Está en la página 1de 3

 Padre de Freud : Jacob Freud

 Primera esposa: Sally Kanner – hijos: Emmanuel y Philip


 Segunda esposa: Amalia Nathanson – Hijos: Sigmund Freud
 Nacimiento de Freud: 6 de mayo de 1856 en Freiberg, Moravia
 5 hermanos y 2 hermanas
A los 3 años la familia de Freud se radica en Viena.
En 1902 inicia sus sesiones la Sociedad Psicoanalítica de los Miércoles, una reunión semanal en la casa de Freud.
Participan Wilhelm Stekel, Alfred Adler, y posteriormente Ferenczi, Otto Rank, y como invitados, Carl Jung, Max
Eitington, y Ernest Jones entre otros.
En 1908 esta sociedad pasa a denominarse Sociedad Psicoanalítica de Viena. Ese año realiza su primera exposición y
reconocimiento público.
En 1911 rompe con Alfred Adler por divergencias teóricas
En 1913 se crea el comité de los siete anillos para defender a Freud de los ataques teóricos detractores.
Ruptura con Jung:
1923 primeros signos de cáncer en la mandíbula.
1926 reconocimiento internacional, en Viena no se hace mención alguna de tal reconocimiento.
1930 recibe el premio Goethe
1933 Mayo: libros de Freud son quemados en Berlín por atentar a la moral con su continua referencia al sexo.
1938 La familia parte el 4 de junio con destino a Inglaterra
1939 Septiembre: Freud fallece en Londres.
Toda su vida a conciencia de Freud sobre su condición judía estuvo en conflicto con su material de análisis, conflicto
que se plasma con virulencia en Moisés y el monoteísmo.
Nacimiento del psicoanálisis: Freud a pesar de reconocer al psicoanálisis obra propia, debe su surgimiento del
psicoanálisis su colega Joseph Breuer. Desde el inicio su obra está marcada por las contradicciones y la soledad, entre
otras, de la soledad de las restricciones culturales impuestas desde una sociedad pacata (que tiene miedo ante
situaciones nuevas) y moralista.
Jung y Adler mantienen sus divergencias en silencio hasta poder participar de la institucionalización del psicoanálisis.
En cuanto a sus propios nombres toman relevancia y pueden ser pronunciados sin el respaldo de Freud, las diferencias
toman dimensiones más reales que comienzan a dividir el movimiento, sufriendo este diverso desmembramiento que
habrían de sumar un precio emocional alto (Jung). Así se conforma en comité de los Siete anillos (escudo personal del
maestro, dispuesto a aceptar sus teorías dogmáticas)
Adler y Freud, los inicios…
En 1911 Adler creo la sociedad ara el psicoanálisis libre, para llamarse luego sociedad de psicología individual, la
ruptura fue también dolorosa para Freud, en términos de sentir traicionada su teoría. Adler niega la importancia de la
sexualidad, dejando la formación del carácter y la neurosis, librada al influjo del afán de superioridad y la
compensación de las inferioridades. Ambos, Freud y Adler, se reconocen como buenos aportadores de sus teorías
entre sí, aunque sin atribuirse características de poca honestidad, como Freud lo hace con Jung. Los pilares de la nueva
corriente que propone Adler son e sentimiento de inferioridad, la tendencia hacia la superación, y el sentimiento de
comunidad. Dejando de lado la concepción de la libido tradicional, relegando al inconsciente a una cuestión de
temporalidad, no de eficacia y sustituyendo el lugar de la sexualidad por conceptos culturalmente concebidos.
Freud y Jung, de la fascinación al desprecio…
La divergencia en principio teóricas, que fueron preanunciando el alejamiento de maestro- discípulos residía
fundamentalmente, en la conceptualización de la libido. Para el creador del Psicoanálisis, la libido es de carácter
sexual y esto es lo que va a posibilitar plantear la importancia de la represión. Jung reniega de esta restricción y asume
la generalidad y pluralidad de la libido tornándola una especie de energía vital. Para Jung, siempre se trata de la
búsqueda de simetría entre los contrarios, en términos de lo que plantea Freud, esta lucha constante de represión-
retorno de lo reprimido. Jung, según Freud, intento traducir los hechos psicoanalíticos a lo abstracto, renegando de la
importancia de lo que tanto sufrimiento y al movimiento psicoanalítico le había costado conquistar.
Culturalista, la mirada teñida de América…
El psicoanálisis se encuentra en los nuevos contenientes adeptos, dispuestos a seguir por los derroteros que propone y
plantear nuevos caminos, aun a costa de perder el respaldo del momento psicoanalítico.
Culturalistas: Karen Horney, Harry Stack Sullivan y Erick Fromm. Neo freudiano de formación, sostiene que los
factores culturales son determinantes a la hora de plantear la neurosis y la formación del carácter.
Karen Horney: La neurosis constituye un intento de control interpersonal y adaptación. Reconoce la incidencia de
conflictos sexuales infantiles, pero no reviste necesariamente carácter sexual, siendo la ansiedad, la base del trastorno
