Está en la página 1de 8

ARTICULO SEXTO:

LA GUIA VE EN LA NATURALEZALA OBRA DE DIOS Y LA RESPETA

La vida es un fenómeno extraordinario, sobrecogedor y único. La vida es el espacio y el


tiempo de nuestros sueños, nuestras esperanzas, nuestras pasiones y nuestros
esfuerzos. La vida es el comienzo de nuestra historia y nuestra historia es el encuentro
con la vida.
No se para cuántas guías sea viable la parte de este articulo que dice “ve en la
Naturaleza la obra de Dios”, pero no pretendo entrar en discusiones religiosas,
filosóficas, holísticas, naturalistas…; solo puedo decir que cuando uno comprende este
hecho de que es obra de Dios, es un poco más fácil tratar de cumplirlo.
Claro que también un ateo puede respetar, cuidar, proteger la Naturaleza, de hecho
hay muchos. Sin embargo, tanto en el texto de la promesa anterior: “Por mi honor y
con la gracia de Dios”, como en la actual:”siendo fiel a mi misma y a mis creencias”, B.P.
concibió al guidismo como un movimiento en el que la Fé, las creencias tienen un
papel protagónico.
Asumamos entonces que las guías son creyentes, ya sean cristianas, musulmanas,
judias, holísticas, naturalistas….
Respetar y proteger la vida también es tomar conciencia de la relación que existe entre
el hombre y las demás especies vegetales y animales. Es respetar la naturaleza y
comprometerse activamente con la integridad del medio ambiente, entendiendo que
el desarrollo sostenible necesita de personas que se preocupen por el futuro y estén
dispuestas a asumir una actitud solidaria con el destino de la humanidad y de las otras
especies que conforman el ecosistema mundial.
Entonces… que significa protegerlos? O en todo caso, ¿hasta qué punto estamos
dispuestos a protegerlos? Sabemos más de armar carpas, hacer nudos, dejar señales
de pista.... que acerca de cómo proteger la naturaleza, cómo respetarla. Somos
ignorantes en cuanto a la diversidad de flora y fauna que nos rodea, en cuanto al
medio ambiente que necesitan.
 
Cuando vamos de campamento, muchas veces matamos a cuanto bicho haya cerca de
nuestra carpa, y no consideramos que muchos son los responsables de mantener el
equilibrio ecológico,

Lo mismo podríamos decir acerca de las plantas. Todos repetimos el ciclo de vida de
las plantas "nacen - crecen - se reproducen - mueren", o las partes "raíz - tallo - hojas -
flores - frutos", pero fuera de eso la más de las veces no sabemos
más !!! Desconocemos algunas plantas que bien podrían servirnos al aire
libre , usándolas como jabón, o como compresas en caso de un golpe, o para hacer
alguna infusión si no hubiera medicina en el botiquín.
 
Evidentemente este artículo de la ley se refiere a todo el medio ambiente. No tendría
que ser común encontrar al borde del lugar donde la patrulla lavó los trastos, restos de
tallarines, trocitos de verduras, cáscaras, etc. Claro, es basura orgánica, pero también
existe lo que se llama "bolsa para la basura".
Cada uno debe asumir el compromiso serio de cuidar el mundo, desde sus pequeñas
experiencias. Porque sino, el daño provocado por la suma de "pequeñas e
insignificantes" acciones se convierte en algo mucho mayor, y a veces irreversible. Ahí
tenemos el agujero de la capa de ozono, o peor aun: el calentamiento global.
El cuidar la naturaleza debería ser algo de todos los días, desde que nos levantamos
hasta el anochecer, en nuestros propios hogares. Cuidar a nuestras mascotas, a
nuestras plantas , cuidar el agua también, no desperdiciarla (revisar las goteras en casa,
evitar los famosos carnavales, no derrochar durante el aseo personal o de los platos....),
separar la basura, reciclar; si es posible, hacer compost para utilizarlo en nuestras
plantas. Mejor: sembrar, sembrar, sembrar.... y no olvidar cuidar lo sembrado!
Es nuestra tarea como guíadoras, primero enseñar con el ejemplo y luego dejar huella
en nuestras niñas y jóvenes.

