Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
EA - 2020 Apuntes PDF
EA - 2020 Apuntes PDF
1. Polinomios 1
1.1. Anillos de polinomios en una variable . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1
1.2. Factorizacion en anillos de polinomios . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 4
1.3. Derivadas y raı́ces múltiples . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 6
1.4. Polinomios irreducibles en C[X] y R[X] . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 8
1.5. Polinomios en varias variables . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 9
1.6. Polinomios simétricos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 14
1.7. Problemas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 23
2. Extensiones de cuerpos 27
2.1. Extensiones de cuerpos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 27
2.2. Adjunción de raı́ces. Teorema de Kronecker . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 30
2.3. Extensiones algebraicas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 33
2.4. Problemas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 40
9. Apéndice 119
9.1. Grupos. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 119
9.1.1. Generalidades, ejemplos básicos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 119
9.1.2. Grupos de orden bajo y sus retı́culos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 120
9.1.3. Clases laterales, conjugación, normalidad, cocientes y teoremas de isomorfı́a . . . . . . 123
9.1.4. 2-grupos abelianos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 124
9.1.5. Dos resultados sobre grupos simétricos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 124
Polinomios
En todo el texto: Los anillos y cuerpos considerados serán conmutativos y con uno. Los homomorfismos
de anillos llevarán el uno al uno. “Dominio” significará dominio de integridad. A será un anillo arbitrario y
K será un cuerpo arbitrario (salvo que se diga otra cosa).
Definición 1.1. Un polinomio en una variable (o indeterminada) sobre un anillo A es una sucesión
de elementos de A con una cantidad finita de entradas no nulas, o sea de la forma
El conjunto de todos polinomios lo denotaremos ahora por P(A), pero enseguida cambiaremos a A[X].
Dado a ∈ A, el correspondiente polinomio constante es ā = (a, 0, 0, . . . ); en particular el polinomio
nulo es 0̄ = (0, 0, . . . ).
Para 0̄ 6= f = (ai ) ∈ P(A), su grado gr(f ) es el mayor valor de n con an 6= 0. A este an se le llama el
coeficiente principal de f , y cuando vale 1 se dice que f es un mónico.
Por definición, el grado del polinomio nulo es gr(0̄) = −∞. Con la convención de que −∞ < 0, los
polinomios constantes son precisamente los de grado ≤ 0.
Dados f = (ai ), g = (bi ) ∈ P(A), se definen su suma y su producto como los polinomios
P
f + g = (ai + bi ) f g = (ci ) donde cn = i+j=n ai bj
Es fácil ver que f +g y f g son polinomios y que P(A) = A[X] con estas operaciones es un anillo conmutativo
(con neutros 0 y 1, constantes) al que llamaremos anillo de polinomios en una variable sobre A.
También es claro que:
Proposición 1.2. La aplicación j : A → P(A) dada por j(a) = ā es un homomorfismo inyectivo de anillos.
Por tanto, podemos identificar A con su imagen por j, que es el subanillo de P(A) formado por los polino-
mios constantes. Por este motivo “le quitaremos la barrita” a los polinomios constantes ā y los denotaremos
simplemente por a, y llamaremos a j : A → P(A) la inclusión de A en P(A).
aX n = (0, 0, . . . , 0, a, 0, 0, . . . )
2 Polinomios
Proposición 1.5. Todo polinomio en una variable con coeficientes en un anillo A se puede escribir de
forma única como una suma finita de monomios de distinto grado. De hecho:
n
X
(a0 , a1 , . . . , an , 0, 0, . . . ) = (a0 , 0, 0, . . . ) + (0, a1 , 0, . . . ) + · · · = a0 + a1 X + a2 X 2 + · · · + an X n = ai X i
i=0
En consecuencia, el anillo de polinomios en una variable sobre A se representará en adelante por A[X].
Ası́, el grado de un polinomio es el mayor grado de sus monomios no nulos, su coeficiente principal es el
coeficiente de ese monomio de mayor grado y las operaciones se expresan de la forma habitual
n
X n
X n
X
i i
ai X + bi X = (ai + bi )X i
i=0 i=0 i=0
n
X m
X m+n
X X
i j
ai X · bj X = ck X k con ck = a i bj
i=0 j=0 k=0 i+j=k
Proposición 1.6. Sea A un anillo y sean f, g ∈ A[X] con coeficientes principales a y b; entonces:
2. gr(f g) ≤ gr(f )+gr(g), con desigualdad estricta si y solo si1 ab = 0. (Por convenio, −∞+n = −∞.)
En particular, si A es un dominio entonces siempre se tiene gr(f g) = gr(f ) + gr(g).
Corolario 1.7. Si A es un dominio entonces A[X] también lo es, y sus unidades (elementos invertibles)
son precisamente la unidades de A (constantes invertibles). Su cuerpo de fracciones, cuyos elementos son
las fracciones racionales f /g con f, g ∈ A[X], g 6= 0, se denota por A(X).
Si K es un cuerpo, K[X] es un dominio cuyas unidades son los polinomios constantes no nulos.
La inclusión A → A[X] es un homomorfismo entre A y un anillo con un elemento “especial” (la indeter-
minada X). La propiedad universal nos dice que cualquier otro homomorfismo (ϕ) entre A y un anillo con
un elemento señalado (b) “se factoriza a través” de j de forma que X se relaciona con el elemento b.
Dos casos importantes de aplicación de esta propiedad universal son los siguientes.
1
Por ejemplo, en Z6 [X] se tiene (2X + 1)(3X + 1) = 5X + 1 y por tanto gr(f g) = 1 < 1 + 1 = gr(f ) + gr(g).
Se dice que b es trascendente sobre A si Ker(ϕ̄b ) = 0, o sea si b solo es raı́z del polinomio nulo, o
sea si f (b) = 0 con f ∈ A[X] implica que f = 0.
En este caso, la evaluación ϕ̄b es un isomorfismo A[X] ∼
= A[b] que aplica X en b.
Se dice que b es algebraico sobre A si Ker(ϕ̄b ) 6= 0, o sea si b es raı́z de algún polinomio no nulo, o
sea si existe 0 6= f ∈ A[X] con f (b) = 0.
En este caso, el ideal I = Ker(ϕ̄b ) se llama el ideal de las relaciones algebraicas de b sobre A y,
por el teorema de isomorfı́a para anillos, se tiene A[b] ∼
= A[X]/I.
Por ejemplo, π es trascendente sobre Q (Lindemann, 1882), pero es algebraico sobre R (raı́z de X − π).
P
Por otra parte, en principio R[i] consistirı́a en expresiones del tipo k rk ik , pero como se tiene i2 = −1,
i3 = −i, etcétera, estas expresiones se reducen a la forma a + bi, con lo que R[i] = C.
En la práctica, cuando no hay riesgo de confusión, este homomorfismo σ̄X se denota por σ.
Un caso particular de esta situación se da cuando I es un ideal de A y π : A → A/I es la proyección
canónica. Se obtiene entonces un homomorfismo de anillos
X X
π : A[X] → (A/I)[X] dado por f = ai X i 7→ f¯ := ai X i
i i
Teorema 1.10. (Algoritmo de la división). Sean f, g ∈ A[X] polinomios tales que el coeficiente principal
de g es una unidad en A. Entonces existen polinomios únicos q, r ∈ A[X] tales que
Proposición 1.11. Si K es un cuerpo, entonces K[X] es un dominio euclı́deo (DE), y por tanto es
también un dominio de ideales principales (DIP) y un dominio de factorización única (DFU).
Demostración. Basta tomar como función euclı́dea el grado y hacer uso del Teorema 1.10.
Proposición 1.12. Un anillo A es un cuerpo si y solo si A[X] es un DE, si y solo si A[X] es un DIP.
Si el divisor es g = X − a el resto tiene grado < 1, o sea es una constante y vale precisamente f (a):
Proposición 1.14. Si A es un dominio2 entonces cualquier 0 6= f ∈ A[X] tiene a lo sumo gr(f ) raı́ces
distintas (en A o, más generalmente, en cualquier anillo B que contenga a A).
En particular, si g ∈ A[X] se anula en un subconjunto infinito de A, entonces g = 0.
El siguiente resultado permite encontrar raı́ces en Q de polinomios con coeficientes en Z pues, al haber
solo dos unidades en Z, solo hay un número finito de “candidato a raı́ces”.
Pn i
Proposición 1.15. Sea A un DFU con cuerpo de fracciones K y sea f (X) = i=0 ai X ∈ A[X] con an 6= 0.
Si α = p/q ∈ K con (p, q) = 1 es una raı́z de f (X), entonces p|a0 y q|an .
En particular, si f (X) es mónico, sus raı́ces en K deben estar en A y dividir a su término independiente.
2
Ambas afirmaciones pueden ser falsas si A no es un dominio: Si A = Z8 entonces X 2 − 1 (de grado 2) tiene 4 raı́ces en A.
Y si A = Z × Z y a = (1, 0), los infinitos elementos (0, b) son raı́ces de aX.
Proposición 1.17. Si K es un cuerpo, en K[X] los polinomios de grado uno son irreducibles y los de grado
dos o tres son irreducibles si y solo si no tienen raı́ces en K.
c(f ) = mcd(a0 , a1 , . . . , an )
Se dice que f (X) ∈ D[X] es primitivo si c(f ) es una unidad de D; como el mcd está determinado salvo
unidades, podemos decir que primitivo significa c(f ) = 1.
Si 0 6= a ∈ D y 0 6= f (X) ∈ D[X], entonces c(af ) = a · c(f ) y todo polinomio no nulo f ∈ D[X] puede
escribirse por tanto como f = c(f )f1 con f1 ∈ D[X] primitivo. Recı́procamente, si f = cf1 con c ∈ D y
f1 ∈ D[X] primitivo, entonces c = c(f ).
Proposición 1.19 (Lema de Gauss). Si D es un DFU y f, g ∈ D[X] entonces c(f g) = c(f )c(g).
En particular, el producto de polinomios primitivos es un polinomio primitivo.
Teorema 1.22 (Criterio de irreducibilidad de Eisenstein). Sea D un DFU con cuerpo de fracciones K. Si
P
f (X) = ni=0 ai X i ∈ D[X] con gr(f ) ≥ 1 y p ∈ D es un elemento irreducible tal que:
p 6 | an , p | ai para i = 0, 1, . . . , n − 1 y p2 6 | a 0
Ejemplos 1.23.
El criterio de Eisenstein puede resultar muy útil cuando se aplica en combinación con alguna otra
propiedad. Los resultados y ejemplos siguientes son buena muestra de esto.
Corolario 1.27. Sean D un DFU con cuerpo de fracciones K, J un ideal primo de D, L el cuerpo de
fracciones de D/J y ϕ : D[X] → (D/J)[X] el homomorfismo inducido por la proyección canónica D → D/J.
P
Si f (X) = n0 ai X i ∈ D[X] con an 6∈ J y ϕ(f ) es irreducible en L[X], entonces f es irreducible en K[X].
En particular, si el coeficiente principal de f ∈ Z[X] no es múltiplo de un primo p y f¯ (reducción módulo
p de los coeficientes de f ) es irreducible en Zp [X], entonces f es irreducible en Q[X].
Ejemplos 1.28.
La multiplicidad es ≥ 1 si y solo si b es raı́z de f (X). Si m = 1 se dice que b es una raı́z simple, si m > 1
se dice que b es una raı́z múltiple; en particular, para m = 2, 3 . . . se habla de raı́ces dobles, triples. . .
Proposición 1.33. Sean D un dominio, f (X) ∈ D[X] y b ∈ D. Entonces b es raı́z múltiple de f (X) si y
solo si f (b) = 0 y f ′ (b) = 0.
Proposición 1.35. Si K ⊂ L son cuerpos y f ∈ K[X] es irreducible en K[X] con una raı́z en L, entonces
f tiene raı́ces múltiples en L si y solo si f ′ = 0.
En particular, si car(K) = 0 y f ∈ K[X] es irreducible, entonces f no tiene raı́ces múltiples en L.
Demostración. Si f ′ (X) 6= 0, como gr(f ′ ) < gr(f ), al ser f (X) irreducible debe ser mcd(f, f ′ ) = 1 y el
resultado es consecuencia de Proposición 1.34. El recı́proco es consecuencia de la Proposición 1.33.
Si car(K) = 0 y f (X) es irreducible entonces f ′ (X) 6= 0, por lo que se puede aplicar lo anterior.
Sobre cuerpos de caracterı́stica p 6= 0, los polinomios con derivada nula se describen fácilmente:
P i
Proposición 1.37. Si car(K) = p 6= 0, dado f ∈ K[X] con f (X) = i ai X ∈ K[X], se tiene
P
f ′ = 0 ⇔ p|i cuando ai 6= 0 ⇔ f (X) = j bj X
jp
⇔ f (X) = g(X p ) con g ∈ K[X] ⇔ f ∈ K[X p ]
La descripción de los irreducibles de C[X] viene dada por el Teorema Fundamental del Álgebra:
Teorema 1.38 (Teorema Fundamental del Álgebra). C es algebraicamente cerrado, o sea todo polinomio
no constante de C[X] tiene al menos una raı́z en C. En consecuencia:
Demostración. Sea f (X) = a0 +a1 X +a2 X 2 +· · ·+an X n . Entonces, por las propiedades de la conjugación
(y usando que ai = ai al ser reales) tenemos
0 = a0 + a1 α + · · · + an αn = a0 + a1 α + · · · + an αn = a0 + a1 ᾱ + · · · + an ᾱn
Además, si (X − α)m |f (X) entonces f (X) = (X − α)m g(X) y, conjugando, f¯(X) = (X − ᾱ)m ḡ(X). Pero
como los coeficientes de f son reales se tiene f = f¯, luego (X − ᾱ)m |f (X); el recı́proco es análogo.
Corolario 1.40. Los polinomios irreducibles de R[X] son los de grado 1 y los de grado 2 sin raı́ces reales.
Demostración. Si f (X) ∈ R[X] tiene grado ≥ 3 entonces, por el Teorema Fundamental del Álgebra (1.38),
tiene una raı́z α = a + bi ∈ C. Si b = 0 entonces f (X) es divisible por X − a ∈ R[X]. Si b 6= 0 entonces
ᾱ = a − bi también es raı́z y por tanto f (X) es divisible por (X − α)(X − ᾱ) = X 2 − (α + ᾱ)X + αᾱ ∈ R[X].
En consecuencia, dado f (X) ∈ R[X], utilizando su descomposición en C[X] y lo anterior tenemos que:
Existen a ∈ R, c1 , . . . , cr ∈ R, α1 , . . . , αs ∈ C \ R y k1 , . . . , kr , m1 , . . . , ms ≥ 1 tales que
r
Y s
Y r
Y s
Y
f (X) = a (X − ci )ki (X − αi )mi (X − ᾱi )mi = a (X − ci )ki [X 2 − (αi + ᾱi )X + αi ᾱi ]mi
i=1 i=1 i=1 i=1
Ejemplo 1.41. Consideremos X 8 − 1 ∈ C[X]. Sus raı́ces son las raı́ces octavas de la unidad (ω 8 = 1). Si
hacemos θ = 2π/8 = π/4, estas raı́ces son cos(kθ) + i sen(kθ) para k = 0, 1, . . . , 7, o sea, por este orden:
√ √ √ √
2 2 − 2 2
1 α= + i i β= + i −1 β̄ −1 ᾱ
2 2 2 2
Esto nos da la primera factorización de abajo (en C[X]); juntando sus factores correspondientes a pares
complejos conjugados obtenemos la factorización en R[X], y juntando sus factores con coeficientes no ra-
cionales obtenemos la factorización en Q[X] (que también se obtiene directamente usando diferencias de
cuadrados):
X 8 − 1 = (X − 1)(X + 1)(X − i)(X + i)(X − α)(X − ᾱ)(X − β)(X − β̄) en C[X]
√ √
= (X − 1)(X + 1)(X 2 + 1)(X 2 + 2X + 1)(X 2 − 2X + 1) en R[X]
= (X − 1)(X + 1)(X 2 + 1)(X 4 + 1) en Q[X]
donde fin ∈ A[X1 , . . . , Xn−1 ] e In es el subconjunto finito de los j ∈ N tales que la potencia Xnj “realmente
aparece” (o sea, que tiene coeficiente no nulo: en el ejemplo inicial, para f , tendrı́amos I3 = {0, 1, 3, 4}).
Este conjunto In y los coeficientes fin están unı́vocamente determinados por f , de nuevo por (1.5).
Por la hipótesis de inducción, para cada in ∈ In podemos escribir fin como
X in−1
fin = ai1 ,...,in−1 ,in X1i1 · · · Xn−1
(i1 ,...,in−1 )∈Iin
donde Iin es un subconjunto finito de Nn−1 y los coeficientes ai1 ,...,in−1 ,in no son nulos (en principio, la
hipótesis de inducción no dice que no sean nulos, pero los que sean nulos los podemos quitar de la suma).
Este conjunto Iin y los coeficientes ai1 ,...,in−1 ,in están unı́vocamente determinados por fin para cada in ∈ In .
Desarrollando ahora la expresión como en el ejemplo tenemos
P P P
i1 in−1 in i1 i2 in
f = in ∈In a
I in 1i ,...,i ,i
n−1 n X 1 · · · X n−1 Xn = (i1 ,...,in )∈I ai1 ,...,in X1 X2 · · · Xn
donde I = ∪in ∈In Iin × {in } es un subconjunto finito de Nn . Por los comentarios anteriores, este conjunto I
y los coeficientes ai1 ,...,in−1 ,in están unı́vocamente determinados por f .
Definición 1.45. Los polinomios de la forma aX1i1 · · · Xnin con 0 6= a ∈ A y (i1 , . . . , in ) ∈ Nn se denominan
monomios en las n indeterminadas X1 , . . . , Xn , y a es el coeficiente del monomio.
El grado del monomio aX1i1 · · · Xnin ∈ A[X1 , . . . , Xn ] es el entero no negativo i1 + · · · + in .
P
Si 0 6= f ∈ A[X1 , . . . , Xn ] se escribe como f = I ai1 ,...,in X1i1 · · · Xnin , su grado (total), denotado por
gr(f ), es el máximo grado de los monomios (no nulos) que intervienen en la suma:
Como en el caso de una indeterminada, se considera que el polinomio nulo tiene grado −∞.
Si K es un cuerpo, K[X1 , . . . , Xn ] es un dominio cuyas unidades son los elementos de K \ {0}. Su cuerpo
de fracciones K(X1 , . . . , Xn ) consiste en las fracciones racionales f /g con f, g ∈ K[X1 , . . . , Xn ], g 6= 0.
Demostración. Ejercicio.
Definición 1.47. Un polinomio no nulo es homogéneo si todos sus monomios tienen el mismo grado.
Proposición 1.48. Todo polinomio 0 6= f ∈ A[X1 , . . . , Xn ] se expresa de modo único como suma de poli-
nomios homogéneos de distinto grado. O sea, si gr(f ) = k entonces f = f0 + f1 + · · · + fk con cada fi
homogéneo de grado i; algunos fi pueden ser nulos, pero fk 6= 0.
A los fi se les denomina componentes homogéneas de f .
Demostración. Para la existencia, basta agrupar los monomios del mismo grado3 , y es obvio que k = gr(f ).
Para la unicidad, si f = f0 + · · · + fk = g0 + · · · + gk con los fi , gi homogéneos de grado i, entonces
Se tiene fk = gk , pues de lo contrario los dos miembros de la igualdad tendrı́an distinto grado (a la izquierda
k, a la derecha menor que k). Un argumento evidente por inducción en k = gr(f ) completa la prueba.
3
Para el ejemplo de la pág. 9 serı́a g = 1 + (−X + 2Y ) + (XY + XZ + Z 2 + 2Y Z) + (X 3 + 2XY Z) + (Y 4 + XY Z 2 ).
Propiedad universal
jr : A[X1 , . . . , Xr ] → A[X1 , . . . , Xn ]
dado por
X X
ai1 ,...,ir X1i1 · · · Xrir 7→ ai1 ,...,ir ,0,...,0 X1i1 · · · Xrir Xr+1
0
· · · Xn0 , donde ai1 ,...,ir ,0,...,0 = ai1 ,...,ir
(i1 ,...,ir ) (i1 ,...,ir )
Demostración. Inducción sobre el número de indeterminadas, con el caso n = 1 resuelto por el Teorema 1.8.
Suponemos n > 1 y el resultado cierto para n−1. Considerando j ∗ : A → A[X1 , . . . , Xn−1 ] y los elementos
b1 , . . . , bn−1 ∈ B, la hipótesis de inducción nos da un único homomorfismo ϕ∗ : A[X1 , . . . , Xn−1 ] → B con
ϕ∗ ◦ j ∗ = ϕ y ϕ∗ (Xi ) = bi para 1 ≤ i ≤ n − 1 (diagrama de la izquierda):
j∗ jn−1
A A[X1 , . . . , Xn−1 ] Xi A[X1 , . . . , Xn−1 ] A[X1 , . . . , Xn−1 ][Xn ] Xn
ϕ∗ ϕ̄
ϕ ϕ¯∗
B bi B bn
Por la propiedad universal para el caso de una indeterminada aplicada al diagrama de la derecha, existe un
homomorfismo de anillos ϕ̄ : A[X1 , . . . , Xn ] → B tal que ϕ̄ ◦ jn−1 = ϕ∗ y ϕ̄(Xn ) = bn .
Dado que j = jn−1 ◦ j ∗ , se tiene que ϕ̄ ◦ j = ϕ̄ ◦ jn−1 ◦ j ∗ = ϕ∗ ◦ j ∗ = ϕ.
Finalmente, por la última construcción se tiene ϕ̄(Xn ) = bn y, para 1 ≤ i < n, se tiene
Para la unicidad, sea ϕ̃ : A[X1 , . . . , Xn ] → B otro homomorfismo de anillos tal que ϕ̃◦j = ϕ y ϕ̃(Xi ) = bi
para todo i. Entonces ϕ̃ ◦ jn−1 verifica
por lo que ϕ̃ ◦ jn−1 = ϕ∗ (unicidad del primer diagrama). Como, además, ϕ̃(Xn ) = bn , la unicidad del
segundo diagrama nos dice finalmente que ϕ̃ = ϕ̄.
Igual que en una indeterminada, este resultado resulta particularmente interesante en algunos casos.
Como en una variable, la imagen de ϕ̄ es el menor subanillo de B que contiene a A y a todos los
b1 , . . . , bn . Se denota por A[b1 , . . . , bn ], le denomina el subanillo de B engendrado por b1 , b2 , . . . , bn
sobre A y consiste en las “expresiones polinómicas” en los bi con coeficientes en A.
Estudiando el núcleo de ϕ̄, que es un ideal de A[X1 , . . . , Xn ], se puede distinguir dos casos:
Si n ≥ 2 es un entero, denotaremos por Sn al grupo simétrico de grado n, formado por las permuta-
ciones de {1, 2, . . . , n} (biyecciones de ese conjunto en sı́ mismo).
Si σ ∈ Sn es una permutación, considerando el homomorfismo j : A → A[X1 , . . . , Xn ] y los elementos
Xσ(1) , . . . , Xσ(n) ∈ A[X1 , . . . , Xn ], la propiedad universal nos da un homomorfismo
ϕσ : A[X1 , . . . , Xn ] → A[X1 , . . . , Xn ] cuya acción denotaremos por f 7→ f σ
que actúa como la identidad en A y manda cada Xi a Xσ(i) . O sea
P P
f = ai1 ,...,in X1i1 · · · Xnin i1
f σ = ai1 ,...,in Xσ(1) in
· · · Xσ(n)
de σ. Por tanto,
A[X1 , X2 , . . . , Xn ] ∼
= A[Xσ(1) , Xσ(2) , . . . , Xσ(n) ]
Se verifican:
Irreducibilidad y factorización
Obviamente, los polinomios en una variable y los polinomios constantes son simétricos.
Obsérvese que el carácter simétrico de un polinomio depende de las variables en que se considere; ası́
por ejemplo, X1 X2 es simétrico en A[X1 , X2 ], pero no en A[X1 , X2 , X3 ].
Como (f + g)σ = f σ + g σ y (f g)σ = f σ g σ , el conjunto S[X1 , . . . , Xn ] formado por todos los polinomios
simétricos de A[X1 , . . . , Xn ] es un subanillo de A[X1 , . . . , Xn ] que contiene a A.
Demostración. Por inducción en n, con el caso n = 1 trivial. Para n > 1, asumiendo la hipótesis de
indicción, se tiene:
= (T − X1 ) · · · (T − Xn ) = (T − X1 ) · · · (T − Xn−1 ) · (T − Xn ) =
h P P
= T n−1 − X
1≤i1 ≤n−1 i1 T n−2 + · · · + (−1)r−1 X
1≤i1 <···<ir−1 ≤n−1 i1 · · · X ir−1 T
n−r +
P i
+(−1)r 1≤i1 <···<ir ≤n−1 Xi1 · · · Xir T
n−r−1 + · · · + (−1)n−1 (X · · · X
1 n−1 ) · (T − Xn ) =
hP i hP
= T n − ( 1≤i1 ≤n−1 Xi1 ) + Xn T n−1 + · · · + (−1)r ( 1≤i1 <···<ir ≤n−1 Xi1 · · · Xir )+
P i
+( 1≤i1 <···<ir−1 ≤n−1 Xi1 · · · Xir−1 )Xn T n−r + · · · + (−1)n X1 · · · Xn−1 · Xn
Obviamente los si = si (X1 , . . . , Xn ) son homogéneos de grado i, y falta ver que son simétricos, o sea que
cada si = sσi para cualquier σ ∈ Sn . Por la propiedad universal, existe un homomorfismo
ϕ : A[X1 , . . . , Xn , T ] → A[X1 , . . . , Xn , T ]
T n − s1 T n−1 + · · · + (−1)r sr T n−r + · · · + (−1)n sn = T n − sσ1 T n−1 + · · · + (−1)r sσr T n−r + · · · + (−1)n sσn
Proposición 1.56. Si s̃1 (X1 , . . . , Xn−1 ), . . . , s̃n−1 (X1 , . . . , Xn−1 ) son los polinomios simétricos elementales
en las indeterminadas X1 , . . . , Xn−1 , entonces para cada i con 1 ≤ i ≤ n − 1 se tiene:
Demostración. Haciendo Xn = 0 en
T n −s1 (X1 , . . . , Xn )T n−1 +· · ·+(−1)r sr (X1 , . . . , Xn )T n−r +· · ·+(−1)n sn (X1 , . . . , Xn ) = (T −X1 ) · · · (T −Xn )
se tiene
T n − s1 (X1 , . . . , Xn−1 , 0)T n−1 + · · · + (−1)r sr (X1 , . . . , Xn−1 , 0)T n−r + · · · + (−1)n sn (X1 , . . . , Xn−1 , 0) =
(T − X1 ) · · · (T − Xn−1 ) T = T n−1 − s̃1 (X1 , . . . , Xn−1 )T n−2 + · · · + (−1)n−1 s̃n−1 (X1 , . . . , Xn−1 ) T
e igualando coeficientes se obtiene el resultado.
Por ejemplo, para ϕ : A[X, Y ] → S[X, Y ] se tiene ϕ(X) = s1 = X + Y y ϕ(Y ) = s2 = XY y por tanto
ϕ(X + X 2 Y + Y 2 ) = (X + Y ) + (X + Y )2 XY + (XY )2 = X + Y + X 3 Y + XY 3 + 3X 2 Y 2
que es un polinomio simétrico.
Recı́procamente, podemos preguntarnos si un polinomio simétrico como f = X 3 + Y 3 + 4X 2 Y + 4XY 2
está en la imagen de ϕ, o sea si podemos ponerlo como una expresión polinómica en los si . En este caso no
es muy difı́cil porque podemos reconocer “casi” el desarrollo de un cubo para obtener
f = X 3 + 3X 2 Y + 3XY 2 + Y 3 + X 2 Y + XY 2 = (X + Y )3 + XY (X + Y ) = s31 + s1 s2 = ϕ(X 3 + XY )
Definición 1.57. Se define el peso de un monomio M = aX1i1 · · · Xnin como ω(M ) = i1 + 2i2 + · · · + nin .
El peso de un polinomio no nulo es el mayor de los pesos de sus monomios.
Demostración. Por inducción sobre n (trivial para n = 1). Sea n > 1 y el resultado cierto para n − 1.
Supóngase que f (s1 , . . . , sn ) = 0 con f (X1 , . . . , Xn ) 6= 0. Escribiendo f en potencias de Xn se tiene
P i
f (X1 , . . . , Xn ) = i≥0 fi (X1 , . . . , Xn−1 )Xn con algún fi 6= 0
Sea p el menor de los ı́ndices i para los que fi 6= 0 (en particular fp 6= 0). Entonces
P i p P i−p
f (X1 , . . . , Xn ) = i≥p fi (X1 , . . . , Xn−1 )Xn = Xn i≥p fi (X1 , . . . , Xn−1 )Xn
Haciendo entonces Xn = 0 se anulan todos los sumandos con i − p > 0, de modo que 0 = fp (s̃1 , . . . , s̃n−1 ).
La hipótesis de inducción nos dice entonces que fp = 0, contradicción que prueba el resultado.
Lema 1.60. Sea f ∈ A[X1 , . . . , Xn ]. Si para todo i = 1, . . . , n se tiene f (X1 , . . . , Xi−1 , 0, Xi+1 , . . . , Xn ) = 0,
entonces f es divisible por sn (X1 , . . . , Xn ) = X1 · · · Xn en A[X1 , . . . , Xn ].
