El Camino Del Hombre Autentico-Juan Capasso PDF

El Camino del Hombre Auténtico 1
PREAMBULO
La finalidad de escribir el siguiente libro de contenido

esotérico y gnóstico, en el cual hemos sumado las experiencias
personales que ineludiblemente han servido de factor
predominante en nuestro desarrollo espiritual, ha sido querer
transmitir a todos los integrantes de las filas gnósticas
pertenecientes a nuestra sagrada institución, nuestra vivencia
particular relacionada con los Misterios Ocultos y con el
exigente conocimiento Iniciático y Alquímico, aspectos
esenciales en toda legitima doctrina Solar o Crística.
Este humilde trabajo representa nuestra necesidad de
contribuir, aunque sea con un leve aporte en la enorme tarea de
la transformación psicológica humana, con la finalidad de
compensar el inmenso caudal de enseñanzas recibidas de la
Venerable Logia Blanca por intermedio de los amados Maestros
y en especial modo de nuestro Santo Gurú, a quien le debemos,
entre otras tantas cosas, haber comprendido con particular
enfoque, los preceptos humanos de la Lógica Superior, de la
Inspiración, de la Cultura Gnóstica y del Desarrollo de la
Conciencia, por intermedio de la Castidad Científica, secreto
inalcanzable en casi toda la eternidad, utilizada en los múltiples
laboratorios de la Naturaleza Interior del hombre, como único
método que nos redime, nos fecunda con el hálito de la
Espiritualidad Real y nos conduce por el camino recto que ha de
llevarnos, algún día, al reencuentro anhelado por todos nosotros
2 Juan B. Capasso Pinto
a través de los siglos, con lo único digno existente en nuestro

interior que todos denominamos Dios.
Aceptamos ampliamente el sentir de algunos
simpatizantes de la doctrina cuando consideran que todo está
ya dicho, pero si con esta contribución sencilla, que no tiene en
absoluto intención de sobresalir, logramos que algún buscador
de la verdad consiga un rayo de luz en el intrincado camino de
su vida para despejar sus dudas con respecto a la conducción de
su existencia física, con la finalidad de acoplarla con la
espiritual en vibrante armonía, habremos cumplido con nuestro
deber de compartir el Maná de la Sabiduría que llega tan
abrumadoramente a nuestras manos en el diario vivir y que casi
nunca vemos, reconocemos, ni ingerimos por estar tan
dormidos.
Entendemos lo difícil del camino que conduce
nuevamente al Reino del Padre, pero también es cierto que si no
lo intentamos con ahínco y determinación racional, nos
quedaremos en las tinieblas de este mundo infrahumano de
barbarie y profunda desolación.
Nuestra Madre Divina aguarda nuestro regreso en el
umbral del Templo como Sacerdotes o Isis del Altar Supremo,
para que oficiemos con la espada de la voluntad y el báculo del
poder, envueltos en el fragante aroma de los perfumes del
incienso y de la dulzura de las rosas.
Ha llegado la hora de resolver nuestro destino, ha
concluido el tiempo de la incertidumbre y de la mala voluntad,
ha llegado el momento del “Ser o no Ser de la filosofía“ donde
no nos queda mas tiempo para descansar ni para esperar por un
mañana mejor.
Recordemos aquellas celebres frases del ritual de la

conciencia que rezan: “¡Hay de los Dioses que se lanzan al
abismo! Terribles son los siglos o edades de las
transmigraciones, mejor es que no hagamos sufrir más a Horus”.
“¡No sometáis a mi hijo Horus a más vituperios, él no ahorrará
esfuerzos en nombre de TUM!"; sin embargo yo sufro
demasiado viendo sufrir al que no debería sufrir, ¡tú lo sabes!”
JUAN. CAPASSO
DEDICATORIA
Dedicamos este libro a los seres más maravillosos que han existido en nuestra
vida.
Al Venerable Maestro Samael, a quien amamos y veneramos profundamente. A
ese Ser de Luz que en buena hora vino a cargar su cruz en los peores tiempos de nuestro
afligido mundo, quién fue capaz de sobreponerse a las infinitas dificultades producidas por
los sistemas religiosos de la época, para develar su magistral mensaje cuya síntesis se
resume en la “Quinta Verdad”: “El secreto indecible del Arcano A.Z.F y las claves del
Despertar de la Conciencia”.
¿Qué hubiera sido de nuestra vida si este Ser, tan noble y majestuoso, no lo
hubiese sacrificado todo para entregarnos la Sabiduría de la Salvación? ¿Que sería de
nosotros sin su ayuda y protección en este mundo, dominado casi por completo por las hordas
tenebrosas que tienen hipnotizada y esclavizada a la humanidad, donde nosotros, los que
anhelamos regenerarnos, somos considerados habitantes indeseados por vivir al margen de
las leyes y voluntades imperantes?
A mi Santo Gurú, quien me enseñó los secretos más bellos de la vida, quien logró
borrar de mi mente el escepticismo, la incredulidad y el terrible razonamiento. A quien le
debo mi conocimiento en la doctrina, quién ha estado siempre atento en los detalles de mi
camino, a quien ha hecho de Padre en el duro recorrido, a quien le debo tanto que
permanecerá siempre en mi destino.
A mi esposa, Isis de mi Templo Interior, quien me ha transformado en tantas de
mis actuaciones ofuscadas por la terquedad y el orgullo. A ella, quien me conquistó y me ha
dado su amor de esposa, hija, amiga y compañera, que me ha comprendido, fecundado y
amado. A ella que cambió mi vida y me da la alegría y la luz que necesito todos los días, que
ha hecho que en mi corazón sienta la paz y la armonía. A quien también me cuida como
madre, a quien le debo todo, porque es la luz del día, a quien he amado desde siempre, a la
que sin dudas reelegiría, a quien es el fuego y la razón mía.
INTRODUCCION
En nuestro afligido mundo lleno de problemas,

incomprensión, violencia y dolor, hay muchas personas que
aun no han podido adaptarse a la compleja forma de existencia
brindada por nuestro sistema actual, creado por el mismo
hombre con el pasar del tiempo.
Hay muchos que si tuvieran la oportunidad de ser
invitados por los tripulantes de una nave cósmica a vivir en
otro planeta mas evolucionado que el nuestro, lo harían sin
vacilar un solo instante.
Hay muchos que no comprenden la mentalidad cruel
del hombre, la miseria, las guerras, los abusos, las drogas, la
violencia, la corrupción, el odio y el afán agotador de llegar a
una meta de dominio y poder que resulta tan defraudante,

ficticio, pasajero, revelando además el inmenso mal existente
en el corazón humano.
Hay muchos que aún sonriendo y hablando de felicidad,
en el fondo están conscientes de su profunda tristeza, soledad y
dolor.
Hay muchos que andan desorientados y buscan un
apoyo para aferrarse, un camino para seguir, una meta
positiva para alcanzar, un amor para sentir, la paz para vivir.
Hay muchos que sienten en lo más hondo de sus
conciencias la necesidad de cambiar, de transformarse en
hombres y mujeres mejores, capaces de utilizar sus virtudes
para el beneficio de sus semejantes y para orientar a la
misma naturaleza, de por sí tan sabia, de cumplir con el
propósito de embellecer a nuestro amado planeta Tierra con
su flora, su fauna y sus elementos infinitos.
Este libro fue escrito con la esperanza de que en él
consigan el comienzo de ese camino tan angosto y difícil que
lleva al Templo de la Sabiduría Divina, donde sólo existe la
paz, la armonía, la belleza, la bondad, la libertad, el
equilibrio y el triunfo. Donde sólo existe el verdadero hombre,
aquel hombre que todos debemos igualar para que algún día
podamos ser llamados merecidamente: "REYES DE LA
NATURALEZA Y DEL COSMOS".
Reconocemos la presencia de dos fuerzas que imperan
en el Universo, la positiva y la negativa. Todo, absolutamente
todo, es controlado por estas dos polaridades. Por tal razón a
todas las cosas que existen le podemos encontrar su opuesto,
por ejemplo al amor el odio, a la ira la calma, a la bondad la
maldad, al hombre la mujer, a la belleza la fealdad, a la vida
la muerte, a la virtud el defecto, a Dios el Diablo, y así

podríamos continuar hasta cansarnos.
Así mismo a la corriente del Espiritualismo, agrupando
a todas las religiones y creencias que buscan el "religare"
con Dios, se le opone la corriente del materialismo
representando a todas aquellas organizaciones que buscan a
través de la mente y del razonamiento, una explicación a todos
los fenómenos de la naturaleza, del universo y del mismo
hombre.
Sin embargo, como la fuerza negativa necesita de la
positiva para poder crear, también el materialismo necesita del
espiritualismo en una fusión equilibrada y perfecta para poder
resolver todas las incógnitas y los problemas que la vida nos
presenta.
No es siendo totalmente espiritualistas o completamente
materialistas como logramos el desarrollo total de nuestras
facultades o posibilidades internas y externas. No es a través
de una fe muerta o inconsciente, ni de un ateísmo total como
podemos alcanzar la felicidad y la paz anhelada por todos
nosotros para vivir una existencia digna.
Debemos buscar la unión, la comprensión, el respeto y
el equilibrio entre las dos corrientes e investigar, poniendo a
un lado todo dogma o fanatismo extremista, para comprobar
la realidad de cuanto se dice o se supone, con la finalidad de
alcanzar la Fe consciente, sintetizada en la experiencia vivida
por nosotros mismos.
En verdad, si nos observamos atentamente nos daremos
cuenta de que aun no somos personas bien definidas, lo que hoy
nos parece una terrible verdad, mañana ya no tiene el mismo
valor. Ha llegado la hora de preguntarnos: ¿Quiénes somos y
cuál es nuestra verdadera función en la vida?

Cuando estamos llenos de ira y de rencor no nos
parecemos en nada a cuando estamos calmados y contentos;
hasta el mismo rostro cambia de expresión.
Cuando un hombre enfurecido mata a un semejante,
llega a jurar después de un tiempo que no fue él quien cometió
ese crimen, que él sería incapaz de hacerlo. Esto nos hace
comprender que el hombre es un conjunto de defectos, vicios,
pasiones, pensamientos y opiniones, cada uno con su propia
mente y decisión que no le permiten al verdadero hombre
poderse manifestar.
El verdadero hombre vive en lo más profundo de cada
uno de nosotros, es el Ser, que permanece imposibilitado,
atado, sin poderse manifestar con sus múltiples virtudes,
porque respeta nuestro libre albedrío.
Sólo cuando el ser humano se decide a cambiar, cuando
de verdad quiere ser libre de tantas complicaciones, ataduras y
problemas, el Ser empieza a trabajar su Universo Interior para
limpiarlo de toda la basura psíquica como anormalidades,
aberraciones, defectos, odios, deformaciones, complejos, etc.
El Ser es la inteligencia que mueve cada célula y cada
átomo de nuestro organismo; es la vida dentro de cada uno de
nosotros; es la con
ciencia que clama y suplica en nuestro corazón y nos
exige un cambio.
Desdichadamente solo logramos escuchar su voz por
medio del remordimiento que sentimos al cometer alguna mala
acción.
Si aprendiéramos a reconocerlo a través de las
corazonadas o por medio de la intuición, podríamos permitirle al
real hombre en nosotros, guiarnos en el desarrollo equilibrado

necesario para alcanzar la posición de verdaderos humanos.
No estamos contra los Materialistas, Científicos ni
Ateos, ya que cada uno cumple con una función necesaria en
el pleno desarrollo de nuestra sociedad.
Sólo queremos enfatizar que de la fusión perfecta del
conocimiento Divino y del Humano surge la verdadera
sapiencia, la justa comprensión y el necesario amor para
nuestro afligido y sufrido mundo.
Nuestro mensaje va dirigido a la conciencia de los
lectores, donde radica toda posibilidad de redención, cambio
y transformación de su mundo interior.
El hombre está constituido de materia, energía y
conciencia. Si la materia, que constituye nuestro organismo
físico necesita de alimentos para poderse desarrollar, crecer y
alimentar, es también cierto que su contra parte, la conciencia,
necesita de un alimento para poderse desarrollar en
equilibrio perfecto con la materia.
Cuando no existe equilibrio entre la materia y la
conciencia el hombre se enferma.
Las enfermedades a las cuales nos referimos no son
solamente las relacionadas al cuerpo físico, sino también y
sobre todo, a nuestra parte psíquica y emocional.
De aquí surgen los complejos, depresiones,
impaciencias, malos hábitos, aberraciones, odios, crueldades,
insatisfacciones, iras, rebeldías, etc.
Si el cuerpo humano necesita vitaminas, proteínas,
aminoácidos y los diferentes elementos extraídos de nuestra
nutrición diaria, es también cierto que nuestra conciencia
requiere de su alimento recibido por medio de la sabiduría,
escuchando música clásica de los grandes compositores como

Beethoven, Mozart, Hendel, Vivaldi, Bach, etc., inspirándose
con la contemplación de los paisajes maravillosos de la
naturaleza, sintiendo amor para todas las cosas y criaturas
vivientes que nos rodean, meditando profundamente en las
pulsaciones de la vida, la cual se mueve imperiosamente en
nuestras células, al unísono con las de las plantas, de los
animales, de todo cuanto nos circunda en nuestro planeta Tierra,
como en nuestro sistema Solar, nuestra Galaxia y nuestro
Universo.
Obviamente si nuestra parte material necesita de una
instrucción adecuada y de un conocimiento que nos permita
obtener una cultura y educación acorde a nuestro
desenvolvimiento en la vida y en la sociedad, es también
cierto que nuestra conciencia requiere del conocimiento interno
perteneciente al Ser y por lo tanto sólo puede ser recibida del
Ser.
Respetamos profundamente las teorías dadas por los
insignes científicos, investigadores, filósofos y religiosos sobre
los diferentes temas tratados en el transcurso de la historia.
Respetamos todas las religiones del mundo, porque
buscan mejorar al hombre y agradecemos con profundo
respeto la labor de todos los seres humanos que han
colaborado como células de un inmenso organismo al
desarrollo de nuestra cultura, educación, ética y moral a
través de millones de años.
Es necesario estudiar y seguir un conocimiento interno,
real y práctico, con el cual cada uno pueda comprobar por si
mismo, con sus propios medios, con la finalidad de que toda
teoría desaparezca y solo impere la verdad, recordando lo que
dijo el gran filósofo Alemán Emanuel Kant: "Toda Teoría es

gris, solo es verde el árbol de dorados frutos que es la vida".
Estos conocimientos no son nuevos, permanecieron
ocultos por siglos. El Maestro Jesús fue gnóstico y su doctrina
floreció maravillosamente en los primeros tres siglos después de
su muerte, luego tubo que ocultarse en organizaciones secretas
para evitar las persecuciones perpetradas por la iglesia católica
la cual catalogaba a los gnósticos como herejes porque se
atrevían a hablar sobre los misterios de la creación y sobre los
secretos de la vida y de la muerte.
Los principios gnósticos son los mismos utilizados por
las famosas civilizaciones de los Mayas, Toltecas y Aztecas en
México, de los Incas en Perú, por los Griegos y sus misterios de
Eléusis, por la poderosa civilización de los Faraones de
Egipto quienes esculpieron su enorme sabiduría en las ciclópicas
rocas de las pirámides y de los numerosos templos edificados
por ellos en honor de Osiris, el Cristo Egipcio, los mismos que
utilizaron los Asirios y Babilonienses; los mismos que
permitieron a la Civilización de los antiguos Atlántes, alcanzar
un estado de desarrollo increíble y asombroso.
Los Científicos aseguran que el hombre solo utiliza el
3% de las posibilidades de su cerebro y que el 97% restante
permanece inactivo o solo cumple con funciones puramente
fisiológicas.
Nosotros aseguramos que el hombre utiliza solo un
3% de conciencia y que el 97% restante permanece totalmente
dormida.
La conciencia y el subconsciente son considerados
por nosotros como el conjunto de las experiencias vividas a
través de las múltiples existencias tenidas en el recorrido por el
mundo de la materia.
Si con solo un 3% de conciencia utilizada somos
capaces de tantas maravillas, ¿Cuanto no haríamos con el
resto que permanece dormida y por lo tanto, inactiva?
Muchas personas al llegar a la ancianidad, repiten
incesantemente que si tuvieran 20 años, con la experiencia
acumulada durante la vida serian capaces de hacer prodigios.
Nosotros enfatizamos que si un anciano es capaz de
hacer prodigios con la experiencia almacenada en una sola
vida, el hombre que logre transformar su subconsciente en
conciencia, o sea despertar el 97% de conciencia dormida,
donde está contenido el recuerdo y las experiencias de miles
de vidas recorridas en nuestro planeta o en otros de nuestra
Galaxia, sin duda, sería capaz de cosas sobrehumanas, sería un
Sabio, un Superhombre.
Te invitamos, estimado lector, a practicar las fórmulas
de la doctrina gnóstica y a comparar luego por ti mismo los
resultados.
No oigas los conceptos de tus amigos, vecinos,
profesores o consejeros, con relación a estos estudios; ellos
opinan sin tener conocimiento objetivo de lo que pueden
conceptuar.
Investiga tú, por ti mismo, como lo hicieran Hermes
Trismegisto, Tales de Mileto, Pitágoras, Sócrates, Platón,
Galileo, Paracelso, Leonardo Da Vinci y todos los grandes
hombres que existieron y jamás fueron comprendidos sino
más bien calumniados y vejados por sus contemporáneos.
Busca la razón de tu existencia. Abre las puertas y las
ventanas de tu mente y de tu conciencia para poder escudriñar
las verdades ocultas que te llevarán algún día a encontrarte con
tu propia realidad, con tu verdadero Ser, con tu Conciencia

Superlativa y Divina.
CAPITULO I
LA INICIACION
EL SENDERO PROBATORIO
Es indudable y los hechos así lo demuestran, que todos

los seres humanos tenemos un destino que trae a nuestra vida
momentos de angustia, de sufrimientos, de dolor y también ratos
de alegría y felicidad.
Todo depende del Dharma y del Karma que hallamos
adquirido en el transcurrir de nuestras pasadas existencias.
Si analizamos nuestra vida nos daremos cuenta de que,

en el transcurso de ella nos toca pasar, queramos o no, por
diferentes etapas duras, con dolor y sufrimientos. ¿Por qué,
entonces, no aprovechar el tiempo para emprender a la vez el
recorrido de “La Iniciación”, donde se nos califican los estados
emocionales expresados por nosotros en los momentos de
dificultad o alegría y se nos enseña a dominarlos para ser mas
dueños de nosotros mismos?
El V.M. Samael, refiriéndose a este tema de tanta
trascendencia dice: “LA INICIACION ES LA MISMA VIDA
SABIAMENTE VIVIDA”.
Antes de adentrarnos en el desarrollo de este capitulo, es
bueno recordar que a todos los estudiantes Gnósticos les ha
correspondido pasar por el ritual de consagración para ser
admitidos como miembros de nuestra institución.
Algunos lo hicieron al inicio de su existencia, otros más
tarde. Se consagraron en años distintos, en meses diferentes,
pero todos lo hicieron en la fase de luna creciente. Este hecho
representa una constante y tiene su explicación.
Sabemos, y los botánicos así lo enseñan, que en luna
creciente la savia de las plantas sube con más fuerza e
intensidad desde la parte inferior hacia el tallo, induciéndolas a
un crecimiento más acelerado.
Obviamente la luna posee influencia directa sobre
nuestro planeta, nuestra naturaleza y por lógica, sobre nosotros.
Ella influye poderosamente en nuestra estructura molecular,
psicológica, mental y por ende, en nuestro aspecto espiritual.
El ritual de Iniciación Gnóstica se realiza en luna
creciente, con el propósito de hacer más rápido nuestro
crecimiento espiritual.
La finalidad de la Iniciación es la conquista del estado

humano en nosotros, para luego seguir en un avance más
profundo en busca del grado de Superhombre.
Esto se consigue por medio del desarrollo de las partes
que se hallan latentes o dormidas en el fondo de nuestro
Universo Interior y encarnando el Alma, la cual representa la
sumatoria de todas las experiencias adquiridas en el transcurso
de las diferentes existencias vividas por nosotros, sea como
hombres, sea como humanoides o como integrantes del reino
mineral, vegetal o animal.
El que se decida a seguir el camino de la Iniciación se
aleja de lo que todos denominan: “Lo Normal”.
Al Iniciado le toca romper con una serie de costumbres y
hábitos, propios de nuestro mundo y nuestra sociedad.
El Iniciado tiene que ir más allá de lo meramente normal
y ser considerado en muchas ocasiones como “raro” por las
personas que no siguen ese mismo camino.
El Iniciado aspira la conquista de su Ser y esto conlleva
un sacrificio especial, empero le da como recompensa “Un
Trono para mandar y un Templo donde oficiar” y además, le
permite manejar las Fuerzas Cósmicas para bien de la
humanidad y de sí mismo, confiriéndole con merecimiento, el
denominativo de “Rey de la Naturaleza”.
Para lograrlo, es indispensable sentir en sí mismo la
necesidad ferviente y el convencimiento puro de seguir este
camino, que aún siendo difícil, bien vale la pena recorrerlo para
conquistar la felicidad eterna.
Entremos ahora a estudiar las diferentes etapas que le
toca vivir a los neófitos durante el proceso de la Iniciación.
Al igual que en las escuelas de nuestro mundo físico,

donde pasamos primero por la preparatoria, para luego ingresar
a la primaria, al liceo y posteriormente a la universidad, ocurre
también en la “Escuela Esotérica Iniciática” donde, después de
consagrarnos en el Primer Grado Gnóstico por medio del Ritual
de la Iniciación, nos toca pasar por un ciclo probatorio el cual
define si estamos preparados para entrar a la Iniciación.
Este ciclo inicia con la Prueba de “El Guardián del
Umbral”.
Así como todos nosotros poseemos un Ser divino, que
está constituido por la suma de todas nuestras virtudes, dones,
facultades y demás partes autónomas, propias del Ser, también
existe en nosotros su antítesis llamada “El Guardián del
Umbral”.
Este representa la suma de la maldad contenida en
nuestros defectos, vicios, pasiones, morbosidades y demás
debilidades egóicas. Su aspecto es verdaderamente terrible,
espantoso.
Los rayos que expulsa de su cuerpo gelatinoso, los
temblores que produce con sus pasos y los huracanes que lo
acompañan, le dan un aspecto realmente aterrador.
La prueba consiste en enfrentarnos a él, cara a cara, sin

dejarnos asustar por su espantosa fealdad.
Es natural que cualquier persona se pregunte: “¿Cómo
puede un neófito, que solo esta comenzando el recorrido de la
Iniciación, enfrentarse a un monstruo tan terrible como el
Guardián del Umbral sin haberse antes preparado
adecuadamente?”.
Es importante aclarar que en esta prueba y en todas las

demás, los Venerables Maestros de la Logia Blanca despiertan
el porcentaje de Conciencia poseído por el neófito, denominado
BODDHISITA y que éste no le teme al ego, ni al Guardián del
Umbral en absoluto.
Sólo es necesario que el estudiante tenga la plena
convicción de querer emprender el viaje de regreso hacia la
morada del “Dios Tum”, nuestro Ser.
Con este anhelo y con la suficiente fuerza de voluntad
debemos enmendar los errores cometidos a través de los siglos,
y con ello nacerá en nosotros el atrevimiento necesario para
revelarnos contra quien nos ha mantenido sometidos a la
esclavitud por tanto tiempo y finalmente podamos entregarnos a
nuestra Madre Divina para que nos conduzca por el camino de
la Luz, de la verdad y de la Vida.
Si el aspirante a la Iniciación vence, es admitido a la
prueba de los cuatro elementos de la naturaleza: Fuego, Aire,
Agua y Tierra.
En la prueba de Fuego, el estudiante es atacado por

personas que lo insultan, que lo calumnian, que le hieren su
susceptibilidad, tanto en el mundo físico como en el interno,
para ver como reacciona en su parte psicológica, mental y para
comprobar si, de verdad, está dispuesto a cambiar.
El elemento fuego tiene relación con la ira.
Cuando la persona está pasando por la prueba del
Elemento Fuego presiente, casi seguramente, que en el Lumisial
donde asiste, la mayoría de sus miembros le ignoran y si alguien
de casualidad se fija en ella es solamente para criticarle su mal
comportamiento.
Es cuando surge en su mente la idea de que todos son

hipócritas y que esa institución es parecida a todas las demás
conocidas.
Durante esa prueba sentimos que la sangre hierve en
nuestras venas y no admitimos que se nos hagan reproches, ni se
nos den consejos.
Es el momento en el cual, como nunca, el Fuego mueve
nuestros estados internos para sacudirnos y motivarnos al
despertar, para que nos percatemos de nuestra fragilidad y
nuestra incapacidad de enfrentarnos con paz y serenidad a los
acontecimientos normales de la vida.
Todo se nos hace difícil y en la mayoría de los casos
llegamos a la firme conclusión de que no servimos para este tipo
de trabajos tan exigentes.
En los mundos internos el aspirante se ve envuelto en
llamas, siendo la condición para superar la prueba, permanecer
sereno. Si logra triunfar, le mandan mas adelante la prueba del
elemento Aire.
Este nuevo elemento se relaciona con nuestra parte
psicológica y con nuestros pensamientos. El estudiante se ve
confuso, empieza a dudar de la Gnosis, de los Maestros, de la
Institución y en los mundos internos se ve caer en un abismo.
Es la oportunidad en la cual duda de todo y de todos. Si
al principio, cuando recién conoció la Gnosis estimaba
imposible que algún día sería capaz de abandonar esta doctrina
tan pura, hoy, olvidándose por completo de esos conceptos,
empieza mas bien a denigrar de ella y de sus miembros.
Si al principio tenía la plena seguridad de que había,
finalmente, hallado el camino que tanto buscaba, ahora duda
hasta del Avatara de Acuario. Piensa que todos son lobos
vestidos con piel de oveja y estas ideas son acompañadas

normalmente por un torbellino de pensamientos adversos que
traen desesperación y depresión.
Sólo la profunda reflexión, aunada a la fe en nuestra
Madre Devi Kundalini, quien nunca nos abandona, puede en
un momento como este, sacarnos del abismo en el cual nos
encontramos, producto de las desfavorables condiciones internas
que nos acompañan.
Si el estudiante y buscador de los Misterios Crísticos,
logra pasar la prueba es agasajado por los Maestros encargados
de su proceso y admitido a otro aún más delicado y difícil como
es la prueba del elemento Agua.
El elemento Agua es muy débil, tenue, delicadamente
maleable cuando se halla en estado de quietud y tempestuoso en
los momentos de alteración y en los fenómenos propios de su
naturaleza.
Tiene íntima relación con nuestras aguas genéticas y con
el cuerpo vital.
Las pruebas con este elemento están asociadas con el
sexo opuesto, con la lujuria, la lascivia, el instinto brutal de la
posesión y todo cuanto tenga relación con la energía creadora.
Normalmente, cuando el estudiante entra a los estudios
Iniciáticos, es acompañado por una fuerza de voluntad
incomparable, la cual le permite vencer muchos obstáculos y
romper con múltiples ataduras que posee con el mundo y la
sociedad.
En esos tiempos la persona, al escuchar los peligros que
corre el devoto del Sendero de la Luz, se siente capaz, por la
euforia que lo envuelve, de vencer todas las pruebas que se le
puedan presentar, incluyendo las relacionadas con el sexo

opuesto.
Sin embargo el Lucifer, antes de lanzarle una prueba
como esta, la envuelve en un ambiente de pasión irresistible, le
ofusca la mente, pone las glándulas endocrinas, relacionadas con
la energía creadora, a trabajar como nunca y luego, como si
fuera poco, le envían el elemento que más le agrada envuelto,
además, en una fuerza luciférica con toda la atracción que sólo
unos pocos se sienten capaces de rechazar.
En estos momentos de terrible tribulación, cuando lo
humano se hace más humano y lo Divino pareciera esfumarse
para darle paso a las bajas pasiones, debe existir en el neófito la
suficiente voluntad de avanzar en el camino para unirse a Dios y
la convicción de no querer cambiar “La primogenitura por un
plato de lentejas”, solo así será posible superar este obstáculo.
Quien sea capaz de darlo todo por el amor hacia su
Madre y de no cambiar su amor por el de cualquier mujer,
podrá vencer.
Empero, una cosa es decirlo y otra bien distinta, es
cuando sé está en el ruedo de la corrida, donde los toros sueltos
de la lujuria embisten mortalmente al pobre elemento que osa
intentar sobresalir sobre los demás.
Por algo, los que han pasado por ello y logrado ya la
perfección, dicen que la doctrina Gnóstica enseña el camino del
Superhombre.
En realidad, debemos admitir que muy pocos superan
esta terrible prueba. La continua emigración de estudiantes
gnósticos de nuestros Santuarios se debe principalmente a esto.
Es como cuando en las películas de guerras muestran a
un ejército sobre el cual se abalanzan los enemigos y lo
destruyen, quedando algunas veces unos esporádicos

sobrevivientes.
En los mundos internos, el neófito se ve solo en medio
del océano y si se deja agarrar por el pánico pierde la prueba,
más si permanece sereno vence y tiene derecho a ser sometido a
la prueba de Tierra.
La prueba del elemento Tierra tiene íntima relación con
los estados económicos, con la paciencia y la comprensión.
La persona se encuentra de improviso sin dinero, sin
trabajo y con pocas posibilidades de mejorar su situación
económica. Su familia, esposa y amigos lo calumnian, lo
insultan y en ocasiones le dicen que la “pava” se la mandó la
Gnosis, esa escuelita peligrosa de brujos, de espiritistas, etc.,
etc.
El estudiante, que antes de entrar a nuestros estudios
gozaba de comodidades y dinero, que tenía casa y carro, trabajo
y buena vida, queda de un momento a otro privado de muchas
de estas cosas, para probar su capacidad de desprenderse de las
tenencias que le prestó la vida pero que no le pertenecen.
A algunos les va mejor a otros le quitan todo, esto lo
decide “ el Iniciador”, de acuerdo a su Karma y a la capacidad
de resistencia que posea.
Normalmente en estos momentos tan difíciles no falta el

reclamo de sus padres, hijos, esposa y amigos por haberse
metido en algo raro que produjo su ruina.
No se hace esperar la presencia del pastor o del cura que,
llenos de buenas intenciones y desconociendo sus mínimos
principios, le advierten sobre los peligros de recorrer el camino
de la Gnosis, en donde si se descuida puede perder hasta el

Alma.
No tarda la advertencia del médico, que sin conocer ni
los más mínimos principios y fundamentos científicos gnósticos,
le advierte que si practica la castidad o transmutación, podría
volverse loco o enfermarse al poco tiempo.
No demora el amigo, que apelando a las buenas
intenciones, le aconseja hacer como él, una vida normal sin
sufrimientos extras a los que ya las circunstancias le ponen.
¿Quién, con todas estas dificultades, sería capaz de
seguir adelante, con su Ser Interno, con su Conciencia Divina,
renunciando a todo y a todos por amor a Dios, como lo enseña el
Cristo?
En los Mundos Internos algunos neófitos se ven entre
dos montañas inmensas que se cierran a su alrededor. Si no se
desespera, si permanece sereno, logra pasar la prueba y es
aceptado como miembro de la Escuela Esotérica Gnóstica para
comenzar el curso o el recorrido de “LAS NUEVE
INICIACIONES DE MISTERIOS MENORES”.
Ahora bien, es normal y muy natural, que todos nos
preguntemos “¿cómo puede un ser humano, común y corriente,
pasar y vencer todas las pruebas antes mencionadas?”
Nuestra posibilidad de triunfo estriba en el tres por
ciento de conciencia despierta que poseemos y que no puede ser
atrapada por la maldad del Ego.
Ese tres por ciento de conciencia despierta, está
contenida en el Átomo del Padre, que reside en nuestro centro
pensante, en el Átomo del Hijo, ubicado en el centro motor y en
el Átomo del Espíritu Santo, depositado en el Centro
Emocional.
Ese tres por ciento de conciencia libre, unida a la ayuda

de nuestro Ser Interno y a la voluntad que tengamos de hacer las
cosas bien, nos permiten pasar todas las pruebas necesarias para
seguir creciendo espiritualmente y fortalecernos cada vez más,
con el fin de poder superar después los procesos más difíciles
que se nos presentan en la continuación de nuestra Obra.
El V. M. Samael Aun Weor nos enseña que cuando el
neófito pasa una de las pruebas, es agasajado en los mundos
superiores con una fiesta en el salón de los niños. Esto nos da a
entender que, desde el principio, los Maestros de la Logia
Blanca (Niños) están pendientes de nuestro progreso espiritual.
Ellos se alegran y le rinden honores a nuestro Real Ser
por la capacidad que ha tenido de inducirnos a abandonar las
malas costumbres de nuestro mundo y colocarnos, después de
ese primer éxodo de nuestra vida licenciosa y mundana, en el
camino de la regeneración.
El neófito pasa las primeras cuatro Iniciaciones de
Misterios Menores, relacionadas nuevamente cada una con un
elemento de la naturaleza y por lo tanto con los mismos
acontecimientos descritos anteriormente.
Nuevamente cada uno de los elementos prueba, a su
debido tiempo, nuestro comportamiento frente a los hechos de la
vida que nos envuelven incesantemente y cada vez en una
octava superior, con un poco mas de exigencia con relación a
nuestra madurez en el recto actuar, recto pensar, recta manera de
ganarnos la vida y al ejemplo que demos ante nuestros
semejantes.
Luego llega a la Quinta Iniciación de Misterios
Menores, donde es premiado con la entrega de una pequeña
espada y una capa de “Chela” si es varón y de un velo de Isis, si

es mujer.
En la Quinta Iniciación de Misterios Mayores se
conquista el Alma, que como decíamos anteriormente, es el
conjunto de nuestras experiencias vividas en el ir y venir por la
vida.
En la Quinta Iniciación de Misterios Menores, se encarna
el Bolisita que es el porcentaje de conciencia libre y despierta
existente en nuestro Interior y que nos ayuda a tener el impulso
necesario para enfrentarnos a las debilidades egóicas,
concediéndonos además la inteligencia suficiente para
interpretar positivamente la Doctrina del Salvador del Mundo.
A partir de ese momento se le concede el denominativo
de “Hierofante de Misterios Menores”.
La Sexta y Séptima Iniciación de Misterios Menores
incluyen pruebas diferentes para cada tipo de Iniciado,
dependiendo de su rayo particular.
La Liturgia Gnóstica enseña: “El Hierofante observa tres
exámenes en uno y pueden ser dados de tres maneras. Los
rústicos o vulgares reciben su examen en el fuego, los
evolucionados ó educados en la mente y los selectos o escogidos
en lo más alto. Así tenéis estrellas y estrellas, sistemas y
sistemas, grados y grados, pero no los deis a conocer a unos y a
otros”.
La Octava de Menores tiene nexos íntimos con el
Arcano 8 de la Kabala y con la denominada prueba de “Job”.
Esta Iniciación es sin duda la más difícil, porque su
condición nos obliga a vivir situaciones particularmente
desagradables, donde, en oportunidades, la Ley Cósmica ó
Kármica nos cobra algunas deudas pendientes que no pueden
ser negociadas porque es indispensable sentir en nuestro propio

Ser el dolor intenso y el látigo del verdugo para poder encarnar
las partes autónomas de nuestro Kaom Interno, epicentro de este
poderoso proceso.
Es la prueba de la soledad, de la paciencia y del dolor,
donde todos los elementos de la naturaleza parecieran
conjugarse para hacernos sentir, en un mismo proceso, el dolor
que perpetramos a nuestros padres, hijos, pareja, amigos,
vecinos, etc., en vidas pasadas; los abusos y maltratos
ocasionados a nuestro cuerpo; la falta de dignidad que le dimos
a nuestra presencia humana con comportamientos pocos
decorosos, impúdicos e indignos.
El ocho en Kabala, simboliza la Justicia Cósmica en
acción. Representa la ejecución de un Karma pendiente en
nuestras deudas internas. Es la prueba máxima de todo proceso,
tanto de Misterios Menores como de Mayores. Significa la peor
etapa donde corremos el riesgo en algunos casos de perder las
cosas más deseadas, como también las personas amadas.
Lógicamente este proceso difiere en cada persona en su
intensidad. En algunas es mucho más severa que en otras, pero
para ninguna se hace fácil de superar.
Afortunadamente todo castigo tiene un límite y después
de la tempestad viene la calma, después de cada bajada hay una
subida. Después de esta etapa tan dolorosa y difícil viene la
culminación del recorrido probatorio con la Novena Iniciación
de Misterios Menores.
Esta Iniciación es, diríamos, el examen final del primer
ciclo de trabajos correspondiente al recorrido que lleva hacia el
encuentro con el Padre. En ella, el caminante recibe como
recompensa una pequeña corona, porque ya es considerado un

diminuto “Rey”.
Cuando el esoterísta logra coronar esta Iniciación se
convierte en una verdadera esperanza para los Maestros de la
Logia Blanca, que ven en él la posibilidad de un nuevo embrión
formado, con la probabilidad de alcanzar, algún día, su
desarrollo como humano.
El tiempo cronológico aproximado de todo este Proceso
Iniciático, expuesto hasta ahora, es normalmente de siete años.
Sin embargo, conocemos Boddisatwas de Maestros que nos han
revelado haber completado éste mismo proceso en cinco años y
otros que lo lograron en nueve años; todo depende
esencialmente del impulso que la persona traiga, de la intensidad
del trabajo esotérico que ejecuta, de la constancia que tenga y
del grado de degeneración general que traiga en la presente vida.
Lo esencial es completar el trabajo de las Nueve
Iniciaciones de Misterios Menores con la mayor perfección, ya
que representan las bases sólidas sobre las cuales se edificará el
resto de la Obra, representada simbólicamente en los mundos
internos por una Catedral, cuya cúpula constituye la coronación
de la misma.
Entre nosotros y el Padre Cósmico común o el “Kether”
como se conoce en el lenguaje Zefirótico, existe una distancia
calculada en miles de años luz o años esotéricos.
Esto mismo ocurre en el planeta que habitamos, el cual
se encuentra también a miles de años luz de distancia del Sol
Central de la Galaxia. Este cuerpo planetario se surte para su
desarrollo espiritual y físico principalmente de los rayos de luz
provenientes del sol de nuestro sistema solar Ors, quien a su vez
se alimenta de las vibraciones y de la luz del Sol Central de la

Galaxia.
Si llevamos este mismo proceso a nuestro caso personal
de humanos, nuestro Intimo (Atman) se corresponde al Sol de
nuestro sistema solar, de quien nosotros recibimos los impulsos
necesarios para nuestro funcionalismo biológico y espiritual,
mientras El los capta de nuestro Padre Cósmico Común o
Kether.
Una vez que encarnemos a nuestro Intimo, podremos
recibir en forma más directa la luz del Kether y una vez que nos
fusionemos con el Kether, seremos el mismo Sol Central de
nuestra Galaxia Interior, tan luminoso como el de la Galaxia que
alberga a nuestro planeta Tierra.
En cada Iniciación de Misterios Menores ganamos 10
años esotéricos y nos acercamos al Ser en esa misma
proporción.
En cada Iniciación de Misterios Mayores relacionada con
las serpientes de fuego, nos acercamos 100 años luz.
En cada Iniciación de Misterios Mayores, relacionada
con las serpientes de luz, nos acercamos 1000 años luz.
En el transcurso de las primeras Iniciaciones de
Misterios Menores nos corresponde pedir a nuestro Real Ser y a
las Divinidades que nos asignen a nuestro Santo Gurú.
El Gurú es nuestro Guía Espiritual, quien vela por
nosotros en el camino, quien nos protege de todos los peligros y
de los continuos ataques de los tenebrosos, empeñados con todas
sus fuerzas a impedir nuestro triunfo; quien nos instruye y nos
enseña las claves secretas para superar los obstáculos que
encontramos en nuestra vida Iniciática.
Muchos se preguntan porque no es nuestro Ser quien se

encarga de instruirnos en vez del Gurú.
Al respecto, es importante aclarar que el discípulo posee
la misma característica vibratoria de su Padre Interno por estar
ligado por una misma Genética Espiritual y por lo tanto, si fuera
Él su instructor, en los momentos de acercarse este sentiría una
irresistible atracción de fundirse con su parte superior, quedando
desintegrado al instante, por no poseer todavía la estructura solar
adecuada para soportar y asimilar el altísimo voltaje de luz y
poder del Padre.
Este caso puede ser comparado al de una persona que
recibe un rayo en una tempestad y es fulminado en el acto, por
no poseer a su alrededor una envoltura que lo proteja de la
magnitud de este fenómeno.
Si, en cambio, el discípulo ya está preparado con sus
envolturas solares, podrá resistir en forma directa la luz de su
Padre y recibir también las enseñanzas correspondientes a la
particularidad de ese Maestro.
Esta particularidad se empieza a procesar en forma muy
evidente cuando el Iniciado llega a encarnar su Alma en la
Quinta Iniciación de Misterios Mayores.
El V. M. Samael dice:"Benditos sean los que tengan a su
Santo Gurú con cuerpo físico”.
Indudablemente este hecho representa una gran ventaja,
porque ese Maestro Gurú además de darle instrucción al
discípulo en los Mundos Internos lo puede hacer también en el
Mundo Físico, en una forma más práctica y directa, con la
ventaja que en este plano conserva más el recuerdo de las cosas
que le enseñan.
“Cuando el discípulo está preparado, el Maestro llega”.
Todo el proceso del cual hablamos, llega a la Novena

Iniciación de Misterios Menores y puede ser realizado por
casados o solteros. Es obvio que el casado, si trabaja en la
transmutación en forma correcta y positiva, logrará pasarlo en
forma más rápida.
El soltero serio, que haga sus Pranayamas,
Vocalizaciones, Ejercicios Rúnicos, etc., etc., y que sea honesto
consigo mismo, en el sentido de la castidad, podrá también
lograr, en forma relativamente rápida, la culminación de éste
Trabajo Iniciático que representa el comienzo de La Gran Obra
del Padre.
Es importante comprender que las personas casadas, con
problemas en el hogar, con una pareja que no comparte con
estos principios, deben aprovechar las dificultades presentes
para ganar méritos del corazón y dedicarse, sobre todo, al
sacrificio por la humanidad que les permite ganarse el Capital
Cósmico necesario para pagar la Iniciación.
“Como es arriba es abajo, como es adentro es afuera”
dice la máxima del sabio Hermes Trismegisto.
Si en el mundo físico no poseemos dinero, no podremos
comprar los útiles indispensables para nuestra existencia
humana.
Lo mismo ocurre en los mundos superiores de
Conciencia donde si tenemos el Dinero Cósmico necesario,
ganado a través de servicios desinteresados hechos a nuestros
semejantes, podremos pagar el derecho a ser ascendidos a un
nuevo grado Iniciático.
La persona que transmuta, vocaliza y muere
místicamente, pero que nunca se preocupa por ayudar a sus
hermanos de la sufrida humanidad, queda estancado en su

esfuerzo por escalar la montaña de la Iniciación.
Compartir las enseñanzas Crísticas con nuestros
semejantes, tiene un valor muy grande que nos concede como
resultado, la retribución de algunos valores conscientivos, los
cuales se traducen en Capital Cósmico.
Por eso los Misioneros Gnósticos ganan tantos méritos;
por eso los instructores de primeras cámaras adelantan
rápidamente en su Obra y los colaboradores de la divulgación
de la doctrina reciben alabanzas en los mundos superiores de
conciencia.
No desperdiciemos la fabulosa oportunidad que se nos
brinda en esta vida para avanzar hasta donde podamos en el
hermoso encuentro con nuestra Realidad Única Perfecta.
Es necesario vencer a todos los vicios y malas
costumbres que tenemos, para mejorar nuestra personalidad y
hacernos dignos de ser llamados “Gnósticos”.
El camino que sigue de ahora en adelante, está
representado por las Tres Montañas de Las Iniciaciones de
Misterios Mayores.
CAPITULO II
LOS MISTERIOS MAYORES
Con el ascenso de la Primera Montaña logramos “la

Autorrealización”, con la conquista de la Segunda Montaña
alcanzamos la “Resurrección” y con la Tercera Montaña
conseguimos la “Ascensión o Liberación Final”.
Para comenzar la escalada de la Primera Montaña, es

indispensable primero haber creado y solarizado los cuerpos
existenciales del Ser, que son los siguientes:
* FISICO
* VITAL
* ASTRAL
* MENTAL
* CAUSAL
* BUDDHICO
* ATMICO
Esto se consigue trabajando en la Transmutación como

casados, a través del Gran Arcano A.Z.F.
Algunos neófitos se preguntan de que forma la persona
puede saber si posee Cuerpos Solares. Al respecto debemos
recordar que el Maestro Samael revela la existencia de muchos
individuos con Cuerpos Solares en nuestra sociedad, quienes
los fabricaron en vidas pasadas a través de la practica del
“Maithuna” en las diferentes civilizaciones Serpentinas.
Estos individuos pueden usar sus cuerpos para realizar
viajes en los diferentes niveles superiores de conciencia pero en
una forma inconsciente, ya que la mayoría desconoce su

funcionalismo por haberlo olvidado.
El hecho de que una persona pueda usar sus facultades
internas para salir en Cuerpo Astral conscientemente es signo
inequívoco que posee Cuerpos Solares, porque solo quien los
tiene puede usarlos.
El fuego sagrado, correspondiente a la serpiente del
Cuerpo Físico, debe ser despertado para que el Kundalini
comience su ascenso por la columna vertebral, hasta alcanzar el
contacto con la glándula pineal, pasando por todos los Chacras
correspondientes, los cuales se van transformando en Iglesias a
medida que la Serpiente hace su entrada triunfal en ellos.
Los seres humanos que desconocen estos Misterios y no
los practican, poseen Chacras, una especie de micro centrales
energéticas necesarias para equilibrar el funcionalismo bio-
electromágnetico de su cuerpo.
En el caso de los Iniciados de Misterios Mayores, estos
centros son impregnados por el poder del fuego y de la luz,
convirtiéndose en verdaderos Templos Internos donde las
criaturas atómicas de nuestra naturaleza personal, como son los
Dioses y elementales de la Tierra, Agua, Aire, Fuego y todos
los Seres Divinos que dirigen nuestra creación microcósmica,
asisten y reciben su alimento Espiritual.
Nuestro cuerpo, al igual que un sistema solar, posee
también sus planetas, sus Regentes planetarios, su Sol Central y
demás creaciones.
El Fuego, después de penetrar en la glándula Pineal que
es Marciana y se relaciona con la Fuerza y el Autoritarismo,
debe proseguir su camino a través de un delicado filamento
nervioso, hacia la glándula pituitaria, de naturaleza Venusina y
por ende, relacionada con las características del Amor y la