ARTICULO DECIMO:

LA GUIA ES PURA DE PENSAMIENTO, PALABRAS Y OBRAS

Este último articulo de la Ley guia, que hace referencia a la integridad y a la pureza y
que Baden-Poweil agregó con posterioridad a su primer texto original, no aporta en sí
misma nada nuevo a las anteriores puntos.

Sólo tiene por objeto indagar la rectitud de espíritu con que se han aceptado y se
viven todas los otros puntos de la ley. Muchas veces vinculamos la pureza con la vida
sexual y es entendible que así sea porque la pureza se relaciona estrechamente con el
amor; pero el amor, o la falta de amor, y la pureza, o la impureza, no sólo atañen al
sexo.
Algo es puro cuando se encuentra libre de toda mezcla de otra cosa que pudiera
alterar o adulterar su naturaleza. Así la pureza, entendida como rectitud de corazón o
rectitud de conciencia, es lo contrario del interés, del egoísmo, de la codicia, de todo lo
sórdido con que uno pudiera contaminar sus pensamientos o sus actos.
Es impuro lo que hacemos de mala gana o con malas intenciones. Es impuro lo que
envilece, lo que profana, lo que rebaja, lo que corrompe, lo que pervierte el sentido de
lo que pensamos o hacemos. Es impuro decir la verdad sólo cuando nos conviene,
simular la lealtad, utilizar a los otros bajo la apariencia de servirlos, compartir sólo con
aquellos de quienes podemos obtener un provecho, disfrazar la burla con humor,
hacer las cosas por cumplir.
En la vida sexual la pureza no se encuentra en la ausencia de deseo -eso sería más bien
una enfermedad- ni en la ignorancia o en la candidez. El mal no es amarse, es amarse
sólo a sí mismo, amar al otro como si fuera un objeto, desear gozarlo en vez de
amarlo, gozarlo en lugar de regocijarse, gozarlo como quien goza una carne o un vino,
poseerlo, consumirlo. La impureza no es un exceso de amor, sino una escasez de amor.
La pureza es amar al otro verdaderamente, como sujeto, como persona, respetarlo,
defenderlo, aun contra nuestro propio deseo. Amor que da y protege, amor de
amistad, amor de benevolencia, amor de caridad, amor puro.

Por eso esta última propuesta de la Ley Guia invita a plantearse constantemente
cuánta integridad hay en nuestra alma, en lo que pensamos, en lo que decimos y en lo
que hacemos. No es una prescripción externa de comportamiento aparente ni mucho
menos una prohibición de decir malas palabras, sino que en todos los contextos en los
que nos movemos, lo tengamos en cuenta, recordando que siempre somos Guías, no
solo con el uniforme y mucho más si nuestras niñas y jóvenes nos miran y admiran.

Sobre todo en las redes. No sos anónima cuando estas en línea, siempre dejamos un
rastro, que no es malo, si la información sobre ti es positiva y no revela ninguna
información privada. Cualquier cosa que vos publicas sobre vos, se agrega a tu huella
digital.

Por ejemplo si subimos a las redes fotos sensuales, en fiestas u otras… dentro de unos
años: es lo que querés que vean las familias de tus guías… o tu nuevo empleador
cuando busquen tu nombre en línea?

Tu reputación digital es lo que otros piensan de ti a través de tus acciones en línea, a


diferencia de las palabras que soltamos al aire, internet no olvida las cosas que
publicamos.

Por eso configura tu privacidad, se positiva siempre y que lo tengan en cuentas


quienes publican cosas sobre ti, verifica tu ortografía y gramática, recuerda que toda
publicación es permanente, monitorea siempre tu reputación digital.

En estos tiempos en que tanto en las redes como en la vida diaria abunda en el
lenguaje juvenil y adulto muchas veces groserías, vulgaridad… Por qué tenemos que
ser iguales que al resto?

Creo que BP pensó en hacer de las Guías algo diferente, jóvenes y adultas que se
distingan por sus actitudes. Esto incluye la presencia, la disposición de servicio y
también las maneras de expresarse.
Si somo guías, tenemos que pensar, hablar y comportarnois como guías, no podemos
ser contradictorias con nosotras mismas, ni en las reuniones con guías, ni en los
campamentos, ni mucho menos en nuestra vida diaria.

