Nuestro proyecto pretende agilizar el proceso que se lleva a cabo con los abonos
orgánicos, los cuales se obtienen a través de animales y elementos que hacen
parte de la recolección en las fincas.
Abonos orgánicos
* Estiércoles: lo hay de vaca, de oveja, de caballo, de cabra. Son parecidos al
guano, gallinaza, palomina o excrementos de murciélago. * Compost: el compost es un material obtenido a partir de restos vegetales y otras materias orgánicas sometidas a un proceso de compostaje. Se puede hacer compost casero con los residuos vegetales del jardín y de la comida.
* Turba: hay dos tipos de turba: turba negra (la más habitual) y turba rubia (muy ácida, pH de 3.5). Se emplean mucho como base para preparar sustratos para macetas y para hacer semilleros. También son buenas para adicionar al terreno.
Los abonos orgánicos como el estiércol, el compost y la turba aportan nutrientes a
las plantas, pero en poca cantidad y de manera lenta. Sus beneficios se refieren más como mejorantes de la tierra al formarse humus, como suministrador de nutrientes.
La máquina “abofertil” es un potente descomponedor y triturador de desechos
orgánicos, proporcionando así una textura acorde para la aplicación en terrenos de difícil acceso por sus características, donde luego de ser previamente procesado y triturado todo el material orgánico se añaden tres nutrientes: Nitrógeno, fosforo y potasio, los cuales son necesarios para el desarrollo de la planta, que juntos con el abono orgánico, el cual suministra sustancias como el Magnesio, Hierro, Manganeso y Boro ayudan a el rápido y eficaz desarrollo productivo de la planta, obteniendo así un resultado rentable y confiable a los agricultores consiguiendo un producto de calidad y comercializado en el mercado.