
general o global, es decir, sensible en todo
el cuerpo, puede llegar a generar
traumatismos en la columna vertebral. Si
por el contrario se trata de una vibración
focalizada en la zona mano-brazo, pueden
darse casos del conocido como Síndrome
de Reynaud (vulgarmente conocidos como
“mano muerta” o “dedo blanco”).
Evitar estos riesgos requiere de
medidas preventivas que actúan sobre
la organización del trabajo, la actuación
técnica sobre el foco y sobre el medio y
una atención sobre el propio receptor.
02. Energía electromagnética
La radiación a través de ondas
electromagnéticas es especialmente
preocupante en determinados puestos de
trabajo. Para conocer sus riesgos, es preciso
tener en cuenta que esta clase de energía
puede manifestarse en dos tipologías
diferentes:
La radiación ionizante es aquella que
origina partículas de carga eléctrica tras una
interacción con la materia. Estas radiaciones
pueden ser de tipo electromagnético (rayos X
o gamma) o corpusculares (partículas
emitidas por los átomos: alfa y beta) son
extremadamente peligrosas para la salud
pudiendo causar daños muy graves e
irreversibles.
La radiación no ionizante, en cambio, tiene
unos efectos diferentes y mucho menos
severos sobre el cuerpo humano. Pueden
clasificarse en dos tipos: radiaciones
ultravioleta (con efectos adversos para la piel
o problemas de conjuntivitis) e infrarrojas (con
peligro de lesión en la piel, el cristalino o la
retina).
03. Energía calórica
El trabajo físico proporciona la subida de la
temperatura corporal. Por lo general, el
propio cuerpo tiene sus mecanismos de
defensa ante esta situación como es el caso
del sudor. De este modo, el cuerpo logra
mantenerse a su temperatura adecuada que
rondará los 37ºC.
Sin embargo, las condiciones ambientales
pueden facilitar o dificultar la labor del propio
cuerpo humano. Estas condiciones,
denominadas técnicamente como
termohigrométricas, engloban la
temperatura del aire, la humedad o la
velocidad del mismo. También influyen
cuestiones como la indumentaria o el propio
consumo metabólico de la persona.
Los efectos adversos de unas malas
condiciones ambientales son diferentes en
una situación más calurosa de lo normal
(golpe de calor, desmayos, deshidratación)
o más fría (caso que podría producir
hipotermia o congelación). Cualquier
temperatura que ponga a prueba la
capacidad de los mecanismos de defensa
del trabajador puede suponer un gran
riesgo.
Agentes biológicos
Los profesionales de la salud, de laboratorios, de
curtidos, de procesado de alimentos y basuras o de
cría de animales, están a menudo expuestos a un
riesgo de contaminación biológica. Los agentes
biológicos son aquellos microorganismos y
endoparásitos que pueden llegar a originar
infecciones, alergias o reacciones tóxicas. Para
preservar la salud de este tipo de profesionales, se
cataloga a este tipo de agente de riesgo según su
peligrosidad (gravedad de la enfermedad a contraer,
capacidad de contagio, existencia de tratamientos,
etc).
Seguridad contra
incendios
El protocolo de seguridad contra incendios se
inicia, en primer lugar, identificando la naturaleza
del fuego. Entender su origen y posibles
detonantes es fundamental para comenzar un plan
de prevención. Por ello, comencemos por el
concepto más básico: ¿qué es el fuego?
Las causas de un fuego responden a la aplicación
de calor suficiente a un combustible que se rodea
del oxígeno del aire.
Los elementos que propician un fuego por
tanto son:
• Combustible.
• Oxígeno.
• Calor.
La combinación de estos tres elementos es lo que se
denomina como: triángulo del fuego.
Este triángulo puede derivar en tetraedro si además de
los tres elementos del triángulo se produce una
reacción en cadena.
El fuego no existe sin uno de los elementos en
cualquiera de los casos. Por ello, para combatir el
fuego se deberá atacar una de las tres o cuatro fuerzas
que lo están ocasionando.
Las características del combustible son también
fundamentales para el desarrollo del fuego, por lo que
conocerlos puede asegurar la eficacia de su extinción. Por
ello, vamos a conocer a grandes rasgos de qué depende
que estos combustibles prendan fuego. Principalmente, las
causas son tres:
• La temperatura mínima a la que el combustible
comienza a segregar vapores suficientes para
asegurar la concentración necesaria.
• La concentración del aire necesaria.
• La energía de activación que posibilita que la
mezcla de elementos se inicie para generar una
reacción en cadena.
En este punto es fundamental tener en cuenta:
• Límite de inflamabilidad.
• Temperatura de inflamación.
• Temperatura de autoinflamación.