Humildad, donde termina coronando la Primera Iniciación de
Misterios Mayores.
Es por esto indispensable que el “Caminante” desarrolle
las “virtudes del Amor”, durante este tránsito de delicado
avance, para compensarlas con aquellas correspondientes a la
Fuerza, obteniéndose así el equilibrio necesario que debe reinar
en nuestro trabajo como una eterna constante.
Para que el fuego sagrado despierte en el Chacra
Muladar, donde está encerrado herméticamente con forma de
serpiente enroscada tres veces y media, es necesario que los
átomos lunares y solares de nuestra naturaleza interior hagan
contacto en el “Tribeny” para producir con sus poderosos rayos,
el milagro deseado por nosotros de despertar a la “ Bella
Durmiente”.
No existe duda de que sin el auxilio del Santo Gurú,
quien se encarga de realizar extraordinarios pases magnéticos de
gran poder en el trance de la Copula Sagrada, sería más que
imposible lograr éste milagro perteneciente a los Misterios del
Ocultismo Inmortal y a los secretos más indecibles del
Universo.
El tiempo cronológico aproximado para lograr este
acontecimiento es de un año de prácticas intensas sin perder
jamás el “licor de la sabiduría”.
Al despertar los fuegos sagrados, algunos Iniciados
sienten un profundo dolor en su cintura, caderas o coxis,
acompañado de cierta sensación de ardor en su sistema nervioso
central.
Algunos sienten por unos días la sensación de una
inspiración muy elevada y de cierta iluminación. Luego todo
desaparece y de no estar bien informado al respecto, el Iniciado

tomará todo esto como una simple molestia física, pasajera, que
pronto se supera sin percatarse o siquiera sospechar, del
fenómeno tan importante que se ha suscitado en su estado
interior.
El Cristo Interno es engendrado en el seno de la Divina
Madre Devi Kundalini en el chacra Muladar por el Sacratísimo
Espíritu Santo por medio del gran Arcano A.Z.F. realizado en
estado de equilibrio y sensatez humana, para luego unirse al
Intimo que reside en el chacra correspondiente a la glándula
pineal.
Es una fusión peculiar de dos unidades que jamás
podrían unirse de no ser por el auxilio de la materia.
Sólo utilizando sabiamente el cuerpo físico podremos
permitir que las “Tres Gunas” o tres fuerzas primarias de la
creación como son: El Padre, el Hijo y el Espíritu Santo,
puedan encontrarse y fusionarse para deleite y alegría del
Espíritu.
Este proceso de misterios incomprensibles para la mente
humana, sólo es comparable, en mi imaginación, al fenómeno
producido por aquellas Galaxias, que después de haber logrado
el grado necesario de desarrollo íntimo como Individuos
Sagrados y Sobrenaturales de Macro Conciencia Galáctica,
chocan entre sí en un excelso abrazo ciclópico, para unirse en
una sola Masa Cósmica y en una sola Conciencia Universal,
donde se funden las múltiples partes autónomas del Ser de ese
Cuerpo Galáctico, compuesto por millones de estrellas, planetas
y cuerpos estelares conformando un nuevo Ser Universal de
indescriptible dimensión y perfección, cuyo alcance dudamos
poder comprender por medio de nuestras reducidas capacidades

intelectuales ó concientivas.
La columna posee 33 vértebras, denominadas “Cámaras
Sacras” en el lenguaje esotérico. Cada Cámara o cañón, tiene
sus exigencias y sus pruebas que deben ser superadas para
permitir el avance de la Serpiente Kundalini.
Al principio suben los vapores espermáticos abriendo
campo entre las vértebras, limpiándolas de todo fluido negativo
incrustado en ellas, para permitir a la Madre Kundalini su
ascenso victorioso.
Cada cañón posee un don especial y una facultad
específica, por eso el Iniciado se va haciendo sabio y mago a
medida que sus serpientes de fuego van subiendo.
Los Maestros enseñan que la Primera Iniciación de
Misterios Mayores está relacionada con el elemento Tierra y es
la más fácil de realizar. El requisito indispensable es ser castos
hasta la muerte y no derramar jamás el “Vaso de Hermes.
El elemento Tierra es tosco y denso. En este proceso es
necesario aprender a separar las llamas del Espíritu de Vida, del
oscuro humo correspondiente a las debilidades egoicas.
En esta Iniciación se logra abonar la “Tierra Filosofal”,
nuestra materia, eliminando las abundantes malezas con los
utensilios de la Alquimia con la finalidad de preparar la siembra
del trigo y del maíz sagrados, cuyos frutos solares o Crísticos,
servirán de alimento para las criaturas virtuosas que irán
naciendo de las múltiples creaciones procesadas en nosotros en
forma paulatina.
El V.M. Samael enseña que cuando el Iniciado alcanza la
Primera Iniciación de Misterios Mayores, recibe la espada
Flamígera y un “Templo para oficiar”.
Indudablemente, éste acontecimiento cósmico tan

importante es festejado con inmensa alegría en los Mundos
Internos, ya que con ello nace un nuevo Cristo Intimo, un nuevo
Niño, el cual, si es bien protegido, guiado y alimentado, podrá
alcanzar algún día el tamaño de hombre, para empuñar la
Espada de la Voluntad junto al Cetro del Poder para seguir
realizando la Gran Obra del Padre.
La Segunda Iniciación de Misterios Mayores
pertenece al cuerpo vital y está relacionada con el elemento
Agua. Para comenzar el trabajo del ascenso de la Segunda
Serpiente de Fuego en el Cuerpo Vital, es indispensable
despertar el Fuego Sagrado correspondiente, para luego iniciar
el ascenso de la Serpiente Kundalini.
Los Venerables Maestros nos enseñan que esta
Iniciación es muy difícil y terriblemente lenta, sobre todo
porque hemos tenido problemas graves con nuestra energía
sexual en esta y en vidas pasadas, creando fuerzas negativas
muy densas, las cuales se han depositado en el fondo vital,
dañando fuertemente nuestro cuerpo y dificultando severamente
el ascenso de la Serpiente Kundalini.
El Cuerpo Vital representa el asiento del río energético
de nuestras aguas espermáticas. Estas han sido transformadas
en fuentes contaminadas de aspecto turbio y color negro,
similares a las que circulan en los drenajes de nuestras ciudades,
por las fornicaciones, por los abusos sexuales y las faltas graves
cometidas contra el Espíritu Santo.
Sólo por medio de continuas purificaciones, de ayunos
voluntarios, de esfuerzos titánicos, de análisis y eliminación de
nuestras malas costumbres, pensamientos morbosos y
pasionarios, podremos descontaminar las aguas y purificar la
fuente de vida que nos da el impulso para el avance espiritual y

el alimento para nutrir todas las criaturas virtuosas que van
naciendo en nosotros como fruto del Trabajo Alquímico.
Esas aguas simbolizan los ríos y las fuentes cristalinas
que circundan las tierras de nuestro planeta y que llevan los
elementos necesarios para la multiplicación de las especies a
todos los lugares recorridos.
Las aguas sucias y contaminadas sólo llevan consigo la
muerte y la desolación.
Afortunadamente el Santo Gurú se encarga de realizar
poderosos pases magnéticos durante el trance de la cópula
sagrada, para liberarnos de las energías nefastas opuestas a
nuestro progreso espiritual, permitiendo que la Serpiente
Sagrada haga contacto con las glándulas Pineal y Pituitaria,
culminándose así este nuevo proceso.
Existe un gran trabajo de alta magia y de teurgia
práctica, conocido por todos como “Lavatorio de Pies”.
Esta ceremonia tan sencilla se realiza únicamente los
días Jueves de Semana Santa y sólo en los Templos de Misterios
debidamente autorizados para tal fin.
Es tan sencillo que la mayoría de las personas que
estudian la sabiduría gnóstica, no le encuentran la importancia o
el significado oculto, que realmente tiene.
Jesús el Cristo, el Ser más exaltado que ha pisado
nuestro suelo, como lo enseña el V.M. Samael, con su
inconmensurable jerarquía quiso realizar este simbólico trabajo
con sus discípulos para demostrar que cuanto más elevado se
está en grados de luz y poder, más humilde se debe ser.
Como simple Siervo del jardín del Señor lavó los pies de
sus Discípulos y los perfumó con aceite previamente preparado
con aromas y especias para ese momento.
Resulta evidente que en los varones las impurezas y los
fluidos tenebrosos, productos del mal procesamiento de nuestras
energías creadoras a través del tiempo, se van depositando en el
Chacra Prostático, órgano éste que funge de “matraz” para el
calentamiento Alquímico del mercurio y el azufre con la sal de
la sabiduría, para obtener como resultado la fabricación del oro
de las virtudes humanas.
Este órgano es utilizado en los seres humanos comunes
para expulsar la energía crística de sus depósitos, es como decir,
para expulsar al Cristo de su habitáculo y darle albergue a sus
detractores, “los Mercaderes del Templo”.
Al llegar a este nivel Iniciático resulta inaplazable
despojarse de estas fuerzas malignas que producen en el
caminante la falta de seriedad requerida en la castidad para la
continuación del camino, que debe expresarse en sus
pensamientos, palabras y hechos.
Por medio de los pases, que el Sacerdote autorizado para
ello, realiza en los pies del Discípulo, donde se hallan los
vórtices de las plantas de los mismos, los cuales están
directamente asociados al Chacra Prostático, pueden ser
extraídas esas fuerzas oscuras que tanto daño producen en la
vida íntima de la persona.
Estos vórtices están regidos por GOB, Dios del reino de
la tierra y especialista en los asuntos relacionados con la
purificación de los elementos groseros que son luego
transformados en el oro y el las piedras preciosas del reino
mineral.
La Tercera Iniciación de Misterios Mayores se

relaciona con el Cuerpo Astral y con el elemento Aire. La
Serpiente Kundalini relativa a esta Iniciación comienza su
ascenso lentamente, de acuerdo a los méritos del corazón.
Dice el V.M Samael “El despertar del fuego en el
Cuerpo Astral es siempre anunciado con un relámpago terrible
en la noche”.
Durante este proceso el Ser interno se crucifica para
enseñarnos el camino de la Cristificación, único medio para
alcanzar la perfección, representada por el Padre. El Cristo dijo:
“Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida y solo por mí se llega al
Padre”.
Entre la segunda y tercera serpiente de fuego se presenta
normalmente la prueba conocida con el nombre de “IRENE”.
Este representa probablemente, el paso más delicado de
la vida iniciática del caminante, porque debe enfrentarse cara a
cara con sus propias pasiones.
Una dama, no necesariamente la más bella de todas, sino
la que tenga las cualidades especiales que se ajustan a las
debilidades egoicas del Iniciado, irrumpe en la escena del drama
de la vida de ese actor.
Ella, la que juega el papel de “Irene”, en la mayoría de
las veces no se da cuenta que está cumpliendo ese papel tan
delicado de probar, bajo la asistencia de Lucifer, el divino
Daimon, las capacidades de templanza de ese Iniciado.
Las fuerzas de atracción en ambos se desencadenan hasta
tocar el tope de sus posibilidades.
La nube del sutil encanto que traspasa lentamente las
sensibles capas que separan su conciencia de la inconsciencia, se
estacionan inertes sobre los examinados, haciendo que la
energía creadora llegue al estado de ebullición y las glándulas,

relacionadas con su producción, se sobrecarguen hasta alcanzar
el recalentamiento.
Sólo el perpetuo amor que se profesa el Iniciado con su
pareja con la cual está haciendo la Obra; sólo la fidelidad que
éste tenga hacia su Madre Divina; sólo el anhelo inquebrantable
de querer regresar al reino de su Padre; sólo la fe solar que haya
conseguido hasta ese nivel que le hace reflexionar sobre la
posibilidad de perderlo todo por un átomo de placer; sólo la
protección del Santo Gurú y la envoltura que le proporciona la
“Gracia de Dios” y sólo la convicción personal de hombre recto
que no puede volver a cometer errores, pueden hacer que todo
este proceso signifique para él un triunfo inigualable en su
aspecto íntimo.
Es importante aclarar que existe una prueba específica
llamada “Irene” pero en realidad el Iniciado es enfrentado
continuamente a este tipo de pruebas en el recorrido del arduo y
largo camino de la regeneración, donde en cada rincón aparece
algún obstáculo que puede hacerlo caer, retroceder o estancar.
Es por eso imprescindible que permanezca atento de
momento a momento, viviendo una vida peligrosa, como el
vigía en época de guerra, como lo indica el Venerable Maestro
Samael.
Después de que la Serpiente Sagrada hace contacto con
las glándulas Pineal y Pituitaria sigue su camino hasta llegar al
corazón, donde corona el trabajo.
Al culminar esta nueva Iniciación el caminante se gana
el derecho pleno de cargar la Cruz de la Redención en un
Templo físico de Misterios, simbolizando el drama cósmico del
Cristo que se está Cristificando en el Cuerpo Astral y

conquistando la inmortalidad en ese plano de conciencia.
Es bueno aclarar que todo auténtico Iniciado puede ser
autorizado por algún Maestro con cuerpo físico a cargar la Cruz
una vez que haya coronado el Sendero Probatorio completo.
La Cuarta Iniciación de Misterios Mayores
corresponde a la ascensión de la Serpiente del Cuerpo Mental y
se relaciona con el elemento fuego. En este nuevo proceso de
regeneración el Iniciado debe seguir el ejemplo que su Padre le
dio cuando se crucificó con el Cuerpo Astral en la Tercera de
Mayores; en esta oportunidad le corresponde hacerlo
personalmente, aprovechando las enseñanzas entregadas por El
Padre y depositadas en el cofre maravilloso de su Conciencia.
Es fundamental aclarar, para que no permanezcan
sombras de dudas, que sin castidad no existe ni la remota
posibilidad de conquistar siquiera una Iniciación.
La serenidad y madurez del Iniciado en este sentido
juegan un papel realmente determinante.
Alguien podrá engañar a sus amigos, familiares y hasta a
su propia pareja en la desviación y destrucción del Mercurio
Alquímico de la Gran Obra, en fantasías ó actos de lascivia y
fornicación, pero el Kaom interno, esa partícula autónoma del
Ser que tiene como asiento el entrecejo, como representación de
la Justicia Divina en nosotros, anota en el libro personal de la
vida todas las faltas cometidas.
A este Ser nada se le puede ocultar, nada se le escapa, ni
el más mínimo detalle de impureza, de pensamientos o hechos.
En esta Iniciación la persona Cristifica su mente animal,
transformándola en Mente Cristo, con capacidad de discernir en
el mundo de Nethsat o mundo de la Mente Universal, los
principios ocultos de la Divina Naturaleza Interior del hombre y

conectarse con los de la Sabiduría Cósmica contenidos en ese
mundo de inmensa perfección y sensibilidad Espiritual.
En el se comprenden los múltiples usos del verbo, que
transmite reacciones diversas en quien lo pronuncia,
dependiendo del tipo de hidrogeno que lo envuelve y que
semejante a un combustible de alta potencia, le imprime el
impulso para salir de la laringe creadora de acuerdo a las
características del pensador.
Cuando una persona emite un pensamiento y luego un
concepto, una energía a imagen del rayo sale de su mente y
golpea con la envoltura de su aura personal donde multiplica
inmensamente su intensidad y luego se devuelve a su corazón, el
receptor de sus emociones, a la velocidad del mismo
pensamiento y en el se depositan con sus características densas o
livianas, retribuyendo o perjudicando su estado psicológico o
mental con sus propias creaciones.
Por esta razón se insiste tanto en la doctrina gnóstica de
no emitir pensamientos negativos, ni palabras descompuestas,
porque dañan la armonía y la paz que deben reinar en nosotros.
Estas virtudes permiten a las partículas autónomas del Ser
permanecer en nuestro interior creando un ambiente propicio
para nuestro armonioso desarrollo.
Cuando la persona se altera psicológicamente y se
descompone en un ataque de ira, un verdadero terremoto se
desata en su interior, que produce en su mente destrucción y
desastre con las consecuencias negativas asociadas a su salud y
a su estado espiritual.
Cuando, en cambio, se sume en reflexión y meditación

profunda, las condiciones que se crean son completamente
distintas.
La paz, la serenidad y la sensación de arrobamiento
espiritual que empieza a sentir, hacen aflorar de su Mundo
Mental pensamientos y discernimientos de tipo superior
produciéndose una reacción en cadena, creando a su alrededor
un clima de vibraciones sutiles, livianas y divinas que servirán
para impregnar su psiquis, mente, corazón y conciencia con la
luz del entendimiento y con la paz del corazón tranquilo.
De esta manera el caminante es privado de todo
elemento desestabilizador que pueda perturbar el estado de
connubio integral producido por medio de las partes anímicas
existentes en el Mundo de Netzach, el Mundo de la Mente
Universal.
Donde existe desequilibrio emocional, donde están
presentes los conflictos morales, la maledicencia y la mentira,
reina el ego. Este y el Ser son como el agua y el aceite, nunca se
mezclan. Donde está el Ser no puede permanecer el Ego y
donde permanece el Ego no puede manifestarse el Ser, porque
son antagónicos, opuestos, totalmente contrarios.
Representan el bien y el mal y sin embargo, el verdadero
Adepto, que es Maestro de Maestros, debe pasar aún más allá, al
llegar a la morada del Dios Kether, quien es la única ley, donde
no existe el bien y el mal, lo mío y lo tuyo, lo bello y lo feo,
donde solo reina la Unidad Múltiple Perfecta.
En el transcurso de este difícil proceso, cuyo ascenso del
fuego resulta muy lento y difícil, se presentan continuos
conflictos mentales que deben ser superados por medio del
dominio de la mente, simbolizada por el burro.
Es importante montar en el burro de la mente, imitando

al Venerable Maestro Jesús, quien entró a la Jerusalén Celestial
en un pollino y las multitudes lo alababan y recibían con palmas,
símbolo del Ser.
Otro de los duros momentos, para quien osa recorrer
este espinoso camino, es cuando entra al Desierto Esotérico.
Todo desierto es árido y arenoso y en su interior solo se
encuentra desolación y profunda soledad. Los rayos del sol
calientan en forma inexorable las tenues arenitas que lo
componen. Las numerosas calaveras esparcidas por el suelo,
junto a los abundantes restos animales y humanos de quienes
perecieron en alguna intentada travesía por ese paraje hostil, le
proporcionan un tinte de aspecto macabro, verdaderamente
aterrador.
El Iniciado ingresa al Desierto Esotérico con todo el
equipaje que normalmente carga en su camino. Los múltiples
complejos, los innumerables caprichos, deseos, apetencias,
apegos y conceptos que conforman su falsa personalidad, se
materializan en inmensas maletas que carga en sus adoloridos
hombros, sin darse cuenta que no necesita de todo ese pesado
fardo para cruzar el árido lugar.
Los instintos agresivos, los deseos sexuales, la lascivia,
vanidad y orgullo, son simbolizados por perros, zorros, hienas y
lobos feroces que siempre lo acompañan.
Burros, bueyes, monos, gorilas, ratones y todo tipo de
animales, también andan el mismo trayecto como expresión del
zoológico interior con el cual cuenta todavía en su penosa
existencia.
Apelando a la Bendita Madre Devi Kundalini y
sintiendo internamente la imperiosa necesidad de conseguir un
cambio real, logra que Ella desintegre esa legión de

acompañantes indeseados, los cuales van cayendo muertos por
el camino, a medida que avanza por el árido desierto donde la
falta de agua y de alimento facilita el trabajo de desintegración
de estos elementos.
En este interesante recorrido debe llevar las alforjas bien
llenas de agua para evitar la deshidratación y la muerte. Esta
agua está contenida en sus propias gónadas donde se conservan
celosamente las aguas de la vida.
Debe, al mismo tiempo, dejarse guiar por la “Estrella de
la Mañana” y por el “Sol de la Media Noche”, representaciones
de la Madre y del Padre Interno, para no perderse en el
engañoso paraje del desierto, aparentemente idéntico en cada
rincón.
El Santo Gurú, sosteniendo su báculo en la mano diestra
e imitando al ermitaño de la carta doce del Tarot, guía a su
discípulo por un sendero que en realidad no existe, no está
trazado, para evitar que las tormentas de arena y el calor
sofocante hagan extraviar al caminante y perecer como uno más
de la enorme masa humana, tornándose en un simple resto
orgánico que con el tiempo se va descomponiendo abonando las
estériles tierras del lugar.
Pero el paso por el Desierto Esotérico es una oportunidad
única en la cual el Iniciado puede realizar un verdadero cambio
de sus aspectos psicológicos y mentales liberandose de tantas
ataduras.
Basta reflexionar, meditar profundamente en su propia
existencia y en las actuaciones erróneas de la vida, para darse
cuenta de que todas esas cosas que lleva consigo no tienen
ningún valor real, ni necesario.
Si después de cruzar el desierto, cuyo recorrido se realiza

en un tiempo cronológico previamente establecido por el
Iniciador, no ha logrado deshacerse de los numerosos elementos
que lleva adentro, lamentablemente, podrá seguir su camino
Iniciático pero sin la regeneración requerida para el optimo
despertar de la conciencia y para representar dignamente la
expresión del Padre ante la humanidad y la vida.
En la Cuarta Iniciación del fuego el Iniciado debe
también afrontar al terrible “Guardián de la Mente” y vencerlo
para tener derecho de seguir su camino con paso firme y
decidido hacia la conquista de los valores anímicos y morales,
tesoros preciados y esenciales para revestirse con las sagradas
vestiduras del Alma.
Al finalizar esta Iniciación, cuando el fuego hace
contacto con el corazón y culmina su recorrido, abre las alas
ígneas y con ellas las puertas de los Misterios que le permiten
entrar instantáneamente a cualquier departamento del Reino.
Al llegar a este estado se le concede el grado de
BUDDHA y lo revisten internamente con la capa amarilla
correspondiente.
En la Quinta Iniciación de Misterios Mayores debe
levantar la serpiente correspondiente al Cuerpo Causal; con este
trabajo se logra encarnar el Alma Humana (Manas).
El Iniciado, al llegar a esta etapa de su Obra es
considerado Maestro de la Venerable Logia Blanca, se le da
permiso para dar a conocer su nombre interno, se le entrega la
Túnica Blanca y una espada Flamígera de Gran Poder.
Al recibir su nombre interno y hacerlo público desciende
del espacio un manto de protección para escudarlo de los
ataques de los tenebrosos.
Es indudable que la fiesta Cósmica que se realiza en su

honor es de inmensa trascendencia. Un nuevo Hombre ha
nacido. El Cristo Intimo que nació en la Primera de Mayores se
hizo Hombre.
El Iniciado que llega a estas alturas se hace un hombre
causal y tiene derecho a moverse a voluntad en ese plano de
conciencia y recibir las enseñanzas impartidas por los habitantes
del mundo causal en los Templos de Misterios correspondientes.
Raras veces los Guardianes de los Templos del Mundo
Causal permiten la entrada a un Iniciado que no este en ese nivel
de conciencia.
Cuando el “caminante” se dirige a un Templo de este o
cualquier otro nivel, los Guardianes le “miden la columna”, esto
quiere decir que le hacen un examen de los méritos acumulados
en su Kundalini en forma muy rápida, con la finalidad de saber
si posee suficiente preparación espiritual para poder asimilar las
energías y las enseñanzas que se imparten en ese nivel.
Con esta observación podemos evidenciar y al mismo
tiempo comprender, que el avance Concientivo depende
esencialmente del desarrollo de la serpiente Kundalini en el
canal medular, que lógicamente conlleva una serie de
purificaciones y sublimaciones de los estados infrahumanos.
El Mundo Causal es, como su propia palabra lo indica, el
lugar de las causas, donde radica el génesis de toda acción o
efecto que venga a favor o en contra de nosotros.
Es el mundo electrónico, donde existe el movimiento
constante, donde el discípulo se transforma en la misma
Conciencia Universal, donde todo lo intuye, donde todo lo sabe,
donde en su interior su propia conciencia responde a todos sus
interrogantes.
El Venerable Maestro Samael enseña que algunos

Iniciados despiertan conciencia en las primeras Iniciaciones de
fuego y se hacen diestros en la investigación de los Misterios
ocultos de los mundos superiores, pero hay otros que no logran
este don hasta llegar a la Quinta de Mayores.
En este nuevo nivel de conciencia se transforma en un
Maestro o “Maestrito”, como cariñosamente dice el Maestro
Samael, quien usa éste diminutivo para evitar que el Iniciado se
llene de orgullo por haber logrado ese grado.
Sin embargo, en ese nivel el Iniciado, a pesar de haber
adelantado en buen tramo en su camino y haber logrado cierto
tipo de muerte psicológica en aspectos fundamentales
relacionados con los vicios y las malas costumbres, todavía
posee el ego vivo.
Pasa por un momento bastante delicado, ya que posee a
su Alma Humana encarnada confiriéndole poderosos poderes
ígneos relacionados con la luz y al mismo tiempo el ego que
también ejerce poderes malignos en sus estados psicológicos y
todavía domina muchas áreas de su constitución física y
concientiva.
El V.M. Samael explica que se trata de un
HANASMUSSEN en potencia. Todo depende del trabajo que
siga; si se dirige hacia la voluntad del Padre, la Balanza se irá
inclinando a favor del bien; si lo hace hacia la voluntad del ego
por medio del orgullo, la mitomanía, el engreimiento y de otros
factores asociados, la Balanza se irá inclinando a favor de las
fuerzas tenebrosas, transformándose en un aborto de la
naturaleza.
Para algunos resulta inadmisible o incomprensible que
este fenómeno pueda darse en una persona que haya alcanzado
este grado esotérico, pero los hechos lo han demostrado y sus

resultados nos conducen a aceptarlo como una realidad que no
podemos desconocer, ni negar.
Dice el Maestro Lakhsmi: “Una cosa es la Iniciación,
otra el despertar y otra la Muerte Psicológica”.
La Iniciación se logra con la sabia utilización de la
energía y se paga con el Dinero Cósmico que se vaya ganando
por medio del sacrificio.
Para lograr una Obra perfecta, es necesario equilibrar los
aspectos del Nacimiento y del Sacrificio con los de la Muerte
Mística en vibrante armonía.
De no ser así, el trabajo se haría a medias; quedaría
incompleto y sin la calificación necesaria para que la parte
humana pueda servir como vehículo de expresión del Ser.
El Maestro Samael nos enseña también que en la Quinta
Iniciación de Misterios Mayores el Iniciado debe escoger el
camino que va a seguir a partir de ese momento.
Existen dos posibilidades: el “Camino del Nirvana” o el
“Camino Directo”.
El primero tiene una bifurcación que lo lleva por un lado
a quedarse en el Nirvana, un mundo de inmensa paz, amor y
alegría, donde no existe el mal, ni el sufrimiento.
Este tipo de Iniciados después de un tiempo muy largo
de descanso debe regresar al plano físico a continuar su
experiencia en el mundo de la materia con todas sus
prerrogativas y después de múltiples idas y venidas, que pueden
durar millones de años y de continuos Nirvanas ganados,
conquista el derecho de la liberación final.
El otro lado del camino Nirvánico lleva al hermoso
recorrido “Devico”, donde el Iniciado se transforma en Deva de
la naturaleza con poderes ígneos sobre la creación, dirigiendo la

conciencia de las criaturas que se encuentran evolucionando en
los diferentes Reinos.
Cada bosque, cada lago, cada río posee a su divino Deva
que lo regenta, orientando y gobernando a los ejércitos
innumerables de elementales que colaboran en la creación,
aprendiendo de Ella y evolucionando para llegar a ser algún día
como su orientador.
Existen Devas relacionados con el elemento Tierra, otros
con el Agua, Aire o Fuego y poseen su propio Templo sagrado
en el elemento que los rige.
Cada uno es una inmensa llama impregnada de infinita
sabiduría.
Son Sabios y Maestros, conocedores de los enormes
secretos de la vida.
Sus conocimientos y poderes sobrenaturales alcanzan
mucho mas allá de nuestra efímera imaginación. Ellos también
alcanzan con el tiempo la liberación final y penetran al AIN
SOF para fundirse con el Sagrado Espacio Abstracto Absoluto.
Estos Devas inmortales ayudan a los Iniciados sinceros
que aprenden a amar a la Naturaleza e inspirarse en ella para que
su proceso se haga mas rápido, con un alto grado de
regeneración, asistiéndolo y protegiéndolo en los momentos de
peligro y de flaqueza humana, pudiendo llegar hasta conferirle
algunos poderes especiales sobre la naturaleza.
El segundo camino, denominado “la Directa” es para los
intrépidos buscadores de la perfección de la Maestría, para
aquellos Iniciados que están dispuestos a darlo todo para ganarlo
todo.
Este tipo de hombres solares, después de sufrir lo

indecible, logran en un tiempo relativamente corto, en
comparación con la eternidad, subir las tres montañas de la
perfección y se transforman en águilas del ANK LAK, en super
Hombres, en Logos, ganando el derecho de entrar a un mundo
de super Nirvánica felicidad denominado: “ABSOLUTO”.
La Sexta Iniciación de Misterios Mayores se relaciona
con el Cuerpo Buddhico. En esta, el caminante del Sendero de
la Vida, encarna su Alma femenina.
En la Quinta conquista el Alma Masculina, en la Sexta se
fusiona, a través de un desposorio sublime y mágico, con su
Alma Femenina, la verdadera “Alma Gemela” de la cual ha
estado eternamente enamorado. Quien le ha dado el entusiasmo
y lo ha animado en los momentos de flaqueza humana; quien lo
ha inspirado para lograr su hazaña de transformarse en hombre
verdadero; quien le ha servido como estímulo irresistible para
alcanzarla en su mundo, donde la luz es la constante, donde la
eterna actividad de sus elementos y la velocidad de acción dejan
perplejos a sus visitantes.
En la montaña de la “Autorrealización” el Iniciado lucha
incansablemente para encarnar a su Alma Femenina. En la
montaña de la “Resurrección” se esmera voluptuosamente para
fusionarse con su misma “Alma Gemela” de octava superior,
representada por el Crestos Cósmico, Chomah, la Fuerza
Universal de inimaginable perfección.
En esta Iniciación siente en su sensible corazón el dolor
inmenso de todas las mujeres del mundo, que en esta era del
Kali Yuga, de oscurantismo, barbarie y degeneración sin
precedente, son sometidas al abuso, la vejación, la explotación,
la violación, el maltrato, el menosprecio, la fornicación, etc.
Es cuando el “Caminante” aprende en su propia piel lo

que representa el Karma Mundial que ha producido la
humanidad por haber violado las leyes de la Bendita Madre, la
Madre de todas las Madres y por haber enlodado la
representación femenina de Dios en la tierra. Es un dolor agudo
que lleva al llanto y al estado más profundo de la comprensión
de la maldad humana en el “Invierno” de la actual Raza Aria.
La Séptima Iniciación del Fuego se fundamenta en
recapitular el ascenso de la serpiente de fuego relacionada con el
cuerpo Atmico. Es la Iniciación que nos permite unirnos con
nuestro Real Ser, con el Intimo, con la verdad dentro de
nosotros.
Representa el retorno al reino del Padre, de donde
fuimos expulsados a causa de nuestra inequidad y fornicación.
Es nuestro más preciado anhelo; significa la conquista del
“Cetro de Mando” y el comienzo de una nueva vida, signada por
la luz del Espíritu y guiada por la voz de la perfección.
Estas dos últimas Iniciaciones solo se recapitulan, en
vista de que el Iniciado probablemente ha hecho ya el trabajo
de levantar estas dos serpientes en alguna de las tantas vidas
pasadas y en las múltiples civilizaciones serpentinas que
existieron sobre la faz de la tierra.
Estas dos últimas serpientes nunca se caen, a pesar de los
errores cometidos por nosotros, ya que sus valores son
manejados exclusivamente por el Ser.
Ellas pertenecen a nuestro Padre (Atman) y a nuestra
Alma Femenina (Buddhi) que nunca se contaminan y viven en
niveles de supraconciencia Cósmica donde el Ego o el Mal,
nunca podrá llegar para causar daño.
Cuando el Iniciado haya complementado todo el trabajo

antes descrito, hasta levantar las siete Serpientes de Fuego, se
habrá fusionado con su Intimo y será considerado como un
Maestro Realizado.
Sucesivamente, en la Iniciación Venusta, hay que
perfeccionar la Maestría conseguida, transformando las
Serpientes de Fuego en Serpientes de Luz.
Esta se denomina “Iniciación Venusta”, por que deriva
de Venus, el Planeta del Amor, indicándonos que para lograr
ésta nueva hazaña es necesario utilizar la fuerza más poderosa
del Universo: El Amor.
Para levantar las Serpientes de Fuego se trabaja con el
deseo sexual, aunado a la voluntad inquebrantable de no
desperdiciar ni una sola gota del licor seminal.
La pasión está presente en el primer proceso que lleva al
Iniciado, sin dudas, a un nivel satisfactorio de avance espiritual,
pero considerado elemental en comparación con el trabajo
necesario para lograr el perfeccionamiento de la Maestría
El Iniciado que quiere continuar su camino debe
desintegrar hasta la sombra de la pasión animal. En este tiempo
le es prohibido practicar trabajos alquímicos.
Debe dedicarse únicamente a la desintegración de ese
elemento, que le fue útil en sus trabajos con el fuego, pero ya no
puede aparecer en otro de tipo superior, en el cual debe
transformar las Serpientes de Fuego en Serpientes de Luz, donde
debe blanquear aun mas sus vestiduras, conquistar la Espada
Flamígera de Luz resplandeciente y transformarse en “sabio y
consejero de la humanidad”.
Este es conocido como: “El paso por el puente de las
maravillas” donde el Judas de la Pasión es ahorcado permitiendo
al Iniciado conquistar un nuevo rumbo de la vida y de la Obra

que debe realizar.
Este paso es considerado como la calificación de la Obra
realizada hasta ese momento y su proceso es denominado
“Octava Iniciación del Fuego”, por ser la nota superior ú Octava
que debe dar para seguir su perfeccionamiento.
Ya superado este delicado proceso, el Iniciado comienza
desde el principio, desde el nivel más bajo, con la calificación
de cada una de sus Serpientes de Fuego, para darle un toque de
pulí turra, de luz, de brillo, revisando y eliminando los
obstáculos dejados en el camino y sustituyendo cada átomo de
fuego por uno de luz, cada virtud por otra superior, cada
enseñanza por otra más sublime, cada facultad por una más
brillante, cada consejo por uno de más profundidad, cada
palabra con una de más acierto.
Este camino está lleno de obstáculos increíbles y de
peligros inimaginables, pero ahora el Iniciado cuenta con el
auxilio de su Cristo Intimo, de su bendita Madre, de su Santo
Gurú y en definitiva de su Ser Interno integrado que lo pueden
acompañar, porque ya posee sus vehículos internos solarizados.
Nuevamente el Iniciado vuelve a la “Forja de los
Cíclopes” a trabajar con la Alquimia y calificar, una por una, las
siete Serpiente de Luz en cada uno de los cuerpos internos.
Este proceso consiste esencialmente en ir perfeccionando
los trabajos anteriores que, podríamos decir, representan la
“Obra Negra” de una catedral del mundo físico que ahora debe
ser frisada, estucada, adornada y rematada en todos sus detalles
para mostrar un aspecto verdaderamente majestuoso.
Representa para el escritor sobresaliente el continuo pulir
de sus Obras plasmadas con gran destreza pero que antes de
hacerlas publicas, requieren de numerosas revisiones para

conseguir una redacción elegante que permita al lector estudiar
sus ideas dictadas por la inteligencia superior del Ser y, al
mismo tiempo, deleitarse con las expresiones de su docto
lenguaje.
El mismo Dante Aliguieri, el poeta de Mantua, después
de escribir su Magistral Obra titulada “La Divina Comedia” y a
pesar de su inmensa y profunda cultura, necesitó trasladarse a la
Florencia de sus tiempos, centro de la literatura y el arte de la
floreciente Europa, para mejorar su lenguaje literario o “lavar
sus vestiduras en el río Arno de esa ciudad”, como el mismo lo
escribió, corrigiendo su Obra para hacerla inmortal ante la
historia y la humanidad.
Cada Serpiente de Luz tiene sus características y
exigencias particulares y en cada Maestro es diferente,
dependiendo de su misión y camino.
En el recorrido de la Iniciación Venusta el Iniciado debe
desintegrar su “falsa personalidad” para tener derecho a recibir
la calificación requerida.
La Iniciación Venusta es un proceso que se realiza al
culminar todos los trabajos de la Primera Montaña y antes de
iniciar la ascensión de la Segunda Montaña, la cual se concreta
esencialmente en la ejecución de los primeros nueve trabajos de
Hércules.
Representa una exigencia intermedia sin la cual,
podríamos decir, no se ha colocado el sello de la calificación a
la Primera Montaña, ni se cuenta con el paso requerido por el
“Iniciador” para comenzar la Segunda.
CAPITULO III
LA SEGUNDA MONTAÑA
La Segunda Montaña es conocida con el nombre de:

“Montaña de la Resurrección”.
En la Primera el “caminante del sendero de la vida”
recibe el denominativo de Iniciado, en la Segunda de Adepto.
En ella no se reciben más Iniciaciones. Se trata de un

trabajo de purificación en los nueve círculos dantescos
correspondientes a los infiernos atómicos de los siguientes
cuerpos planetarios:
1) LUNA
2) MERCURIO
3) VENUS
4) SOL
5) MARTE
6) JUPITER
7) SATURNO
8) URANO
9) NEPTUNO
Como lo explica el V. M. Samael en su Obra Magistral “

Las Tres Montañas”, el Adepto dura por lo menos un año en
cada infierno para poderlo limpiar de todas las cabezas de legión
que allí habitan, junto a los elementos infrahumanos que fungen
de escolta de estos “Reyes de las tinieblas”.
Los infiernos a los cuales nos referimos pertenecen a
nuestra naturaleza interior profunda.
En la Primera Montaña y especialmente en las
Iniciaciones Venustas, el Iniciado elimina una gran parte del
Ego existente en su interior, empero no las cabezas de legión,
representadas por los siete pecados capitales, fuente originaria
de todo “yo” o elemento izquierdo.
Sólo el Hércules mitológico, viva representación de
nuestro Cristo Intimo, protegido con sus asombrosas vestiduras
de oro puro y con las armas apropiadas suministradas por la luz
de la Divina Inteligencia, podrá enfrentarse a quienes
podríamos denominar los “Generales” de las legiones egóicas

que subyacen en nuestro interior.
El Cristo Intimo o el “Hijo del Hombre”, como lo llamó
el divino Maestro Jesús de Nazareth, es el Hércules, el
superhombre en nosotros, capaz de eliminar con sus poderes
sobrenaturales el pecado original de nuestro interior.
El V. M. Samael enseña en “Las Tres Montañas” que
cuando el Adepto limpia los infiernos de la Luna, conquista por
derecho su cielo correspondiente y se hace Ángel.
Cuando desintegra los elementos del infierno de
Mercurio, se hace habitante de su cielo correspondiente y se
transforma en Arcángel.
Cuando limpia el infierno de Venus, se hace habitante
del cielo de ese planeta y gana el nivel de Principado.
Cuando destruye los elementos infrahumanos de los
infiernos del sol, gana el nivel de Virtud.
Cuando limpia los establos de los infiernos de Marte, se
hace Potestad.
Cuando logra la hazaña de desintegrar los elementos que
viven en los infiernos de Júpiter, se hace Elohim.
Cuando alcanza la purificación de los infiernos de
Saturno, conquista el nivel de Trono.
Cuando realiza este mismo trabajo en los infiernos de
Urano, logra el grado de Querubín
Cuando finalmente lo logra con los infiernos de
Neptuno, alcanza el nivel de Serafín.
Es oportuno enfatizar que la Madre Devi Kundalini juega
en todo este proceso un papel decisivo sin el cual sería más que
imposible la desintegración de los elementos tenebrosos como
representación de nuestra maldad y nuestros errores
El Adepto después de todo este interminable recorrido se

fusiona con SHIVA, el Sacratísimo Espíritu Santo Cósmico,
conocido en la Kabala Hebraica con el nombre de BHINAH y
está preparado para recibir la Resurrección, donde
sucesivamente encarna al Cristo Cósmico o Chomah.
Es el momento en el cual recibe la tan anhelada “Piedra

Filosofal”, que según los grandes Alquimistas de la historia, es
una piedra salina maravillosa con facultades y características
sobrenaturales y capacidad de realizar transformaciones
Alquímicas tan espectaculares, como transformar el plomo en
oro.
Normalmente en estas alturas del trabajo, la edad del

Adepto está muy avanzada y su cuerpo muy agotado y lacerado
por el continuo esfuerzo sobrehumano realizado para recorrer el
arduo camino.
Por esta razón es muy difícil que logre superar este
nivel sin perder su cuerpo físico, sin desencarnar.
El que, en cambio, logra vencer a la muerte, tiene
derecho a recibir el “Elixir de la Larga Vida” con el cual podrá
conservar su cuerpo por miles de años y continuar su trabajo de
escalar la Tercera Montaña: “La Ascensión”.
El Maestro Samael enseña en uno de sus libros, que la
distancia existente entre nosotros y nuestro Ser es de 300.000
años esotéricos.
Lógicamente, esta distancia difiere en cada persona, ya
que está relacionada con su nivel del Ser y es directamente
proporcional a la perfección interna de cada individuo del
Universo.
.Por esta razón la liturgia dice en uno de sus rituales

sacros: ”Existen grados y grados, niveles y niveles, pero no los
deis a conocer a unos y a otros, porque son secretos”.
Nuestro viaje de regreso al seno del Omnimisericordioso
es verdaderamente largo y lleno de espantosos peligros, de
incalculables proporciones.
Para realizar un recorrido de 300.000 años luz en el
espacio infinito se necesita sin duda, de una nave espacial
preparada y equipada con todos los accesorios indispensables
para evitar el fracaso de esta hazaña.
En nuestro caso personal podríamos imaginar que esta
nave esta constituida por las envolturas de los Cuerpos Solares
que conforman una coraza a semejanza de una cápsula espacial,
capaz de proteger al Iniciado de las radiaciones del espacio
que debe recorrer.
Así como ocurre con cualquier artefacto espacial
enviado por los científicos de la Tierra, que debe afrontar
obstáculos impredecibles como meteoritos, oscuridad,
radiaciones, cuerpos extraños flotando en el espacio y choques
con los diferentes cuerpos celestes presentes, le ocurre también
al Iniciado, quien en su “cohete espacial” debe sortear todo tipo
de peligro.
Por otro lado, es necesario saber tripular la “nave” y
conocer la ruta de regreso al Reino del Padre, para no perderse
en la inmensidad del Universo. Un pequeño error cometido en
la dirección deseada, podría costar años de esfuerzos para
regresar a la ruta correcta.
Una pequeña distracción bastaría para producir la
colisión con algún cuerpo extraño que flota en el espacio. Un
acercamiento demasiado elevado con el Sol podría perjudicar las

estructuras de la “nave” y hasta destruirla.
Somos viajeros del Espacio Abstracto Absoluto que en el
recorrido vamos aprendiendo los múltiples Misterios contenidos
en todo cuanto nos rodea.
No existe duda de que si en el transcurso de ese
interminable viaje no contáramos con el apoyo y la orientación
de verdaderos expertos, de conocedores del mapa de las
estrellas, de V. Maestros para podernos orientar y guiar,
estaríamos perdidos.
Una maniobra equivocada, un golpe brusco de timón, un
instante de indecisión, nos sepultarían para siempre en el vacío
infinito; nos haría naufragar en el océano de la vida y perdernos
en él hasta tener una nueva oportunidad, tal vez después de
miles de años, de poseer nuevamente las condiciones y los
méritos adecuados para volver a realizar un viaje de esta
magnitud con mas experiencia y conocimientos, con la finalidad
de obtener el éxito deseado.
Aunque lo escrito por nosotros en estos párrafos podría
sonar como fantasioso ante el razonamiento humano, debemos
admitir, por las enseñanzas dejadas por nuestro Avatara, que
nuestro regreso al Seno del Padre significa emprender un viaje
que dista 300.000 años luz, un tiempo inalcanzable para
nuestra reducida capacidad.
En cada Iniciación de Misterios Menores el Neófito se
acerca a su Ser en diez años esotéricos; en cada Iniciación de
Misterios Mayores lo hace en 100 años luz; en cada Iniciación
Venusta avanza en 1.000 años luz.
Diez mil años esotéricos aproximadamente, se recorren
en la conquista de la primera Montaña de la Auto Realización
Intima del Ser y de la Iniciación Venusta, realmente muy poco

en comparación de los 290.000 años restantes.
Si consideramos que en cada trabajo de Hércules,
ejecutado en la Segunda Montaña en los nueve infiernos
correspondientes, el Adepto se acerca a la meta, tal vez, unos
10.000 años luz, llegaríamos a la conclusión que en esta nueva
hazaña podría recorrer otros 90.000 años. Si sumados esta
distancia a los 10.000 anteriores, completaríamos un total de
100.000 años esotéricos.
Esto nos hace comprender que en la Montaña de la
Ascensión se logra el mayor acercamiento a la meta, no
sabemos con que velocidad, en los tres trabajos de Hércules
faltantes, donde con la conquista del “Vellocino de Oro” se
culmina la Obra y se encarna al Padre del Padre, a “Kether” el
“Anciano de los días”.
Con este análisis, que según nuestro concepto tiene
lógica, podemos evidenciar lo lento y difícil que resulta nuestro
regreso al seno del Padre.
Cada Iniciación es una estación ganada, una posición
conquistada en el Espacio, adonde se puede aprovisionar de
alimentos para seguir el viaje.
Realmente, después de estudiar el libro: “Las Tres
Montañas”, donde el Venerable Maestro Samael describe este
recorrido con lujos de detalles y con un lenguaje Magistral,
adornado con hermosos párrafos de la Divina Comedia del
Dante, de la Ilíada y Odisea de Homero y de la Eneida de
Virgilio, nos damos cuenta de que nuestra situación como seres
humanos, con nuestro estado actual de imperfección, es
verdaderamente preocupante, digna de una profunda reflexión
para darnos cuenta que a pesar de nuestro probable triunfo en
algunos aspecto del trabajo de regeneración, estamos aun

demasiado lejos de nuestra meta final.
En ese libro maravilloso, que representa una verdadera
Obra Maestra y donde se devela el Camino Iniciático, nos
conmueve percibir el asombro que se producía en el Maestro
cuando descubría al León de Lerna y a las Tres Furias en los
infiernos atómicos de la naturaleza interior de su Luna
psicológica, comenzando los trabajos relacionados con la
Segunda Montaña
Esas criaturas perversas son la causa de nuestras
actuaciones diarias con toque de violencia, donde sentimos en
nuestras profundidades más intimas los instintos brutales de la
destrucción, a pesar de proponernos cambiar nuestro
comportamiento.
Nos impresiona saber que el Maestro, después de
conquistar el grado de Arcángel, todavía poseyera en los
infiernos de Venus al terrible Toro de Creta, criatura pasionaria
culpable de nuestros fatídicos instintos lujuriosos, que nos
impulsan a la contaminación de nuestra sublime Energía
Creadora.
Nos deja perplejos conocer que después de niveles tan
elevados como el de Principado, Potestad y Trono, todavía
puedan existir criaturas indeseables en el fondo de la naturaleza
interior profunda.
Nos da terror saber que todavía en la Tercera Montaña
de la Ascensión, antes de culminar la Obra con la conquista del
Kether en nosotros, puedan existir muy adentro aspectos
negativos de las sombras.
Descubrir lo imperfecto que estamos merece profunda
reflexión. Este hecho nos induce a ser más humildes y sinceros,
nos conduce a reconocer que realmente somos nada y que

nuestra única esperanza estriba en la posibilidad de iniciar el
“viaje de regreso” que a una velocidad muy superior al de la
Luz, ha de llevarnos en un tiempo no muy remoto, a la
conquista de nuestros valores internos, perdidos en algún
momento de nuestra muy larga existencia Cósmica.
Estos valores están adornando actualmente, al igual que
perlas preciosas, los cuellos y los cuerpos de nuestras creaciones
inmundas que simbolizan a la “ Gran Ramera”, sumergida en
los infiernos atómicos de la Naturaleza, donde luce sus
abominables pasiones.
LA TERCERA MONTAÑA
La Tercera Montaña es conocida también como la

“Ascensión” y sus procesos consisten en la entrega total al
servicio por la humanidad doliente.
En ella hay que completar los doce trabajos de Hércules,
nueve de los cuales fueron realizados en la Segunda Montaña.
Se trata realmente de trabajos profundos de
incomprensible perfección, donde el Adepto debe prepararse
para encarnar a Dios en sí mismo, lo perfecto, lo ignoto, la
Única Ley.
Su lapso puede durar mucho tiempo, a veces cientos de
años, ya que el nivel de perfección exigido para encarnar al
Anciano de los Días es demasiado elevado.
Continuos esfuerzos sobrehumanos de purificación y

santidad profunda, aunados al eterno sacrificio para ayudar a la
humanidad a elevarse en su nivel de Ser, le proporcionan al
Adepto los méritos suficientes para ganar la Montaña de la
Ascensión y con ello el derecho de entrar al Absoluto, pasando
previamente por algunos niveles maravillosos del mismo como
son el Ain Soph Aur, el Ain Soph y el Ain que representa el
núcleo del Absoluto.
Este largo y difícil proceso debe ser precedido por la
desintegración de los Cuerpos Solares del Ser, que ya en ese
nivel tan elevado de Conciencia Cósmica representan un bagaje
demasiado pesado.
En este caso, los Cuerpos Solares quedan reducidos a un
átomo o embrión, que como semilla almacenada podrá
germinar nuevamente en el futuro, cuando el Adepto decida
regresar al mundo de la materia por voluntad de la única ley a
seguir engrandeciendo, aun más, sus características de Dios y
Maestro de Maestros.
Cuando el Adepto culmina el proceso de la Tercera
Montaña, tiene derecho, como lo decíamos en párrafos
anteriores, de entrar al Absoluto, un mundo de Super Nirvánica
felicidad y puede decir finalmente que ha concluido su Obra y
por lo tanto, tiene derecho al descanso del “Séptimo Día”.
Es necesario informar que cada devoto de la senda de la
luz, posee un rayo propio que lo caracteriza, influyendo
marcadamente en su Evolución Espiritual.
Algunos pertenecen al rayo de la vida, otros al rayo de la
medicina, del Amor, de la Sabiduría, de la Fuerza, de la Justicia
y otros al rayo de la Muerte.
Cuando nuestra esencia pura e inocente fue enviada,

desde el núcleo de la galaxia a la cual pertenecemos, al ciclo de
idas y venidas a los diferentes planetas de nuestro sistema solar
para comenzar nuestra evolución, nos asignaron una
especialidad para desarrollar.
De esta manera en el paso por la escuela extraordinaria
de la vida, cada cual va sintiendo en sus intimidades
determinada inclinación esotérica, influenciada principalmente
por el rayo al cual pertenece.
Otro rayo particular, que se manifiesta en cada Iniciado,
está caracterizado por la civilización en la cual, por primera vez,
logró auto-realizarse en una raza determinada.
Si una persona logró su desarrollo Espiritual en la época
de la floreciente civilización China, sin dudas llevará en sus
características físicas algunos rasgos Chinos, a pesar de que
haya nacido en Francia, en Inglaterra, en Finlandia ó en
cualquier país de América.
El que se haya desarrollado Espiritualmente en la India
llevará sus rasgos hindúes en el lugar donde nazca, aunque sean
mínimos y conservará también una especial afinidad hacia las
enseñanzas impartidas en esa época.
Finalmente, existe una tercera característica definida en
la Obra de cada Iniciado.
Unos recorren el camino del Padre, otros el del Hijo y
otros el del Espíritu Santo.
En este caso también se notan las diferencias entre las
pruebas afrontadas por cada uno de estos Iniciados para realizar
su Obra y además, en la particularidad de las enseñanzas
impartidas y en el carisma desarrollado en cada uno de ellos.
El que recorre el camino del Padre sufre menos, posee un

especial poder que le otorga el báculo del Padre, tiene honores y
una vida relativamente cómoda. Le gusta hablar especialmente
sobre la Muerte Mística y todas sus características.
Quien recorre el camino del Cristo sufre lo indecible, es
el camino más difícil y espinoso de andar. El Adepto pasa por
situaciones insólitas de pobrezas y enfermedades durante las
cuales algunos discípulos que lo siguen, dudan hasta de sus
capacidades y Maestría. Es el camino del continuo dolor, casi
imposible de describir o comparar.
Al llegar a la altura del proceso de “Job”, la prueba
máxima para todo Adepto, este debe vivir en carne propia,
aunque sea por un solo instante, el dolor que sienten los
enfermos, el sufrimiento de todos los males existentes en la
tierra, incluyendo las enfermedades infecciosas, la lepra, la
tuberculosis, la hepatitis, el cáncer, la viruela, los males
cardiacos, respiratorios, mentales, etc.
Es realmente un camino espantosamente difícil pero a su
vez, en su recorrido se consiguen las joyas más preciadas del
Ocultismo Inmortal, de la Sabiduría Milenaria, de la Exaltación
Divina y del Amor más desmesurado que pueda existir.
Es el éxtasis en quien esta meditando, el sentimiento
más exuberante en quien busca unirse a Dios.
Cuanto más profundo es el dolor, más elevada será la
esencia del perfume que podrá inhalar a través de sus sentidos y
mayor el acercamiento con la Unidad Múltiple Perfecta: Dios.
Tal es el caso de nuestro V. M. Lakhsmi, quien esta
recorriendo este camino y mostrando con hechos lo enseñado
por nuestro Avatara en sus múltiples libros. Le ha tocado
encarnar el dolor y soportarlo hasta el final para redención del

