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Universidad del Tolima

Facultad Ciencias de la Educación


Programa: Licenciatura en Ciencias Sociales
Formación de los Estado Modernos
Elaborado por: Juan Sebastián Correal Gaitán
Código: 051950032018

COMENTARIO CRÍTICO
El texto <<Humanismo y modernidad>> encontrado en la revista chilena de literatura
por la autora Carla Cordua, el cual fue expuesto por la compañera Luisa Fernanda Díaz,
expone la relación del humanismo en la modernidad y su trascendencia en el pueblo
italiano, de igual manera cabe resaltar que el termino propio tiene diferentes episodios en la
historia de la humanidad que propiamente resultan importantes para la época. El tema
despierta el interés intelectual de quienes estudian los diferentes momentos de la historia
como también de quienes abarcan la importancia del saber diferentes sucesos en el trasegar
de la humanidad. Por otra parte, el texto es de fácil comprensión debido a la facilidad con la
que el autor expresa sus ideas y postulados, además de ser una lectura corta y atractiva.
Principalmente, cabe resaltar la manera en que se debe desglosar la palabra propia de la
que trata este trabajo desde la perspectiva italiana: “Umanista” con una doble connotación,
la primera de relación al movimiento filosófico conocido como el Humanismo, y la
segunda como la introducción de materias de estudio conocido como Humanidades. Cordua
(2011) afirma:
La palabra que genera los nombres de estos dos fenómenos históricos pertenece a la
lengua italiana: “umanista”, fue usado primero para designar a los profesores de
retórica de algunas universidades italianas, y es vertida del vernáculo al latín. Y
“humanismo”, la expresión abstracta para el conjunto de ideas y preferencias del
Renacimiento italiano (p. 9).
Ahora bien, si comprendemos que el humanismo como corriente filosófica ha entregado
un valor fundamental a comprender la razón del ser humano y deshabitar la fe, con una
fuerte atracción de las lenguas vernáculas clásicas como el griego, el hebreo y el latín, por
otra parte la intelectualidad de las humanidades con contenidos epistemológicos como la
gramática, la retórica, la poesía, la historia y la filosofía moderna (Cordua, 2011). De tal
modo, estos nuevos estudios abrieron una brecha con la Edad Media. El humanismo sin
duda fue una nueva manera de entender el hombre, Cordua (2011) afirma que: “La época a
la que nos referimos se siente nueva y capaz de las hazañas más difíciles y riesgosas. En su
conciencia de sí, ella es un redescubrimiento del hombre, o un renacimiento, como más
tarde se decidió llamarla” (p. 10). Sin duda alguna, dicha afirmación como una
comprensión nueva al hombre.
Más aun, cabe resaltar que el hombre al estar en tal análisis que hace nuestra autora y el
expositor carece de una naturaleza fija, dicha grandeza se confiere debido a su invención en
altas corrientes intelectuales y con su semejanza a dios, esto convence que el hombre
realiza su vida en cuestión de lo que él quiera, la naturaleza fija de la que carece le permite,
no solamente habitar un mismo lugar, sino también no permanecer de todo aquello que le
hace ser hombre y puede simplemente cambiar todo en cuanto su ser, o su razón, esto
yuxtapone su beneficio propio y un desarrollo también colectivo.

La idea del individuo como un microcosmos que se hace a sí mismo entraña las
nociones de la autosuficiencia y la universalidad de cada cual. La voluntad libre se
puede dar estas condiciones por propia iniciativa. Si el hombre está dotado en
principio para valerse de todas las posibilidades de ser y si elige cultivarlas realizará
la plenitud de su vocación universal y la autonomía de quien se basta a sí mismo.
(Cordua, 2011, p. 11).

Quienes refutan esa idea, seria especialmente la iglesia, pues para ellos tal soberbia y
pretensiones humanísticas estarían por fuera de las ideas cristinas. Algo particular de este
escenario es que cuando el hombre olvida las ideas libertarias y humanísticas, la educación
regresa a él en forma de conservar tal característica. Para ello en los siglos XVII y XVIII la
formación en jóvenes no se encaminaría en aquellos modelos del mundo nuevo, sino para
adjudicarlo y enseñarlos a sociedades burguesas, pues quienes accedieran a dichos
elementos humanísticos estarían en las elites cultas generacionales. “De manera que la
formación en las humanidades, además de los beneficios íntimos que otorga al individuo
que recibe esta educación, se convertirá a la vez en señal inequívoca de cierta posición
social y en la aparente justificación de que los portadores la ostenten actualmente” (Cordua,
2011, p. 12). Sin embargo Tal modelo humanístico ha tenido un vuelco imprescindible en
la historia, ha sido cambiando y aquella importancia vanagloriada del individuo se desplaza
debido a la razón humana. Esto caracteriza al hombre moderno debido a que este se basta
de sí mismo, si aprende lo que le respecta de una manera metódica.

A modo de conclusión, el texto nos da una serie de datos y un recorrido histórico, de


cómo se desarrolla el humanismo y la fuerte injerencia que tiene esta en los modos que
determinan el desarrollo de una sociedad o del hombre mismo. Por otra parte, es importante
resaltar como el origen de la modernidad se cuestiona y transforma las ideas implantadas en
el Medioevo, trastocando las visiones religiosas, políticas, económicas, sociales e
intelectuales de la época, siendo así, un desafío para entender el verdadero valor del
humanismo. Finalizare mencionando al igual que la autora la frase para finalizar sus ideas,
“NADA HUMANO ME ES AJENO” evidenciando claramente que el espíritu de una visión
humanística siempre estará prescrita en una infinidad de posibilidades en las
transformaciones del hombre.

BIBLIOGRAFIA
Cordua, C. (2013). Humanismo y modernidad. Revista chilena de literatura. No. 84, pp. 9 –
17.

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