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Huellas o registros energéticos

Huellas o registros energéticos de cada experiencia vivida


Las experiencias vividas dejan un registro energético en cada cuerpo sutil. Esa huella energética permanece
vibrando en la energía original que la causó. Es así como por ejemplo una experiencia tan simple como que
un niño se pierda unos minutos en un centro comercial a temprana edad queda vibrando para siempre en una
energía de miedo, abandono, inseguridad, etc. Como son las estructuras energéticas similares las que se atraen,
esa estructura se vuelve a activar cuando el niño se enfrenta a una situación parecida, como puede ser su
primer día de jardín infantil, un cambio de colegio, que sus papás se vayan de viaje, etc. La activación de esta
vibración no pasa por la razón, por lo tanto el niño más grande puede entender que la ausencia de sus padres
es por un viaje temporal, sin embargo su sensación de miedo, abandono e inseguridad por ejemplo son más
fuertes. Y así en adelante, el niño va reforzando esas sensaciones y emociones y de ella van surgiendo creencias
mentales que las van reforzando. Ej. “Soy digno de ser abandonado”, “Me cuesta enfrentar situaciones nuevas”,
“Me cuesta entregarme afectivamente por miedo al abandono”, etc. Estas creencias se van fortaleciendo y
comienzan a generar conductas disfuncionales.

¿Cómo actúa la Gemoterapia sobre estas huellas o registros energéticos en cada cuerpo sutil?
Supongamos que la persona consulta por una dificultad de abrirse emocionalmente a las relaciones afectivas
y en el estado de conciencia expandida que generan los cristales vuelve espontáneamente al recuerdo donde
se perdió en el centro comercial. Como el tiempo lineal no existe, la persona revive el recuerdo y puede ahora
contenerse a si misma emocionalmente, neutralizando la “carga energética” de la huella que dejó la experiencia
original. En ese mismo estado puede revisar y descubrir todas las experiencias posteriores a ese evento que
fueron vibrando en la misma frecuencia y por lo tanto cambiarles la carga energética a todas a medida que
se contiene a si misma. De esa forma la persona puede descubrir cómo esa experiencia aún incide en sus
conductas actuales, pero ahora es conciente que al haber sanado la carga emocional de la huella energética
que dejó la experiencia original le será más fácil actuar sin el miedo o aprehensión anterior, facilitando su
conducta de cambio.

Estado de Coherencia y Salud


Es el estado de Unicidad y conciencia del UNO. Cuando estamos en un estado de coherencia o de Unicidad,
nuestras actitudes o acciones en el plano físico son fiel reflejo de lo que sentimos y pensamos.
No estamos acostumbrados a vivir en coherencia, por el contrario estamos acostumbrados a sonreír a pesar
de la rabia o la pena que sentimos; a decir Si cuando en realidad queremos decir No, a postergar nuestras
necesidades en beneficio de las necesidades de otros, en fin....ejemplos hay muchísimos. El sólo hecho de
ser concientes, la mayor cantidad de veces al día, de si estamos actuando en Unicidad nos asegurará un flujo
energético estable que favorece un estado de salud y bienestar general. Nos facilita el actuar desde el SER
más que desde el HACER. Este estado es el resultado de la alineación energética de todos los cuerpos que
forman el cuerpo Físico. Cada uno de ellos es reflejo de mi totalidad. Por lo tanto, cuando una enfermedad
o problema surge en nuestra vida es para mostrarnos que algo está fuera de equilibrio, que en algún lado
rompimos nuestra coherencia. Sin embargo, nuestra cultura actual nos lleva a tapar el síntoma o a obviarlo,
sin que esto signifique necesariamente que estamos sanando.

Pamela Díaz Carreras

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