Pueblo Gnóstico del mundo.
EL tercer camino que recorre el Adepto es el del Espíritu
Santo, este es un intermedio entre los dos primeros. La persona
en ello desarrolla el lenguaje de la Vida, de las Energías
Creadoras, del Nacimiento Espiritual.
Posee normalmente un lenguaje culto y acorde a los
tiempos en que vive y lógicamente, sufre mucho menos de aquel
que recorre el camino del Cristo.
Sin embargo, es importante aclarar que cuando
cualquiera de estos Adeptos entra al Absoluto, después de
ganarse ese derecho y luego de un largo descanso, está obligado
a regresar al mundo tridimensional para realizar nuevamente el
mismo recorrido hecho anteriormente, pero utilizando otro
camino que todavía desconoce, hasta recorrer los tres caminos
antes mencionados y ganar el Absoluto tres veces.
Al concluir esta Magna Obra, el Adepto estará preparado
para ser un habitante de ese nivel de Conciencia Cósmica, hasta
que decida comenzar de nuevo otra experiencia de tipo superior
en diferentes planos de Conciencia Universal, donde el nivel del
Absoluto en el cual se encuentra en ese momento, representa
únicamente el comienzo de una nueva e inmensa montaña a
escalar, con las más incomprensibles dificultades y aspectos de
Sabiduría y de Misterios que no caben en nuestra imaginación
humana.
CAPITULO IV
CARACTERISTICAS
DE LOS SIETE CUERPOS DEL HOMBRE
Como estudiantes de la doctrina Gnóstica sabemos que

el hombre es séptuples en su constitución y reconocemos que
el cuerpo de carne y hueso, el cual logramos ver y palpar a
través de nuestros sentidos físicos, no lo es todo.
La expresión de nuestro Ser es representada por un

conjunto de varios cuerpos con una función precisa, establecida
para nuestro desarrollo armónico de tipo Espiritual, orgánico y
psíquico.
El primero de ellos es el Físico, hecho de carne y
huesos, el cual tiene una facultad tan necesaria e indispensable
para nosotros, que resulta esencial aprender a desarrollarla para
aprovecharla, utilizándola precisamente para nuestra Obra;
queremos referirnos a La Observación.
Cuando transitamos por las calles o nos trasladamos de
un lugar a otro, debemos procurar que nuestro vehículo físico
observe todas las cosas que nos rodean, lo que Dios o la
Naturaleza quiso crear para ser utilizado por nosotros en el
desarrollo de La Observación.
Cuando visitamos algún lugar sin observar, ni detallar lo
que existe a nuestro alrededor, en forma distraída, con la mente
muy lejos de nuestro cuerpo, estamos obstaculizando el
desarrollo de La Observación.
Esta maravillosa característica permite formar en
nuestra materia una especial sensibilidad, funcionando a su vez
como catalizador para el mejoramiento de los sentidos físicos.
Obviamente, teniendo unos sentidos físicos bien
desarrollados podremos percibir con más intensidad la
existencia real de las criaturas que habitan nuestro mundo
tridimensional.
Para ejercer la practica de La Observación precisamos
de un vehículo físico sano, sin desequilibrios o enfermedades
que distraigan en otras funciones la energía necesaria para
cumplir con su finalidad.
Para mejorar la salud necesitamos estar en contacto con

la Naturaleza y descubrir en ella los secretos que guarda y
utiliza para mantener en un perfecto equilibrio los procesos
biológicos de todas las criaturas vivientes.
El Segundo Cuerpo, que compone nuestra estructura
interna, es el “Vital”. Tiene una función casi meramente
biológica, como es darle al vehículo físico la energía suficiente
para que éste funcione correctamente.
No posee características específicas sobre el tema que
estamos tratando, por lo tanto nos limitaremos a decir que de la
fortaleza de éste organismo depende también el estado de salud
de la persona; cuando el vehículo físico se enferma es porque
anteriormente el Cuerpo Vital ha estado en desequilibrio
energético.
El Tercer Cuerpo es el “Astral”, posee la facultad
denominada: "Auto- Observación ". Mucho se ha hablado de
observación y auto observación; estas dos palabras han traído
gran confusión a la mente de algunos estudiantes gnósticos.
La Observación pertenece a la materia, al cuerpo físico,
es lo que hacemos con nuestros sentidos físicos, Observar y
detectar todo cuanto nos rodea. Auto Observación es un poco
más profunda, significa observar y hacer al mismo tiempo el
correspondiente discernimiento de instante en instante.
Hay que Observar las cosas y preguntarse continuamente
si lo que estamos viendo pertenece al mundo de la materia o al
de la Quinta Dimensión.
Indudablemente el Cuerpo Astral tiene una importancia
muy elevada para nosotros los gnósticos que, tal vez, no hemos
valorado suficientemente en estos últimos tiempos.
Años atrás, en nuestra institución se hablaba mucho de

los Viajes Astrales, del Cuerpo Astral, de las prácticas para
desarrollar y formar el Cuerpo Astral. Últimamente esto se ha
ido dejando, debido a que anteriormente, por hablar tanto de
Viajes Astrales, los neófitos se concentraban solamente en este
tipo de enseñanzas descuidando otras de igual o mayor
importancia, relacionadas con la Muerte Mística y el
Nacimiento Segundo.
El Cuarto Cuerpo, el Mental, posee como característica
especifica: "La Inspiración"; facultad divina, don de los
Dioses, que permite al estudiantado gnóstico y a todos aquellos
individuos que lo logren, acercarse a su Dios Interno, a su Real
Ser.
La Mente no es negativa, sino lo que hay dentro de ella,
los "yoes" que nosotros mismos hemos creado a través de los
siglos y que, lamentablemente, hoy nos tienen prisioneros en
este mundo.
La Mente es una extensión de la Mente Universal, la
misma que utiliza Dios, El Padre Cósmico Común, para hacer
sus creaciones.
Muchos confunden a la mente con el cerebro, pero en
verdad este es el órgano que usa la mente para traducir sus
pensamientos en impulsos eléctricos, los cuales son transmitidos
luego a la laringe para que esta las emita como frases
coordinadas y comprensibles por medio de la voz.
El mundo de la Mente es el mundo de NETZACH, lo
más exaltado y extraordinario que existe.
Cuando alguien se hace consciente en el mundo de la
Mente Universal, aunque sea por pocos instantes, comprueba
que, en verdad, somos nada.
El Maestro Samael dice en sus libros: "Mi Ser lo es

todo, es el gran Avatara, el Logos Samael, pero mi parte
humana vale menos que un mísero gusano del lodo de la
tierra".
El desarrollo de la facultad de la Inspiración, que se vive
en una forma muy intensa en el mundo de la Mente Universal,
es esencial en cada uno de nosotros, si anhelamos realmente
conquistar a nuestro Ser.
El V.M. Samael tuvo como misión esencial entregarnos
la “Quinta Verdad”, que consiste en la clave del “Nacimiento
Segundo”, el Arcano AZF, la Alquimia, unida al Despertar de
la Conciencia.
La doctrina síntesis que el V.M. Lakhsmi vino a enseñar
es La Inspiración, con todos sus detalles maravillosos como los
estados del Sum Yata y Sum Varú, que son niveles u octavas
superiores de la Inspiración, relacionadas con ciertas
particularidades del éxtasis que se logran por medio de
prácticas sencillas y de meditaciones, dirigidas por la
particularidad ígnea de ese Ser.
Sin embargo, después de hablar de todo esto,
reconocemos que surge en nosotros como interrogante natural la
siguiente pregunta: ¿Qué debemos hacer para Inspirarnos?
Cuando nos alejemos de las ciudades, cuando hagamos
un paseo a un bosque, a un río, a la playa, no vayamos
únicamente a una actividad de recreo o de esparcimiento;
alejémonos aunque sea por unos momentos, en la profundidad
del bosque o del lugar que estamos visitando, para encontrar
nuestra propia soledad interna y poder integrarnos con ella y con
lo que existe en ese paraje entrañable de belleza particular.
Tratemos de observar, con detenimiento y sensibilidad

especial, los árboles que lo componen, la presencia de las
Criaturas Elementales que continuamente están produciendo con
sus cuerpos el oxígeno que necesitamos; las plantas que han
florecido, no porque necesiten de las flores, sino, porque a
través de la belleza que expresan, podamos observar la ternura
de la Madre Naturaleza plasmada en ellas.
Cuando estemos sumergidos en la intimidad del bosque,
no miremos sus árboles y plantas únicamente como vegetales y
nada más; cuando observemos a las aves que cantan y silban
para alegrar nuestro Espíritu y nuestro corazón, tratemos de
imaginar la presencia de Dios en ellas como el aspecto de la
Vida, Quien se sacrifica en forma constante en ese Reino de
inconmensurable perfección.
Cuando miremos la quebrada, el riachuelo o la fuente,
también démosle la importancia que tiene y a través de las
reflexiones que hagamos, en presencia de la Bendita Madre
Naturaleza, vayamos sintiendo esa alegría que envuelve nuestro
corazón y que nos hace intuir la presencia del Ser en nuestro
interior.
La Inspiración es la clave para acercarnos a Dios, a
nuestro Ser, a nuestro Cristo Íntimo.
Indudablemente el que sienta alegría en su parte interna,
en su corazón, está cerca del Ser y quien está cerca del Ser debe
aprovechar esos instantes para conversar con Él, para hablar con
Dios.
En los momentos de Inspiración la mente no existe,
queda neutralizada, en blanco; estamos conectados directamente
con nuestro Intimo. En esos instantes, toda petición hecha por
nosotros será recibida por nuestro Ser, quien, al estar tan cerca,
podrá cobijarnos con su manto protector, su fuerza, su poder,

su gracia y entregamos la voluntad necesaria para seguir
luchando en nuestra meta de recorrer el mundo del Espíritu.
Estos cuatro cuerpos, descritos hasta ahora, conforman la
parte más densa de nuestra estructura física e interior y se
relacionan con los mundos o niveles de la mente donde el Ego
reside y se mueve con las fuerzas nefastas de la imperfección y
del dolor.
Es necesario aprender a limpiarlos, a lavarlos y
perfumarlos como verdaderas joyas y permitir que Dios pueda
asistirnos en esos vehículos, aunque sea por pocos momentos,
para fortificarnos y llenarnos de paz y de optimismo.
Otra manera, tal vez más fácil, de sentir la inspiración
consiste en sentarnos en un cómodo sillón en nuestra recámara,
en nuestro hogar o en cualquier lugar donde nos encontremos y
en posición de relajación y quietud total, nos dispongamos a
escuchar música agradable a nuestros sentidos, alguna pieza
clásica, de Beethoven, Mozart, Shubert, etc.
El egregor que se va formando, al realizar esta práctica,
nos permite sentir la alegría de la Inspiración, preparando el
Cuerpo Mental y haciéndolo apto para integrarse con la Mente
Universal y para sentir las vibraciones de los Seres de
Perfección que habitan en ese mundo, los cuales son dueños de
poderes flamígeros de inmenso alcance.
Habiendo analizado en una forma más o menos somera,
estos cuatro Cuerpos, pasemos ahora al quinto, denominado
Causal, el cuerpo donde se desenvuelve el Alma Humana.
El Mundo Causal es el mundo de las causas, el Mundo
Electrónico, el Mundo de la Intuición.
Este hace las funciones de intermediario entre los

cuerpos del pecado y la pureza del Espíritu.
Es un lugar de paz indescriptible, donde tienen
existencia real todos los Venerables Maestros que están
cumpliendo alguna misión específica para ayudar a la
humanidad a su rescate y regeneración espiritual.
Es un mundo de suprema perfección donde todo parece
converger en un solo punto: La Sabiduría, donde, inmersos en el
éxtasis, se puede comprobar que toda respuesta a nuestras
interrogantes aflora de nuestro propio interior, con el auxilio de
la divina intuición.
Este mundo es el depositario de todas las causas que

producen el Karma Mundial, Familiar y Personal; donde se
encuentra el origen de nuestros males y desequilibrios; donde,
inevitablemente, tendremos que acudir para soltar el nudo
producido por algún obstáculo en el hilo de nuestra existencia.
Es el mundo de las matemáticas, de la Kabala Sagrada,
donde todo se resuelve sobre la base de ecuaciones numéricas,
cuya sumatoria compone el flujo de la existencia y el misterio
de la Vida.
Nuestro Cuerpo Causal posee como característica o
facultad: "La Devoción". Existe, por lo tanto, en cada ser
humano. Lo que necesitamos es simplemente permitir que ella
se desarrolle.
La Devoción es la que todos necesitamos para aprender a
amar a los Dioses, a los Maestros que vienen al mundo de la
materia y se sacrifican para entregarnos el mensaje necesario
para nuestra emancipación.
La Devoción es la facultad que debemos desarrollar para

poder comprender, cuando nos encontremos frente al Ara Sacra
de los Santuarios Gnósticos y miremos el rostro del Cristo
crucificado, el esfuerzo y el terrible sacrificio que hace, como
Fuerza Universal, para trasladarse a un mundo tan denso como
el nuestro, con la finalidad de rescatarnos y redimimos.
Existe también el Cuerpo Búddhico, el cuerpo de la
Conciencia Divina. Este posee como característica: "La
Contemplación", otra de las facultades innatas en cada ser
humano.
Nosotros sabemos que nuestro Intimo, Atman, posee
dos Almas, una Femenina y otra Masculina. El Alma Masculina
es llamada Manas y la Femenina Buddhi.
El hecho de que nuestro Ser posee dos Almas, nos
confirma que es Andrógino en su aspecto interno y que los polos
activos y pasivos, en Él, están perfectamente equilibrados.
El V.M. Samael dice que mientras el Alma Femenina
juega y se divierte en el mundo Buddhico, el mundo de la
Conciencia Divina, el Alma Masculina, el Alma Guerrera que
vive en el Mundo Causal, lucha incansablemente para dominar
sus cuerpos inferiores y para tratar de hacer la Obra.
Lógicamente todo esto es simbólico.
En una oportunidad el V. M. Lakhsmi quiso, con una de
sus maravillosas prácticas, que comprobáramos la existencia del
mundo de la Conciencia Divina en carne propia.
Cuando estuvimos en ese lugar, pudimos ver y palpar
con nuestros propios principios anímicos que el Alma Femenina
se desenvuelve en el mundo de la Conciencia Divina en una
forma asombrosa.
Ella es una guerrera, se mueve y lucha incansablemente

para proyectarle a su "eterno enamorado", que es el Alma
Humana, la energía que necesita, la fuerza de voluntad que
solicita, la Inspiración que busca, las facultades del Espíritu que
amerita para tener el ímpetu, el coraje y el valor para no
sucumbir en las terribles pruebas a la que está sometido en
forma continua.
Si no fuera por esa labor del Alma Femenina en el
mundo Buddhico, indudablemente, el Alma Masculina no
tendría jamás el poder o la fuerza de voluntad suficientes para
triunfar en su continuo esfuerzo de unirse a su Ser.
La Contemplación nos permite comprender la
grandeza de Dios cuando estamos frente a un Maestro o a un
libro escrito por ellos con fuego Espiritual, que se expresa en el
verbo o en la pluma de ese Ser, que deposita sus enseñanzas
misteriosas y extraordinarias en un libro para ser estudiado y
puesto en práctica por la humanidad.
Finalmente, poseemos el Cuerpo Atmico, el cual
pertenece a nuestro Intimo que representa a Dios en nosotros.
Este cuerpo posee como facultad la: "Adoración" que
también necesitamos desarrollar para aprender a amar a nuestro
Ser cuando estemos sumidos en profunda meditación, cuando
estemos concentrados y bien ubicados en nuestro interior.
Solamente amándolo, haciendo su voluntad, cumpliendo
sus leyes y respetando los mensajes que entrega a través de
nuestro corazón, podremos alcanzar en esta vida o en cualquier
otra, lo que llamamos la “Autorrealización íntima del Ser",
anhelada por todos para darle un justo sentido a nuestro paso
por la Tierra y por la vida.
Decíamos anteriormente que nuestra Alma Humana

reside en el mundo Causal. Desde ese lugar envía al mundo
tridimensional su vanguardia, “La Esencia”, con la finalidad de
ejecutar sus ordenes y practicar las estrategias necesarias para
lograr vencer las continuas batallas que se libran contra el Ego
animal que, lamentablemente, reina en el mundo de la materia
en estos tiempos de barbarie y degradación humana.
Algunas batallas se ganan, otras se pierden y después de
muchos años de lucha sin descanso, se culmina la “Guerra
Santa” con la victoria sobre “Set y sus demonios” y con el
triunfo de la Luz sobre las tinieblas, del Cristo sobre la maldad
del demonio.
Otras veces las fuerzas del mal ganan la guerra y el
resultado final es el divorcio de la persona con el Real Ser,
acompañada de la involución en las infra dimensiones de los
mundos sumergidos para obtener la purificación por medio de la
“Muerte Segunda”.
Es una guerra fratricida, semejante a las que se dieron
en los peores tiempos del oscurantismo medieval en contra de
los “infieles musulmanes”, que produjeron lagrimas y dolor,
muerte y desolación, triunfo del fanatismo religioso y
humillación profunda de los valores éticos y morales del aspecto
humano.
Es importante saber que el cuerpo vital para penetrar al
físico y surtirlo de fuerza y energía necesita que éste se
encuentre en posición de descanso profundo, mejor conocido
como sueño.
De no ser así, sería mas que imposible que este vehículo
energético pueda realizar el trabajo de reposición de las fuerzas
perdidas.
Lo mismo ocurre con el caso del Alma Humana, la cual

necesita, para penetrar hasta el nivel físico, que nuestro
organismo general se encuentre en estado de laxitud mental y
psíquica, de armonía y contemplación, en una posición de
reflexión y meditación, para que los portales de los niveles
internos de conciencia, puedan abrirse, aunque sea por unos
instantes.
Al Rayo le bastan unas fracciones de segundo para
preñar a las nubes y lograr el milagro de la lluvia. La ráfaga de
viento pasa demasiado rápido a nuestro alrededor y cuando
giramos para tratar de observarla ya se encuentra muy lejos,
acariciando otros cuerpos a kilómetros de distancia.
Lo mismo le ocurre al Alma Humana que representa el
mundo electrónico de inigualable velocidad, que solo necesita
instantes para impregnar con su poder y su luz las cavernas más
recónditas de nuestro Cosmos Interior y sacar, aunque sea solo
por unos momentos, a las hordas tenebrosas que en ella habitan
y poder vitalizar nuestros aspectos espirituales con el “maná del
desierto”, con el alimento del Espíritu, sin el cual no habría ni la
remota posibilidad de supervivencia de nuestra parte
Concientiva.
Es necesario recurrir a la practica de la meditación y de
la reflexión profunda para poder aprovechar las fuerzas y la
ayuda de nuestra propia Alma Humana.
Meditar significa compensar. Es necesario compensar

los aspectos Espirituales en nosotros para equilibrarlos con los
físicos que reciben diariamente los alimentos requeridos para su
supervivencia.
Por medio de la meditación o reflexión profunda,

logramos el equilibrio anímico interno entre el Espíritu y la
materia para que la gran Obra del Padre pueda tener éxito en
nuestro mundo personal y podamos ayudar a nuestro Ser a
realizar las creaciones necesarias para que su Reino tenga un
aspecto digno y apropiado para albergar a las múltiples criaturas
existentes en nuestra naturaleza interior.
PRACTICA
Coloque una música clásica agradable a sus sentidos,

perfume el lugar con esencias suaves de rosas, jazmines,
heliotropos, etc. ; prepare el ambiente con algún sahumerio o
con una varita de incienso Hindú.
Siéntese en un cómodo sillón y relaje su cuerpo,
utilizando para ello la imaginación con la cual observará cada
una de las partes que lo componen, comenzando de los pies y
terminando en la cabeza.
Pídale a su Madre Divina y a su Padre Interno que
permitan plasmar las condiciones favorables para tener éxito en
la practica.
Neutralice los pensamientos de la mente por medio de
la vocalización del mantram “WU” de la siguiente manera:
W.u.u.u.u.u.u.u.u.u.u, con voz suave y apacible por un tiempo
de cinco minutos aproximadamente, luego continúe la
pronunciación del mantram en forma mental por otro tiempo
igual.
Trate de producir con la relajación un leve sueño,

indispensable para la correcta realización de la práctica.
Imagine ahora al Alma Humana semejante a una bola de
fuego, parecida a un pequeño sol que desde el espacio viene
hacia nosotros, penetrando los diferentes planos de conciencia
cósmica hasta nuestra glándula pineal.
Luego irrumpe en nuestro Micro Universo para
iluminar cada rincón de nuestro interior, cargándolo de energía,
de fuerza, de impulso volitivo, de coraje para enfrentarnos a las
debilidades del ego; de entusiasmo para seguir adelante en el
cambio necesario que debemos hacer en nuestra regeneración;
de voluntad para asistir a los rituales y demás practicas que se
realizan en los Lumisiales Gnósticos; de vitalidad para fortificar
nuestros órganos que deben trabajar en perfecto equilibrio y al
unísono con nuestro Espíritu.
Todo esto para lograr el milagro de la creación de los
estados idóneos que permitan a nuestro Ser, lo único
verdaderamente Divino en nosotros, habitar en Él.
Permanezca por unos minutos en esa posición y estado,
alimentándose de las virtudes del Alma y luego de las gracias
por haber recibido ese estimulo tan necesario y pida que esa Luz
sea manejada y protegida por la bendita Madre Devi Kundalini,
para que siga alumbrando nuestro camino eternamente.
CAPITULO V
LOS SISTEMAS Y LA FALSA PERSONALIDAD
Estamos asomándonos a los portales del tercer milenio y

desde hace mucho tiempo se ha venido hablando del final del
mundo y de sus catastróficas consecuencias.
Necesitamos tomar conciencia de los momentos que
estamos viviendo. El arcano 15 rige la séptima sub raza de
nuestra Raza Aria, simbolizando al Lucifer interior y a nuestras

fuerzas negativas que le dan al Divino Daimón esa fealdad
conocida por todos.
Por eso es tan difícil lograr la regeneración y la
purificación interna que nos permite la encarnación de nuestro
Intimo y finalmente la auto realización en esta época.
Todos aspiramos a ser salvos, todos necesitamos ese
segundo éxodo del cual el V. Maestro Samael nos habla.
Afortunadamente fuimos rescatados ya en el primer
éxodo, éste sucedió cuando algún misionero nos entregó un
folleto donde nos hablaba de Gnosis, donde a través de un
mensaje en la radio, por la prensa, por medio de volantes, nos
invitaron a participar de alguna conferencia Gnóstica para que
en ella pudiéramos descubrir que existía una doctrina
maravillosa, capaz de sacarnos del horrible mundo en que
habitábamos.
Gracias al esfuerzo de ese misionero o persona que nos
entregó el mensaje, logramos este primer éxodo y pudimos
conseguir las claves precisas para salirnos de lo mundano, de lo
común que en ocasiones nos hacía reflexionar y preguntarnos:
¿“Será esta la vida real o habrá algo más?” ¡No puede ser que
sea tan sencilla y vacía!
Afortunadamente, gracias al V.M. Samael y a su
hermoso mensaje, pudimos descubrir la Gnosis en nuestra
existencia actual y tener el altísimo honor de percibir, a través
del corazón y de nuestros sentidos internos, la presencia de los
Venerables Maestros que nos cobijan con su Aura Inmaculada y
nos permiten sentirnos en Paz con nuestra conciencia.
Necesitamos conquistar la Paz en nuestro corazón para
adelantar en ese camino extraordinario de la Iniciación.
Todos quisiéramos entrar al segundo éxodo, ya que

dimos el paso decisivo conquistando el primero. Ese segundo
éxodo estriba en ser llevados a una Isla del Océano Pacifico,
como lo enseña el V.M. Samael Aun Weor.
En ese lugar, los Venerables Maestros de la Logia
Blanca, han venido preparando el ambiente desde hace siglos
para que las personas con la dádiva de ser rescatadas puedan
continuar su labor, su trabajo de mejoramiento espiritual,
logrando algún día auto realizarse y, a lo mejor, liberarse.
El Maestro Lakhsmi en Febrero de 1996 nos enseñaba
que el día 4 de ese mismo mes se abrirían las puertas para poder
entrar a la nueva era de Acuario.
El 4 de Febrero de 1962 entró la Era de Acuario para el
planeta, que se encontraba preparado para ese acontecimiento
cósmico. El ser humano, o por lo menos algunos de ellos,
demoraron más de treinta años para ganarse este mérito o
derecho.
Indudablemente ser miembros del circulo de ciudadanos
de la nueva Era de Acuario es un anhelo de todos y debemos
esforzarnos en conseguirlo, ya que esto representa un logro muy
importante para nuestro avance espiritual.
En aquellos días el Maestro manifestaba que solo
algunas personas habían sido aceptadas como miembros de
Acuario hasta ese momento; ciertamente muy pocas en
comparación con las multitudes que pueblan el planeta y de los
estudiantes Gnósticos presentes en el ámbito internacional,
quedando las puertas abiertas para todos aquellos intrépidos que
fueran ganando ese merecimiento con el pasar del tiempo y con
su perfeccionamiento espiritual.
La pregunta que surge como natural en este caso es:

¿Qué requisitos se exigen para ser admitidos como miembros de
Acuario?
El V. Maestro Lakhsmi, por medio de las Joyas del
Dragón Amarillo nos ha entregado las claves y nos ha
explicado cuales son las características necesarias para ser
aceptados:
1. ¡Liberarse de los sistemas!

2 ¡Desintegrar la falsa personalidad!
A simple vista estas dos reglas no parecen ser muy

difíciles, pero vamos a profundizar un poco más en el tema para
poderlo comprender con claridad.
En cuanto al primer punto, hemos podido constatar, por
medio del diálogo con diferentes miembros de la Institución,
que hay un sin numero de preocupaciones.
Existen muchos sistemas que necesitamos aprender a
dominar con equilibrio y sapiencia, con la finalidad de
liberarnos de sus efectos negativos en el momento oportuno,
como por ejemplo:
El Sistema Económico: Este sistema tiene
completamente esclavizado nuestro mundo. Nosotros, como
estudiantes Gnósticos, sabemos que debemos recorrer el
camino del hombre equilibrado. Nadie debe dejarse arrastrar
por el fanatismo o los desequilibrios emocionales.
Algunas personas creen que para liberarse de este
sistema es necesario abandonar el trabajo o todo tipo de labores
que producen rendimiento económico, afortunadamente no es

así.
Vivimos en un mundo tridimensional, somos parte de la
sociedad y en ella tenemos el sagrado deber de trabajar, para
ganarnos el dinero necesario con el sudor de la frente, para criar
a nuestros hijos y mantener a nuestra familia.
Como seres humanos debemos entender también que no
podemos dejarnos atrapar por el sistema económico. Muchos
hermanos se olvidan de la Gnosis, de los Sagrados Rituales, de
los trabajos de Liturgia y Teurgia que se hacen en los
Lumisiales Gnósticos, absorbidos por completo por el trabajo y
su horario, por las horas extras, por la vida económica. Esto es
grave en el estudiante Gnóstico y en la humanidad.
Desligarnos del sistema económico significa trabajar o
ganarse la vida con equilibrio y sabiduría.
El dinero no es malo, ni es bueno. Todo depende de
como se use. Con el dinero se puede hacer más dinero, dice el
refrán popular, pero este elemento podría también inducirnos a
realizar malos negocios que pueden llevarnos a la quiebra y en
el caso específico que estamos tratando, a perder nuestros
valores éticos y morales del Alma.
La persona que viene al mundo completamente
desprovista de este medio material, consigue múltiples
dificultades para su supervivencia e integración en el círculo de
la sociedad.
El individuo con mucho dinero vive normalmente
enredado en sus grandes negocios, se siente muy poderoso
debido a que en los actuales tiempos en nuestra humanidad
involutiva, se consigue casi todo utilizando este medio.
Se aleja inclusive de Dios quien rige nuestro destino y

olvida que, tarde o temprano, su vida se acabará quedando su
cuerpo en la tumba, reducido a un cúmulo de restos orgánicos
sin vida, sin energía, sin poder ni privilegio alguno,
transformado en lo común, en lo de todo el mundo,
independientemente de su posición social.
Para las personas extremadamente pobres es tan difícil
disponer del tiempo necesario y de la actitud propicia para
dedicarse al estudio del “Conocimiento Gnóstico”, como lo es
para el individuo extremadamente rico.
Todo, en definitiva, converge a lo mismo, el punto
central, el equilibrio, capaz de conducirnos a la meta que puede
cambiar nuestra condición de “humanoides” para llevarnos al
estado privilegiado de hombres verdaderos.
Conozco el ejemplo de un gran amigo, quien maneja una
empresa con mucho personal, a quien le toca viajar
continuamente por diferentes países de América para procurar el
progreso económico de su sociedad.
Cuando debe ir, por ejemplo, a Colombia a una reunión
de trabajo, antes de salir de su país hace el contacto con el
personal del Lumisial de Bogotá. Luego, cuando llega y
termina su trabajo, se dirige al Santuario Gnóstico de esa
localidad, con la finalidad de asistir y cumplir también con el
deber esotérico que le corresponda.
Este hermano nos está demostrando con su actuación la
posibilidad de lograr en la vida el equilibrio entre lo material y
lo espiritual, lo cual nos permite hacernos Maestros de los
asuntos de la vida y Maestros de los quehaceres del Espíritu.
Las Modas constituyen otro sistema. Es indudable que
no debemos dejarnos enredar por éstas, ni permitir a nuestra
personalidad salirse con la suya, o sea, querer vestirse como lo

imponen las modas.
En una oportunidad una famosa actriz de cine aseguraba
que las modas son impuestas por homosexuales, quienes diseñan
trajes y líneas de acuerdo a sus caprichos y mentes desviadas
imponiendo en oportunidades ropas y calzados horribles para
las damas porque en el subconsciente sienten celos por ellas por
ser su competencia con relación a los hombres.
Nosotros somos lo que somos y debemos ser libres. No
podemos depender de nadie en cuanto a nuestra forma de vestir.
Sin embargo, tenemos el deber, como estudiantes Gnósticos, de
ir bien presentados de acuerdo a las costumbres de la época.
Algunas personas se van al otro extremo pensando que
deben desligarse de este sistema vistiéndose como sea, saliendo
en la mañana con un pantalón y una camisa arrugada, que se
han puesto ya varias veces seguidas y en oportunidades huelen
muy mal.
Esto no es lo que buscamos, ni demuestra desligarse de
los sistemas, significa caer en el fanatismo. ¡Recordemos: el
equilibrio es nuestra meta más preciada en todas las cosas!
El Sistema Educacional. Alguien preguntaba: ¿Mi hijo
quiere estudiar en el Liceo pero yo, como madre, temo que ese
ambiente lo dañe, será mejor que le prohíba que estudie?
No podemos llegar al extremo, debemos entender que
en las Escuelas, Instituciones y Colegios públicos y privados
existe un sin numero de peligros, pero tenemos el deber de
educar a nuestros hijos y, por lo tanto, no podemos impedir que
estudien.
Debemos liberarnos del Sistema Educativo, pero no en
una forma fanática. En los liceos ocurre una gran cantidad de
faltas, a veces fatales para la vida del estudiante, como caer en

el vicio de las drogas, del homosexualismo, en la perversión
sexual, con las múltiples consecuencias y enfermedades hasta
mortales que pueden acarrear, pero esto no quiere decir que no
debamos enviar a nuestros hijos a la escuela, dejándolos que se
críen como ignorantes.
Si nuestros hijos no estudian y llevan el germen de la
inmoralidad por dentro, porque lo han heredado de nosotros
mismos o de nuestros ancestros, de todas maneras van a incurrir
en el error. No podemos mantenerlos atados para siempre en una
habitación o criarlos en una “caja de cristal” para evitar su
contaminación.
Tarde o temprano caen en el error, si no tienen principios
bien definidos, y van a reprocharnos nuestro incumplimiento
como padres por no haberles dado una educación acorde con su
edad.
El.V:M. Samael dice: “Quien no le da la instrucción
necesaria a sus hijos se gana un terrible Karma”.
Simon Bolivar, el padre de la Libertad dijo: “Un ser sin estudios
es un ser incompleto”.
Los hijos son nuestra responsabilidad y tenemos el deber de
educarlos y darles la cultura necesaria para que algún día,
cuando tengan la capacidad de expresión, puedan dirigirse al
pueblo y a la sociedad para entregarles el mensaje Crístico
Gnóstico en una forma segura, culta y equilibrada.
Lo importante es darle al mismo tiempo a nuestros hijos
una educación integral en nuestro hogar, con amor, ternura y
también con la rigidez necesaria en los momentos indicados, ya
que cuando se le tolera mucho se forman irrespetuosos y
groseros. Como siempre, es fundamental aplicar la lógica y

comprender que el equilibrio es la clave para todo.
Obviamente si impedimos a nuestros hijos frecuentar la
escuela para evitar su perdición, el día en que tengan uso de
razón, cuando sean adolescentes y comprendan la tremenda falta
que les hace el estudio y analicen los múltiples complejos
desarrollados en ellos a causa de esto, empezarán a sentir
rechazo hacia sus padres y en algunos casos sentimientos
peores hacia la Gnosis.
El Sistema de la Medicina.
Conocemos algunas personas del estudiantado Gnóstico que
cuando tienen a sus hijos enfermos, con 40 grados centígrados
de fiebre, prefieren seguirles poniendo “paños tibios” o fríos en
la cabeza, porque temen darles los antibióticos, tan necesarios y
oportunos en estos casos especificos, por ser medicinas
alopáticas y dañinas al organismo.
Estamos de acuerdo, los antibióticos son nocivos en su
uso indiscriminado, pero cuando se llega a los extremos es
indispensable utilizarlos también para evitar casos graves y
hasta la muerte.
Algunas damas con quistes en sus ovarios o con
malestares graves en sus órganos genitales, prefieren morirse
antes de consultar con un médico que les dé un diagnostico
preciso para luego, primeramente por medio de la oración,
segundo de la medicina natural y tercero, si es necesario, de la
medicina alopática u oficial, hagan lo posible para curarse.
Cualquier persona puede sufrir una peritonitis aguda, el
estrangulamiento de una hernia o cualquier otro caso de grave
emergencia donde si no se opera puede desencarnar. En casos
como estos es oportuno recurrir a los métodos que dispone la
medicina oficial, pidiendo al mismo tiempo el auxilio indicado a

los V.M. de la Medicina Universal de los mundos superiores de
conciencia conocidos por todos nosotros.
Nuestra intención no es herirle la susceptibilidad a nadie
con estas afirmaciones tan crudas y reales, ni pretender saberlo
todo, pero es nuestro deber ratificar la necesidad de liberarnos
de los sistemas, entendiendo al mismo tiempo que todas las
cosas las debemos hacer aplicando la lógica y el equilibrio,
factores esenciales del “cuarto camino”.
El sistema religioso. Nuestra institución posee dentro de
su organigrama funcional un cúmulo impresionante de
informaciones pertenecientes a los Colegios de Iniciados y al
camino que lleva su mismo nombre, pero también contiene,
como una de las columnas principales de su estructura, la parte
religiosa a la cual nosotros como devotos de la senda, nos
dedicamos en nuestro diario vivir para el desarrollo íntimo de
nuestra conciencia divina.
En tal sentido, es fundamental que como estudiantes de
esta doctrina hermosa, aprendamos también la práctica del
equilibrio en este aspecto. El fanatismo religioso tiene envuelto
al mundo y sometido a muchos países a guerras fratricidas y
sanguinarias.
Nosotros debemos dar muestras de equilibrio absoluto y
“sobrepasar a todos los pueblos de la tierra en gloria, poder y
fuerza”, como lo enseña el ritual.
Conocemos personas que no asisten nunca a una iglesia
católica, evangélica o de cualquier otra organización religiosa,
ni siquiera si se casa su hermano o su mejor amigo, dizque por
no contaminarse de larvas.
También conocemos personas que serían incapaces de

entrar a un cementerio para darle santa sepultura a un ser
querido, porque temen llenarse de fluidos nocivos a su salud y a
su egregor.
Estamos de acuerdo con estos planteamientos, que son
válidos y reales, pero ¿cómo podemos llegar al extremo de no
asistir al funeral de nuestros seres queridos?
¿Cómo podemos llegar al extremo de no entrar a una
iglesia que no sea gnóstica, a compartir con nuestros más
íntimos allegados en momentos muy especiales de sus
existencias?
Es verdad, nos llenamos de larvas, pero también es
cierto que a estas las recibimos en casi todos los lugares
visitados en este plano físico. Vivimos en un mundo poblado en
un 97 por ciento por personajes de la sombra, los cuales
irradian fluidos venenoskirianos.
Es por esto necesario ser inteligentes en nuestras
actuaciones, usar las claves que enseña la gnosis cuando se
requieran para visitar estos lugares en los momentos esporádicos
en los cuales nos toque hacerlo.
Colocarse azufre en los zapatos es uno de los medios
enseñados por el Maestro, en cantidades muy pequeñas, pocos
gramos, para evitar que más bien nos perjudique en nuestra
salud.
Al regreso de la visita es importante darse un baño con
plantas y un buen sahumerio de estoraque o benjuí y lavar de
inmediato toda la ropa utilizada en esa visita
Por otro lado, es esencial pedirle al Padre Interno que se
digne trazar un círculo mágico de protección alrededor de
nuestro cuerpo para impedir su contaminación con elementos

densos y perjudiciales.
En fin, es necesario utilizar todas las estrategias posibles
para evitar caer en el fanatismo y cumplir como ciudadanos, con
ciertos compromisos inevitables que tenemos, por ser miembros
de la sociedad.
El segundo factor del cual nos habla el V.M. Lakhsmi
para que conquistemos el derecho de llegar al Exodo es el
siguiente: ¡DESINTEGRAR LA FALSA PERSONALIDAD!
Nos hemos dado cuenta de que para lograr algo es
indispensable siempre el sacrificio. Hemos entendido, al igual
que Uds., que desintegrar la falsa personalidad no es sencillo
en absoluto. Es posible, por supuesto y es nuestro deber
proponernos a realizar este trabajo hasta lograrlo.
La desintegración de la falsa personalidad es un factor
muy importante para la conquista de nuestro Ser, sin embargo
para comenzar este trabajo necesitamos antes comprender que
es la “Personalidad”.
Todos sabemos y el Maestro Samael lo confirma en
algunos de sus libros, que la personalidad de todo ser humano se
forma en los primeros siete años, robusteciéndose luego con las
diferentes experiencias hechas en el recorrido de la vida.
No hay duda, entonces, de que toda persona posee una
personalidad. La personalidad de cada ser humano difiere según
el tipo de información recibida en el transcurso de su existencia.
Si se crió en un hogar donde reinaba el amor, la ternura y
la paz, se le formará una personalidad segura y acorde con los
principios equilibrados del comportamiento humano.
Si lo hizo en una familia llena de conflictos, de discusiones y
problemas de hogar, formará una personalidad insegura y llena
de complejos, que difícilmente podrá erradicar con el paso de

los años.
Si lo hace en una familia donde el padre es un tirano que
golpea a la madre, que llega borracho y maltrata a la familia,
formará una personalidad agresiva, con temores profundos hacia
el sexo opuesto y con inestabilidad en su actuación como
persona.
La personalidad, formada hasta los siete años, se
compone de la resultante de todas las experiencias hechas en
ese tiempo y se sigue desarrollando con toda la información
recibida hasta él ultimo día de su existencia.
Cuando un niño forma una personalidad culta y educada,
a pesar de tener el ego, este difícilmente podrá manifestarse en
ella en determinadas áreas o facetas de su intrincado espectro
psicológico.
Si al niño se le ha inculcado no decir malas palabras o
vulgaridades, el "yo" relacionado con estos términos quedará
neutralizado, a pesar que siga existiendo en su psiquis.
Si se le ha enseñado respeto a la naturaleza, el “yo”
destructor difícilmente se podrá manifestar para cometer sus
fechorías.
Si le han educado a proteger los animales de la
Naturaleza, muy difícilmente el ego asesino de la cacería podrá
hacer manifestación en su vida.
Si se le ha infundido el respeto hacia todos los seres
humanos, sin distinciones de razas, colores, ideología política o
religiosa, difícilmente el ego racista o sectario se manifestará en
sus actuaciones cotidianas.
En fin, podemos decir, sin temor a equivocarnos, que la
formación de una personalidad más afín a la conciencia, resulta
para nosotros una ventaja ineludible porque nos evita

enfrentarnos con tantos egos, que mientras estamos tratando de
escalar la montaña de la Iniciación, permanecen aislados en el
mundo del sub consciente en espera de la formación de nuestro
Cristo Intimo, Quien se encargara de eliminarlos en su debido
tiempo.
Sin embargo, la sociedad y el medio donde vivimos nos
enseñan conceptos errados productos del consumismo, la moda,
el facilismo, el materialismo, el libertinaje, etc.
En vista de que casi toda la información recibida es el
resultado de los conceptos de aquellos seres humanos que
dirigen la sociedad o el mundo, los cuales distan mucho de ser la
verdad, resulta falsa para la meta y el camino que debe seguir
nuestra conciencia.
Por esta razón se forma la falsa personalidad, porque la
información que recibe también es falsa para nuestra conciencia.
Esta personalidad podrá ser aceptable para nuestra forma de
vida, para nuestra adaptación dentro del seno de la sociedad en
la cual vivimos, nos desarrollamos y tenemos a nuestro Ser, pero
no posee las características apropiadas para representar las
funciones propias de nuestro Ser, con un comportamiento
acorde a su nivel de Realidad Universal.
A causa de esto existen Iniciados con grandes valores
anímicos, pero que no pueden manifestarlos a la humanidad por
carecer de una personalidad educada y culta en el sentido
espiritual de la palabra, que sirva de vehículo de expresión de su
Ser.
Normalmente, a este tipo de Iniciados, la gente no les
cree porque no demuestran con sus actos el comportamiento que
se supone debería tener un ser mas evolucionado.
Existe también una Personalidad Superior, Divina, la que

necesita el Ser para su expresión como tal, ante el mundo de la
materia.
La falsa personalidad es el vehículo utilizado por el ego
para su manifestación. Raras veces el Ser se manifiesta a través
de ella porque posee un nivel de vibración diferente y poco afín
con la misma.
En definitiva debemos decir que es necesario desintegrar
la falsa personalidad para permitir el nacimiento de una
personalidad de tipo superior, idónea para ser utilizada por el
Ser ya que en su manifestación como Maestro y en algunas
oportunidades se ve obligado a expresar sus enseñanzas a través
de la falsa personalidad, cuando las condiciones así lo exigen.
Si una persona quiere saber si ha eliminado la falsa
personalidad debe hacer un profundo análisis concientivo, si
observa con claridad inequívoca que dentro de sí no existe ni la
sombra del “Amor Propio”, podrá comprender que la ha
desintegrado, pero si todavía siente algún tipo de orgullo o yo
psicológico asociado con este aspecto, aunque sea ínfimo, debe
continuar su trabajo de mejoramiento espiritual.
“La personalidad es del tiempo y muere con el tiempo”,
dice el V. Maestro Samael, pero esto es valido para los seres que
no están interesados en un trabajo de regeneración.
Ellos dejan a la misma Madre Naturaleza el trabajo de la
desintegración de la falsa personalidad; Ella se encarga de
hacerlo con los años o los siglos, reciclando la energía que la
compone para realizar nuevas creaciones.
Más, quien anhela una superación de tipo Espiritual;
quien desea con fervor que su Ser pueda realizar su Obra
correspondiente en el mundo tridimensional; quien ama
entrañablemente su Parte Interna y reconoce su valor real, hará

todos los esfuerzos necesarios para lograr la desintegración de la
Falsa Personalidad en el transcurso de la actual existencia, con
la finalidad de dejar plasmado en su conciencia la experiencia
adquirida al realizar un trabajo superior de esta naturaleza.
Para la desintegración de la Falsa Personalidad
consideramos necesarios los siguientes requisitos:
1. - La auto observación diaria. Es uno de los factores
principales para la desintegración de la Falsa Personalidad.
Muchas personas se preguntan ¿Qué es auto observación? ¿Qué
diferencia hay entre ella y la observación?
Hemos podido entender que la observación es un
sentido específico de la parte física humana. Es la facultad que
nos permite observar todo cuanto nos rodea, en el lugar donde
estamos.
Cuando se habla de auto observación debemos
profundizar un poco mas, necesitamos hacer el discernimiento,
esto significa que mientras estamos observando lo que está a
nuestro alrededor debemos preguntarnos al mismo tiempo:
¿Estaremos en este momento en la tercera o en la quinta
dimensión? ¿Estaremos en el mundo físico o en los mundos
internos?
Estas preguntas tan sencillas, hechas con conciencia,
permiten hacer la diferencia entre la observación y la auto
observación.
Si anhelamos la conquista de nuestro Ser Interno,
indiscutiblemente necesitamos someternos a esta disciplina de
instante en instane, tan esencial para nuestro perfeccionamiento.
2- Darle la razón a quien la pida.
Normalmente cuando nos encontramos en un Lumisial

Gnóstico, compenetrados con las Fuerzas Divinas de nuestro
Ser, somos capaces de perdonar a cualquier persona y de
comprender muchos eventos y situaciones del diario vivir, pero
cuando estamos en la calle, frente a un acontecimiento de la
vida, cuando alguien nos insulta o nos reprocha, percibimos en
nuestro interior un malestar, sentimos la necesidad de exigirle la
razón a ese individuo que nos está molestando, cayendo en el
peor error.
Necesitamos darle la razón a quien la pida, comprender
que somos nadie para estar exigiendo la razón. Es necesario
aprender esa pequeña clave que, como siempre, es tan sencilla
pero esencial en la constante búsqueda de nuestra regeneración.
3. -Lograr La Paz.
Una persona sin paz, difícilmente puede ponerse a
reflexionar sobre la culpabilidad de sus propias acciones en una
forma tranquila y sincera.
Es muy difícil que una persona con una vida estresada
por las actividades del diario vivir, logre algún día sentarse
serenamente a reflexionar sobre los tantos errores cometidos o
que está y seguramente seguirá cometiendo, si no desintegra el
ego.
Es necesario eliminar el estrés de nuestra vida, para eso
es esencial que nos desliguemos de los sistemas en una forma
equilibrada, para no dejarnos absorber por ellos totalmente.
Nos estresamos porque queremos lograr más de lo que
podemos, esto en el sentido físico de la palabra y no nos
esforzamos o estresamos de la misma manera, para la conquista
de nuestro Ser Interno, para la búsqueda de la Paz, tan
fundamental para nuestras reflexiones y para entender nuestra
forma equivocada de actuar, producida por nuestra falsa

personalidad.
El V. Maestro Lakhsmi nos entregó una hermosa
práctica muy útil para alcanzar la paz: Debemos conseguir un
envase de cristal azul en el cual podamos colocar una esfera
transparente del mismo material. En las mañanas, cuando sale el
Sol a bañar la Tierra con sus rayos llenos de energía y de vida,
la dejamos en un espacio abierto hasta el medio día.
Luego se envuelve la esfera en papel celofán, se coloca
de nuevo en el envase y se guarda en un lugar seguro,
preferiblemente en nuestro altar personal.
En la noche, cuando nos disponemos a entregarnos al
sueño, tomamos esa esfera de cristal cargada de energía, le
quitamos el papel celofán y la ponemos en nuestra mano
derecha por unos minutos con la intención de absorber, a través
del vórtice de la misma, la Paz del Logos Solar que se ha
plasmado en ella, pasándola después a la mano izquierda, para
que se repita el mismo fenomeno.
Indudablemente, la energía depositada en la esfera
circulará a cada uno de los chacras y vórtices, logrando en
nuestro organismo el equilibrio celular y biológico
permitiéndonos, entre otras cosas, conseguir la Paz.
4. ¡Convencerse que somos nada!
Analizando profundamente el tema de la desintegración

de la Falsa Personalidad, llegamos a la conclusión de que es
necesario encarnar en nosotros el convencimiento, no solo en el
ámbito intelectual sino a nivel concientivo, que "somos nada".
Si nosotros, como simples humanos, como un pequeño

elemento presente en el Planeta Tierra, nos comparamos con las
multitudes que componen la humanidad de este planeta, nos
damos cuenta que somos muy pequeños.
Si nos comparamos con la grandeza o con el tamaño de
nuestro Planeta Tierra, con sus mares hermosos, sus bosques
encantadores, con el aire extraordinario que mueve las nubes por
todas partes o con el poderío de la luz solar infundiendo la vida
a todo cuanto se mueve, nos damos cuenta que, en realidad,
somos nada.
Si vamos un poco más allá y observamos el Sistema
Solar con todas sus creaciones, sus planetas, satélites y lunas,
con sus cometas y meteoritos, con sus nubes de polvo cósmico y
su impenetrable abismo de profundidad y asombro, nos damos
cuenta que somos menos de nada.
Pero, ¿qué pensaríamos si nos comparamos con la
grandeza de nuestra Galaxia, compuesta como dicen algunos
astrónomos, por 18 millones de Soles, cada uno con su propio
Sistema Solar, su propia creación, sus propios planetas en los
cuales, posiblemente, existen algunas humanidades
desenvolviéndose y desarrollándose?.
¿Qué somos nosotros en comparación de esa Galaxia y
qué somos en comparación con el Universo entero? Pues, en
verdad, desaparecemos y sin embargo, cuando alguien nos
reclama nos alteramos, porque en el fondo no hemos
comprendido que “somos nada”.
Hoy entendemos porque el Maestro Samael decía "Soy
menos que un vil gusano del lodo de la Tierra". En aquellas
épocas cuando por primera vez leía esa frase, me parecía tan
exagerado que un Logos como el Maestro Samael la escribiera.
Un Maestro cuando llega a esa altura de su Iniciación se

da cuenta que mucho más allá de su estado de exaltación
comienza la verdadera Sabiduría.
Hoy entendemos porque Sócrates decía: "Solo sé que
nada sé" y entendemos también a ese extraordinario filósofo,
científico, médico, artista, pintor, escultor, inventor, llamado
Leonardo Da Vinci, cuando en los últimos instantes de su vida,
después de haber entregado tantos proyectos, ideas, inventos
que ningún ser humano ha podido igualar, llorando le decía a su
único discípulo fiel que le quedaba: “Francesco, he perdido mi
venida a la Tierra, he desperdiciado mi tiempo, no he logrado mi
misión” y éste, profundamente sorprendido contestaba; ¿“Pero
Maestro, si Ud. ha hecho tanto por la humanidad, le ha dejado
sendas enseñanzas y sabiduría, cómo puede decir que ha
perdido su tiempo? ¿Entonces qué debiera decir la sociedad? Y
el Maestro muy sereno le replicaba: “La humanidad es solo
abono para alimentar la tierra”.
El Maestro Leonardo había llegado a encarnar en su
constitución anímica, la comprensión de que “somos nada”.
Lo único verdaderamente valioso en nosotros es nuestra
Esencia Inmaculada, nuestra conciencia Divina, nuestro Padre
bien amado, ese Ser grandioso que vive y palpita en nuestro
interior y está anhelando como siempre, nuestra
Autorrealización.
5. ¡ Hacernos devotos de nuestra Madre Divina a través

de la oración!
La Madre Divina hace posible nuestra Obra con su divino

Amor y nos acompaña en cada instante de nuestra existencia.
Ella está a nuestro lado y al lado de la humanidad en los

peores momentos, cuando cometen las peores atrocidades,
cuando se comportan de la peor manera, cuando fornican, etc.
Esa Madre Divina que afortunadamente está también en
aquellos pocos instantes en los cuales sabemos amar.
La Madre es quien acude a los Templos de la Ley Divina a
implorar que nos perdonen nuestro karma para hacernos más
livianos el recorrido por el espinoso camino que lleva a “TUM”.
Es Quien pide que curen nuestros cuerpos en los Templos de
la Medicina Universal, apelando a los pocos recursos ganados
por medio del sacrificio hechos en pro de la humanidad y
ahorrados por esa Madre, centavo a centavo, como lo hacen
aquellas madres físicas para tener un pequeño fondo en los
momentos de gran tribulación.
Es Quien implora antes los Dioses Santos para que nos
concedan su auxilio y la Sabiduría de los Siglos, para instruirnos
en el Arte Regio de la Luz.
Es Quien solicita a los Maestros del “Rayo de la Muerte” el
auxilio para que su hijo tenga el derecho de morir en sus
aspectos más terribles.
Es Quien pide al Venerable Maestro Samael la fuerza que
necesita para imponerse ante las duras pruebas del camino de la
Iniciación y ante las inclemencias de las debilidades egoicas.
Es Quien le ruega a la bendita Madre Naturaleza que
prepare su cuerpo para el advenimiento del Fuego y sea
utilizado en bien del prójimo y esté a disposición de Dios.
Es Quien le pide al Logos Michael que le dé sabiduría y
equilibrio para manejar con equidad los aspectos de la doctrina
como representación de la parte santificante de su propia Obra.
Debemos aprender a implorar, como lo enseñan las aves que

están creciendo, cuando le piden el alimento a su madre, con
insistencia, con constancia, porque de ello depende su
supervivencia y la posibilidad de imponerse ante las dificultades
del ambiente que las leyes de la naturaleza exigen para
seleccionar su semilla en forma severa y perfecta.
Sólo ella, la Bendita Madre Devi Kundalini, “puede
aniquilar a los demonios rojos de Set, sin ella estaríamos
perdidos”.
Lamentablemente es muy poco el recuerdo que tenemos de
Ella y muy mínimo el respeto procurado por nosotros hacia las
continuas corazonadas que nos envía a través del lenguaje del
corazón para hablar con nosotros, quienes a pesar de todo,
representamos para Ella el hijo amado, el primogénito de Dios,
en quien tiene la esperanza puesta para regresar algún día al
seno del Omnimisericordioso.
Hagámonos devotos de la Madre Divina y pidámosle con
mucha fe la ayuda que necesitamos para desintegrar nuestra
Falsa Personalidad la cual nos impide encontrarnos con nuestro
Ser Interno.
CAPITULO VI
EL EXODO
Para las personas recién entradas a la Gnosis es difícil

comprender que la diferencia entre un Maestro con cuerpo
físico y una persona normal y corriente, estriba básicamente en
su condición Espiritual, no en su parte humana o física.
Los Maestros además de tener un cuerpo idéntico al nuestro,
poseen internamente una Estructura Solar Divina, que nosotros
también necesitamos crear en esta o en otra vida futura, para
permitir que nuestro Ser, lo único digno y sagrado que existe en
nuestro interior, pueda algún día manifestarse a través de

nuestro verbo y de nuestros actos.
¿Por qué nuestro Ser Interno, que es una extensión o una
chispa de Dios, necesita obligatoriamente que tengamos
Cuerpos Solares para poderse manifestar?
Porque Dios es fuego, es energía y si entrara en
nosotros, que no poseemos todavía la estructura solar requerida
o esa envoltura energética divina, moriríamos carbonizados en
forma instantánea; sería como el relámpago o el rayo que cae
sobre una persona en alguna tormenta.
El Ser representa el “Rayo de la Creación” y para
poderse expresar en cada ser humano necesita de un habitáculo
bien preparado, el hogar Gnóstico Interno, que como
estudiante de esta sabiduría excelsa tiene el deber de crear y
organizar, para su propio advenimiento.
Es increíblemente importante para nosotros haber
tenido la oportunidad de conseguir la Doctrina Gnóstica en esta
existencia; aprovechemos entonces con cariño y con esmero
esta dádiva y estos tiempos para hacernos Iniciados del
Camino angosto y difícil que lleva a la Cristificación.
La Obra del Padre consiste en la edificación de esa
“Estructura Interna” en nuestro Universo Interior; la creación
de las condiciones necesarias para que algún día podamos ser
llamados “Hijos de Dios y Reyes de la Naturaleza” con
merecimiento.
Todos sabemos que cada vez que se acerca el final de
un siglo, hay rumores sobre los tiempos del fin en todo el
Planeta. Actualmente estamos iniciando el siglo XXI y no faltan
los distintos comentarios, hechos por la gente al respecto y
asegurando que ya no hay tiempo, ni oportunidad para que la