P
Demostración. Sea f = (r1 ,...,rn )∈I ar1 ,...,rn X1r1 · · · Xnrn y sea Ni = {(r1 , . . . , rn ) ∈ I | ri = 0}; entonces
P r1 r r
0 = f (X1 , . . . , Xi−1 , 0, Xi+1 , . . . , Xn ) = (r1 ,...,rn )∈Ni ar1 ,...,rn X1
i−1
· · · Xi−1 i+1
Xi+1 · · · Xnrn
Aplicando esto para todo i, 1 ≤ i ≤ n, resulta que si (r1 , . . . , rn ) ∈ I es tal que algún ri = 0, entonces
ar1 ,...,rn = 0; de esto se sigue que si ar1 ,...,rn 6= 0, entonces (r1 , . . . , rn ) ∈ (N∗ )n , (N∗ = N \ {0}), y por tanto
ar1 ,...,rn X1r1 · · · Xnrn es divisible por X1 · · · Xn = sn (X1 , . . . , Xn ).
Proposición 1.61. Sea f (X1 , . . . , Xn ) ∈ A[X1 , . . . , Xn ] un polinomio simétrico, entonces existe un polino-
mio g(X1 , . . . , Xn ) ∈ A[X1 , . . . , Xn ] tal que f (X1 , . . . , Xn ) = g(s1 , . . . , sn ). Además, gr(f ) = ω(g).
Para n = 1 y para todo d, H(n, d) es válida (basta tomar g = f , pues en este caso X1 = s1 ).
Sea n > 1 y H(r, d) válida para todo r ≤ n − 1 y para todo d; se demostrará H(n, d) para todo d.
H(n, 0) es trivialmente válida (pues f es, en este caso, constante). Sea d ≥ 1 y H(n, r) válida para todo
r ≤ d − 1, se probará H(n, d).
Si f ∈ A[X1 , X2 , . . . , Xn ] es simétrico de grado d, entonces f (X1 , . . . , Xn−1 , 0) ∈ A[X1 , . . . , Xn−1 ] es
simétrico. En efecto, si σ ∈ Sn−1 , considerando σ̄ ∈ Sn definida por
Como gr(f (X1 , . . . , Xn−1 , 0)) ≤ d, por H(n − 1, d), existe un g1 ∈ A[X1 , . . . , Xn−1 ] con ω(g) ≤ d y
f (X1 , . . . , Xn−1 , 0) = g1 (s̃1 , . . . , s̃n−1 ). Si ahora se considera el polinomio simétrico
entonces
h(X1 , . . . , Xn−1 , 0) = f (X1 , . . . , Xn−1 , 0) − g1 (s̃1 , . . . , s̃n−1 ) = 0
y, por simetrı́a, para todo i con 1 ≤ i ≤ n se tiene h(X1 , . . . , Xi−1 , 0, Xi+1 , . . . , Xn ) = 0. Entonces, por el
lema previo, resulta que h(X1 , . . . , Xn ) = sn h∗ (X1 , . . . , Xn ) y gr(h∗ ) = gr(h) − n ≤ d − n < d.
Por otra parte, h∗ (X1 , . . . , Xn ) es simétrico ya que si σ ∈ Sn , entonces de hσ = h se sigue que sn (h∗ )σ =
sn h∗ y, por tanto, (h∗ )σ = h∗ .
Por la hipótesis de inducción para H(n, r) con r < d, se sigue que existe h∗∗ (X1 , . . . , Xn ) ∈ A[X1 , . . . , Xn ]
con ω(h∗∗ ) ≤ d − n tal que h∗∗ (s1 , . . . , sn ) = h∗ (X1 , . . . , Xn ) y, entonces
f (X1 , . . . , Xn ) = g1 (s1 , . . . , sn−1 ) + h(X1 , . . . , Xn ) =
= g1 (s1 , . . . , sn−1 ) + sn h∗ (X1 , . . . , Xn ) = g1 (s1 , . . . , sn−1 ) + sn h∗∗ (s1 , . . . , sn )
El resultado siguiente establece las relaciones entre las raı́ces y los coeficientes de una ecuación.
Corolario 1.64. En las condiciones de la Proposición 1.63, cualquier expresión polinómica simétrica (con
coeficientes en A) de las raı́ces de f se puede expresar como una expresión polinómica (con coeficientes en
A) de los coeficientes de f , y por tanto es un elemento de A. O sea:
Si h ∈ A[X1 , . . . , Xn ] es simétrico, existe g ∈ A[X1 , . . . , Xn ] tal que h(α1 , . . . , αn ) = g(a1 , . . . , an ) ∈ A.
Demostración. Por el Corolario 1.62 existe ḡ ∈ A[X1 , . . . , Xn ] tal que h(X1 , . . . , Xn ) = ḡ(s1 , . . . , sn ).
Sustituyendo las Xi por las αi y teniendo en cuenta las fórmulas de Cardano-Vieta se tiene
h(α1 , . . . , αn ) = ḡ(s1 (α1 , . . . , αn ), . . . , sn (α1 , . . . , αn )) = ḡ(−a1 , a2 , . . . , (−1)n an )
y el g del enunciado es entonces g(X1 , . . . , Xn ) = ḡ(−X1 , X2 , . . . , (−1)n Xn ).
2. Para un cúbica aX 3 + bX 2 + cX + d = 0, las fórmulas nos dicen que sus raı́ces α1 , α2 , α3 satisfacen
y ası́, aunque no conozcamos las propias raı́ces, sı́ conocemos su suma (−b/a) y su producto (−d/a).
Por el corolario, también podemos conocer cualquier otra expresión simétrica de las raı́ces, siempre y
cuando sepamos expresarla en términos de los polinomios simétricos elementales.
Por ejemplo, si pensamos en la suma de los cuadrados de las raı́ces, α12 + α22 + α32 , el correspondiente
polinomio simétrico se expresa fácilmente en función de los elementales:
y por tanto tenemos α12 + α22 + α32 = (−b/a)2 − 2(c/a) = (b2 − 2ac)/a2 .
Definición 1.66. El orden lexicográfico4 de Nn viene dado por (i1 , . . . , in ) < (j1 , . . . , jn ) cuando, para el
menor subı́ndice k con ik 6= jk , se tiene ik < jk .
Cuando un polinomio f está escrito como suma de monomios irredundantes (1.43), el mayor de ellos
en el orden lexicográfico (de los exponentes de las incógnitas) se llama el término superior de f .
Por ejemplo, en X1 X33 + 7X35 + 8X1 X2 los exponentes de los monomios son (1, 0, 3), (0, 0, 5) y (1, 1, 0),
el termino superior es 8X1 X2 y el polinomio en orden lexicográfico decreciente es 8X1 X2 + X1 X33 + 7X35 .
Los términos superiores de los polinomios simétricos elementales son, claramente:
s1 X1 s2 X1 X2 s3 X1 X2 X3 ... sn X 1 X 2 · · · Xn
El siguiente resultado, cuya demostración se deja como ejercicio, dice esencialmente que el orden lexi-
cográfico es compatible con la suma en Nn .
Lema 1.67. Si A es un dominio y f1 , . . . , fr ∈ A[X1 , . . . , Xn ], el término superior del producto f1 · · · fr es
el producto de los términos superiores de los factores.
4
Es muy fácil ver que se trata de un orden total, y de hecho de un buen orden.
aX1i1 −i2 (X1 X2 )i2 −i3 · · · (X1 · · · Xn−1 )in−1 −in (X1 · · · Xn )in = aX1i1 X2i2 · · · Xnin = M
Al restar a f este polinomio, los términos superiores se cancelarán. Consideramos por tanto
i −in in
f1 = f − as1i1 −i2 s2i2 −i3 · · · sn−1
n−1
sn
En concreto, el término superior de f1 será de la forma bX1j1 · · · Xnjn para cierto coeficiente b y cierto
(j1 , . . . , jn ) < (i1 , . . . , in ), y entonces definimos
j −jn jn
f2 = f1 − bsj11 −j2 sj22 −j3 · · · sn−1
n−1
sn
Si f2 = 0 habremos terminado, pues tenemos (con la interpretación evidente de los puntos suspensivos)
f = as1i1 −i2 s2i2 −i3 · · · + f1 = as1i1 −i2 s2i2 −i3 · · · + bsj11 −j2 sj22 −j3 · · ·
Si f2 6= 0 seguimos el proceso. Al terminar habremos puesto f como combinación lineal (con coeficientes
en el anillo) de polinomios del tipo sj11 −j2 sj22 −j3 · · · con (j1 , . . . , jn ) ≤ (i1 , . . . , in ). Sabemos que el coefi-
ciente que corresponde a (i1 , . . . , in ) es a, y el resto los podemos determinar dando valores “fáciles” a las
indeterminadas, lo que nos proporciona ecuaciones lineales en los coeficientes.
1. Para f = X12 X22 + X12 X32 + X12 X42 + X22 X32 + X22 X42 + X32 X42 , homogéneo de grado 4, el término superior
X12 X22 corresponde a (2, 2, 0, 0). Los elementos de N4 menores que este y cuya suma de entradas es
4 (para que el grado sea 4) son (2, 1, 1, 0) y (1, 1, 1, 1). Los correspondientes (j1 − j2 , j2 − j3 , . . . ) son
(0, 2, 0, 0), (1, 0, 1, 0) y (0, 0, 0, 1), por lo que se tiene
2. Consideremos el polinomio simétrico f = X12 X22 X3 + · · · en 5 variables, que tendrá 30 sumandos: hay
5
3 = 10 formas de elegir las tres variables que aparecen, y para cada una de estas elecciones hay tres
sumandos del tipo X12 X22 X3 + X12 X2 X32 + X1 X22 X32 .
Los posibles términos superiores son (2, 2, 1, 0, 0), (2, 1, 1, 1, 0) y (1, 1, 1, 1, 1). Los correspondientes
(j1 − j2 , . . . ) son (0, 1, 1, 0, 0), (1, 0, 0, 1, 0) y (0, 0, 0, 0, 1), por lo que
f = s2 s3 + As1 s4 + Bs5
De forma análoga a como se han definido los polinomios simétricos, se puede definir:
Observación 1.71. Puede ocurrir que la fracción racional f /g sea simétrica sin que f y g sean polinomios
simétricos, como ocurre con f = X12 X2 y g = X12 + X2 X1 .
Pero si A es DFU y f /g ∈ A(X1 , . . . , Xn ) es una fracción simétrica con (f, g) = 1, entonces f y g son
polinomios simétricos (Problema 14).
Demostración. Es inmediato probar que todo elemento de A(s1 , . . . , sn ) es una fracción racional simétrica.
Recı́procamente, sea f /g es una fracción racional simétrica en n indeterminadas. Consideremos los po-
linomios Y Y
g1
g1 = gσ y g0 = = gσ
g
σ∈Sn σ∈Sn \{Id}
g1 es simétrico pues, fijada σ ′ ∈ Sn , los valores σσ ′ recorren Sn cuando σ recorre Sn y ası́ se tiene
′ Q ′
g1σ = σ∈Sn g σσ = g1 . Si consideramos ahora el polinomio
g1 f
f1 = f g 0 = f = g1
g g
vemos que es simétrico, pues lo son f /g y g1 . Entonces, por el Corolario 1.62, se tiene f1 , g1 ∈ A[s1 , . . . , sn ]
y por tanto f /g = f1 /g1 ∈ A(s1 , . . . , sn ).
En un polinomio simétrico como el que sigue (en este caso, en las variables X, Y, Z), hay información
que sobra, pues la presencia de los sumandos X 3 Y Z y 5X 2 fuerzan la del resto:
f = X 3 Y Z + XY 3 Z + XY Z 3 + 5X 2 + 5Y 2 + 5Z 2
La órbita de un monomio la forman todos los monomios que se obtienen permutando sus variables.
Por ejemplo, para X 3 Y Z la identidad y las trasposiciones de X con Y y de X con Z dan el conjunto
{X 3 Y Z , XY 3 Z , XY Z 3 }, y el resto de permutaciones no dan nada nuevo, luego esa es la órbita.
En realidad se deben indicar las variables que intervienen. Ası́, la órbita de 3X 2 Y en las variables X, Y, Z
es {3X 2 Y , 3XY 2 , 3X 2 Z , 3XZ 2 , 3Y 2 Z , 3Y Z 2 }.
Si en un polinomio simétrico quitamos esa información redundante, dejando solo un sumando de cada
órbita, se obtiene su forma contraı́da, que para el polinomio f anterior serı́a fˆ = X 3 Y Z + 5X 2 .
Recı́procamente, la forma (simétrica) extendida de un polinomio es el polinomio simétrico que se
obtiene al sumar los elementos de las órbitas de sus monomios. Por ejemplo, las formas extendidas de
g = X 3 − 4X 2 Y en las variables X, Y y en las variables X, Y, Z son, respectivamente,
En Maxima, las formas contraı́das y extendidas se obtienen con contract y explose (hay que cargar el
paquete sym/compile), en las que hay que dar el polinomio y las variables que se consideran.
Para expresar un polinomio simétrico en términos de los elementales se usa elem(ele,pol,var), donde
pol y var son el polinomio en forma contraı́da y las variables, y ele es una lista en la que, para nuestros
propósitos, nos limitaremos a poner el número de variables.
Añadimos aquı́, para tenerlas como referencia al hacer cuentas, las expresiones (en función de los poli-
nomios simétricos elementales) de algunos polinomios simétricos que aparecen con frecuencia:
Cuartas potencias:
Dobles cuadrados:
1.7. Problemas
1-1. Estudia la irreducibilidad en Q[X] del polinomio X n −a, donde a es un entero 6= ±1 y libre de cuadrados
(o sea, no divisible por el cuadrado de ningún primo).
a) X 4 + 4.
b) X 8 + X 4 + 1.
c) X 6 + X 4 + X 2 + 1.
1-3. Demuestra que X 4 − 10X 2 + 1 no es producto de dos factores de grado 2 en Z[X] y deduce que es
irreducible en Q[X]. Encuentra todas sus raı́ces reales o complejas.
1-6. Demuestra que X 3a + X 3b+1 + X 3c+2 ∈ R[X] es divisible por X 2 + X + 1 para cualesquiera a, b, c ∈ N.
1-8. Encuentra la multiplicidad de la raı́z 1 en el polinomio X 2n+1 − (2n + 1)X n+1 + (2n + 1)X n − 1 ∈ R[X].
1-9. ¿Qué relación deben cumplir a y b para que X 5 + aX 3 + b tenga una raı́z doble no nula?
1-10. (A tı́tulo informativo). Si D es un DFU con un número finito de unidades (como Z, o como Z[i]) y con
cuerpo de fracciones K, el método de Kronecker permite encontrar todos los factores irreducibles de
un polinomio f ∈ D[X]. El método se basa, por un lado, en que para factorizar f basta con encontrar
sus factores de grado a lo sumo n/2. Y por otro, en que si f tiene grado n, entonces queda determinado
por los valores que toma en culesquiera n + 1 elementos distintos de D.
a) Prueba que si g divide a f en D[X], entonces g(c) divide a f (c) en D para todo c ∈ D.
b) Sea m la parte entera de n/2 y sean c0 , c1 , . . . , cm ∈ D distintos. Para cada posible elección de
d0 , d1 , . . . , dm ∈ D donde cada di es un factor de f (ci ) (solo hay un número finito de elecciones),
demuestra que Q
Xm
j6=i (X − cj )
g(X) = di Q ∈ K[X]
i=0 j6=i (ci − cj )
1-11. Demuestra que las indeterminadas son algebraicamente independientes sobre el anillo de coeficientes.
1-12. Demuestra que si K es un cuerpo, entonces el ideal (Y − X 2 ) de K[X, Y ] es primo. Identifica el cociente
K[X, Y ]/(Y − X 2 ).
1-14. Demuestra que si A es un DFU y f /g ∈ A(X1 , . . . , Xn ) es una fracción simétrica con (f, g) = 1, entonces
f y g son polinomios simétricos.
1-15. Expresa los siguientes polinomios simétricos en función de los polinomios simétricos elementales:
1-16. Escribe las siguientes expresiones en función de los polinomios simétricos elementales:
1-20. Encuentra el valor de a para que las raı́ces de la ecuación 8X 3 − 12X 2 − 2X + a = 0 estén en progresión
aritmética. Resuelve la ecuación.
1-21. Demuestra que la suma de los cuadrados de las raı́ces de X n + aX n−1 + a2 X n−2 + · · · + an (donde
a ∈ C) es la misma para cualquier n ≥ 2. ¿Cuál es dicho valor?
1-22. Determina un polinomio cuyas raı́ces sean los inversos de las raı́ces de X 3 + aX 2 + bX + c (c 6= 0).
1-23. Determina un polinomio cuyas raı́ces sean los cuadrados de las raı́ces de X 3 + aX 2 + bX + c (c 6= 0).
1-24. Determina un polinomio cuyas raı́ces sean los inversos de los cuadrados de las raı́ces de X 3 −X 2 +2X −1.
1-25. Encuentra la condición necesaria y suficiente que deben verificar los coeficientes a, b, c ∈ C para que:
1-31. Si interpretamos los números complejos como puntos del plano complejo:
a) Calcula a, b para que las raı́ces de X 4 − 8iX 3 + aX 2 + bX + 16(1 + i) sean los vértices de un
cuadrado.
b) Determina qué condición deben verificar a, b, c ∈ C para que las raı́ces de aX 2 + bX + c formen,
junto con el origen, un triángulo equilátero.
c) Determina qué condición deben verificar a, b, c ∈ C para que las raı́ces de X 4 + aX 3 + bX 2 + cX + d
formen un paralelogramo.
1-32. Calcula las soluciones complejas del siguiente sistema (indicación: encuentra un polinomo de grado 3
cuyas raı́ces sean esas soluciones):
x + y + z = 3
x2 + y 2 + z 2 = 7
x3 + y 3 + z 3 = 3
1-33. Demuestra que el siguiente sistema no tiene soluciones racionales, y calcula sus soluciones complejas
(halla un polinomo de grado 4 cuyas raı́ces sean esas soluciones; prueba que no tiene raı́ces racionales;
para calcular sus raı́ces, exprésalo como producto de dos polinomios de grado 2 en Z[X]):
x + y + z + t = 0
x 2 + y 2 + z 2 + t2 = 6
x3 + y 3 + z 3 + t3 = −18
x 4 + y 4 + z 4 + t4 = 26
Extensiones de cuerpos
2.1. Extensiones de cuerpos
Definición 2.1. Una extensión (de cuerpos) es un par de cuerpos K, L tal que K es subcuerpo de L;
se representará por K ⊂ L, por K → L o por L/K. Se dice que K es el cuerpo base de la extensión.
Definición 2.2. El cuerpo (o subcuerpo) primo de un cuerpo L es la intersección de todos sus sub-
cuerpos, que obviamente es el menor subcuerpo de L (está contenido en cualquier subcuerpo de L) y es un
cuerpo sin subcuerpos propios (el único subcuerpo de L sin subcuerpos propios).
Si car(L) = 0 entonces ϕ es inyectivo y por tanto (propiedad universal del cuerpo de fracciones) se
extiende a un homomorfismo ϕ̄ : Q → L. Ası́ ϕ̄(Q) es un subcuerpo de L que, por ser isomorfo a Q,
no tiene subcuerpos propios y por tanto es el cuerpo primo de L.
Definición 2.3. El grado de una extensión K ⊂ L, denotado por [L : K], es la dimensión de L como
K-espacio vectorial. La extensión se dice finita o infinita según sea [L : K].
Definición 2.5. Una torre de extensiones es una sucesión de extensiones como la que sigue, en la que
cada una de las extensiones parciales Ki ⊂ Ki+1 se dice que es una subextensión de la total:
K1 ⊂ K2 ⊂ · · · ⊂ Kn
Una propiedad (P ) relativa a extensiones es una propiedad multiplicativa en torres si, para cada torre
de extensiones K ⊂ F ⊂ L, se verifica que
[M : K] = [M : L] · [L : K]
Demostración. Es fácil comprobar que si {ui }i∈I es un base de L sobre K y {vj }j∈J es una base de M
sobre L, entonces {ui vj }(i,j)∈I×J es una base de M sobre K (para conjuntos I y J de cardinal arbitrario).
Corolario 2.7. Si una extensión K ⊂ L tiene grado (finito y) primo p, entonces no hay ningún cuerpo
intermedio entre K y L, salvo ellos mismos.
En particular, como [C : R] = 2, no hay ningún cuerpo comprendido entre el cuerpo de los números
reales y el de los complejos.
E2
K E1 ∩ E2 E1 E2 L
E1
√ √
Ejemplo 2.9. Si E2 = Q[ 2] y E3 = Q[ 3], las extensiones Q ⊂ E2 y Q ⊂ E3 son admisibles (Ei ⊂ R).
√ √ √
Cualquier cuerpo L que contenga a E2 y a E3 contendrá también a 2 3 = 6 y por tanto contendrá a
√ √ √
{a + b 2 + c 3 + d 6 | a, b, c, d ∈ Q}
De hecho ese conjunto ya es un cuerpo, como vemos a continuación, y por tanto es el compuesto E2 E3 .
√ √ √
Se trata claramente de un subanillo de R, y falta ver que el inverso de a + b 2 + c 3 + d 6 también
tiene esa forma, para lo que observamos que
√ √ √ √ √ √ √ √ √ √ √ √
(a + b 2 + c 3 + d 6) (a + b 2 − c 3 − d 6) (a − b 2 + c 3 − d 6) (a − b 2 − c 3 + d 6) =
h √ √ √ i h √ √ √ i
(a + b 2)2 − (c 3 + d 6)2 (a − b 2)2 − (c 3 − d 6)2 =
h √ i h √ i
(a2 + 2b2 − 3c2 − 6d2 ) + (2ab − 6cd) 2 (a2 + 2b2 − 3c2 − 6d2 ) − (2ab − 6cd) 2 =
√ √
(e + f 2)(e − f 2) = e2 − 2f 2 = g
√
con g 6= 0 porque 2 es irracional. Por tanto el inverso también tiene la forma requerida, pues vale
1 √ √ √ √ √ √ √ √ √
(a + b 2 − c 3 − d 6) (a − b 2 + c 3 − d 6) (a − b 2 − c 3 + d 6)
g
Definición 2.10. Una propiedad (P ) relativa a extensiones es estable por levantamientos si siempre
que se tengan dos extensiones admisibles K ⊂ E1 y K ⊂ E2 tales que y la extensión K ⊂ E1 cumple (P ),
entonces la extensión E2 ⊂ E1 E2 también cumple (P ).
E2 (P )
K E1 E2
(P ) E1
Más adelante se verá que la condición de ser una extensión finita también es estable por levantamientos.
Encajes y K-isomorfismos
¿Qué relación existe entre las extensiones de cuerpos y las ecuaciones algebraicas?
Una ecuación algebraica es una ecuación de la forma f (X) = 0 donde f ∈ K[X] es un polinomio con
coeficientes en cierto cuerpo K (el cuerpo base o de definición).
Resolver la ecuación es encontrar las raı́ces de f , que en muchos casos (por ejemplo, cuando f es
irreducible sobre K y de grado mayor que 1) no están en K. Incluso cuando estén en K, puede ser imposible
encontrarlas de forma explı́cita (este es el problema de la resolución por radicales).
Para ecuaciones sobre R existen métodos de aproximación de raı́ces (bisección, Newton-Raphson, . . . ),
pero esto corresponde propiamente al Cálculo Numérico y no a la teorı́a de ecuaciones algebraicas.
Se plantean entonces, al menos, dos cuestiones:
Dada una ecuación algebraica f (X) = 0 sobre K, por ejemplo X 2 + X + 1 = 0 sobre Z2 , ¿existirá una
raı́z de la ecuación en un cuerpo que contenga al cuerpo base?
Si α es una raı́z de una ecuación algebraica f (X) = 0, ¿cómo operar con α? Por ejemplo, si α es una
raı́z de X 4 + X + 1 = 0 sobre Q, ¿es posible determinar qué elemento es α6 + 2α + 1?
Ejemplo 2.13. Sea m ∈ Z distinto de 0, ±1 y libre de cuadrados (sin divisores del tipo p2 , con p primo).
Entonces f (X) = X 2 − m es irreducible en Q[X] (Eisenstein con cualquier divisor primo de m).
Sea L una extensión de Q en la que f tiene una raı́z α; por ejemplo, L = C, o L = R si m ≥ 2.
Entonces el homomorfismo de evaluación ϕα : Q[X] → L tiene por imagen (subanillo de L) al conjunto
de las “expresiones polinómicas en α con coeficientes en Q”. De hecho, como α2 = m, se tiene en realidad
Q[α] = { a + bα | a, b ∈ Q }
(a + bα)(a − bα) = a2 − b2 m = c
a
con c ∈ Q, c 6= 0 (de lo contrario, α ∈ Q), por lo que el inverso (a + bα)−1 = c − cb α está en Q[α].
Veamos otra interpretación del cuerpo Q[α]. Usando el primer teorema de isomorfı́a se tiene
Q[X] ∼ Q[X]
Q[α] = Im(ϕα ) ∼
= = (2.1)
Ker(ϕα ) (X 2 − m)
puesto que Ker(ϕα ) es el ideal principal (f ) de K[X] generado por f (X) = X 2 − m. En efecto, al dividir
con resto un polinomio g ∈ K[X] por f , se tiene
Considerando las construcciones explı́citas de la evaluación en α y del teorema de isomorfı́a, vemos que
en el isomorfismo (2.1) a la raı́z α le corresponde el elemento X̄ = X + (X 2 − 2).
Ejemplo 2.14. Dado el polinomio irreducible f (X) = X 2 + X + 1 ∈ Z2 [X], queremos encontrar una
extensión L de Z2 en la que f tenga una raı́z α ∈ L.
No podemos empezar como antes, pensando en una raı́z en C. Pero podemos suponer que existe una tal
extensión, “a ver qué pasa”. Como α2 + α + 1 = 0 y car(L) = 2, también se tiene
α2 = α + 1 α3 = α2 + α = (α + 1) + α = 1 α4 = α ...
de manera que Z2 [α] tiene exactamente 4 elementos. Además α(α + 1) = α2 + α = 1, por lo que todos tienen
inverso y, en consecuencia, Z2 [α] es un cuerpo, “el” cuerpo con 4 elementos. Sus tablas son:
+ 0 1 α α+1 · 0 1 α α+1
0 0 1 α α+1 0 0 0 0 0
1 1 0 α +1 α 1 0 1 α α +1
α α α+1 0 1 α 0 α α+1 1
α+1 α+1 α 1 0 α+1 0 α+1 1 α
En ambos ejemplos hemos supuesto la existencia de una raı́z α del irreducible f (X) en un extensión L
de K para obtener un cuerpo K(α) que contiene a K y en el que hay una raı́z α de f .
En ambos, los elementos de K(α) son expresiones polinómicas (sencillas, de grado 2) de α con coeficientes
en K con las que se puede operar fácilmente.
Pensando en un caso más general, podemos plantearnos: ¿Qué es α? ¿Se puede asegurar su existencia?
Con respecto a lo primero, no importa tanto qué es α sino cómo se opera con él, y esta “operatividad”
√
se deduce en ambos casos del hecho de ser raı́z de f . En el primer ejemplo podemos tomar α = m (en R
o en C, según sea m). En el segundo, α no es más que un sı́mbolo, pero sabemos operar con él.
Ambas construcciones son, de hecho, análogas a la del cuerpo C a partir de R, añadiendo un sı́mbolo i
con i2 = −1; es decir, una raı́z del polinomio X 2 + 1 irreducible sobre R.
Con respecto a la segunda pregunta, en ambos casos hemos visto que K(α) es isomorfo al cociente de
K[X] por su ideal principal (f ), y que la raı́z de f correspondı́a a la clase X̄ = X + (f ).
Esta última idea es la que se usa para garantizar la existencia de raı́ces “en algún sitio”:
Teorema 2.15 (Kronecker). Sea K un cuerpo y sea f ∈ K[X] un polinomio no constante. Entonces existe
una extensión L de K en la que f tiene una raı́z.
Demostración. Como K[K] es DFU y f no es constante, f tendrá un divisor irreducible g, y una raı́z de
g será entonces obviamente raı́z de f .
K[X]
Como g es irreducible y K[X] es DIP, el ideal I = (g) es maximal en K[X] y ası́ L = es un cuerpo.
I
Consideremos el homomorfismo de anillos ϕ : K → L, composición de la inclusión K → K[X] con la
proyección canónica K[X] → K[X]/I = L. Como K es un cuerpo, ϕ es inyectivo y se puede identificar K
con su imagen. Entonces L es una extensión de K y definiendo α = X + I ∈ L se tiene
Corolario 2.16. Sea K un cuerpo y sea f ∈ K[X] un polinomio no constante. Entonces existe una extensión
L de K en la que f tiene todas sus raı́ces.
Por el Corolario 2.16, dado un polinomio f ∈ K[X] se puede construir una extensión L de K en la que
f tiene todas sus raı́ces. Un “problema inverso” serı́a: dados una extensión K ⊂ L y un elemento α ∈ L,
¿habrá un polinomio en K[X] que tenga α por raı́z? Sabemos que la respuesta es, en general, negativa, pues
por ejemplo existen elementos en R que son trascendentes sobre Q.
Las extensiones algebraicas son las que dan respuesta afirmativa a esa pregunta, y por tanto son las que
corresponden naturalmente al estudio de las ecuaciones algebraicas. Las “otras” extensiones, las trascenden-
tes, son también de gran interés en otras ramas de las Matemáticas, como la Geometrı́a Algebraica.
6. Los números complejos ω = e2π i/3 = cos(2π/3) + i sen(2π/3) y ω 2 son algebraicos sobre Q, pues son
raı́ces de X 3 − 1 ∈ Q[X]. De hecho son raı́ces de su factor irreducible X 2 + X + 1.
