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Entre las letras resaltadas con verde, amarillo, azul son ejemplos de Morfemas

Entre las letras resaltadas con Rojo y anaranjado son ejemplos de sustantivos y
adjetivos

Entre las letras resaltadas con morado y magenta son ejemplos de pronombres
personales, adjetivos posesivos etc etc

Oración coordinada adversativa


Con los nexos "pero", "sino" y "más" estas oraciones
poseen un matiz de contrariedad de una proposición frente
a la otra:

‘Yo quiero hacer el 50 por ciento más de las afectaciones, pero nunca de
muertos

Martínez dice que no participó en ninguno de los homicidios y que no está


siendo investigado

Oración coordinada copulativa


Cuyos nexos son: "y", "e" (delante de "i" o "hi" pero no ante
el diptongo "hie"), "ni" y "que" (raramente), los cuales
aportan un significado de suma entre ambas proposiciones:
Los soldados mataban campesinos y afirmaban que eran guerrilleros.

Oraciones coordinadas disyuntivas

Con los nexos "o", "u" (ante "o" y "ho") y "o bien" indican exclusión o
elección entre una proposición u otra; esto es, si una proposición es
verdadera quiere decir que la otra proposición no lo es porque
queda anulada:

ha ocasionado muertes sospechosas o innecesarias.

establezcan objetivos concretos para matar, capturar o forzar la rendición de


los grupos criminales y rebeldes
El   comandante del ejército de Colombia, frustrado por los vacilantes esfuerzos
de la nación para preservar la paz, les ha ordenado a sus tropas que dupliquen
la cantidad de criminales y rebeldes que matan, capturan u obligan a rendirse
en batalla; y posiblemente acepte un aumento de las bajas civiles en el proceso,
según consta en órdenes escritas y entrevistas con altos oficiales.

A inicios de año, los generales y coroneles colombianos se reunieron y se les


pidió que firmaran un compromiso por escrito para intensificar los ataques.
Las presentaciones internas diarias ahora muestran el número de días que las
brigadas han pasado sin estar en combate, y los comandantes son amonestados
cuando no realizan operaciones con la frecuencia suficiente, dijeron los
oficiales.

Una orden que causa especial preocupación instruye a los soldados que no
“exijan perfección” al momento de ejecutar ataques letales, incluso si tienen
preguntas significativas sobre los objetivos que están atacando. Algunos
militares dicen que esa orden implica que reduzcan sus normas para proteger a
civiles inocentes de ser asesinados, y que ya ha ocasionado muertes o
innecesarias.

Los militares implementaron una estrategia similar para derrotar a los grupos
rebeldes y paramilitares de Colombia a mediados de la década de los 2000,
antes de que se firmara un acuerdo de paz histórico que finalizó con décadas de
conflicto.

Pero esas tácticas causaron la indignación nacional cuando se supo que los
soldados, con el objetivo de cumplir sus cuotas, cometieron asesinatos
generalizados y desapariciones de civiles.

Ahora, otra encarnación de esa política está siendo impulsada por el nuevo
gobierno contra los grupos criminales, guerrilleros y paramilitares del país,
según las órdenes revisadas por The New York Times y tres oficiales de alto
rango que hablaron sobre esas medidas.
Las nuevas órdenes han generado incomodidad entre los militares. El ejército
de Colombia sigue siendo investigado por la serie de asesinatos ilegales
ocurridos a mediados de la década de 2000, conocidos como “falsos positivos”.

Los soldados mataban campesinos y afirmaban que eran guerrilleros a veces incluso
vistiéndolos con uniforme y plantando armas cerca de sus cuerpos. Las tácticas
surgieron de los superiores que exigían un mayor número de cuerpos, de acuerdo
con los fiscales.
En largas entrevistas, dos oficiales dijeron que los soldados colombianos
vuelven a estar bajo una intensa presión y que este año ha comenzado a surgir
un patrón de asesinatos sospechosos y encubrimientos.