humanidad pueda enmendar sus faltas y corregir sus errores.
Es importante, entonces, reflexionar sobre este tema y
analizar si es verdad que no hay más tiempo para realizar las
transformaciones psicológicas y anímicas necesarias para
alcanzar, aún en esta época de difícil supervivencia espiritual,
ese honor tan anhelado de ser considerado discípulo de la
Venerable Logia Blanca.
En mi caso personal he estado en espera de algún
fenómeno extraño que produjera el tan nombrado final de la
raza, la desaparición de la sociedad, el exterminio de la
humanidad y siempre he estado pendiente sobre los rumores de
guerras, los acontecimientos pocos comunes, las epidemias, etc.
Sospechaba que el “Final del Mundo” tendría que
ocurrir obligatoriamente a través de una guerra nuclear o de
alguna terrible epidemia para todos.
Pero, después de muchas reflexiones, comprendí que la
guerra nuclear, las epidemias, las enfermedades
bacteriológicas, que por cierto las están habiendo cada día más
graves e incurables, son únicamente un pequeño corolario de lo
que ya se está procesando en la agonía de esta Raza.
Hemos comprendido que la humanidad no se acaba porque
estalla una guerra
Nuclear o viene una peste; se termina cuando ya no existe el
Espíritu en el corazón del hombre.
El V. Maestro Samael dice en alguno de sus libros,
escritos hace 40 a 50 años, que resulta ya muy difícil
conseguir en el planeta alguna persona que aún tenga Alma y
todavía esté conectado con su Intimo.
Hace muchos años, cuando conseguí la Gnosis por

primera vez y leía esos párrafos donde el Maestro explica este
tema, se me hacía casi imposible aceptarlo por su crudeza, pero
con el tiempo me fui dando cuenta que esta es una gran verdad.
Es cierto, tenemos amistades o familiares comportándose
como buenos esposos, excelentes ciudadanos, amigos sinceros,
personas correctas, muy educadas, pero cuando se les habla de
espiritualidad no se sienten muy agradadas o simplemente nos
contestan de la siguiente forma: “ Mi papá me enseño que la
vida es así, mi abuelo también la vivió así y yo pienso seguirlo
haciendo igual para no complicar mi existencia”.
Si esos individuos estuvieran conectados todavía con el
Intimo, Este haría súper esfuerzos, en una época como la
actual, para que ese hijo llegara a un centro de estudios
Gnósticos para recibir la información adecuada a su superación
espiritual.
Algunos Maestros le han hecho una investigación a ese
tipo de personas en la parte interna y se han dado cuenta que
muchos de ellos están vacíos, con una fachada física que
aparenta ser correcta y justa, pero en el fondo, en su parte
íntima, anímica, no poseen ya los valores internos necesarios
para seguir el camino de la revolución Espiritual.
Así está la humanidad en estos tiempos. La actualidad
nos presenta contados casos de individuos que todavía poseen
Chispa Divina; por eso cuando se organiza alguna conferencia
pública, con la finalidad de difundir la enseñanza, con un gran
despliegue de propaganda, sólo llegan al salón unas contadas
personas a oír hablar sobre el tema.
En cambio, cuando se organiza un partido de fútbol,
béisbol o cualquier otro deporte que a la gente le gusta, el
estadio se llena hasta el tope; miles y miles de personas

mirando el partido dentro del estadio y cientos de miles o tal vez
de millones, siguiendo ese mismo partido en las pantallas de
televisión, viendo correr un poco de jugadores de tras de una
pelota. Ahora, cuando se habla de los Misterios Crísticos la
gente no acude al llamado, es un tema que no les produce
emoción alguna.
El acabose de la humanidad, el final de la raza Aria de la
cual hacemos parte, en mí apreciación personal, ya está en su
ultima fase, porque ya no existe un número suficiente de
personas con conciencia, conectadas aún con su Intimo,
haciendo posible que el resto de la humanidad pueda ser guiada
en forma justa y equilibrada.
El Venerable Maestro Lakhsmi, nos explica en su
Magistral Joya Veintidós que toda persona con Intimo, que
todavía está ligada con su Ser, posee a un Elohím Interno en los
Mundos Superiores quien proyecta ciertas notas musicales con
su laringe o su verbo de oro, a través de un lenguaje divino,
permitiendo la formación de un equilibrio entre la humanidad y
la misma naturaleza.
Cuando en los Mundos Superiores de conciencia no hay
un determinado grupo de Elohines o seres Celestiales,
trabajando con su verbo de oro, se pierde el equilibrio del
hombre y por ende de la humanidad en el mundo tridimensional
en el cual nos movemos todos.
Esa es, lamentablemente, la desgracia de la humanidad
en estos tiempos, ya no existe la cantidad mínima de
Individuos Sagrados, con su Elohim en los Mundos Superiores,
produciendo el equilibrio que necesita la humanidad y la
naturaleza.
Si elimináramos del planeta todos los animales que

existen, dejando las plantas que producen el oxígeno necesario
para la supervivencia de los Hombres verdaderos, los cuales son
los Reyes de la Naturaleza, el equilibrio de la humanidad
seguiría existiendo.
Empero, si elimináramos al Hombre, me refiero al
Hombre Real, no al humanoide, a pesar de que sigan existiendo
los animales y las plantas, el equilibrio se perdería y por
ende, sobrevendría el final de la vida del planeta.
En realidad, el día del final no lo conoce nadie. Como
lo decía Jesús de Nazaret: "NADIE SABE LA HORA, NI EL
DIA, NI LOS ANGELES DEL CIELO, SINO SOLO MI
PADRE".
A nosotros nos corresponde, como estudiantes
gnósticos, seguir trabajando y luchando hasta el último día y
cuando éste llegue, se acabó, se terminó todo, pero podremos
decir satisfechos: "HE HECHO LO QUE HE PODIDO, DIOS
MIO, EN TUS MANOS ENCOMIENDO MI ALMA Y MI
ESPIRITU".
El problema radica en que nosotros, por el hecho de
estar viviendo en los tiempos del fin, nos preguntamos: “ ¿Para
que seguimos luchando, para qué nos preocupamos en mejorar
nuestras condiciones de vida si ya no hay tiempo para hacer la
Obra?”
Hace 10 años aproximadamente, compré una finca en
determinado lugar del país, la cual no tenía árboles de fruta y
me propuse, junto con mi esposa y otras personas allegadas a
sembrar árboles de naranjos, mandarinos, lechosos, mangos,
etc. y recuerdo que en esos días me visitó un hermano gnóstico
quien me preguntó: ¿Ud. porque está sembrando tantas plantas

y tantos árboles si Hercólubus anda por ahí?
Yo le contesté, que era mi deseo seguir trabajando y
plantando hasta cuando llegara Hercólubus, mientras tanto
queríamos decorar esa tierra para que se viera hermosa y era
posible que mientras Hercólubus llegaba podríamos alcanzar a
comernos alguna fruta.
Pasaron los años, los árboles se hicieron grandes,
produjeron muchas frutas y comimos de ellas. Más adelante
vendimos la finca y ahora otras personas están disfrutando de
sus cosechas.
Por estos tiempos, compramos una nueva granja en otro
estado del País y estamos haciendo lo mismo, sembramos todo
tipo de árboles frutales porque, casualmente, la tierra tampoco
tiene ese tipo de vegetación.
Nosotros no queremos criticar a nadie con lo que
estamos planteando, sin embargo es nuestro deber, por tener la
oportunidad de dirigirnos a Ustedes por medio de estas líneas,
de infundir en el corazón de cada uno la voluntad de seguir
luchando y trabajando hasta el día en que Dios quiera que
perdamos o salvemos nuestro cuerpo físico.
El Maestro Samael, dice que existe un premio o una
oportunidad maravillosa para aquéllas Almas o seres humanos
que logren un mejoramiento Espiritual en esta existencia, la cual
consiste en ser rescatados a través de un Éxodo y llevados a una
“Isla Secreta” ubicada en el océano Pacífico.
Hay tres tipos de Exodo. Tuvimos el honor de lograr el
primero al ser rescatados cuando vivíamos en un mundo
descompuesto, cuando hacíamos parte de una sociedad que lleva
una vida desequilibrada, entre vicios y pasiones inimaginables,
para ser ubicados en un Hogar Gnóstico, con una doctrina

superior, con una enseñanza hermosa como la que poseemos.
Seguimos siendo humanos, imperfectos; continuamos
discutiendo en el hogar, con nuestra pareja, con nuestros hijos y
amigos, pero no hay duda de que estamos iniciando un cambio.
El hecho de que seamos capaces de reunirnos en un
Santuario una tarde o un día sábado, en vez de irnos a una
discoteca o a una fiesta y que tengamos la predisposición de
arrodillarnos o postrarnos ante el altar, frente a las luces
encendidas en el candelabro símbolo del Intimo, para orarle a
Dios y pedirle a nuestra Bendita Madre que nos ayude, es un
indicio de que estamos empezando a cambiar y que existe en
nosotros la oportunidad o la posibilidad de mejorar, porque
tenemos las herramientas para recorrer el camino necesario
hasta encarnar a nuestro Intimo, nuestro propio Salvador, el
Salvador de nuestro mundo interior.
El Segundo Éxodo, el cual sería asombroso poderlo lograr,
se obtiene cuando la persona, a través de un trabajo Iniciático,
sube primero la Montaña del AUTO REALIZACION, luego la
de la RESURRECCION y finalmente con el grado de
Superhombre, la Tercera Montaña denominada LA
ASCENCION.
Cuando el Adepto, mujer u hombre, logra subir la
Tercera Montaña de la Iniciación, se gana el derecho de entrar al
Absoluto, ese representa el mejor Éxodo, el más grande de
todos, porque es la salvación eterna.
Pero, nosotros como neófitos de la Doctrina
Gnóstica, anhelamos un Exodo que pueda estar a nuestro
alcance. ¿ Quién no tiene la aspiración de ser rescatado y ser
llevado a la Isla?.
Hemos escuchado al Maestro Lakhsmi hablar de esa

Isla, él fue llevado a ese lugar en varias oportunidades y cuenta
que muchos integrantes del Pueblo Gnóstico también lo
visitaron y conocieron lo que existe en ella.
Lamentablemente, la mayoría no recordamos las
experiencias oníricas obtenidas durante las horas del sueño, pero
afortunadamente, el Maestro nos ha explicado a largos rasgos
sus características y funciones.
La Isla, por supuesto, está rodeada por un mar lleno de
vida, con peces de múltiples especies y tamaños y posee
además una tierra fértil y fecunda, donde todas las plantas y
los árboles se observan con una vitalidad ferviente y vigorosa.
El clima es similar a una eterna primavera, no hace frío
ni calor, persiste una temperatura de unos 18 a 20 grados
centígrados. Todo lo que se cultiva está hecho por “simples
campesinos” que viven en la Isla.
Esos agricultores producen el alimento para todas las
personas que allí habitan y se dedican a preparar el ambiente
para que los integrantes del Pueblo Gnóstico o de otras
agrupaciones Espirituales existentes en la Tierra, las cuales no
pertenecen a las Instituciones Gnósticas, pero practican la
misma enseñanza bajo otro nombre, sean rescatadas algún día
para ser llevadas a ese lugar sagrado.
Todos los alimentos que se producen, nos contaba el
Maestro, como verduras, hortalizas, frutas, semilla de árboles,
pescados, etc., son llevados a un gran almacén, una especie de
supermercado, para dar una idea y ubicados en su lugar
correspondiente.
El Maestro explicaba cómo conservan el pescado, el
cual tiende a dañarse a las pocas horas y nos informaba de la
existencia de una especie de gaveras refrigerantes, que no

funcionan con electricidad, si no con un sistema de minúsculas
pilas compuestas por cristales especiales con la capacidad de
mantener una temperatura constante e idónea para que el
pescado depositado esté siempre bien conservado.
Así mismo las verduras, hortalizas y ensaladas están
ubicadas en ciertos compartimientos apropiados con una
temperatura ideal para que se mantengan siempre frescas e
intactas.
A ese lugar llegan las personas que necesitan provisiones
y se llevan únicamente las cantidades necesarias o suficientes
para alimentarse. Nadie sería capaz de sustraer de sus
contenedores algún producto que realmente no necesite.
Nos contaba además, que los personajes que viven en esa
Isla, reciben continuamente de sus Instructores algún tipo de
enseñanza espiritual, que les permite superarse anímicamente.
En ese lugar se trabaja unas pocas horas y luego se
asiste a los Colegios de Iniciados, donde se reciben las
instrucciones necesarias para el mejoramiento Espiritual.
El Maestro decía que cuando alguien era llevado a la
Isla, era sometido antes a cierto tipo de purificación y pasado
por una recámara construida con un mineral parecido al cuarzo,
de diversos colores cuyas paredes estaban perfectamente
talladas; no eran totalmente transparentes pero permitían ver la
luz de la parte externa.
El visitante, tan contaminado en el mundo
tridimensional, era pasado por esa bóveda especial quedando
completamente descontaminado y purificado a su salida.
Algo parecido sucede cuando los científicos de la
Tierra mandan a los astronautas a la luna o a cualquier rincón
del espacio y cuando regresan los mantienen en una recámara

completamente aislada, para prevenir una eventual
contaminación a causa de algún elemento bacteriológico
desconocido, donde permanecen por cuarenta días.
La notable diferencia estriba en que los Hermanos del
Espacio dejan a sus huéspedes solamente unos contados minutos
para ejecutar esa misma tarea.
Considero que este relato puede producir en nosotros
algunas dudas. ¿Será cierto o sólo fantasía? La Gnosis es
terriblemente práctica y sencilla y lo mejor que podemos hacer
para confirmarlo, es comprobarlo por nosotros mismos por
medio de las prácticas enseñadas en nuestra Doctrina.
Los cinco aspectos fundamentales para el éxodo
Ahora bien, si queremos ser habitantes de esa Isla y

seguir viviendo en ella con cuerpo físico: ¿Qué deberíamos
hacer?
El Maestro Samael, en sus primeros libros escribió que
sólo los Iniciados que hubiesen levantado por lo menos la
segunda serpiente de fuego serían rescatados. En este caso solo
muy contadas personas tendrían la posibilidad de ir al Éxodo.
El Maestro Lakhsmi nos explicaba que en los actuales
momentos, cuando las dificultades de redención del genero
humano se han complicado hasta el extremo, basta un
profundo y sincero arrepentimiento para ser rescatados.
Normalmente nosotros, como seres humanos, creemos
que las manifestaciones y exigencias de Dios son muy
complicadas, pensamos que no tenemos oportunidad de llegar
hasta Él, porque somos demasiado imperfectos.
Considero, después de haber compartido con el Maestro

Lakhsmi y con otros Maestros que tuve la oportunidad de
conocer en esta vida, que ser admitido en el Éxodo es difícil
pero no imposible, como muchos hemos creído.
Después de numerosas consultas y de realizar profundos
análisis y reflexiones sobre este tema de tanta trascendencia para
nuestro futuro espiritual y humano, hemos llegado a la
conclusión de que necesitamos de las cinco siguientes
características para acceder a tan anhelada meta:
1) Ser un buen ciudadano
Considero difícil admitir que una de las condiciones

para ser rescatados sea tan solo “ser un buen ciudadano”,
¡porque es tan sencillo y parece tan insignificante! Sin
embargo, con las costumbres que actualmente existen en la
sociedad, a veces se nos hace difícil cumplir con ciertas normas
exigidas para llegar al nivel de un buen ciudadano.
¿Cuántas veces hemos visto y seguimos viendo en la
calle a personas que teniendo algún papel en la mano, lo
envuelven y lo botan, como si la calle no perteneciera a la
ciudad donde viven, como la extensión de su hogar?
¿Cuántas veces hemos observado en un autobús en
marcha, como los pasajeros botan papeles por las ventanas,
cáscaras de frutas que están comiendo, botellas y vasos
plásticos? ¡Esa es la expresión de un mal ciudadano! ¿Qué
pierde en mantener ese vaso o papel en una bolsa o en su mano
hasta llegar a un pote de basura y tirarlo?
¿Cuántas veces al visitar una playa o un río para recibir
los beneficios de los elementales de la naturaleza, hemos
conseguido basura, restos de comida botada, potes, etc., etc.?
Si encontramos sucias las orillas de la playa, nada

perdemos en limpiarlas, por lo menos el lugar donde nos vamos
a quedar, recogiendo la basura y depositándola en algún
envase que se haya colocado para ello y si no lo hay, la
guardamos para llevarla a su lugar indicado.
Las personas que nos observan haciendo esta clase de
acciones podrán pensar dos cosas: que somos locos o que
somos diferentes.
¿Cuántos chóferes pasan el semáforo en rojo,
simplemente porque andan con prisa o porque no les importa
que halla una ley que lo prohíba?
Escupir en la calle es signo de pésimo comportamiento,
como lo es orinar, gritar, pintar las paredes con frases o
símbolos extraños, manejar a alta velocidad, producir sonidos o
estruendos, irrespetar los peatones y a los ancianos, etc.
Ser buenos ciudadanos significa respetar las leyes de la
Tierra. El que sea capaz de respetar estas leyes,
indudablemente será capaz también de respetar las Leyes
Divinas, las de nuestro Ser Interno, las leyes del Reino a
donde anhelamos entrar.
2) Ser buen padre, buena madre, buen hijo, buen esposo,

buen amigo.
Ser buen Padre, es indudablemente una característica muy

importante en nuestra existencia. Si tenemos algún hijo, es
nuestro deber, como Padre o como Madre, de cuidarlo, pero
no únicamente en su parte física, dándole la comida suficiente,
el vestido necesario y el hogar indicado; esto es algo muy
importante pero el deber de todo padre o madre, es educar a

esa criatura para que se haga hija de Dios.
La responsabilidad que tienen los padres con sus hijos
es demasiado grande, porque de la educación que sean capaces
de impartirles, depende el futuro físico y espiritual de esas
criaturas.
Existe la posibilidad de que alguno de esos hijos esté ligado con
un Alma grande, que busca el amor de un hogar para alimentar
su conciencia y desarrollarse con ella en función de sus
necesidades. Si ese niño no encuentra en su hogar los principios
apropiados, a pesar de poseer una gran Alma, corre el riesgo de
perderse en nuestro mundo lleno de errores y de dificultades.
También es importante aclarar que todas aquéllas
parejas gnósticas con unos años de casadas, que no tengan hijos
y estén practicando el Arcano en una forma correcta, tienen todo
el derecho de pedirlo al Sacratísimo Espíritu Santo y a los V.M
de la Ley, si así lo desean, según el trabajo indicado en él
capitulo de la Alquimia.
A pesar de que nuestro mundo está en franco camino de
involución, hay parejas anhelando profundamente sembrar su
semilla para ver retoñar el fruto de su amor. Quieren una
criatura que venga al mundo para alegrar su hogar y para tener
la oportunidad de realizar una misión hermosa, bien sea como
padre o como madre.
"Bienaventurados aquellos padres que sean capaces de
educar a sus hijos para Dios".
Si nosotros pedimos un hijo y lo educamos para el mal, en
vez de ganar un Dharma, recibimos un terrible Karma.
Ser un buen Padre no es difícil, sobre todo para nosotros que ya
tenemos ciertos principios inculcados gracias al conocimiento
adquirido por medio de nuestra doctrina. El hecho de haber

aceptado la Gnosis y practicarla significa que hay algo distinto
y divino que se mueve y palpita en nuestro universo interior.
Ser buen hijo, tampoco es tan difícil, sin embargo, hay personas
que no visitan a sus Padres y han abandonado a su familia,
porque han interpretado muy mal el libro del Maestro Samael,
titulado "Para Los Pocos", donde dice: "La Familia es del
tiempo y por lo tanto muere con el tiempo".
En verdad es necesario comprender que el Maestro Samael,
cuando escribió esa extraordinaria Obra estaba ya en la cúspide
de la segunda Montaña, o sea a muchos miles de años luz de
nosotros. Escribió esa frase porque al llegar a ese nivel del Ser,
no se pertenece a ninguna familia, a ningún padre o madre, a
ningún país o nivel social; se es simplemente siervo de Dios y
de la humanidad.
Nosotros como hijos, cuando abandonamos a nuestros padres
físicos, o no los respetamos y honramos, nos estamos
transformando en malagradecidos.
Recordemos que aún cuando se hayan portado mal con nosotros,
sirvieron de instrumentos para que la Bendita Madre Naturaleza
permitiera que tuviéramos un nuevo vehículo físico
imperiosamente necesario para realizar la Obra.
Debemos aprender a ser buenos hijos, con esto no queremos
decir que si papá o mamá, cada vez que vamos a visitarlos,
nos prohíben asistir a los centros Gnósticos o seguir los
principios que intuimos son los necesarios para nuestra
emancipación como seres humanos de puro y noble corazón,
debemos aceptar su voluntad y por hacerlos contentos,
abandonar lo que tanto nos costó encontrar.
Debe existir un equilibrio que consiste en respetar a nuestros

padres y familiares, recompensándoles con amor, cariño,
aprecio y dándoles a nuestros Padres Internos, las virtudes del
Alma y la obediencia que esperan de nosotros.
El equilibrio debe reinar en todo momento; no debe existir el
apego desmesurado que tanto daño causa, pero tampoco el
olvido y el abandono.
Cuando hay equilibrio entre el amor de padre e hijo en el plano
físico, también lo habrá en la parte interna, con nuestro Ser y
con nuestra Madre Divina.
El que honra a su padre físico, también lo hace con su
Padre Interno.
No podemos caer en el extremo de que si nuestros padres
físicos no quieren la Gnosis la abandonamos por tenerlos
contentos; tampoco podemos abandonar a los padres físicos
para seguir la doctrina en forma fanática y ciega.
Debemos mantener siempre el equilibrio, siguiendo la Doctrina
Gnóstica, evitando hablar de ella cuando visitamos a nuestros
familiares, en aquellos casos donde no la acepten y aprendiendo
a llevarles la corriente en una forma inteligente y astuta.
Ser buenos esposos.
Es probable que este sea uno de las metas más difíciles de

alcanzar. Una cosa es decir voy a ser un buen esposo y otra es
estar unidos en un matrimonio, donde empiezan las rencillas, los
celos, las discusiones, las incomprensiones, el amor propio, la
ira; donde el egregor turbulento y denso que se forma comienza
a crear dificultades en la pareja y a socavar la integridad que
debe reinar en ella.
Como estudiantes gnósticos debemos aprender a comportarnos

correcta y equilibradamente, sobre todo en este campo, el cual
representa la base de nuestra formación como seres humanos de
aspiraciones superiores de conciencia.
No es justo que un hombre llegue a su casa, después de un día
de trabajo y ni siquiera le diga buenas noches a su esposa.
Entra como si fuera un extraño y ella, que pasó todo el día
trabajando en los quehaceres del hogar, los cuales por cierto son
muchos y agotadores, que seguramente le preparó una buena
comida, no reciba siquiera una palabra de cariño o de aliento
recompensando en parte el sacrificio que está haciendo como
columna fundamental de ese hogar.
Que diferente sería que al llegar a su hogar saludara a su
esposa con un abrazo, con un beso; la llenara de cariño, de
ternura, de halagos por su condición de mujer y por la tarea tan
difícil que ejerce en el hogar y que la esposa también le
correspondiera en la misma forma, procurando estar armoniosa,
arreglada, etc. y así existiría siempre el equilibrio.
El hombre que sale a la calle para conseguir el sustento de la
familia, debe llevarle a su pareja un impulso, un estímulo para
que tenga el motivo de seguir desempeñando el papel de centro
de gravedad del hogar.
Es fácil darse cuenta que cuando la mujer no está en la casa se
siente un vacío, a pesar de la presencia del esposo y de todos
los hijos. Es necesario que llegue la mujer para que ese lugar
vuelva a llenarse.
Esto demuestra que la mujer posee la capacidad de reunir
alrededor de sí todas las energías condensadas en el hogar.
Cuando se muere la mamá, los hijos pierden en gran parte el

interés de visitar al papá, de reunirse con él, van por respeto,
pero no porque sientan una gran necesidad de compartir con él.
En cambio, si se muere el papá, todos los hijos siguen visitando
a su mamá como siempre, con cariño, con amor y se siguen
sintiendo bien. Esta es una razón mas para entender la
importancia de la mujer en el hogar y sobre todo en el hogar
gnóstico.
¡Qué hermoso es cuando el esposo posee palabras tiernas para
su mujer! Ella, en recompensa, cuando él llega a su casa le
atiende y le sirve con mucho amor.
Ese hombre, indudablemente, va a recibir la paz y la energía de
esa mujer plasmada en los alimentos. ¡Qué hermoso es
compartir con su pareja una vida donde haya paz, armonía,
amor y comprensión!.
Este es el matrimonio gnóstico, el cual tiene que basarse
sobre los principios antes expuestos y sobre todo en la
castidad, el fundamento que debe imperar entre ellos.
Cuando la morbosidad, la lascivia y la fornicación se adueñan
de la pareja gnóstica, se desintegra ese romance, ese
magnetismo, ese egregor que los cubre a ellos y a su hogar.
Ocurre en este caso, que las fuerzas antagónicas y negativas
consiguen una fisura en ese hogar por donde penetrar,
produciendo la desarmonía del matrimonio y más tarde su
desintegración.
En el fondo, a pesar de que ser buenos esposos es algo más
difícil de lo que pensamos, debemos admitir que está a nuestro
alcance.
Es indispensable hacer un súper esfuerzo para mejorar nuestro
hogar y aprender a ser una buena pareja, procurando ver en
nuestra compañera o compañero, todos los aspectos buenos,

desechando de la mente las malas impresiones que tenemos de
ella.
Todos somos negativos internamente; poseemos un sin número
de defectos y sin embargo, cuando vamos a un Santuario
Gnóstico y realizamos una cadena con devoción y mística,
invocando algún Ser Divino o algún Maestro de Luz, Ellos
acuden a nuestro llamado para ver en que nos pueden ayudar.
Una vez el Maestro Lakhsmi nos enseñaba que los Dioses
nunca miran la maldad existente en el ser humano, ellos
observan solamente sus virtudes, porque si se fijaran en sus
partes negativas nunca vendrían hasta nosotros.
Los Dioses nos enseñan con estos ejemplos en una forma tan
maravillosa. ¿Porque nosotros, como esposos, no aprendemos a
ver las virtudes de nuestra pareja, desechando de nuestra mente
aquellos defectos que de ella no nos gustan?
Sin duda también nuestra pareja ve en nosotros muchos
detalles que no le gustan. Por eso debe existir un esfuerzo en
ambas direcciones para lograr el equilibrio, el cual representa la
esencia para alcanzar nuestro mejoramiento espiritual.
Ser un buen amigo.
Un amigo es quien comparte con nosotros la vida sin necesidad

de tener nexos familiares, quien nos da consuelo en
determinado momento de nuestra existencia, el que nos da un
consejo, el que nos proporciona un especial calor humano.
Nosotros, como amigos, tenemos que aprender a ser dignos y
respetuosos.
A un amigo nunca se le debe traicionar. Toda persona que

traiciona a un amigo sincero con alguna grave acción de tipo
moral, se gana un castigo muy severo por parte de su Kaom
Interno.
Traicionar a un amigo es igual que traicionar a su propia mujer,
a su propio Ser Interno o a su propio Gurú. Es algo muy grave,
a pesar de que nos parezca sencillo.
Cuando alguien se enamora de la novia o peor aún, de la
esposa de un amigo fiel y la corteja hasta que la conquista,
comete un acto de alta traición.
Cuando alguien tiene un amigo y comparte con él en todas
partes, lo quiere, lo respeta, lo estima y en el momento de una
enfermedad mortal, cuando no tiene posibilidad alguna de
sobrevivir, se olvida de él, le da la espalda, no le tiende la mano
en ese momento tan trágico de su vida, comete un acto de alta
traición.
Compartir parte de la existencia con un amigo sincero es un
privilegio, un honor y al mismo tiempo un Dharma, que
debemos aprovechar. Este hecho permite que se produzca un
especial ínter relación de los valores humanos en nuestro mundo
interior a través de la convivencia de las partículas de luz
pertenecientes a la conciencia de ambos, las cuales se
reencuentran en una nueva vida para darse valor y animo en el
duro recorrido de la existencia.
3) Cuidar el cuerpo.
Nosotros anhelamos el rescate de nuestra Alma, pero ojalá

que ese privilegio incluyera también nuestro actual cuerpo
físico, para que en la Isla, con las sabias orientaciones de los
Guías de la humanidad, se haga tan perfecto y puedan durar

miles de años, logrando con el tiempo terminar la Obra que
apenas hemos comenzado por medio de la experiencia
adquirida.
Salvar nuestro cuerpo físico es algo esencial, pero de
nada nos serviría si ese cuerpo no estuviera bien cuidado y
conservado.
Basta imaginarnos a un individuo dueño de un auto nuevo, muy
costoso, pero que lo trata muy mal, sin hacerle mantenimiento,
lo expone al sol, a la lluvia, a la intemperie, lo choca en cada
esquina, lo tiene sucio por dentro y por fuera; por supuesto un
carro en estas condiciones, a los 3 o 4 años parece una chatarra
que a lo mejor ni las chiveras lo reciben.
Así mismo ocurre cuando un individuo recibe de la
Madre Naturaleza un cuerpo físico nuevo, en el cual los mismos
Dioses y elementales han hecho tantos esfuerzos para lograr esa
creación, formando un cuerpo y entregándolo a una esencia
para ser utilizado en la Obra del Padre, para hacer crecer su
propia Alma y tener la oportunidad de acercarse a su Intimo.
La persona recibe ese cuerpo pero, como no le ha costado
nada, lo trata mal y lo descuida. Aunque un gran sabio dijo:
“No hemos venido a la Tierra para evitar la muerte, sino a
prepararnos para morir”.
Es de gran importancia conocer determinadas condiciones
que deben estar presentes en nuestro vehículo físico para
utilizarlo en la Obra y tener la oportunidad de ser buenos
ciudadanos, buenos padres, hijos, esposos, amigos y podamos
además acercarnos a nuestro Dios Interno.
El Maestro Samael explica que para producir una buena

semilla es necesario cultivar pensamientos puros, tener una
óptima respiración y procurar una buena alimentación.
Para sutilizar o sublimar el cuerpo es fundamental
seleccionar nuestros pensamientos, el aire que respiramos y los
alimentos que ingerimos.
Cuidando estos tres aspectos tan sencillos, podemos mantener
un cuerpo físico apto para hacer la Obra. Por eso la gran
importancia de cuidarlo, pues si no ¿cómo haríamos La Gran
Obra?
LOS PENSAMIENTOS
Los pensamientos nos traicionan y nos hacen soñar muchas

veces. Si la persona es extremadamente pobre, los
pensamientos de la fantasía le hacen soñar que se gana la
lotería, que llega a ser rico y con ese dinero hace grandes
proezas.
Si es extremadamente rica, los pensamientos son de otro tipo, le
hacen fantasear en poderes, en vicios, en mujeres, honores,
títulos, etc.
Cada vez que un pensamiento negativo entra o se forma en la
mente, en nuestro cuerpo se produce una sustancia densa que
contamina nuestras células, nuestra sangre y por ende nuestro
cuerpo físico; pensar negativamente produce en nosotros
inconvenientes mucho más graves de lo que creemos.
Cuando la persona tiene pensamientos negativos y dependiendo
de las características de los mismos, en el interior de sus mundos
internos se forman criaturas grotescas que de manera
simbólica, toman el cuerpo de animales como cochinos, arañas,

ratas, monos y otros seres nauseabundos e involucionantes.
Cuando en cambio el individuo tiene pensamientos equilibrados,
hermosos, puros y dirigidos hacia la parte Divina, hacia su Ser,
se forman en su interior virtudes que son simbolizadas con otro
tipo de elementos hermosos, como flores, aromas agradables,
palomas, corderos, águilas, etc., que indican evolución y avance
en la Obra.
LA RESPIRACION
Comúnmente, después de realizar un paseo en algún lugar de
esparcimiento, difícilmente nos acordamos de darle las gracias
a la Madre Naturaleza por permitirnos disfrutar de ese lugar
hermoso.
Cuando estamos en medio de un bosque o cerca de una
playa, donde no hay mucha contaminación, lo ideal es respirar
profundamente para cargar nuestros pulmones y cada una de
nuestras células, con la vibración y la energía presente en el
lugar, para alimentarnos de ese oxígeno e imprimirle fuerzas a
cada uno de nuestros órganos y por ende, a nuestra propia
conciencia.
Nuestro consejo para las personas que viven en las grandes
ciudades, en un lugar encerrado, con poca luz, ventilación o
donde hay mucha contaminación, es que se muden de lugar, en
la medida de sus posibilidades o vayan con frecuencia al campo
y a la playa a respirar, reflexionar e integrarse con la vida y con
si mismo.
Los ejercicios de vocalización, de transmutación de solteros, de
runas, de respiración física, son maravillosos para potenciar
nuestra simiente y mejorar considerablemente las creaciones que
podamos realizar con nuestras energías creadoras, en bien de

nuestra regeneración espiritual.
Las personas que realizan una vida sedentaria y poco activa en
el sentido físico de la palabra, necesitan continuas salidas al
campo para equilibrar el flujo energético y vital de su
organismo, el cual lo exige para procesar las reacciones
químicas y alquímicas en su extraordinario laboratorio interior.
Una perfecta respiración, unida a los ejercicios
correspondientes, nos garantiza el impulso interior y nos alejan
de las depresiones, induciéndonos al trabajo esotérico,
responsable de nuestro avance en este camino que nos hemos
propuesto recorrer, el de la Iniciación.
LA ALIMENTACION
El Maestro Samael ha insistido continuamente en sus libros

sobre la inconveniencia de que el estudiante gnóstico se
alimente con enlatados y productos altamente procesados y
derivados del cochino, sin embargo a pesar de esto, algunos a
veces sin saberlo, lo siguen haciendo.
Muchos estudiantes gnósticos siguen alimentándose con
productos enlatados, los cuales duran años en un envase
metálico sin deteriorarse porque contienen preservativos que
los conservan.
Esos alimentos hacen verdaderos estragos en nuestro
organismo físico y por ende, nos enfermamos del hígado, del
páncreas, del estómago; se contamina nuestra sangre y nos
hacemos demasiado pesados; nuestra energía no es apta
entonces para nuestro trabajo de solteros o casados.
Todo cuerpo pesado y denso difícilmente obtiene la octava

superior necesaria para lograr la regeneración.
Otros productos, que actualmente representan un elemento
común de la dieta diaria en la sociedad, son las bebidas
gaseosas. Estas contienen colorantes y sabores artificiales que
normalmente son cancerígenos o muy perjudiciales para la
salud.
A esto hay que agregarle el anhídrido carbónico o bióxido de
carbono contenido en ellas; el mismo gas que expele la
combustión en las industrias y los incendios de los bosques y de
la vegetación en nuestro planeta.
Obviamente el ser humano no podría vivir en un ambiente
contaminado por el humo y el anhídrido carbónico, luego,
tampoco puede hacerlo un individuo que se alimenta de
gaseosas, las cuales establecen en su organismo un panorama
parecido.
El peor daño causado por los refrescos es la contaminación de
nuestra semilla creadora, la materia prima para nuestras
creaciones internas.
Debemos erradicar totalmente las gaseosas de nuestra
alimentación ya que ellas son elementos tamásicos, si de verdad
anhelamos la regeneración física y espiritual de nuestro universo
interior.
Debemos realizar periódicamente un pequeño ayuno de uno o
tres días con frutas o sin comer absolutamente nada, con la
finalidad de depurar nuestro organismo de los continuos abusos
a que lo sometemos en el diario vivir.
Muchas veces, a través de nuestro trabajo Iniciático, hemos
logrado conquistar alguna partícula de la luz de nuestro Ser,
pero esta no puede ser fijada a nuestra conciencia por la
contaminación y el desorden reinante en nuestra mente y en

nuestra psiquis. En estos casos un ayuno bien realizado nos
permite superar el obstáculo.
El ayuno no debe ser entendido como aguantar hambre uno o
varios días. Si por ejemplo, uno se propone hacer un ayuno de
un día, pero sigue realizando las mismas actividades propias
del día, es decir trabajar, escribir, leer, ver televisión,
escuchar la radio, etc. sin comer, significa que está aguantando
hambre un día.
En cambio, si aprovecha el día para ayunar, escuchando
solamente música clásica agradable, se dedica a orarle a su
Dios Interno, a meditar y reflexionar en su vida espiritual y
física, quedándose quieto en su casa o santuario, estaría
realizando un día de ayuno.
Los ayunos de uno o tres días son los recomendables para todos
los neófitos que recorren el camino del Sendero Probatorio.
Estos ayunos pueden ser parciales o totales. Los parciales se
realizan comiendo un solo tipo de frutas en el día,
preferiblemente lechosa, manzanas o uvas; los totales tomando
solamente agua pura y eventualmente alguna pequeña infusión
de plantas aromáticas endulzada con miel de abejas.
Existen también ayunos de nueve días, indicados especialmente
para los Iniciados que necesitan una purificación especial, los
cuales se realizan únicamente en los Templos de Misterios y son
autorizados, normalmente, por un Maestro de la Logia Blanca o
por el Abad del Templo.
Es importante también que el estudiante gnóstico se depure en
forma periódica. Se recomienda una purga por año para limpiar
nuestro organismo de los residuos acumulados en las paredes
digestivas y que difícilmente son eliminadas por el organismo.
Para este fin se mezclan 250 c.c de aceite de oliva con suficiente
jugo de naranja y se toma al acostarse. En la mañana siguiente
se ingiere en ayunas el contenido de un sobre de sal de magnesia
disuelta en agua. Este procedimiento desprende los residuos
perjudiciales de las paredes digestivas y permite una limpieza
total de nuestros intestinos e hígado.
Otra sugerencia que damos es la realización periódica,
preferiblemente cada seis meses, de enemas o lavados
intestinales con ajenjo, ya que esta planta vermífuga elimina las
bacterias nocivas y los parásitos de nuestros intestinos y sistema
digestivo.
Para este propósito se preparan 2 litros de agua a los cuales se
le agregan tres cogollos de ajenjo, se hace una infusión y se
deja entibiar, se cuela, se introduce en una bolsa indicada para
enemas y se coloca ese líquido en el recto intestinal en dos
partes o mitades iguales.
La importancia de eliminar los parásitos de nuestro cuerpo se
debe a que estos causan múltiples daños y porque poseen una
inteligencia negativa que incita a las personas a actuar en forma
inconveniente.
Es fundamental, cuando se haga un lavado, que a los 10 días
aproximadamente, se repita el mismo procedimiento para
eliminar el resto de los elementos que no desaparecieron en el
primero, porque se encontraban en forma de huevos, protegidos
por la envoltura que los compone.
4) Compartir la luz
4)
¿Cuál es la luz que necesitamos compartir? ¡Aquella que

recibimos el día en que alguien nos habló de Gnosis y nos llevó
hasta un salón de conferencias para recibir esta gran sabiduría!
Cuando el neófito es consagrado como miembro de segunda
cámara, recibe en su corazón una pequeña luz, que lo hace
diferente del resto de la sociedad donde vive.
Podríamos decir que es posible reconocer a los estudiantes
gnósticos cuando andan en la calle, porque en ellos hay algo
diferente; se trata de la pequeña luz que los Maestros nos
prestan, para ver el camino que necesitamos recorrer, pero esa
luz se nos da con la condición de que la compartamos con
nuestros semejantes.
Hoy en día es difícil conseguir personas que compartan con
nuestras ideas o con nuestra doctrina, pero nuestro deber, como
estudiantes gnósticos que ya hemos recibido esa pequeña luz, es
compartir con los demás esa riqueza recibida para así obtener
más luz.
El método más rápido para conseguir la luz es enseñar. ” El que
alumbra el camino de otros esta alumbrando su propio camino”.
Cuando una persona se dedica a enseñar, sin duda aprende
mucho. Primero, porque esta obligado a prepararse para hacerlo,
segundo porque es asistido por la Conciencia en los momentos
de entregar el mensaje y finalmente porque es recompensado
por la Ley Divina con pagos Cósmicos que le permiten a su
Divina Madre solicitar el despertar del Boddhisita, el cual
representa en nosotros el porcentaje de conciencia que poseemos
en el momento actual de nuestra existencia.
La luz es fundamental en cada estudiante de la Sabiduría
Gnóstica, para ser cobijado por “ La Gracia de Dios “ que en los
actuales momentos representa la única solución que nos puede
salvar del mundo de vicios y tentaciones en el cual nos

encontramos.
5) Ser castos
En alguna oportunidad alguien me preguntaba: ¿ Quién puede

ser casto?. Para llegar a ser verdaderamente castos habría que
serlo en nuestros pensamientos, palabras y obras y creo que
solo un Jesús de Nazaret o los Maestros resurrectos pudieron
lograrlo.
¿Quién sería capaz de no pensar jamás en algo negativo, aunque
sea por un instante? ¿Quién, a pesar de ser muy enaltecido
espiritualmente, en oportunidades, no pronuncia alguna palabra
que hiere la susceptibilidad humana de determinada persona?
Para nosotros, lo esencial es el respeto de nuestra “Energía
Creadora”, procurando con todas nuestras fuerzas de cuidar
nuestros pensamientos y palabras para no contaminarla ni
adulterarla en sus funciones creadoras.
Nuestra “semilla” contiene los Átomos Crísticos, encargados
de darnos el impulso para avanzar en el camino Espiritual.
Ninguna persona lujuriosa, puede ser aceptada por los
Venerables Maestros de la Logia Blanca para un rescate en el
Éxodo, pero quien, a pesar de ser lujuriosa, logra con
grandes esfuerzos dominar los instintos, cuidando y respetando
sus energías, estará acercándose a la castidad, por lo menos en
su nivel de Ser.
La castidad es la virtud más preciada por el “Caminante del
Sendero de la Luz” y la que nos confiere el poder más grande
representado por la conquista del báculo de poder del Padre, con
el cual nos convertimos en Magos y Exorcistas, en médicos y

teúrgos, en sabios e inteligentes.
CAPITULO VII
LA INSPIRACIÓN.
Indudablemente el progreso espiritual de una persona

depende principalmente del desarrollo del Chacra Cardíaco. Con
justa razón el V.M. Samael dice que los Fuegos Sagrados suben
por la columna del Iniciado de acuerdo a los méritos del
corazón.
Para el desarrollo de este extraordinario centro

necesitamos de la presencia constante de la inspiración en
nuestro diario vivir.
La inspiración es una facultad perteneciente al mundo de
la Mente Universal y se halla ubicada, como virtud, en nuestro
cuerpo mental, expresándose a través de la sensibilidad de
nuestro corazón.
Muchas veces hemos creído que la mente es negativa,
sin embargo es necesario aclarar que negativo es el ego cuando
se manifiesta a través de nuestra mente, mas no la mente.
El cuerpo mental es el cuarto cuerpo del Intimo, quien lo
utiliza, para realizar sus misiones y trabajos de teurgia e
investigación en los mundos superiores de conciencia cuando se
encuentra correctamente solarizado y preparado.
Un ser humano inspirado siente, sin duda, dentro de sí la
presencia del Espíritu.
De hecho la inspiración se produce por un acercamiento
del hombre a su Dios Interno o a la Luz Astral.
La inspiración permite el despertar del Boddhisita, esa
fracción de conciencia libre que poseemos en nosotros.
Para conseguir la inspiración es imperativo y esencial
buscar el contacto con la naturaleza que nos alberga y nos
permite recibir el estimulo interno de sus criaturas inocentes,
llenas de los poderes ígneos que les fueron conferidos por el
Creador.
Nos gustaría trasladarnos con la imaginación, en estos
momentos, a un bosque tropical y reflexionar sobre las bellezas
que nos rodean y nos envuelven con el aroma y la fragancia de
las flores, con el verde de los prados, con el sonido
característico de la naturaleza, con las aves multicolores y en

general, con todo cuanto está a nuestro alrededor.
Tratemos de despertar, por lo menos por unos
instantes, analizando lo que sentimos y evidenciando la
expresión de Dios manifestada en su parte femenina, conocida
por nosotros con el nombre de “Madre Naturaleza Superior”.
Si hacemos un discernimiento consciente, nos daremos
cuenta que fuimos premiados por el Omni misericordioso
quien permitió que todo lo creado y los cinco elementos de la
naturaleza, presentes en esas manifestaciones de vida estén a
nuestra completa disposición.
Tenemos la Tierra, aun fértil y bondadosa, donde
cultivamos los alimentos necesarios para nuestra supervivencia,
donde pisamos nuestros pasos y depositamos las esperanzas de
una vida conforme a la voluntad de Dios.
Poseemos el Agua pura, sin componentes artificiales,
sin aditivos químicos de alguna naturaleza que a través de sus
ríos y quebradas transporta la energía que el Cristo Sol
transmite con sus radiaciones.
Disponemos del Aire, lleno del oxígeno y de los
elementos gaseosos necesarios a nuestro organismo para su
perfecto desarrollo permitiendo a las plantas y a los múltiples
alimentos consumidos por nosotros estar también llenos de estos
componentes.
Existe la presencia del Astro Sol, representando
majestuosamente al elemento Fuego, que con su portentosa
presencia nos asombra todas las mañanas cuando aparece en el
horizonte.
El Sol es el corazón de ese organismo viviente llamado
Sistema Solar Hors que vibra y palpita en el espacio cósmico
anhelando, así como la madre del niño, que éste crezca y se

desarrolle conforme a las leyes de ese reino. Quien da la luz a
todos los seres vivientes sin hacer distinción de razas, colores,
clases o credos religiosos. Quien sale para todos, para impulsar
con augusto vigor las ondas vibratorias de la existencia que, en
forma pujante envuelven a sus pasos todo lo que está inerte.
Es el elemento que calienta la sangre en nuestras venas,
para darnos la voluntad de enfrentarnos a nuestros elementos
tenebrosos internos e incitamos a la actividad constante.
Es la conciencia de nuestro sistema Solar, el Padre de
nuestra creación, el Ser que aguarda oculto el regreso de sus
hijos a su seno Omni misericordioso, quien vela por nosotros,
amándonos y deseando que nos hagamos Dioses y guías de las
demás criaturas vivientes; es quien nos da el aliento y nos
socorre, quien nos recibe en su seno después de una ardua
jornada de trabajo, compuesta por cientos de miles de años, para
fundirse en un todo y trasladarse a otro lugar del
inconmensurable espacio a visitar nuevas tierras, nuevos
horizontes y a realizar nuevas experiencias.
Finalmente tenemos el Éter, vibrando a nuestro
alrededor incansablemente y que vemos casi físicamente,
dispuesto a filtrar los rayos y las partículas que llegan de la
atmósfera a nuestro vehículo físico, el cual los recibe
conscientemente para equilibrar su perfecto funcionalismo
interno.
Este es el quinto elemento del cual tanto nos habla el
V.M. Samael y que nosotros debemos conquistar como
integrantes de esta raza Aria, para ganarnos el derecho de
hacerlo con la Luz Astral en el futuro, en la próxima sexta raza,
completando nuestra evolución en la séptima raza de nuestro
Planeta Tierra con la conquista de la Mente Universal.

Reflexionemos: ¿Podremos pedirle más a la vida?
¿Podremos exigirle más al Creador? ¿Qué más esperamos de
nuestra existencia y de nuestros semejantes? ¿Acaso no es
suficiente todo lo recibido y lo puesto a nuestra completa
disposición para podernos auto realizar y transformar de
hecho y por derecho, en los reales Reyes de la Naturaleza?
Pero es importante reconocer que podremos ser Reyes
sólo cuando seamos capaces de dominar nuestras bajas
pasiones, las apetencias infrahumanas y los instintos propios
de nuestra progenie que nada tiene de divino y tampoco de
humano en muchas oportunidades.
Si reflexionamos en todo lo mencionado anteriormente
llegaremos a la firme convicción de que es necesario darle las
gracias a Dios, nuestro Creador, arrodillados o en la más
humilde postura todas las mañanas cuando nos despertamos,
para agradecer lo bien que estamos.
Todas estas reflexiones nos llevan a la inspiración y nos
inducen a acercarnos a nuestro Padre Interno, para orar con Él
y suplicarle que nos perdone los atropellos cometidos contra
la Ley Divina y nuestros semejantes, contra nuestro cuerpo
físico y nuestra maravillosa conciencia que, por su profunda
inocencia, se dejó amarrar y enfrascar en la negatividad de
nuestro mundo individual, lleno de odios y ondas
venenoskirianas, emitidas por el ego que aún no hemos podido
expulsar de nuestro mundo interno.
Nuestra conciencia, la cual está continuamente azotada
por la maldad y la fealdad del ego, necesita estar en el
Santuario de la Naturaleza para recibir el estímulo que le
otorgan sus Elementales, de donde extrae las fuerzas necesarias
para seguir adelante en la lucha para lograr la perfección.