√ √ √
7. El número real α = 2 + 3 es algebraico sobre Q. En efecto, α2 = 2 + 3 + 2 6, luego (α2 − 5)2 = 24,
de donde α4 − 10α2 + 1 = 0 y por tanto α es raı́z de X 4 − 10X 2 + 1 ∈ Q[X].
8. Los números e y π son trascendentes sobre Q (Hermite en 1873 y Lindemann en 1882, respectivamente),
pero obviamente son algebraicos sobre R.
La estructura de una extensión simple K ⊂ K(α), donde α está en cierta extensión de K, depende de si
α es algebraico o trascendente sobre K. Analizamos primero el caso trascendente, más sencillo.
Proposición 2.22. Si α es trascendente sobre K, entonces K(α) ∼
= K(X) y [K(α) : K] = ∞.
Proposición 2.23. Si α es algebraico sobre K, entonces es raı́z de un único polinomio mónico e irreducible
f ∈ K[X], llamado el polinomio irreducible de α sobre K y denotado por f = Irr(α, K). Además:
1. K(α) = K[α].
3. Si n = gr(f ), entonces [K(α) : K] = n y {1, α, . . . , αn−1 } es una base de K(α) sobre K (o sea, todo
elemento de K(α) se escribe de forma única como a0 + a1 α + · · · + an−1 αn−1 con los ai ∈ K).
Demostración. ϕα : K[X] → K[α] tiene núcleo no nulo. Como K[X] es un DIP se tiene Ker(ϕα ) = (f ) para
cierto 0 6= f ∈ K[X], que podemos tomar mónico. Como K[X]/(f ) es isomorfo al dominio Im(ϕα ) = K[α],
deducimos1 que f es irreducible y que K[α] es un cuerpo, por lo que K(α) = K[α].
Para g ∈ K[X] se tiene entonces g(α) = 0 ⇔ g ∈ Ker(ϕα ) = (f ) ⇔ f | g.
Si α fuera raı́z de otro irreducible mónico g, se tendrı́a f | g con ambos irreducibles, luego son asociados,
o sea g(X) = kf (X) con k ∈ K, pero como ambos son mónicos debe ser k = 1 y ası́ g = f .
Solo falta ver que {1, α, . . . , αn−1 } es LI y genera K(α). Si no fuera LI, una relación de dependencia
lineal nos darı́a un polinomio g 6= 0 de grado menor que n del cual α es raı́z, pero entonces tendrı́amos f | g
con gr(g) < gr(f ), contradicción.
Un elemento genérico de K(α) = K[α] es de la forma h(α) con h ∈ K[X]. Dividiendo con resto h entre
f se tiene h = f q + r con gr(r) < gr(f ) = n, y ası́ h(α) = f (α)q(α) + r(α) = r(α). Como gr(r) < n, hemos
puesto h(α) como combinación K-lineal de {1, α, . . . , αn−1 }, que por tanto forma un conjunto generador.
Corolario 2.25. Sea 0 6= g ∈ K[X] con una raı́z α en cierta extensión de K. Entonces [K(α) : K] ≤ gr(g),
con igualdad si solo si g es irreducible sobre K.
Demostración. Como α es raı́z de g, es algebraico. Sea f = Irr(α, K) con grado n = gr(f ) = [K(α) : K].
Como α es raı́z de g, se tiene f | g, de donde se sigue el resultado.
1
Si D es un DIP y 0 6= p ∈ D, se tiene: p primo ⇔ p irreducible ⇔ D/(p) cuerpo ⇔ D/(p) dominio.
Si α es algebraico sobre K entonces K ⊂ K(α) es finita y por tanto algebraica. Ası́, para cada β ∈ K(α)
podemos plantearnos el cálculo de Irr(β, K); el siguiente ejemplo proporciona un método que puede resultar
útil en algunos casos2 .
Ejemplo 2.27. El polinomio f (X) = X 3 + 2X 2 + 1 es irreducible sobre Q porque no tiene raı́ces racionales.
Por tanto, si α ∈ C es una raı́z suya, se tiene f = Irr(α, Q) y por tanto [Q(α) : Q] = 3.
αβ = α − α2 − α3 = α − α2 + 2α2 + 1 = 1 + α + α2
α2 β = α(1 + α + α2 ) = α + α2 + α2 = α + α2 − 1 − 2α2 = −1 + α − α2
Entonces
1 β 1 − α − α2 1 −1 −1 1
2
β α = βα = 1 + α + α = 1 1 1 α
α2 βα2 −1 + α − α2 −1 1 −1 α2
Irr(β, Q) = X 3 − X 2 − 2X + 4
2
Este método proporciona un polinomio de grado n = [K(α) : K] del cual β es raı́z, pero en general no es Irr(β, K).
√ √
Por ejemplo, si α = 4 2+1 entonces Irr(α, Q) = x4 −4x3 +6x2 −4x−1, y aplicando el método a β = α2 −2α+1 = (α−1)2 = 2
se obtiene un polinomio de grado 4, en concreto (x2 − 2)2 , que no es Irr(β, Q) = x2 − 2 (pero lo tiene como factor).
Con algunas modificaciones, es posible aplicar este método a extensiones no necesariamente simples.
Por el Teorema 2.15, si f ∈ K[X] no es constante hay una extensión simple K ⊂ K(α) = K[α] donde α
es una raı́z de f . Si además f es irreducible, esta extensión es “única salvo K-isomorfismos”:
Proposición 2.28. Sean σ : K1 → K2 un isomorfismo de cuerpos y σ : K1 [X] → K2 [X] el isomorfismo
inducido (página 3). Sean f1 ∈ K1 [X] irreducible y f2 = σ(f1 ) ∈ K2 [X], también irreducible.
Si αi es una raı́z de fi en una extensión de Ki (i = 1, 2), existe un isomorfismo σ̄ : K1 (α1 ) → K2 (α2 )
tal que σ̄|K1 = σ y σ̄(α1 ) = α2 .
Demostración. Como αi es algebraico sobre Ki , se tiene Ki (αi ) = Ki [αi ], luego sus elementos son de la
forma g(αi ) con g ∈ Ki [X]. Por tanto, el “candidato” a isomorfismo σ̄ : K1 (α1 ) → K2 (α2 ) es el dado por
σ̄(g(α1 )) = σ(g)(α2 )
Si vemos que “eso” está bien definido, es elemental ver que es un homomorfismo, lleva α1 a α2 aplicándolo
alm polinomio g(X) = X, y es biyectivo pues su inverso se construye de la misma manera a partir de
σ −1 : K2 → K1 . Para ver que está bien definido, usamos que fi = Irr(αi , Ki ) por ser irreducibles.
Entonces g(α1 ) = h(α1 ) implica que α1 es raı́z de g − h y ası́ f1 divide a g − h, por lo que f2 = σ(f )
divide a σ(g) − σ(h) y ası́ α2 es raı́z de σ(g) − σ(h), o sea σ(g)(α2 ) = σ(h)(α2 ).
Proposición 2.29. Sean K ⊂ L una extensión y α, β ∈ L algebraicos sobre K. Entonces las condiciones
siguientes son equivalentes (y, cuando se dan, se dice que α y β son K-conjugados):
Demostración. (a) y (b) son equivalentes por la unicidad de Irr(α, K), implican (c) por la Proposición 2.28,
y (c) ⇒ (d) es evidente.
(d) ⇒ (b). Si f = Irr(α, K), entonces 0 = σ(0) = σ(f (α)) = f (σ(α)) = f (β). O sea, β es raı́z del
irreducible f y, por tanto, Irr(β, K) = f = Irr(α, K).
Observación 2.30. Si α, β son trascendentes sobre K, hay un K-isomorfismo K(α) → K(β) con α 7→ β,
componiendo los isomorfismos que da la Proposición 2.22.
2. En R[X] consideramos el irreducible f (X) = X 2 +1, con raı́ces ±i. Entonces R[i] = C y el automorfismo
es σ(a + bi) = a − bi, o sea la conjugación compleja estándar.
De hecho, dado cualquier complejo α = a + bi con b 6= 0, se tiene claramente R[α] = C y de nuevo es
la conjugación estándar el automorfismo que lleva una raı́z a la otra.
Este anillo K[S] (que incluye el caso K[α1 , . . . , αn ] cuando S es finito) es un dominio contenido en L,
por lo que también lo está su cuerpo de fracciones. Este cuerpo de fracciones se denota por K(S) y es:
La intersección de todos los subcuerpos de L que contienen a K y a S (o que contienen a K ∪ S).
El menor subcuerpo de L que contiene a K y a S.
El conjunto de todos los cocientes de expresiones polinómicas (con denominador no nulo) de elementos
de S con coeficientes en K.
La unión dirigida ∪{α1 ,...,αk }⊂S K(α1 , . . . , αk ).
Las interpretaciones como “el menor subcuerpo que contiene a. . . ” permiten deducir que:
Si S1 y S2 son subconjuntos de L, entonces K(S1 ∪ S2 ) = K(S1 )(S2 ), y en consecuencia:
K(α1 , . . . , αn ) = K(α1 , . . . , αm )(αm+1 , . . . , αn ).
Si E1 y E2 son cuerpos intermedios en K ⊂ L, entonces el compuesto E1 E2 = K(E1 )(E2 ) = E1 (E2 ).
L = K(α1 , . . . , αn )
Proposición 2.33. Para una extensión K ⊂ L, las condiciones siguientes son equivalentes:
(a) K ⊂ L es finita.
(b) K ⊂ L es finitamente generada y algebraica.
(c) K ⊂ L es f.g. por elementos algebraicos, o sea L = K(α1 , . . . , αn ) con los αi ∈ L algebraicos sobre K.
Demostración. (a) ⇒ (b) Ya sabemos que K ⊂ L es algebraica (Ejemplos 2.20). Además hay una base
{α1 , . . . , αn } de L como K-espacio vectorial, y claramente L = K(α1 , . . . , αn ).
(b) ⇒ (c) Obvio.
(c) ⇒ (a) Inducción en n; el caso n = 1 es (2.24). En general, K ⊂ K(α1 ) es finita por (2.24), y como
α2 , . . . , αn son algebraicos sobre K(α1 ) al serlo sobre K, la hipótesis de inducción nos dice que
es finita. Como la propiedad de ser finita es multiplicativa en torres, se tiene que K ⊂ L es finita.
Proposición 2.34. Sean K ⊂ L una extensión y S un subconjunto de L cuyos elementos son algebraicos
sobre K. Entonces K ⊂ K(S) es una extensión algebraica.
Proposición 2.35. Dada una extensión K ⊂ L, el conjunto K L formado por todos los elementos de L que
son algebraicos sobre K es un cuerpo.
Observación 2.37. La extensión Q ⊂ A = QC es algebraica pero no es finita3 (ni por tanto finitamente
generada, por 2.33), pues para cada primo p, como el polinomio ciclotómico X p−1 +X p−2 +· · ·+X +1 ∈ Q[X]
es irreducible sobre Q (1.25), si ξ es una raı́z compleja de este polinomio se tiene que
[A : Q] = [A : Q(ξ)][Q(ξ) : Q] = [A : Q(ξ)](p − 1) ≥ p − 1
3
Si L es un subcuerpo de C tal que Q ⊂ L es finita, se dice que L es un cuerpo de números algebraicos, en contraposición
a el cuerpo A de los números algebraicos. En este caso la extensión Q ⊂ L es algebraica y por tanto L ⊂ A. El estudio de estos
cuerpos, y más concretamente el de ciertos subanillos suyos, es fundamental en la Teorı́a de Números Algebraicos.
Proposición 2.38. Las propiedades de las extensiones “ser finita”, “ser algebraica” y “ser finitamente
generada” son multiplicativas en torres.
Demostración. Para “ser finita” ya lo sabemos (2.6), y la demostración para “ser finitamente generada”
requiere de resultados que no serán objeto de estudio en este curso.
Los ai son algebraicos sobre K (por estar en L), luego K ⊂ L′ = K(a0 , . . . , an−1 ) es finita (2.33). Además
α es raı́z de f (X) ∈ L′ [X], luego es algebraico sobre L′ y por tanto L′ ⊂ L′ (α) es finita. En consecuencia
K ⊂ L′ (α) es finita (2.6) y por consiguiente algebraica; en particular, α es algebraico sobre K.
Proposición 2.39. Las propiedades de las extensiones “ser finita”, “ser algebraica”, “ser finitamente ge-
nerada” y “ser simple” son estables por levantamientos.
L (P )
K LM K′
(P ) M
Además, como “finita = algebraica + f.g” (2.33), no hará falta verlo para “ser finita”.
Si K ⊂ M es algebraica, los elementos de M son algebraicos sobre L (al serlo sobre K), por lo que
L ⊂ L(M ) es algebraica (2.34).
LM = LK(α1 , . . . , αn ) = L(α1 , . . . , αn )
2.4. Problemas
2-1. Si K y L son cuerpos entre los que existe un homomorfismo de anillos4 f : K → L, prueba que ambos
tienen el mismo subcuerpo primo P (que será Q o Zp según la caracterı́stica), y que f es un P -encaje.
√ √
2-2. Sean d, c enteros no cuadrados. Prueba que Q( d) = Q( c) si y solo si dc es un cuadrado.
2-3. Sea β una raı́z del irreducible X 3 + X + 1 ∈ Z2 [X] en cierta extensión de Z2 . Se pide:
2-7. Si α es una raı́z real de X 3 + 3X 2 − 3X + 3, expresa en términos de la base {1, α, α2 } los elementos
α5 , α4 + α + 2 y (α + 1)−1 .
1 7
2-8. Racionaliza las expresiones √ √
3
y √ √ .
1+ 3
2+ 22 1+ 2+ 42
4
Recuérdese que los homomorfismos de anillos llevan el uno al uno.
2-9. Para p, q ∈ N primos distintos, demuestra que el polinomio f (X) = X 4 − 2(p + q)X 2 + (p − q)2 tiene
√ √ √ √ √ √
cuatro raı́ces reales (± p ± q) y que es irreducible en Q[X]. Deduce que Q( p, q) = Q( p + q).
2-10. Sea K un cuerpo de caracterı́stica distinta de dos, X e Y dos indeterminadas y L = K(X, Y ). Prueba
√ √ √ √
que L( X, Y ) = L( X + Y ). ¿Puede decirse lo mismo si car(K) = 2?
2-11. Si f ∈ K[X] es irreducible con gr(f ) ≥ 2, demuestra que f no tiene raı́ces en ninguna extensión finita
L de K cuyo grado [L : K] sea coprimo con gr(f ).
2-12. Si α es algebraico sobre K y [K(α) : K] es impar, prueba que α2 es algebraico sobre K y K(α) = K(α2 ).
2-14. Demuestra que K ⊂ L es algebraica si y solo si todo anillo A comprendido entre K y L es un cuerpo.
2-16. Encuentra todos los automorfismos del cuerpo Q(ξ) donde ξ = eπi/3 .
2-18. Prueba que una extensión K ⊂ L es algebraica si y solo si para todo cuerpo intermedio E se tiene que
todo K-encaje σ : E → E es un automorfismo de E.
2-19. Prueba que la clausura algebraica de la extensión K ⊂ K(X1 , . . . , Xn ) es K, o sea, que todo elemento
de K(X1 , . . . , Xn ) que no pertenece a K es trascendente sobre K.
2-20. Sea u = X 3 /(X +1). Prueba que K(X) es una extensión algebraica de K(u). Determina [K(X) : K(u)].
2-22. Sean L y M cuerpos intermedios de una extensión K ⊂ F . Prueba las siguientes afirmaciones:
Uno de los problemas matemáticos más conocidos para el gran público es el de las construcciones con
regla y compás. ¿Quién no ha oı́do hablar de la cuadratura del cı́rculo como sinónimo de algo irrealizable?
Estos problemas tienen su origen en la matemática clásica griega. Por ejemplo, las propiedades geométri-
cas se deducen mediante construcciones con regla y compás en los Elementos de Euclides (≈ 300 a.C.), que
recopilan prácticamente todo el saber matemático de su época.
Aunque no están del todo claras las razones por las que los matemáticos griegos eligieron para sus
construcciones geométricas la regla y el compás, una hipótesis razonable es que, conscientes de la necesidad de
demostraciones rigurosas pero carentes de la herramienta algebraica apropiada, optasen por utilizar aquellos
instrumentos que, además de tener un uso muy sencillo, menos indujeran a error en los razonamientos;
dichos instrumentos los encontraron en la regla (no marcada) y el compás.
La geometrı́a griega clásica alcanzó un nivel considerable, pero algunos de los problemas surgidos no
pudieron ser resueltos por los griegos ni por sus sucesores durante siglos. Los más famosos son los siguientes
(en todos los casos, “construir” quiere decir “construir con compás y regla no marcada”):
Cuadratura del cı́rculo: Construir un cuadrado de área igual a la de un cı́rculo dado (construido).
Duplicación del cubo: Construir un cubo de volumen doble del de un cubo dado.
Estos problemas tuvieron que esperar dos milenios para ser resueltos. En 1837, Pierre Laurent Wantzel
(1814-1848) obtuvo una caracterización algebraica de los puntos que se podı́an construir con regla y compás1
que resolvı́a los tres últimos, usando los resultados de 1796 de Carl Friedrich Gauss (1777-1855) sobre la
construcción de polı́gonos regulares con regla y compás; el primero tuvo que esperar a 1882, cuando Ferdinand
Lindemann (1852-1939) demostró la trascendencia del número π.
1
Lorenzo Mascheroni (1750-1800), profesor de la Universidad de Pavı́a, escribió en 1797 un libro, Geometria del compasio,
dedicado a estudiar qué construcciones geométricas son posibles usando solamente el compás. En su teorema fundamental
demuestra que todas las construcciones posibles con regla (no marcada) y compás son también posibles utilizando
únicamente el compás. Mucho más tarde, en 1928, fue descubierto en una librerı́a de viejo de Copenhague un libro de 1672, del
matemático danés Georg Mohr (1640-1697), titulado Euclides Danicus, en el que ya se demostraba el resultado de Mascheroni.
Hoy en dı́a este teorema se conoce como el Teorema de Mohr-Mascheroni.
44 Construcciones con regla y compás
En este capı́tulo se formaliza el concepto de construcción con regla y compás y se estudian los problemas
clásicos en el contexto de la teorı́a de cuerpos, que ha servido para darles su resolución definitiva.
La idea es partir de un conjunto B de puntos (los datos conocidos) para ir obteniendo nuevos puntos a
partir de ellos utilizando dos tipos de construcciones, consistentes en trazar la recta que pasa por dos de los
puntos y en trazar la circunferencia centrada en uno de los puntos y con radio la distancia entre dos de ellos.
Los nuevos puntos se obtendrán como intersección de las rectas y las circunferencias construidas de esta
forma a partir de los puntos de B y de los que se vayan obteniendo a partir de estos.
Una formulación precisa de estas ideas es:
Definición 3.1. Sean R2 el plano euclı́deo y B ⊂ R2 un conjunto con al menos dos puntos. Un punto P ∈ R2
es constructible (con regla y compás) en un paso a partir de B si se obtiene como intersección de:
Y un punto Q ∈ R2 es constructible (con regla y compás) a partir de B si existe una sucesión finita
de puntos P1 , . . . , Pn = Q tal que cada Pi es constructible en un paso a partir de B ∪ {P1 , . . . , Pi−1 }.
En adelante, el conjunto B constará de dos puntos, B = {O, I}, lo que corresponde a fijar una unidad
de medida. Los puntos constructibles a partir de B = {O, I} serán puntos constructibles, sin necesidad
de hacer mención expresa del conjunto B.
Una recta es constructible si pasa por dos puntos constructibles, y una circunferencia es construc-
tible si su centro es constructible y su radio es la distancia entre dos puntos constructibles (en particular,
si son constructibles su centro y un punto por el que pasa).
Cuidado: el hecho de que una recta o una circunferencia sea constructible no significa que lo sean todos
sus puntos, solo los que son intersección de este tipo de rectas o circunferencias.
Las técnicas elementales de dibujo técnico proporcionan una herramienta apropiada para construir con
regla y compás algunos elementos de la geometrı́a plana que nos serán de utilidad en el desarrollo de este
tema. El siguiente resultado es un ejemplo de esta situación.
Proposición 3.2. Si ℓ es una recta constructible (que pasa por dos puntos constructibles A 6= B) y P es
un punto constructible, la recta perpendicular a ℓ por P es constructible.
−→ −→
Usando esto, a partir de B = {O, I} se puede construir un punto J tal que R = (O; {OI, OJ}) es un
referencial ortonormal de R2 . Pondremos P (r, s) para indicar que las coordenadas de P en R son (r, s).
Esto permite introducir la siguiente noción, que relaciona los problemas geométricos clásicos con la teorı́a
de extensiones de cuerpos:
Definición 3.3. Un número real r es un número constructible si es constructible el punto P (r, 0).
El conjunto de los números reales constructibles se denotará por C.
Proposición 3.4. Un punto P (r, s) es constructible si y solo si los números reales r y s son constructibles.
√
Teorema 3.5. C es un subcuerpo C de R cerrado para raı́ces cuadradas (si r ∈ R+ ∩ C, entonces r ∈ C).
O
En consecuencia, C es un subcuerpo de R. I(1, 0) (a, 0) (ab, 0)
r+1 r+1
de centro M ( 2 , 0) y radio OM = 2 es constructible, luego lo es su
punto de corte con la recta perpendicular a OI por (r, 0).
La coordenada y de este punto es el cateto asociado a una hipotenusa
r+1 √ √ b b b
Utilizando la ecuación de la recta que pasa por dos puntos y la de la circunferencia centrada en un punto
y cuyo radio es la distancia entre dos puntos conocidos, es inmediato probar:
Proposición 3.6. Sean C(a, b), P1 (a1 , b1 ) y P2 (a2 , b2 ) puntos del plano real con P1 6= P2 . Entonces:
(b) La circunferencia de centro C y radio P1 P2 tiene una ecuación de la forma x2 + y 2 − 2αx − 2βy + γ = 0
con α, β, γ ∈ Q(a, b, a1 , a2 , b1 , b2 ).
Se dispone ahora de las herramientas necesarias para probar el resultado siguiente, que proporciona una
caracterización de los números reales constructibles en términos de extensiones de cuerpos:
Teorema 3.7 (Wantzel, 1837). El número r ∈ R es constructible (r ∈ C) si y solo si existe una torre de
extensiones Q = L1 ⊂ L2 ⊂ · · · ⊂ Ln ⊂ R tal que r ∈ Ln y cada [Li+1 : Li ] vale 1 o 2.
Se puede suponer que β 6= 0, por lo que bi+1 = − β1 (αai+1 + γ) y sustituyendo en la ecuación de la circun-
ferencia se obtiene que ai+1 es raı́z de una ecuación de segundo grado con coeficientes en Li , por lo que
[Li+1 : Li ] vale 1 o 2.
Si Pi+1 se obtiene como intersección de dos circunferencias centradas en puntos de {P1 , . . . , Pi } y radios
determinados por dos de estos puntos, entonces las ecuaciones de tales circunferencias serán de la forma
)
x2 + y 2 − 2αx − 2βy + γ = 0
con α, β, γ, α′ , β ′ , γ ′ ∈ Li
x2 + y 2 − 2α′ x − 2β ′ y + γ ′ = 0
este sistema es equivalente a
)
x2 + y 2 − 2α′ x − 2β ′ y + γ ′ = 0
con α, β, γ, α′ , β ′ , γ ′ ∈ Li
2(α′ − α)x + 2(β ′ − β)y + (γ ′ − γ) = 0
y, de forma análoga al caso anterior, se obtiene que [Li+1 : Li ] vale 1 o 2.
Para el recı́proco basta ver que dados cuerpos L ⊂ L′ ⊂ R con L ⊂ C y [L′ : L] = 2, se tiene L′ ⊂ C,
pues aplicando esto a cada subextensión de la torre del enunciado (y partiendo de L1 = Q ⊂ C) se obtiene
Ln ∈ C y por tanto r ∈ C.
Supongamos pues la situación propuesta y veamos que L′ ⊂ C. Si α ∈ L′ , como L ⊂ L′ tiene grado
2 y L(α) es un cuerpo intermedio, por (2.7) se tiene o bien L(α) = L, en cuyo caso α ∈ L ⊂ C, o bien
L(α) = L′ . En este caso Irr(α, L) es un polinomio de grado 2 con coeficientes en C (pues L ⊂ C), digamos
X 2 + bX + c con b, c ∈ C, y se tiene b2 − 4c ≥ 0 porque α ∈ L′ ⊂ R. La Proposición 3.5 nos dice entonces
√
que d = b2 − 4c ∈ C y por tanto α = (−b ± d)/2 ∈ C.
Como consecuencia del teorema de Wantzel y la fórmula de los grados se deduce el resultado siguiente.
El recı́proco del criterio de Wantzel es, en general, falso como prueba el ejemplo siguiente:
Ejemplo 3.9. El polinomio X 4 − X − 1 tiene una raı́z real r con [Q(r) : Q] = 4 que no es constructible.
El polinomio es irreducible puesto que lo es en Z2 [X], por lo que sus raı́ces verifican [Q(r) : Q] = 4, pero
tenemos que asegurar que hay una real y no constructible.
Dado que los irreducibles de R[X] son de grado uno o dos, el polinomio se podrá expresar como
X 4 − X − 1 = (X 2 + aX + b)(X 2 + a′ X + b′ ) con a, b, a′ , b′ ∈ R
por lo que
a + a′ = 0 b + b′ + aa′ = 0 ab′ + ba′ = −1 bb′ = −1
↓ ↓ ↓
a′ = −a b+ b′ = a2 a(b − b′ ) = 1
Como a y a′ son opuestos y no nulos (por la tercera igualdad), uno de ellos es positivo, y por simetrı́a
podemos suponer que a > 0.
Las igualdades segunda y cuarta nos dicen que b y b′ son las raı́ces de T 2 − a2 T − 1 ∈ R[X], y como
b > b′ (por la tercera igualdad, al ser a > 0) se tiene
√ √
a2 + a4 + 4 ′ a2 − a4 + 4
b= y b =
2 2
de donde
p p
b − b′ = a4 + 4 ⇒ a a4 + 4 = a(b − b′ ) = 1 ⇒ a2 (a4 + 4) = 1
y en consecuencia a2 es raı́z del polinomio T 3 + 4T − 1, que es irreducible en Q[X] (grado 3 sin raı́ces). Por
el criterio de Wantzel, a2 no es constructible y por tanto tampoco lo es a.
y por lo tanto tiene dos raı́ces reales, que son raı́ces del polinomio inicial y al menos una de ellas no es
constructible, pues de lo contrario lo serı́a su suma, que es a (el opuesto del coeficiente de X).
El criterio de Wantzel permite dar respuesta negativa a tres de los problemas clásicos de construcciones
con regla y compás; el de caracterizar los polı́gonos regulares constructibles se resolverá más tarde.
√
Duplicación del cubo. Si el cubo dado tiene lado 1, se tratarı́a de ver si 3 2 es constructible, pero
su irreducible X 3 − 2 (Eisenstein) tiene grado 3 y por tanto no es constructible.
Trisección del ángulo. Claramente, un ángulo α es constructible cuando lo es el punto (cos α, sen α),
o sea cuando lo es el número cos α. Por tanto, el ángulo de π/3 radianes es constructible.
Pero vemos que el de π/9 no lo es: En general cos(3α) = 4 cos3 (α) − 3 cos(α) y para α = π/9 vemos
que cos(π/9) es raı́z de 4X 3 − 3X − 1/2, que es irreducible en Q[X] (grado 3 sin raı́ces), por lo que
[Q(cos(π/9)) : Q] = 3 y en consecuencia cos(π/9) no es constructible.
√
Cuadratura del cı́rculo. Si el cı́rculo tiene radio 1, se trata de ver si π es constructible, pero ni
siquiera es algebraico (lo serı́a su cuadrado, π).
Demostración. Sea K un subcuerpo de R cerrado para raı́ces cuadradas. Se trata de ver que C ⊂ K.
Si α ∈ C, por el teorema de Wantzel existe una torre de extensiones Q = L1 ⊂ L2 ⊂ · · · ⊂ Ln ⊂ R con
cada Li ⊂ Li+1 de grado 2 y con α ∈ Ln . Como Q ⊂ K por ser el subcuerpo primo, basta ver que si L ⊂ K
y L′ es una extensión de grado 2 de L con L′ ⊂ R, entonces L′ ⊂ K.
Como [L′ : L] = 2, todo elemento de L′ \ L es raı́z de un irreducible f (X) = X 2 + bX + c con b, c ∈ L,
cuyo discriminante b2 − 4c es positivo ya que L′ ⊂ R. Como b2 − 4c ∈ L ⊂ K y K es cerrado para raı́ces
√
cuadradas, resulta que b2 − 4c ∈ K y por tanto las raı́ces de f (X) pertenecen a K, por lo que L′ ⊂ K.
3.2. Problemas
3-1. Revisa en una referencia adecuada las siguientes construcciones usuales que se hacen en dibujo técnico,
y observa que son realizables con regla y compás:
3-3. Por el ejercicio anterior, el ángulo de 72 (2π/5 radianes) es constructible. Usando que los ángulos se
pueden bisecar y trasladar (y por tanto, restar) con regla y compás, demuestra que el ángulo de 24 es
constructible, y por tanto el de 72 es trisecable y el pentadecágono regular es constructible.
3-4. ¿Es posible construir con regla y compás un polı́gono regular de nueve lados?
3-5. Demuestra que un ángulo constructible α se puede trisecar con regla y compás si y solo si el polinomio
4X 3 − 3X − cos α tiene una raı́z en Q(cos α).
Definición 4.1. Sea K ⊂ L una extensión de cuerpos. Se dice que un polinomio no nulo f ∈ K[X] se
descompone completamente en L de K si existen c ∈ K, α1 , . . . , αn ∈ L tales que
f (X) = c (X − α1 ) · · · (X − αn )
Obviamente se tiene n = gr(f ), y esta definición incluye el caso n = 0 con f (X) = c.