En una reunión relatada por uno de los oficiales, un general ordenó a los
comandantes “hacer lo que sea” para mejorar sus resultados, incluso si eso
significaba “aliarse” con  grupos criminales armados para obtener información
sobre objetivos, una estrategia de dividir y conquistar.

Más allá de eso, dijeron los oficiales, a los soldados que aumentan sus muertes
en combate se les ofrecen incentivos como vacaciones extra, un patrón que —
temen— es notablemente similar al de los asesinatos ilegales ocurridos a
mediados de la década de los 2000.

 
“Hemos regresado a lo que estábamos haciendo antes”, dijo uno de los oficiales,
quienes hablaron con la condición de mantener su anonimato por temor a las
represalias de sus superiores.

El mayor general Nicacio Martínez Espinel, comandante del ejército de


Colombia, reconoció haber emitido las nuevas órdenes y exigir que los oficiales
establezcan objetivos concretos para matar, capturar o forzar la rendición de
los grupos criminales y rebeldes.

Dijo que había emitido una orden por escrito que instruía a los principales
comandantes a “doblar los resultados”, explicando que había llegado a esa
decisión debido a la amenaza que Colombia sigue enfrentando por parte de las
organizaciones guerrilleras, paramilitares y criminales.

“La   amenaza criminal se incrementó”, dijo. “Si seguimos al ritmo que


veníamos anteriormente no vamos a cumplir los objetivos”.

Aun así, el general cuestionó cómo los oficiales han interpretado sus
instrucciones.

“La orden que hay es de ser operacionalmente efectivos”, dijo. “Unos me


dijeron superar el 10 por ciento. Listo, usted quiere superar el 10. Otros
dijeron: ‘Yo quiero hacer el 50 por ciento más de las afectaciones, pero nunca
de muertos’. Otros: ‘Yo quiero hacer el 100 por ciento’. Hay unos que la han
cumplido, otros que no la han cumplido”.
También reconoció que las órdenes instruyen a los comandantes para que
realicen operaciones cuando todavía no están seguros de sus objetivos.

Sin embargo, el general Martínez argumentó que las instrucciones solo se


referían a la planificación de las misiones, no a su ejecución.

“El respeto absoluto a los derechos humanos es lo más importante”, dijo. “Todo
lo que hagamos tiene que estar en el marco de la ley”.

Pero la orden misma dice: “Hay que lanzar operaciones con un 60-70 por
ciento de credibilidad y exactitud”, lo que deja suficiente margen de error como
para que esa política ya haya ocasionado asesinatos cuestionables, dijeron dos
oficiales.

Las nuevas órdenes indican un aumento en las campañas militares contra la


guerrilla y los grupos paramilitares en Colombia, un país que hace apenas dos
años logró firmar un acuerdo de paz con el mayor grupo guerrillero de la
nación, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia.

La paz ha sido difícil de alcanzar. Muchos excombatientes han regresado a la


lucha armada, mientras que otros grupos criminales y paramilitares han
ampliado su control sobre diversas regiones del país.

El Ejército de Liberación Nacional, un grupo rebelde que no ha firmado ningún


un acuerdo de paz, ejecutó un atentado con un coche bomba en Bogotá en
enero.

Colombia también está bajo la presión del gobierno de Donald Trump para
mostrar resultados en la lucha contra el narcotráfico, una estrategia que ha
tenido pocos progresos a pesar de los 10.000 millones de dólares de ayuda
estadounidense que recibe el gobierno colombiano.

Para responder a las exigencias de Washington, el presidente Iván Duque, un


líder conservador que hizo campaña contra el acuerdo de paz porque creía que
era demasiado blando con los rebeldes, remplazó a los principales
comandantes del ejército en diciembre pasado.

El gobierno de Duque nombró a nueve oficiales vinculados a asesinatos a


mediados de la década de los 2000, incluidos algunos que ahora ocupan los
cargos más altos dirigiendo ofensivas militares en toda Colombia, según
documentos publicados por Human Rights Watch, una organización de
derechos humanos. Según ese grupo, uno de los oficiales vinculados a los
asesinatos es el general Martínez, quien fue el segundo comandante de la
Décima Brigada Blindada.