Ese santuario en sí, es la representación de nuestro
Templo Interior, ubicado en nuestro vehículo físico, que
pertenece al elemento Tierra y por lo tanto tiene íntima
relación con la piedra y con todo material físico necesario para
construir un Templo.
En el interior de ese Templo, al igual que en el
Santuario, hay un Sacerdote, una Isis, un cuerpo de oficiantes y
una grey.
La grey que asiste a nuestro Templo Interior depende
de la calidad de personas que somos, del trabajo que estemos
haciendo y sobre todo, de nuestra ubicación durante la
realización de los actos litúrgicos.
Esa grey puede ser constituida por las partes autónomas
del Ser, por los elementos virtuosos o por los personajes
egoicos que viven o habitan en nosotros trayéndonos dicha y
felicidad o dolor y sufrimientos dependiendo de sus
características.
Para realizar la Obra es indispensable conseguir el
equilibrio interno, donde existe plena armonía entre los
principios básicos de la creación: “Hombre - Conciencia –
Espíritu”.
Si no hay equilibrio entre estos tres aspectos, la Obra
se hace imposible. Por la falta de equilibrio se forman los
conflictos de la sociedad; conflictos de tipo político, religioso
y social.
Nuestra conciencia sufre en nosotros. Ella, la
representación de lo más puro, ingenua, dócil, amorosa que
existe en nosotros, debe vivir entre los demonios
representados por nuestros defectos, por causa nuestra en el
continuo espanto de verse frente a frente en los infiernos más

horribles que podamos imaginar.
Tal vez el motivo más apropiado para nuestra inspiración
consiste en hacer una reflexión profunda sobre la Obra realizada
por el hombre mas elevado que ha pisado suelo terrestre. Nos
referimos al V.M. Jesuá Ben Pandirá, conocido como Jesús el
Cristo.
Jesús de Nazaret, vino al mundo en una Navidad hace
2000 años para salvarnos a través del mensaje que nos dejó.
Jesús, quiere decir Salvador del Mundo, y el mundo no
es más que nuestras costumbres, nuestros modales, nuestras
actitudes, mas no nuestro Planeta.
Ese Jesús o ese Cristo, debe también nacer en todos
nosotros necesariamente para podernos liberar y salvar de
nuestro mundo interior, lleno de vicios, de odios y de pésimas
costumbres.
Es esencial permitir que el niño Dios nazca en
nosotros para que podamos tener la dádiva y la esperanza de ser
salvos.
En nuestro bello planeta Tierra, todos los años, sin
ninguna excepción, nace el Cristo Solar en el Sur.
En la Primavera, el día 21 de Marzo, los elementos
Fuego y Agua se entremezclan en el Norte, donde reside el
elemento Tierra, viva representación de la Madre Naturaleza
Superior, para engendrar al Cristo el cual, después de nueve
meses de gestación y un recorrido a través de las diferentes
latitudes de nuestro Planeta, nace en el Sur el 25 de
Diciembre.
Si contamos los días transcurridos desde el 21 de Marzo
hasta el 25 de Diciembre, veremos que han pasado nueve
meses cronológicos, el mismo tiempo empleado por nuestra

madre física en hacernos nacer y el mismo necesitado por
nuestra Madre Devi Kundalini para permitir que nuestro Cristo
Interno, engendrado en nuestro Chacra Muladar, pueda
ascender a través de la columna vertebral y hacer contacto con
la glándula pineal permitiendo el nacimiento de nuestro Cristo
Intimo en nuestro micro Sur planetario personal, después de la
fusión del Intimo con el Cristo Interno.
El Logos Solar o Cristo Sol, ha sido siempre mal
interpretado por la mayoría de las personas las cuales han
confundido al Cristo Cósmico con un personaje histórico que
existió hace 2000 años y fue capaz de encarnarlo como fuerza.
Todo ser humano capaz de realizar las purificaciones
necesarias y de crear las condiciones idóneas para permitir este
fenómeno, podrá encarnar a esa fuerza Cósmica denominada “El
Cristo” y transformarse en un Cristificado.
El Unigénito Hijo de Dios no es una persona, sino una
Fuerza maravillosa que está presente como manifestación de la
vida en todas las criaturas existentes, en los humanos, en los
animales, en las plantas, en la vegetación e inclusive en los
minerales, que a pesar de no poseer expresión de vida aparente
en su interior, están compuestos también por millones de átomos
con materia, energía y conciencia vibrando en armonía con el
Universo.
Jesús de Nazaret, se llamó Emmanuel, según el relato de
la Biblia, cuando nació como un ser humano común de la
sociedad. Sin embargo a los pocos años, cuando alcanzó la edad
de predicar el Evangelio, le decían Jesús, ya no Emmanuel. Esto
se debe a que cuando encarnó a su Ser, empezó a utilizar su
nombre interno conocido como Jesuá Ben Pandirá.
Sucesivamente, cuando Jesuá Ben Pandirá encarnó al

Cristo Cósmico, le llamaron Jesús el Cristo con justa razón.
Este Gran Ser escribió que el hombre podía imitar su
obra y hacer aún más.
Obviamente, pretender hacer más que ese gran Maestro
de Sabiduría es seguramente demasiado atrevimiento, sin
embargo el Maestro quiso dejar claro la existencia de esa
posibilidad y con ella la oportunidad de que todo ser humano
pueda transformarse en un Cristificado algún día, en alguna
existencia, después de un arduo y terrible trabajo consciente de
purificación y perfección.
El gran Maestro de sabiduría Hermes Trismegisto, el tres

veces grande Dios de Toth, dejó un axioma universal que dice:
“¡Cómo es arriba es abajo, como es adentro es afuera!”.
Existe un Cristo Cósmico y un Cristo Intimo. El Cristo
Cósmico manifestado en nuestro planeta es el regente de nuestro
sistema solar, cuya expresión física es la luz del Sol.
Indudablemente esa Fuerza Cósmica va pasando desde el
mundo Atmico hasta el mundo de la materia, para darle vida a
todas las criaturas del planeta, sin hacer distinción alguna en su
recorrido, bañando por igual a buenos y malos, pequeños y
grandes, blancos y negros, porque es la representación del amor
en su esencia.
Esta fuerza es depositada en forma más sutil en la
semilla o energía creadora del ser humano, para ser utilizada en
la reproducción de la especie y en la creación del Cristo Interno,
llamado por el gran Kabir Jesús: “El Hijo del Hombre”.
El Cristo Intimo es el producto del Trabajo Alquímico en
la forja de los cíclopes, donde un hombre y una mujer, unidos
por las fuerzas del amor y por el anhelo consciente de realizar la

Obra, logran un acto de transmutación, transformándose por
unos instantes en Creadores y permitiendo la gestación de la
Bendita Madre Devi Kundalini.
El Cristo Intimo es el Hijo de la luz que nace en el
corazón de todo hombre o mujer que con anhelo sincero se
somete a las disciplinas voluntarias necesarias para la
regeneración interna o espiritual.
Es el resultado del connubio amoroso de una pareja que
ama la castidad y procura por todos los medios que en su hogar
reine la armonía y la paz.
Es el fruto del Amor profesado por dos seres que sienten

en su corazón la necesidad de tener un hijo de la luz para cuidar
su desarrollo y crecimiento, como lo hicieran “José y María”,
para luego de hacerse hombre, verlo predicar la doctrina pura
del Espíritu con sabiduría, preparando a los demás seres
humanos a realizar ese mismo trabajo.
Es el nacimiento segundo, del cual le habló Jesús a
Nicodemo, el cual nos transforma en superhombres, después del
paso por el nivel de humanos.
PRACTICA
Siéntese en un cómodo sillón, relaje su cuerpo y realice

siete respiraciones profundas utilizando para ello el mantram
Ham-Saj.
Concentre su atención en el Templo Corazón y pida:
“Padre mío, Señor mío, Dios mío; bendita Madre Devi
Kundalini, Devi Kundalini, Devi Kundalini; Cristo Ígneo,
Cristo ardiente, Cristo Sol; Sacratisimo Espíritu Santo,
Sacratisimo Espíritu Santo, Sacratisimo Espíritu Santo; Hominis
Jaum Intimo, Hominis Jaum Intimo, Hominis Jaum Intimo;
glorioso Ser, te pido con mi alma y mi corazón te dignes dirigir
esta practica que realizo para solicitar la virtud de la Inspiración
y rogar que se plasme en mí elevándome a estados superiores
de conciencia.
Mi Ser interno, bendito y glorioso Ser, te suplico que en

estos momentos te dignes invocar la divina presencia del V.M.
Zochipilli, Zochipilli, Zochipilli, glorioso Ser, te llamamos, te
invocamos, en el nombre del Cristo, por el poder del Cristo, por
la majestad del Cristo, venid hacia aquí, concurrid a nuestro
llamado: Antia dauna sastasa (se pronuncia tres veces).
Venerable Maestro Zochipilli, glorioso Ser, te hemos
llamado, te hemos invocado, para pedirte con nuestra alma y
nuestro corazón que con los poderes que te son conferidos
penetres en nuestro mundo mental y realices las limpiezas
necesarias para que sea transformada en un instrumento útil al
servicio de mi Ser. Te ruego que plasmes en mi la virtud
maravillosa de la Inspiración para poder observar las creaciones
que me rodean con la sensibilidad necesaria para contemplar su
verdadero valor. Te pido glorioso Ser que sensibilices mi cuerpo

físico para poder percibir las cosas del ultra con el sentido del
asombro y sentir en mi continuamente la facultad de la
Inspiración necesaria para avanzar en mi camino Iniciático.
Permíteme escuchar la “música de las esferas” y compartir
contigo el amor y la ternura que encarnas en tu Ser. Satura mi
corazón de fe, impregna mi conciencia de comprensión, inculca
en mi mente la belleza y el bien, ilumina mi entendimiento para
comprender a mis semejantes, fortifica mi voluntad y permite
que sea una con la tuya; orienta mi camino para imitar tu Obra,
envuélveme en tu manto protector para defenderme de mis
enemigos y de las influencias nefastas de las tinieblas.
A continuación pronuncia el mantram OM en forma alargada

para activar el chacra Cardiaco:
OOOOOOOOOOOOOOMMMMMMMMMMMMMM por
media hora continua, imaginando al mismo tiempo que el divino
Maestro Zochipilli realiza limpiezas profundas en nuestros
establos mentales con sus poderes mágicos, permitiendo a
nuestra mente crear las condiciones adecuadas para su
iluminación y Cristificación. Al terminar la práctica dar las
gracias por la ayuda recibida.
Es importante aclarar que para complementar este
ejercicio es necesario tratar de producir en nosotros el estado de
asombro cada vez que nos encontremos cerca de un bosque, de
una quebrada, de un río, de un lago, del mar y de cualquier lugar
en la naturaleza que nos proporcione una belleza visual fuera de
lo común, tratando de observar con detenimiento cada detalle de

la creación para estimular el sentido del asombro y la facultad
de la inspiración.
Es esencial estimular la sensibilidad de nuestra materia a
través de la contemplación de la divina creación para acceder al
mundo de Nethzah, el mundo de la mente cósmica donde se
perciben los estados emocionales superiores de mas alto nivel
concientivo que se pueda imaginar.
CAPITULO VIII
LOS ENIGMAS DE LA MUJER
Obviamente, para hablar sobre el tema de la mujer,

en necesario ante todo ser una mujer, porque solo ella conoce su
verdadera psicología, la cual dista demasiado de la masculina,
normalmente llana, directa y poco detallista.
El hombre, para poderlo intentar con propiedad y acierto,

debe encarnar primero el Alma Femenina, su Buddhi y este logro
de tipo trascendental está por ahora, muy lejos de su alcance.
El Alma Divina o Buddhi Interior, es una parte íntima de
Atman, nuestro Padre Interno.
Nuestro Ser posee dos Almas: una femenina y otra
masculina. La femenina es conocida como Buddhi, la masculina
con el nombre Manas.
El Maestro Samael explica en uno de sus libros que
mientras Manas se debate en el mundo tridimensional, luchando
sin descanso para tratar de alcanzar la perfección o por lo menos la
regeneración, Buddhi juega en los mundos internos, se alegra de
su hermoso estado y vive en plena armonía.
En nuestras reflexiones, hechas a la luz de la lógica
esotérica, hemos llegado a la conclusión que la mujer posee la
misma expresión del Alma Divina, capaz de vivir en un mundo
menos denso, en comparación con el hombre, con la hermosa
ventaja de poseer un mayor impulso para seguir adelante en el
Trabajo Espiritual.
Nosotros, a pesar de estar muy lejos de poder hablar sobre
las características y los enigmas de la mujer, por nuestra
condición de varón, nos proponemos en este capitulo con un
valiente intento, esbozar nuestras recomendaciones personales al
respecto de este hermoso tema, con la finalidad de aportar con ello
lo que hemos aprendido en el recorrer de nuestra actual existencia.
Sabemos que la mujer ha sido maltratada continua e
inexorablemente a través de los siglos. Se le ha tratado
injustamente, se ha abusado cruelmente de ella y tal vez por eso
algunas han manifestado, equivocadamente, que es un karma
haber nacido con cuerpo femenino.
La mujer, en los actuales tiempos, se encuentra todavía

con algunas desventajas frente a la sociedad porque el hombre
así lo ha propiciado por medio de la maldad, la crueldad y la
sed de mando encarnada en su paso por la vida tridimensional
del planeta.
Necesitamos estudiar a fondo la condición real de la mujer
y en especial manera de la mujer Gnóstica en el intrincado mundo
relacionado con la especie humana.
La Madre, como representación divina de la mujer, es el
único Ser con el poder de llegar hasta los tribunales del Karma
para rogar por su hijo y pedir su perdón.
Es la única, que por voluntad de Dios, concilia al Hijo con
el Padre. Es la voz que aboga y pide ayuda para quienes la
necesitan. La Mujer es el Eterno Femenino.
A pesar de los innumerables atributos que la caracterizan,
la mujer ha sido considerada por muchos milenios como inferior
al hombre, motivo por el cual ella se pregunta continuamente cual
es la causa de este desagradable destino.
Al respecto queremos manifestar que en las épocas
antiguas, en la Era de Oro, cuando se iniciaba nuestra Raza, la
mujer era considerada una Diosa.
Todos sabemos que existen las 4 estaciones en los
hemisferios norte y sur de nuestro planeta: Primavera, Verano,
Otoño e Invierno.
En la Primavera, la naturaleza despierta una vez más. Los
árboles y las plantas empiezan a florecer; se siente nuevamente ese
aroma de la tierra, porque ella también despierta para dar sus
frutos exquisitos. En la Primavera todo es bello y maravilloso,
pero al concluir su tiempo deja paso al verano.
En el Verano, las flores que han producido los árboles

durante la primavera empiezan a dar sus frutos. Es época de
calor, propio de esa estación, el sol calienta con más intensidad
todas las plantas y los animales existentes en el planeta y por
ende, la sangre del ser humano, permitiendo que se active, pero
también es cierto que se inicia la temporada de sequía que hace
amarillear y marchitar las plantas y la vegetación.
En el Otoño, todos los árboles dejan caer sus hojas dando
paso a un espectáculo aún hermoso por su colorido e intensidad y
por algunos frutos que todavía se cosechan en esta temporada,
pero ya el frío se deja sentir y los árboles, ya sin hojas, dan un
aspecto lúgubre y desolador.
En el Invierno el espectáculo visto por nosotros en el seno
de la Naturaleza es verdaderamente triste; el frío se intensifica, la
nieve cae dejando un manto de soledad acompañado del hielo que
todo lo congela, lo quema y destruye trayendo como consecuencia
la falta de animo para el común de la gente.
Algo parecido ocurre en las cuatro “edades” que
acompañan una raza, donde se presentan los mismos fenómenos
descritos anteriormente pero dirigidos al aspecto psicológico de la
humanidad.
La actual Raza Aria se encuentra en la Era del
“KaliYuga”, correspondiente al invierno; ya pasó por la edad de
Oro, por la de Plata y la de Bronce; ahora está viviendo la
última etapa, el invierno, la Edad de Hierro.
Indudablemente cuando la raza actual se encontraba en la
Edad de Oro, los hombres y las mujeres vivían dentro de un
equilibrio extraordinario. En esa época no existía lo tuyo ni lo
mío; lo bello ni lo feo; lo malo, ni lo bueno.
En esa Era, que duró varios miles de años, la mujer era

verdaderamente venerada por los hombres y por las demás
mujeres, porque todos reconocían sus virtudes.
¿Quién podría negar el hecho de que la mujer es quien
crea? ¿Quién podría dudar que el simbolismo de la mujer es la
Madre Cósmica, la cual gesta en su vientre a todos los Planetas,
Sistemas Solares, Galaxias y al mismo Universo?
¿Quién podría objetar que en el vientre de una mujer se
gesta una criatura humana, con la oportunidad de auto realizarse?
¿Quién podría dudar de que si no fuera por una mujer, la cual
posee especiales atributos internos, no se lograría jamás el
nacimiento del Cristo Intimo en el corazón del hombre y por
supuesto, de la mujer?
En la Era de Oro las mujeres poseían un alto nivel
Iniciático, ellas profetizaban junto a los Sacerdotes y realizaban
los actos Litúrgicos en los Templos Sagrados; esas mujeres jamás
pensaron, ni por un solo instante que ser mujer era un Karma.
Sin embargo después de esos varios miles de años, en los
cuales la mujer fue venerada, vino la Edad de Plata, donde a pesar
de que todavía el ser humano poseía la conciencia despierta, ya su
brillo empezaba a opacarse.
La mujer seguía siendo respetada, pero ya no venerada;
había empezado a ocultar su nivel, esa es la ley, lamentablemente,
pero todavía la existencia era considerada maravillosa.
Después de la Era de Plata empezó la de Bronce, como
representación del Otoño en las cuatro estaciones, durante la cual
el hombre, quien posee un cuerpo físico mas fuerte de la mujer,
comenzó a someterla.
A partir de ese momento se inició lo que nosotros
conocemos con el nombre de Karma mundial y Karma familiar.
Esos aspectos indeseables se produjeron cuando el hombre y la

mujer empezaron a perder su energía durante la cópula sagrada.
La fornicación no se conocía durante la Era de Oro y de
Plata, pero en la de Bronce ese elemento negativo empezó a
aflorar y trajo el Karma como consecuencia de este grave abuso.
El trato usado con la mujer en la Edad de Bronce era
aceptable todavía, pero cuando llegó la de Hierro, en la cual
estamos viviendo, se comenzó a abusar de ella en forma
desmesurada.
A partir de esa época, todos estamos pagando las
consecuencias del terrible karma que ha envuelto a la humanidad
por completo.
A causa de esos abusos vinieron las enfermedades, las
guerras, las disensiones, los problemas políticos, limítrofes,
sociales, económicos y todas las complicaciones que existen en
nuestro afligido mundo.
Este fenómeno se procesa por medio de la Ley de Causa y
Efecto y se repite en todas las razas, donde aparecen los dos
extremos: en la Era de Oro la mujer es venerada, en la Era de
Hierro es vejada y maltratada; en la era de Plata, la mujer es
respetada, en la de Bronce es casi ignorada.
Es esencial aprovechar los actuales momentos, en los
cuales estamos comenzando una Era de Luz, la Era de Oro de
una nueva raza, cuando en el planeta algunos grupos empiezan ya
a tener cierto respeto hacia la mujer, para hacer un gran esfuerzo
con la finalidad de levantarse del lodo de la tierra, como dice el
Venerable Maestro Samael y hacer la Obra para auto realizarse,
ganando así el derecho de pertenecer en el futuro mediato a una
nueva progenie humana, una nueva raza de tipo superior y vivir
en una sociedad donde la mujer ocupe nuevamente el lugar que le

corresponde.
La mujer Gnóstica debe ganarse ante su Ser Interno, los
méritos correspondientes que le permitan avanzar en su condición
y en el rol que desempeña, para que algún día, cuando alcance un
nivel Iniciático superior, sea respetada y venerada.
Las principales virtudes de la mujer son: El Amor, la

Ternura y la Comprensión.
El hombre, dentro de su constitución Interna no puede

expresar la fragancia del amor hasta que no la haya encarnado. El
debe procurar el nacimiento del Cristo Intimo en su corazón, quien
es el dispensador de esta virtud sobrenatural.
La mujer debe manifestar esta facultad de la Divina Madre
en su vida diaria y acordarse a cada instante de su responsabilidad
ante la sociedad, porque ella representa la expresión femenina de
Dios, la otra cara de una misma moneda.
La Ternura: ¿Cómo veríamos nosotros a una mujer
déspota, cruel con sus hijos, con su esposo, con las personas de la
sociedad?
La mujer posee el don de manifestar su ternura sin
realizar mucho esfuerzo; esta virtud le permite ganarse el cariño y
la atención de todos. Ella puede romper cualquier enojo,
atmósfera negativa o densa que se haya formado en alguna
disputa; puede disipar toda discusión entre marido y mujer, entre
hijos o diferentes personas, simplemente hablando con ternura.
Cuando se presenta alguna discusión entre la pareja, si ella
en vez de levantar la voz, imitando el error del varón, le habla con
cariño, verá que éste queda sin palabras, desarmado, porque va a

encontrar en su mujer un arma que desconoce, la ternura.
La Comprensión: No hay Ser con mas comprensión que

la mujer, ella es capaz de soportar cualquier tipo de sufrimiento y
superarlo a través del tiempo.
Conocemos varones que se sienten machos, se creen
grandes y hablan duro, pero cuando están pasando por una época
difícil, lloran, se emborrachan, buscan todo tipo de distracciones
para olvidarse del problema porque son incapaces de tener
dominio sobre sí mismos para comprenderlo y resolverlo.
Hemos visto a muchas mujeres sufriendo lo indecible y al
mismo tiempo permanecer serenas, sumisas y resignadas, porque
tienen esa capacidad que nosotros los varones debemos admirar,
bajando la cabeza e inclinándonos ante los dones que ellas poseen.
El V.M. Lakhsmi asegura que la mujer está hecha. Ella
posee determinadas características que le permiten obtener los
suficientes méritos del corazón, logrando los grados Iniciáticos
necesarios para encarnar su Ser Interno.
Si la mujer realizara la práctica de la ubicación con
constancia, sin dejarse llevar por las emociones y por la fantasía
que le causan tanto daño, en poco tiempo, digamos en 20 años,
pudiera auto realizarse.
El hombre, en cambio, debe primero conseguir
internamente los méritos del corazón por medio del Amor,
facultad que se obtiene encarnando al Cristo Intimo. Es necesario
que la semilla depositada en las gónadas germine, florezca y de
frutos en el corazón de cada varón.
Cuando el Maestro Lakhsmi dice que para la mujer es más
fácil realizar la Obra, no lo hace sólo para darle un aliciente y
contentarla, nosotros consideramos esta aseveración como una

gran verdad que debe ser analizada con detenimiento.
La mujer posee el principio de la castidad encarnado, ella
no necesita grandes esfuerzos para llegar a ser casta; no precisa
mucha dedicación para sentir el Amor dentro de sí, ni para
producir el anhelo de ayudar a sus semejantes, porque todas estas
son características innatas en su parte interna y depositadas en ella
por la Bendita Diosa Madre Naturaleza.
Si la mujer aprovecha sus virtudes, puede auto realizarse
en pocos años, pero si se deja llevar por las emociones, que son su
punto débil, se aleja de la realidad representada por nuestro Ser.
Las emociones son el punto vulnerable de la mujer. Las
situaciones emocionales la inducen al desequilibrio produciendo
la quema de la energía que ha sabido guardar tan sabiamente por
medio de la castidad.
Muchas damas creen, lamentablemente, que si
no se casan, no pueden hacer la Obra, ni pueden
encarnar al Ser.
Nosotros opinamos que si se van a casar simplemente para
imitar una costumbre de la sociedad para tener hijos, envejecer
juntos y luego morir, realizando la misma vida de las demás
personas, es preferible que se queden solteras.
En cambio, si una mujer se enamora y ese amor es
correspondido por el hombre; si esa pareja de verdad lleva
íntimamente unos principios serios, queriendo realizar un trabajo
honesto para encarnar al Ser a través de la castidad auténtica,
entonces lo ideal es casarse.
Pero de no ser así, de no existir el Amor entre la pareja,
que se casa simplemente para poder decir: “Este es mi marido o
viceversa”, no cometan el error de dar ese paso para después

arrepentirse.
Las hermanas deben comprender que la mujer puede

alcanzar la Novena Iniciación de Misterios Menores como
solteras, y esto no es muy fácil ni todo el mundo lo logra.
Una soltera puede desintegrar el 50% de sus defectos,

según palabras del V.M. Samael. Una mujer en estas condiciones
y con la conciencia que le otorga la Novena Iniciación de
Misterios Menores, puede considerarse una “Hierofante” de
menores, le faltan las iniciaciones de Misterios Mayores, pero ha
hecho ya una base extraordinariamente sólida, para emprender su
futura meta.
Cuando la mujer llegue a la Novena Iniciación de
Misterios Menores y haya desintegrado al menos el 20% de sus
defectos, su Madre Divina, su Ser Interno y los V. Maestros de la
Logia Blanca se encargaran de seleccionar el marido que
requiere para completar su Obra.
La Venerable Logia Blanca tiene el compromiso de
concederle a esa dama la pareja idónea, si así esta designado por la
voluntad del Padre, por haber alcanzado un grado Iniciático
considerable.
Con este esfuerzo habrá ganado el derecho de compartir
su vida con una pareja con las condiciones necesarias para
ayudarla en su Obra, a cambio de que cumpla con los requisitos
encomendados por los diez Mandamientos de la ley de Dios y por
los tres principios dejados por el V. Maestro Samael: Morir,
Nacer y Sacrificio por la Humanidad.
Muchas damas, al igual que los hombres, poseen karmas

muy pesados adquiridos en las múltiples vidas pasadas a causa de
los innumerables errores cometidos.
Cuando estas jóvenes llegan a los 15 o 18 años de edad,
anhelan sin duda encontrar un "Príncipe Azul", un novio
maravilloso que luego sea su esposo. Lamentablemente, deben
pagar primero sus deudas, trabajar para ganarse el derecho al cual
aspiran, aunque el V.M. Samael también nos enseña que hay
muchas Vírgenes del Nirvana con la necesidad de hacer duras
experiencias, a quienes no les corresponde tener maridos en la
actual existencia para poder recorrer el camino de la santidad.
Nosotros recomendamos a las hermanas solteras meditar
muy bien el paso que van a dar antes de casarse pero, sobre todo,
evitar hacerlo por sugerencias de otros; este acontecimiento tan
decisivo en sus vidas debe tomarse en serio solo cuando están
verdaderamente enamoradas.
Cuando una mujer tiene novio y está indecisa sobre su
pareja, normalmente se pregunta: ¿Será conveniente que me
case con este varón o estaré cometiendo el error de mi vida? Esto
sucede porque no está enamorada de verdad, hay dudas y eso
significa falta de Amor. ¡Cuándo hay Amor, no hay dudas!.
Comúnmente la persona indecisa se dirige a algún Maestro
o hermano gnóstico calificado y le pide que le investigue sobre la
conveniencia de casarse con determinada pareja.
El Maestro tiene dos formas de averiguarlo: por medio de
una investigación interna o a través del Tarot.
En el primer caso éste invoca a las dos personas
involucradas en los mundos internos, quienes acuden al llamado
en forma inmediata y luego observa en su aura determinadas
características para determinar si tienen mas o menos los mismos
tonos y con ello deducir finalmente si existe afinidad suficiente

para iniciar una vida en común.
Probablemente, el investigador descubre que son afines,
pero ¿Cómo saber cual es el karma que traen, karma que puede
cambiar por completo el panorama cuando se somete al veredicto
de la balanza de la Justicia?
La pareja se casa, como ha sucedido en muchas
oportunidades y después le va muy mal y termina diciendo que se
casó equivocadamente y sin embargo la consulta salía bien.
El Investigador puede observar la afinidad existente entre
la pareja en el estudio que realiza, pero no tiene permiso de
meterse en el karma que traen, porque este aspecto es demasiado
delicado y complejo.
Por otro lado, si la investigación se hace a través de un
Tarot, la respuesta podría resultar positiva, pero este método es
muy enigmático y simbólico en sus respuestas y si las
interpretaciones no se sopesan con una balanza bien precisa,
también pueden confundir.
En fin, si hay Karma entre dos personas, aunque sean
afines en sus aspectos íntimos, los problemas se presentaran
igualmente en sus vidas, por eso la mejor forma conocida para no
equivocarse es casarse enamorados, con la finalidad de superar
los obstáculos por medio del Amor que se tienen.
Recordemos que difícilmente se consigue la pareja
perfecta en la Tierra y tarde o temprano llegan los problemas
comunes en todo matrimonio, momentos en los cuales necesitan
apelar a la inteligencia de los humanos, al dialogo constante y al
Amor que se profesan.
Pero si no hay Amor, cuando los inconvenientes se

presentan, traen con sigo la separación, el divorcio y la
consecuente desintegración del matrimonio.
Luego el padrino, el hermano Gnóstico o el amigo que los
aprecia, trata de ayudarlos con la esperanza de mejorar las cosas,
pero al tiempo la incomprensión vuelve y nuevamente la paz se
rompe una y otra vez, hasta que cada uno queda por su lado,
continuando nuevamente su vida de soltero.
Sólo por medio del Amor y de la Gracia de Dios, méritos
ganados a través de un trabajo realizado en forma seria y honesta
en la Castidad Científica, se superan estos y todos los obstáculos.
Por otro lado y pasando a otro tipo de aspectos, debemos
manifestar nuestra preocupación sobre las dudas presentes en
algunas mujeres Gnósticas, con respecto al comportamiento a
seguir en el caso de las tantas enfermedades relacionadas con sus
órganos creadores.
Muchas estudiantes Gnósticas están acostumbradas a no
consultar el médico, algunas piensan, con justa razón, que no
deben mostrar su cuerpo a extraños, pero existen casos en los
cuales este procedimiento se amerita.
Si una dama se enferma por ejemplo de un ovario y éste le
produce dolor, inflamación, flujo y malestar general, debe
intentar su curación ante todo pidiendo a su Madre Devi
Kundalini el auxilio necesario intercediendo ante la Ley Divina,
para que le sea concedido el permiso de ser curada y ofrecer a
cambio algún servicio en bien de la humanidad relacionado con
los casos de salud. Luego debe rogar a los Venerables Maestros de
la Medicina que se dignen depositar en su fondo vital la
Medicina Universal necesaria para sanarse.
A continuación le conviene consultar con los médicos

miembros de nuestra institución. Ellos necesitan hacer un
diagnostico preciso y determinar si el ovario está obstruido, si
la matriz tiene tumores, si existe un fibroma, etc.
Una vez agotado este primer recurso y requerirse algunas
pruebas adicionales para confirmar el diagnóstico, podría ser
necesario un ecosonograma o visitar una especialista en
ginecología.
Vivimos con un cuerpo físico tridimensional en el mundo
de la materia y por lo tanto, necesitamos utilizar también la
tecnología inventada por el mismo hombre para detectar ciertos
tipos de enfermedades que nos aquejan y al mismo tiempo
quitarnos los complejos o fanatismos de nuestra mente que en
ocasiones nos hacen equivocar el camino.
Cuando el diagnóstico indica un pequeño tumor o un
quiste en el ovario, la paciente debe visitar a los médicos
gnósticos reconocidos, quienes les recomendarán los remedios
naturales necesarios para curar ese tipo de enfermedad.
También existen casos de damas con quistes en los senos.
Hemos visto al V.M. Lakhsmi desintegrar estos cuerpos
indeseados con imposición de manos y trabajos de Teurgia, pero
si no se puede llegar al Maestro por sus múltiples ocupaciones,
debemos tomar los remedios aconsejados por los médicos
gnósticos, entre los cuales reconocemos el “jarabe de totumo”
como uno de los más eficaces, junto a las cápsulas de Serpiente
Cascabel, al Cartílago de Tiburón y visitar los Templos dedicados
al servicio de la Medicina, donde el cuerpo vital recibe el auxilio
de los Dioses que asisten a esos lugares Sagrados.
Por otro lado y orientando en este momento nuestra
atención a otro aspecto no menos importante, debemos decir que
las mujeres tienden a cuidar mucho su parte estética y esto lo

consideramos importante y correcto, sin embargo, muchas veces
se llega a un extremo y como siempre, debemos ratificar la
importancia del equilibrio en todos los aspectos de la vida.
Hoy en día están de moda las operaciones quirúrgicas
plásticas. La mujer se arregla los ojos, la cara, los pómulos y los
senos para hacerlos más juveniles y atractivos; se hace la
liposucción en el vientre, en las piernas, etc., para extraer la grasa
que sobra sin mucho esfuerzo dando a su cuerpo un aspecto más
esbelto.
En nuestro concepto personal la única forma de no
envejecer es tomando el “Elixir de la Larga Vida”, pero este
brebaje mágico se le entrega al Iniciado únicamente cuando llega a
la cúspide de la Segunda Montaña y haya sido capaz de vencer a
la muerte, o sea, cuando ya no siente apego a la existencia; éste
privilegio se le concede con el propósito de seguir su trabajo de
perfeccionamiento de la Maestría.
Con este Elixir la persona conserva las mismas facciones
y apariencias por miles de años, pudiendo llegar a transformarse
en un Cristificado y finalmente liberarse.
Pero no vayamos tan lejos, no pensemos en cosas tan
profundas, ubiquémonos en nuestra realidad constituida por un
mundo en el cual todos envejecemos.
Yo, en verdad, nunca me había detenido a reflexionar en
estos aspectos o no le había dado la suficiente importancia, hasta
que un día tuve una experiencia interna, donde un personaje muy
peculiar me invitaba a conocer un lugar no menos particular.
Me dejé conducir por esa persona que infundía en mí
mucha paz y seguridad hasta una casa, parecida a las clínicas
privadas existentes en el mundo tridimensional.
Cuando entramos mi acompañante me pidió que

observara atentamente cualquier novedad. Nos encontrábamos en
una sala donde las personas se sentaban a esperar que el médico
especialista las llamara para ser sometidas a algunas operaciones
relacionadas con la estética corporal.
Vi a mi izquierda a un señor quien me sorprendió por su
aspecto, vestido con traje muy elegante, de unos 50 años de edad y
con un corte de cabello muy extraño; parecido a los llamados
"platabanda" por los jóvenes de hoy, con el pelo de color
grisáceo, levantado y totalmente plano en su parte superior.
El señor, muy sonriente, educado, cada vez que entraba
una dama o algún varón para someterse a determinada operación
estética, los recibía con gran gentileza.
Las personas entraban a diferentes consultorios, eran
operadas por cirujanos plásticos y cuando salían, llevaban todos el
mismo corte de cabello del anfitrión, cosa que me causó mucha
sorpresa.
Cuando se tiene un sueño o una experiencia onírica de esta
naturaleza, las cosas se intuyen fácilmente y yo comprendía que
los pacientes cuando se operaban quedaban bajo el dominio o el
hechizo de ese personaje quien representaba una especie de
Guardián del Umbral del Mundo, un demonio, el cual tenía
dominada una gran parte de la humanidad con los aspectos de la
plástica y del cambio de las facciones originales, depositadas en
nosotros por la Madre Naturaleza de acuerdo a nuestros
merecimientos y a la voluntad del Padre.
Toda persona, al ser sometida a alguna de esas
operaciones, quedaba bajo su completo dominio de donde era muy
difícil liberarse. Sin embargo y a pesar de todo, ese Guardián
tenebroso tenía la apariencia de un personaje sonriente, amable y

educado.
A partir de ese día entendí lo delicado de esta faceta de la
vida que en los actuales tiempos tiene envueltos a mujeres y a
hombres que incurren en faltas graves, difíciles de enmendar por
desconocimiento de las Leyes y, a veces, por vanidad.
Sin embargo, es necesario aclarar para evitar confusiones
y dudas perjudiciales que si un individuo sufre por un ataque de
apendicitis aguda y necesita operarse para evitar la muerte éste
debe hacerlo sin vacilaciones, porque se trata de una emergencia.
Tampoco puede evitarse una operación de hernia en grave
estado, después de haberse intentado su curación por medio de los
diversos elementales de la naturaleza especialistas en estos
asuntos, ni podemos evitar una cesárea en una mujer que no puede
parir por alguna disfunción orgánica.
Nos referimos exclusivamente a las operaciones de tipo
estéticas y aun así debemos decir que cuando una persona queda
desfigurada por algún accidente, puede utilizar este método para
solucionar en parte su situación, teniendo como aval el hacerlo
por una imperante necesidad y no por vanidad.
Por otro lado y según mi concepto es importante aclarar
también que la Mujer Gnóstica debe tener un comportamiento
apropiado cuando se dirige a la calle para cumplir con sus
obligaciones sociales, me refiero ante todo a la forma de
maquillarse.
Hemos escuchado en alguna oportunidad que la mujer no
se debe pintar para evitar caer en la vanidad, pero es bueno
preguntarse ¿Acaso las Diosas reencarnadas en nuestro planeta en
alguna etapa de nuestra historia, para ayudar a la humanidad con
su sapiencia, o esas grandes Iniciadas de la época de los faraones y
de los Griegos, no se maquillaban y pintaban según lo muestran

las pinturas dejadas a través del tiempo como testimonio de esta
verdad?
Nosotros estamos recorriendo el cuarto camino, el camino
del hombre equilibrado y nuestra constante debe ser siempre el
equilibrio en todas las cosas.
Qué hermoso es ver una mujer maquillada en forma
sencilla y delicadamente, para resaltar su belleza con tonos
suaves en los ojos y los labios, a menos que tenga unas
características especiales que su Madre Naturaleza le ha concedido
y le permiten verse bella, con su rostro y labios rosados, sin
necesidad de pintura, esa es una gran dádiva, ojalá todas las
mujeres tuvieran este privilegio.
También es desagradable ver a una mujer cuando utiliza en
el rostro esas bases tan fuertes sobre las cuales se aplica el
maquillaje normal; este procedimiento lo consideramos
exagerado. Un maquillaje suave, delicado, hace ver aun más lindas
a las damas.
Cuando una mujer sale a la calle para cumplir con sus
necesidades personales debe hacerlo con decencia y pulcritud,
evitando lucir un cabello desarreglado, ni mostrar un rostro pálido
o con ojeras; consideramos que esta actitud no debe existir en la
Mujer Gnóstica.
Pasando a otro orden de ideas, hemos evidenciado en
algunas mujeres la convicción de no estar haciendo nada; piensan
que su existencia no tiene sentido y que probablemente están
desperdiciando la oportunidad de la presente vida; se sienten
inútiles e inseguras, produciéndose en ellas ese sentimiento
llamado depresión tan dañino y enemigo de la paz interior.
Creemos que estas hermanas están pecando de

pesimismo. Una mujer cuando cumple con todos los deberes
exigidos por la ética moral, con todos los preceptos de buena hija,
buena madre, buena esposa y buena amiga, estará haciendo lo
suficiente para adquirir la experiencia otorgada por la escuela de
la vida y además estará permitiendo la continuidad de su trabajo
por el avance espiritual, como fundamento más importante.
Si además está criando un hijo, se está ganando un gran
mérito adicional, porque está cumpliendo con un deber sagrado
universal que el Ser Interno de ese niño, se lo va a recompensar de
una u otra forma.
Lo importante es emplear todas sus fuerzas para cumplir
con esa noble misión de la mejor manera, dándole a ese hijo o
hijos, la educación más adecuada, inculcándole los principios
divinos necesarios para lograr transformarlos en hombres o
mujeres de bien.
Toda mujer debe aprender a tener obediencia y devoción
con su Madre Divina y con los diez mandamientos de la ley de
Dios, procurando mantener su hogar en forma impecable; no se
puede justificar la casa de una dama Gnóstica con desorden y
falta de higiene.
Toda casa, después de estar limpia debe perfumarse con
esencia de canela o de rosas, por ser éstos los perfumes del amor
que vibran con el hogar, con la mujer y la familia.
Con este método difícilmente entraran a ese hogar ondas
negativas de personas o vecinos que tengan envidia o algún
conflicto en particular con sus integrantes.
La limpieza y el orden deben reinar en nuestros hogares. Si
a todos nosotros nos desagrada entrar a una casa descompuesta,
sucia y desordenada, cuanto más lo será para nuestro Ser que es
perfecto y está acostumbrado a mundos de inmensa organización y

belleza.
Comprendemos y aceptamos que la mujer está siempre
ocupada, algunas posiblemente tengan que trabajar en la calle y
luego llegar a su hogar a seguir trabajando, pero es imperioso
buscar el tiempo para mantener la casa limpia, perfumada y
ordenada.
De igual manera, recomendamos a las damas Gnósticas
aprender a seleccionar la música, evitando escuchar salsas,
merengues, rock y todo tipo de melodía discordante, ya que estas
composiciones desarmonizan y traen mucho desequilibrio a la
conciencia de las personas con anhelo de hacer un trabajo serio.
Debemos aprovechar cada instante de nuestra existencia
para alimentar las virtudes del Alma. La única música reconocida
para crear un encuentro agradable de nuestra conciencia con los
átomos divinos que rondan las casas de los Iniciados es la clásica,
de los grandes Maestros compositores del Renacimiento.
Pero también podemos escuchar música instrumental o
ligera, que trae vibraciones hermosas a nuestro corazón.
La música es fundamental para conformar el Egregor de
un hogar. Donde se escucha música clásica, el Egregor es
totalmente distinto, es suave y liviano. Bastaría que cualquier
persona entrara a ese lugar para darse cuenta que algo diferente se
respira en él.
La mujer Gnóstica debe ser Casta, esta virtud es la base
primordial de la doctrina Gnóstica y de nuestras vidas.
La fornicación trae miseria y el adulterio produce la peor
ruina imaginable. Lo que estamos diciendo se puede corroborar
en la mayoría de los matrimonios externos donde esto sucede. Sus
resultados están a la vista de todos: ruina, miseria, discusiones

constantes y un ambiente de verdadero infierno.
El tema de la Castidad es muy extenso, pero es bueno
saber que al Gnóstico le es prohibido perder la energía. La
fornicación es el peor error que puede cometer el ser humano;
este es un vicio horrible típico de las personas del mundo exterior
que carecen de este conocimiento tan profundo, raramente
aceptado por los actuales integrantes de nuestra humanidad
decadente y superficial.
Ahora, para poder despejar algunas dudas que
normalmente existen entre las mujeres y los matrimonios
Gnósticos, causa de mucho retraso en el trabajo de la conquista
del Ser, responderemos a continuación algunas preguntas de gran
interés para todos.
P: Mi esposo dice que ya no se siente bien sexualmente

conmigo porque yo no pierdo la energía, dice que no es lo
mismo que antes. ¿Que puedo hacer?
R.- Esto sucede a menudo, pídale mucho a su Madre Divina,

para que ayude a ese hombre a cambiar. Pero si él, por alguna
razón se aleja o se aísla de usted, tómelo con resignación,
comprenda que si no acepta la castidad nada se puede hacer. Lo
importante es que usted jamás pierda la energía por complacer a
su esposo; el paso por este mundo es muy corto si lo comparamos
con la eternidad. Tal vez vamos a vivir unos años mas, no
sabemos con certeza, pero nuestra permanencia en el Mundo
Superior es infinita y el día que estemos frente a los tribunales de
la Justicia Divina, se nos preguntará por qué, a pesar de haber
tenido una enseñanza tan clara y precisa como la Gnosis,
seguimos cometiendo estos errores. ¿Que vamos a contestar ante

esos Jueces?
Jamás deben ceder ante el insulto indolente del hombre
para perder la energía, recuerde que lo más sagrado en nosotros
es la Energía Creadora y no pueden vender al Cristo solamente
para darle el gusto a un hombre, quien representa un individuo
pasajero en la actual vida, por demás perecedera. No cometan el
error de satisfacer las apetencias egoicas y morbosas de un hombre
realizando un acto pecaminoso y deprimente hacia la bendita
Madre Naturaleza y el Sacratísimo Espíritu Santo.
Pídale a su Madre Divina en trabajo "novenario";
encienda tres velas por nueve noches consecutivas, suplicando el
caso ante Ella con palabras sencillas y tenga la plena fe y
seguridad de que sus peticiones serán oídas, lo importante es
hacerlo con sinceridad y algo seguro pasará.
Cuando las nueve noches del trabajo terminan dice:
"Madre mía, encomiendo este caso en tus manos, pido que se haga
tu santa voluntad para bien de mi Obra Espiritual".
P. Jesús el Cristo dijo: "Al que tiene le será dado y al que no

tiene hasta lo que tiene le será quitado". ¿Qué es lo dado y que
lo quitado y por qué?. ¿Esto sucede también en el caso de los
gnósticos?
R.- Al que más méritos o Dharma tiene más le será dado y al

que menos méritos tiene lo poco que tiene le será quitado.
No hay duda de que esto parece injusto. Nosotros como
externos no conocíamos la ley del retorno y recurrencia, del
Dharma y del Karma, pues no sabíamos que lo malo que hicimos
en vidas pasadas lo tenemos que pagar en esta, pero las buenas

obras que hacemos son recompensadas por los Jueces de la Ley.
P.- ¿La mujer gnóstica que no es Isis consagrada, pero lo es

por Naturaleza, cuando está menstruando tampoco debe
encender la luz en el altar de su hogar, ni hacer prácticas para
salir en astral?
R.- Eso es cierto, toda mujer es Isis y toda mujer, aunque no haya
sido consagrada como Isis, si es una verdadera estudiante gnóstica
y si puede hacerlo en su hogar, debe tener un pequeño altar con
un candelabro de tres velas, un pentagrama, un Cristo y dos
floreros pequeños, donde pueda hacer sus oraciones.
Pero, cuando esa mujer, sea Isis o no, tiene el periodo no
debe encender las velas, porque es un simbolismo que se debe
respetar, eso no quiere decir que no puede hacer practicas para
salir en cuerpo astral. No debe hacer practicas relacionadas con
la alquimia o transmutación como soltero o casado,
vocalizaciones o cadenas, pero si puede realizar practicas para
salir en astral.
P.- Si la Cruz la lleva el hombre ¿qué lleva la mujer?
R. En la cruz están contenidos los principios de la mujer y del

hombre. El madero vertical representa al hombre, que posee el
elemento fuego y el elemento tierra; el madero horizontal
representa a la mujer, como expresión del elemento aire y agua.
La cruz es el símbolo de la redención y si el hombre se
redime la mujer también lo hace. Es importante reconocer que
la mujer tiene más fuerza y capacidad del hombre para soportar

esa cruz.
El hombre se carga la cruz en los Templos de Misterios
cuando alcanza su nivel necesario, porque como varón representa
en la Tierra la fuerza masculina y por lo tanto al Cristo. La mujer
es la representación de la parte femenina y encarna el papel de la
Madre que gesta al “Hijo del Hombre” en su propio útero divino y
lo levanta y acompaña en su Vía crucis para realizar su Obra
Espiritual. El varón cuando carga la cruz alrededor del Templo, lo
hace frente al altar que simboliza a la mujer en este acto místico de
gran significado oculto. Son dos papeles distintos que convergen a
un solo punto: La Autorrealización Intima del Ser.
P.- Se dice que el matrimonio es una dura prueba que

debemos pasar, ¿quiere decir que cuando éste fracasa, fracasa
también esa prueba?
R.- Cuando un matrimonio fracasa las consecuencias recaen en

los dos, porque un hombre y una mujer se unen bien sea para crear
un hijo de carne y hueso, para formar en su corazón al Cristo
Intimo o las dos cosas.
Si fracasan no logran esa meta y por supuesto, este hecho
representa un inconveniente lamentable. ¿Que se puede hacer si
los integrantes de un matrimonio, que han probado de todo para
salvarlo no han podido remediarlo?
No quiero aconsejar divorcios, es lo peor, eso es terrible
pero a veces los divorcios también son permitidos dependiendo
de las causas que los producen.
P.- ¿Cómo puede una mujer que conserva su energía, ayudar

al hombre a que no la pierda?
R. El V.M. Samael Aun Weor nos habla de que en los tiempos

antiguos existían dos personajes que se pusieron a trabajar en la
alquimia, la mujer lo hizo bien y el hombre mal, la mujer se
transformó en un Arcángel y el hombre en un demonio
terriblemente perverso. Lo importante para la dama es que ella no
pierda su energía. Si el hombre se cae a voluntad allá él.
En el caso muy diferente de los varones que quieren
realizar bien la práctica, pero lamentablemente, se caen cuando
van al acto, debemos aclarar que su causa principal estriba en la
Eyaculación Precoz, producto de una disfunción de tipo psico
somática, esto hace que el hombre pierda su energía solamente
con acercarse o tocar a la mujer.
Este problema debe ser tratado con remedios naturales y
con trabajos de teurgia. Los esfínteres del varón están muy
débiles, no tienen consistencia y no logran sellar el conducto
espermático para impedir que el impulso de la energía lo
sobrecargue produciendo la pérdida del Ens Seminis.
La persona que sufre de este inconveniente debe practicar
diariamente un ejercicio en posición de cuclillas, apretando
fuertemente los glúteos y luego soltándolos para permitir que los
esfínteres se vayan fortaleciendo; esta práctica debe hacerse
diariamente por meses seguidos y a veces por años enteros.
Es necesario además, realizar trabajos de teurgia en el
paciente con el elemental del “Cedro” y por medio de imposición
de manos, utilizando la energía magnética de los vórtices de las
manos, unida a una perfecta concentración en su Tercer Logos
Individual.
Estas personas tienen que evitar las carnes rojas y todo

alimento que induce a excitar la energía con sus componentes
afrodisíacos.
P.- Cuando tengo miedo siento excitación sexual; ¿Me puede

explicar por qué?. Nunca he tenido experiencias sexuales.
R.- Él yo del miedo, el que maneja ese cuerpo en determinado

momento tiene a la lascivia como una de sus formas de expresión
que se manifiesta con una sensación de placer sexual. Esto lo
siente el ego del miedo y transmite en ella parte del mismo. La
persona que hace la pregunta debe evitar que ese yo invada su
mente, utilizando trabajos de Teurgia con el elemental del Fique,
como lo indica el V.M Samael en sus libros, porque este hecho le
causa daño ensuciando sus centros, cada vez que ese elemento
entra en acción con sus vibraciones densas y malignas. Debe
además, pedir auxilio al Logos Samael, el Señor de la Fuerza para
que le permita superar ese obstáculo en su camino.
P.- ¿Si una mujer se divorcia, puede ser Isis?
R.- Cuando una Isis se divorcia debe durar un tiempo prudencial

alejada del altar del Lumisial; ella misma debe pedir un tiempo de
reflexión, por ejemplo un año. Pero luego, si demuestra que su
actitud frente a la vida ha sido equilibrada, puede tomar
nuevamente ese cargo.
Ahora, si esa mujer no era Isis y se ha divorciado, lo ideal
es que no se consagre hasta que haya reconquistado su paz
interior y se haya ganado ese mérito por su seriedad y obediencia
hacia Dios y la doctrina del Salvador del mundo.
P.- ¿Son dañinos los tintes para el cabello, me están saliendo

canas y no me gustan, qué puedo hacer?
R.- A la mujer le agrada aparecer bien presentada ante la

sociedad y esto lo consideramos justo. Podemos decir que con el
tinte del cabello no se daña la energía. Si una mujer usa el tinte en
el cabello que le maquilla las canas y le proporciona una mejor
apariencia, pero al mismo tiempo se dedica a realizar sus
prácticas de transmutación, se comporta adecuadamente y cumple
con sus compromisos tanto de su hogar familiar como de su hogar
gnóstico, se Auto realiza aún teniendo los cabellos pintados. Si se
quiere pintar el cabello trate de usar un tinte natural, sin
elementos tóxicos y no lo haga durante el periodo menstrual,
para evitar inconvenientes de salud.
P.- ¿Qué debo hacer para no ser tan indecisa?
R.- El V. Maestro Lakhsmi nos decía una vez en una reunión, que
cuando alguien siente el impulso interno de realizar algo en
particular es recomendable que lo haga de una vez, porque de lo
contrario, surge la indecisión. Esta es el producto del
desequilibrio emocional ocasionado en nuestro universo interior
por los malos manejos de nuestras vidas pasadas.
El Ser en nosotros sabe con certeza qué hacer en un
momento dado y sin vacilaciones. Él, continuamente, nos
comunica a través de las corazonadas las respuestas apropiadas,
pero muy raras veces llegan a nuestros sentidos físicos porque los
hemos dañado con nuestras malas actuaciones y hemos perdido la
sensibilidad humana que nos une a nuestro Padre bien amado.
P.- Tengo un hijo con el vicio del cigarrillo y del café, ¿cómo
puedo ayudarlo para que los deje?
R.- Tomar un café no es nada grave, el Maestro Huiracocha habla

del café como una planta sagrada. Sin embargo, como todo tiene
su medida, cuando abusamos de esta bebida se transforma en un
vicio terrible que produce adicción con sus consecuencias tan
negativas para la salud.
En cuanto al cigarrillo lo consideramos un problema mas
grave. Es importante tratar de quitarle a su hijo la ansiedad, ya
que ésta lo induce a fumar. Para ayudarlo es recomendable que
empiece a consumir té de plantas relajantes como la pasiflora, tilo,
manzanilla, limonaria, valeriana, etc., que permitan disminuir la
ansiedad y esto le ayudaría a reducir la necesidad de fumar y
tomar café en exceso. Es importante además, informarle que esos
productos le traen muchos inconvenientes de salud.
Si quiere ayudarlo con más interés, es conveniente que
usted como madre se dirija a un árbol sagrado de Pino, el cual
tiene un elemental poderoso relacionado con la Mente Universal
y posee la facultad de influir en el comportamiento de cada ser
humano, si la Ley así lo permite. Se acerca con fe, luego le hace
un círculo con una rama del mismo árbol, caminando alrededor
del mismo, se coloca frente al pino y lo bendice en el nombre del
Padre, del Hijo, del Espíritu Santo y del Tetragrámaton, luego, con
una mano apoyada al árbol se concentra en su Ser Interno y le
pide: “Padre mío, te ruego que me pongas en contacto con mi
intercesor elemental para que el se comunique con el elemental de
este árbol para que me escuche y obedezca, de acuerdo a la Ley
Divina”. A continuación pide que su hijo sea ayudado y deje el

vicio del cigarrillo y del café.
P.- ¿Y para el alcohol?
R.- Para el vicio del alcohol es necesario conseguir las cáscaras

de naranjas cosechadas de algún árbol de “naranjo agrio”, al cual
le hace el mismo círculo mágico y procedimiento enseñado con el
árbol de pino, luego le pide al elemental que emplee sus poderes
ígneos y que la persona deje de tomar licores. A continuación
cosecha alguna naranja, le quita la cáscara y la pone a tostar al sol
o en un horno a temperatura muy baja.
Luego la muele, transformándola en polvo que se
mezclará con el licor o la cerveza que normalmente toma esa
persona. Cada vez que el paciente se disponga a tomar, usted le
pide al elemental del naranjo que actúe internamente con la
finalidad de ayudar a superar este terrible vicio.
El elemental entra en acción produciendo en él nauseas y
malestares diversos. Cada vez que quiera tomar sentirá lo mismo
hasta quitársele el vicio. Muchas personas se han curado con este
método sencillo y efectivo, porque han tenido el merecimiento de
ser liberados de ese terrible defecto y enfermedad llamada
alcoholismo.
P.- Mamá está enferma en estos momentos, yo he tratado de

darle la medicina natural porque pienso que es la mejor, pero
ella desde que entré a la Gnosis me rechaza, me dice que me
aleje con mi medicina para otro lado, para mí como Isis es un
momento duro, ¿Qué me aconseja Ud. y qué debo decirle a
ella?
R.- Simplemente decirle que esa medicina puede curarla y que si

no se la toma su situación se puede agravar. Puede dirigirse al
elemental de un árbol de granado, hacer lo mismo que explicamos
anteriormente con el caso del pino y del naranjo pidiendo a ese
elemental que cambie la forma de pensar y actuar de su mamá
para que acepte tomar esa medicina que usted con tanto amor le
ofrece, para que se cure. Pero, si no hay permiso de la Ley Divina,
el elemental llega al lugar donde se encuentra la persona y no
actúa. Lo importante es cumplir con el deber y Dios sabrá hacer el
resto.
P.- Tengo 3 años en la Gnosis y me pasa lo siguiente: al

entonar el Himno del Avatara de Acuario y cuando se inician
las conjuraciones comienzo a bostezar. Lo más extraño es que
normalmente nunca bostezo, al igual que en las conferencias,
después de las cadenas o en la misa, es horrible el sueño que
me da, inclusive me duermo parada. Le he rogado a mi Madre
Divina pero nada, además tengo problemas con mis hijos,
hasta me llaman loca, me tratan como si fuéramos enemigos,
no me respetan.
R.- A la hermana que hace la pregunta es conveniente hacerle un

trabajo de teurgia, porque esa sensación que tiene, esa pesadez,
ese sueño es un fluido que está adherido a su parte vital, muy afín
con ella y cuando actúa le sucede ese fenómeno.
En estos casos un trabajo de teurgia con los elementales de
la Tierra y del Agua, utilizando los exorcismos correspondientes,
cae muy bien. Es recomendable enterrar la persona, dejando
descubierto sólo el rostro y al mismo tiempo hacer el exorcismo
de la Tierra pidiendo a los Gnomos y Pigmeos que practiquen

poderosos trabajos de limpieza en el cuerpo físico e interno de la
persona, eliminando todo fluido y fuerza negativa adherida a ellos.
Deberá permanecer enterrada por un mínimo de 30 minutos.
Luego debe sumergirse en el agua hasta el cuello,
preferiblemente en el mar o en un río, pidiendo a las Ondinas y
Nereidas despejar su atmósfera, eliminando todo fluido perjudicial
y trabajo de hechicería que se haya hecho en su contra.
En cuanto a los hijos que no la respetan, cuando son
rebeldes y malcriados puede hacer un trabajo de Teurgia con el
Cedro, utilizando el mismo procedimiento enseñado
anteriormente, ya que este elemental es especialista en eliminar
este tipo de conducta en los niños y en los hijos que ya están
mayores.
Debemos transformarnos en magos de la Naturaleza. El
V.M. Samael escribe en uno de sus libros: “El Mago se dirigirá al
árbol y le ordenara imperiosamente a su elemental que le obedezca
y que ejecute el trabajo esotérico necesario”.
Cuando yo leía estas frases por primera vez me preguntaba
¿Cuáles son los Magos a los que se refiere el Maestro? Pensaba
que eran los Iniciados de muy alto nivel esotérico, pero con el
tiempo descubrí que somos nosotros mismos, que con el auxilio de
nuestro Ser, quien es el Teúrgo, podemos hacer milagros.
Normalmente nos preguntamos: ¿Qué Mago voy a ser yo,
si nada he hecho? Realmente el Mago es nuestro Ser Interno.
Es importante entender que el Ser Interno de cada una de
Uds. es un Maestro, que muy probablemente en alguna
oportunidad o época de su evolución se Auto realizó, que estuvo
practicando la magia y conoce a plenitud todos los secretos de la
Naturaleza. Nosotros involucionamos y evolucionamos a través de
los diferentes reinos de la naturaleza y cada vez que fuimos

minerales, plantas o animales, aprendimos los secretos existentes
en esos reinos, por lo tanto nuestra conciencia, nuestra alma y por
ende nuestro Intimo poseen esos conocimientos guardados.
Debemos utilizar las plantas sabiamente. Los elementales
de la zábila, ruda, altamisa, salvia, albahaca, romero, mano de
Dios, fique, guarumo, etc. son maravillosos para realizar trabajos
de teurgia. Practicando con ellos permitimos que nos vayan
conociendo y se familiaricen con nosotros, de manera que hablen
y comenten entre ellos que los usamos y somos sus amigos.
P.- Me salen muchos vellos en las piernas y en las axilas y

hay hermanas gnósticas que recomiendan no quitárselos.
¿Usted que me aconseja al respecto?
R.- Toda decisión que vayamos a tomar en determinado

momento debe ajustarse siempre a la lógica. En el caso suyo le
recomiendo que se quite esos vellos porque se ven
desagradables ante las miradas de los que comparten con usted
la existencia en el planeta que nos alberga. Le recomiendo
quitárselos con algún sistema que no sea químico, ni por medio
de la desintegración del bulbo capilar con rayo láser y le aseguro
que, después de esto se sentirá más liviana y tranquila consigo
misma.
P.- Soy muy joven y me encanta vestirme a la moda y llevar

minifaldas. ¿Cree Usted que estoy actuando mal?
R.- Cada quién es libre de vestirse de acuerdo a su voluntad,

pero como pertenecemos a una escuela de regeneración y a un
Colegio de Iniciados, es nuestro deber, si de verdad anhelamos

un progreso en el campo espiritual, acondicionar nuestra
conducta de acuerdo a ciertos cánones. Debemos evitar el
fanatismo pero tampoco podemos imitar a las personas de la
sociedad que desconocen o no aceptan nuestra doctrina. El
equilibrio es lo más sensato. Si le gusta llevar la minifalda,
que no sea demasiado corta, pero cuando visite el Santuario
Gnóstico hágalo con mucha decencia para honrar a su Bendita
Madre que desde su corazón espera por su enmienda y regreso
al seno del Padre.
CAPITULO IX
LA SEMANA SANTA Y LA MUERTE EN MARCHA