neurótico. Y propone una diferencia entre carácter y situación neurótica, en la que la ansiedad estaría ligada a un
conflicto particular y no en relación a la ansiedad básica, como en el carácter neurótico. Se la reconoce como una
pionera de la psicología femenina que refuta la supremacía masculina (en términos psíquicos) y su regencia en la
organización psíquica de las mujeres. Difiere en la envidia del pene. Proponiendo la envidia masculina de la capacidad
creadora de la mujer.
Erick Fromm: judío. Busca encontrar en su obra un camino convergente para el psicoanálisis y el marxismo, llegando
a interesarse por el budismo y por el desarrollo de diversas formas culturales. Quiere realizar un análisis exhaustivo de
la naturaleza de las relaciones individuo-sociedad. La problemática se sitúa siempre en la frontera dialéctica entre
hombres y Sociedad. En su pensamiento encontramos las piedras fundamentales de la psicología- humanística
existencial.
Stack Sullivan: otorga un papel preponderante a la cultura y sus condiciones en las determinaciones del individuo.
Para él, la personalidad se construye en las relaciones interpersonales, en su interjuego. La personalidad se constituye
en estos patrones interacciónales vinculares que se inscriben psíquicamente, centrados en el sistema del sí mismo, con
fines defensivos frente a la ansiedad, que se configuran en la adultez como su forma de vivir en el mundo y los otros.
Los culturalistas constituyen una puerta posible para integran la cultura humana al desarrollo de la criatura humana, en
el marco de lo psicoanalítico pero sin lo que interpretan como sus restricciones.
El psicoanálisis y su creador en el mundo de la preguerra o “nadie es profeta en su tierra”.
El estigma de moisés. Es un clima turbio y cambiante el que Freud vive toda su vida, encarna ambivalencias de un
joven judío. Su padre es quien le regala el libro y quien le acerca tempranamente al universo de las letras, anticipando
su pasión por los textos. Freud prodiga ayuda económica a sus discípulos aun cuando las propias condiciones
económicas n fueran las ópticas para brindar tales ayudas, Otto Rank, Theodor Reik. El padre de Freud es quien aleja
y quien sujeta a las tradiciones de las que quiere desligarse –sin lograrlo- y las tradiciones que admiran
profundamente, el clasicismo romano y griego, las que no lo incluyen debiéndose ubicar en el lugar de espectador
embelesado. Freud ateo y ferviente de la ciencia, que reniega con du condición judía para asimilarse a la cultura gentil,
se encuentra ligado a lo judío, representaba esta condición en el acto del obsequio de la biblia.
En sus aficiones y preferencias se proyectaba a la cultura griega y romana, autores como Goethe, Cervantes,
instituciones del Judaísmo como las Mitzvoth (mandatos judíos) que habla de la pasión talmúdica hacia el estudio, los
deberes familiares, el deber de la solidaridad. En los últimos años de su vida, sufriendo las dolencias que su
enfermedad le impone, viendo como sus amigos y discípulos morían o partían la figura de moisés se torna un imán
para Frei. Le reedita la pregunta acerca del odio eterno a los judíos, del mismo ciclo encontró que en todos los tramos
de su vida y y que definió, en gran parte, la dirección de su propia vida. Esta última obra puso de manifiesto la
historia de su existencia, de filiación en relación a Jakob sostenido bajo inciertas y hasta improbables hipótesis (el
asesinato de moisés por parte de los judíos), se plantea para el ser extraño de su propio pueblo, la caída del héroe
venerado, la pertenencia, y la doble pertenencia. Su moisés actualiza su propio debate, constante y antiquísimo.
Conclusiones
El psicoanálisis cambia el orden del mundo occidental, dejando al hombre a merced de las fuerzas psíquicas ocultas,
que le impiden el absoluto control de si mismo, le proveen de un saber muy limitado y le traicionan constantemente,
haciéndolo fracasar en su pretensión de saber. Su doble pertenencia resistió los embastes de sus intimas rebeliones
contra el dios de sus ancestros, no se quebró ni siquiera ante el moisés, ese extranjero de su propio pueblo, que en
realidad se valora como una transposición mítico- simbólica de sí mismo. Es también una respuesta demorada a la
reasignación de los padres. No perpetuar la servidumbre, aun a costas de perder, o de cambiar, en el camino dela
propia herencia. Hijo de una ciudad (Viena) que no lo reconoce, es bastante en su propia ciudadanía, como lo fue para
los estamentos de la ciencia académica. Admirado o repudiado, Freud, constituye un capitulo obligatorio en la historia
de la psicología. Da el tercer y más duro golpe narcisista de la historia del hombre. Primero Copérnico, después
Darwin, y ahora el desamparado hombre de la ilusión del poder superior de la razón.

También podría gustarte