Los siguientes resultados son evidentes; el último reduce el caso en el que P es finito al “caso unitario”:
Si L es una extensión de K en la que f ∈ K[X] tiene todas sus raı́ces α1 , . . . , αn , entonces K(α1 , . . . , αn )
es un cuerpo de descomposición de f sobre K.
5. El cuerpo de descomposición de f (X) = X n −1 sobre Q es Q(ξ) con ξ = e2πi/n , pues las raı́ces de f son
1, ξ, ξ 2 , . . . , ξ n−1 y Q(1, ξ, ξ 2 , . . . , ξ n−1 ) = Q(ξ). Se obtiene el mismo cuerpo si cambiamos el polinomio
por (X n − 1)/(X − 1) = X n−1 + · · · + X 2 + X + 1, o por Irr(ξ, Q).
Existencia y unicidad
Los dos resultados siguientes garantizan la existencia y la unicidad salvo isomorfismos de los cuerpos de
descomposición de conjuntos finitos (ya sabemos que basta con considerar conjuntos unitarios).
Proposición 4.4. Si K es un cuerpo y f ∈ K[X] tiene grado n ≥ 0, existe un cuerpo de descomposición L
de f sobre K y se verifica [L : K] ≤ n!.
Demostración. Por inducción sobre n = gr(f ), con el caso n = 0 evidente pues entonces L = K.
Supongamos n > 0 y el resultado cierto para polinomios de grado n − 1. Por el teorema de Kronecker
(2.15) existe una extensión L′ de K en la que f tiene una raı́z α, y por (2.25) se tiene [K(α) : K] ≤ n.
Además se tiene f (X) = (X − α)g(X) con g ∈ K(α)[X] y gr(g) = n − 1. Por la hipótesis de inducción
existe un cuerpo de descomposición L de g sobre K(α) con [L : K(α)] ≤ (n − 1)!. Por tanto
y L es un cuerpo de descomposición de f sobre K pues está generado sobre K por α y por las raı́ces de g,
o sea por las raı́ces de f .
En cuanto a la unicidad:
Para n > 0, sea α1 una raı́z de f1 en L1 , que será raı́z de algún factor g1 de f1 irreducible en K1 [X];
entonces g2 = σ(g1 ) será un factor irreducible de f2 en K2 [X], y por tanto tendrá una raı́z α2 en L2 .
En estas condiciones, (2.28) nos da un isomorfismo σ̄ : K1 (α1 ) → K2 (α2 ) con σ̄(α1 ) = α2 y con σ̄ |K1 = σ,
por lo que también σ̄ : K1 (α1 )[X] → K2 (α2 )[X] extiende a σ : K1 [X] → K2 [X].
Por otra parte, f1 (X) = (X − α1 )h1 (X) con h1 ∈ K1 (α1 )[X], y poniendo h2 = σ̄(h1 ) ∈ K2 (α2 )[X] se
tiene
f2 = σ(f1 ) = σ̄(f1 ) = (X − α2 )h2 (X)
Además gr(h1 ) = gr(h2 ) = n − 1, y claramente Li es un cuerpo de descomposición de hi sobre Ki (αi ). Ası́,
la hipótesis de inducción nos da un isomorfismo τ : L1 → L2 que extiende a σ̄, y por tanto extiende a σ.
Los cuerpos finitos admiten una descripción muy precisa que vemos a continuación. En este contexto se
trabaja obviamente en caracterı́stica prima p, donde se tiene:
Demostración. Basta con ver la igualdad inicial, pues claramente a 7→ ap conserva el 1 y los productos.
p p!
El coeficiente binomial = es un número entero, y si 0 < k < p entonces el primo p
k k! · (p − k)!
aparece en su numerador pero no en su denominador, por lo que ese entero es múltiplo de p.
Por tanto, en el desarrollo del binomio (a + b)p , todos los sumandos “salvo los de los extremos” son nulos
en caracterı́stica p, y ası́ (a + b)p = ap + bp .
Teorema 4.8. Si K es un cuerpo finito entonces su cardinal es una potencia de primo, y para cada potencia
de primo existe un único cuerpo de ese cardinal. Más detalladamente:
3. Para cada potencia de primo pn , existe un cuerpo (único salvo isomorfismos) de ese cardinal.
Teorema 4.9. Las siguientes condiciones son equivalentes para un cuerpo K. Cuando se cumplen se dice
que K es algebraicamente cerrado:
Demostración. (a) ⇒ (b) ⇒ (c) ⇒ (d) son obvias (usando que K[X] es un DFU y tomando K0 = K).
(d) ⇒ (e) Se trata de ver que si K ⊂ L es algebraica entonces K = L. Notamos primero que, como
K0 ⊂ K es algebraica, también lo es K0 ⊂ L. Sea ahora α ∈ L; entonces existe Irr(α, K0 ) y se descompone
completamente en K, de donde se obtiene que α ∈ K; por tanto K = L.
(e) ⇒ (a) Si f ∈ K[X] no es constante, por (2.15) existe una extensión de K en la que f tiene una raı́z α.
Entonces K ⊂ K(α) es algebraica, y por la hipótesis se tiene K = K(α), o sea α ∈ K.
Definición 4.10. Una extensión L de un cuerpo K se dice una clausura algebraica de K si la extensión
K ⊂ L es algebraica y L es algebraicamente cerrado.
Proposición 4.11. Sea K ⊂ L una extensión con L algebraicamente cerrado. Entonces K L (la clausura
algebraica de K en L) es una clausura algebraica de K.
Demostración. Sabemos que K ⊂ K L es algebraica; falta ver que todo polinomio no constante f ∈ K L [X]
tiene una raiz en K L . Al ser L algebraicamente cerrado y f ∈ L[X], sabemos que f tiene una raı́z α en L.
Entonces α ∈ L es algebraico sobre K L , luego la extensión K L ⊂ K L (α) es algebraica. Pero también lo es
K ⊂ K L , por lo que lo es K ⊂ K L (α). En consecuencia, α ∈ L es algebraico sobre K, o sea α ∈ K L .
En algunas de las demostraciones que siguen usaremos (sin demostrarlo) el siguiente resultado, conocido
como Lema de Zorn, que es equivalente1 al Axioma de Elección y requiere dos definiciones previas:
En un conjunto (parcialmente) ordenado A, una cadena es un subconjunto totalmente ordenado. Se
dice que A es inductivo si para toda cadena B en A existe una cota superior de B en A.
Teorema 4.12 (Lema de Zorn). Todo conjunto ordenado no vacı́o e inductivo posee un elemento maximal.
(X − α, 0) + (X − α′ , 0) = (X − (α + α′ ), 0) (X − α, 0) · (X − α′ , 0) = (X − αα′ , 0)
e es isomorfismo. Vamos a construir una clausura algebraica de K
yu:K→K e dentro de M.
Notemos que el isomorfismo u : K → K e induce un isomorfismo K[X] → K[Te ] que lleva X a T dado por
X X
f (X) = ai X i ∈ K[X] 7→ fe(T ) = e ]
(X − ai , 0)T i ∈ K[T
Ahora vamos a considerar un conjunto ordenado Ω, que será no vacı́o e inductivo, y probaremos que un
e que buscamos.
maximal de Ω, que existe por el Lema de Zorn, es la clausura algebraica de K
El conjunto Ω está formado por los subconjuntos L de M que (con ciertas operaciones) son un cuerpo
e tal que, para todo z = (f (X), n) ∈ L, se tiene que fe(z) = 0; y su relación de orden es
extensión de K
Y el orden es inductivo, pues para cada cadena en Ω podemos tomar como cota superior su unión con
las operaciones evidentes: dados dos elementos de la unión habrá un elemento de la cadena que los contenga
a ambos, y se operan en ese conjunto.
e
Sea entonces M un elemento maximal de Ω, y veamos que M es una clausura algebraica de K.
e ⊂ M es algebraica, pues z = (f (X), n) ∈ M es raı́z de fe(T ) ∈ K[T
La extensión K e ], por lo que falta
probar que M es algebraicamente cerrado.
1
O sea, en presencia de los axiomas usuales de la teorı́a de conjuntos de Zermelo-Fraenkel, añadir uno de ellos como axioma
permite deducir el otro como teorema (pero ninguno se deduce de los otros axiomas).
Esta aplicación φ es inyectiva, por lo que induce una biyección F → F ′ = φ(F ). Este F ′ que es un subconjunto
de M con M = φ(M ) ⊂ φ(F ) = F ′ , y en él se pueden definir operaciones, por transporte de estructura de
las de F , con las que F ′ es un cuerpo y φ : F → F ′ un M -isomorfismo. Se tiene entonces F ′ ∈ Ω, M ≤ F ′ y
M 6= F ′ , lo que contradice la maximalidad de M y prueba que M es algebraicamente cerrado.
Corolario 4.14. Si K es un cuerpo, para cada conjunto P de polinomios no nulos de K[X] existe un cuerpo
de descomposición de P sobre K.
Observación 4.15. Si P ⊂ K[X] \ 0 y K(S) es como en el corolario anterior, entonces K(S) es el único
cuerpo de descomposición de P sobre K contenido en K. Ası́, para probar la unicidad salvo K-isomorfismos
del cuerpo de descomposición de P sobre K, será suficiente probar que dos clausuras algebraicas de K son
K-isomorfas, como veremos en (4.19), y utilizar el resultado siguiente.
alg
Teorema 4.17. Sea σ : K → M un homomorfismo de cuerpos con M algebrai- K L
camente cerrado. Para cada extensión algebraica K ⊂ L existe un homomorfismo σ̄
σ
de cuerpos σ̄ : L → M tal que σ̄ |K = σ. M =M
Demostración. Sea Ω el conjunto formado por los pares (L′ , σ ′ ) con L′ un cuerpo intermedio de la
extensión K ⊂ L y σ ′ : L′ → M un homomorfismo de cuerpos tal que σ ′ |K = σ. Este conjunto no es vacı́o,
pues contiene a (K, σ) ∈ E, y podemos ordenarlo por
Con este orden Ω es inductivo, pues dada una cadena {(Li , σi )} en Ω podemos tomar como cota superior
(L′ , σ ′ ),
donde L′ = ∪Li con las operaciones evidentes (dos elementos de la unión estarán en un mismo
cuerpo de la cadena, y se operan en ese cuerpo) y σ ′ : L′ → M también se define de forma evidente (si
α ∈ L′ está en Li , se define σ ′ (α) = σi (α), que no depende del ı́ndice i).
Por el Lema de Zorn, Ω tendrá un elemento maximal (L̂, σ̂), y basta entonces ver que L̂ = L.
Por reducción al absurdo, suponemos que existe α ∈ L \ L̂. K L
Como K ⊂ L es algebraica, lo es L̂ ⊂ L. Sea f = Irr(α, L̂).
Como M es algebraicamente cerrado, σ̂(f ) tendrá una raı́z β en M , L̂ L̂(α)
y aplicando la Proposición 2.28 al isomorfismo σ̂ : L̂ → σ̂(L̂), existirá σ̂ ϕ′
un isomorfismo ϕ′ : L̂(α) → σ̂(L̂)(β) tal que ϕ′ |L̂ = σ̂ y ϕ′ (α) = β.
σ̂(L̂) σ̂(L̂)(β)
Componiendo ϕ′ con la inclusión de σ̂(L̂)(β) en M , se obtiene un
homomorfismo ϕ : L̂(α) → M tal que ϕ |K = σ y (L̂(α), ϕ) > (L̂, σ̂), σ
en contradicción con que (L̂, σ̂) es maximal de Ω. M
Esta contradicción prueba que L̂ = L.
El corolario anterior permite hablar de “la” clausura algebraica de K, que se denotará por K.
Demostración. Si Li es una clausura algebraica de Li , por la Proposición 4.16, Li es también una clausura
algebraica de Ki . Por 4.19, σ se extiende a un isomorfismo σ : L1 → L2 , por lo que σ(L1 ) es un cuerpo de
descomposición de σ(P1 ) = σ(P1 ) = P2 ; pero, por la Observación 4.15, ha de ser σ(L1 ) = L2 , por lo que
σ ′ = σ|L1 es el isomorfismo buscado.
Corolario 4.21. Para una extensión de cuerpos K ⊂ L, las siguientes condiciones son equivalentes:
1. L es la clausura algebraica de K.
2. L es el cuerpo de descomposición sobre K de todos los polinomios no nulos de K[X].
3. L es el cuerpo de descomposición sobre K de todos los polinomios irreducibles de K[X].
4.4. Problemas
4-1. Sea L un cuerpo de descomposición de f ∈ K[X] sobre K. Demuestra que si M es una extensión de K
admisible con L, entonces LM es un cuerpo de descomposición de f sobre M .
4-3. Demuestra que si K ⊂ L es una extensión de grado 2, entonces L es el cuerpo de descomposición sobre
K de un polinomio de K[X].
4-4. Calcula K y determina [K : Q], donde K es un cuerpo de descomposición del polinomio dado sobre Q:
a) X 4 − 1.
b) X 4 + 1.
c) X 4 + 4.
d ) X 4 − X 2 + 4.
e) X p − 1, donde p es primo.
f ) X 3 − a, donde a ∈ Q no es un cubo de un número racional.
g) X 3 − 3X + 1 (prueba que, si θ es una raı́z, entonces θ2 − 2 también lo es).
Cuerpos finitos
4-6. Prueba que, salvo para pn = 2, la suma de todos los elementos de Fpn es cero.
4-7. Demuestra que la aplicación Fpn → Fpn dada por x 7→ xp es biyectiva, o sea que cada elemento de Fpn
tiene exactamente una raı́z p-ésima en Fpn .
4-8. (Extra3 ) Prueba que todo elemento de un cuerpo finito K se expresa como suma de dos cuadrados.
4-9. Para cualquier cuerpo K demuestra (adaptando la prueba para Z) que en K[X] hay una cantidad
infinita de irreducibles mónicos, y deduce que si K es finito entonces:
4-10. a) Demuestra que si m no divide a n entonces Fpn no contiene un subcuerpo con pm elementos;
dicho de otro modo, no hay extensiones Fpm ⊂ Fpn .
b) Demuestra4 que sin m divide a n entonces Fpn contiene un único subcuerpo con pm elementos.
c) Deduce de nuevo que ningún cuerpo finito es algebraicamente cerrado.
2
Si f no es irreducible, piensa en los coeficientes binomiales.
3
Si car(K) = 2 todo elemento es un cuadrado. Si car(K) 6= 2, el homomorfismo de grupos K ∗ → K ∗ tiene núcleo {±1},
luego su imagen C (consistente en los cuadrados no nulos) tiene ı́ndice 2, y para a 6∈ C se tiene K ∗ = C ∪ aC.
4
Prueba que si a, b, k ∈ Z+ verifican a = bk , entonces X b − X divide a X a − X.
4-11. (Extra) Sea q = pn y sea m ∈ N no divisible por p. Prueba que si L es el cuerpo de descomposición de
X m − 1 sobre Fq , entonces [L : Fq ] es el orden de q en Z∗m (el menor entero positivo k tal que m|q k − 1).
4-14. a) Comprueba que los únicos irreducibles mónicos de grado 2 en Z3 [X] son
f = X2 + 1 g = X2 + X − 1 h = X2 − X − 1
Extensiones normales
Definición 5.1. Se dice que la extensión K ⊂ L es normal, o que L es normal sobre K, si es algebraica
y todo polinomio irreducible de K[X] que tenga una raı́z en L tiene de hecho todas sus raı́ces en L (o sea,
se descompone completamente en L[X]).
Claramente, en la definición basta con considerar irreducibles que sean mónicos y de grado ≥ 2. De hecho
podemos limitarnos a los de grado ≥ 3 por la siguiente observación:
Si f (X) = X n + b1 X n−1 + · · · ∈ K[X], sus raı́ces (en cualquier sitio) verifican α1 + · · · + αn = −b1 ∈ K.
Por tanto, si α1 , . . . , αn−1 ∈ L para cierta extensión L de K, entonces también αn ∈ L.
1. Si K es una clausura algebraica de K, entonces la extensión K ⊂ K es normal pues todos los polinomios
de K[X] tienen todas sus raı́ces en K.
2. Si [K : L] = 2 entonces K ⊂ L es normal, pues los irreducibles de K[X] con raı́ces en L deben tener
grado 1 y 2, y para los de grado 2 su otra raı́z también está en L, por la observación anterior.
√ √
3. Q ⊂ Q( 3 2) no es normal, pues el irreducibe X 3 − 2 tiene solo una de sus tres raı́ces en Q( 3 2).
√ √
4. Análogamente, Q ⊂ Q( 4 2) no es normal pues dos de las raı́ces de X 4 − 2 no están en Q( 4 2).
√ √ √
Como Q ⊂ Q( 2) y Q( 2) ⊂ Q( 4 2) sı́ son normales, al ser de grado 2, vemos que la propiedad “ser
normal” no es multiplicativa en torres.
El siguiente resultado (ya visto en el Problema 18) resulta útil en muchas situaciones.
Lema 5.3. Si K ⊂ L es algebraica, entonces todo K-encaje σ : L → L es un K-automorfismo.
Demostración. Como todo homomorfismo de cuerpos es inyectivo, se trata de ver que σ es suprayectivo.
Dado α ∈ L, sea f = Irr(α, K) y sea R = {α = α1 , α2 , . . . , αm } el conjunto (finito) de todas las raı́ces de
f en L. Entonces (2.23) se tiene f = Irr(αi , K) para cada i, y por tanto (2.29) σ se restringe a una aplicación
σ : R → R que es inyectiva por serlo σ, y por tanto es suprayectiva al ser R finito. En consecuencia, α = α1
está en la imagen de σ, como querı́amos ver.
60 Extensiones normales y separables
Teorema 5.4. Si K ⊂ L es una extensión algebraica las siguientes condiciones son equivalentes:
(a) K ⊂ L es normal.
(b) L es el cuerpo de descomposición sobre K de cierto conjunto P ⊂ K[X] \ {0}.
(c) Para cada clausura algebraica K de K que contenga a L se tiene:
Todo K-encaje σ : L → K verifica σ(L) = L (luego σ puede verse como un K-automorfismo de L).
(d) Existe una clausura algebraica K de K que contiene a L para la que se cumple:
Todo K-encaje σ : L → K verifica σ(L) = L (luego σ puede verse como un K-automorfismo de L).
Demostración. (a) ⇒ (b) Como K ⊂ L es algebraica, para cada α ∈ L existe fα = Irr(α, K) ∈ K[X] y
podemos considerar P = {fα }α∈L ⊂ K[X]. Si β es raı́z de cierto fα entonces, por la normalidad, β ∈ L, de
modo que el conjunto R de todas las raı́ces de todos los polinomios de P verifica R ⊂ L. El otro contenido
es evidente y por tanto se tiene L = R = K(R), o sea L es el cuerpo de descomposición de P sobre K.
(b) ⇒ (c) Por el Lema 5.3, basta ver que σ(L) ⊂ L. A su vez, como L está generado por las raı́ces de los
polinomios de P, basta ver que para f ∈ P y cada α ∈ L raı́z de f , se tiene σ(α) ∈ L.
En estas condiciones, σ(α) es una raı́z en K de σ(f ). Pero f ∈ K[X] y σ|K = idK , luego σ(f ) = f y ası́
σ(α) es una raı́z en K de f . Por tanto σ(α) está en un cuerpo de descomposición sobre K de P contenido
en K, pero este es único (4.15) y por tanto es L. En consecuencia, σ(α) ∈ L.
(c) ⇒ (d) Basta con tomar una clausura algebraica de L, que los será también de K al ser K ⊂ L algebraica.
(d) ⇒ (a) Si f ∈ K[X] es irreducible con una raı́z α ∈ L y β es otra raı́z de f , hay que ver que β ∈ L.
Al ser K algebraicamente cerrado, se tiene β ∈ K, y por la Proposición 2.29 existe un K-isomorfismo
σ′ : K(α) → K(β) ⊂ K con σ ′ (α) = β. Como K(α) ⊂ L es algebraica puesto que K ⊂ L lo es, por
el Teorema 4.17, σ ′ se puede extender a un K-encaje σ : L → K. Por hipótesis se tiene σ(L) = L y ası́
β = σ ′ (α) = σ(α) ∈ σ(L) = L.
En el caso finito (que para extensiones algebraicas coincide con el finitamente generado) tenemos:
Corolario 5.5. Una extensión finita K ⊂ L es normal si y solo si L es el cuerpo de descomposición sobre
K de un polinomio de K[X].
√
Ejemplo 5.6. Sean α = 3 2 y L = Q(α). Como Q ⊂ L no es normal (5.2), existirá un Q-encaje σ : L → A
(donde A el cuerpo de los números algebraicos, la clausura algebraica de Q) cuya imagen no esté contenida
en L. Considerando una raı́z no-real de X 3 − 2, por ejemplo αω donde ω = e2π i/3 , la Proposición 2.28 nos
proporciona un isomorfismo σ : L → Q(αω) con σ(α) = αω, que compuesto con la inclusión Q(αω) → A
nos da el Q-encaje σ : L → A con σ(L) 6⊂ L que buscamos, pues αω ∈ σ(L) \ L.
La clase de las extensiones normales no es multiplicativa en torres, como vimos en los Ejemplos 5.2, pero
sı́ se verifica el siguiente resultado.
Demostración. Si L = K(A), con A el conjunto de las raı́ces de los polinomios de P, se tiene que
LM = M L = M K(A) = M (A). La última afirmación es entonces clara, por el Teorema 5.4 (y porque ya
sabemos que “ser algebraica” es estable por levantamientos).
Proposición 5.10. Sea {Li }i∈I una familia de extensiones admisibles de K. Si cada extensión K ⊂ Li es
normal, entonces lo es K ⊂ ∩i∈I Li .
Demostración. Si f ∈ K[X] irreducible tiene una raı́z en ∩i∈I Li entonces, como cada Li es normal sobre
K, las tiene todas en todos los Li y, por consiguiente las tiene todas en ∩i∈I Li .
Clausuras normales
El último resultado (“la normalidad se conserva por intersecciones”) permite ver que toda extensión
algebraica se puede ampliar a una “menor extensión normal”:
Definición 5.11. Dada una extensión algebraica K ⊂ L y una clausura algebraica L de L (que también lo
será de K), el conjunto Σ = {E | L ⊂ E ⊂ L y K ⊂ E normal} no es vacı́o pues contiene a L (5.2). Por
tanto podemos considerar el conjunto N = ∩E∈Σ E, llamado la clausura normal de L sobre K (en K).
2 y 4. Para cada α ∈ S, sea fα = Irr(α, K), que tiene todas sus raı́ces en N (pues al menos tiene a α y
K ⊂ N es normal). Entonces el conjunto R del enunciado satisface S ⊂ R ⊂ N , y por tanto
K ⊂ L = K(S) ⊂ K(R) ⊂ N
y como K ⊂ K(R) es normal por ser K(R) un cuerpo de descomposición sobre K, deducimos por el apartado 1
que N = K(R), y también se tiene obviamente N = L(R), de modo que N es un cuerpo de descomposición
sobre L del conjunto R, que por (4.20) es único salvo L-isomorfismos.
3. El “si” es cierto en general, y si K ⊂ L es finita entonces en 2 podemos tomar S finito, por lo que lo
es R. En consecuencia K ⊂ N es algebraica y finitamente generada, y por lo tanto finita (2.33).
El apartado 2 nos da un método para construir las clausuras normales en casos sencillos:
p √
Ejemplo 5.13. Dado α = 1 + 3, determinamos si la extensión Q ⊂ Q(α) es normal y, si no lo es,
calculamos su clausura normal N y el grado [N : Q].
√
Se tiene α2 = 1+ 3 y por tanto 3 = (α2 −1)2 = α4 −2α2 +1, por lo que α es raı́z de f (X) = X 4 −2X 2 −2.
Como f es irreducible (Eisenstein), deducimos que f = Irr(α, Q) y que [Q(α) : Q] = 4.
p√
Como f es bicuadrático, sus raı́ces se calculan fácilmente y son ±α y ±β, donde β = 3 − 1 i. Como
Q(α) ⊂ R y β 6∈ R, deducimos que la extensión Q ⊂ Q(α) no es normal.
√ √
Por el teorema anterior será N = Q(α, β) = Q(α, αβ) = Q(α, 2 i). En la torre Q ⊂ Q(α) ⊂ Q(α, 2 i),
√
la primera extensión tiene grado 4 (el grado de f = Irr(α, Q)) y la segunda tiene grado 2, pues 2 i es raı́z
de X 2 + 2, cuyas raı́ces no están en Q(α) porque no son reales. En definitiva, [N : Q] = 8.
Demostración. Acabamos de ver que K ⊂ N es finita. Por otra parte, si β es una raı́z en N de f entonces
es raı́z de cierto fj , luego existe un K-isomorfismo σ : K(αj ) → K(β) con σ(αj ) = β (2.29). Como N es el
cuerpo de descomposición de f sobre K(αj ) y sobre K(β), por (4.20) σ se extiende a un K-automorfismo
σ̄ : N → N . Entonces σ̄(L) es un subcuerpo de N , K-isomorfo a L, que contiene a σ̄(αj ) = σ(αj ) = β.
Ası́, para cada raı́z de f hemos encontrado un subcuerpo E de N que la contiene y es K-isomorfo a L.
Si E1 , E2 , . . . , Er son los cuerpos ası́ obtenidos, su compuesto E1 · · · Er es un subcuerpo de N que contiene
todas las raı́ces de f , o sea contiene a R, y por tanto coincide con N .
Definición 5.15. Sea K ⊂ L una extensión de cuerpos. Un polinomio f ∈ K[X] es separable si no tiene
raı́ces múltiples (en un cuerpo de descomposición sobre K, y por tanto en ninguno).
Un elemento α ∈ L es separable sobre K si es algebraico sobre K y f = Irr(α, K) es separable.
Una extensión algebraica K ⊂ L se dice separable si cada elemento de L es separable sobre K.
Un cuerpo K se dice perfecto si todo polinomio irreducible en K[X] es separable o, equivalentemente,
si toda extensión algebraica de K es separable sobre K.
Proposición 5.16. En caracterı́stica cero, todo polinomio irreducible es separable y por tanto todo cuerpo
es perfecto y toda extensión algebraica es separable.
Si car(K) = p 6= 0, un irreducible f ∈ K[X] es no-separable si y solo si f ∈ K[X p ].
Proposición 5.17. Los cuerpos de caracterı́stica cero, los cuerpos algebraicamente cerrados y los cuerpos
finitos son perfectos.
Si K es un cuerpo finito y K ⊂ L es una extensión algebraica, se trata de ver que cada α ∈ L es separable
sobre K. Como K ⊂ K(α) es finita, el cuerpo K(α) es finito, digamos con pn elementos. Entonces, por la
n
demostración de la Proposición 4.8, sabemos que α es raı́z del polinomio X p − X, que es separable (su
derivada vale −1), por lo que también lo será su divisor Irr(α, K). Por tanto, α es separable sobre K.
Demostración. En ambos casos Irr(α, E) divide a Irr(α, K) en E[X], por lo que si este último no tiene
raı́ces múltiples. tampoco las tendrá el primero. Esto prueba además la última afirmación sobre E ⊂ L, y
la que se hace sobre K ⊂ E es trivial.
Observación 5.19. En los próximos capı́tulos, nuestro estudio se centrará en cuerpos de caracterı́stica
cero, en los que las extensiones algebraicas son separables. En la sección siguiente extraemos los resultados
que aportan información significativa en caracterı́stica cero, y después hacemos un estudio más general de
la separabilidad que no será necesario en las aplicaciones posteriores.
1
Veremos que el recı́proco es cierto (5.31).
En estas condiciones (diagrama de la derecha), las restricciones de σ y τ a sus imágenes son isomorfismos,
luego σ(K) ⊂ τ (L) es algebraica y por tanto τ (L) está contenido en Ωσ(K) , que es una clausura algebraica
de σ(K). Por tanto, en la situación inicial podemos cambiar Ω por Ωσ(K) , o sea podemos suponer que Ω es
una clausura algebraica de σ(K).
Vamos a estudiar cuántas de estas extensiones hay, para lo que damos un nombre al conjunto que forman:
ExtΩ (σ, L) = {τ : L → Ω | τ |K = σ}
Lema 5.20. El cardinal de ExtΩ (σ, L) solo depende de la extensión K ⊂ L (no de σ ni de Ω).
Demostración. Supongamos primero que L = K(α) es simple, y sea f = Irr(α, K) con n = gr(f ).
Entonces [L : K] = n y, al ser K ⊂ L separable, f tiene n raı́ces distintas α = α1 , . . . , αn en Ω.
Si τ : L → Ω extiende a σ, entonces τ (α) debe ser una raı́z αi de f (2.29). Pero τ queda determinado
por su valor sobre α, al ser L = K(α), y por tanto el número de extensiones es a lo sumo n.
También por (2.29), para cada αi existe un K-isomorfismo σi : L = K(α) → K(αi ) con σ(α) = αi , que
compuesto con K(αi ) ֒→ Ω, es un K-encaje L → Ω. Como estos son distintos dos a dos porque actúan de
forma distinta sobre α, el número de extensiones es exactamente n.
En el caso general, K ⊂ L es finitamente generada y podemos dividirla K L L′
en subextensiones simples, por lo que basta ver que si K ⊂ L ⊂ L′ son τ τ′
algebraicas y σ : K → Ω se extiende a τ : L → Ω, entonces si |ExtΩ (σ, L)| = n σ
y |ExtΩ (τ, L′ )| = m, se tiene |ExtΩ (σ, L′ )| = nm. Veámoslo: Ω
Tenemos ExtΩ (σ, L) = {τ1 , . . . , τn }; uno de los τi será el τ anterior, pero el tamaño de ExtΩ (τi , L′ ) no
depende de él, por lo que para cada i tendremos ExtΩ (τi , L′ ) = {τi1 ′ , . . . , τ ′ }. Los τ ′ son distintos dos
im ij
a dos (y por tanto hay nm de ellos), pues si no coincide el subı́ndice i entonces las restricciones a L (las
correspondientes τi ) son distintas.