La Semana Santa debe ser para nosotros, los estudiantes

de una sabiduría tan hermosa como la Gnosis, un
acontecimiento que vaya más allá del mero concepto histórico
de la Crucifixión y Resurrección de un hombre llamado Jesús
de Nazaret o Maestro Jeshuá Ben Pandira, quien logró coronar
la Obra correspondiente a los trabajos de Hércules en la
Segunda Montaña de la Iniciación, conquistando en ese proceso
el nivel zefirótico de Chomah “El Cristo Cósmico”.
La historia de ese evento profundamente asombroso
conocido por todos los cristianos, es válida para la inmensa
mayoría de la sociedad que desconoce los secretos del ocultismo
pero no para nosotros, quienes hemos tenido la hermosa
oportunidad de conocer la enseñanza gnóstica que nos ha abierto
el Libro Sagrado de los Misterios y nos ha entregado claves
extraordinarias, que practicadas y utilizadas en la forma
apropiada y correcta, le permiten a nuestra conciencia captar el
hondo significado de cada uno de los eventos de la vida.
Cuando éramos niños, la Semana Santa se
conmemoraba en los pueblos y ciudades de los diferentes países
del mundo con inmensa fe y devoción, lamentablemente hoy en
día esta semana tiene poco de Santa.
La sociedad se ha dejado influenciar demasiado por el
materialismo, por el yugo del Anticristo que, a través de la
Ciencia y la Tecnología, las cuales han realizado grandes
prodigios en estos últimos años, han inducido a la humanidad a
creer que Dios y la Divinidad son simplemente una leyenda o
una creencia inventada por nuestros ancestros, para someter y
dominar a los pueblos de esa antigua época.
Conocí a muchos jóvenes que sentían vergüenza de

entrar a una iglesia a orar, a encontrarse consigo mismo, a
dialogar con Dios, como lo enseñan algunas religiones.
Conozco a muchos jóvenes que ni siquiera tienen el
incentivo de leer unas páginas sobre la vida del Cristo, de la
Virgen o simplemente de Religión porque, lamentablemente, la
educación actual está influenciando a esas juventudes y a una
inmensa mayoría de la humanidad en forma extremadamente
negativa.
Por ejemplo, hasta hace algunos años, cuando los
campesinos o pobladores de cualquier ciudad, veían aparecer el
Arco Iris sentían hacia él admiración, respeto y hasta cierto tipo
de veneración, porque comprendían que en los siete colores
develados en su composición, está representada la imagen viva
de Dios en forma física, mostrándose a la humanidad, para que
evidencie la existencia de un hecho sagrado que está más allá de
nuestras posibilidades de comprensión.
Desafortunadamente, los científicos en estos últimos
años nos han informado y es cierto, que el Arco Iris es el
producto de un fenómeno natural de las lluvias, durante las
cuales las nubes forman un prisma con las múltiples moléculas
de agua presentes y que la luz proveniente del sol, se refracta en
ese prisma, dividiéndose en los siete colores primarios que la
componen.
Con esta explicación, la casi totalidad de la humanidad
ha sido convencida de que en la imagen extraordinaria y
asombrosa del Arco Iris no se evidencia la presencia física de
Dios, sino sólo un fenómeno natural y normal.
Nosotros aceptamos esta explicación técnica y científica,
pero estamos convencidos de que su realidad oculta es otra; esta
representa la expresión de Dios que a través de los fenómenos

mecánicos de la Naturaleza llega de las diferentes dimensiones,
para hacerse visible y tangible a nuestros ojos físicos y a nuestro
entendimiento espiritual.
Cuando el hombre de antes escuchaba retumbar el trueno
durante una lluvia copiosa, asociaba este hecho con la voz
terriblemente divina de Dios, dirigida a llamar su atención. En
el comienzo de la novena Sinfonía de Beethowen, Obra sagrada
del Templo de la música, la mezcla sublime del agudo bajo y del
poderoso trombón, irrumpe con tono imperioso en el escenario
de la existencia, imitando la voz del Padre que le habla
severamente a su Hijo, el Alma Humana, cuya naturaleza débil y
soñadora es expresada por el violín y el violonchelo, llamándola
a la reflexión y al trabajo espiritual, como lo hace también el
padre físico con su amado hijo carnal.
El rayo o relámpago, era considerado como otra
manifestación del poder inconmensurable del Dios Padre, capaz
de fulminar o fundir cualquier cosa que apenas rozara.
Pero estos fenómenos tan relevantes de la Naturaleza,
han sido reducidos por los científicos a un simple choque de
nubes cargadas de iones con signos opuestos.
No lo negamos, pero seguimos insistiendo en que Dios
utiliza este mecanismo para manifestarse y producir cierta
atmósfera de reflexión y respeto en el ser humano, tan necesaria
para su correcto comportamiento como tal.
Estos ejemplos nos recuerdan el concepto científico de
que todas las enfermedades hereditarias son producto de la
genética transmitida por nuestros progenitores, sin tomar en
cuenta que la Ley Divina utiliza estos medios para hacer cumplir
la ley del Karma en la humanidad.
Nadie tiene el derecho de desconocer la presencia

permanente de Dios en cada acto de nuestra existencia. Solo es
necesario sensibilizar un poco nuestro aspecto anímico para
detectar con asombro que estamos acompañados constantemente
por una Fuerza Universal Superior, a la cual la humanidad de
estos tiempos decadentes no reconoce como algo Real, sino
como una simple fantasía.
Unas de las razones principales de la involución de
nuestra especie consiste en que esta ha perdido la fe en Dios y
el respeto incondicional hacia su presencia.
Debemos tener en cuenta continuamente la existencia
de una Ley Superior, comprendiendo al mismo tiempo, que el
final de todas nuestras humanas posibilidades llega cuando
caemos en la fatal anarquía.
Indudablemente el hombre antiguo poseía la sensibilidad
necesaria para tener, aunque fuese, temor a Dios, pero
actualmente la humanidad la ha perdido casi por completo
creyendo que Dios es únicamente una “Leyenda” del pasado.
No es fácil concientizar a la gente sobre la presencia del
Creador en todas las cosas vivientes. Nuestra sociedad ha
llegado a los límites de la degeneración, ella ya no siente respeto
ni fe en Dios y este hecho ha producido su carrera involutiva
porque ha dejado de creer en los Maestros, en los Profetas y en
las enseñanzas dejadas por los Mensajeros de la Luz.
Nosotros reconocemos por convicción objetiva, la
existencia de Dios, desdoblada en esa fuerza maravillosa
denominada el Crestos Cósmico y en la presencia divina de la
Bendita Madre Naturaleza, quién cuida de aquellos hijos que
todavía la respetan y veneran.
Es esencial comprender que ese proceso tan asombroso y

maravilloso de la Semana Santa, enseñado a la humanidad por el
V. M. Jeshua Ben Pandira hace dos mil años, representa un
acontecimiento con un enorme sentido real no solamente en
esta fecha, sino en todos los días de nuestra existencia, porque
expresa ante todo la muerte y la resurrección de nuestras
partículas anímicas internas, procesándose de instante en
instante en el incesante movimiento de la vida.
Una persona, dedicada al camino de la Iniciación, a su
transformación psicológica interna, a su propia regeneración
individual y espiritual, está muriendo de instante en instante en
sí mismo y, sin sombra de duda, conquistando a la vez un
espacio muy codiciado en el infinito escalafón de la perfección.
Todo lo que muere permite que surja como por encanto
un nuevo nacimiento manifestado a través de la resurrección de
las partes anímicas contenidas en ese cuerpo que se está
desintegrando, sometido a un proceso de continua e indetenible
transformación.
Es necesario recordar el trabajo de la muerte y
nacimiento que debemos realizar como estudiantes gnósticos de
momento en momento, día tras día, para acercarnos en forma
acelerada a esa meta tan anhelada por nosotros, sintetizada en la
conquista de nuestro Ser Interno.
Hemos comprendido a través del tiempo que la dificultad
más grande, presentada por el Pueblo Gnóstico para su
emancipación espiritual, estriba en la Muerte Mística.
El Maestro Samael escribió volúmenes enteros sobre este
tema; el Maestro Lakhsmi ha entregado sus fundamentos por
medio de múltiples conferencias dictadas en diferentes países
del mundo, pero en realidad, el denominador común entre
nosotros los estudiantes gnósticos, consiste en no haber

aprendido a morir en nuestros defectos.
Si hubiéramos comprendido a cabalidad la forma de
morir místicamente, el avance del Pueblo Gnóstico en general
sería muy diferente al conseguido hasta la presente fecha.
La dificultad más grande presentada por nuestro

entendimiento mental e intelectual radica en como descubrir
el método apropiado de comprender un defecto para su
eliminación definitiva.
El Maestro Samael explica con mucha insistencia, la

importancia indiscutible e indispensable de comprender en los
cuarenta y nueve niveles de la mente el defecto que queremos
eliminar, para poder morir en nosotros mismos.
Este concepto irrevocable lo hemos leído todos
reiteradamente, pero también nos hemos preguntado: Si no
tenemos capacidad para comprender un defecto en el primer
nivel, porque no sabemos dónde está ese nivel, ¿cómo vamos a
comprenderlo en los cuarenta y nueve niveles de la mente, y
además, qué significa comprender un defecto?.
Es necesario primero analizar cuáles son los cuarenta y
nueve niveles de la mente para poder comprender un defecto.
El Maestro Samael enseña que el hombre es séptuple en
su constitución interna. Por otro lado, cada cuerpo posee siete
niveles de la mente; si multiplicamos esos siete niveles por los
siete cuerpos que conforman al ser humano, tendremos como
resultado los cuarenta y nueve niveles.
Si el estudiante gnóstico se sienta en un cómodo sillón y
se ubica en un solo punto, preferiblemente el Templo Corazón,
centro de nuestro sistema solar interior, tendría alineados sus

siete cuerpos en un mismo espacio abstracto y, por ende, los
cuarenta y nueve niveles que los conforman.
Si durante esa práctica espiritual somete a análisis algún
defecto psicológico, lo estará ejecutando al mismo tiempo en los
49 niveles de la mente.
Si se distrae por alguna razón, la fracción de conciencia
despierta que el estudiante utilizaba para realizar el ejercicio,
sale envuelta en sus cuerpos internos transportándose
instantáneamente al lugar donde dirigió su imaginación,
quedando en la silla únicamente el vehículo físico en posición
de descanso.
Obviamente en estas condiciones es imposible
comprender un defecto. No debemos olvidar que para lograr un
objetivo superior es indispensable realizar un entrenamiento
constante, adaptando nuestros órganos y costumbres personales
a la nueva modalidad de vida escogida por nosotros para la
presente existencia.
Nada se nos da por regalado, menos aún cuando de la
conciencia se trata, ya que ella encierra dentro de sí enormes
poderes sobrenaturales. Si queremos dominar y utilizar estos
poderes es imperativo vencer antes las tentaciones y las
debilidades producidas por el desagradable ego.
Sintetizando este concepto, podríamos decir que para
comprender un defecto en los 49 niveles de la mente,
necesitamos estudiarlo en forma concentrada, con mente serena,
sin distracciones, con la presencia del porcentaje de conciencia
que poseemos despierta (BODDHISITA) y con el auxilio
imprescindible de la Divina Madre KUNDALINI, Maestra en
nuestra aula de estudios espirituales, donde nos enseña desde el
abecedario esotérico, hasta leer los extraordinarios archivos de

la Naturaleza y los jeroglíficos inmortales esculpidos en la
Creación Universal.
“Comprender significa arrepentirse en lo más hondo

de la conciencia”.
Toda persona que estudia un defecto y se siente

profundamente arrepentido de poseerlo, porque está siendo
causa de su mal comportamiento, estará comprendiendo ese
defecto en todos sus aspectos.
Todo estudiante serio de la senda, que en un momento
determinado se ubica o se concentra en un trabajo de
meditación, logrando sentir en lo más profundo de su soledad
interior el arrepentimiento sincero por poseer determinado
defecto, indiscutiblemente lo estará comprendiendo en todos los
niveles de la mente, porque se encuentra ubicado, lejos de
alguna posible distracción y todos los cuerpos se encuentran
alineados y, por ende, lo estarán también los cuarenta y nueve
niveles de la mente.
En estas condiciones ese defecto se encontrará en las

circunstancias ideales para ser desencarnado y reducido a
polvareda cósmica, como lo enseña el Maestro, significando su
desintegración y regreso a su manifestación original, compuesta
por la materia prima con la cual se edifica la Mente Universal
junto a todas sus hermosas u horribles creaciones.
Cuando un defecto es comprendido, la conciencia
atrapada en él se libera y el cuerpo que lo envolvía queda
reducido simplemente a un cadáver desprovisto de la vida; esta
vida se la daba nuestra sufrida e inocente esencia. La Madre

Divina Devi Kundalini puede desintegrar ahora a ese cascarón.
La Madre elimina los cadáveres, Ella no mata a quien
aún posee vida. La comprensión de los defectos permite la
liberación de la esencia contenida en ellos, con la consecuente
desencarnación del agregado.
Cuando se siente el arrepentimiento de tener
determinado defecto o, para decir lo mismo, cuando este
elemento no deseado se ha comprendido, estamos en las
condiciones de pedirle a la Madre Devi Kundalini de utilizar su
poder ígneo para desintegrar ese agregado, con la finalidad de
evitar que resucite como el Ave Fénix, en cualquier eventual
descuido o durante nuestras diferentes actuaciones equivocadas
de la vida. Lo ideal para avanzar rápidamente en el camino sin
retroceder, es no cometer más errores.
Es necesario saber que todo defecto existente en nuestro
mundo psicológico está asociado a otros con características
afines, los cuales pueden hacer resucitar el cadáver del defecto
desencarnado, si este no es eliminado, y con ello perder el
esfuerzo realizado para ejecutar el trabajo correspondiente. Por
eso la importancia de la práctica constante, hecha siempre con
el auxilio de la Madre, sin la cual sería imposible siquiera
intentar cualquier acción dirigida a la muerte psicológica.
Si por determinada razón volviéramos a cometer algún
error relacionado con ese defecto desencarnado y la Madre no
hubiese desintegrado el cuerpo del pecado o cadáver, se
correría el riesgo de entregarle nuevamente conciencia y
resucitarlo.
La Muerte y la Resurrección son procesos que vivimos
de instante en instante. Lo esencial es llegar a encarnar algún día
a nuestro Cristo Intimo para que El también pueda realizar el

milagro de la Semana Santa en nuestro mundo interno, donde
se crucifica en pro de redimir nuestro micro universo personal y
finalmente muere para inmolarse y salvarnos, resucitando luego
de entre los muertos para seguir realizando ese trabajo de
purificación de nuestros “establos” con el “báculo del poder”,
recorriendo el camino que ha de llevarnos algún día a encarnar a
nuestro Padre Interno Bien Amado, con augusta y dichosa
alegría.
La Muerte Mística debe transformarse para nosotros en
el pan de cada día. Si un estudiante gnóstico quiere progresar
espiritualmente debe dedicarle tiempo al sacrificio que exige la
“Muerte Mística”.
Los solteros, preocupados, se preguntan continuamente:
¿cómo hacer para lograr la muerte en sí mismos, si el Maestro
Samael ha explicado que la desintegración de los defectos está
asociada al trabajo en “La Forja de los Cíclopes” o “ Trabajo
Alquímico?”.
A esos inquietos buscadores de lo oculto, queremos
aclararles este tema tan esencial. El V. Maestro Samael escribió
que todo soltero puede eliminar hasta el 50% de sus propios
defectos.
Nadie, ni los casados, ni los solteros pueden desintegrar
las cabezas de legión, representación de los “Generales” al
mando de los ejércitos de demonios, producto de nuestras
propias creaciones, hechas hace siglos o en nuestra vida actual.
Sólo el Cristo, cuando nace en el corazón del Iniciado y se hace
hombre en el recorrido del sendero de la purificación, podrá
matar con su espada flamígera, algún día, a esos jefes de
legiones simbolizados por los “Siete Pecados Capitales”.
Muchas personas serias, con varios años tratando en

verdad de hacer esfuerzos para morir en la lujuria quedan
defraudados, sintiéndose inútiles, porque temen haber perdido
el tiempo. Creen que con la desintegración de los diferentes
defectos asociados a la legión de la lujuria ese ego va a morir,
pero esto no resulta tan fácil porque, repetimos, la lujuria como
cabeza de legión, no puede ser desintegrada por quienes estamos
en un nivel Iniciático inferior al requerido para esta hazaña de
inigualable proporciones.
Nosotros podemos eliminar, de ese complejo de la
lujuria, de esos hipotéticos pequeños soldados, de esa legión
compuesta por miles de defectos asociados a la lujuria, el yo de
la masturbación, vicio espantoso que daña y adultera la energía
con terribles ondas mentales, producto de la imaginación lasciva
del practicante; el otro yo que induce a mirar películas
pornográficas, e impulsa después a observar a las damas que
pasan por las calles en forma morbosa, invitando a imaginar
escenas de lascivia con alguna mujer, quien representa la parte
divina de Dios en su aspecto femenino.
Los Maestros nos han enseñado a aplicar como norma,
cuando nos encontramos con alguna dama bien presentada o
con cualidades sensuales y provocativas, de colocarle un velo en
su cuerpo, utilizando para ello nuestra imaginación,
mostrándola a nuestros sentidos físicos como una Isis ó una
Vestal del Templo de Dios, para neutralizar el mal pensamiento
que pudiera aflorar en nosotros.
En síntesis diremos: podemos eliminar de nuestro
interior únicamente los vicios, las malas costumbres y los
hábitos negativos, mientras llega el verdadero artífice de la
Obra, representado por el Hércules mitológico de los clásicos

griegos.
Se puede eliminar el defecto de fumar, que dopa con la

nicotina y transforma en dependientes del tabaco a quienes lo
hacen; el vicio de tomar licores que hace perder los estribos y
el equilibrio humano; la costumbre de tomar café en exceso
para mantenerse despiertos en este mundo que exige velocidad;
el ego que utiliza prácticas de lascivia; la mala costumbre de
hablar con un lenguaje vulgar; el hábito de ver tanta televisión,
de identificarse con los partidos de fútbol, béisbol, con las
novelas, con los partidos políticos; la costumbre de visitar cines,
discotecas, bares, lugares de bajo nivel moral, etc.; la pésima
práctica de denigrar del prójimo, de la familia, del gobierno y de
los amigos; el chisme y los falsos testimonios; el lenguaje de
doble sentido que engendra dragones y alimañas psíquicas en
nuestra aura; el vicio de robar, mentir, aparentar; el crimen de
matar las criaturas silvestres del bosque y de la naturaleza en
general; el pésimo sentimiento de desear las mujeres y las cosas
ajenas que no le corresponden y solo pueden traer ruina y
desolación; el hábito de alimentarse en forma incorrecta como
estudiantes de una doctrina de regeneración; imaginar cosas
como riquezas, dones, poderes, etc.
El requisito indispensable para despegar del piso

psicológico en que nos encontramos consiste en comenzar de
cero y aceptar que somos nada de verdad; en rectificar nuestra
actitud errada; en confirmar nuestras enseñanzas; en repasar lo
que hemos aprendido hasta ahora y comprender que el trabajo
Iniciático, ese proceso tan exigente de regeneración,
indispensable en nuestra vida, comienza en este mismo instante.
A los solteros les sugerimos morir en sí mismos a través

de esa práctica maravillosa que nos dejó el Maestro Samael
denominada: “La Muerte en Marcha”.
Toda persona, desde el momento de levantarse de su
cama, debe encomendarse a su Ser Interno, a su Bendita Madre
Devi Kundalini, pidiendo que le cuide en todo momento y
vigilen las acciones de su diario vivir.
Es injusto para el estudiante gnóstico levantarse de su
cama sin acordarse de su Ser, de entregarse a Él junto a la vida
que se dispone a experimentar en ese día, a partir del instante de
iniciar sus actividades.
Una vez en la calle nos encontraremos frente a frente a
las múltiples legiones que andan deambulando y tendremos la
posibilidad de vernos y reconocernos en nuestro propio espejo.
Todo lo existente en el mundo exterior tiene su reflejo en
nuestro interior.
Es probable que algún transeúnte choque o se comporte
en forma poco decorosa con nosotros y que el yo de la ira aflore
de improvisto. Este hecho podría provocar en nosotros el deseo
de decirle algunas palabras descompuestas y en casos peores,
hasta de responderle con las manos.
Pero nuestro deber, como estudiantes de la Gnosis y
seguidores de la práctica de “La Muerte en Marcha” es
recordarnos al instante de nosotros mismos y preguntarnos:
¿Será mi Ser el que está actuando de esta manera o el yo
psicológico que poseo?.
Haciéndonos esta simple pregunta, el mal pensamiento
que había aflorado en nosotros será neutralizado.
Seguidamente es necesario apelar a nuestra Madre Devi
Kundalini y utilizando las energías creadoras, debemos realizar
una minúscula pero efectiva práctica de transmutación

instantánea, donde absorbemos las energías de nuestras gónadas,
las enviamos hasta el cerebro y finalmente a nuestro corazón,
para luego proyectarlas a manera de un rayo de color azul a ese
yo psicológico que imaginamos está fuera de nosotros, el cual
lo envuelve y lo desintegra, pidiendo a la vez a nuestra Madre
Divina Devi Kundalini la gracia de impedir que la expresión de
ese ego se manifieste nuevamente en nuestra mente.
Lógicamente si a los pocos pasos, después de haber
realizado la práctica anterior, nos vemos envueltos nuevamente
en el ambiente del mundo que nos rodea y volvemos a chocar
con otro individuo y aflora en nosotros el mismo elemento
negativo, es lógico preguntarse: ¿Si yo había pedido a mi
Madre Divina su desintegración, porqué está vivo todavía?.
Duramos miles y hasta millones de años para formar
esos “yoes”, darles vida y fortificarlos, entonces: ¿Cómo
pretendemos exigir la muerte de determinado defecto en un
minuto? Este trabajo debe hacerse de instante en instante para
que el ego vaya debilitándose y muriendo, poco a poco y al
mismo tiempo aflorando en nosotros la virtud opuesta.
Siguiendo con la Muerte en Marcha, cuando recorremos
las calles, tal vez para ir al trabajo y nos encontramos con una
dama hermosa caminando frente o al lado de nosotros con paso
tentador, de aquellas que usan esas minifaldas que tanto agrado
infunde en los hombres, por supuesto que aflora en la mente un
nuevo ego, el de la lujuria, de la pasión, de la lascivia, etc.
No es necesario esperar llegar a casa para hacer una
meditación y estudiar este caso. En ese mismo instante debemos
reflexionar y preguntarnos: ¿Estará mi Ser Interno imaginando
esta escena o será mi ego de la lascivia y de la lujuria?
Basta formular esta reflexión para neutralizar ese mal

pensamiento que ha atravesado nuestra mente. Luego se repite
lo planteado anteriormente: Se inhala la energía depositada en
nuestros órganos creadores, se proyecta al corazón y de éste al
defecto en estudio, pidiéndole al mismo tiempo a nuestra
Bendita Madre Devi Kundalini su desintegración.
Es así como a medida que vamos en el taxi o en el
autobús, donde también se sienta la dama a nuestro lado, donde
escuchamos las más extrañas opiniones de muchas personas,
donde sentimos las molestias propias de viajar en un lugar poco
aseado u ordenado, donde nos topamos con las más variadas
expresiones de la costumbre humana, debemos seguir,
inexorablemente, nuestro trabajo de la “Muerte en Marcha”,
para ir logrando al mismo tiempo la meta de la Resurrección.
Existen muchos métodos para alcanzar la Muerte
Mística. Si analizamos la vida común y corriente de la gente
nos damos cuenta que todas las personas vienen al mundo por
un mismo medio, no hay otro aparte que el de ser fecundado en
una matriz humana, gestarse en el vientre de la madre y nacer de
la forma conocida por todos.
En el caso de la muerte, en cambio, sabemos que no
todas las personas lo hacen de la misma manera. Unos
desencarnan por vejez en su cama, otros por infarto, por
accidente vial, de trenes, de avión, otros quemados, ahogados,
hundidos, etc.
Así mismo existen diferentes técnicas válidas para la
Muerte Mística y cada quién debe escoger la más idónea a sus
características particulares. Cada Iniciado posee grabada en sus
cintas teloginoras las técnicas utilizadas en su trabajo cuando lo
ejecutó por primera vez hace miles o millones de años.
Necesitamos encontrar ahora esta cinta en los archivos Akasicos

de nuestra naturaleza interior, con la ayuda de nuestro Santo
Gurú, para restablecer el contacto con ella y sus secretos.
Además de la Muerte en Marcha, que es una práctica
muy eficaz, podemos utilizar como complemento la que
resumimos a continuación:
La persona al llegar a su casa y después de preparar el
ambiente en forma propicia, se sienta en una cómoda silla, se
relaja, se sumerge en meditación y se dirige con la imaginación
al lugar donde se produjo determinado evento, relacionado con
la expresión del Ego.
Revisa minuciosamente cada detalle y trata de observar
el papel ridículo que representó en ese drama de su existencia.
Seguidamente retira esa escena y crea una nueva,
imaginando encontrarse en el mismo drama, pero sin la
presencia del defecto que lo indujo a reaccionar en forma
equivocada.
En este caso, sin el ego de por medio, la reacción hubiera
sido seguramente muy distinta, sus actuaciones habrían sido
aplomadas y serenas, pero a causa del efecto que posee falló en
la prueba y por ende, como ciudadano educado y como miembro
de la doctrina Gnóstica.
Luego realiza rápidamente la comparación de las dos
escenas una y otra vez, hasta producir o sentir arrepentimiento
por haber actuado equivocadamente ese día. El remordimiento
es símbolo de arrepentimiento y demuestra comprensión del
defecto que está siendo analizado.
Seguidamente apela al auxilio de su Bendita Madre Devi
Kundalini y le ruega la desintegración del elemento en estudio.
Una vez analizado, en el caso de los casados, el defecto

será sometido también al trabajo de la desintegración en el gran
Arcano A.Z.F., pero sin llevar el recuerdo del mismo a la
recamara, basta pedirle a la Madre y ella se encargará de
destruirlo.
Su estudio debe hacerse solo y exclusivamente durante la
meditación o en los momentos de la Muerte en Marcha, pero
jamás durante la copula sagrada.
Esto es un pequeño esbozo de la Muerte Mística, la cual
debe ser acompañada de la Resurrección, del rescate de la
conciencia que estaba atrapada en el ego. Este asunto está
relacionado con nuestro nacimiento íntimo, con la formación
del “Hijo del Hombre” en nuestro corazón.
Vamos a vivir la Semana Santa los siete días de nuestra
existencia, hasta que el Cristo Intimo nazca en nosotros, porque
si no lo hace jamás podremos confirmar la Gnosis en nuestro
corazón.
El Cristo es quien nos confirma dentro de la enseñanza o
doctrina, pero no aquel Cristo histórico que nos mostraron las
religiones y los pastores, sino el Cristo compuesto por la
conciencia de cada uno de nosotros, la responsable de crear
nuestra propia Alma Humana, ese “Manas” que todos
necesitamos encarnar para tener la fortaleza física y espiritual de
dirigir el hermoso trabajo de la Iniciación.
Recordemos además, que el Maestro Samael hizo mucho
énfasis sobre la necesidad de la transmutación, tanto como
solteros, para los que no han encontrado todavía su pareja, como
para los casados, en la Alquimia, realizada de forma equilibrada
y perfecta.
No olvidemos que como estudiantes de la Gnosis

tenemos el compromiso con nuestro Ser de realizar la
transmutación de nuestras energías creadoras, pero no solamente
en la práctica del Arcano A.Z.F. Los casados deben también
transmutar sus energías con prácticas de solteros, con
vocalización, ejercicios de respiración, meditación y sobre todo
a través de la inspiración.
Nos preocupa mucho que en las parejas externas, la
mayoría de los hombres, cuando tienen ya varios años de
casados se sienten sin estímulo hacia su mujer, no consiguen ese
incentivo sexual hacia su pareja, entonces se acomplejan y
andan en busca de “otra” para saber si funcionan mejor.
Así mismo sucede con algunas mujeres. Esta situación
ha producido un sin numero de adulterios, acompañados de sus
correspondientes complicaciones de tipo físico, anímico y
espirituales.
Este grave error practicado por los externos, puede
repercutir también en aquellas parejas gnósticas que suponen la
permanencia constante de un fuego sensual que los incentive a
practicar la alquimia todos los días, como lo hacían de recién
casados.
El trabajo alquímico en una pareja que ya tiene diez o
veinte años de casada deja de realizarse todos los días.
Ese fervor que se manifestaba en los primeros días de
matrimonio con relaciones o Trabajos Alquímicos seguidos, se
va convirtiendo luego en otro tipo de energía, se va
transformando en detalles de cariño y de comprensión, motivos
de un amor Platónico, superior y sublime con su
correspondiente inspiración.
Esas prácticas deben realizarse únicamente cuando se

siente la necesidad biológica y deben contribuir a consolidar a la
pareja en una octava superior, aceptando la nueva fase de
experiencia presente en su matrimonio, sin causar la
desintegración del hogar, simplemente por la sospecha que su
pareja no la busca con frecuencia porque, probablemente, tiene a
otra.
Los varones, por su lado, deben erradicar de su mente la
idea equivocada de que ya no sirven, porque no sienten la
misma pasión hacia su mujer como antes, comprendiendo que
se trata de un proceso biológico completamente normal.
Algunos varones empiezan a creer que necesitan
probar en otro lugar su función como tales, arrastrados sobre
todo, por los impulsos del machismo que les infundieron en la
psiquis desde pequeños. Este sería el peor error que un
estudiante gnóstico podría cometer en su vida después de
conocer los principios Crísticos enseñados por la Gnosis, por
relacionarse con el pecado del adulterio, en contra del Espíritu
Santo, “el dador de vida”.
“Todos los karmas podrán ser perdonados menos
aquellos que fueron cometidos contra el Espíritu Santo; estos
solo podrán ser cancelados con profundo dolor y espantosos
sufrimientos”.
Los errores de las personas que conocen los misterios de
la vida y de la muerte son cobrados tres veces por los jueces del
Karma, porque lo hacen a pesar de poseer los secretos ocultos
enseñados por el Cristo a través de la doctrina Gnóstica.
Recordemos que hace muchos siglos atrás el que
incurriera en el adulterio era considerada persona no grata en un
pueblo o en una sociedad; era apartado inclusive de los aspectos
sociales de todo género, porque era visto como un ser

pestilente.
Lamentablemente en la actualidad el adulterio resulta
una práctica común, pero para los estudiantes gnósticos, el
respeto hacia la pareja que Dios le quiso entregar, debe ser
sagrado, porque hace parte de su destino.
A las personas que no comparten con su pareja, y sienten
la tentación de cambiarla porque suponen que con otra las cosas
van a mejorar, les aseguramos que no es así. Siempre será igual
o peor, porque si nos entregan una pareja que no comparte con
nosotros en determinadas cosas, debemos comprender que
necesitamos de ella para sufrir las consecuencias de los
vituperios producidos, bien sea a ella o a otras mujeres que
tuvimos, con las cuales compartimos en las diferentes vidas
pasadas.
Si la práctica del Arcano no le parece agradable, porque
es externa o simplemente porque no le gusta, es necesario
resignarnos, porque representa el pago que la Ley Divina quiso
darnos por nuestros antiguos errores.
El único motivo reconocido como válido en una pareja
que quiera divorciarse es la presencia del adulterio. Esto lo
afirma la Biblia, de otra manera no tendría sentido.
Nosotros, los estudiantes gnósticos, debemos respetar el
sagrado rito del matrimonio que nos unió con nuestra pareja
“hasta que la muerte nos separe”.
Sin embargo, el ritual de Liturgia Gnóstica dice: “¡Ay de
ti, oh guerrero, oh luchador, si tu servidor se hunde! Pero hay
remedios y remedios...”
CAPITULO X
BASES PARA EL TRABAJO ALQUIMICO

Las personas comunes y corrientes de la sociedad se

molestan y ruborizan seriamente cuando oyen hablar sobre el
sexo y sus capacidades de redimir al hombre cuando es usado
correctamente.
No admiten que los seres humanos pueden lograr, por
su intermedio, el nacimiento del “Hijo del Hombre” o del Cristo
Intimo, quien se encargará a su debido tiempo de hacer las
transformaciones necesarias para su emancipación Espiritual.
Obviamente, este tema es profundamente sagrado y su
comprensión abarca mucho más allá de nuestros precarios
conocimientos humanos, los cuales no tienen la capacidad de
llegar hasta los ocultos secretos de la Vida y de la Muerte.
El descubrimiento de estos “Secretos” se transforman en
verdaderas fuentes inagotables de sabiduría para todos aquellos
intrépidos buscadores que se resuelvan a beber de ellas.
Nadie en la historia de la humanidad se había atrevido
antes a develar el “Secretum Secretorum” o Secreto de los
Secretos, capaz de transformar radicalmente la naturaleza
interna del hombre, llevándolo a la altura excelsa de los Super
Hombres.
Sólo el V.M Samael, Kalky, Avatara y Maytreya de la

nueva Era de Acuario obtuvo el permiso y el coraje de rasgar el
velo de este indecible Misterio.
Gracias a este inmortal Ser, digno de alabanzas y
reconocimientos humanos y divinos, poseemos hoy la clave,
hasta ahora eternamente oculta, que nos permite saborear la paz
del corazón tranquilo y el verdadero Amor, aflorado por encanto
del magnetismo universal de la pareja que a imagen y semejanza
de Dios se sumerge en el núcleo de la fuente eterna de la vida
para extraer de ella sus conocimientos utilizándolos para sus

propias creaciones.
En este capítulo, dedicado por completo a los aspectos
Alquímicos, nos proponemos describir el método preciso,
aprendido por nosotros en el paso por la vida, para alcanzar el
nacimiento del tan anhelado “Hijo de la Luz”.
Muchas veces hemos oído hablar sobre el nacimiento de
un “Hijo de Luz” en un hogar gnóstico, pero, con todo respeto,
debemos aclarar que este concepto ha sido mal interpretado por
algunas personas y nada tiene que ver con un niño de carne y
hueso.
El niño que viene al mundo en un hogar gnóstico que
trabaja correctamente en los aspectos alquímicos, se conoce
como “ hijo de escape”, indicando que para ello es necesario el
auxilio de un espermatozoide que se “escapa” de su habitáculo
para cumplir la milagrosa labor de engendrar una nueva criatura
humana provista de todos los atributos necesarios para lograr en
esta vida un trabajo de regeneración espiritual.
El Hijo Solar es el Cristo Intimo, como lo

denominábamos anteriormente, quien debe nacer de la relación
amorosa existente entre un hombre y una mujer legítimamente
casados, utilizando para ello la energía creadora en una forma
sabia y perfecta.
El Hijo Solar es el resultado final del Trabajo
Alquímico, donde se entremezclan el Mercurio, representado
por la libido sexual de la pareja, con el Azufre, símbolo del
Fuego Sagrado, producto del impulso sexual natural aportado
por el Divino Daimón, para lograr, con el auxilio de la Sal de la
Sapiencia, las reacciones necesarias en el tubo de ensayo de

nuestra naturaleza interior.
Para ello se utiliza el “Matraz” o próstata, con la
finalidad de fundir el todo y permitir que los vapores
espermáticos de la reacción suban a través de la torre de
destilación, compuesta por la columna vertebral de la pareja y
con los productos finales recabados puedan lograr la fabricación
de los Cuerpos Solares, que conforman el habitáculo
imprescindible para albergar al “Niño de Oro” de la Alquimia
que advendrá cuando las condiciones del Iniciado estén dadas.
“Cuando el discípulo está preparado el Maestro llega”.
Durante el trabajo de destilación los vapores
espermáticos suben, transformando íntegramente la estructura
interior del individuo, pero los residuos de la reacción,
denominados Mercurio Seco y Azufre Arsenicado en el lenguaje
oculto, quedan depositados en el envase.
Estos elementos densos, perjudiciales, venenoskirianos,
representan el ego o sus influencias; simbolizan al fuego sexual
instintivo, tenebroso, producido por las bajas pasiones,
incrustadas o adheridas en la capa celular de nuestra sangre, que
encierra la psiquis.
Estas sustancias deben ser eliminadas en cada sesión
Alquímica para evitar la contaminación de la Obra, con sus
múltiples consecuencias adversas.
El Arsénico, como veneno, siempre estará presente y
latente en el cuerpo humano, hasta que el individuo sea capaz de
eliminarlo por completo por medio de la decantación de la
materia prima, obtenida por medio de continuas e
interminables purificaciones de nuestros estados psicológicos.
Afortunadamente el Fuego purifica y ninguna sustancia

densa podrá pasar por el filtro candente de este terrible elemento
que juega un papel determinante en la fabricación de las
partículas de Oro de la Alquimia.
En este tipo de trabajo se produce Oro de verdad, un tipo
de Oro puro, con el cual debemos fabricar el cuerpo del Niño de
Oro de la Alquimia, el “Hijo del Hombre”, como lo llamó el
Maestro Jesús o el “Hijo de la Luz”, como lo bautizó el Avatara.
Cada vez que se produce una reacción Alquímica en el
oculto laboratorio del Iniciado, se forman millones de átomos de
luz, los cuales van sustituyendo los átomos lunares que
componen actualmente la estructura de nuestros cuerpos
fantasmales, opacos y de visión inconsistente y grotesca.
Después de la Transmutación Alquímica se produce la
extracción del “Alma Metálica” del Mercurio, representando la
luz ó el Oro del esperma sagrado y de la libido femenina, la cual
debe ser fijada en los Cuerpos Solares o en la Serpiente
Kundalini.
Los Alquimistas denominaban “Alma Metálica” a lo

conocido como “Embrión Áureo” en nuestro lenguaje Gnóstico,
el cual es extraído de cada átomo de nuestra energía creadora,
compuesta por micro partículas de oro.
Este maravilloso fenómeno se procesa durante la
vocalización de los Mantram usados en el trance alquímico, los
cuales imprimen una octava superior en la vibración de la libido,
extrayendo sus valores anímicos.
En definitiva diremos que en este tipo de trabajo están
presentes tres elementos esenciales; el primero llamado
“Transmutación”, que se presenta cuando el Fuego hierve a

cien grados o cuando la pareja alcanza su máximo estado.
El segundo, definido como “Extracción de los Valores
Anímicos”, logrado durante la vocalización de los Mantram que
la pareja utiliza con fuerza y determinación.
El tercero, conocido como “Mutación”, alcanzado
cuando se logra un momento de inspiración en el cual los
valores anímicos se fijan a nuestros Centros Solares,
concluyéndose el trabajo.
Para lograrlo necesitamos de otro mineral predominante
y sutil, denominado Antimonio, en el lenguaje Alquímico. Este
elemento, representado por otra partícula autónoma de nuestro
Ser es el “Arche”, Maestro experto en la ciencia de la Alquimia
que logra fijar con su sapiencia los valores de los elementos
involucrados obtenidos en la reacción en su lugar
correspondiente.
La energía no es más que eso y puede ser utilizada por
los magos blancos o por los negros para sus propósitos positivos
ó negativos. Es como el dinero, el cual no es bueno, ni malo,
todo depende de cómo se usa.
Este proceso de fijar el Alma metálica del Mercurio en

las estructuras solares del Iniciado por medio del Antimonio,
representa exactamente lo conocido por nosotros como “La
Mutación” en nuestro lenguaje gnóstico.
Después de un acto de esta naturaleza toda la luz y la
energía producida queda flotando alrededor del practicante y
solo se fija en sus Cuerpos Solares o se guarda bajo llave en el
cofre de los Tesoros del Espíritu, cuando se obtiene un momento
de inspiración, que imitando el trabajo del “Arche”, fijan estos
valores del Alma en su lugar correspondiente. Por eso la

importancia de aprender a producir la inspiración como una
virtud imprescindible para la realización de nuestra Obra.
Si este trabajo no se hiciera, habríamos logrado
únicamente la “Transmutación” de la energía, pero no lo más
esencial representado por su “Mutación”.
Este inconveniente traería como consecuencia el fracaso
del trabajo y el robustecimiento de los agregados psicológicos
presentes que aprovechan el manjar extraído.
Obviamente, para obtener un verdadero “Trabajo
Alquímico” debemos primero iniciar su estudio a partir de la
persona soltera, que necesita de una pareja para completar su
laboratorio interno, hasta llegar al estudiante serio y casado, que
ha comprendido ya las bases de este trabajo de tipo superior.
Cuando un joven soltero ve a una muchacha que le
agrada, que le gusta, el primer sentimiento que se expresa en él,
es un suspiro.
Mientras esto ocurre, su cerebro sexual, que es
inmensamente rápido, le ha hecho ya un análisis a esa persona y
se ha dado cuenta que es idónea para su propia característica y
gusto, apareciendo en su vida una “H” simbólica, representando
el suspiro, un sentimiento agradable, una sensación de
inspiración.
Al comprender que la joven le gusta, empieza a
cortejarla, a hablar con ella y descubre la existencia de una gran
similitud de pensamientos y de afinidad de las metas que
persiguen. Cuando ese fenómeno maravilloso se produce, la
“H”, que había aparecido como un suspiro, se transforma ahora
en una "A", porque las características mentales de esa pareja se
fusionan en un idilio aún más profundo e interesante.
Cuando ya se integran en ese aspecto y en los

sentimientos, aparecen dos vocales conocidas por todos: la "I"
y la "O", representación del hombre y de la mujer.
Finalmente esa pareja, que se comprende emocional,
mental y psicológicamente, se une en un acto sexual y surge un
nacimiento como consecuencia del todo, con la presencia del
mantram IAO, que simboliza el nombre de Dios y de la letra
“H” como representación del hálito de vida, presente en toda
creación divina.
El Maestro Samael nos enseña que cuando un hombre y
una mujer se unen, algo se crea. Veamos cual es la creación
posible.
Si el acto sexual se realiza con fornicación y la mujer no
se encuentra en su momento de fertilidad, esa energía produce
una cantidad inmensa de criaturas negativas denominadas
larvas, incubos y subcubos.
Si hay fornicación, o sea, pérdida de la energía creadora,
mientras la mujer esta fértil se produce, probablemente, la
fecundación del óvulo femenino con la consiguiente gestación y
como resultado final la formación de un hijo de carne y hueso.
Pero la creación que nos interesa como estudiantes de la

gnosis, es la producida en el útero de la Bendita Madre Devi
Kundalini, tanto del hombre como de la mujer: “El Cristo
Intimo”. Esta debe ser la finalidad de todo estudiante gnóstico
que, de verdad, anhela la conquista de su Ser.
Si impedimos que el Cristo Intimo nazca en nuestro
corazón, no podremos realizar el viaje de regreso hacia el
mundo Atmico. Nuestro Ser Interno, nuestro Padre Bien

Amado, cuando quiere Auto realizarse y tener un cuerpo físico
en el mundo tridimensional con las condiciones de un Maestro,
envía al mundo de la materia a una de sus dos Almas: "Manas".
Sabemos que el Ser es Andrógino, eso quiere decir que
es macho y hembra al mismo tiempo y significa también que
posee dos Almas, una femenina y otra masculina.
Cuando esas dos Almas están integradas, el Ser se
encuentra Auto-realizado, uniendo en su aspecto interior la
Sabiduría de la parte femenina y la Experiencia de la expresión
masculina, para transformarse en un Ser divino completo.
El Ser entonces, envía a la tierra a su Alma humana o
masculina, la cual a su vez, manda como vanguardia una
fracción de sí misma representada por la esencia que baja a
través del Mundo Mental, Astral y Vital para luego hacerse
presente en un hijo de carne y hueso en el Mundo de la Materia
o Mundo Tridimensional.
Cuando ese niño nace, se desarrolla y crece, se
transforma finalmente en un hombre. Es entonces cuando tiene
la oportunidad, en el momento en que se casa, y se une a su
pareja, de emprender el camino de regreso hacia ese Intimo que
lo envió, pero ya con la experiencia recibida, con la sabiduría
adquirida a través de múltiples retornos, con dolor,
sufrimientos, aciertos y reveses, transformado en un Maestro,
Rey de la Naturaleza y de su propio Mundo Personal.
Para lograr esta extraordinaria proeza es inevitable
utilizar como fundamento esencial el Trabajo Alquímico, que
procura la gestación y el nacimiento de nuestro Cristo Intimo,
conducto obligatorio para lograr el encuentro y la encarnación
de nuestro Ser. “ Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida y sólo

por mi se llega al Padre”.
Vamos entonces a hablar del sistema que debemos
emplear para realizar equilibrada y correctamente este trabajo de
muy alta significación y de incomparable importancia en el
contexto general de la existencia humana.
Este trabajo está asociado a los Secretos de la Vida, de
la Muerte y del Ocultismo Inmortal y tiene la finalidad de
despertar los Fuegos Sagrados en nuestro coxis para que puedan
empezar el ascenso victorioso de la Serpiente Kundalini a través
de la columna espinal de los siete cuerpos internos del hombre.
Indudablemente, nada que tenga valor se consigue

fácilmente.
Muchos creen que realizar el trabajo del Arcano A.Z.F. o

Transmutación Alquímica es algo sencillo, como unirse
íntimamente en una recámara, seguros de soportar los terribles
impulsos relacionados con las fuerzas sexuales en el hombre y
en la mujer, pero a la hora de la verdad esto resulta muy
equivocado.
Todas aquellas parejas nuevas que se unen, sobre todo

las más jóvenes y encendidas energéticamente, pasan por un
proceso muy difícil y arduo donde les corresponde relacionarse,
familiarizarse y luego trabajar intensamente con el mantram
“I.A.O” que contiene en su esencia primordial el valor
Cabalístico de la expresión profundamente sagrada de Dios o
con los demás Mantram que el V.M. Samael dejó para estos
procesos de alta significación esotérica.
Hay que prepararse primero idónea y correctamente

para alcanzar ese nivel de acto alquímico de tipo superior y
profundamente sagrado, denominado suprasexo.
Consideramos conveniente aclarar que esta
ciencia poderosa y secreta solo puede ser practicada por
aquellos individuos, hombres y mujeres, que pertenezcan al sexo
normal.
Obviamente ningún homosexual, bisexual, lesbiana o
pervertido sexual en general podría lograr un trabajo de esta
naturaleza.
El que realmente anhele atravesar el umbral del Templo
que posee todos los secretos de la vida y de la muerte, debe
pertenecer al circulo de los que poseen el sexo normal, que aún
llenos de complejos, depravaciones, fornicaciones, adulterios u
aberraciones de toda índole no han perdido la brújula que
conduce sus impulsos sexuales hacia una sola dirección, hacia
su polo opuesto, hacia una pareja del sexo opuesto.
Esta es la base necesaria para arrancar la escalada de la