Será una utopía? Creo que si BP no hubiera soñado con este movimiento, no podría
soñar con esto, Se que es difícil cumplirlo… pero para una Guia Scout, según BP: NO
HAY NADA IMPOSIBLE!!
6. El Scout ama y defiende a la vida y a la naturaleza

La vida es un fenómeno extraordinario, sobrecogedor y único. La vida es el espacio y el


tiempo de nuestros sueños, nuestras esperanzas, nuestras pasiones y nuestros
esfuerzos. La vida es el comienzo de nuestra historia y nuestra historia es el encuentro
con la vida.
La vida está en la frescura de la mañana. Se manifiesta aun en el dolor de la
enfermedad y el horror de la guerra. La vida se hace presente en el encuentro con los
amigos y en la añoranza de su afecto cuando están ausentes. La vida es sonido y
silencio; el de los hombres y el de la naturaleza. La vida está en nuestros logros y en
nuestros fracasos. En el hombre y la mujer que se abren paso y desafían los misterios
de la ciencia y de la tecnología. La vida hace al ser humano y el ser humano está
llamado a respetar la vida.
Respetar y proteger la vida es proteger y potenciar al hombre, hombre y mujer, niño,
joven, adulto y anciano, sin importar su origen, raza, credo, pensamiento político o
condición social, econociéndolos poseedores de una dignidad intrínseca y de unos
derechos iguales e inalienables que permitan a todos los miembros de la familia
humana vivir en libertad, justicia y paz.
Respetar y proteger la vida también es tomar conciencia de la relación que existe entre
el hombre y las demás especies vegetales y animales. Es respetar la naturaleza y
comprometerse activamente con la integridad del medio ambiente, entendiendo que
el desarrollo sostenible necesita de personas que se preocupen por el futuro y estén
dispuestas a asumir una actitud solidaria con el destino de la humanidad y de las otras
especies que conforman el ecosistema mundial.
Para los scouts, la protección de la vida forma parte de nuestra Promesa y es un reflejo
de los principios que nos guían. Nos hemos comprometido a amar a Dios, creador de
la vida -la vida humana y la vida natural- y servir al ser humano, haciendo de este
mundo un lugar mejor para todos, los que ahora estamos y quienes lo habitarán en el
futuro. 
Ver m
6. El Scout protege a los animales y plantas y ve en la naturaleza la obra de Dios.
 
No sé para cuántos scouts sea viable la segunda parte de este artículo - "ve en la naturaleza la
obra de Dios". No quisiera entrar en discusiones religiosas - filosóficas - animistas - etc. sobre este
punto. Sólo puedo decir que cuando uno comprende este hecho, de que es obra de Dios, es un
poco más fácil tratar de cumplir la primera parte.
 
Claro que también un ateo puede proteger los animales y las plantas. De hecho debe haber
varios....  Sin embargo, ya mencioné al hablar sobre nuestra Promesa , que B-P concibió al
Escultismo como un movimiento en el que la fe tiene papel protagónico... ahí lo tenemos como la
primera parte de la Promesa. Asumamos entonces que los scouts son creyentes, sean cristianos,
judíos, musulmanes...
 
Respecto a proteger los animales y plantas. ¿Qué significa protegerlos? O en todo caso, ¿hasta
qué punto estamos dispuestos a protegerlos? Sabemos más de armar carpas, hacer nudos, dejar
señales de pista.... que acerca de cómo proteger animales y plantas, cómo respetarlos. Somos
ignorantes en cuanto a la diversidad de flora y fauna que nos rodea, en cuanto al medio ambiente
que necesitan.
 
Claro, podrán decir ¿y qué animales hay para proteger cuando vamos de campamento? Jamás
encontraremos un venadito herido para hacerle un entablillado. Pero muchas veces (y acúsome yo
misma) matamos a cuanto bicho haya cerca de nuestra carpa, puesto que podría picarnos. Y no
consideramos que hay muchos bichos "benéficos" que jamás pensarían en clavarnos su aguijón, y
que mas bien son los responsables de mantener el equilibrio ecológico, favoreciendo la
polinización, o encargándose de otros bichos "perjudiciales", por ejemplo. Nuestro desconocimiento
de la naturaleza es vergonzoso.
 