Teniendo claras las posibles causas que pueden llegar a

provocar la inflamación de los elementos que componen el
lugar de trabajo y controlando que las condiciones
normales no se sobrepasen, es mucho más sencillo
prevenir el desastre.
Clasificación del fuego
Pero hablemos ahora de categorías. Estas se han
establecido en función del tipo de combustible.
Encontramos 5 tipos:

Fuegos de clase A
Materias sólidas en combustión. Papel, madera, etc.

Fuegos de clase B
Materias líquidas o materiales creados a través de licuado
de calor. Es el caso de gasolina, aceite, plástico, etc.
Fuegos de clase C
Gases combustibles como el propano, butano, etc.

Fuegos de clase D
Metales de características especiales como aluminio,
sodio, etc.

Fuegos de clase E
Incendios producidos por un problema de la corriente
eléctrica.
Evaluación del riesgo
Sea cual sea el tipo de agente que supone un
riesgo para los trabajadores, es necesario
hacer un esfuerzo previo de evaluación. Para
ello, es importantísimo reconocer:
• Nivel de presencia del agente en el
ambiente de trabajo.
• Tiempo de exposición del trabajador.
• Tener presente y comparar con los
datos anteriores el valor límite para
asegurarnos de que no se sobrepasa.
Control del riesgo
Cuando un riesgo es detectado, lo ideal es
eliminarlo. Sin embargo, no siempre es posible.
Para controlar los efectos adversos de ese riesgo,
será entonces fundamental minimizarlo al máximo.
Para esta minimización es necesario cuidar el foco
(mantenimiento, control, aislamiento, modificación
de los procesos), el medio (limpieza, ventilación,
distancias, sistemas de alarmas) y el trabajador
(información, formación, descansos, equipos de
protección).
2.1.5
Medidas preventivas
Control de riesgos
Para la protección de la salud y la seguridad de los
trabajadores es fundamental controlar los posibles
riesgos existentes. La propia Ley de Prevención de
Riesgos Laborales lleva en el nombre la palabra
prevención. Para realizar una buena prevención, los
conceptos básicos que debes plantear son: planificación,
evaluación, adopción de medidas y control.
Por otro lado, también es importante realizar una
prevención en más de un sentido: en el colectivo (más de
una persona) e individual (un único trabajador).
Este vídeo te aclarará todos estos conceptos:
2.2
Riesgos ligados al medio-ambiente
de trabajo
2.2.1
Higiene industrial
La higiene industrial
Es un concepto fundamental para garantizar una correcta
prevención de riesgos laborales que identifica, evalúa y
controla la higiene en el lugar de trabajo para impedir que
esta ponga en peligro la salud de los trabajadores.
Prestando atención a este factor, no solo mejoraremos
las condiciones ambientales del puesto de trabajo, sino
que además, se podrán prevenir enfermedades y
posibles contaminaciones.
2.2.2
Calidad del aire interior
Calidad del aire (CAI)
Las habitaciones con una mala calidad del aire, pueden
ocasionar efectos adversos a muchos trabajadores. Por ello,
es imprescindible tenerlo en cuenta para aliviar los riesgos
derivados de este factor ambiental.
Los factores que empeoran la calidad del aire y que por
tanto suponen un riesgo a evitar, son las concentraciones de
contaminantes en el aire, la falta de ventilación natural o el
“reciclaje del aire” procedente del interior del edificio en lugar
del exterior.
Por todo ello, es fundamental investigar la calidad del aire
interior y descubrir el por qué de los posibles problemas que
se puedan descubrir de esta investigación para comenzar a
atajarlos.
2.2.3
El ruido
Ruido
Se define ruido como un sonido molesto y desagradable que
en determinadas ocasiones puede provocar alteraciones
físicas y psíquicas.
¿De qué dependen los efectos del ruido?
• De la intensidad sonora.
• Del tiempo de exposición.
• De la existencia o no de medidas correctoras.
• De la frecuencia.
¿Cuáles son las fuentes de ruido?
• Máquinas y equipos de trabajo.
• Fluidos y aire por conductos
• Energías eléctricas y térmicas.
• Tráfico rodado.
• Ruido provocado por la gente.