Montaña de la purificación para ser admitido al Templo Sagrado
del SUPRASEXO a su debido tiempo.
Los solteros tienen sus sistemas de transmutación y
cuando realizan sus prácticas correctamente, avanzan muy bien
en su camino Iniciático y logran sus NUEVE INICIACIONES
DE MISTERIOS MENORES. El individuo casado que realiza el
Trabajo Alquímico en forma equilibrada y perfecta, encarna o
conquista estas Iniciaciones con mucha más rapidez.
Para comprender más fácilmente nuestra expresión
anterior, sería necesario imaginar que nos encomiendan la tarea
de mover una montaña de tierra de un lugar a otro con los
medios disponibles. El soltero, quien no consigue otra

herramienta más adecuada, debe hacerlo en forma manual
utilizando una pala, con la cual va sacando la tierra y echándola
a un camión para llevarla a otro lado, mientras que el casado
dispone de una máquina retro-excavadora o de un chover, por su
condición favorable, realizando el mismo trabajo en una forma
mucho más rápida.
Sin embargo, es muy importante aclarar que cuando
el casado practica el Trabajo Alquímico en una forma
equivocada, va mucho más lento del soltero que lo está
haciendo correctamente.
Estas son premisas, adelantadas por nosotros para
explicar la tremenda responsabilidad que recae en una pareja,
cuando va a comenzar el “Trabajo Alquímico”, denominado así
por los Venerables Maestros de la Logia Blanca con tanto
acierto y solvencia esotérica.
Siempre me recuerdo de una hermosa anécdota de la
Odisea, escrita por ese extraordinario Iniciado y Sabio del arte
griego, llamado Homero.
En la Odisea se habla de Ulises, Rey de Itaca, esposo de
una hermosa Reina llamada Penélope, a la cual amaba en forma
entrañable. Ulises tuvo que alejarse de ella para hacer frente a
una guerra que se disputaba entre Aqueos y Troyanos en
aquellos tiempos lejanos.
Después de varios años de ausencia de su reino y de
continuas e innumerables batallas y sufrimientos que duraron
diez años y debido a la audacia de Ulises, los Troyanos lograron
ganar la guerra. Pero a causa del orgullo que Ulises poseía
internamente se produjo la cólera de los Dioses del Olimpo y
fue castigado por Neptuno, Dios de los océanos de vida, quien
lo obligó a permanecer diez años más vagando por los mares y

en diferentes lugares.
Penélope, quien representa al Alma Femenina de Ulises
en ese relato maravilloso, la cual se encuentra eternamente
enamorada de su pareja, comenzó a tejer un manto para su boda
(en esa época en el caso de una reina, era obligado aceptar el
cortejo y elegir un nuevo esposo cuando éste había muerto o se
consideraba desaparecido para siempre). Ella tejía de día y
destejía de noche y así nunca terminaba el manto, procurando
ganar tiempo con la firme esperanza de que su amado esposo
regresara de su largo viaje y de quien no se sabía a ciencia cierta
su verdadero destino.
Existían muchos pretendientes queriendo conquistar a la
Reina y casarse con ella a la fuerza, los cuales estaban
interesados en el palacio de Ulises, mermando sus bienes y
ultrajando su casa (lo que comúnmente hacen los mercaderes del
Templo).
La Reina impuso durante largos años innumerables
pruebas de destreza física, con la condición de que quien las
ganara, obtuviera el derecho de casarse con ella,
transformándose así en el nuevo Rey de Itaca, pero, como todas
las pruebas resultaban tan difíciles, ninguno de ellos lograba
superarlas.
Atenea, Diosa de la sabiduría, protectora de Ulises y
representación de la Madre Kundalini en el relato, inspiró en
Penélope la idea de sacar el arco de su esposo para celebrar el
certamen que iba a ser preludio de la matanza de los
innumerables personajes pretendientes (representación de la
legión egoica). Ya Odiseo, como también Homero llamó a
Ulises, estaba en casa, había finalmente regresado y Atenea lo

había disfrazado de mendigo y anciano.
“He aquí que también surgen servidores
enmascarados y puede acontecer que aquel limosnero sea un
Rey encubierto, porque puede elegir su ropa a voluntad, no hay
de ello prueba segura, sin embargo el verdadero limosnero no
podrá ocultar su pobreza”.
La prueba consistía en manejar el arco y hacer pasar una
flecha por el ojo de doce segures perfectamente alineados en
forma vertical y a una distancia igual entre ellos (Símbolo de las
Doce Constelaciones).
Como disparar una flecha con un arco parecía tan
sencillo, ya que ellos lo practicaban todo el tiempo, (simboliza
los actos que realizan los externos cuando se unen sexualmente),
aceptaron con gusto la prueba, pero tenían que utilizar ese arco
en especial.
Todos pensaron que había llegado finalmente el

momento de conquistar el derecho de casarse con la Reina, pero
cuando la prueba comenzó, tomaron el arco, cargaron la flecha y
nadie pudo ni siquiera mover la cuerda del mismo, no
quedándoles más remedio que rendirse.
Aseguraron que la prueba era imposible de realizar, el
mismo discurso usado por los externos cuando conceptúan que
es imposible lograr un acto Alquímico sin perder la energía
creadora, porque ellos no conocen el misterio.
Entonces entró Ulises, vestido con harapos de mendigo,
como son a veces presentados los grandes Reyes que cumplen
misiones especiales. Apareció como un limosnero y pidió que le
fuese permitido realizar esa misma prueba, solicitud esta que
produjo, por supuesto, la risa desenfrenada de todos, porque si

ellos que eran grandes guerreros, preparados y entrenados para
las armas, príncipes, miembros poderosos de la sociedad no lo
habían podido hacer, ¿cómo podría lograrlo un pobre mendigo?.
Odiseo recibió el arco, lo sostuvo con fuerza, colocó una
flecha y la disparó en forma sencilla y segura haciendo blanco
ante la mirada atónita de todos los presentes.
Una vez que Odiseo (como anciano) logró culminar la
prueba, se dio a conocer y comenzó la matanza de los
pretendientes.
Cada experiencia de Odiseo era una prueba Iniciática.
Este personaje antes de alcanzar la destreza necesaria para
manipular el arco y matar a los intrusos e invasores de su reino,
permaneció en una guerra sangrienta durante diez años y vagó
por otro tiempo igual para su regreso.
Si analizamos el Arcano 10 veremos que representa la
rueda del Samsara, la cual gira constantemente entre la
evolución y la involución, recorrido obligado del Caminante del
Sendero de la Vida para ascender victorioso por la escalera de la
Revolución de la Conciencia.
El regreso al Reino también duró diez años,
simbolizando que su distancia es la misma recorrida para
alejarnos de el. Con su regreso Ulises, el Alma Humana, se
reúne finalmente con su amada Penélope, el Alma femenina
quien aguarda por él, luchando como una verdadera guerrera
para defenderse de quienes quieren invadir el Trono.
Finalmente, si sumamos 10+10 obtenemos como
resultado cabalístico el arcano 20, simbolizando la Resurrección
y la Luz de la Conciencia conquistada por el viajero para
alcanzar la gloria.
Este simple relato tiene tanta sabiduría en su mensaje y

tanta relación con el “Trabajo Alquímico”, que siempre nos ha
impresionado.
Todo estudiante gnóstico, deseoso de emprender el
camino de retorno hacia su Ser Interno a través de la Alquimia,
debe primero preparar su cuerpo para poderlo hacer.
Obviamente cada uno de nosotros posee un tipo de
vibración diferente. No hay ningún ser humano en la tierra con
el mismo tipo exacto de frecuencia vibratoria en sus propios
átomos y células, así como no hay ningún ser humano con las
mismas huellas digitales o el mismo rostro.
Cuando un varón y una mujer, se unen en un connubio

marital, con diferentes tipos de vibraciones no podrán lograr ni
realizar el Trabajo Alquímico correctamente; esto a pesar de que
sean afines en muchas otras cosas.
Deben primero magnetizarse y lograr que las vibraciones
del hombre y de la mujer sean las mismas. Necesitan antes
fraguar un nuevo tipo de vibración, la misma para los dos. La
Biblia dice: “El hombre se casará con una mujer y serán una
sola carne y una sola Alma”.
Para lograr el nacimiento del Hijo del Hombre en el
corazón del ser humano es necesario la integración de las dos
personas con esos valores y con el mismo tipo de vibración, para
evitar el peligro de una adulteración de las energías creadoras.
Para magnetizarse y alcanzar la unificación de las
vibraciones, la pareja debe ejercitarse, antes de unirse
sexualmente, con “La practica Diana” enseñada por el
Venerable Maestro Samael.
Diana simboliza a la Diosa de la Castidad en la

Mitología grecorromana. La Casta Diana representa también a
un Colegio de Iniciados cuyos integrantes se proponían alcanzar
la perfección de esa Diosa por medio de la castidad.
La práctica Diana debe durar 40 días, desde su
matrimonio, en aquellas parejas muy jóvenes con una energía
explosiva. Se acuestan en su lecho semi ó desnudos, pudiéndose
acariciar y besar, sin producirse ninguna copula metafísica.
Nosotros entendemos perfectamente, que una cosa es
hablarlo y otra muy distinta es hacerlo; por esta razón, dicen los
Maestros, que para llegar a ser Iniciados o Adeptos de la
Bendita Logia Blanca hay que ser audaces e intrépidos y seguir
el camino del Superhombre. Este trabajo no es para todo el
mundo.
Quien anhela de verdad la unión con su Ser Interno con
ahínco y con fervor, indiscutiblemente tendrá también la fuerza
de voluntad suficiente para resistir esa terrible prueba, tan
necesaria para crear la voluntad y el dominio sobre las fuerzas
luciféricas, denominadas impulsos sexuales y para
homogeneizar las vibraciones energéticas de la pareja.
Veinte días deberá el varón acostarse al lado derecho de
su mujer y veinte días al lado izquierdo, para lograr la
magnetización necesaria.
Si la pareja logra resistir las tentaciones casi
insoportables en esos cuarenta días, habrá alcanzado también las
transformaciones de las vibraciones energéticas antes
mencionadas y conseguido la fuerza de voluntad suficiente para
vencer el deseo animal, responsable de dejar perder la energía
creadora en un vulgar acto.
Cuando la pareja ha llegado a este nivel de aprendizaje,

habrá alcanzado también el dominio sobre sus debilidades y
estará preparada para empezar el Trabajo Alquímico, donde el
falo masculino y el Yoni femenino se unen en el Caos de la
Creación para transformarse por unos instantes en los hacedores
de la vida.
Es conveniente aclarar que la conexión entre la pareja
debe producirse solo y únicamente durante las horas de la
oscuridad para permitir que la semilla sea sembrada mientras
esté rigiendo la Luna, como representación del Logos Gabriel,
Señor de la Gestación y de la vida y debe sembrarse solo cuando
la semilla esté perfectamente madura.
La pareja podrá realizar una sola práctica en la noche en

la cual nuestro Ser utilizará únicamente la semilla apta para
ello. Luego es necesario permitir al organismo descansar y
madurar mas energía, necesitando para ello un día completo,
compuesto por 24 horas, en el cual los siete Logos de la
Creación, que vibran y actúan en diferentes momentos del día
participan en su proceso inculcando en la semilla las
características que poseen para permitir una creación perfecta.
La mejor hora para la práctica no se puede generalizar,
ella depende de la particularidad de cada pareja, de sus
costumbres y vitalidad y la irán descubriendo por sí solos en el
recorrido del camino.
Pero, todo esto no es suficiente, venimos
arrastrando a través del tiempo un sinnúmero de errores, fluidos
y contaminaciones en nuestros cuerpos Físico, Vital, Astral y
Mental.
Todas esas energías negativas y fluidos morbosos que

recibimos cuando entramos a lugares que son visitados por
mucha gente, debemos eliminarlos, junto a las larvas, incubos y
subcubos, que también están adheridos a nuestros cuerpos
internos.
Esos elementos son semejantes a parásitos que exigen
alimentarse de nosotros. Ellos nos consideran sus padres y
extraen de nuestras reservas energéticas todo el alimento
necesario para su supervivencia y desarrollo.
La inteligencia que poseen es totalmente maligna. Ellos
exigen fornicación y pérdida de la energía para poder recibir ese
alimento particular, imprescindible para seguir creciendo y
multiplicándose alrededor del cuerpo en el cual viven.
Recuerdo cuando recién conocí la Gnosis y leía en
algunos de los libros del Venerable Maestro Samael que el ser
humano es semejante a un basurero ambulante. Estas
afirmaciones, no lo niego, me causaban cierta molestia. ¿Cómo
es posible, me preguntaba, que el Maestro Samael emita tan
cruel aseveración?
Hoy, después de profundas reflexiones, hemos llegado a
la conclusión que el Maestro fue demasiado magnánimo en
decir la verdad, porque un basurero, a final de cuenta, es solo
eso, pero la contaminación energética que posee el ser humano
llega tan lejos, es tan terrible, que no hay palabras apropiadas
para poderlo explicar.
Los seres tenebrosos que viven en nuestras cavernas
internas, son horripilantes y cuando los observamos en su cruda
realidad, llegamos a la conclusión de que somos una terrible
expresión física en la Tierra.
Afortunadamente existe una esperanza en nosotros, una

luz, que es nuestra conciencia enviada por el Alma Humana a
nuestro cuerpo físico, para que podamos alejarnos de ese mundo
tan contaminado y terrible por intermedio de ella.
Es necesario que la pareja, dispuesta a emprender este
Trabajo Alquímico tan exigente, se preocupe de limpiar su
cuerpo físico a través de procedimientos prácticos y sencillos
como utilizando baños de plantas periódicos y constantes.
Debe bañarse diariamente con abundante agua y jabón,
restregándose correctamente para que su cuerpo físico quede
completamente limpio. Pero limpiar el cuerpo físico no es
suficiente, tenemos que profundizar más este aspecto,
purificando también el cuerpo vital donde están adheridos todos
los fluidos negativos relacionados con la fornicación, la lascivia
y la morbosidad.
Para ello se sugieren los baños de plantas de los cuales
tanto se ha hablado, preparados con ramas y hojas de ruda,
salvia, albahaca, artemisa, mano de Dios, yagrumo, romero,
sauce llorón, pirulo, canela, azahares, heliotropo, etc.
La pareja debe utilizar baños de plantas frecuentemente
en los cuarenta días de la practica Diana, para limpiar el Cuerpo
Vital.
Pero este procedimiento todavía no es suficiente,
debemos ir más allá, limpiar también el Cuerpo Astral con
mezclas y sahumerios preparados con incienso, estoraque, mirra
y canela a los cuales se le puede agregar, eventualmente,
extracto de rosas y además, nuez moscada, clavitos y guayabitas
molidas.
Cuando la persona recibe el humo del sahumerio sus
efectos depurativos y purificadores penetran en sus cuerpos
internos limpiando también el Cuerpo Astral de tantos fluídos

densos y nocivos que inducen a la pareja hacia una atmósfera
oscura y negativa, conduciéndolos a la horrible fornicación.
Para penetrar con la limpieza mucho más allá de la parte
Astral y alcanzar el mundo de la mente, tormento de todo ser
humano, es necesario sentarse en un cómodo sillón a escuchar
música clásica, con la intención de sentir en su interior la
presencia de la inspiración, facultad específica del Cuerpo
Mental, capaz de elevarnos a los más altos niveles del sentir
divino.
Cuando se siente la inspiración, es señal de que nuestro
Ser Interno ha acudido a ese mundo para observar qué
necesitamos, desapareciendo con su presencia toda larva y
fluidos negativos con sus correspondientes asociados.
El Ser y el ego son como el agua y el aceite, nunca se
mezclan, donde está el uno no puede al mismo tiempo,
permanecer el otro.
Es importante aclarar que es necesario practicar esta
misma limpieza a nuestro hogar y particularmente a nuestra
recámara, teniéndola bien aseada, pintada, ordenada y
perfumada.
Es esencial lavar el piso de la casa con agua y jabón,
luego darle un baño de plantas utilizando para ello un trapo o
coleto indicado y luego esparcir sahumerio en todos sus
rincones, finalizando con la colocación de música clásica para
mejorar aun más su ambiente.
Resulta insólita y extraña nuestra aseveración sobre la música
clásica y su posibilidad de mejorar el ambiente de una casa, pero
si analizamos que en ella nos acompañan los diversos
elementales que viven en las plantas adornando nuestro hogar y
las diferentes partículas concientivas contenidas en la luz que

nos alumbra, en el aire que respiramos, en la tierra que pisamos
y en el agua que utilizamos, nos daremos cuenta de que no
estamos solos. Todas estas criaturas evolutivas pueden ayudar a
cambiar la atmósfera o el ambiente del lugar, si se les motiva,
imprimiéndole un toque de armonía, de paz y de alegría.
Debemos convertir nuestra recámara en un Templo en el
cual oficie el Tercer Logos, porque es el lugar sagrado donde
llevamos a cabo nuestro Trabajo Alquímico, permitiendo el
nacimiento del Andrógino Divino, colaborador y velador de la
Obra.
Nuestra recomendación es que nunca se permita a alguien, ni
siquiera a las personas más allegadas o de confianza, a que se
sienten o se acuesten en nuestra cama para evitar que el
magnetismo depositado en ella se pierda inútilmente.
Otro de los problemas más evidentes en una pareja
recién casada, es el impulso tan fuerte de la energía, que resulta
más bien incontenible en esta etapa tan difícil.
Cuando el varón alcanza los treinta y cinco años de
edad, su energía se estabiliza y es mucho más fácil controlarla.
Por esta razón la pareja joven debe eliminar por un tiempo
prudencial el hábito de comer carnes rojas tan frecuentemente,
porque poseen el elemento fuego, alimentándose sobretodo de
verduras, vegetales, pescados y granos.
Si la pareja está envuelta en el fuego de la pasión y
sigue comiendo carne, termina por quemarse sin posibilidad
alguna de éxito.
Es fundamental, además, evitar los alimentos que
inducen a la actividad sexual o elementos afrodisíacos, como
salsas picantes, mariscos, ostras y todos aquellos componentes
conocidos como Rayásicos, apartando también aquellos

alimentos oleaginosos ricos en fósforo como nueces, almendras,
maní, coco, etc.
Cuando la pareja aprende a controlar su alimentación, se
esmera además en limpiar su cuerpo, procura tener su recámara
ordenada y limpia, habiendo realizado con éxito los cuarenta
días de la practica Diana, se encuentra preparada para iniciar el
Trabajo Alquímico propiamente dicho.
El error más grave que puede cometer la pareja cuando
inicia su trabajo en serio es sentirse confiada de tener una
relación de esta naturaleza, sin tomar las precauciones
necesarias, sin aceptar que todos somos principiantes en este
camino, a pesar de haber sido probablemente diestros en el
mundo de los externos.
Debe haber previamente un aprendizaje lento y
constante que va de la etapa de principiante a la de experto.
Es como el caso de una persona cuando quiere aprender
a nadar. Primero se acerca a la orilla del mar o del río a estudiar
el agua, si es fría, tibia o caliente.
Se va metiendo poco a poco y cuando se siente segura
va profundizando un poco más, haciendo pequeños
movimientos, sopesando los riesgos y peligros, la profundidad y
el alcance hasta que aprende a nadar y al percibir cierto
dominio, puede alejarse hacia la parte más profunda y peligrosa.
¿Qué pasaría con una persona que nunca ha nadado en
las aguas de la vida?. Puede ser que lo haya hecho en las aguas
del mundo externo, pero nadar en el océano de la Conciencia
Universal es muy diferente a todo lo conocido anteriormente.
Si nunca ha nadado en este tipo de aguas y quiere de una

vez meterse en la profundidad del lago o en el centro del mar,
obviamente fracasa, se ahoga en el intento.
La pareja inicia su preludio con caricias suaves y
seguras, acompañadas con besos, que de acuerdo a su intensidad
pueden ser ardientes, sin excederse, evitando el peligro de una
caída fatal y deprimente.
Cuando el fuego ya está encendido se inicia la fusión
del “Lingam Yony” en forma parcial permitiendo el encuentro y
el estudio energético necesario antes de completar su conexión.
Cuando sientan hervir el agua a “cien grados”, es decir
una especie de exaltación espiritual y de placer físico intenso,
pueden empezar a vocalizar con alguno de los mantram que el
Maestro Samael recomienda en sus libros.
En el caso de utilizarse el mantram por excelencia
“IAO”, tanto el varón como la mujer deben vocalizar al mismo
tiempo, apretando el coxis, inhalando la energía depositada en
sus órganos creadores, llevándola al cerebro con el poder de la
imaginación y finalmente al corazón, pronunciando el mantram
“I” en forma alargada: iiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii hasta exhalar por
completo el aire contenido en los pulmones.
Vuelven a apretar el coxis y suben nuevamente la
energía al cerebro y al bajarla al corazón pronuncian el mantram
“ A” también en forma alargada: aaaaaaaaaaaaaaa, hasta exhalar
el aire por completo.
Inhalan nuevamente, llevan la energía al cerebro y
luego al corazón exhalando con el mantram “O”, como
explicado anteriormente: ooooooooooooooooo.
El Maestro recomienda que los mantram se pronuncien
por lo menos siete veces. Todo depende de las condiciones del
momento, porque si la pareja se siente todavía con mucha

energía debe seguir vocalizando hasta alcanzar la relajación
completa de los órganos involucrados.
Es bueno aclarar que si están durmiendo en una
habitación donde otras personas que están afuera los pueden
escuchar, esa vocalización debe hacerse en voz muy baja o en
forma mental para evitar ser oídos. Jamás debe practicarse el
Arcano A.Z.F. en una recamara donde hay mas personas.
Mientras están realizando la vocalización deben estar
bien concentrados en la práctica que están haciendo, en la
edificación interna que están logrando, en las creaciones divinas
que están alcanzando, en la presencia de los Amados Maestros
que están esperando la formación de un nuevo nacimiento, en su
Madre Divina que está orando para que éste acto de alta magia y
de inigualable poder salga según los preceptos establecidos.
Si una pareja realizara un acto de Alquimia como lo
hemos descrito anteriormente, sin perder la energía, habrían
logrado un trabajo notable ante los ojos de los Maestros, que
aunque representa solo el comienzo de su Obra Espiritual,
produciría asombro en los mismos Maestros, que reconocen las
dificultades actuales para hacerlo, debido a los obstáculos
interpuestos por los tenebrosos por medio del control que
ejercen en la mente y la psiquis del hombre.
Obviamente, durante el trance amoroso y en el comienzo
de las prácticas, pueden presentarse debilidades egoicas
producidas por un discurso telepático oculto e involuntario
surgido entre la pareja, induciéndolos a la fornicación por medio
de un lenguaje sutil y astuto, pero luego el fuego, que asciende a
través de la columna vertebral va desintegrando esos
pensamientos y la mente va quedando tranquila, quieta, en paz,

en calma, en un vacío total, o sea, en blanco.
Cuando la pareja logra alcanzar este nivel, más nunca va
a tener problemas de caídas, porque estas son producidas por la
traición de los elementos negativos involucrados, que a través
del lenguaje telepático, le envían a la pareja ciertos mensajes,
difíciles de detectar, induciéndolos al descuido y a la posterior
pérdida de la energía.
Lógicamente, durante el transcurso del tiempo y a medida
que el principiante se va haciendo diestro en estos aspectos,
claves personales, inspiradas por su Ser y sugeridas por su
propia particularidad, irán aflorando en su comprensión,
haciéndolo cada vez más seguro y capaz, adquiriendo así el
dominio sobre esta materia.
La practica del Arcano A.Z.F. representa una meta
titánica donde la voluntad de la persona y su completo
convencimiento de lo que está haciendo, juegan un papel
fundamental y predominante para el triunfo.
Lo explicado hasta ahora se refiere a las parejas recién
casadas, con una energía poderosa y volátil, la cual muchas
veces no saben como usarla, pero luego con el tiempo, cuando
empiezan a perfeccionar su trabajo, cuando comienzan a edificar
sus estructuras divinas internas y solarizan el cuerpo Físico,
Vital, Astral, Mental y Causal, adviene el despertar y el ascenso
de las Serpientes Sagradas del Fuego.
Para que una pareja logre el despertar de los Fuegos
Sagrados e inicie el ascenso del Kundalini, debe alcanzar
primero la capacidad de no perder jamás la energía.
Algunas parejas realizan un buen trabajo durante cinco,
seis o diez practicas consecutivas y después se caen. Este
método es conocido como “Tantrismo Gris”, a veces se hace

bien, a veces se hace mal; falta todavía constancia, dedicación y
purificación de los pensamientos para dar el siguiente paso que
conduce al umbral del Templo del “Tantrismo Blanco”.
Mientras esto ocurra la Bendita Madre Kundalini no
tiene posibilidad de despertar en el Chacra Muladar y como
consecuencia tampoco pueden hacerlo los Fuegos Sagrados.
Pero cuando la pareja ha demostrado seriedad y
seguridad, su Santo Gurú realiza determinados pases magnéticos
en el Coxis, con la intención de despertar los Fuegos y la
Serpiente Ígnea de los Mágicos Poderes para empezar su
ascenso victorioso a través de la columna vertebral del cuerpo
físico y luego sucesivamente en lo demás cuerpos.
El Iniciado, que conquista el derecho sagrado de ser
llamado con este denominativo particular porque está trabajando
con el Fuego o con la Alquimia, va solarizando sus cuerpos y a
medida que lo hace va necesitando más energía, porque debe
mantenerlos activos y brillantes, sintiéndose mas agotado a
medida que va practicando.
Normalmente creemos lo contrarío, o sea que al no
fornicar, la persona debería tener más energía, pero no es así,
porque esta es utilizada inmediatamente para suplantar átomos
lunares por átomos solares.
Para comprender mejor este concepto es conveniente
imaginar como una casa de un piso la estructura física e interna
de aquellos individuos que desconocen por completo las claves
de la Alquimia y de un edificio de siete pisos, representando
los siete Cuerpos Solares Existenciales del Ser, para los
Iniciados que están trabajando con el Fuego.
Obviamente, el Iniciado amerita una mayor cantidad de

energía que el individuo común de la sociedad, para mantener
lúcidos y activos los siete pisos.
Si al principio esa pareja recién casada, joven y llena de
vida había procurado no comer tanta carne y alimentos ricos en
sustancias estimulantes, en esta etapa nueva de su existencia
debe volver a utilizarlos en forma constante.
Es importante aclarar que hay sustancias afrodisíacas
altamente dañinas para el cuerpo humano, ellas incitan el
instinto por unos meses y después acaban con la energía por el
resto de la vida. Por lo tanto, queremos enfatizar que no
estamos hablando de elementos de ese tipo, ni estamos de
acuerdo con su consumo.
Es aconsejable además, tomar periódicamente
comprimidos de fósforo y vitamina C, en combinación con un
buen complejo de vitaminas B1 – B6 – B12. En el caso de los
varones, si hay demasiado agotamiento, pueden utilizar los
testículos de chivo, cuyo contenido son hormonas masculinas
naturales que se preparan según una formula entregada por el V.
Maestro Samael en el libro de Medicina Oculta y Magia
Práctica.
Por otro lado, es recomendable mantener el cerebro
continuamente oxigenado para procurar una mayor lucidez
mental. Para este fin sugerimos el consumo del “Ginco Biloba”,
planta sagrada originaria de los países asiáticos y de la
“Lochita”, una suerte de minúscula planta abundante en los
lugares húmedos de los trópicos, que cumple una función
parecida a la anterior. Si hay una buena oxigenación e
irrigación en el cerebro, tendremos como consecuencia una
mayor capacidad sexual, mental e intelectual.
Nuestro cuerpo ya no recibe la energía del cuerpo vital

del planeta como antes, porque este también se ha debilitado y
enfermado por la contaminación atmosférica y los innumerables
daños causados por la humanidad. A causa de este fenómeno
nuestra parte vital se va debilitando, perdiendo la capacidad que
poseía años atrás y se hace necesario apelar a los consejos dados
anteriormente, respetando además las denominadas: “Pausas
Magnéticas”.
Sobre el tema de las pausas magnéticas el Maestro
Samael explica que son muy importantes para permitir la
recuperación y el descanso de las energías creadoras y de todas
aquellas glándulas y filamentos nerviosos involucrados en una
acción donde se trabaja con el poder del Fuego, sometidos a
esfuerzos sobrehumanos con su consecuente desgaste.
El tiempo de duración aconsejado para una “Pausa
Magnética” depende de cada pareja y difiere según su
constitución física. Este tiempo esta asociado también a la edad
de la pareja, a su capacidad de recuperación y a la integración
existente entre ellos.
Siete días, nueve días y en algunos casos 15 días son
suficiente tiempo para restablecer las energías utilizadas para
continuar el trabajo que conduce a la fabricación de nuestra
Edificación Espiritual.
Creemos, con lo escrito en este capítulo, haber dado las
bases para la realización del Trabajo Alquímico. Son sencillas,
sin embargo una cosa es hablarlo y otra es hacerlo, una cosa es
intentarlo y otra lograrlo. Lo que necesitamos es poner en
practica estas enseñanzas que la doctrina gnóstica y los amados
Maestros de la bendita Logia Blanca nos han enseñado para
colaborar con la humanidad, entregando un átomo de luz de ese
inmenso océano de sabiduría correspondiente a la Sapiencia

Universal.
A continuación transcribimos algunos interrogantes
sobresalientes formulados por los hermanos gnósticos al
respecto de este tema, con la finalidad de ampliar aún más, su
contenido:
P. ¿Cómo se llega a ser Hanasmusen si uno practica la

Alquimia?
R.- El Maestro Lakhsmi dice: “Una cosa es la Iniciación,

otra es el Nacimiento y otra muy distinta la Muerte”. Cuando
una pareja realiza la Alquimia en forma correcta está logrando el
Nacimiento Segundo, del cual Jesús de Nazaret le habló al
supremo Sacerdote Nicodemo, y con ello está produciendo
dentro de sí unas variantes de su estructura interna que se
constituyen en un nido simbólico, donde ha de nacer el Cristo
Intimo como niño. Está transformando además, sus cuerpos
lunares en Cuerpos Solares, permitiendo al Ser Interno poseer
un vehículo físico para expresar su Sabiduría luego del ascenso
de las Serpientes Sagradas por las columnas vertebrales de cada
uno de ellos.
Lamentablemente esto no garantiza al Iniciado la
desintegración del ego, la muerte de sus defectos.
Cuando un Iniciado practica el Arcano A.Z.F, sin caerse,
ni perder su energía, avanza indiscutiblemente, porque la
Iniciación exige básicamente castidad.
De esta manera el estudiante de los Misterios Cristicos
va adelantando, debiendo prestar servicios desinteresados a
favor de la humanidad, para recibir a cambio el pago
correspondiente requerido para obtener las Iniciaciones. Es

requisito indispensable y obligatorio pagar toda Iniciación con
Dinero Cósmico.
Si ese Iniciado trabaja en bien de la humanidad, pero
no cumple con el requisito esencial de la Muerte Mística y llega
a la Quinta Iniciación de Misterios Mayores, donde encarna a su
Alma Humana, se transforma en un Hombre Solar, pero con su
otra faceta negativa presente, con el ego intacto, que utiliza las
facultades del Hombre Solar para hacer también sus creaciones
obscuras.
Ese Ser incompleto e imperfecto, posee un doble centro
de gravedad, es un Hanasmusen. Este inconveniente grave, dado
a conocer por las Jerarquías Blancas como un posible aborto de
la Naturaleza, solo se puede evitar si el Iniciado, además de
hacer el trabajo del Nacimiento Segundo y del Sacrificio por la
Humanidad, logra eliminar los vicios y los defectos que tienen
su psiquis invadida.
El Iniciado no puede eliminar las cabezas de legiones
hasta llegar a la Quinta Iniciación de Misterios Mayores; no
puede desintegrar la ira, la lujuria, la envidia, el orgullo, la gula,
la vanidad y el odio como cabezas de legión.
En el caso de la lujuria, puede eliminar los “Yoes” que
están asociados a ella, por ejemplo el vicio de la masturbación.
Una persona que se masturbe ni siquiera puede conseguir la
Primera Iniciación de Misterios Menores, mucho menos podrá
pensar en las Mayores.
Se puede eliminar el vicio de mirar películas ó revistas
pornográficas, de estar observando a las mujeres en una forma
morbosa, de hablar cosas de doble sentido y de contenido
negativo, de soñar con escenas de lascivia y tantos mas que
todos conocen y hacen parte del acontecer diario de la existencia

del ser humano.
Podemos ir eliminando estos vicios y a pesar de hacerlo,
seguiremos siendo lujuriosos, menos seguramente, pero a la
lujuria como tal, solo la puede eliminar el Cristo Intimo quien
posee las armas apropiadas para actuar de manera precisa con el
innegable auxilio de la Divina Madre Kundalini.
Él, como Fuerza Universal de inimaginable poder, tiene
esa potestad. La lujuria y los demás pecados capitales son los
“Generales” de sus ejércitos y un General solo puede ser
enfrentado y derrotado por otro.
Esta es nuestra razón más poderosa y convincente para
procurar, con todas las fuerzas del Alma, permitir el
nacimiento del Cristo en nosotros quien se hace hombre en la
Quinta Iniciación de Misterios Mayores.
Ese Hombre empuña la espada y el látigo de la voluntad
a partir de ese momento, para iniciar la ardua labor de expulsar
a los "Mercaderes del Templo" y matar las “Cabezas de
Legiones”.
Quiero finalmente enfatizar que el Iniciado en la
Primera Montaña elimina los defectos, los vicios, las pasiones y
las debilidades infrahumanas. El Cristo, en la Segunda Montaña,
elimina las “Cabezas de Legiones” que son en definitiva el Ego,
propiamente llamado.
P. -¿ Cómo sabemos sí uno ya tiene Cuerpos Solares?
R. - Indudablemente, es necesario primero salir en

Cuerpo Astral conscientemente para poder detectar si ya
poseemos Cuerpos Solares.
Si la persona es capaz de desplazarse en los mundos

internos a voluntad es signo que tiene Cuerpos Solares y por eso
los puede utilizar.
Sin embargo, en este caso, lo importante es conseguir
primero el poder maravilloso de la Castidad para lograr el
Trabajo Alquímico y lo demás vendrá por añadidura.
P. ¿Qué pasa cuando una pareja esta trabajando en la

Castidad y los Maestros le mandan un hijo, ese hijo puede
ser una persona elevada, un Maestro?
R.- Cada persona tiene un destino y alguna misión que cumplir.

Si alguien esta haciendo un Trabajo Alquímico impecable y
nace un hijo en el seno de su hogar, es voluntad de los
Maestros, que han permitido a un espermatozoide escaparse,
para fecundar a la mujer.
Obviamente, ese hijo no va a ser producto de la
casualidad y menos de las fuerzas negativas, va a ser un Alma
muy grande, que viene a la Tierra enviado por su Intimo para
cumplir algún tipo de misión.
Tampoco se puede garantizar que ese hijo, al nacer en un
hogar cómo este, vaya a triunfar en la misión encomendada por
su Ser, porque este logro depende principalmente de la
educación dada por sus padres físicos en el hogar, permitiéndole
adquirir los lineamientos precisos y la responsabilidad necesaria,
con la finalidad de tener el suficiente equilibrio en su formación,
para emprender ese extraordinario trabajo encomendado a su
Conciencia cuando fuera enviada por la Venerable Logia
Blanca.
P. ¿A un niño que nace en las condiciones enseñadas por la

Gnosis le corresponde por Ley un grado de elevación
superior?
R.- Internamente, sin duda, es un ser muy elevado, pero si la

parte física no hace el trabajo que le corresponde no puede
conquistar los valores de su Ser, ni fusionarse con esas
facultades del Ser. Sigue siendo un dormido, igual a los demás.
Pero si ese personaje, tanto mujer como hombre, con su
Ser Interno tan exaltado y elevado, realiza un trabajo idóneo en
los tres aspectos de la Revolución de la Conciencia, logra
plasmar su Obra en poco tiempo transformándose en un Sabio,
capaz de educar y enseñar a la humanidad para que también
realice su misión.
P. ¿Si una persona permanece cierto tiempo sin práctica de

la alquimia sexual, corre el riesgo de perder fuerza o
alguna Iniciación por falta de energía?
R- No, porque toda persona necesita de una pausa oportuna

para recuperar su cuerpo físico y seguir su trabajo.
Es lógico que en ese espacio de tiempo podría tener una
“polución nocturna”, eso le pasa sobre todo a los solteros, pero
también a los casados, hasta alcanzar “la transmutación
automática de las energías en su parte interna”.
En el caso de las personas que suspenden la
transmutación debido a enfermedades, a la falta de su pareja o
por la razón que fuera, su trabajo se estanca en el aspecto del
“Nacimiento” hasta que vuelva a iniciarlo, pero en ese intervalo
puede aprovechar la meditación, la muerte en marcha, los
ejercicios de prana, las vocalizaciones y la transmutación como

soltero para mantener encendido el fuego de la Conciencia con
la intensidad necesaria para evitar que se apague.
P.- ¿Cuanto tiempo después de haber terminado la práctica

Alquímica la persona puede lavarse o bañarse?
R.- Una vez un Maestro nos enseñaba que debemos evitar de

lavarnos los genitales o bañar nuestro cuerpo, mínimo una hora
antes de comenzar y una hora después de culminar el Trabajo
Alquímico. Yo le recomiendo, si ha hecho un buen trabajo, de
acostarse a descansar y bañarse preferiblemente al día siguiente,
cuando el hornillo del Laboratorio Interior se haya enfriado por
completo para evitar que se dañe, como ocurre cuando se vierte
agua fría sobre el motor caliente de un carro, produciéndose su
fractura con las consecuencias conocidas por todos.
P.- Tengo varios años en la Gnosis y no he podido eliminar

las poluciones nocturnas a pesar de haber intentado de todo.
¿Qué me aconseja para este problema que afecta mucho mi
vida?
R.- Cuando tenia algunos años en la Gnosis formulé esta misma

pregunta a un Maestro, quien después de una breve explicación,
me aseguró que para erradicar por completo esta molestia
horrible, necesitaba de muchos años de práctica, paciencia,
constancia y merecimientos.
Cuando el depósito se llena nadie puede evitar que se
sobrecargue y se derrame si no es transmutada. En si es un
mecanismo de la Naturaleza en el individuo que desconoce

estos estudios.
En nuestro caso particular es necesario cuidar
principalmente nuestras impresiones para evitar la identificación
con algún acto de debilidad egoica asociado a la lascivia,
creando instantáneamente una efigie mental que luego debe ser
enfrentada en el sueño con sus consecuencias consabidas, por
estar saturadas de pasión y fuerzas luciféricas impresas en ella
por nosotros mismos.
El estudiante que padece de este inconveniente debe
tomar todas las noches la horchata de la semilla de melón. Para
esto se licúan las semillas de esta fruta con una taza de agua,
transformándose en un liquido de apariencia lechosa que luego
se endulza con azúcar o miel y se ingiere poco antes de
acostarse.
Por otro lado, debemos acordarnos constantemente de
encomendar a nuestra Madre Devi Kundalini la vigilancia de
nuestras energías creadoras durante las horas del sueño,
pidiéndole nos alerte ante los peligros que puedan presentarse.
Las poluciones se eliminan por completo cuando el
organismo del Iniciado alcanza una octava vibracional
especifica en su energía creadora, produciéndose en él la
transmutación automática y consciente de las mismas, sin el
peligro de sobrellenar el depósito espermático por una super
producción de las glándulas asociadas a esta materia prima de la
Obra.
P.- He tenido muchos problemas en el Arcano por culpa del

mal aliento. ¿Puede recomendarme algo para este terrible
problema?
R.- Sin duda el mal aliento se transforma en un impedimento

para una buena relación de tipo amorosa. Existe un remedio
infalible, verdaderamente maravilloso para solucionar este
problema. Consiste en tomar en el día agua de arcilla las veces
que sea necesaria. Para prepararla es suficiente adquirirla en
alguna tienda naturista, colocar una cucharada de la misma en
un vaso grande de agua, batir unos segundos, dejar decantar y
luego usarla.
Si el problema persiste, sobre todo en los primeros días mientras
el remedio cura las paredes digestivas seguramente inflamadas,
irritadas o saturadas de bacterias y sustancias nocivas, pueden
reforzarlo, eventualmente, con la toma de una cápsula de
carbón vegetal, dos o tres veces por día.
Es importante además tomar frecuentemente infusiones
de ajenjo y romero, para ayudar al hígado en sus funciones
hepáticas.
También es recomendable hacerse un chequeo de la
dentadura para eliminar cualquier infección o caries que
producen un terrible mal aliento.
P.- ¿Qué opina usted sobre la inseminación artificial para

tener un hijo en las parejas que no pueden con el sistema
normal?
R.- La inseminación artificial es un método que violenta el

curso normal de la Naturaleza. En este caso se corre el riesgo
que la criatura buscada en contra de su voluntad sea un
“cuaternario”, un individuo divorciado de su Ser que viene a
llenar un espacio en el planeta, sin posibilidad alguna de realizar
una Obra Espiritual. Se trata de un caso perdido que solo cumple

la función de acompañar a sus padres que quisieron traerlo al
mundo para no sentirse solos, con el riesgo de que pueda
desviarse de los lineamientos deseados para su vida.
Creemos que para los externos, quienes confían en la
ciencia como en el Dios de la actualidad, este método pueda ser
factible y aceptable, pero para nosotros, que anhelamos algo
distinto, este método debe ser desechado de nuestros
pensamientos por completo.
P.- ¿Tengo solo unos meses en la enseñanza y me gustaría

saber si es aconsejable vacunar a nuestros niños y si puedo
usar anticonceptivos para evitar quedar embarazada porque
mi esposo es externo y no entiende nuestros principios?
R.- El Maestro Samael recomienda no vacunar a los niños para

evitar que su cuerpo astral se perjudique con ese procedimiento
artificial. Nosotros consideramos que si los padres de la criatura
están bien fundamentados en la enseñanza Gnóstica, tendrán la
suficiente fe en los Maestros de la Venerable Logia Blanca para
protegerlos de los virus que están haciendo estragos en la
humanidad actual con sus enfermedades incurables y mortales.
Por otro lado si siente duda y desea vacunarlos, lo puede
hacer para evitar ese temor y complejo de culpa por no haberlo
hecho. En fin es conveniente escuchar la voz del corazón
En cuanto a los anticonceptivos, la respuesta es casi la
misma. Si usted quiere hacer un trabajo serio de sus Iniciaciones
debe eliminar por completo el uso de estos productos.
P.- Soy soltero y muy joven, en muchas ocasiones hago

amistades con muchachas de mi edad y no se como
comportarme para evitar las tentaciones que se presentan.
¿Qué debo hacer?
R.- Entiendo perfectamente al hermano que hace la pregunta;

todos hemos pasado por esto. Es conveniente hablar siempre de
la doctrina y del comportamiento exigido para un estudiante
gnóstico ante la vida, para que la joven sepa de inmediato en
que estamos metidos y después de haberle hablado de todos los
principios de la Gnosis seguramente usted sentirá vergüenza de
actuar en forma diferente a los conceptos enseñados con tanto
alarde.
P.- ¿Las mujeres que tengan un solo ovario pueden realizar

la practica de la transmutación correctamente? ¿Que pasa
en el caso de aquellas mujeres sin ovarios y matriz por
habérsele extraídos por problemas de enfermedad? ¿Una
mujer en estas condiciones puede ser ungida como Isis?
R.- Las hermanas que posean un solo ovario por alguna razón de
la vida, pueden realizar el Trabajo Alquímico en forma parcial.
Es como el varón con un solo testículo quien produce la mitad
de la energía transmutada y necesita mas tiempo para ejecutar
su trabajo, por poseer menos materiales de construcción a su
disposición, pero lo importante es poderlo hacer.
En el caso de las damas sin ovarios, ni matriz por
habérsele practicado una histerectomía, debemos ser francos y
sinceros diciéndoles que no pueden realizar el trabajo de la
creación de los Cuerpos Solares y, por ende, del Nacimiento
Segundo. Pero pueden aprovechar la presente existencia para

concretarse a la Muerte Psicología y al Sacrificio por la
Humanidad, que le permiten ganar los méritos suficientes para
obtener en el próximo retorno un cuerpo físico idóneo para
terminar su trabajo relacionado con el factor Nacer.
Finalmente debemos decir que una mujer en estas
condiciones no debería ser consagrada como Isis, porque los
trabajos de liturgia que se realizan en el Altar se relacionan con
la creación de determinadas fuerzas que ameritan de un
laboratorio completo interno para su procesamiento. Es
doloroso decirlo pero debemos ser francos y precisos en
nuestras responsabilidades y aseveraciones.
P.- ¿Qué pasa en el caso que la dama tenga sus órganos

creadores completos pero esta ligada de los ovarios?
R.- En este caso particular la dama puede hacerse operar

nuevamente por medio de la micro cirugía y desligar las trompas
para restablecer sus procesos hormonales en su parte interna y
ganar el derecho solicitado, si aspira de verdad trabajar como
Isis del templo y reúne todos sus requisitos necesarios.
P.- ¿Qué posiciones se pueden adoptar durante la práctica

del Arcano?
R.- La mejor posición para realizar la practica de la Alquimia es

la tradicional o clásica, donde la mujer yace acostada boca
arriba y el hombre está sobre ella. Existen varias posiciones u
“asanas” descritas en el libro titulado los Misterios del Auro
Florecer. Nosotros opinamos que el Maestro Samael lo hizo

para cumplir con la información completa que le correspondía
dar como Avatara, Kalki y Maytreya de la nueva era de Acuario.
En cuanto al tipo de práctica permitida debemos
enfatizar que el único avalado por la Logia Blanca es el
LingamYony, el resto son aberraciones producto de la mente
degenerada del hombre y fruto de la influencia de la Logia
Negra para alejar aun más al individuo de su parte Espiritual.
P.- ¿Durante la práctica alquímica es permitido que el

hombre y la mujer se besen y acaricien?
R.- El hombre puede besar y acariciar el cuerpo de la pareja, así

como la mujer puede hacerlo con el hombre, pero todo en forma
mesurada y digna evitando sobrepasarse y perder el equilibrio
con la consecuente pérdida de la energía en una forma
deprimente donde se queman todos los valores anímicos de la
reacción Alquímica, dejando a su paso un ambiente desolador,
triste y terriblemente luciferico.
P.- Me recomendaron hacer las conjuraciones antes de

comenzar la práctica para evitar que el ego se apodere de
mí. ¿Esta correcto?
R.- Todas las cosas deben ser analizadas con lógica. Si la pareja
que se prepara para realizar un trabajo de esta naturaleza
comienza antes a rezar y a pronunciar las conjuraciones, el
impulso que tiene se desvanece. Nuestra recomendación es que
vigilen su mente durante las horas del día con la Auto
Observación, evitando divagar y caer en fantasías de tipo sexual,
las cuales dañan la energía en forma irremediable y a la hora de

ir al trabajo lo hagan sin mas preámbulos, teniendo presente su
responsabilidad como imitadores de Dios en la creación que se
proponen realizar.
P.- ¿Es posible para una pareja que esté practicando la

Alquimia tener un hijo y cuál es el método?
R.- La pareja que después de practicar el Arcano

A.Z.F. por varios años, desea tener un hijo puede hacerlo con su
derecho ganado si la Ley divina lo permite. Para esto es
importante que se estudie profundamente el libro titulado: “El
Matrimonio Perfecto” del V. Maestro Samael y “ La energía
Creadora” de Walter Siegmeinster, realizando además, la
practica que describimos a continuación, entregada por el V.
Maestro Lakhsmi:
En un cuarto creciente, la pareja entra al santuario con la
finalidad de hacer un ayuno de 3 días.
El día que sale del ayuno, a la hora 19, se bañan con agua de
plantas preferiblemente Altamisa, Ruda, Mano de Dios, Salvia,
Romero, Ajenjo y Canela, se perfuman con esencias de su
agrado(bergamota, Canela, Azahar, Jazmín, Sándalo, Ámbar,
Nardo, Rosas, Etc.) y se cambian de ropa usando siempre
prendas de algodón.
Ese mismo día colocan en una mesita dirigida al Oriente 3
velas, un pentagrama, un crucifijo, dos floreros y un vaso con
agua. La pareja se prosterna ante ese pequeño altar como lo
hacen el sacerdote y la Isis para comenzar el oficio.
Pide al Padre Interno, a la Divina Madre y a su Cristo
Intimo, que intercedan por ellos ante el Sacratísimo Espíritu
Santo, Dios de Dioses y Dador de Vida, pidiéndole que de

acuerdo a la Ley y a la Voluntad del Padre, se les conceda la
gracia de recibir un niño en su hogar, que sea una gran Alma, un
niño (a) que venga a trabajar en la Gran Obra y a servirle a la
humanidad. Esta petición se hace tres veces y se recita la
siguiente Oración:
Engrandece mi Alma al Señor y mi Espíritu se alegró en
Dios mi Salvador, porque ha mirado a la bajeza de su criado.
Porque he aquí desde ahora, me dirán Bienaventurado todas las
generaciones porque me han hecho grandes cosas el poderoso y
Santo en su nombre y su misericordia de generación a
generación a los que temen hizo valentía, con su brazo esparció
los soberbios del pensamiento; de su corazón quitó los
poderosos de los tronos y levantó a los humildes; a los
hambrientos hinchó de bienes y a los ricos envió vacío. Recibió
a Israel su Siervo, acordándose de la misericordia como habló a
nuestros padres, a Abraham y a su simiente para siempre.
Amen.
Ahora viene la petición que se le hace al Arcángel
Gabriel, él es quien determina que nazca un hijo o no, él es
quien se relaciona con todo lo que incumbe a la familia. Esta
Oración se hace tres veces al Arcángel Gabriel:
“Jehová de los ejércitos

si te dignares mirar la aflicción
de tu sierva y te acordares de mí
y no te olvidares de tu sierva,
mas dieras a tu sierva un hijo varón,
yo le dedicaré a Jehová todos los días
de su vida y no subirá
la navaja sobre su cabeza.
Esta petición se debe hacer los lunes astrológicos

(Domingo actual). Comenzando el día que sale del ayuno. Se
hace 3 veces por siete lunes a la hora 19:00 p.m. (El ayuno se
realiza una sola vez, el día que se comienza el trabajo).
Al finalizar el ayuno, ya habiendo hechas las peticiones y
oraciones, la persona o pareja culminara el trabajo de la
siguiente forma: En un papel pergamino perfumado con
esencias y pasado por un buen sahumerio de estoraque, mirra,
incienso, canela y nuez moscada, se escribe una carta con lápiz
de carbón, nunca con lapicero, y se dirige al Sr. Anubis y sus 42
Jueces de la Ley Divina, suplicándoles con el Alma y con el
Corazón se dignen inclinar el fiel de la balanza a su favor y les
concedan la gracia, de acuerdo a la Ley Divina, de enviar un
hijo (a), sano, noble, justo, etc. comprometiéndose a cambio, en
servir a la humanidad. Todo hay que pagarlo, nada se regala, es
necesario canjear una cosa por la otra.
Terminado el pergamino los esposos lo firman y se
vuelve a sahumeriar, quemándolo luego en un bracerillo con
más sahumerio y culminara el trabajo dando las gracias a las
Divinidades.
CAPITULO X1
LAS LEYES COSMICAS Y EL CAMBIO DE LA