Lo mismo podríamos decir acerca de las plantas. Todos paporreteamos el ciclo de vida de las
plantas "nacen - crecen - se reproducen - mueren", o las partes "raíz - tallo - hojas - flores - frutos",
pero fuera de eso no sabemos más !!! Desconocemos algunas plantas que bien podrían servirnos
al aire libre , usándolas como jabón, o como compresas en caso de un golpe, o para hacer alguna
infusión si no hubiera medicina en el botiquín.
 
Evidentemente este artículo no sólo se refiere a los animales y plantas, sino a todo el medio
ambiente. Es común encontrar al borde del río donde la patrulla lavó los trastos, restos de
tallarines, trocitos de verduras, cáscaras, etc. Claro, es basura orgánica, pero también existe lo que
se llama "bolsa para la basura". Lo que pasa es que "cansa" ir por la bolsa y vaciar los restos antes
de enjuagar los platos, no? Por otro lado está el tema de los jabones y detergentes. Aquí en el
Perú seguimos en la época de la carreta, donde todavía no nos fijamos si llevan la etiqueta de
"biodegradable". Por supuesto podrán decir: "¿pero qué le va a hacer al río un poquito de jabón?".
No pues! No es una actitud Scout. Cada uno debe asumir el compromiso serio de cuidar el mundo,
desde sus pequeñas experiencias. Porque sino, el daño provocado por la suma de "pequeñas e
insignificantes" acciones se convierte en algo mucho mayor, y a veces irreversible. Ahí tenemos el
agujero de la capa de ozono, o peor aun: el calentamiento global.
 
El cuidar la naturaleza no se debe limitar a las pocas veces que salimos de campamento. Debería
ser algo de todos los días, desde que nos levantamos hasta el anochecer, en nuestros propios
hogares. Cuidar a nuestras mascotas, a nuestras plantas (principales fabricantes de oxígeno y
consumidoras del CO2, el mayor causante del calentamiento).... cuidar el agua también, no
desperdiciarla (revisar las goteras en casa, evitar los famosos carnavales, no derrochar durante el
aseo personal o de los platos....), separar la basura, reciclar; si es posible, hacer compost para
utilizarlo en nuestras plantas. Mejor: sembrar, sembrar, sembrar.... y no olvidar cuidar lo sembrado!
(como ha sucedido tantas veces que los scouts aparecieron en las noticias "reforestando" tal o cual
parque, y luego se olvidaron de volver para cuidar las plantas que colocaron).
 
Algo que nunca voy a olvidar es la visita que hice a un enorme parque en Costa Rica, durante la
Conferencia Scout Interamericana de 1992. Ahí nos explicaron que este parque había sido
reforestado y cuidado por scouts. Y no era simplemente cosa de regar plantitas, sino que se habían
tomado el trabajo de arreglar los caminos, echar piedrecillas sobre ellos para marcarlos bien,
averiguar los nombres botánicos de muchas especies para colocarlos en carteles al pie de las
mismas, etc. etc. Esto les valió la Insignia de Conservación Mundial.
 
Aquí en el Perú tenemos mucho campo donde podríamos apoyar. Es cuestión de salir de nuestros
pequeños esquemas de reuniones sabatinas o de campamentos para pasar el rato, y pensar en
algo más grande. B-P fue un soñador que hizo sus sueños realidad. Scouts así, es lo menos que
puede esperar de nosotros.
 