Solo falta ver que todo τ ′ ∈ ExtΩ (σ, L′ ) es uno de los τij′ . En efecto, la restricción τ ′ |L extiende a σ y
por tanto τ ′ |L = τi para algún i, por lo que τ ′ ∈ ExtΩ (τi , L′ ) y en consecuencia es uno de los τij′ .
Demostración. En la situación anterior, podemos tomar como Ω una clausura algebraica de L, que también
lo será de K, y por tanto podemos tomar σ y τ como inclusiones. Por (5.4), todo homomorfismo L → Ω que
extienda a σ (o sea, todo K-encaje L → Ω) es de hecho un K-automorfismo de L, y el recı́proco es evidente.
Por tanto el conjunto de los K-automorfismos de L es ExtΩ (σ, L) y su cardinal es [L : K] por (5.21).
p √ √
Ejemplo 5.23. Dado α = 1 + 3, sabemos que la clausura normal de Q ⊂ Q(α) es N = Q(α, 2 i) con
[N : Q] = 8 (5.13). Entonces hay exactamente 8 automorfismos2 τ : N → N , que quedan determinados por
√ 4 2
los valores de τ (α) y τ ( 2 i). Estos deben ser raı́ces de los respectivos polinomios
p√ irreducibles X − 2X√− 2
y X 2 + 2, y por tanto τ (α) puede tomar los valores ±α y ±β, donde β = 3 − 1 i, mientras que τ ( 2 i)
√
puede valer ± 2 i, lo que nos da las 8 posibilidades esperadas.
Grado de separabilidad
Volvemos a la situación anterior, con K ⊂ L algebraica y σ : K → Ω un homomorfismo alg
K L
donde Ω es una clausura algebraica de σ(K). Sabemos que el conjunto ExtΩ (σ, L) de los
τ
homoorfismos τ que encajan en el diagrama no es vacı́o, y que su cardinal no depende σ
de σ ni de Ω (5.20). Ω
Definición 5.24. El grado de separabilidad de una extensión K ⊂ L (o de L sobre K), denotado por
[L : K]s , es el cardinal de ExtΩ (σ, L) = {τ : L → Ω | τ |K = σ}.
Demostración. Sea σ : K → Ω una inclusión de K en una clausura algebraica Ω de σ(K). Si ExtΩ (σ, E) =
{σi }i∈I , entonces [E : K]s = |I|. Fijado i ∈ I, si ExtΩ (σi , L) = {σij }j∈Ji , por el Lema 5.20, |Ji | no depende
de σi y se verifica que |Ji | = [L : E]s .
El resultado quedará pues probado si se demuestra que ExtΩ (σ, L) = {σij }(i,j)∈I×Ji .
Es obvio que {σij }(i,j)∈I×Ji ⊂ ExtΩ (σ, L). Por otra parte, si τ ∈ ExtΩ (σ, L), entonces τ |E ∈ ExtΩ (σ, E)
y, por tanto, τ |E = σi para algún i ∈ I; por lo que τ = σij para algún i ∈ I y algún j ∈ Ji .
Demostración. Supongamos en primer lugar que L = K(α) y sea f = Irr(α, K). Sean K una clausura
algebraica de K que contiene a L, σ : K → K la inclusión y α = α1 , . . . , αr las distintas raı́ces de f en K.
Si τ : K(α) → K extiende a σ, entonces τ (α) debe ser una raı́z αi de f , y como τ queda determinado por
su valor sobre α, se sigue que
[L : K]s = [K(α) : K]s ≤ r ≤ gr(f ) = [K(α) : K] = [L : K]
En el caso general K ⊂ L es finitamente generada, digamos L = K(α1 , . . . , αn ). Considerando la torre
K ⊂ K(α1 ) ⊂ K(α1 , α2 ) ⊂ · · · ⊂ K(α1 , . . . , αn−1 ) ⊂ K(α1 , . . . , αn ) = L
y aplicando la Proposición 5.25 a cada subextensión se tiene
[L : K]s = [L : K(α1 , . . . , αn−1 )]s · · · [K(α1 , α2 ) : K(α1 )]s [K(α1 : K]s ≤
≤ [L : K(α1 , . . . , αn−1 )] · · · [K(α1 , α2 ) : K(α1 )] [K(α1 ) : K] = [L : K]
2
No hace falta poner Q-automorfismo, pues Q es el subcuerpo primo y queda fijo por todos los homomorfimos N → ?.
Proposición 5.27. Si K ⊂ K(α) es una extensión algebraica simple, entonces [K(α) : K]s es el número
de raı́ces distintas de f = Irr(α, K) en una clausura algebraica de K.
Recı́procamente, si se fija una raı́z αi , existe un K-isomorfismo σi : K(α) → K(αi ) tal que σ(α) = αi .
La composición de σi con la inclusión de K(αi ) en K es un K-encaje y por tanto r ≤ [K(α) : K]s .
Corolario 5.28. Un elemento α algebraico sobre K es separable sobre K si y solo si [K(α) : K]s = [K(α) : K].
Demostración. Inmediato por la Proposición 5.27, ya que [K(α) : K] es el grado de Irr(α, K).
como cada αi es separable sobre K, también lo es sobre K(α1 , · · · , αi−1 ) y, por el Corolario 5.28, se tiene
Además por (5.26) se tiene [L : K(α)]s ≤ [L : K(α)] y [K(α) : K]s ≤ [K(α) : K], por lo que tiene que ser
[L : K(α)]s = [L : K(α)] y [K(α) : K]s = [K(α) : K] y, por el Corolario 5.28, α es separable sobre K.
Demostración. Como cada α ∈ L está en la extensión generada por un subconjunto finito de S, podemos
suponer que S es finito, digamos L = K(α1 , . . . , αn ). Considerando entonces la torre de extensiones
y teniendo en cuenta que cada αi es separable sobre K(α1 , . . . , αi−1 ) porque lo es sobre K, aplicando el
Corolario 5.28, se obtiene que, para cada i = 1 . . . , n,
y aplicando la multiplicatividad del grado (2.6) y del grado de separabilidad (5.25), se obtiene que K ⊂ L
es una extensión finita con [L : K]s = [L : K], por lo que es separable (5.29).
Teorema 5.31. La propiedad “ser separable” es multiplicativa en torres y estable por levantamientos.
de donde
[K(a1 , . . . , an )(α) : K]s = [K(a1 , . . . , an )(α) : K]
y por tanto K ⊂ K(a1 , . . . , an )(α) es separable y, en consecuencia, α es separable sobre K.
Demostración. Por la demostración del Teorema 5.12 sabemos que N es el cuerpo de descomposición
sobre K de {fα = Irr(α, K)}α∈L . Entonces N = K(R), donde R es el conjunto de las raı́ces de los fα . Como
estos no tienen raı́ces múltiples puesto que los α son separables sobre K, se sigue que los elementos de R
son separables sobre K y por tanto K ⊂ K(R) = N es separable (5.30).
Definición 5.33. Si K ⊂ L es una extensión, al cuerpo S formado por los elementos de L que son separables
sobre K se le denomina la clausura separable de K en L.
De la Proposición 5.30 se deduce fácilmente que S es efectivamente un cuerpo que, obviamente, contiene
a K y, por tanto, K ⊂ S es una extensión separable y claramente S es el mayor subcuerpo de L que contiene
a K y es separable sobre K.
5.3. Problemas
5-1. Da un ejemplo de una extensión normal K ⊂ L y un polinomio f ∈ K[X] que tenga una raı́z en L pero
que no se descomponga completamente en L[X].
5-3. Demuestra que una extensión finita K ⊂ L es normal si y solo si existe una extensión normal K ⊂ N
tal que K ⊂ L ⊂ N y todo K-homomorfismo de L en N es un K-automorfismo de L.
5-4. Sea car(K) = p y sea α una raı́z de f (X) = X p − X − a ∈ K[X]. Prueba que la extensión K ⊂ K(α)
es normal3 y encuentra una condición necesaria y suficiente para que f sea irreducible sobre K[X].
√ √
5-5. Halla la clausura normal de la extensión Q ⊂ Q( 3 2, 2).
√
5-6. Halla la clausura normal de la extensión Q ⊂ Q( n 8).
5-7. En los casos siguientes, calcula Irr(α, Q) y [Q(α) : Q], encuentra una clausura normal N de Q ⊂ Q(α)
y determina [N : Q] y todos los Q-automorfismos de N .
q q q q
√ √ √4
√ √
a) α = 1 + 3 b) α = 10 − 2 c) α = 8 d) α = 4 + 2 3 i e) α = 2 3 − 2 i
5-10. Sea K ⊂ L ⊂ M ⊂ N una torre de extensiones con K ⊂ N normal. Demuestra que si el número
de L-homomorfismos de M en N distintos es n, entonces cada K-homomorfismo de L en N tiene
exactamente n extensiones a K-homomorfismos de M en N .
5-11. (Extra) Se considera la extensión K ⊂ K(ξ), donde K = Z3 (X) y ξ es una raı́z de T 6 − X ∈ K[T ].
Estudia la separabilidad sobre K de ξ, ξ 2 y ξ 3 . ¿Cuál es la clausura separable de K en K(ξ)?
3
¿Cómo actúa el homomorfismo de Frobenius sobre el cuerpo primo?
Proposición 6.3. [Corolario 5.22] Si K ⊂ L es normal, separable y finita, entonces |Gal(L/K)| = [L : K].
Proposición 6.4. Cada σ ∈ Gal(L/K) permuta las raı́ces en L de cualquier f ∈ K[X]. O sea:
Si α ∈ L es raı́z de f entonces σ(α) también es raı́z de f .
Si {α1 , . . . , αm } son todas las raı́ces de f en L, hay una biyección σ : {α1 , . . . , αm } → {α1 , . . . , αm }.
Ejemplos 6.5.
• Usaremos que, si L = K(a1 , . . . , an ), cada elemento de σ ∈ Gal(L/K) queda determinado por su acción
sobre los ai . O sea, si σ, τ ∈ Gal(L/K) verifican σ(ai ) = τ (ai ) para cada i, entonces σ = τ .
2. Veamos que Gal(R/Q) = {idR } (luego los recı́proco de (6.2) y del apartado anterior son falsos). O sea,
el único Q-automorfismo σ : R → R es la identidad. Primero observemos que σ conserva el orden:
r ≤ s ⇒ s − r = a2 (a ∈ R) ⇒ σ(s) − σ(r) = σ(s − r) = σ(a2 ) = σ(a)2 ≥ 0 ⇒ σ(r) ≤ σ(s)
Si existiese r ∈ R con r < σ(r), por la densidad de Q en R existirı́a b ∈ Q tal que r < b < σ(r) y,
aplicando σ a la desigualdad de la izquierda, quedarı́a σ(r) < σ(b) = b < σ(r) que es una contradicción.
Análogamente, tampoco puede ser r > σ(r), y por tanto σ es la identidad.
Nótese que, de hecho, Gal(R/K) = {id} para cualquier subcuerpo K de R.
70 Teorı́a de Galois. Teoremas fundamentales
Con esta notación, la biyeccción Z∗p → G dada por i 7→ σi es un isomorfismo de grupos, pues
Z∗p ∼
= Gal(Q(ξ)/Q) = hσj i donde j es un generador de Z∗p
8. Si K(X) es el cuerpo de las funciones racionales en una indeterminada sobre K, cada K-homomorfismo
de K(X) está determinado por la imagen de X. Veamos que se tiene2
aX + b
Gal(K(X)/K) = { σ : K(X) → K(X) | σ(X) = con a, b, c, d ∈ K, ad − bc 6= 0 }
cX + d
f (X)
“⊆”. Dado σ ∈ Gal(K(X)/K), se tendrá σ(X) = g(X) con f, g ∈ K[X], (f, g) = 1, y también
h(X)
σ −1 (X) = l(X) con h, l ∈ K[X] coprimos. Podemos poner
h(X) = a0 + a1 X + · · · + ar X r
con ar 6= 0 o br 6= 0 (o ambos)
l(X) = b0 + b1 X + · · · + br X r
Entonces
r
a0 + a1 fg(X)
(X)
+ · · · + ar fgr (X)
(X)
a0 g r (X) + a1 f (X)g r−1 (X) + · · · + ar f r (X)
−1
X = σ (σ(X)) = f r (X)
=
b0 + b1 fg(X)
(X)
+ · · · + br gr (X) b0 g r (X) + b1 f (X)g r−1 (X) + · · · + br f r (X)
por lo que
X(b0 g r (X) + b1 f (X)g r−1 (X) + · · · + br f r (X)) = a0 g r (X) + a1 f (X)g r−1 (X) + · · · + ar f r (X)
de donde f (X) divide a (b0 X − a0 )g r (X) y por tanto, al ser (f, g) = 1, deducimos que f (X) divide a
b0 X − a0 , de donde gr(f ) ≤ 1. De forma análoga g(X) divide a (br X − ar )f r (X) y ası́ gr(g) ≤ 1. Ası́
aX + b
σ(X) = con a, b, c, d ∈ K, y además ad − bc 6= 0 pues de lo contrario se tendrı́a
cX + d
daX + db bcX + db
σ(dX − b) = dσ(X) − b = −b = −b = b−b = 0
cX + d cX + d
lo cual, al ser σ inyectivo, implicarı́a d = b = 0 y por tanto σ serı́a constante.
“⊇”: Dados a, b, c, d ∈ K con ad − bc 6= 0, por la propiedad universal de los polinomios existe un único
aX + b
homomorfismo de anillos σ : K[X] → K(X) tal que σ|K = IdK y σ(X) = .
cX + d
Veamos por reducción al absurdo que σ es inyectivo:
2
Obsérvese la relación con las transformaciones de Möbius.
Las aplicaciones de la correspondencia de Galois pueden actuar sucesivamente, lo que permite por ejemplo
definir F ′′ = (F ′ )′ e incluso F ′′′ = ((F ′ )′ )′ , que coincide con (F ′ )′′ y con (F ′′ )′ . Con esta notación, se tiene:
Definición 6.9. Sean K ⊂ L una extensión y G = Gal(L/K) su grupo de Galois. Un cuerpo intermedio
F es cerrado si F = F ′′ (lo que equivale a que sea F = H ′ para cierto subgrupo H), y un subgrupo H es
cerrado si H = H ′′ (lo que equivale a que sea H = F ′ para cierto cuerpo intermedio F ).
Por (6.8), los subgrupos {1G } y G y el cuerpo L y siempre son cerrados; y K lo es si y solo si K = G′ .
En los dos resultados siguientes trabajamos en una extensión K ⊂ L con grupo de Galois G = Gal(L/K),
y la notación [X : Y ] denota, según proceda, o bien el grado de una extensión Y ⊂ X o bien el ı́ndice del
subgrupo Y en X (o sea, el cardinal del conjunto de clases laterales xY en X).
Si n > 1 entonces existe α ∈ F \E y se tiene 1 < s = [E(α) : E] ≤ [F : E], por lo que [F : E(α)] = n/s < n
y se pueden distinguir dos casos:
Si s < n, se tiene (usando que los ı́ndices en torres de subgrupos verifican una propiedad multiplicativa
análoga a la de los grados en torres de extensiones)
n
[E ′ : F ′ ] = [E ′ : E(α)′ ] · [E(α)′ : F ′ ] ≤ s · = n
s
puesto que tanto s como n/s son menores que n y por tanto se puede aplicar la hipótesis de inducción a
cada uno de los factores.
Por otra parte, sean {τ1 H, . . . , τn H} las n clases laterales de J módulo H; una de ellas es el propio H
y podemos pues suponer que τ1 H = H, o sea que τ1 está en H y por tanto fija los elementos de H ′ , en
particular τ1 (αj ) = αj para cada j ∈ {1, . . . , n + 1}.
3
En general, una conexión de Galois entre dos conjuntos ordenados A y B es un par de aplicaciones β : A → B y
α : B → A que invierten el orden (si a1 ≤ a2 ∈ A entonces β(a2 ) ≤ β(a1 ), y si b1 ≤ b2 ∈ B entonces α(b2 ) ≤ α(b1 )) y tales
que a ≤ α(β(a)) para todo a ∈ A y b ≤ β(α(b)) para todo b ∈ B. En estas condiciones se tiene Im(α) = {b ∈ B | b = β(α(b))}
e Im(β) = {a ∈ A | a = α(β(a))}, y se tiene que α : Im(β) → Im(α) y β : Im(α) → Im(β) son biyecciones inversas. ¿Conoces
alguna otra conexión de Galois?
El siguiente sistema homogéneo tiene más incógnitas que ecuaciones, luego tiene soluciones no triviales.
τ1 (α1 )X1 + τ1 (α2 )X2 + · · · + τ1 (αn+1 )Xn+1 = 0
S: ··· ··· ···
τ (α )X + τ (α )X + · · · + τ (α
n 1 1 n 2 2 n n+1 )Xn+1 = 0
Entre ellas se puede elegir una con el menor número posible de entradas no nulas; reordenando los αi se
puede suponer que las entradas no nulas son las r primeras; y dividiendo por la primera entrada, podemos
escribir esa solución como (1, a2 , . . . , ar , 0, . . . , 0).
Como τ1 (αj ) = αj , al sustituir la solución en la primera ecuación obtenemos α1 + α2 a2 + · · · + αr ar = 0,
y como los αj son LI sobre J ′ deducimos que alguno de los coeficientes aj no está en J ′ .
Si por ejemplo a2 6∈ J ′ , existirá σ ∈ J tal que σ(a2 ) 6= a2 . Consideremos el nuevo sistema homogéneo
στ1 (α1 )X1 + στ1 (α2 )X2 + · · · + στ1 (αn+1 )Xn+1 = 0
′
S : ··· ··· ···
στ (α )X + στ (α )X + · · · + στ (α
n 1 1 n 2 2 n n+1 )Xn+1 = 0
Como στ1 H es una clase lateral de J módulo H, será στ1 H = τi H para cierto i ∈ {1, . . . , n}. Entonces:
στ1 H = τi H ⇒ τi−1 στ1 ∈ H ⇒ (τi−1 στ1 )(αk ) = αk (pues αk ∈ H ′ ) ⇒ στ1 (αk ) = τi (αk )
O sea, la primera fila del sistema S ′ es la fila i de S. Análogamente στ2 H = τj H, con j 6= i pues de lo
contrario serı́a στ2 H = στ1 H y por tanto τ2 H = τ1 H. En definitiva, el sistema S ′ no es más que una
reordenación de filas en S y por tanto ambos tienen las mismas soluciones.
Si sustituimos (σ(1) = 1, σ(a2 ), . . . , σ(ar ), 0, . . . , 0) en la “parte izquierda” de S ′ tenemos, para cada fila,
στi (α1 )σ(1) + στi (α2 )σ(a2 ) + · · · + στi (αr )σ(ar ) = σ [τi (α1 )1 + τi (α2 )a2 + · · · + τi (αr )ar ] = σ(0) = 0
Por tanto (1, σ(a2 ), . . . , σ(ar ), 0, . . . , 0) es solución de S ′ y en consecuencia lo es de S. Restando las dos
soluciones de S obtenemos una nueva solución (0, σ(a2 ) − a2 , . . . , σ(ar ) − ar , 0, . . . , 0), que no es trivial pues
σ(a2 ) − a2 6= 0, y tiene menos elementos no nulos que la primera. Esta es la contradicción buscada.
Teorema 6.13. Sea K ⊂ L una extensión con grupo de Galois G = Gal(L/K), sean E ⊂ F cuerpos
intermedios de K ⊂ L y sean H ⊂ J subgrupos de G. Se verifican:
[F : E] ≥ [E ′ : F ′ ] ≥ [F ′′ : E ′′ ] = [F ′′ : E] = [F ′′ : F ] [F : E] ≥ [F : E]
La primera se sigue de (6.11); esto implica que [E ′ : F ′ ] es finito y entonces la segunda se sigue de (6.12). La
primera igualdad se tiene ya que E = E ′′ por hipótesis, y la segunda aplicando (2.6) a la torre E ⊂ F ⊂ F ′′ .
La última desigualdad es obvia e implica que todas las relaciones son igualdades. La primera nos dice
que [E ′ : F ′ ] = [F : E] y la última que [F ′′ : F ] = 1, o sea que F ′′ = F y por tanto F es cerrado.
2. La demostración es análoga, usando de nuevo la multiplicatividad de los ı́ndices en torres de subgrupos.
El último comentario se obtiene tomando H = {idL }, que es un subgrupo cerrado de G por (6.8).
4. Veamos que la extensión Q ⊂ Q(ξ), donde ξ = e2πi/5 , es de Galois. Como G = hσ2 i, basta ver que
[σ2 (α) = α ⇒ α ∈ Q] para α ∈ Q(ξ). Si en Q(ξ) consideramos la base {ξ, ξ 2 , ξ 3 , ξ 4 } (en lugar de la
“más tradicional” {1, ξ, ξ 2 , ξ 3 }) y ponemos α = aξ + bξ 2 + cξ 3 + dξ 4 , entonces
σ2 (α) = α ⇒ aξ + bξ 2 + cξ 3 + dξ 4 = σ2 (aξ + bξ 2 + cξ 3 + dξ 4 ) = aξ 2 + bξ 4 + cξ + dξ 3
Igualando coeficientes se tiene a = c = d = b y por tanto α = a(ξ + ξ 2 + ξ 3 + ξ 4 ) = −a ∈ Q.
√
5. Si α = 4 2, la extensión Q ⊂ Q(α) no es de Galois: un elemento a + bα + cα2 + dα3 está en G′ si y solo
si queda fijo por el único automorfismo no trivial, dado por σ(α) = −α, o sea si y solo si b = d = 0,
√
de modo que G′ es el cuerpo intermedio Q(α2 ) = Q( 2).
Proposición 6.16. Sea K ⊂ L una extensión y sea G = Gal(L/K). Si F es un cuerpo intermedio cerrado,
entonces F ⊂ L es de Galois con grupo Gal(L/F ) = F ′ .
En particular, si K0 = G′ entonces K0 ⊂ L es de Galois con Gal(L/K0 ) = G.
El siguiente resultado caracteriza las extensiones de Galois algebraicas y será útil para reconocerlas:
Teorema 6.17. Una extensión K ⊂ L es algebraica y de Galois si y solo si es normal y separable.
Demostración. “⇒”. Se trata de ver que si un irreducible mónico f ∈ K[X] de grado n = gr(f ) tiene una
raı́z α ∈ L (de modo que f = Irr(α, K)), entonces tiene n raı́ces distintas en L.
Sean α = α1 , α2 , . . . , αr (con r ≤ n) las raı́ces distintas de f en L, de modo que el objetivo es ver que
n ≤ r. Para ello, consideramos
g(X) = (X − α1 )(X − α2 ) · · · (X − αr ) ∈ L[X]
Cada σ ∈ G = Gal(L/K) permuta esas raı́ces por (6.4), y por tanto σ deja fijos los coeficientes de g
(Cardano-Vieta, 1.63). En consecuencia, esos coeficientes están en G′ , que es K al ser K ⊂ L de Galois.
Por tanto g ∈ K[X] con g(α) = 0, por lo que f | g y ası́ n = gr(f ) ≤ gr(g) = r, como querı́amos ver.
Corolario 6.18. Si K es un cuerpo perfecto (por ejemplo, finito o de caracterı́stica cero), entonces una
extensión K ⊂ L es algebraica y de Galois si y solo si es normal.
Las propiedades “ser normal” (5.8) y “ser separable” (5.31) son estables por levantamientos, luego:
Corolario 6.20. La clase de las extensiones algebraicas y de Galois es estable por levantamientos.
Aunque “ser separable” es una propiedad multiplicativa en torres (5.31), como “ser normal” no lo es
(5.2), en general “ser algebraica y de Galois” tampoco lo es. En el Problema 6-22 se verá una condición
necesaria y suficiente, dadas dos extensiones K ⊂ L y L ⊂ M algebraicas y de Galois, para que también lo
sea la extensión K ⊂ M .
1. |G| = [L : K].
2. Todos los cuerpos intermedios F en K ⊂ L y todos los subgrupos H de G son cerrados.
3. Si X ⊂ Y son cuerpos intermedios o son subgrupos, entonces [X ′ : Y ′ ] = [Y : X].
4. La correspondencia de Galois establece biyecciones, inversas entre sı́ y que invierten las inclusiones,
entre el conjunto de todos los cuerpos intermedios de K ⊂ L y el de todos los subgrupos de G.
Corolario 6.22. Una extensión finita K ⊂ L con G = Gal(L/K) es de Galois si y solo si |G| = [L : K].
1. Si ξ = e2π i/5 , sabemos (6.15) que Q ⊂ Q(ξ) es finita y de Galois con G = Gal(Q(ξ)/Q) = hσ2 i ∼
= Z4 .
hσi Q(ξ) = {1}′
Ponemos σ = σ2 . Como G tiene un único subgrupo propio no trivial,
hσ 2 i, la extensión Q ⊂ Q(ξ) tiene un único cuerpo intermedio propio
√ √
¯ = Q( 5) (Ejemplos 6.7 y Problema 6-6).
hσ 2 i′ = Q(ξ + ξ) hσ 2 i Q( 5) = hσ 2 i′
El diagrama representa la situación; la correspondencia de Galois lleva
los objetos de abajo a los de arriba, y viceversa.
{1} Q = hσi′
√ √
2. Q ⊂ Q( 2, 3) es finita y de Galois con grupo G = {σ00 , σ01 , σ10 , σ11 } ∼ = Z2 × Z2 (6.15). Como
los únicos subgrupos propios no triviales de G son los cı́clicos de orden 2 generados por los elementos
√
distintos de σ00 = id, la extensión tiene exactamente tres cuerpos intermedios, que son hσ01 i′ = Q( 2),
√ √
hσ10 i′ = Q( 3) y hσ11 i′ = Q( 6) (Ejemplos 6.7 y Problema 6-5).
√ √
G Q( 2, 3)
√ √ √
hσ01 i hσ10 i hσ11 i Q( 2) Q( 3) Q( 6)
{1} Q
Definición 6.24. Sea K ⊂ L una extensión con grupo de Galois G = Gal(L/K). Un cuerpo intermedio E
es estable en la extensión si para cada σ ∈ G se tiene σ(E) ⊂ E, o sea σ|E ∈ Gal(E/K).
De hecho, en esas condiciones se tiene σ(E) = E para cada σ ∈ G, pues al ser también σ −1 ∈ G se tiene
σ −1 (E) ⊂ E y aplicando σ se obtiene E ⊂ σ(E).
Por otra parte, si E = K(α1 , . . . , αn ), entonces σ(E) ⊂ E si y solo si cada σ(αi ) ∈ E.
1. Con la notación anterior, si [E : K] = 2 entonces E es estable, pues se tiene E = K(α) para cualquier
α ∈ E \ K y sabemos (pág. 59, al principio) que la otra raı́z β de Irr(α, K) también está en E. Como
cualquier σ ∈ G lleva α a una de esas raı́ces, en cualquier caso es σ(α) ∈ E y por tanto σ(E) ⊂ E.
√
2. En Q ⊂ Q(α, ω), donde α = 3 2 y ω = e2πi/3 , el cuerpo intermedio Q(ω) es estable, por el apartado
anterior, pero E = Q(α) no lo es pues hay automorfismos de Q(α, ω) que llevan por ejemplo α a αω,
que no está en E (al no estar en R).
Proposición 6.26. Dada una extensión K ⊂ L con grupo de Galois G = Gal(L/K), se verifican:
1. Si E es un cuerpo intermedio estable, entonces E ′ es un subgrupo normal de G.
2. Si H es un subgrupo normal de G, entonces H ′ es un cuerpo intermedio estable en K ⊂ L.
Esto sı́ funciona cuando E es estable, y el recı́proco se verifica cuando la extensión es algebraica:
Teorema 6.28. [Segundo Teorema Fundamental de la Teorı́a de Galois] Sea K ⊂ L una extensión finita y
de Galois y sea E un cuerpo intermedio. Entonces se verifican:
1. E ⊂ L es de Galois y Gal(L/E) = E ′ es un subgrupo de Gal(L/K).
Gal(L/K)
2. K ⊂ E es de Galois ⇔ E es estable ⇔ E ′ E Gal(L/K), y en este caso Gal(E/K) ∼
= .
Gal(L/E)
Finalmente, la aplicación ϕ : Gal(L/K) → Gal(E/K) definida por ϕ(σ) = σ|E está bien definida por
ser E estable y claramente es un homomorfismo de grupos con núcleo Gal(L/E). Entonces, por el primer
Gal(L/K) ∼
teorema de isomorfı́a para grupos, se tiene = Im(ϕ) ⊂ Gal(E/K) y ası́
Gal(L/E)
Gal(L/K)
|Im(ϕ)| = = |Gal(L/K)| = [L : K] = [E : K] = |Gal(E/K)|
Gal(L/E) |Gal(L/E)| [L : E]
por lo que ϕ es suprayectiva, de lo que se sigue el isomorfismo buscado.
Corolario 6.29. Si K ⊂ L es finita y de Galois y su grupo de Galois es abeliano, entonces para cada cuerpo
intermedio K ⊂ E ⊂ L se tiene que K ⊂ L y E ⊂ L son de Galois con grupos de Galois abelianos.
El siguiente resultado y sus consecuencias son muy útiles en el cálculo de grupos de Galois. Compárese
su enunciado con el tercer teorema de isomorfı́a para grupos (pág. 124).