Martínez dice que no participó en ninguno de los homicidios y que no está


siendo investigado por la Fiscalía General de la Nación.

Los homicidios ilegales conocidos como “falsos positivos” son un capítulo


particularmente polémico en la historia reciente de Colombia. De 2002 a 2008,
un estimado de cinco mil civiles o guerrilleros fueron asesinados fuera de
combate, según las Naciones Unidas. Las autoridades sostienen que al menos
1600 soldados han sido condenados por delitos relacionados con las muertes
ilegales.

Dos de los oficiales que hablaron con el Times dijeron que estaban activos
durante la época de los asesinatos y fueron ascendidos de rango en períodos
subsiguientes.

También dijeron que hubo un cambio importante cuando el general Martínez


convocó a una reunión de sus principales oficiales en enero, un mes después de
asumir el mando.

La reunión incluyó a los cincuenta principales generales y coroneles del país,


quienes se reunieron en un hangar en las montañas afuera de Bogotá. Muchos
estaban ansiosos por saber si habría cambios con el nuevo liderazgo.

Después de un descanso, los comandantes regresaron a las mesas donde


encontraron un formulario para cada uno de ellos, dijeron los oficiales. El
documento tenía el título de Planteamiento de Objetivos 2019 en la parte
superior y había un espacio para que cada comandante firmara en la parte
inferior.

El formulario les pedía a los comandantes que enumeraran en una columna la


“suma aritmética de presentaciones voluntarias, capturas y muertes en
desarrollo de operaciones militares” de varios grupos armados durante el año
anterior, y luego debían establecer una meta para el año siguiente.

Algunos de los comandantes parecían confundidos, hasta que recibieron la


instrucción de duplicar su número este año, dijeron los oficiales.

Poco después, recibieron la misma orden del general Martínez por escrito.

“La meta es doblar los resultados operacionales en todos los niveles del
mando”, dicen las órdenes, que tienen su firma.

Cuadro de categorías gramaticales


Morfemas Morfemas Sustan Adjeti Pronom Adjeti Conjugac Adver Preposici
libres trabados o tivos vos bres vos iones bios ones
dependien persona Posesi verbales
tes les vos

El Incomodi
(Determin dad
ante)
 (in=
 y morfema
(Conjunci )
ón)
(comodid
O ad =
lexema)
(Conjunci (Prefijos)
ón)
Ilegales
Contra
(Preposici (I
ón) =morfem
a)
Con
  (Preposi (legales=
ción) lexema)
 (Prefijos)
La
 (Determi Frustrad
nante) o

 (Frustra
d)
 (O) =
Genero

Pasado

(Pas)
(ado)  =
Tiempo

Mataban

Mata
ban
Modo
(Indicativ
o
subjuntiv
o)

similar

(Simi
=Lexema
)

(Ar=Morf
ema)
(sufijo )

indignaci
ón
(indigna
=
Lexema)

(Cion=
Morfema
)
  (sufijo )
Oraciones simples Oraciones Oraciones Oraciones
yuxtapuestas subordinadas coordinadas

Adversativa
Yo quiero hacer el
Para responder a las causa especial 50 por ciento más de
exigencias de preocupación las afectaciones,
Washington, el instruye a los pero nunca de
presidente Iván soldados que no muertos.
Duque, un líder “exijan perfección” al
conservador momento de ejecutar Martínez dice que
ataques letales no participó en
Más allá de eso, ninguno de los
dijeron los oficiales, la nación para homicidios y que no
a los soldados que preservar la paz, les está siendo
aumentan sus ha ordenado a sus investigado.
muertes en combate tropas que
dupliquen la
cantidad de
criminales y rebeldes Copulativa
que matan,
Los soldados
mataban
campesinos y
afirmaban que eran
guerrilleros.
Disyuntivas

ha ocasionado
muertes sospechosas
o innecesarias.

establezcan
objetivos concretos
para matar, capturar
o forzar la rendición
de los grupos
criminales y
rebeldes

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