ARTICULO DECIMO:
LA GUIA ES PURA DE PENSAMIENTO, PALABRAS Y OBRAS

sta última proposición de la Ley Scout, que se refiere a la integridad y a la pureza y que
Baden-Poweil agregó con posterioridad a su primer texto original, no aporta en sí
misma nada nuevo a las anteriores. Sólo tiene por objeto escrutar la rectitud de
espíritu con que se han aceptado y se viven todas las otras propuestas. Generalmente
vinculamos la pureza con la vida sexual y es entendible que así sea porque la pureza se
relaciona estrechamente con el amor; pero el amor, o la falta de amor, y la pureza, o la
impureza, no sólo atañen al sexo.
Algo es puro cuando se encuentra libre de toda mezcla de otra cosa que pudiera
alterar o adulterar su naturaleza. Así la pureza, entendida como rectitud de corazón o
rectitud de conciencia, es lo contrario del interés, del egoísmo, de la codicia, de todo lo
sórdido con que uno pudiera contaminar sus pensamientos o sus actos.
Es impuro lo que hacemos de mala gana o con malas intenciones. Es impuro lo que
envilece, lo que profana, lo que rebaja, lo que corrompe, lo que pervierte el sentido de
lo que pensamos o hacemos. Es impuro decir la verdad sólo cuando nos conviene,
simular la lealtad, utilizar a los otros bajo la apariencia de servirlos, compartir sólo con
aquellos de quienes podemos obtener un provecho, disfrazar la burla con humor,
hacer las cosas por cumplir.
En la vida sexual la pureza no se encuentra en la ausencia de deseo -eso sería más bien
una enfermedad- ni en la ignorancia o en la candidez. El mal no es amarse, es amarse
sólo a sí mismo, amar al otro como si fuera un objeto, desear gozarlo en vez de
amarlo, gozarlo en lugar de regocijarse, gozarlo como quien goza una carne o un vino,
poseerlo, consumirlo. La impureza no es un exceso de amor, sino una escasez de amor.
La pureza es amar al otro verdaderamente, como sujeto, como persona, respetarlo,
defenderlo, aun contra nuestro propio deseo. Amor que da y protege, amor de
amistad, amor de benevolencia, amor de caridad, amor puro.
Por eso esta última propuesta de la Ley Scout invita a escrutarse, a plantearse
constantemente cuánta integridad hay en nuestra alma, en lo que pensamos, en lo que
decimos y en lo que hacemos. No es una prescripción externa de comportamiento
aparente ni mucho menos una prohibición de decir malas palabras. Es una pregunta
lacerante que nos confronta con el sentido profundo de nuestro compromiso: “los
valores que viven en nosotros ¿son lo que son?”. 
Ver menos
EL ÚLTIMO MENSAJE DE B.P A LOS SCOUTS

"He tenido una vida muy dichosa y deseo que ustedes también tengan una vida
dichosa.

Tengo para mí que Dios nos ha puesto en este mundo encantador, para que seamos
felices y gocemos de la vida.
Pero la felicidad no proviene de la riqueza, ni de tener éxito en la carrera simplemente,
ni dándose un gusto a sí mismo; un paso hacia la felicidad es hacerse uno sano y
fuerte cuando niño, para poder ser útil, y así gozar de la vida cuando se es hombre.

Pero la verdadera manera de obtener la felicidad es haciendo felices a los demás.


Traten de dejar este mundo en mejores condiciones de como lo encontraron.
Sean felices a su Promesa Scout, siempre, aún cuando hayan dejar de ser muchachos.

Que Dios los ayude a hacerlo así"

Vuestro Amigo,
Baden Powell of Gilwell. (B.P) 
Ver meno
10. El Scout es puro de pensamiento, palabra y obra.
 
Y bien: he aquí un artículo de la Ley que muchos saben de memoria,
pero al cual pocos le hacen caso. Basta con presenciar una fogata
"dizque" Scout, donde muchos de los sketchs presentados son de doble
sentido, así como nuevas canciones "scouts", todas con vulgaridades en
su letra. Esto no sólo demuestra suciedad en el interior de quienes
disfrutan presentando tales números, sino también su pobreza creativa:
no pueden inventar algo que cautive a la audiencia y que a la vez no
caiga en lo vulgar.
 
Ciertamente la jerga que abunda en el lenguaje juvenil, también incluye
groserías. ¿Pero por qué tenemos que ser iguales al resto del rebaño?
Creo que B-P pensó en hacer de los Scouts algo diferente, jóvenes que
se distingan por sus actitudes. Esto incluye la presencia, la disposición
de servicio, y también las maneras de expresarse.
 
Ser puros de pensamiento, palabra.... y también de obra! Esto lo podría
resumir en un concepto: ser coherentes. Si somos Scouts, tenemos que
pensar, hablar y portarnos como Scouts. No podemos ser contradictorios
con nosotros mismos. Ni en las reuniones scouts, ni en los
campamentos, ni mucho menos en nuestra vida diaria.
 
¿Será una utopía? Creo que si Baden-Powell no hubiera soñado con los
scouts, no podría estar escribiendo esto. Sé que es difícil cumplirlo....
pero para el Scout - según el mismo B-P : NO HAY NADA IMPOSIBLE !

También podría gustarte