Teorema 6.30. [de las irracionalidades accesorias de Lagrange] Si K ⊂ L y K ⊂ F son admisibles y la
primera es finita y de Galois, entonces también lo son L ∩ F ⊂ L y F ⊂ LF y sus grupos son isomorfos:
Gal(LF/F ) ∼
= Gal(L/L ∩ F )
L
Demostración. Consideremos el diagrama de la derecha.
K L∩F LF
Como K ⊂ L es finita y de Galois, también L ∩ F ⊂ L es finita (2.6)
F
y de Galois (6.28), luego F ⊂ LF es finita (2.39) y de Galois (6.20).
Para ver que los correspondientes grupos son isomorfos, el “candidato razonable” a isomorfismo es
pero hay que comprobar que está bien definida y que es un homomorfismo biyectivo.
Está bien definido, o sea si un automorfismo σ : LF → LF fija los elementos de F , entonces σ|L es un
automorfismo de L (es evidente que fijará los elementos de L ∩ F ). Para verlo, como K ⊂ L es normal y
finita se tiene L = K(α1 , . . . , αr ) para las raı́ces αi de cierto f ∈ K[X] (5.5). Como σ fija los elementos de
K y permuta los αi , es claro que σ(L) ⊂ L y por tanto σ|L es un automorfismo de L (5.3).
φ es claramente un homomorfismo, y es inyectivo pues si φ(σ) es la identidad entonces σ, además de fijar
los elementos de F , fija también los de L; por tanto fija los de LF y en consecuencia σ es la identidad.
Es suprayectivo, o sea el subgrupo H = Im(φ) es todo G = Gal(L/L ∩ F ). Como L ∩ F ⊂ L es finita y
de Galois, se tiene G′ = L ∩ F y por la biyección de (6.21) basta ver que H ′ = G′ . El contenido G′ ⊂ H ′ es
claro (6.8), ası́ que basta ver [α ∈ H ′ ⇒ α ∈ L ∩ F ]. Como H ′ ⊂ L ⊂ LF , se tiene
Demostración. K ⊂ L1 L2 es finita (2.38 y 2.39), normal (5.9) y separable (5.31), luego es de Galois.
Es claro que ϕ es un homomorfismo, y es inyectivo pues si σ fija los elementos de cada Li entonces fija
los de L1 L2 .
Veamos que si L1 ∩ L2 = K entonces φ es suprayectivo. Ponemos Gi = Gal(Li /K) = Gal(Li /(L1 ∩ L2 )).
Si vemos que G1 × {1L2 } ⊂ Im(ϕ), análogamente se tendrá {1L1 } × G2 ⊂ Im(ϕ) y ası́ G1 × G2 = Im(ϕ).
Por (6.30), para cada σ1 ∈ G1 = Gal(L1 /(L1 ∩ L2 )) existe σ ∈ Gal(L1 L2 /L2 ) tal que σ|L1 = σ1 , y tomando
el mismo σ como elemento de Gal(L1 L2 /K), se tiene
Demostración. Los subgrupos Hi son obviamente normales en G, y las extensiones K ⊂ Hi′ = Li son
de Galois por el Segundo Teorema Fundamental (6.28). Por el Primer Teorema (6.21), como L1 · · · Li es el
menor subcuerpo que con tiene a los Li , su imagen será el mayor subgrupo contenido en los L′i , o sea
(L1 · · · Li )′ = L′1 ∩ · · · ∩ L′i = H1 ∩ · · · ∩ Hi = {1} × · · · × {1} × Gi+1 × · · · × Gn
Teorema 6.36 (Artin). Una extensión finita K ⊂ L tiene un elemento primitivo si y solo si tiene un
número finito de cuerpos intermedios.
Recı́procamente, si L = K(α), sea f = Irr(α, K) y, para cada cuerpo intermedio F , sea fF = Irr(α, F ).
Entonces fF divide a f en L[X] y por tanto la asignación F 7→ fF establece una aplicación entre el conjunto
de cuerpos intermedios y el de divisores mónicos de f en L[X]. Como este conjunto es finito al ser L[X] un
DFU, basta ver que la aplicación es inyectiva.
Para ello, basta ver que si fF = X n + a1 X n−1 + · · · + an (con los ai ∈ F ) entonces F = K(a1 , . . . , an ).
Por una parte, al ser L = K(α), se tiene también L = F (α) y por tanto
Por otra, como los ai ∈ F , se tiene K(a1 , . . . , an ) ⊂ F y por tanto fF es irreducible sobre K(a1 , . . . , an ),
luego fF = Irr(α, K(a1 , . . . , an )) y el mismo argumento de antes muestra que [L : K(a1 , . . . , an )] = gr(fF ),
de donde
Teorema 6.37 (Teorema del elemento primitivo). Toda extensión de cuerpos K ⊂ L finita y separable posee
un elemento primitivo.
Demostración. Sea N la clausura normal de L sobre K. Por (5.12) y (6.19), se tiene que K ⊂ N es una
extensión finita y de Galois, y por tanto Gal(N/K) es un grupo finito. Utilizando ahora el Primer Teorema
Fundamental (6.21), vemos que K ⊂ N tiene solo un número finito de cuerpos intermedios, por lo que lo
mismo le ocurre a la subextensión K ⊂ L, y el resultado se sigue entonces del Teorema de Artin (6.36).
Corolario 6.38. Toda extensión finita de un cuerpo de caracterı́stica cero tiene un elemento primitivo.
6.8. Problemas
√
6-4. Determina el grupo de Galois de Q( 2) ⊂ L, donde L es el cuerpo de descomposición de X 4 − 2 sobre Q.
√ √
6-5. Dada la extensión Q ⊂ Q( 2, 3) y su grupo de Galois G calcula, con la notación de (6.5), los subgrupos
√ ′ √ ′
Q( 3) y Q( 6) y los cuerpos intermedios hσ10 i′ y hσ11 i′ .
6-6. Dados ξ = e2πi/5 , su grupo de Galois G = Gal(Q(ξ)/Q) = hσ2 i y el subgrupo H = hσ4 i, se pide:
6-13. Si ξ = e2πi/8 , calcula Irr(ξ, Q) y determina Gal(Q(ξ)/Q) y los cuerpos intermedios de Q ⊂ Q(ξ).
6-14. En cada caso, para el polinomio f que se da, se considera su cuerpo de descomposición N sobre Q, y
se pide calcular [N : Q], identificar Gal(N/Q) y determinar los cuerpos intermedios de Q ⊂ N .
a) Prueba que si f, g ∈ K[X], (f, g) = 1, con f /g ∈ K(X)\K, entonces X es algebraico sobre K(f /g)
y [K(X) : K(f /g)] = máx{gr(f ), gr(g)}.
b) Prueba que si K es un cuerpo infinito, entonces K ⊂ K(X) es una extensión de Galois y que si
K es un cuerpo finito no lo es.
6-17. Prueba que si K es un cuerpo infinito, entonces los únicos subgrupos cerrados de Gal(K(X)/K) son él
mismo y sus subgrupos finitos.
6-18. Prueba que Q(X 2 ) es un cuerpo intermedio cerrado de la extensión Q ⊂ Q(X) y que Q(X 3 ) no lo es.
6-19. Sean K un cuerpo y H el subconjunto de Gal(K(X)/K) formado por la identidad y los K-automorfismos
inducidos por
X 7→ 1/(1 − X) X 7→ (X − 1)/X
Prueba que H es un subgrupo de Gal(K(X)/K) y determina el cuerpo H ′ fijado por H.
6-20. Sea K un cuerpo. Determina el subcuerpo L de K(X) fijado por los K-automorfismos inducidos por
X 7→ 1 − X X 7→ 1/X
Prueba que [K(X) : L] = 6, comprueba que (X 2 − X + 1)3 /(X 2 − X)2 ∈ L y encuentra Irr(X, L).
6-21. Prueba que si K ⊂ L es una extensión finita y de Galois y F es una extensión de K tal que L y F son
admisibles, entonces [LF : F ] divide a [L : K].
6-25. Sea K ⊂ L una extensión separable de grado n. Demuestra que un elemento de L es un elemento
primitivo de la extensión si y solo si tiene n conjugados en una clausura normal de la extensión.
√ √
6-26. Encuentra un elemento primitivo de la extensión Q ⊂ Q( 2, 3 3).
√ √
6-27. Sean X e Y indeterminadas sobre un cuerpo K de caracterı́stica p 6= 0 y sea L = K( p X, p Y ).
Demuestra que [L : K] = p2 y que se tiene αp ∈ K para todo α ∈ L. Deduce que la extensión K ⊂ L
no es simple y determina un número infinito de cuerpos intermedios.
6-28. Prueba que si L = K(α, β) con α y β algebraicos sobre K y α separable sobre K, entonces L es una
extensión simple de K.
Raı́ces de la unidad
Claramente, Un (K) es un subgrupo del grupo multiplicativo K ∗ , y además es finito de tamaño ≤ n pues
consiste en las raı́ces de X n − 1 en K. Por tanto Un (K) es un grupo cı́clico (9.1). En este sentido:
Las raı́ces n-ésimas primitivas de uno en K son los elementos de orden n en K ∗ .
Se tiene |Un (K)| = n si y solo si K contiene alguna raı́z n-ésima primitiva ξ, y en este caso Un (K) = hξi.
ξ ∈ K es un raı́z n-ésima primitiva de uno si y solo si |Un (K)| = n y Un (K) =< ξ >.
Si p es primo, toda raı́z p-esima de uno (distinta del 1) es primitiva.
El siguiente resultado se deduce de que, para cualquier grupo G y cualquier elemento g, se tiene (pág. 119):
n
o(g) = n < ∞, k ∈ Z ⇒ o(g k ) =
mcd(n, k)
Proposición 7.3. Si un cuerpo K contiene una raı́z n-ésima primitiva de la unidad ξ, entonces:
1. K contiene exactamente n raı́ces n-ésimas de uno, que son ξ, ξ 2 , . . . , ξ n−1 , ξ n = 1, y exactamente φ(n)
de ellas (las que llevan exponente coprimo con n) son primitivas.
2. Para cada divisor entero positivo d de n, hay una raı́z d-ésima primitiva en K, a saber ξ n/d , y por
tanto K contiene d raı́ces d-ésimas de uno, de las que φ(d) son primitivas.
Polinomios ciclotómicos
En lo que sigue, la notación p = car(K) incluirá el caso p = 0 salvo que se diga lo contrario, y el cuerpo
primo P en esa caracterı́stica será entonces Zp o Q (2.2).
Como X n − 1 ∈ P [X], una clausura algebraica de P contiene raı́ces n-ésimas para cualquier n. Esto es
poca cosa, porque el 1 siempre es raı́z n-ésima. Lo relevante será si hay o no raı́ces n-ésimas primitivas.
Y en general no las hay: en caracterı́stica p se tiene X p − 1 = (X − 1)p (homomorfismo de Frobenius) y
por tanto la única raı́z p-ésima es 1, que no es primitiva. Más generalmente:
Proposición 7.4. Dado un cuerpo K, existe una extensión L de K que contiene raı́ces n-ésimas primitivas
de la unidad si y solo si car(K) 6 | n (o sea, o bien car(K) = 0 o bien car(K) = p y p 6 | n).
4. Miremos el ejemplo anterior de otra forma. Si p 6= 2, 3 sabemos que existe en Ω una raı́z sexta
primitiva de uno ξ. Usando o(ξ k ) = 6/mcd(6, k), el conjunto U = {ξ, ξ 2 , . . . , ξ 5 , ξ 6 = 1} de todas las
raı́ces sextas (primitivas o no) se divide en V6 = {ξ, ξ 5 } (elementos de orden 6), V3 = {ξ 2 , ξ 4 } (orden
3), V2 = {ξ 3 = −1} (orden 2) y V1 = {ξ 6 = 1} (orden 1).
Por (7.3), en Ω hay φ(6) = 2 raı́ces sextas primitivas, luego estas son precisamente las de V6 . Análoga-
mente, hay 2 raı́ces cúbicas primitivas, etcétera, por los que cada Vd contiene todas las raı́ces d-ésimas
primitivas para d = 6, 3, 2, 1 (los divisores d de 6). En consecuencia:
Φ6 (X) = (X − ξ)(X − ξ 5 ) Φ3 (X) = (X − ξ 2 )(X − ξ 4 ) Φ2 (X) = X + 1 Φ1 (X) = X − 1
Q
Por otra parte, como los ξ j son las 6 raı́ces de X 6 − 1 se tiene X 6 − 1 = 6j=1 (X − ξ j ), y reordenando
vemos que X 6 − 1 = Φ6 (X) · Φ3 (X) · Φ2 (X) · Φ1 (X).
Esta última idea se generaliza en el siguiente resultado, básico en el estudio de los polinomios ciclotómicos:
Q
Proposición 7.7. Si car(K) 6 | n se tiene X n − 1 = d|n Φd (X) (se entiende que los d son positivos).
Demostración. Para cada d | n, sea Vd el conjunto de los elementos de Un (Ω) que tienen orden n. Los Vd
son obviamente disjuntos, y por el Teorema de Lagrange forman una partición de Un (Ω).
Además, los elementos de Vd son todas las raı́ces d-ésimas primitivas de Ω: por tener orden d serán raı́ces
d-ésimas primitivas, y cualquier raı́z d-ésima es una raı́z n-ésima (no primitiva si d 6= n), por lo que es un
Q
elemento de Un (Ω) de orden d, o sea está en Vd . En consecuencia, Φd (X) = ξ∈Vd (X − ξ).
Q
Ası́, d|n Φd (X) es el producto de los (X − ξ) donde ξ recorre la unión (disjunta) de los Vd , o sea donde
Q
ξ recorre Un (Ω). Como estas son exactamente las n raı́ces de X n − 1, se tiene X n − 1 = d|n Φd (X).
A raı́z de estos ejemplos parece que los coeficientes de Φn (X) siempre son enteros. Y efectivamente:
Lema 7.9. Sean D subanillo de K y p, q ∈ D[X] con p mónico. Si q = ph con h ∈ K[X] entonces h ∈ D[X].
(O sea, si p divide a q en K[X], entonces lo divide en D[X]).
Demostración. Como p es mónico, en D[X] podemos dividir con resto: q = pc + r con c, r ∈ D[X] y
gr(r) < gr(p). Como r = p(h − c) tiene grado < gr(p), debe ser h = c ∈ D[X].
Proposición 7.10. En caracterı́stica p los coeficientes de Φn (X) están en el subanillo primo (Zp o Z).
Definición 7.11. Una extensión K ⊂ F se dice una extensión ciclotómica de orden n sobre K, si F
es el cuerpo de descomposición sobre K del polinomio X n − 1 ∈ K[X].
Por (4.4) y (4.6), cada cuerpo K tiene una extensión ciclotómica, única salvo K-isomorfismos.
Ejemplo 7.12. En el Ejemplo 7.2, la extensión Q ⊂ Q(e2πi/n ) es ciclotómica de orden n sobre Q, mientras
que Z2 ⊂ F4 = Z2 (α) es ciclotómica de orden 3 sobre Z2 .
Demostración. 1. Como car(F ) = car(K) 6 | n, por (7.4) existe una raı́z n-ésima primitiva ξ en una
clausura algebraica F de F , y las raı́ces de X n − 1 en F serán los elementos de Un (F ) =< ξ >. Por la
Observación 4.15, se tiene que F = K(ξ).
2. Es finita y normal por (5.5), y separable ya que X n − 1 no tiene raı́ces múltiples, al ser car(K) 6 | n.
3. Para cada σ ∈ Gal(F/K) se tiene σ(ξ)j = σ(ξ j ), y como σ es inyectiva deducimos que σ(ξ) es una
raı́z n-ésima primitiva de la unidad; por tanto σ(ξ) = ξ i para cierto i coprimo con n. Es elemental ver que
la asignación σ 7→ i define un homomorfismo inyectivo de grupos Gal(F/K) → Z∗n , lo que prueba la primera
afirmación de 3. La otra es evidente pues [F : K] = |Gal(F/K)| y |Z∗n | = φ(n).
5. Porque Z∗n es cı́clico si n es primo (9.1) y los subgrupos de cı́clicos son cı́clicos (9.2).
Φ7 (X) = X 6 + X 5 + X 4 + X 3 + X 2 + X + 1 = (X 3 + X + 1)(X 3 + X 2 + 1)
Lema 7.15. Sean ξ ∈ C una raı́z n-ésima primitiva de un y p primo, p 6 | n. Entonces Irr(ξ, Q) = Irr(ξ p , Q).
Demostración. Sea f (X) = Irr(ξ, Q) ∈ Q[X]. Como ξ es raı́z de X n − 1, existe h(X) ∈ Q[X] con
X n − 1 = f h (2.23). Sea ahora a el menor entero positivo con af ∈ Z[X]; por ser a el menor, af es primitivo.
Análogamente, sea b ∈ Z+ con bh ∈ Z[X] primitivo, de modo que af bh es primitivo por el lema de Gauss
(1.19) y ası́, considerando los contenidos (1.18), se tiene
Análogamente, g(X) = Irr(ξ p , Q) es mónico e irreducible en Z[X]. Entonces ξ es raı́z de g(X p ), luego
f (X) divide a g(X p ) en Q[X] (2.23) y en Z[X] (7.9). Reduciendo los coeficientes módulo p vemos que f¯(X)
divide a ḡ(X p ), y además ḡ(X p ) = (ḡ(X))p por el homomorfismo de Frobenius, de modo que f¯ | ḡ p .
En Zp [X] (dominio euclı́deo), f¯ tiene al menos un divisor irreducible q̄. Por lo anterior, se tiene q̄ | ḡ p y
por tanto (al ser primo) q̄ | ḡ, de modo que q̄ 2 | f¯ḡ.
Volvemos a Z[X] y vemos que f = g por reducción al absurdo. En caso contrario no serı́an asociados
(son mónicos), y como ambos dividen a X n − 1 también su producto f g lo dividirı́a, y por tanto en Zp [X]
tendrı́amos q̄ 2 | f¯ḡ | X n − 1. En consecuencia las raı́ces de q̄ (en alguna extensión de Zp ) serı́an raı́ces dobles
de X n − 1, en contradicción con (1.34) ya que p 6 | n y ası́ (X n − 1)′ = nX n−1 es coprimo con X n − 1.
Demostración. Sea ξ una tal raı́z. Por definición, ξ es raı́z de Φn (X) y por tanto Irr(ξ, Q) divide a Φn (X)
(2.23). Como ambos son mónicos, para ver la igualdad basta ver que Irr(ξ, Q) tiene grado mayor o igual que
gr(Φn ) = φ(n), y para ello basta ver que Irr(ξ, Q) tiene φ(n) raı́ces distintas.
Estas raı́ces van a ser las φ(n) potencias distintas ξ r con r coprimo con n. Al ser coprimos r = p1 p2 · · · pk
con los pi primos que no dividen a n. Entonces cada ξ p1 p2 ···pi es una raı́z n-ésima primitiva de uno, y aplicando
el lema anterior tenemos Irr(ξ, Q) = Irr(ξ p1 , Q) = Irr(ξ p1 p2 , Q) = · · · = Irr(ξ p1 p2 ···pk , Q) = Irr(ξ r , Q).
Por tanto cada ξ r es raı́z de Irr(ξ, Q), lo que termina la prueba.
Demostración. Por (7.16) es [Q(ξ) : Q] = φ(n), luego el subgrupo de (7.14.3) es todo Z∗n .
Proposición 7.18. Sean n, m ∈ Z+ coprimos. Si ξr ∈ C denota una raı́z r-ésima primitiva de uno, se tiene
Demostración. La igualdad Q(ξn )Q(ξm ) = Q(ξn , ξm ) se tiene por construcción (ver el final de la pág. 2.3).
n
Por (7.3.2), ξnm es una raı́z m-ésima primitiva, luego Q(ξm ) = Q(ξnmn ) ⊂ Q(ξ
nm ) y análogamente
m
Q(ξn ) = Q(ξnm ) ⊂ Q(ξnm ). De los dos contenidos se deduce que Q(ξn )Q(ξm ) ⊂ Q(ξnm ).
n )a (ξ m )b
Por otra parte, al ser (n, m) = 1, existen a, b ∈ Z tales que 1 = an + bm, de donde ξnm = (ξnm nm
n )Q(ξ m ) = Q(ξ )Q(ξ ), lo que nos da el otro contenido.
está en Q(ξnm nm n m
En el Capı́tulo 3 resolvimos varios problemas clásicos sobre construcciones con regla y compás, pero
quedó pendiente el de la construcción de polı́gonos regulares. Ahora ya disponemos de las herramientas
necesarias para resolverlo. Constructible significa constructible con regla y compás.
Teorema 7.19 (Gauss). El n-ágono regular es constructible si y solo si φ(n) es una potencia de 2.
¯
{1} = H0 ⊂ H1 ⊂ · · · ⊂ Hr−2 ⊂ Hr−1 = Gal(Q(ξ + ξ)/Q)
con cada [Hi : Hi−1 ] = 2, y aplicando la correspondencia de Galois se obtiene una torre de extensiones
′
Q = Hr−1 ′
⊂ Hr−2 ¯
⊂ · · · ⊂ H1′ ⊂ H0′ = Q(ξ + ξ)
con cada [Ei−1 : Ei ] = [Hi : Hi−1 ] = 2, y el resultado se sigue del teorema de Wantzel (3.7).
El teorema de Gauss relaciona la idea geométrica de constructibilidad con una condición numérica (que
φ(n) sea potencia de 2), que analizamos a continuación desde el punto de vista aritmético.
Demostración. En general, si n = 2α pα1 1 · · · pαk k con α ≥ 0 y los pi primos impares distintos, se tiene
(si α = 0 el 2α−1 no aparece), que es una potencia de 2 precisamente si los primos impares pi llevan
exponentes nulos (αi = 1) y los pi − 1 son potencias de 2, o sea si n es como en el enunciado.
Demostración. Si ponemos m = 2s q con q impar, se trata de ver que q = 1. Si fuese q > 1 se tendrı́a
sq s s s s
1 + 2m = 1 + 22 = (1 + 22 )((22 )q−1 − (22 )q−2 + · · · − 22 + 1)
s
con 1 < 1 + 22 < 1 + 2m , en contradicción con que 1 + 2m es primo.
s
A los números Fs = 1 + 22 se les denomina números de Fermat y si Fs es primo se dice que es un
primo de Fermat. Los primeros cinco números de Fermat son primos:
F0 = 3 F1 = 5 F2 = 17 F3 = 257 F4 = 65 537
Fermat conjeturó que todos los Fs eran primos, pero en 1732 Euler descompuso F5 = 641 × 6 700 417. Hoy
dı́a no se conoce ningún otro primo de Fermat y se conjetura que no hay más. El problema computacional
es tan complejo que en 2020 solo se conoce la factorización completa de F0 , F1 , . . . , F11 .
El problema de la construcción del n-ágono regular es interesante solo para un número impar de lados,
porque en el caso general, si ponemos n = 2r m con m impar y sabemos construir el m-ágono, entonces el
2m-ágono lo consegumos bisecando sus ángulos, y volviendo a bisecar obtenemos el 4m-ágono, etcétera.
Por tanto, en vista de que solo se conocen 5 primos de Fermat, hoy dı́a solo se puede asegurar la
constructibilidad con regla y compás de 31 (25 − 1) polı́gonos regulares con un número impar de lados.
Si construimos cos(2π/5) sobre el eje real (C en el dibujo), los cortes de su vertical con la circunferencia
unidad (D y D′ ) tendrán coordenadas (cos(2π/5), ± sen(2π/5)); los segmentos que los unen con I = (1, 0)
serán entonces dos lados del pentágono inscrito en dicha circunferencia, y ya solo queda trasladar esos lados
con el compás, cortando la circunferencia, para cerrar el pentágono.
√ J D
Para construir cos(2π/5) usamos el valor ( 5 − 1)/4 obtenido en el
Problema 6-6. Si nuestros puntos iniciales son O, I (segmento unidad),
construimos J e I ′ del modo obvio. Si A es el punto medio de OI ′ , por
p √
el teorema de Pitágoras se tiene AJ = 12 + (1/2)2 = 5/2.
Si la circunferencia con centro A que pasa por J corta al eje hori-
zontal en B, obtenemos I′ A O C B I
√
OB = AB − OA = AJ − OA = ( 5 − 1)/2
El lector interesado puede buscar otra construcción del pentágono regular de lado dado (en lugar del
inscrito en una circunferencia dada) que se basa en que la razón de la diagonal al lado es el número áureo.
Definición 7.23. Dada una extensión finita y de Galois K ⊂ L con grupo de Galois G, se define la norma
de α ∈ L en dicha extensión como el producto de las imágenes de α por todos los automorfismos de G:
Y
L
NK (α) = σ(α) ∈ K
σ∈G
Q
Si aplicamos τ ∈ G a este elemento se obtiene σ∈G τ (σ(α)), y como τ σ recorre G cuando τ recorre G
resulta que obtenemos de nuevo el mismo producto (“en otro orden”). O sea, NK L (α) queda fijo por todos
NQL (a + b ω) = (a + b ω)(a + b ω 2 ) = a2 + b2 − ab ∈ Q
Q(ξ)
3. Si ξ es una raı́z quinta primitiva de la unidad y aplicamos NQ a un elemento de la forma particular
α = a + bξ con a, b ∈ Q obtenemos, operando y usando que ξ + ξ 2 + ξ 3 + ξ 4 = −1:
Q(ξ) a 5 + b5
NQ (α) = a4 − a3 b + a2 b2 − ab3 + b4 =
a+b
Definición 7.25. Una extensión K ⊂ L es cı́clica si es finita y de Galois y Gal(L/K) es un grupo cı́clico.
Demostración. Por inducción en r, con el caso r = 1 evidente. En el caso general, dados ai ∈ K tales que
a1 σ1 + a2 σ2 + · · · + ar σr = 0, basta ver que uno de los coeficientes es 0, pues entonces lo será el resto de
coeficientes por la hipótesis de inducción. Vemos en concreto que a2 = 0.
Teorema 7.27 (Teorema 90 de Hilbert). Sea K ⊂ L una extensión cı́clica de grado n y sea σ un generador
L (α) = 1 si y solo si existe 0 6= β ∈ L tal que α = βσ(β)−1 .
de Gal(L/K). Si α ∈ L, entonces NK
Demostración. Ya hemos visto en (7.24.4) que si existe 0 6= β ∈ L con α = βσ(β)−1 entonces NK L (α) = 1.
L (α) =
Qn−1 i 0 1 n−1 } son LI (7.26), definiendo
Recı́procamente, si NK i=0 σ (α) = 1, como {σ , σ , . . . , σ
i−1
Y
γ0 = 1 y γi = σ j (α) para 1 ≤ i ≤ n − 1
j=0
Pn−1 Pn−1
se tendrá que i=0 γi σ i 6= 0, por lo que que existirá θ ∈ L tal que β = i=0 γi σ i (θ) 6= 0.
Se tiene entonces que
n−1
X n−2
X
σ(β) = σ(γi )σ i+1 (θ) = σ(θ) + σ(γi )σ i+1 (θ) + σ(γn−1 )θ
i=0 i=1
y, además, Qn−1
j=0 σ j (α) L (α)
NK 1
σ(γn−1 ) = = =
α α α
de donde
Pn−2 Pn−1 Pn−1
i=1 γi+1 σ i+1 (θ) θ θ + ασ(θ) + i=2 γi σ i (θ) i
i=0 γi σ (θ) β
σ(β) = σ(θ) + + = = =
α α α α α
y por tanto α = βσ(β)−1 .
Proposición 7.29. Sean n un entero positivo, K un cuerpo que contiene una raı́z n-ésima primitiva de la
unidad y L una extensión cı́clica de K de grado n. Entonces existe a ∈ K, a 6= 0, tal que:
1. X n − a es irreducible en K[X].
2. L es el cuerpo de descomposición de X n − a sobre K.
3. L = K(β) para cada raı́z n-ésima β ∈ L de a.
Demostración. Sea ξ una raı́z n-ésima primitiva de la unidad en K y σ un generador de Gal(L/K). Como
ξ ∈ K, NKL (ξ) = ξ n = 1 y, por el teorema 90 de Hilbert, existe 0 6= β ∈ L tal que ξ = σ(β)β −1 ; por lo que
Proposición 7.30. Sean n un entero positivo, K un cuerpo que contiene una raı́z n-ésima primitiva de la
unidad y a ∈ K. Si L es el cuerpo de descomposición de X n − a sobre K, entonces K ⊂ L es una extensión
cı́clica y [L : K] | n.
está bien definida, y se comprueba fácilmente que es un homomorfismo de grupos, que es inyectivo pues
Observación 7.31. Los dos resultados anteriores no son ciertos cuando K no contiene una raı́z n-ésima
primitiva de la unidad. Para el primero de ellos basta considerar la extensión Q ⊂ Q(ξ) donde ξ es una raı́z
quinta primitiva de la unidad; para el segundo la extensión Q ⊂ L con L el cuerpo de descomposición de
X 3 − 2 sobre Q.
7.5. Problemas
7-1. Sea n un entero impar y K un cuerpo de caracterı́stica distinta de dos que contiene una raı́z n-ésima
primitiva de la unidad. Prueba que K contiene un raı́z 2n-ésima primitiva de la unidad2 .
Muestra que, en caracterı́stica 2, el resultado es falso.
7-2. Dado el cuerpo de 4 elementos F4 = Z2 (α), con α raı́z del irreducible X 2 + X + 1, sabemos que F∗4 es
cı́clico (9.1) y por tanto isomorfo a Z3 , ası́ que sabemos cuántos elementos tiene de cada orden (9.2).
