Nombre: Rosa Quiroz y Miguel Pincay

Historia de vida de William Falcom

En la marcha LGBTI+

En un mundo no tan lejano, donde muchos creen que el blanco combina con el negro,

las personas poseen una mente circular, unos de gélidos sentimientos y otros despojados

de amor. En aquel lugar existe un dragón de colores que lleva por nombre William. Sus

azucaradas manos logran, sin mucho esfuerzo, tocar, inflamar, y torcer a los

inconscientes.

Lograba estremecer de furia a los jactantes dragones, que gobernaban con infamia y

aberración al pueblo que se mojaba de lágrimas de desesperación. Su felicidad era

magistral, odiaba a los dragones que no comprendían esa forma de amar. Cuando tuvo

la oportunidad de volar alto, vestido de muchos colores, de los que algunos se prohibían

en este mundo, fue embestido por los infructuosos dragones de hedorífica lava.

En sus colores cayeron pequeños sacramentos de sangre indistinta en forma, color y

suavidad. En su rostro se apogeaban Himalayas de concentración verduzca. Casi

saludándolos a los ángeles de lejos, así quedo.

Pero William no se dejó vencer por la opresión cada vez se levantaban con más

inteligencia y acompañado de dragones que también hizo historia. No le importaba el

poder de los dragones infectados por el odio, él empezó a gritar por él. Ahora, William

tiene la valentía suficiente de volar por los cielos, orgulloso de sus colores y buscando

cada día los derechos que merece en ese mundo cambiar, donde ahora el blanco no solo

combina con el negro.