Adquirir máquinas y equipos poco ruidosos, impedir o dificultar

la propagación del ruido, usar protección auditiva personal
como tapones o auriculares o elegir otros métodos de trabajo
que reduzcan la necesidad de exponerse al ruido pueden ser
medidas importantes para prevenir estos riesgos.
2.2.4
El ambiente térmico
Temperatura
Al igual que los factores anteriores, la temperatura afectará el
desempeño de los trabajadores y condiciones extremas
pueden conllevar problemas para la salud como
enfermedades o desfallecimientos.
Es importante controlar en todo momento la temperatura para
poder intervenir y prevenir este tipo de riesgos.
2.3
La carga de trabajo, la fatiga
y la insatisfacción laboral
2.3.1
La carga de trabajo
Carga de trabajo
Las cargas de trabajo excesivas, así como la ausencia
de tarea, pueden causar problemas de carácter físico
o psicológico a los trabajadores de la empresa.
El exceso causa estrés y alteraciones en el estado de
ánimo o tensiones musculares entre otras
consecuencias, mientras que el defecto causa, entre
otros problemas, fatiga o desmotivación.
Por ello, es fundamental planificar las cargas de
trabajo del personal de una empresa equilibrando las
responsabilidades y optimizando el proceso de
producción.
2.3.2
La fatiga
La fatiga
La fatiga es la consecuencia de la carga de
trabajo que disminuye la capacidad física o
mental de un individuo después de haber
realizado un trabajo durante un periodo de
tiempo determinado. Para prevenir la fatiga,
es importante promover pausas cortas y
frecuentes en tareas de gran exigencia
física o mental o la posibilidad de alternar
tareas exigentes con otras que no requieren
tanta atención, para refrescar la mente de
una tarea a otra.
2.3.3
Diseño ergonómico
del puesto de trabajo
Ergonomía
Mantener una buena postura en cualquiera de las
actividades que se realizan en el trabajo es
fundamental para evitar lesiones musculares.
Por ello, es importante tener en cuenta que es
necesario proveer a los trabajadores de todo el
material necesario para su protección como, en el
caso de la oficina, buenos asientos, atriles de
pantalla o teclado, reposapiés, etc.
Por otro lado también es fundamental formar a los
trabajadores sobre las posturas correctas para
desempeñar un trabajo, coger peso, etc.
2.3.4
La insatisfacción laboral
Insatisfacción laboral
La insatisfacción laboral se define como el grado de malestar
que experimenta el trabajador cuando las características de su
trabajo no se acomodan con sus deseos, aspiraciones o
necesidades. Puede aparecer por motivos salariales, falta de
responsabilidades, malas relaciones en el lugar de trabajo, falta
de promoción, etc. La insatisfacción laboral funciona de manera
diferente en cada persona según sus metas, objetivos o
personalidad. Los trabajadores que se sienten insatisfechos
pueden llegar a sufrir sentimientos desmotivadores, actitudes
negativas y ansiedad o depresión, por lo que se convierte en un
riesgo a tener en cuenta tanto para el individuo como para la
empresa, que recibirá por parte del trabajador cambios en los
resultados, actitud negativa e incluso absentismo.
En resumen…
2.4
Planes de emergencia y evacuación
2.4.1
Planes de emergencia
Planes de
emergencia
Cuando se detona una situación de emergencia grave, es importante tener en cuenta que
hay muchos factores en riesgo. Desde los propios trabajadores, hasta las instalaciones o
el medio ambiente. Por ello, tener un plan de actuación correcto y controlado puede
suponer la diferencia entre el susto o el desastre total.
Para conocer las principales actuaciones a tener en cuenta en una situación de emergencia,
recopilaremos los datos más relevantes en el siguiente vídeo.
2.4.2
Plan de evacuación
¿Cómo actuar en situaciones de emergencia?
2.5
El control de la salud
de los trabajadores
Control de la salud de los
trabajadores: definición
El control o vigilancia de la salud de los empleados
de una empresa consiste en realizar, precisamente,
un seguimiento del estado de salud de cada
trabajador de una forma periódica y sistemática
siguiendo una misma metodología de éxito probado.
Con ello, se consigue disponer de una información
que permite conocer cambios o alteraciones en el
estado de salud del afectado para tratarlos y evitarlos
a futuro a todo el colectivo de trabajadores.
Veamos en este último video una explicación más
extensa.
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