Esto concuerda con los cálculos del Ejemplo 7.2.5. Se pide:
a) Considera F8 = Z2 (α), con α raı́z de3 X 3 + X + 1. Como F∗8 ∼ = Z7 , ¿para qué valores de n hay
raı́ces n-ésimas primitivas en F8 ? Calcula las potencias sucesivas de α.
b) Considera F16 = Z2 (α), con α raı́z de X 4 + X + 1. Como F∗16 ∼ = Z15 , ¿para qué valores de n hay
raı́ces n-ésimas primitivas en F16 ? Halla una en concreto para cada posible valor de n.
c) Haz lo mismo para F9 = Z3 (α), con α raı́z de X 2 + 1.
d ) Haz lo mismo para F25 = Z5 (α), con α raı́z de X 2 + X + 1.
7-3. Sea φ la función de Euler4 . Recuerda que para las potencias de primos se tiene φ(pr ) = pr−1 (p − 1) y
para n, m coprimos se tiene φ(nm) = φ(n)φ(m), por lo que en general se tiene
7-5. Prueba que si la extensión Q ⊂ K es finita entonces K contiene solo un número finito de raı́ces de uno.
7-6. Prueba5 las siguientes propiedades de los polinomios ciclotómicos Φn (X) sobre Q.
Φn (X p )
d ) Si p es primo y no divide a n, entonces Φpn (X) = .
Φn (X)
7-7. Comprueba que Φ12 (X) = X 4 − X 2 + 1 se factoriza en Z11 [X] como producto de dos irreducibles de
grado 2, y se descompone completamente en Z13 [X].
2
Usa este resultado sobre grupos: si a, b ∈ G conmutan y tienen órdenes finitos y coprimos, entonces o(ab) = o(a)o(b).
3
Es uno de los dos polinomios irreducibles de grado 3 sobre Z2 ; si se considera el otro, X 3 + X 2 + 1, sale todo análogo.
4
Este problema se puede poner en primer curso, no usa nada especı́fico de esta asignatura. En d) puedes usar Maxima para
conjeturar, usando for n:1 thru 100 do print(n,totient(n),integerp(n/totient(n))).
5
En todos los casos, prueba que tienen el mismo grado y que todas las raı́ces del primero son raı́ces del segundo.
7-8. Calcula Irr(η, Q), donde η = ξ + ξ −1 para un raı́z séptima primitiva ξ de la unidad6 .
7-10. Sean a un entero distinto de cero y de ±1 y no divisible por ningún cuadrado mayor que 1, p un primo
y K el cuerpo de descomposición de X p − a sobre Q. Calcula8 [K : Q].
7-11. Para n = 5, 7, 8, 9, 11, 25, considera ξ = e2πi/n ∈ C y resuelve los siguientes apartados:
7-12. (Este problema no usa nada especı́fico de esta asignatura, es un apoyo para los dos que siguen.)
Comprueba9 que Z∗21 y Z∗36 tienen orden 12 y por tanto son isomorfos a Z12 o a Z6 × Z2 (9.9). Computa
órdenes en Z∗21 y Z∗36 y usa (9.2) para deducir que ambos son de hecho isomorfos a Z6 × Z2 .
Describe el retı́culo de subgrupos de Z6 × Z2 , comprobando qu tiene tres subgrupos de orden 2 y otros
tantos de orden 6, mientras que para los órdenes 3 y 4 tiene un único subgrupo.
7-13. Para ξ = e2πi/21 ∈ C, determina los cuerpos intermedios L de la extensión Q ⊂ L ⊂ Q(ξ) que tienen
grado 2 o 3 sobre Q, indicando para cada uno de ellos un elemento primitivo sobre Q y el polinomio
irreducible sobre Q de dicho elemento.
a) Prueba que la extensión Q ⊂ Q(ξ) contiene un único cuerpo intermedio E de grado 3 sobre Q. En
un elemento primitivo para E sobre Q.
b) Lo mismo para un cuerpo intermedio F de grado 4 sobre Q.
c) Prueba que hay tres cuerpos intermedios de grado 6 sobre Q y obtén el polinomio irreducible de
ξ sobre cada uno de ellos.
√
7-15. Determina los primos p para los que Q( p) = Q(cos(2π/p)).
7-16. Encuentra polinomios irreducibles sobre Q cuyos cuerpos de descomposición sobre Q tengan grupo de
Galois isomorfo a Z5 , Z8 y Z11 , respectivamente.
7-17. Sea K un cuerpo que contiene una raı́z n-ésima primitiva de la unidad y K ⊂ L una extensión cı́clica
de grado n. Prueba que si L = K(β1 ) = K(β2 ), donde cada βi es una raı́z de un polinomio irreducible
de la forma X n − ai ∈ K[X], entonces β2 = (β1 )t c con c ∈ K y (t, n) = 1.
6
Como en la demostración de (7.19), puedes ver que [Q(ξ) : Q(η)] = 2, por lo que ya sabes el grado. Calcula η, η 2 , η 3 , . . .
(hasta donde necesites) y busca una relación usando que 1 + ξ + · · · + ξ 6 = 0.
7
Usa la idea del problema anterior, puesto que cos(2π/11) = 21 (ξ + ξ −1 ) para un raı́z undécima primitiva ξ de la unidad.
8 √
Puedes inspirarte en X 3 − 2. Como K contiene a p a y a e2πi/p , hay cuerpos intermedios de grados coprimos p y p − 1.
9
El resultado (9.9) del apéndice es impreciso, pero de él se deduce la afirmación que se hace, que puedes dar por cierta.
Tras la obtención, por los algebristas italianos del S. XVI, de las soluciones de las ecuaciones de grados
tres y cuatro expresadas mediante radicales, quedó abierta la cuestión de determinar si existı́an expresiones
de este tipo que proporcionaran las soluciones de ecuaciones de cualquier grado. Determinar que esto no
es posible, en general, para ecuaciones de grado mayor que cuatro (Teorema de Abel) y caracterizar las
ecuaciones para las que sı́ es posible, son precisamente las cuestiones fundamentales que viene a resolver
la teorı́a de Galois, cuyo resultado más importante es el Teorema de Galois relativo a la resolubilidad de
ecuaciones por radicales. En este capı́tulo se abordan estos resultados.
Históricamente, resolver una ecuación por radicales consiste en expresar las raı́ces de dicha ecuación
mediante una fórmula que esté dada en términos de las cuatro operaciones elementales y la adjunción de
radicales. La formalización de este proceso conduce al concepto siguiente.
Definición 8.1. Una extensión de cuerpos K ⊂ L es radical si existe una torre de extensiones simples
en la que cada αi es raı́z de un elemento del cuerpo anterior, o sea αiri ∈ K(α1 , . . . , αi−1 ) para cierto ri ∈ Z+ ;
para i = 0 se entiende que K() = K.
A una sucesión α1 , . . . , αn ∈ L de este tipo se le denomina una sucesión radical de la extensión K ⊂ L
(con exponentes r1 , . . . , rn ), y a la torre de extensiones se le llama torre radical.
Nótese que cada αi es algebraico sobre el cuerpo anterior, por lo que toda extensión radical es finita.
p3
√ √
Ejemplo 8.2. Por ejemplo, si L = Q(β) con β = 5 − 7, entonces tomando α = 7 vemos que α, β es
una sucesión radical para Q ⊂ L con exponentes 2 y 3, puesto que α2 ∈ Q y β 3 ∈ Q(α).
Claramente, un elemento β de una extensión radical es una expresión polinómica en los αi , que a su vez
son raı́ces ri -ésimas de expresiones polinómicas en los αj anteriores. Por tanto β se puede expresar a partir
de elementos K mediante operaciones elementales y extracción de raı́ces. Esto da sentido a:
Definición 8.3. Dados un cuerpo K y f ∈ K[X], la ecuación f (X) = 0 es resoluble por radicales sobre K
si f se descompone completamente en una extensión radical de K, o sea si existen una extensión radical
K ⊂ L y un cuerpo E de descomposición de f sobre K tales que K ⊂ E ⊂ L.
98 Resolubilidad de ecuaciones por radicales
Las propiedades básicas de las extensiones radicales se deducen fácilmente de resultados anteriores:
Proposición 8.5. Se verifican las siguientes propiedades:
1. Si K ⊂ L es una extensión radical y K ⊂ E ⊂ L entonces E ⊂ L es una extensión radical.
2. Si K ⊂ E y E ⊂ L son extensiones radicales, entonces K ⊂ L es una extensión radical.
3. La clase de las extensiones radicales es estable por levantamientos.
4. Si K ⊂ L1 y K ⊂ L2 son extensiones radicales admisibles, entonces K ⊂ L1 L2 es radical.
5. Si K ⊂ L es una extensión radical y N es la clausura normal de L sobre K, entonces K ⊂ N es una
extensión radical.
Observación 8.6. El apartado 5 implica que si una raı́z de un polinomio irreducible se puede expresar
mediante radicales, entonces también se puede expresar ası́ cualquier otra raı́z.
Al tratar con extensiones radicales separables podemos suponer que los ı́ndices de las raı́ces no dividen
a la caracterı́stica, gracias al siguiente resultado:
y como Irr(αs , K) no puede tener raı́ces múltiples por la separabilidad deducimos que Irr(αs , K) = X − αs
y por tanto αs ∈ K.
Definición 8.8. Un grupo finito G es resoluble si existe una cadena de subgrupos como la siguiente en la
que cada cociente Hi+1 /Hi es abeliano:
{1} = H0 E H1 E · · · E Hn−1 E Hn = G
Usaremos sin demostrar que, para grupos finitos, la condición de que los cocientes sean abelianos se puede
sustituir por que sean cı́clicos de orden primo.
Proposición 8.10. Los grupos simétrico Sn y alternado An (pág. 119) son resolubles si y solo si n ≤ 4.
Veamos un primer resultado que relaciona los grupos resolubles con las extensiones de cuerpos:
1
Los apartados 2 y 3 se deducen fácilmente de las teoremas de la correspondencia y de isomorfı́a. Para probar 1 se suele
considerar una caracterización alternativa de los grupos resolubles como aquéllos cuya serie derivada llega hasta el grupo
trivial. El subgrupo derivado de G es el subgrupo G′ generado por todos los conmutadores [a, b] = aba−1 b−1 con a, b ∈ G, y
es el menor subgrupo normal de G que da un cociente abeliano. La serie derivada es G D G′ D G′′ D · · · .
Proposición 8.11. Sean K ⊂ L finita y de Galois, n ∈ Z+ tal que car(K) 6 | n y ξ una raı́z n-ésima primitiva
de la unidad en una extensión de L. Entonces Gal(L/K) es resoluble si y solo si lo es Gal(L(ξ)/K(ξ)).
Gal(L(ξ)/K) Gal(L(ξ)/K)
Gal(L/K) ∼
= Gal(K(ξ)/K) ∼
=
Gal(L(ξ)/L) Gal(L(ξ)/K(ξ))
Como esos subgrupos normales son resolubles, aplicando (8.9) a cada uno de los isomorfimos vemos que la
resolubilidad de Gal(L(ξ)/K) equivale tanto a la de Gal(L/K) como a la de Gal(L(ξ)/K(ξ)), y por tanto
estas son equivalentes, como querı́amos ver.
Teorema 8.12. Si K ⊂ L es una extensión radical y de Galois, entonces Gal(L/K) es un grupo resoluble.
Demostración. Sea α1 , . . . , αn una sucesión radical de L sobre K, con cada αiri ∈ K(α1 , . . . , αi−1 ); por el
Lema 8.7 podemos suponer que car(K) 6 | ri .
Entonces car(K) 6 | m = r1 · · · rn y por tanto existe es una raı́z m-ésima primitiva de la unidad ξ. Por
(8.11), para probar que Gal(L/K) es resoluble bastará ver que lo es Gal(L(ξ)/K(ξ)).
Sean entonces E0 = K(ξ) y, para i = 1, . . . , n, Ei = K(ξ, α1 , . . . , αi ). Como E0 contiene una raı́z m-ésima
primitiva de la unidad, cada Ei−1 contiene una raı́z ri -ésima primitiva de la unidad y Ei = Ei−1 (αi ) con
αiri ∈ Ei−1 . Por tanto las extensiones Ei−1 ⊂ Ei son cı́clicas (7.30).
en la que cada subgrupo es normal en el siguiente por (6.28) y cada cociente es cı́clico por el párrafo anterior,
por lo que Gal(L(ξ)/K(ξ)) es resoluble, como querı́amos ver.
Por otra parte, como K0 ⊂ E es algebraica y de Galois deducimos que E es un cuerpo estable en K0 ⊂ N
(6.27), y por tanto la restricción a E de cada K-automorfismo de N induce un homomorfismo de grupos
G′ = Gal(N/K0 ) → Gal(E/K0 ) = G
que es suprayectivo por ser K0 ⊂ N normal. Ası́, por el primer teorema de isomorfı́a, G es un cociente del
grupo resoluble G′ y por tanto G es resoluble.
Definición 8.14. Sean K un cuerpo y f ∈ K[X]. El grupo de Galois del polinomio f o de la ecuación
f (X) = 0, denotado por Gf , es el grupo de Galois de la extensión K ⊂ L donde L es un cuerpo de descom-
posición de f sobre K. Por (4.20), Gf no depende del cuerpo de descomposición elegido.
1. Para el polinomio ciclotómico f (X) = Φp (X) con p primo, su cuerpo de descomposición es Q(ξ) con
ξ = e2πi/p , y por lo tanto su grupo de Galois es cı́clico Gf = Gal(Q(ξ)/Q) ∼
= Z∗p ∼
= Zp−1 (7.17).
Para p = 5 un generador de Gf es el automorfismo σ dado por σ(ξ) = ξ 2 . Si numeramos las raı́ces
ξ, ξ 2 , ξ 3 , ξ 4 por sus exponentes, la imagen de σ en Sn es el 4-ciclo (1, 2, 4, 3) y por tanto
Una diferencia notable entre estos ejemplos radica en que en el primero, como f es irreducible, en Gf
existen elementos que aplican una raı́z fijada en cada una de demás; o sea, en H hay permutaciones que
√ √
llevan cada i a cada j. Esto no pasa en el segundo, pues como 2 y 3 no son Q-conjugados, ningún
elemento de Gf lleva uno a otro; o sea en H ninguna permutación lleva el 1 al 3.
La justificación de esta diferencia queda formalizada en la siguiente definición y en el resultado porterior.
Definición 8.17. Un subgrupo H del grupo simétrico Sn es transitivo en Sn si para cada par (i, j) de
elementos de {1, . . . , n} existe un σ ∈ H tal que σ(i) = j.
Para el subgrupo H de (8.15), esto significa que para cada par (i, j) existe σ ∈ Gf con σ(αi ) = αj .
(Nótese que se pueden cambiar los pares (i, j) por pares (1, j), al ser H cerrado para inversos.)
En los ejemplos anteriores, el primer H es transitivo y el segundo no, y el primer polinomio es irreducible
y el segundo no. Esto no es casual:
Proposición 8.18. Sean K un cuerpo, f ∈ K[X] un polinomio de grado n = gr(f ) sin raı́ces múltiples, Gf
su grupo de Galois y H el subgrupo descrito en (8.15). Entonces f es irreducible en K[X] si y solo si H es
transitivo en Sn , y en este caso n divide a |Gf |.
Si f es irreducible, dados i, j existe un K-isomorfismo τ : K(αi ) → K(αj ) con τ (αi ) = αj (2.29), y por
(4.5) τ se extiende a un K-automorfismo de L; es decir, existe σ ∈ Gf tal que σ|K(αi ) = τ y por tanto
σ(αi ) = αj , por lo que H es transitivo en Sn .
Recı́procamente, si H es transitivo entonces para cada subı́ndice j existe un σ ∈ Gf tal que σ(α1 ) = αj
y por tanto cada αj es raı́z de g = Irr(α1 , K). Como f no tiene raı́ces múltiples deducimos que f |g, y como
g es irreducible entonces f y g son asociados y por tanto f es irreducible.
Además, en este caso K ⊂ L es normal y separable y por tanto de Galois, de modo que [L : K] = |Gf |;
pero este es múltiplo de [K(α) : K] = gr(g) = gr(f ).
Ya podemos obtener condiciones necesarias y suficientes para que una ecuación sea resoluble por radicales.
Primero, una necesaria, que nos permite mostrar una ecuación no resoluble por radicales:
Proposición 8.19. Sea K un cuerpo y f ∈ K[X]. Si la ecuación f (X) = 0 es resoluble por radicales
sobre K, entonces su grupo de Galois Gf es resoluble.
Demostración. or hipótesis existe una extensión radical L de K que contiene un cuerpo de descomposición
E de f , en cuyo caso Gf = Gal(E/K) es resoluble por (8.13).
Ejemplo 8.20. Sea f (X) = 2X 5 − 10X + 5 ∈ Q[X], o cualquier otro polinomio sobre Q irreducible de grado
primo p ≥ 5 con p − 2 raı́ces reales y dos raı́ces complejas2 . Vamos a ver que Gf ∼
= Sp , y entonces de (8.10)
y (8.19) se deducirá que la ecuación f (X) = 0 no es resoluble por radicales.
Como f es irreducible, el subgrupo H de Sp (8.18) es transitivo. Además la conjugación intercambia las
dos raı́ces complejas de f y fija las reales, por lo que es un elemento de Gf cuya imagen en H es un 2-ciclo.
Basta pues ver que el único subgrupo transitivo H de Sp que contiene un 2-ciclo es el propio Sp .
Esto ya es un ejercicio más o menos ingenioso sobre permutaciones. Para cualquier subgrupo H de
cualquier Sn , la relación en {1, 2, . . . , n} dada por i ∼ j si (i, j) ∈ H, donde (i, i) = id, es reflexiva y
simétrica, y también transitiva3 pues (i, k) = (j, k)(i, j)(j, k). Vamos a ver que si H es transitivo entonces
todas sus clases de equivalencia tienen el mismo cardinal (que será un divisor de n):
Para ello, claramente basta con considerar dos clases [i], [j] y encontrar una aplicación inyectiva [i] → [j].
Por transitividad existe σ ∈ H con σ(i) = j. Para cada k ∈ [i] se tiene σ(k) ∈ [j], pues (i, k) ∈ H implica
(j, σ(k)) = σ(i, k)σ −1 ∈ H. Por tanto la restricción σ : [i] → [j] es la aplicación inyectiva deseada.
Si H contiene un 2-ciclo, ese cardinal es un divisor de p mayor que 1, luego solo hay una clase. O sea,
H contiene a todas las trasposiciones, luego H = Sp (9.12).
Para obtener un recı́proco de (8.19) hay que imponer ciertas condiciones al cuerpo base.
2
f = 2X 5 − 10X + 5 es irreducible por Eisenstein. Viéndolo como una función real, el teorema de Bolzano nos da raı́ces en
los intervalos (−2, −1), (−1, 1) y (1, 2) y su derivada f ′ = 10(X 4 − 1) nos dice que es decreciente en (−1, 1) y creciente en los
otros dos tramos, por lo que no puede tener más que esas tres raı́ces (reales).
3
Ojo porque usamos la palabra “transitivo” en dos sentidos distintos.
Sea n > 1 y supóngase el resultado cierto para toda extensión con grado menor que n. Si K ⊂ E es una
extensión con [E : K] = n que verifica las hipótesis, al ser G = Gal(E/K) un grupo finito resoluble, por el
último comentario en la Definición 8.8, existe un subgrupo H E G tal que [G : H] = p con p primo y, como
car(K) 6 | [E : K] y p|n, se tiene que car(K) 6= p.
Si ξ es una raı́z p-ésima primitiva de la unidad, se tiene el diagrama E
de extensiones de la derecha. Como K ⊂ E es finita y de Galois, por el
K E ∩ K(ξ) E(ξ)
teorema de las irracionalidades accesorias de Lagrange (6.30) sabemos
que K(ξ) ⊂ E(ξ) es finita y de Galois con K(ξ)
Gal(E(ξ)/K(ξ)) ∼
= Gal(E/E ∩ K(ξ))
que es un subgrupo de Gal(E/K) y, por tanto, resoluble (8.9).
Como la extensión K ⊂ K(ξ) es evidentemente radical, para demostrar el resultado bastará probar que
E(ξ) está contenido en una extensión radical de K(ξ).
Gal(E(ξ)/K(ξ)) ∼
= Gal(E/K)
E(ξ) ←→ {1}
↑ △
′
N =F ←→ N
↑ △
K(ξ) ←→ Gal(E(ξ)/K(ξ))
Observación 8.22. El uso que se ha hecho en esta demostración del Teorema de las irracionalidades
accesorias de Lagrange justifica la denominación de dicho resultado; añadir las convenientes raı́ces de la
unidad (las irracionalidades) no afecta a la resolubilidad por radicales de la ecuación.
Teorema 8.23 (Galois). Sean K un cuerpo y f ∈ K[X] de grado n > 0 tal que car(K) 6 | n! (o sea,
car(K) = 0 o car(K) = p primo > n).
Entonces la ecuación f (X) = 0 es resoluble por radicales si y solo si el grupo Gf es resoluble.
Corolario 8.24. Si car(K) 6= 2, 3 toda ecuación polinómica sobre K de grado ≤ 4 es resoluble por radicales.
Demostración. Como S4 es resoluble (8.10) y Gf es isomorfo a un subgrupo suyo (8.18.1), deducimos que
Gf es resoluble (8.9.1) y por tanto podemos aplicar (8.23).
puede ser obtenido como imagen de Fn (X) por el único homomorfismo de anillos
Demostración. Como consecuencia del comentario anterior bastará demostrar que el grupo de Galois del
polinomio general de grado n es siempre isomorfo a Sn .
σ̄ ∈ Sn , la dada por σ(Xi ) = Xσ(i) . Recı́procamente, cada permutación en Sn puede ser considerada como
automorfismo de K[X1 , . . . , Xn ], el obtenido por la propiedad universal de los polinomios correspondiente a
la permutación de las indeterminadas. Este automorfismo induce un automorfismo en su cuerpo de cocientes
K(X1 , . . . , Xn ) que deja invariantes los elementos de K(s1 , . . . , sn ) y, por tanto,
Gal(K(X1 , . . . , Xn )/K(s1 , . . . , sn )) ∼
= Sn
Sean ahora α1 , . . . , αn las raı́ces del polinomio general de grado n, Fn (X), en un cierto cuerpo de des-
composición L de Fn (X) sobre K(T1 , . . . , Tn ); esto es,
L = K(T1 , . . . , Tn )(α1 , . . . , αn )
es decir, Ti = si (α1 , . . . , αn ), donde los si son los polinomios simétricos elementales en n indeterminadas.
En consecuencia, en L = K(T1 , . . . , Tn )(α1 , . . . , αn ) “sobran los Ti ”, es decir L = K(α1 , . . . , αn ).
Ahora bien, el isomorfismo (1.62)
θ′ : K(T1 , . . . , Tn ) → K(s1 , . . . , sn )
y este a su vez, por (4.5), se extiende a un isomorfismo entre el cuerpo de descomposición de Fn (X) sobre
K(T1 , . . . , Tn ), que es L, y el cuerpo de descomposición de Gn (X) = θ′ (Fn (X)) sobre K(s1 , . . . , sn ), que es
K(X1 , . . . , Xn ) pues
= Gal(K(X1 , . . . , Xn )/K(s1 , . . . , sn )) ∼
Gal(L/K(T1 , . . . , Tn )) ∼ = Sn
Discriminante de un polinomio
Definición 8.27. Sea K un cuerpo de caracterı́stica distinta de dos, si f ∈ K[X] es un polinomio de grado
n sin raı́ces múltiples y α1 , . . . , αn son sus raı́ces en un cuerpo de descomposición L de f (X) sobre K se
Q
define el discriminante de f como D = ∆2 donde ∆ = i<j (αi − αj ) ∈ L.
Proposición 8.28. Sean K un cuerpo de caracterı́stica distinta de dos y f ∈ K[X] un polinomio sin raı́ces
múltiples en un cuerpo de descomposición. Entonces se verifican las siguientes propiedades:
ii) Si σ ∈ Gf , entonces σ es una permutación par si y solo si σ(∆) = ∆ y es impar si y solo si σ(∆) = −∆.
Q Q Q Q
( k<i<l (αk − αi ))( k<i<l (αi − αl ))( l<i (αk − αi ))( l<i (αl − αi ))
y, para cada uno de estos factores, se tiene:
Q Q Q Q
τ ( i<j (αi − αj )) = i<j (αi − αj ), τ( i<k (αi − αk )) = i<k (αi − αl ),
i,j6=k,l i,j6=k,l
Q Q Q Q
τ( i<k (αi − αl )) = i<k (αi − αk ), τ( k<i<l (αk − αi )) = (−1)l−k−1 ( k<i<l (αi − αl )),
Q Q Q Q
τ( k<i<l (αi − αl )) = (−1)l−k−1 ( k<i<l (αk − αi )), τ ( l<i (αk − αi )) = l<i (αl − αi ),
Q Q
τ( l<i (αl − αi )) = l<i (αk − αi ), τ (αk − αl ) = −(αk − αl ),
y se deduce que τ (∆) = (−1)2(l−k−1)+1 ∆ = −∆; el resultado se sigue de la descomposición de cada permu-
tación como producto de transposiciones.
i) Es consecuencia de que si σ ∈ Gf entonces:
σ(D) = σ(∆2 ) = (±∆)2 = ∆2 = D
y como la extensión es de Galois ya que f es separable, entonces D ∈ K.
es un polinomio simétrico, con lo cual para cada σ ∈ Gf se tiene σ(D) = D y por tanto D ∈ K.
Si, como es habitual, se denota por An el grupo alternado, se tiene el resultado siguiente.
Proposición 8.29. Sean K un cuerpo de caracterı́stica distinta de dos, f ∈ K[X] un polinomio de grado
n sin raı́ces múltiples en un cuerpo de descomposición L de f sobre K y Gf su grupo de Galois. Entonces
en la correspondencia de Galois de la extensión K ⊂ L se tiene que K(∆)′ = Gf ∩ An . En particular Gf
está formado solo por permutaciones pares si y solo si ∆ ∈ K.
Demostración. σ ∈ K(∆)′ si y solo si σ(∆) = ∆, y por (8.28) esto ocurre si y sólo si σ ∈ An . En particular
Gf ⊂ An si y solo si para cada σ ∈ Gf se tiene σ(∆) = ∆ o, equivalentemente, si y solo si ∆ ∈ G′f = K.
Ecuaciones cuadráticas
El caso de polinomios de grado dos queda resuelto con el resultado siguiente cuya demostración es una
consecuencia inmediata de que S2 ∼
= Z2 .
Proposición 8.30. Sea f ∈ K[X] irreducible de grado dos y Gf su grupo de Galois. Si f (X) es separable,
entonces Gf ∼
= Z2 ; en caso contrario, Gf = {1}.
Ecuaciones cúbicas
Proposición 8.31. Si f (X) ∈ K[X] es un polinomio irreducible y separable de grado tres, entonces o bien
Gf ∼= S3 o bien Gf ∼= Z3 . Además, si la caracterı́stica de K es distinta de dos, entonces Gf ∼
= Z3 si y solo
si el discriminante D de f (X) es un cuadrado en K.
S3 L
{1} K
donde H1 =< (2, 3) >, H2 =< (1, 3) >, H3 =< (1, 2) > y H4 = A3 =< (1, 2, 3) > y α1 , α2 y α3 son las
raı́ces de f (X).
Proposición 8.33. Sea K un cuerpo con car(K) 6= 2, 3. Si f (X) = X 3 + aX 2 + bX + c ∈ K[X] tiene tres
raı́ces distintas en un cuerpo de descomposición, entonces el polinomio g(X) = f (X − a/3) tiene la forma
X 3 + pX + q y su discriminante es Df = Dg = −4p3 − 27q 2 .
Demostración. Un cálculo directo demuestra que g(X) = f (X − a/3) tiene la forma requerida y si L es
un cuerpo de descomposición de f sobre K, un elemento α ∈ L es raı́z de f (X) si y solo si α + a/3 es raı́z
de g(X) de lo que fácilmente se deduce que ambos polinomios tienen el mismo discriminante, Df = Dg .
Por otra parte, expresando el polinomio simétrico (X1 − X2 )2 (X1 − X3 )2 (X2 − X3 )2 en función de los
polinomios simétricos elementales se obtiene que
Ecuaciones cuárticas
Entre los subgrupos de S4 , para estudiar las ecuaciones de grado cuatro, como se verá más adelante,
desempeña un papel importante el subgrupo
Lema 8.35. Sea f ∈ K[X] un polinomio de grado cuatro con raı́ces distintas α1 , α2 , α3 , α4 en un cuerpo de
descomposición L de f sobre K, Gf su grupo de Galois y sean
u = α1 α2 + α3 α4 v = α1 α3 + α2 α4 w = α1 α4 + α2 α3
Demostración. i) Es claro que cada σ ∈ V ∩ Gf deja fijos a u, v y w y que cada σ ∈ S4 \ V mueve alguno
de ellos4 , por lo que K(u, v, w) = (V ∩ Gf )′ .
ii) Es consecuencia del Segundo Teorema Fundamental de la Teorı́a de Galois (6.28), pues V ∩ Gf E Gf .
iii) Es un cálculo directo utilizando los polinomios simétricos y las fórmulas de Cardano-Vieta (1.63).
Definición 8.36. En las condiciones anteriores, se denomina resolvente cúbica de f (X) al polinomio
El papel de la resolvente cúbica en el estudio de las cuárticas es similar al del discriminante en las cúbicas:
permite reducir el problema al estudio de una ecuación de un grado menos, como se verá a continuación.
Proposición 8.37. Sean f ∈ K[X] un polinomio irreducible y separable de grado cuatro, K(u, v, w) la
extensión generada sobre K por las raı́ces de su resolvente cúbica Rf (X) y m = [K(u, v, w) : K]. Entonces:
i) m = 6 ⇔ Gf ∼
= S4 .
ii) m = 3 ⇔ Gf ∼
= A4 .
= D4 ó Gf ∼
iii) m = 2 ⇔ Gf ∼ = Z4 , con Gf ∼
= D4 ⇔ f es irreducible sobre K(u, v, w).
=V ∼
iv) m = 1 ⇔ Gf ∼ = Z2 × Z2 .
|Gf |
Demostración. Por el apartado ii) del Lema 8.36 se tiene m = [K(u, v, w) : K] = . Cuando
|V ∩ Gf |
1
V ⊂ Gf es por tanto m = 4 |Gf | y ası́, claramente:
Gf ∼
= S4 ⇒ m = 6 Gf ∼
= A4 ⇒ m = 3 Gf = V ⇒ m = 1
Como esas cinco son las únicas opciones para Gf , tenemos todos los ⇔ en las primeras afirmaciones,
y solo falta ver la segunda afirmación de iii). Vemos que si Gf ∼
= D4 entonces f es irreducible, y que si
∼
Gf = Z4 entonces no lo es:
4
Las permutaciones que no están en V son ciclos, y por ejemplo tanto (1 2) como (1 2 3) como (1 2 3 4) mueven w.
Si Gf ∼
= D4 entonces V ∩ Gf = V = Gal(L/K(u, v, w)) y, si α1 , α2 , α3 , α4 son las raı́ces de f (X), como
V es transitivo, para cada i 6= j existe un σ ∈ V ∩ Gf , tal que σ(αi ) = αj ; ası́
σ
K(u, v, w)(αi ) ∼
= K(u, v, w)(αj )
con σ|K(u,v,w) = Id y σ(αi ) = αj , por tanto αi y αj son raı́ces del mismo irreducible sobre K(u, v, w) de
donde se concluye que este irreducible es f (X).
Si Gf ∼= Z4 , entonces V ∩ Gf = Gal(L/K(u, v, w)) tiene orden 2 y por lo tanto no es transitivo,
luego existen ı́ndices i, j tales que para cada σ ∈ V ∩ Gf se verifica σ(αi ) 6= αj y, como L es el cuerpo
de descomposición de f sobre K(u, v, w)(αi ) y K(u, v, w)(αj ), si existiese un K(u, v, w)-isomorfismo de
K(u, v, w)(αi ) en K(u, v, w)(αj ) que transformara αi en αj se extenderı́a a un elemento de Gal(L/K(u, v, w)),
αi y αj no pueden ser raı́ces del mismo irreducible sobre K(u, v, w) y, por consiguiente f (X) no puede ser
irreducible sobre K(u, v, w).
q q
√ √ √ √
= (X 2 + 2 2 − 2 X + 2)(X 2 − 2 2 − 2 X + 2)
√ p √ √
y ninguno de estos factores está en Q( 2)[X], pues 2 2 − 2 6∈ Q( 2), el polinomio f (X) es también
√
irreducible sobre Q( 2) y ası́ Gf ∼ = D4 .
4. Al polinomio f (X) = X 4 +X 2 +1 ∈ Q[X] no se le puede aplicar la Proposición 8.37 ya que es reducible
sobre Q; de hecho, como f (X) = (X 2 + X + 1)(X 2 − X + 1), su cuerpo de descomposición sobre Q es
√
Q( 3 i) que tiene grado dos sobre Q y, por tanto, Gf ∼
= Z2 .
5
√ √
También se pueden calcular sus raı́ces complejas y agruparlas para obtener la factorización (X 2 − 3 X + 1)(X 2 + 3 X + 1)
en R[X] cuya unicidad muestra que no hay una tal factorización en Q[X].
Sabemos que la ecuación general de grado n no es resoluble por radicales para n ≥ 5 (8.26) y sı́ lo es
para n ≤ 4 (8.24). A continuación desarrollamos un método para resolver las de grado ≤ 4 que además se
podrá aplicar en algunos casos a ecuaciones de grado superior que sı́ sean resolubles.
Si f ∈ K[X] tiene grado n con car(K) 6 | n! y el grupo de Galois Gf es cı́clico, la ecuación f (X) = 0 es
resoluble por radicales (8.23); para resolverla se utilizará el resultado siguiente.
Proposición 8.39. Sea f ∈ K[X] irreducible de grado n con car(K) 6 | n! y grupo de Galois Gf cı́clico.
Entonces Gf tiene orden n.
Definición 8.40. En las condiciones anteriores (f ∈ K[X] irreducible, gr(f ) = n, car(K) 6 | n!, Gf = hσi),
si además K contiene todas las raı́ces n-ésimas de la unidad y L es un cuerpo de descomposición de f sobre
K, para cada α ∈ L y cada raı́z n-ésima de la unidad ξ se define su resolvente de Lagrange como
X
[ξ, α] = ξ j σ j (α) = α + ξσ(α) + ξ 2 σ 2 (α) + · · · + ξ n−1 σ n−1 (α) ∈ L
0≤j<n
En los apartados siguientes se calculan expresamente estas resolventes en los casos de interés.
σ(ξ, α) = σ[α + ξσ(α) + ξ 2 σ 2 (α) + · · · + ξ n−2 σ n−2 (α) + ξ n−1 σ n−1 (α)] =
= σ(α) + ξσ 2 (α) + ξ 2 σ 3 (α) + ··· + ξ n−2 σ n−1 (α) + ξ n−1 σ n (α) =
= ξ −1 [ξσ(α) + ξ 2 σ 2 (α) + ξ 3 σ 3 (α) + · · · + ξ n−1 σ n−1 (α) + ξ n σ n (α)] = ξ −1 [ξ, α]
2. Se tiene lo siguiente, donde las sumas recorren las n raı́ces n-ésimas de la unidad:
X X
[ξ, α] = α + ξσ(α) + ξ 2 σ 2 (α) + · · · + ξ n−1 σ n−1 (α) =
P P P P
= α+( ξ)σ(α) + ( ξ 2 )σ 2 (α) + · · · + ( ξ n−1 )σ n−1 (α)
P
Afirmamos (pendiente de demostrar6 ) que ξ j = 0 para cada j = 1, 2, . . . , n − 1. Esto implicará que
P
[ξ, α] = nα y, como car(K) 6 | n, podremos dividir por n para obtener la igualdad deseada.
En lo que sigue trabajaremos con elementos α ∈ L en principio desconocidos (raı́ces de polinomios) para
los que, sin embargo, sı́ seremos capaces de calcular todas sus resolventes de Lagrange en términos de los
coeficientes del polinomio, y por tanto podremos conocer α.
Cuando K no contenga todas las raı́ces n-ésimas de la unidad (siempre con car(K) 6 | n!), “la cosa tendrá
arreglo” pues, al adjuntar a K una raı́z n-ésima primitiva de la unidad ξ, se obtiene un nuevo cuerpo K(ξ)
que sı́ que las contiene y, como consecuencia del Teorema de las irracionalidades accesorias de Lagrange
(6.30), el grupo de Galois de f sobre K(ξ), o sea Gal(L(ξ)/K(ξ)), es un subgrupo de Gf y, por tanto, es
cı́clico, por lo que se le podrán aplicar los resultados anteriores.
Las raı́ces cuadradas de la unidad, ±1, están en K y, al formar las resolventes de Lagrange con ellas de
α1 y α2 , se tienen:
[1, α1 ] = α1 + σ(α1 ) = α1 + α2 = −p
[−1, α1 ] = α1 − σ(α1 ) = α1 − α2
[1, α2 ] = α2 + σ(α2 ) = α2 + α1 = −p
[−1, α2 ] = α2 − σ(α2 ) = α2 − α1 = −[−1, α2 ]
se le aplica el cambio
1
X X − a1
3
queda reducida a una ecuación de la forma
X 3 + pX + q = 0
Si α1 , α2 , α3 son las raı́ces de esta última ecuación en un cuerpo de descomposición L sobre K(a1 , a2 , a3 ) =
K(p, q), entonces Gf = S3 y a la cadena de subgrupos
{1} ⊳ A3 ⊳ S3
donde
∆ = (α1 − α2 )(α1 − α3 )(α2 − α3 ) = α12 α2 + α22 α3 + α32 α1 − α1 α22 − α2 α32 − α3 α12
que, por la Proposición 8.28, verifica que
y, además, la extensión K(∆) ⊂ L es cı́clica de grado 3 con grupo A3 generado por el ciclo σ = (1, 2, 3).
Entonces
σ([ω, α1 ]) = α2 + ωα3 + ω 2 α1 = ω −1 [ω, α1 ] ⇒ [ω, α1 ]3 ∈ A′3 = K(∆)
σ([ω 2 , α1 ]) = α2 + ω 2 α3 + ωα1 = ω[ω 2 , α1 ] ⇒ [ω 2 , α1 ]3 ∈ A′3 = K(∆)
por lo que
τ ([ω, α1 ]3 ) = [ω 2 , α1 ]3 y τ ([ω 2 , α1 ]3 ) = [ω, α1 ]3
de donde
f (X) = X 4 + a1 X 3 + a2 X 2 + a3 X + a4 = 0
se le aplica el cambio
1
X X − a1
4
queda reducida a una ecuación de la forma
g(X) = X 4 + pX 2 + qX + r = 0
Si α1 , α2 , α3 , α4 son las raı́ces de esta última ecuación en un cuerpo de descomposición L sobre el cuerpo
K(a1 , a2 , a3 , a4 ) = K(p, q, r), entonces
α1 + α2 + α3 + α4 = 0
α1 α2 + α1 α3 + α1 α4 + α2 α3 + α2 α4 + α3 α4 = p
α1 α2 α3 + α1 α2 α4 + α1 α3 α4 + α2 α3 α4 = −q
α1 α2 α3 α4 = r
{1} E V E A4 E S4
y, lo que es más interesante, por Problema 8-20, E es el cuerpo de descomposición sobre K(a1 , a2 , a3 , a4 ) de
la resolvente cúbica de g(X) dada por
cuyas raı́ces
u = (α1 + α2 )(α3 + α4 )
v = (α1 + α3 )(α2 + α4 )
w = (α1 + α4 )(α2 + α3 )
que pueden expresarse mediante radicales, verifican
u + v + w = 2p
uv + uw + vw = p2 − 4r
uvw = −q 2
X 2 + u = X 2 + (α1 + α2 )(α3 + α4 ) = 0
X 2 + v = X 2 + (α1 + α3 )(α2 + α4 ) = 0
X 2 + w = X 2 + (α1 + α4 )(α2 + α3 ) = 0
tienen por raı́ces (α1 + α2 ) y (α3 + α4 ), (α1 + α3 ) y (α2 + α4 ) y (α1 + α4 ) y (α2 + α3 ) respectivamente; lo
que permite encontrar fácilmente las raı́ces de la ecuación g(X) = 0 de la forma:
√ √ √
α1 = 21 ( [α1 + α2 ] + [α1 + α3 ] + [α1 + α4 ] ) = 12 + −u + −v + −w
√ √ √
1 1
α2 = 2 ( [α1 + α2 ] + [α2 + α3 ] + [α2 + α4 ] ) = 2 + −u − −v − −w
√ √ √
α3 = 21 ( [α1 + α3 ] + [α2 + α3 ] + [α3 + α4 ] ) = 12 − −u + −v − −w
√ √ √
α4 = 2 ( [α1 + α4 ] + [α2 + α4 ] + [α3 + α4 ] ) = 2 − −u − −v + −w
1 1
Las expresiones anteriores proporcionan las raı́ces de la ecuación de cuarto grado mediante radicales.
8.7. Problemas
8-1. Sea K ⊂ L una extensión radical separable y N una clausura normal de K ⊂ L. Prueba que si
α1 , . . . , αn es una sucesión radical de K ⊂ L con exponentes r1 , . . . , rn , entonces existe una sucesión
radical β1 , . . . , βm de K ⊂ N con los mismos exponentes.
8-2. Sea f = f1r1 · · · fkrk la factorización en irreducibles de un polinomio f ∈ K[X]. Prueba que la ecuación
f (X) = 0 es resoluble por radicales si y solo si lo es cada una de las ecuaciones fi (X) = 0.
8-5. Prueba que las siguientes ecuaciones son resolubles por radicales sobre Q y, para cada una de ellas, da
una sucesión radical que la resuelva:
a) 2X 4 − 5X 3 + 5X − 2 = 0.
b) X 8 + X 6 − 3X 4 − 2X 2 + 2 = 0.
c) X 5 − 2X 4 + X 3 − 2X 2 + X − 2 = 0.
d ) X 8 + 3X 5 − 2X 3 − 6 = 0.
8-7. Determina10 el grupo de Galois sobre Q del polinomio (X 2 − p1 )(X 2 − p2 )(X 2 − p3 ) donde p1 , p2 y p3
son primos distintos.
¿Cuál es el grupo de Galois de (X 2 − p1 )(X 2 − p2 ) · · · (X 2 − pt ), donde los pi son primos distintos?
8-8. Determina el grupo de Galois sobre Q de cada uno de los siguientes polinomios:
a) X 4 − X 2 − 2.
b) X 4 − 4X 2 + 16.
c) X 6 − 9.
d ) 4X 4 − 8X 2 + 1.
e) X 5 − 3X 3 − 2X 2 + 6.
8-9. Prueba que el discriminante del polinomio f (X) = X 3 + aX 2 + bX + c viene dado por la expresión
8-10. Dados un cuerpo K y el polinomio f (X) = X 3 − 3X + 1 ∈ K[X], prueba que f o bien es irreducible o
bien se descompone completamente sobre K.
√
8-11. Determina el grupo de Galois sobre Q y sobre Q( −23) del polinomio X 3 − X + 1.
7
Compara con uno de los ejemplos de (8.4).
8
Compara con el Ejemplo 8.20.
9
La extensión correspondiente es ciclotómica, por (7.2).
10
Compara con los Ejemplos 6.33.
8-12. Halla el grupo de Galois sobre Q del polinomio X 3 − X − 1 y determina los cuerpos intermedios de la
extensión Q ⊂ L donde L es el cuerpo de descomposición de X 3 − X − 1 sobre Q.
8-13. Sea K un subcuerpo del cuerpo de los números reales. Prueba que si f (X) es un polinomio irreducible
en K[X] de grado tres, entonces su discriminante D es positivo si f (X) tiene tres raı́ces reales y negativo
si f (X) tiene una única raı́z real.
8-14. Demuestra que un número α ∈ R es constructible con regla y compás si y solo si |Gf | es una potencia
de dos donde f (X) = Irr(α, Q).
8-18. (Casus irreducibilis) Sea f (X) un polinomio de grado tres, irreducible sobre Q, con tres raı́ces reales.
Prueba que no es posible resolver la ecuación f (X) = 0 utilizando únicamente extensiones radicales
contenidas en R.
√ p
4
√
8-19. Sean L = Q(ω, 3 2) y α = 1 + 3 2. Encuentra una extensión radical N de L que contenga a α y sea
normal sobre Q, y tal que Gal(N/L) y Gal(N/Q) sean resolubles.
i) Demuestra que K(u, v, w) = K(ū, v̄, w̄) y deduce que se sigue manteniendo la Proposición 8.37.
ii) Encuentra los coeficientes de Rf⋆ (X) en función de los coeficientes de f (X).
Apéndice
9.1. Grupos.
La referencia (CB-n) indica la página n de los apuntes de Grupos y Anillos 2018-19 de Claudi Busqué.
La referencia (AV-n) indica la página n de los apuntes de Grupos y Anillos 2015-16 de Alberto del Valle.
Subgrupos finitos de K ∗
Proposición 9.1. Todo subgrupo finito del grupo multiplicativo K ∗ de un cuerpo es cı́clico. En particular,
si p es primo entonces Z∗p es cı́clico (CB-96; AV-14).
En Z∗5 las potencias 2i para i = 1, 2, . . . son 2, 4, 3, 1, por lo que Z∗5 = h2i (y también Z∗5 = h3i).
Sin embargo, en Z∗7 son 2, 4, 1, luego o(2) = 3 y el 2 no genera todo el grupo; las potencias de 3 son
3, 2, 6, 4, 5, 1 y por tanto Z∗7 = h3i (y también Z∗7 = h5i).
En 5 minutos puedes comprobar que para p = 3, 5, 11, 13, 19 el 2 sirve como generador; para p = 17 no
sirve el 2 pero sı́ el 3; para p = 23 no sirven ni el 2 ni el 3, pero sı́ el 5. En https://oeis.org/A001918 aparecen
los menores generadores de Z∗p para los primeros 100 primos; en Z191 ∗ el menor generador es el 19.
120 Apéndice
La unicidad de un grupo G con respecto a una propiedad (P) será una unicidad salvo isomorfismos,
o sea que cualquier grupo con (P) es isomorfo a G. Y si decimos que los únicos grupos con (P) son
G1 , . . . , Gn significará que cualquier grupo con la propiedad (P) es isomorfo a uno y solo uno de los Gi .
Proposición 9.2. El grupo cı́clico Cn tiene un único subgrupo (cı́clico) de orden d para cada divisor d de
n (CB-100; AV-16), y ese subgrupo tiene φ(d) generadores; por tanto hay φ(d) elementos de orden d en Cn .
Proposición 9.3. El único grupo de orden p (con p primo) es el cı́clico Cp (CB-99; AV-20). No tiene
subgrupos propios no triviales y todos sus elementos (salvo el neutro) tienen orden p.
Proposición 9.4. Los grupos de orden p2 son necesariamente abelianos (CB-130; AV-51) y por tanto hay
dos únicos grupos de ese orden, Cp2 y Cp × Cp .
En particular, los únicos grupos de orden 4 son C4 y el 4-grupo de Klein1 V (CB-79; AV-9).
Proposición 9.5. Los únicos grupos de orden 2p (con p primo) son el cı́clico C2p (abeliano) y el diédrico
Dp (no abeliano) (CB-130; AV-57).
En particular, los únicos grupos de orden 6 son C6 y S3 ∼
= D3 (CB-131).
Proposición 9.6. Los únicos grupos de orden 8 son C8 , C4×C2 , C2×C2 ×C2 , D4 y Q8 (CB-97,131; AV-57).
De los tres subgrupos de orden 4 de C4 × C2 , dos son cı́clicos y uno es de tipo V .
De los tres subgrupos de orden 4 de D4 , uno es cı́clico y dos son de tipo V .
Los tres subgrupos de orden 4 de Q8 son cı́clicos.
Proposición 9.7. Los únicos grupos de orden 12 son C12 , C6 ×C2 , D6 , A4 y un quinto que no es de ninguno
de los tipos estándar que hemos visto (es un “producto semidirecto” de C3 por C4 ).
C6 × C2 tiene dos subgrupos de orden 6 (ambos cı́clicos) y uno de orden 4 (de tipo V ).
D6 tiene tres subgrupos de orden 6 (uno cı́clico y dos de tipo D3 ) y tres de orden 4 (de tipo V ).
A4 no tiene2 subgrupos de orden 6 y solo tiene uno de orden 4 (de tipo V ).
Proposición 9.8. Un grupo G tiene tantos elementos de orden 2 como subgrupos de orden 2.
Si G tiene n elementos de orden p (primo) entonces tiene n/(p − 1) subgrupos de orden p.
Si el primo p divide a |G| entonces G tiene elementos de orden p (teorema de Cauchy).
Proposición 9.9. Los grupos abelianos de orden finito se pueden clasificar en términos de (los exponentes
que aparecen en) la factorización de |G| como potencia de primos (CB-96-98; AV-67-71).
En consecuencia, en cualquier grupo abeliano finito G “se verifica el recı́proco del teorema de Lagrange”,
o sea, G posee subgrupos de orden d para cada divisor positivo d de |G| (CB-100).
1
Se usa V por vier, cuatro en alemán. En notación aditiva es Z2 ×Z2 , y en notación multiplicativa es por ejemplo el subgrupo
de S4 consistente en la identidad y las permutaciones (1 2)(3 4), (1 3)(2 4) y (1 4)(2 3).
2
Esto es un contraejemplo para el “recı́proco del teorema de Lagrange”.
Ec. Algebraicas UMU 19-20 – A. del Valle, basado en Asensio-Caruncho-Martı́nez
9.1 Grupos. 121
La siguiente tabla incluye información sobre los grupos de orden n ≤ 12 excluyendo los de orden primo
(descritos en 9.3) y el grupo “no estándar” (para nosotros) de orden 12.
Para cada grupo G se incluye su orden |G|, si es abeliano y los elementos y de subgrupos que tiene de
cada orden que divida a |G| (si no lo divide hay rayas en vez de ceros por el teorema de Lagrange).
Para los órdenes primos 2,3,5 las columnas de elementos y subgrupos se determinan mutamente (9.8)
y por lo tanto se podrı́a excluir una de cada pareja. No se incluyen elementos ni subgrupos de orden
n = 8, 9, 10, 12, porque ya sabemos que en Zn hay φ(n) elementos de orden n (9.2) y en el resto de grupos
de orden n no hay ninguno, y es obvio que los grupos de orden n tienen un único subgrupo de orden n.
Grupo Orden Ab. Els Els Els Els Els Sbg Sbg Sbg Sbg Sbg
o6 o5 o4 o3 o2 o6 o5 o4 o3 o2
C4 4 sı́ – – 2 – 1 – – 1 – 1
C2 × C2 4 sı́ – – 0 – 3 – – 1 – 3
C6 6 sı́ 2 – – 2 1 1 – – 1 1
S3 = D3 6 no 0 – – 2 3 1 – – 1 3
C8 8 sı́ – – 2 – 1 – – 1 – 1
C4 × C2 8 sı́ – – 4 – 3 – – 3 – 3
(C2 )3 8 sı́ – – 0 – 7 – – 7 – 7
D4 8 no – – 2 – 5 – – 3 – 5
Q8 8 no – – 6 – 1 – – 3 – 1
C9 9 sı́ – – – 2 – – – – 1 –
C3 × C3 9 sı́ – – – 8 – – – – 4 –
C10 10 sı́ – 4 – – 1 – 1 – – 1
D5 10 no – 4 – – 5 – 1 – – 5
C12 12 sı́ 2 – 2 2 1 1 – 1 1 1
C6 × C2 12 sı́ 6 – 0 2 3 3 – 1 1 3
D6 12 no 2 – 0 2 7 3 – 3 1 7
A4 12 no 0 – 0 8 3 0 – 1 4 3
{1} hg 4 i
{1} {1}
{1}
V = C2 ×C2 (Cp ×Cp simi-
lar, con p + 1 intermedios)
hgi hgi Q8
C12 C36 Q8
(Cp2 q ) (Cp2 q2 )
hg 2 i hg 3 i
hg 2 i hg 3 i hii hji hki
hg 4 i hg 6 i hg 9 i
hg 4 i hg 6 i h−Ii
hg 12 i hg 18 i
{1}
{1} {1}
C2 × C2 × C2 ha, b, ci
C4 ×C2 hg, hi g4 = 1
h2 = 1
ha, bi ha, ci hb, ci hc, abi hb, aci ha, bci hab, aci
hgi hg 2 , hi hghi
{1}
{1}
hr, si
hr, si D4
S3 = D3
{1}
hσ, αi α = (1 2 3), β = (1 2 4)
A4
γ = (1 3 4), δ = (2 3 4)
σ = (1 2)(3 4)
V τ = (1 3)(2 4)
η = (1 4)(2 3)
{1}
a ∼i b ⇔ a−1 b ∈ H a ∼d b ⇔ ab−1 ∈ H
Las respectivas clases de equivalencia de a son aH = {ah}h∈H y Ha = {ha}h∈H , que se llaman clases
laterales (por la izquierda y por la derecha, respectivamente) de a módulo H.
Por ejemplo, si h tiene orden 2 y H = hhi = {1, h} entonces aH = {a, ah} y Ha = {a, ha}, de modo que
si a y h no conmutan (como pasa con h = (1 2) y a = (1 3) en S3 ) entonces aH 6= Ha.
Se tiene:
1H = H; aH = H ⇔ a ∈ H; aH = bH ⇔ a−1 b ∈ H ⇔ H = a−1 bH; Ha = Hb ⇔ H = Hba−1
|aH| = |H| para todo a ∈ G.
Los dos conjuntos cociente tienen el mismo cardinal, o sea hay tantas clases laterales por la izquierda
como por la derecha; ese cardinal se llama el ı́ndice de H en G y se denota por [G : H].
Si H ≤ J ≤ G entonces [G : H] = [G : J] · [J : H].
|G|
Si G es finito entonces |G| = [G : H] · |H|, o sea [G : H] = .
|H|
Conjugación
Cuando se cumplen se dice que N es un subgrupo normal de G (notación N E G), y la operación dada
dota a G/N (conjunto cociente de G por cualquiera de las relaciones ∼i o ∼d ) de una estructura de grupo,
llamado el grupo cociente de G módulo N . Su neutro es N y su tamaño es [G : N ].
Como ejemplos “generales” de subgrupos normales tenemos los subgrupos de grupos abelianos, los sub-
grupos de ı́ndice 2 y el centro Z(G) = {a ∈ G | ax = xa ∀x ∈ G} de cualquier grupo G.
G ∼
Primero: Si f : G → G′ es un homomorfismo de grupos entonces Nuc(f ) E G y = Im(f ).
Nuc(f )
G/N ∼ HN
Segundo: Si N, H E G y N ⊂ H entonces N E H y = G/H.
H/N E
HN ∼ H H N
Tercero: Si H ≤ G y N E G entonces = (más precisamente, se
N H ∩N
tiene HN ≤ G, N E HN , H ∩ N E H y el isomorfismo dado). E
H ∩N
Demostración. Las “parejas” Ag = {g, g −1 } forman una partición de G, y A1 tiene solo un elemento.
Como |G| es par tiene que haber otro Ag con un solo elemento, y eso significa que o(g) = 2.
Proposición 9.11. Si G es un 2-grupo abeliano3 , digamos |G| = 2n , entonces existe una cadena de subgrupos
como la que sigue, con cada |Hi | = 2i (o sea, con todos los ı́ndices [Hi+1 : Hi ] iguales a 2):
H0 = {1} ⊂ H1 ⊂ H2 ⊂ · · · ⊂ Hn−1 ⊂ Hn = G
Demostración. Por inducción en n, con el caso n = 1 resuelto sin más que tomar G0 = {1} ⊂ G2 = G.
Para n > 1, tomamos g ∈ G de orden 2 (9.10) y hacemos N = hgi que será normal pues G es abeliano.
El cociente G/N tiene entonces orden 2n−1 y, por la hipótesis de inducción, tiene una cadena de subgrupos
de órdenes 1, 2, 22 , . . . , 2n−1 . Por el teorema de la correspondencia, esa cadena tendrá la forma
N H1 H2 Hn−1 Hn G
{1} =
= ⊂ ⊂ ··· ⊂ ⊂ =
N N N N N N
para ciertos subgrupos N = H1 ⊂ H2 ⊂ · · · ⊂ Hn−1 ⊂ Hn = G.
Tal como hemos tomados los subı́ndices se tiene |Hi /N | = 2i−1 y por tanto |Hi | = |Hi /N | · |N | = 2i , y
ahora basta con tomar H0 = {1} para obtener la cadena que postula el enunciado.
Teorema 9.13. [Abel] Para n ≥ 5, el grupo alternado An es simple, o sea no tiene más subgrupos normales
que él mismo y el trivial (CB-123 y 132; AV-55).
3
El resultado es mucho más general: se puede cambiar el 2 por cualquier primo, y no hace falta que G sea Abeliano.
polinomio –, 5 de un polinomio, 16
polinomio – de un elemento, 34 polinomio
isomorfı́a (teoremas de –), 124 cero de un –, 3, 12
isomorfismo, K-, 30 ciclotómico, 86
constante, 1
K-isomorfismo, 30
contenido de un –, 5
Kronecker
cuerpo de descomposición de un –, 49
método de –, 24
derivada de un –, 7
teorema de –, 32
descompone completamente, 49
Lagrange discriminante de un –, 106
resolvente de –, 111 en una indeterminada o variable, 1
teorema de las irracionalidades accesorias, 79 en varias indeterminadas o variables, 9
lema de Zorn, 53 evaluación de un –, 3, 12
forma contraı́da de un –, 23
método de Kronecker, 24 forma extendida de un –, 23
Mohr-Mascheroni (teorema de –), 43 general de grado n, 104
mónico (polinomio –), 1
grado de un –, 1, 10
monomio, 2, 10
con respecto a una indeterminada, 13
coeficiente de un –, 2, 10
homogéneo, 10
grado de un –, 2, 10
irreducible, 5
peso de un –, 16
irreducible de un elemento, 34
múltiple (raı́z –), 6
mónico, 1
multiplicativa en torres (propiedad), 28
peso de un –, 16
multiplicidad de una raı́z, 6
primitivo, 5
norma, 92 producto de –, 1
normal raı́z de un –, 3
clausura, 61 reducción módulo I de un –, 3, 13
extensión, 59 separable, 63
subgrupo, 123 simétrico, 14
número elemental, 14
algebraico, 38, 41 teorema fundamental, 16
áureo, 91 teorema fundamental de los –, 18
constructible (con regla y compás), 45 suma de –, 1
de Fermat, 91 término superior de un –, 19
primo de Fermat, 91 valor de un –, 3, 12
primitivo/a
órbita, 23
elemento –, 81
orden
polinomio –, 5
de un elemento, 119
raı́z n-ésima – de la unidad, 85
de un grupo, 119
primo ((sub)cuerpo –), 27
lexicográfico, 19
producto de polinomios, 1
p-grupo, 124 propiedad
pentágono regular, construcción del –, 91 estable por levantamientos, 30
perfecto, cuerpo –, 63 multiplicativa en torres, 28
peso universal del anillo de polinomios
de un monomio, 16 en una variable, 2