GENETICA
Los miembros de las organizaciones Gnósticas se han

preguntado en repetidas oportunidades a través del tiempo, cual
sería la forma más rápida de avanzar en el camino recto que ha

de llevarnos, tarde o temprano, a la fusión con nuestro Real Ser.
Las dudas son muchas y a pesar de que la Doctrina
Gnóstica es tan completa y en el fondo tan sencilla,
desconocemos todavía aquellos factores esenciales y necesarios
para nuestro rápido crecimiento Espiritual.
El Maestro Samael, en su paso por el mundo de la
materia nos dejó, entre otras tantas extraordinarias enseñanzas,
“Tres Leyes Fundamentales” para el despertar de la conciencia,
que por ser tan sencillas y evidentemente lógicas no las hemos
tomado en cuenta con el valor que realmente poseen.
Consideramos necesario revisar el significado oculto de
estas “ tres reglas de oro” para aprovecharlas en todo su
contenido y significado oculto. La primera de ellas dice: “Al
León de la Ley se combate con la balanza”.
El León simboliza la Justicia Cósmica, el rigor de la Ley,
la voluntad del Padre.
Si en los Mundos Internos nos muestran un León furioso,
indica que la Ley Divina cobrará pronto alguna deuda
pendiente.
Por el contrario, si el León se muestra manso, apacible,
pasando a nuestro lado sin atacarnos, significa que, por ahora,
no tenemos deudas pendientes con la Justicia Divina y nos
incita, además, a aprovechar este momento propicio para pedir
alguna ayuda útil y necesaria para nuestra Obra individual.
Lógicamente, para combatir al León de la Ley que nos
ataca, necesitamos escudarnos con la Balanza de la Justicia. Si
ella se inclina a nuestro favor el León quedara vencido y no
podrá devorarnos, pero si se inclina en el sentido contrario
estaremos perdidos.
Obviamente todos quisiéramos tener una vida llena de

paz, de amor, de alegría y salud, pero en la mayoría de los casos
estos méritos no los tenemos, porque hemos infringido las Leyes
Cósmicas por nuestra ignorancia y, sobretodo, por las reacciones
violentas del ego que nos tiene esclavos de su fatalidad.
Todos los errores cometidos en esta o en antiguas vidas,
han producido terribles deudas en nuestro “Libro de la Vida”,
deudas que nos tienen ahora sumidos en el dolor, en la miseria y
en las múltiples enfermedades.
El ego es la causa del dolor. Si lográramos desintegrar
todos nuestros defectos, abríamos eliminado a la vez, la causa de
este terrible dolor y nuestra vida cambiaría radicalmente.
Quienes poseen un buen “Capital Cósmico” salen bien
en sus negocios, porque tienen la forma de cancelar sus deudas e
inclinar el fiel de la balanza a su favor en aquellos momentos de
fuerte dificultades.
El Maestro Samael, después de revelarnos el significado
oculto de esta maravillosa Ley, que nos permite comprender las
causas de nuestro dolor, nos entregó una segunda que reza lo
siguiente: “Cuando una Ley Superior trasciende a la Ley
Inferior, la Ley Superior lava a la Ley Inferior”.
Lamentablemente, algunos estudiantes gnósticos han
interpretado esta Ley en forma equivocada, como ha ocurrido en
muchas oportunidades con el estudio de las Sagradas Escrituras
a través del tiempo y a causa de esto, han cometido errores
muchas veces imperdonables.
Oímos de una persona que conoció nuestra enseñanza
hace muchos años y luego se retiró, quien basada en un falso
conocimiento de esta Ley sagrada, quiso dedicarse en una
oportunidad a sembrar plantaciones de droga, creída en el
concepto de poder luego vender el producto obtenido en la

cosecha y utilizar el dinero para alguna ayuda en bien de la
humanidad.
Este sería un crimen muy grave. Representaría un error
descomunal de interpretación de la doctrina. Significaría
trabajar con “dinero del Diablo” que nunca trae buenas
consecuencias.
Hay personas que organizan verbenas y eventos
similares, donde venden licores y cervezas para luego utilizar el
dinero recabado para financiar la construcción de un Santuario.
Este dinero ha sido ganado en una forma ilícita, contraria
a nuestros principios, los cuales nos inducen a enseñar con
nuestro ejemplo.
Algunos organizan rifas nacionales para obtener fondos
y poder ayudar con estos a los más necesitados, usando para ello
los sistemas manejados por el demonio Andramelek, quien es el
guardián de los juegos de azar y de las loterías.
Nuestra Institución es sin fines de lucro. Estamos de
acuerdo que necesitamos de los recursos económicos para poder
subsistir y crecer como organización, pero preferimos apelar a
los buenos sentimientos de aquellas personas que quieran
aportar su contribución voluntaria y consciente, útil para el
adelanto de su propia Obra, en vez de estar jugando con el
fuego.
Consideramos fuera del contexto doctrinal gnóstico la
interpretación hecha en algunas oportunidades sobre esta
maravillosa Ley, la cual busca el auto regeneración con la
humildad del Alma, sin mezclarla con las cosas mundanas.
Según nuestra interpretación personal, hecha a la luz de
la lógica esotérica, la Ley inferior se refiere esencialmente a la
que juzga a las personas normales y corrientes en el Tribunal del

Templo ubicado en el Plano Astral de nuestro planeta, dirigido
por el Señor Anubis y sus 48 Jueces de la Ley Divina.
La Ley superior se relaciona con los Iniciados y Adeptos
que son juzgados en el Templo de la Ley de la Katancia,
integrado por los Señores Anúbis de los siete sistemas solares
que integran las Pléyades, reunidos en pleno en el corazón del
Sol central de Alción.
Cuando logramos eliminar algún defecto, las deudas que se
procesaban por su causa pueden ser sometidas al perdón, por
solicitud de nuestro Ser, si se determina con exactitud que la
causa ha sido erradicada en forma definitiva. En este caso la Ley
superior lava a la Ley inferior.
La otra Ley que completa esta maravillosa terna es la

siguiente: “Haz buenas obras para que pagues tus deudas”.
En ella, probablemente, se encuentra la clave más
importante para poder emanciparnos en nuestro actual nivel del
Ser.
Debemos aceptar en forma objetiva que necesitamos
pagar nuestras Iniciaciones con “Dinero Cósmico” y la única
manera de ganarlo es a través de buenas acciones u obras hechas
en forma voluntaria y consciente en bien de la pobre humanidad.
No nos queda más remedio que abocarnos con ahínco y
decisión sobrehumana a concentrar las actuaciones de nuestra
actual existencia para ganar ese anhelado premio, tan necesario
en todos los momentos de nuestro espinoso recorrido.
El Dinero Cósmico es esencial para tener derecho a ser
cobijados por la Gracia de Dios, única protección que nos
garantiza una existencia digna con la posibilidad de recorrer
un trayecto importante de ese camino maravilloso que conduce

al Dios “Tum”.
Sin la Gracia de Dios estaríamos perdidos, porque los
continuos ataques perpetrados por los tenebrosos en contra de
nuestra integridad personal para impedir nuestro avance en el
camino Iniciático, son implacables.
Sería más que imposible dar siquiera un solo paso hacia
adelante en esa meta por acercarnos a lo único Divino existente
en algún rincón de nuestro Universo Interior, si no fuera por la
Gracia de Dios.
Un Iniciado podría estar haciendo una Obra maravillosa
en el aspecto de la Muerte Mística y del Nacimiento Segundo,
pero si no posee el Dinero Cósmico necesario para cancelar el
valor estipulado por la Ley para recibir las Iniciaciones, se
estancaría en un mismo nivel.
Este inconveniente le impediría a su Ser Interno
manifestarse por medio de sus Cuerpos Solares en los diferentes
planos de conciencia, sobre todo en el físico, que necesita de
manera especial para asomarse por su intermedio a la vida
celular, donde se mueven los aspectos más densos, los cuales
necesitamos estudiar, comprender y eliminar de nuestra psiquis
para hacernos “Maestros de la Vida”.
Si no comprendemos estos aspectos, que hacen parte de
nuestro sub consciente y no asimilamos su justo significado en
nuestra conciencia para que sea archivado como experiencia
eterna, nunca podríamos dominarlos y seguiríamos siendo sus
esclavos.
Debemos pasar del estado infrahumano, al estado
superior de Hombres a través de la comprensión, unida al
sacrificio por nuestros semejantes, quienes necesitan de nuestras
vivencias y experiencias para poder alumbrar su propio camino

y avanzar con pasos decididos en la causa noble de encarnar al
Padre Bien Amado Individual.
Todos somos ayudados continuamente por Seres muchas
veces desconocidos, algunos son Maestros del Invisible, otros
simplemente humanos que en determinado momento nos dan el
consejo justo necesario, la idea anhelada o simplemente, el
impulso para adelantar unos pasos más en nuestro maravilloso y
extraordinario recorrido por el mundo de la Luz.
Nuestra presencia en las diferentes existencia vividas a
través de los siglos, ha producido como resultado múltiples
experiencias positivas y negativas que llevamos en nosotros,
pero al mismo tiempo nos ha llenado de una cantidad
inimaginable de deudas, producidas por nuestros continuos
errores.
Si tuviéramos que cancelar todas las deudas en una
misma vida, nuestro cuerpo físico tendría una apariencia
monstruosa, sin la capacidad de hacer siquiera el discernimiento
de lo que esta pasando, ni tendríamos oportunidad alguna de
hacer un trabajo de regeneración.
Para este trabajo necesitamos un laboratorio interno en
buen estado para procesar las reacciones químicas y alquímicas
de nuestra energía, permitiendo la regeneración humana y la
conquista de los valores anímicos necesarios, que sirvan de
escolta al Cristo Intimo de nuestro Templo Interior Profundo.
Afortunadamente, la mediación de nuestra Bendita
Madre Devi Kundalini, aunada a la misericordia de Dios,
permite que el karma se cobre de acuerdo a nuestras
posibilidades, lográndose inclusive la condonación de algunas
deudas a condición de que eliminemos la causa de las mismas;
esta causa, como decíamos anteriormente, estriba en el famoso

ego formado por nosotros en el transcurrir del tiempo.
Una vida santa de recogimiento, un buen trabajo de
transmutación, de análisis y eliminación de nuestros defectos,
vicios y costumbres, son sin duda maravillosos aspectos,
esenciales y fundamentales para realizar la Obra, pero debemos
complementarlos con el sacrificio y con buenas acciones
hechas en beneficio de nuestros semejantes.
Los Misioneros Gnósticos, quienes tienen esa increíble
vocación y son capaces de dejarlo todo, sus familias, amigos,
compañeros, comodidades y trabajos para dedicarse a la
difusión doctrinaria del Salvador del mundo, de puerta en
puerta o de pueblo en pueblo, tienen indudablemente una gran
ventaja en el recorrido de su transformación Espiritual.
Si los Misioneros unen ese sacrificio a los otros aspectos
necesarios para hacer su Obra, indiscutiblemente avanzarán en
forma muy acelerada en la Iniciación.
Sin embargo, no todos poseemos esa misma vocación o
capacidad innata, pero podemos ayudar a los Misioneros a
cumplir con mayor rapidez la labor necesaria en la difusión de la
enseñanza y compartir con ellos la retribución que hace la
Venerable Logia Blanca para esta clase de servicios.
No todo el mundo es capaz de pararse ante un público a
dar una conferencia o enseñanza; no todos sienten el impulso de
salir de su casa para dedicarse a la difusión de la Doctrina
Gnóstica; no todos pueden ser Misioneros porque entonces
¿Cómo se haría para mantener los Lumisiales activos con sus
juntas sacerdotales y esotéricas?
¿Quién dirigiría los Monasterios, los Templos de

Misterios y los Santuarios dedicados al ejercicio de la Medicina
Universal?
¿Quién se dedicaría a los aspectos administrativos y
directivos de la institución, que también son fundamentales para
el desarrollo integral de nuestra organización?
Todos conformamos un ejército. El Venerable Maestro
Samael lo denomina “El Ejército de Salvación Mundial”, donde
cada uno cumple un papel importante, al igual que un cuerpo
humano compuesto por diferentes órganos.
Si esos órganos, todos fundamentales, no tuvieran las
células y las innumerables partículas circulando en la sangre,
llevando cada una un pequeño aporte para el bienestar del
cuerpo, inevitablemente habría un desequilibrio que produciría
algún inconveniente o enfermedad en el organismo, el cual
terminaría agravando o produciendo el colapso de su
funcionalismo integral.
Por eso manifestamos, sin temor a equivocarnos, que
todos los integrantes de nuestra institución, sin distinción
alguna, son miembros esenciales de ese conjunto maravilloso de
nuestra organización Iniciática y sin ellos fracasaría nuestro
esfuerzo por recorrer con éxito el camino de la Espiritualidad.
Consideramos importante en este momento aclarar
aquella frase Bíblica que recomienda pagar nuestros diezmos.
Los diezmos, según nuestra interpretación objetiva y
personal, representan la dedicación del diez por ciento de
nuestro tiempo a todo lo relacionado con nuestro Dios Interno.
El día posee veinticuatro horas y si le restamos las
nueve, que normalmente necesitamos para nuestro descanso,
quedarán aproximadamente otras quince para ser distribuidas en

las actividades de nuestro diario vivir.
De estas quince deberíamos dedicar una hora y
cincuenta minutos como mínimo, para los aspectos espirituales,
tales como meditación, vocalización, transmutación, rituales,
trabajos litúrgicos y de teurgia, convivencia, ayunos,
reflexiones, servicios desinteresados en pro de la difusión de la
enseñanza, de la caridad y tantas otras actividades conocidas
ampliamente por nosotros.
Pagar los diezmos jamás significa regalar el diez por
ciento de nuestro sueldo o ganancias a la institución religiosa a
la cual pertenecemos. Su significado se refiere exclusivamente a
los aspectos Espirituales.
Quien realiza servicios en bien de la Obra recibe como

recompensa un Dharma o premio, traducido en Dinero Cósmico
que podremos utilizar en los momentos de dificultades,
enfermedades, problemas en el hogar, cuando pedimos la
virtud o el don de la castidad, cuando imploramos morir
místicamente, etc.
Todos los favores o peticiones dirigidas a la Ley Divina
deben ser acompañadas por el pago de ese servicio con Dinero
Cósmico, ya que nada se nos da por regalado.
Las dádivas obtenidas a veces por la Divinidad, son
premios especiales concedidos por mediación de algún Ser
Celestial que intercede por nosotros y al igual que el hombre
generoso de la tierra, da una limosna con la cual podemos
recibir un bálsamo de esperanza y un alivio a nuestro dolido
corazón.
Por otro lado es conveniente reflexionar en aquella

maravillosa oración del Padre Nuestro que dice: “Perdona
nuestras deudas así como nosotros perdonamos a nuestros
deudores”.
Esta maravillosa frase, escrita por nuestro Señor el
Cristo, nos indica con su inconmensurable sabiduría que para
tener derecho a pedir el perdón de nuestras deudas debemos
antes aprender a perdonar a nuestros semejantes.
Si pedimos ser curados debemos ayudar a otras personas
en aliviar sus dolores y padecimientos sufridos a causa de las
diferentes enfermedades.
Si pedimos armonía en el hogar, debemos contribuir a
mejorar la convivencia de otras parejas, orando a Dios y a la
Madre para que sean ayudadas y puedan reconstruir o mejorar
las relaciones de su matrimonio.
Si pedimos paz, debemos procurar no emitir falsos

testimonios, chismes o conceptos negativos que puedan causar
desconcierto o desarmonía en las vidas de los demás.
Si pedimos el auxilio de los Elementales de la
Naturaleza, para que protejan nuestras vidas, nuestra familia,
nuestro hogar, nuestra integridad personal y nuestro matrimonio,
debemos antes aprender a respetar la Naturaleza y a todas las
criaturas que viven en ella.
¿Con qué derecho un cazador, que mata los animales del
bosque destruyendo la fauna, torturando esas pobres criaturas
con persecuciones, perros de caza, trampas ilegales, puede
pedir auxilio a la Madre Naturaleza?
La mayoría de los cazadores aseveran que matan para
comer, pero es importante aclarar que el hombre tiene derecho a
sacrificar y comer únicamente a los animales domésticos, los

cuales se encuentran en un nivel de evolución más próximo al
humano, a los que nosotros criamos, cuidamos y alimentamos.
Los animales silvestres son protegidos y alimentados por
la Madre Naturaleza y solo Ella puede disponer de sus vidas y
evolución.
Sólo los indígenas de la selva, que realizan sus vidas en
ese mismo ambiente y son parte de ese mismo reino protegido
por la Naturaleza, tienen derecho a cazar para alimentarse, sin
pagar karma por ello.
Necesitamos ahora explicar la existencia del Karma
Mundial, Familiar e Individual para una mejor comprensión de
este aspecto tan interesante de la doctrina gnóstica. Estos tres
Karmas son la causa de nuestro propio sufrimiento.
El Karma Mundial está relacionado con el castigo

impuesto a la humanidad entera por la Ley Divina a causa de
los crímenes que se han y se siguen cometiendo en contra de la
Naturaleza, por medio de la contaminación del ambiente, a
través de los pesticidas, a causa de la destrucción de la capa de
ozono, por la combustión de los hidrocarburos y demás
elementos nocivos; por culpa de la contaminación de las aguas
de los océanos con los continuos derrames de petróleo; por
descargar en los ríos irresponsablemente las aguas negras de las
ciudades; por la pesca indiscriminada con métodos prohibidos;
por la destrucción de los bosques con su consecuente reducción
del hábitat para las criaturas de ese ambiente; por aprisionar
aves y animales salvajes o silvestres; por la destrucción de la
vida en general sobre la faz de la tierra; por la contaminación del
aire con elementos tóxicos que impiden una optima respiración
como fuente de vida; por la manipulación genética de plantas,

animales y humanos para crear productos contra natura, a
imagen y semejanza del hombre y no de Dios; a causa de las
guerras y crímenes contra la humanidad, explotación humana y
animal, barbarie de la peor especie; prostitución de la mujer y de
la juventud indefensa; abusos en contra de los más pobres y
necesitados; violaciones en contra de los pueblos y sus derechos
de libertad, etc.
Todas estas violaciones de la Ley han creado un terrible
Karma Mundial, cuyo castigo se reparte en porciones
equivalentes entre cada miembro que compone la humanidad
entera.
La Madre Naturaleza cobra estos karmas por medio de
terremotos, maremotos, huracanes, inundaciones, pestes,
sequías, guerras, tribulaciones, etc. y a veces lo hace en países
extremadamente pobres que aparentemente no se meten con
nadie.
Todos estamos ligados por una misma sangre, vehículo
de expresión del Espíritu de Vida, a pesar de no conocernos
entre la mayoría de nosotros.
Todos somos hermanos porque nos une la misma Vida,
el Cristo y por eso todo lo que hagamos, malo o bueno tiene
una repercusión directa o indirecta en nosotros, obligándonos a
pagar lo negativo y ser recompensados por lo positivo.
Nadie puede escapar del Karma Mundial, a menos que
no se separe del reino animal al cual todavía pertenecemos y
pase a formar parte del Reino Humano, el Reino del Hombre
verdadero.
En este caso se transformaría en parte del Círculo de la

Humanidad Consciente, que posee otras Leyes donde el Karma
Mundial no repercute en absoluto.
El Karma Familiar es el resultado de todas las
infracciones de la Ley realizadas por los integrantes de una
misma familia.
Si una familia esta compuesta por diez miembros y uno
de ellos comete un crimen, una parte del castigo, producido por
esa infracción, es recibida por el resto de la familia, ya que
todos están ligados por una misma cadena genética y por la
misma sangre.
Nadie podría negar que si un miembro de determinada
familia es un delincuente, el resto de la misma es mirada por la
sociedad con cierta desconfianza, a pesar que, aparentemente,
los demás no tengan que ver con sus crímenes.
Si un pariente cercano se enferma gravemente, sentimos

la obligación de compartir con su dolor y procurar los medios
económicos para la compra de las medicinas.
Si un familiar está preso sentimos el deber y la
obligación de ayudarlo a reconquistar la libertad; percibimos
con intensidad parte de su dolor y nos sentimos responsables de
su condición desfavorable dentro del seno de la familia.
El Karma familiar se relaciona también con los errores
cometidos en pasadas existencias con nuestras familias, esposas,
hijos, sobrinos, etc.
El Karma Individual, finalmente, es el producto de
los errores cometidos por nosotros mismos a causa de nuestro
ego que continuamente nos involucra en problemas de
desagradables consecuencias.
Nuestra inconformidad por las cosas de la vida, el

maltrato verbal y físico que le damos a los demás, el mal
comportamiento frente a nuestros hijos y allegados, el desacato
a los mandamientos de la Ley de Dios, nos sumergen en un
océano de oscuridad y dolor, arrastrándonos hasta los niveles
más bajos de la depresión y del descontento.
Necesitamos llegar a la convicción plena de eliminar por
completo el ego y sus consecuencias, para escapar
definitivamente de este tipo de fatalidad.
Si analizamos con detenimiento los tres tipos de Karma
descritos anteriormente, nos daremos cuenta que la carga a la
cual estamos sometidos es muy pesada, y por esa razón nuestra
vida se complica con inmenso dolor y sufrimientos, a veces
insoportables.
Podríamos decir, después de todo lo escrito

anteriormente, que no existe mejor negocio que convertirse en
“Siervo” de la Venerable Logia Blanca, la cual pone a nuestra
disposición todo lo necesario, sin excesos ni opulencia, para
lograr las transformaciones requeridas de nuestras partes
internas en forma paulatina, lo que podríamos denominar: “El
cambio de la Genética Humana por medio del desarrollo de la
Espiritualidad”.
Si quisiéramos sintetizar cuál es la meta a lograr en
nuestra vida, diríamos que se resume en la transformación de
nuestra “Genética Física y Espiritual”.
Todos hemos escuchado que la Genética se hereda de
nuestros antecesores, de nuestros antepasados.
En el caso particular humano es importante reconocer
que nuestra herencia genética se manifiesta hasta la quinta
generación. Pareciera que ya después de ésta, las características

transmitidas disminuyen drásticamente hasta el punto de ser
consideradas nulas.
En algunos países de Europa para que un individuo sea

aceptado como policía nacional o para algún cargo de
responsabilidad especial, debe contar con un árbol genealógico
impecable durante sus cinco ultimas generaciones,
precisamente para evitar que los genes de la criminalidad,
escondidos en la familia, puedan aparecer en esa persona en
cualquier momento, produciendo sus irremediables
consecuencias.
Nosotros heredamos la raza de nuestros antecesores, así
como el color del cabello, de los ojos, de la piel, la estatura, la
musculatura, el tipo de sangre, la forma de hablar, de caminar,
diferentes tipos de enfermedades y lo más asombroso, la forma
de pensar, de sentir y de ser.
La genética es una característica tan marcada en nuestros
cromosomas y en la cadena del ADN, archivada en forma
sigilosa en cada célula humana, que no se le escapa un solo
detalle en la transmisión de las características a sus
descendientes.
Si el abuelo de determinada persona fue borracho o
mujeriego, probablemente su hijo o nieto herede genéticamente
esas mismas características que, indudablemente, le causaran
inconvenientes graves en su existencia.
Si este fue ladrón, asesino o violador, la cosa será peor
y la marca indeleble de esta misma tragedia rondará las vidas de
los que derivan de su mismo árbol genealógico.
Pero, si ese abuelo fue un hombre sereno, equilibrado,

sobrio, casto y justo lo más probable es que su hijo, nieto o
descendiente herede esas mismas virtudes.
En el caso particular de los estudiantes gnósticos, desde
el momento que conocimos nuestra doctrina, no podemos
lamentarnos por el eventual inconveniente que posiblemente
algunos tuvieron en nacer en un hogar cuyas características no
les ayuda mucho genéticamente para su vida física y Espiritual.
Nosotros conocemos las Leyes Cósmicas y sabemos que
nada sucede por casualidad; todo tiene una razón de ser y
debemos mas bien hacer los super esfuerzos necesarios para
cambiar el rumbo de nuestro destino, manejado por la fatalidad
de una herencia no deseada.
Los Maestros de la Ley Divina aprovechan los caracteres
hereditarios de una familia para enviar a las personas que
retornan a una nueva matriz humana, las cuales deben pagar
determinado castigo o al contrario, ser recompensadas por haber
hecho alguna buena obra.
Por lo tanto, si una persona sufre en esta vida de alguna
enfermedad asociada a un mal hereditario como la diabetes, el
cáncer, los males cardiacos, debilidad cerebral, locura, debilidad
genética general, etc., es porque tiene una razón bien definida,
ya que nada sucede por casualidad; la ley Divina nunca nos
cobra algo que no debemos.
El deber nuestro, como conocedores de las claves de la
regeneración humana y de la utilización de la Energía
Creadora, aunada al conocimiento integral de los secretos para
trabajar con los Dioses Siderales, es cambiar lo que heredamos
y recibimos de nuestro destino.
Nuestra meta debe ser transformar nuestra Genética

Individual para permitir a nuestra semilla humana recibir sus
influencias asociadas y poder sembrar mejores productos en
nuestra “Tierra Filosofal”, recogiendo cosechas superiores, con
la finalidad de favorecer el camino de retorno al seno de una
nueva matriz humana con las condiciones idóneas que nos
permitan realizar una vida con un nivel superior de conciencia.
Lo que sembramos hoy lo cosecharemos mañana. Si
transformamos nuestra forma de actuar, de pensar, de sentir y de
hablar, naceremos en mejores condiciones humanas en nuestra
próxima existencia, con mayores virtudes, con mas inteligencia,
con mas capacidad de comprensión.
Obviamente si mejoramos nuestra semilla, nuestros hijos
nacerán más fuertes y resistentes a las diferentes enfermedades
de la época e inmunes a muchos vicios y debilidades de tipo
egoicas.
Si a su vez nuestros hijos, que han recibido una mejor

genética de la nuestra, continúan su trabajo de mejoramiento de
la semilla y regeneran su cuerpo y su Alma, sin duda tendrán la
oportunidad de engendrar hijos con mejores capacidades físicas,
intelectuales y anímicas que nosotros.
Si observamos el aspecto puramente físico, tendremos
todas las ventajas antes descritas, pero si vamos un poco mas
allá, si nos dedicáramos a cambiar nuestra Genética Espiritual,
recibiríamos una transformación tan grande que nos permitiría
heredar una Esencia depurada de tantos elementos negativos y
nos transformaría en mujeres u hombres virtuosos en una vida
futura.
Si al nacer nuevamente, con mejores condiciones físicas

y de conciencia, siguiéramos el mismo camino de la
regeneración humana, lograríamos mejorar aún más nuestros
aspectos psicológicos y mentales y esto nos daría la
oportunidad de escalar un nivel cada vez superior del Ser.
Esta característica traería como consecuencia positiva
un acercamiento mayor con nuestro Padre Interno, quien podría
envolvernos con mas intensidad en su Aura Santa desde su
mundo y alimentarnos con la luz de la conciencia.
De esta manera lograríamos integrarnos más con ese
aspecto Divino que hace parte de nuestra genética particular,
para transformarnos en lo que fuera nuestro proyecto original,
llegar a ser Hombres en el verdadero sentido de la palabra.
En la actualidad se habla continuamente del estudio de
las plantas, de los animales y sobre su manipulación genética,
para producir frutos en mejores condiciones que sirvan de
alimento a los seres humanos.
Las plantas son transformadas para lucir más hermosas y

sus productos puedan ser más apetitosos. Las semillas son
manipuladas genéticamente para producir plantas con mayores
frutos que las anteriores, cosa que no compartimos en absoluto
como estudiantes gnósticos.
Los animales son estudiados en sus funciones genéticas
para mejorar su semilla, con la cual se pueda producir una
mejor raza.
Los criadores de caballos de carreras saben que no deben
permitir a sus caballos aparearse con las yeguas, a menos que
busquen una reproducción controlada. Ellos han comprobado
que del celoso ahorro de la simiente depende la estampa del
animal, su vigor y capacidad de carreras, su brillo y fogosidad

que le dan una marcada diferencia con relación a los demás
caballos criados en forma común.
Lo mismo ocurre con los toros de casta utilizados para la
reproducción o para las corridas, donde se presentan animales
que asombran por su vigor y aspecto, producto de un manejo
particular de las energías sexuales de esos animales, que son
obligados a ser castos y de ahí su denominación de “toros de
casta”.
El famoso alquimista Fulcanelli dice lo siguiente en
su libro “El Misterio de las Catedrales”: “Existe una piedra de
grandes virtudes, la que siendo llamada piedra no es una piedra,
es mineral, vegetal y animal; se encuentra en todas partes y a
toda hora, en cualquier persona”.
Mas adelante el mismo autor dice: “La elaboración del
Mercurio Filosófico no requiere de una especial destreza de
mano, ni habilidad profesional, sino solamente el conocimiento
de un curioso artificio que constituye aquel Secretum
Secretorum que jamás ha sido revelado y que, probablemente,
jamás lo será”.
El insigne Alquimista Francés Nicolás Flamel escribió
lo siguiente: “ Hay una piedra oculta, escondida y sepultada
profundamente bajo un manantial; ella es vil, pobre y sin
ningún valor y esta cubierta de excrementos y de estiércol; a
ella, siendo siempre la misma, le han sido dados muchos
nombres diversos”.
Estos grandes Seres, científicos, alquimistas y Maestros
resurrectos no pudieron entregar la clave suprema de la
transformación del plomo de las bajas pasiones en el Oro de las
virtudes de nuestra conciencia, porque no estaban autorizados
para develar el secreto de los secretos, pero asomaron en cierta

manera la clave fundamentada en la Energía Sexual contenida
en nuestros órganos creadores y ubicada en el bajo vientre.
Esto nos recuerda a las plantas de rosas que extraen el
perfume de sus flores del lodo de la tierra.
Seria maravilloso que la ciencia oficial realizara
estudios profundos para mejorar la semilla del ser humano en
forma digna y respetuosa, sin violaciones de las Leyes Divinas,
teniendo como faro de orientación la inteligencia de Dios
presente en cada partícula que la integra. Con estos estudios y la
aplicación de los correctivos adecuados lograrían mejorar
considerablemente la especie, y se pudiera comprobar que
utilizando sabiamente nuestra semilla podríamos lograr
verdaderas proezas.
Conocemos sólo un extraordinario trabajo de
investigación, realizado en la comunidad “Oneida” en algún
lugar de los Estados Unidos y descrito ampliamente en el libro
titulado: “La Energía Creadora” del autor Walter Siegmeister,
donde experimentaron con dos grupos de parejas por un tiempo
de treinta años, uno que utilizó el sistema de no derramar él
liquido seminal en sus practicas sexuales y el otro usando los
métodos tradicionales conocidos.
Los primeros, después de varios años de preparación,
engendraron sus hijos por medio de una relación normal.
Se pudo demostrar en forma científica que esos niños
poseían características superiores a todos los demás fecundados
con el método común, tanto en su aspecto meramente físico
como en el psicológico, mental y espiritual.
El ser humano de esta época, buscando evasivas al
sacrificio necesario de conservar y transmutar sus energías, está
utilizando la ingeniería genética, lo que lamentablemente esta

adulterando la vida con la manipulación de los cromosomas.
Este no es el método correcto, representa más bien una
grave violación hecha en contra de la Madre Naturaleza y su
resultado es la creación de frutos privados de la inteligencia
original y del nexo con su Divinidad Interior.
El hombre de ciencias de la actualidad está jugando a ser
Dios, sin haber encarnado siquiera los mínimos principios
necesarios para manipular la vida, que es sagrada.
Basta pensar que todos los animales silvestres usan el
sexo únicamente para reproducirse, empleando el resto del
tiempo una especie de transmutación natural, dirigida por la
Madre Naturaleza que les permite tener el semblante y el
aspecto regio.
El campesino sabe perfectamente que para sembrar una
mata de maíz o cualquier otro grano, es suficiente depositar en
la oscuridad de la tierra una sola semilla para obtener el
resultado deseado.
Solo el hombre animal desperdicia millones de semillas,

conocidas como espermatozoides, para fecundar un hijo y miles
de millones para satisfacer insaciablemente su instinto pasional.
Sin embargo, debemos admitir que todo esto representa
un fenómeno característico de nuestra era de decadencia, donde
el Anticristo deberá reinar para que se cumplan las profecías en
los actuales tiempos del fin.
La semilla humana debe ser mejorada a través de los tres
sistemas dejados por la Venerable Logia Blanca que son:
Purificar los pensamientos, realizar una correcta respiración y
tener una buena alimentación.
Son tres principios muy sencillos, que por ser tan

elementales, muy pocas personas los toman en cuenta y les dan
la importancia que realmente tienen.
Si mejoramos nuestra forma de pensar, indudablemente
el temple recibido por nuestra energía será muy superior al
normal, produciendo en nuestra Mente Universal particular la
capacidad de producir lenguas de fuego purificador, que harán
milagros en nuestra constitución interna.
La luz que de ella emana, cuando hay pureza de
pensamientos, envuelve el ambiente del ser humano y
transforma su aura, su egregor personal, produciendo con ello la
exaltación Divina que trae como consecuencia un nuevo tipo de
energía sexual, con la inteligencia inculcada por Dios a los
espermatozoides que, así como nosotros, poseen materia,
energía y conciencia.
La respiración le imprime la fortaleza, el vigor, la
temperancia y el movimiento sinuoso que les permite elevarse a
niveles superiores de conciencia, transformándose en un
producto de alto nivel, indispensable en la producción de nuevos
aspectos humanos y Divinos en nuestro Universo Interior
permitiendo, como resultado final, la gestación del Hijo del
Hombre, del Cristo en el corazón humano.
La alimentación, indudablemente, contribuirá otro tanto
para mejorar nuestra semilla, porque aporta un tipo de energía y
vibración a nuestra materia reproductora, volviéndose más pura
a medida que los alimentos ingeridos sean mas Sattwicos.
Sólo por medio del cambio de nuestra Genética
Espiritual y Física podremos salir victoriosos de este terrible
laberinto, que nos arrastra en forma inexorable, por el
borrascoso río de la mecánica humana hacia el fatídico abismo
de la perdición, del cual nunca podremos salir hasta haber

sentido en los mas profundo de nuestra conciencia el dolor que
producimos en los demás por nuestros atropellos y pésimas
actuaciones.
La única forma de conseguir el cambio de la Genética es
transformando nuestra Energía Creadora, la cual está compuesta
por todos los elementos y minerales presentes en los mares,
representando a las aguas genéticas del planeta.
Si analizamos nuestro planeta nos daremos cuenta que
tres partes del mismo está compuesto por agua y un tercio por
tierra.
El cuerpo humano, llamado por los antiguos alquimistas
“La Tierra Filosofal”, posee la misma composición.
Sin embargo lo más asombroso es la comprobación de
que la simiente humana posee los mismos elementos del agua de
los mares, incluyendo trazas de oro, utilizadas por nosotros en el
Trabajo Alquímico para la fabricación de los Cuerpos Solares
Existenciales del Ser.
El axioma del Sabio Hermes Trismegisto dice: “Como

es arriba es abajo, como es adentro es afuera”.
En síntesis diremos que todo el trabajo de regeneración se basa
en la sabia utilización de nuestras Energías Creadoras.
Bien valer la pena hacer un super esfuerzo para lograrlo en
esta vida, cuando las Divinidades nos han concedido la gracia de
encontrar “El Real Camino”.
Debemos analizar nuestra probable oportunidad de estar
viviendo nuestra última existencia de la actual ronda de idas y
venidas como humanos.
De nosotros depende si el día en que desencarnemos y

estemos frente a los Jueces de la ley Divina, sometiendo a
nuestra Conciencia al juicio de rigor, podamos salir victoriosos
y combatir, como lo decíamos al comienzo, al León de la Ley
con la inclinación de la Balanza a nuestro favor y tener derecho
a una mejor oportunidad para hacer o completar nuestra Obra.
CAPITULO XII
DE LOS TEMPLOS, LUMISIALES Y MONASTERIOS

Desde los albores de los antiguos tiempos hemos venido

escuchado, con asombro y gran interés místico, sobre los
Templos de Misterios, los Monasterios y los diferentes lugares
sagrados edificados por el hombre para la adoración de la
divinidad y el estudio de la Gran Sabiduría Universal.
En la antigua Grecia los Templos se convirtieron en el
epicentro de toda actividad; en esos lugares se veneraba a los
Dioses del Olimpo y las Sacerdotisas, meticulosamente
preparadas para esos menesteres, vaticinaban sus profecías con
inusitada destreza.
Evidentemente la castidad brillaba en el rostro augusto
de esas mujeres santas que con poderes sobrenaturales
mostraban al Dios Madre ante los ojos devotos de los humanos.
Las alegorías de Homero, sobresaliente Adepto del rayo
del Arte en esa época, lograron plasmar con especial maestría
eventos relacionados con las faenas divinas por medio de su
diestra pluma guiada por los movimientos seguros de su mano,
inspirada a su vez por la inteligencia profundamente ignota del
Espíritu.
El Partenón, símbolo mágico de la gran Acrópolis,
ciudad de Dioses y humanos, representa sin duda la sabiduría de
los siglos de la heroica Grecia, del tempestuoso Aquiles y del
soberbio Héctor.
Los Atenienses y los Espartanos se dividieron la gloria
de ese pueblo entre el rayo sobrio del Amor de Venus y el arte
regio de los heroicos luchadores, acérrimos seguidores de las
exigentes milicias, impulsadas por Marte, el Dios de la guerra y

de la fuerza.
En la antigua Atenas de los Templos y Colegios

edificados con labradas piedras de magistral toque artístico
refinado, los grandes filósofos, matemáticos y médicos de la
época griega se disputaban el trofeo del saber y encontraban
todo un sabor de éxtasis en la cultura literaria que tanto
desarrollo intelectual y humano aportó a la humanidad de la
edad de Piscis.
Hermes Trismegisto, el tres veces grande, conocido

también en el antiguo Egipto con el nombre del Dios Ivis de
Thot, autor de profundos escritos sagrados entre los cuales
resalta su obra magistral titulada las Tablas Esmeraldinas;
Pitágoras, con sus profundos conocimientos sobre el origen de la
vida, padre de las matemáticas, del teorema que lleva su mismo
nombre, de los decimales y de la tabla de multiplicar; Euclides,
insigne filosofo y matemático descubridor de la geometría;
Sócrates, filosofo sobresaliente que aun sin dejar obras escritas
logró permanecer en la historia de los famosos por haber tomado
la cicuta ante de someterse a los caprichos arcaicos de los
intelectuales de la época; Aristóteles, extraordinario filosofo que
influenció notablemente en los pueblos islámicos por su
profundo conocimiento sobre conceptos religiosos; Tales de
Mileto, quien le dio sentido histórico a esa celebre frase: Homo
nocete ipsum “ Hombre conócete a ti mismo... y conocerás al
universo y a los Dioses; Platón, refinado y delicado filosofo que
logro por medio de su sutil retórica descubrir ante el mundo las
enseñanzas de Sócrates e imponer el concepto tan excelso del
amor Platónico. Todos estos hombres difundieron sus
pensamientos preñados del aroma de la luz, sin olvidar ni obviar

jamás la presencia de Dios en toda la creación universal.
Sin embargo es interesante observar que todos estos
personajes poseían su propia individualidad que difícilmente
compartían con los demás. Todos eran Maestros de la vida pero
guardaban sus enseñanzas celosamente entre sus discípulos, los
cuales a su vez tampoco se asociaban a miembros de otros
colegios.
Cada uno fundaba una escuela identificada normalmente
con el nombre de su Maestro interno, y aunque poseían una
misma base doctrinal universal, eran diferentes en sus formas y
procedimientos.
Esta misma modalidad sigue imperando en los tiempos
nuestros, en los cuales no hemos observado a los diversos
Maestros de la doctrina Gnóstica compartiendo plenamente sus
enseñanzas. Cada uno forma su propia organización individual
y dirige sus enseñanzas, relacionadas con su rayo doctrinal y
con los secretos de la vida y de la muerte.
Es triste saber que todos los Templos antiguos,
testimonio de gloria y espiritualidad de los múltiples pueblos,
fueron destruidos por los emisarios del Cristianismo, quienes
después de demoler esos hermosos lugares sagrados, fundieron
el oro de las estatuas y los variados adornos presentes, para
usarlos en sus propias edificaciones.
Luego construyeron inmensas catedrales encima de sus
cimientos, queriendo indicar con su soberbia que solo ellos
poseían la verdad y todos los conocimientos existentes en ese
tiempo de terrible y peligroso oscurantismo.
Épocas de continuas barbaries siguieron a esos
vergonzosos días para al fin llegar a los tiempos nuestros en
los cuales, lamentablemente, la religión es casi un mito y Dios

una leyenda.
Los Templos Egipcios fueron también obras de ciclópea
magnitud. Las pirámides, monumentos asombrosos inmolados
en nombre de Osiris-Ra, el Cristo Cósmico Egipcio, son
ejemplo inequívoco de la grandeza humana.
La Esfinge, como representación de la Bendita Madre
Naturaleza, se yergue imperiosa en la antesala de los Templos
de la inmortalidad, sintetizados en las pirámides de Keops,
Kefrén y Micerino, mostrando con su majestuosidad
sobrenatural todos los aspectos y elementos que en ella se
encierran para gloria de unos y espanto de otros.
Los Templos Asirios, Babilonios, Persas, Hindúes,
Chinos, Aztecas, Mayas, Toltecas, Zapotecas, Incas, etc. han
dejado siempre en nosotros un sabor de regio asombro y de
inigualable belleza artística.
Los Templos y Monasterios Cristianos también
impresionan por su belleza y por sus escarpados lugares de
edificación. Lo más relevante es saber que todas estas maravillas
de la humanidad fueron construidas para adorar a las fuerzas
cósmicas del Amor en las cuales se sintetiza toda religión y toda
ideología inspirada por la luz divina.
En los actuales momentos los Templos y Monasterios
Gnósticos conservan aún los ritos sagrados de los Dioses
inmortales que se expresan en ellos con la particularidad de la
sencillez a través de un sentimiento puro, producido en el
corazón del buscador sincero o simplemente por medio del
silencio y de la contemplación.
Nuestros Templos representan el cuerpo físico de una

conciencia superior, que anidada en su interior se manifiesta en
su egregor particular por medio de la luz.
Esta conciencia rasga continuamente el manto de
nuestro micro universo personal con sus caricias, produciendo
así la chispa para encender el fuego de la fe y de la inspiración,
motivos esenciales para nuestro recogimiento y comprensión de
lo sobrenatural.
Unas pocas paredes humildes componen un Templo
Gnóstico, pero en ello se encuentra la luz terriblemente divina
del Espíritu.
Un Altar como símbolo del corazón; unas flores
representando las virtudes del Alma; una espada como símbolo
de la voluntad; dos liturgias como representación de la
sabiduría; un báculo indicando el poder; siete velas encendidas
expresando la presencia del Ser y una luz perpetua como
evidencia del fuego de la conciencia que debe permanecer
siempre encendida, son suficientes elementos para conformar el
nido de la serpiente ígnea, que purifica las imperfectas
creaciones de quienes aspiran llegar al nivel de hombres.
En cada rincón del mundo existen numerosos Templos
construidos con gran lujo y estructuras preciosas, pero privados
de la presencia de Dios por no haber sido ungidos por Él para
funcionar como hogar del Espíritu.
Al lado de cada uno de estos Templos existen también
humildes Lumisiales Gnósticos edificados en forma sencilla,
desprovistos de lujo y opulencia donde se hace presente la
fuerza Crestos por la fe de los congregados, por su mística y por
profesar la creencia religiosa de acertados principios.
La fe es una virtud esencial en este campo. Tener fe

significa creer sin ver. La Fe Solar, en cambio, se consigue a
través de los diferentes testimonios que vayamos recibiendo en
el continuo transcurrir de la vida.
Nadie podría hacernos dudar de alguna cosa que
hayamos experimentado con nuestros sentidos físicos u ocultos.
La fe surge como por encanto de las comprobaciones directas
que vayamos haciendo en el arduo recorrido del camino
Iniciático.
Si no obtenemos comprobaciones inequívocas,
difícilmente podremos evidenciar lo real y crear la fe consciente
necesaria, que en nada se asemeja a la fe ciega, producida por
una creencia o un dogma enseñado o inculcado en nosotros por
los diferentes guías religiosos de todos los tiempos.
Existen diferentes tipos de Templos con características
individuales, conocidos como: Templos de Misterios, de
Medicina e Iniciaticos.
Cada Templo se desenvuelve como un Maestro en el
plano tridimensional, con cuerpo físico particular, por medio del
cual ejerce una misión especifica de acuerdo al rayo de su
creación y al tipo de enseñanza que le corresponde impartir en
esta época.
No existen en el universo dos individuos con el mismo
rostro o las mismas huellas digitales, testimoniando con este
hecho que cada elemento es individual, único, particular,
original. El concepto de la clonación en este sentido se hace
absurdo.
Los Templos pertenecen al rango de los Misterios
Mayores y en ellos se imparten enseñanzas correspondientes a
este mismo nivel de conciencia. Los Lumisiales gnósticos
hacen parte, en cambio, de los misterios menores y en ellos se

entregan enseñanzas relacionadas también con este mismo grado
de comprensión.
En definitiva podríamos decir que un Templo de
Misterios es el cuerpo físico de un Maestro, que en vez de tener
una materia compuesta por células y moléculas biológicamente
activas, esta conformado por las sencillas paredes que lo rodean.
Si observáramos el cuerpo de algún Maestro muy
exaltado, nos daríamos cuenta que es exactamente igual al
nuestro en todas sus funciones biológicas, físicas y químicas.
Su innegable diferencia, en comparación con los demás
seres humanos, estriba en su estructura solar interna; esta le
permite a su Ser particular manifestarse con gran sabiduría y
plasmar la diferencia entre lo humano y lo divino, entre lo
imperfecto y lo sublime, con inusitada evidencia.
Lo mismo ocurre en el caso de los Templos donde
observamos su estructura física muy parecida a cualquier otra
humilde casa del vecindario, pero que en su interior posee una
constitución divina particular, la cual le permite a todos los
congregados recibir una especial asistencia y ayuda espiritual.
Si nosotros conociéramos y visitáramos a varios
Maestros de la V.L. Blanca reconocidos, recibiríamos una
enseñanza especifica, característica del rayo particular de cada
uno de ellos, que podríamos utilizar inteligentemente en nuestro
desarrollo personal.
Debemos extraer de todos los Sabios la esencia pura del
conocimiento Universal que han encarnado con mucho dolor,
esfuerzos e innumerables años de búsqueda e investigación, para
aprovecharlo como información experimentada, tan necesaria
para nuestro avance y desarrollo anímico.
Lo mismo suele suceder cuando el “buscador de la

verdad” se propone visitar los diferentes Templos de Misterios
edificados a lo largo y ancho del planeta, recibiendo de cada
uno de ellos una especial enseñanza por medio de su brillante
aura.
Esa aura de colores y matices primarios, deposita en el
fondo de su conciencia las informaciones anheladas, que
afloran luego en su memoria en el momento menos pensado o
cuando su Ser lo estime conveniente para poder comprender
determinada lección, fundamental para su emancipación
interna.
Es común escuchar que alguna persona entra a un
Templo y se siente como en un lugar cualquiera; en este caso
su materia necesita sensibilizarse un poco más para poder
percibir la presencia de la fuerza del Templo y de la luz que en
él se manifiesta.
El aura desarrollada por un Templo permite disfrutar de
una luz que abarca hasta kilómetros de distancia, dentro de los
cuales se benefician todos los seres vivientes que habitan en
ellos.
Algo similar sucede cuando un Maestro visita
determinada ciudad. Este lleva consigo una escolta de Seres
divinos que lo acompañan, lo protegen y despejan su camino de
elementos negativos, dejando a su alrededor un ambiente de
paz, amor y armonía por las vibraciones livianas que le rodean.
Es como si saliera el sol por unas horas en un lugar
donde por varios meses ha estado lloviendo sin parar. El
ambiente cambia por encanto, dejando sus beneficios y
maravillosos efectos por un largo tiempo.
Lo opuesto sucede cuando un personaje de las tinieblas

con jerarquía hace aparición en determinado lugar. El también
es escoltado por una hueste de elementos, en este caso
negativos, que derraman a su paso vibraciones densas,
impregnando el ambiente y tornándolo aun más pesado y
perjudicial.
Esas vibraciones duran en el ambiente por mucho tiempo
alimentando negativamente la psiquis de las personas que viven
en los alrededores e influyendo terriblemente en sus actuaciones
personales.
Este es el caso, por ejemplo, de los famosos cantantes de
música rock que aglutinan cientos de miles de personas en un
concierto por el poder de atracción que ejercen en las masas,
dejando a su paso la destrucción de los valores anímicos
depositados en muchos individuos presentes.
Por eso la importancia de seleccionar los lugares que
solemos visitar con la finalidad de evitar cargarnos de esas
fuerzas que perjudican a nuestra salud física y espiritual.
Dependiendo de la fuerza de un Templo su influencia
podría abarcar mucho más allá del país en donde esta ubicado y
en algunos casos del continente en el cual está edificado.
El V. M. Samael decía al comienzo de su misión:
“Permitidme tener un Templo de Misterios en cada continente
para dominarlo espiritualmente”.
Nosotros nos preguntamos repetidas veces: ¿Si con un
solo Templo de Misterios es posible ayudar espiritualmente a
las personas de todo un continente, que ayuda se podría
entonces proporcionar a la humanidad por medio de varios
Templos construidos a lo largo de ese mismo continente?
Cuantos más Templos existen en el planeta, más ayuda

se logra plasmar por medio de las fuerzas Crísticas
desarrolladas en esas fuentes de luz que fungen de mediadoras
entre los mundos físico y Buddhico.
Todo Templo de Misterios debería ser asistido por algún
Iniciado que se encuentre en un nivel apropiado, para poder
canalizar positiva y correctamente las fuerzas correspondientes a
un lugar sagrado como ese.
En vista de que no es tan fácil encontrar individuos con
este nivel, un Maestro debidamente reconocido, e
independientemente del país donde vive, puede hacerse cargo
del lugar para ejercer esta labor tan difícil y delicada,
permitiendo al Templo ir elevándose en su nivel de conciencia o
Iniciático.
Podríamos decir, sin temor a equivocarnos, que todo
Templo de esta naturaleza pasa por procesos Iniciático muy
difíciles, al igual que todo ser humano, y por medio de ellos se
van elevando en la escala de la iniciación, conquistando con el
tiempo niveles de conciencia tan grandes que le permitan ejercer
su poder sobre las fuerzas de la naturaleza y del cosmos, con sus
correspondientes ventajas para la humanidad.
Los Templos son verdaderas centrales atómicas de
energía Crísticas, donde se producen billones de átomos divinos,
los cuales se incorporan a la atmósfera circundante, fungiendo
de alimento concientivo para todo ser humano que anda en
busca de un cambio positivo en su tormentosa vida.
Este milagro del ocultismo inmortal se procesa gracias a una
especie de canal de comunicación que se abre entre el mundo
electrónico y el Templo, a través del cual fluyen copiosamente
las energías atómicas espirituales, para ser depositadas

inicialmente en el Cristo del altar.
Este poderoso talismán y símbolo sagrado, se transforma así en
el receptor de esas fuerzas que luego son enviadas al ara sacra,
para entremezclarse a continuación en el laboratorio alquímico
de los oficiantes y ser proyectadas finalmente a los
congregados presentes, quienes la comparten con la humanidad
en su diario vivir, algunas veces sin sospecharlo.
En un mundo como el nuestro, completamente invadido por
átomos luciféricos, resulta apenas normal comprender que
realizar la Obra del Padre es extremadamente difícil y a veces
casi imposible. Pero gracias a los Templos de Misterios y al
resultado de sus reacciones alquímicas en el seno del laboratorio
intimo de la Madre Naturaleza, se producen los efectos
necesarios para contrarrestar ese ambiente hostil de imposible
supervivencia anímica.
Este proceso permite que la atmósfera interna que respiramos,
sea un tanto propicia para sobrevivir en nuestro esfuerzo por
reencontrarnos con los valores internos o concientivos del Ser.
El Egregor o Aura que rodea un Templo, depende esencialmente
del tipo de trabajos litúrgicos, teúrgicos y de magia practica que
se realizan en él, como también de las personas que concurren
al lugar, permitiendo su existencia y funcionalismo.
Obviamente, existe el “Alma del Templo” representada por el
Abad del mismo o por un grupo de personas que lo asisten
constantemente, procurando las condiciones básicas y los ritos
indicados que invocan a las Jerarquías Divinas, para pedirles
que potencien la estructura interna del mismo con su majestuosa
presencia y con sus poderes ígneos.
En los Templos de Misterios Iniciáticos los congregados

reciben las iniciaciones correspondientes a su trabajo intimo
realizado a través del tiempo; es el lugar apropiado para recibir
el trofeo por su esfuerzo en pos de la Obra del Padre.
Los Islámicos, seguidores de las enseñanzas de Mahoma el
profeta de Alá, deben asistir por lo menos una vez en su vida a
La Meca, tierra santa de estos fieles para tener derecho de ser
aceptados como tales y por lo menos tres veces para entrar al
reino de los cielos, por indicación del Corán.
Nosotros recomendamos al estudiantado gnóstico visitar
continuamente los Templos de Misterios para poder recibir las
iniciaciones conquistadas en el recorrido de su camino.
Uno de estos Templos por excelencia es el Lumen de Lumine,
cuyo significado se sintetiza en la frase “Luz que sale de la
Luz”, Templo sagrado y exaltado que está cumpliendo una
misión extraordinaria en los actuales tiempos con un Aura
particularmente grande, la cual abarca mas allá del tiempo y del
espacio, hasta alcanzar a los corazones de todos los buscadores
de la verdad.
Un Templo es igual a un niño en sus comienzos, quien necesita
de personas adultas para poder recibir el alimento necesario para
crecer, fortificarse y desarrollarse. Una vez que esté grande,
hecho hombre, se bastará ya por si solo y podrá ayudar
favorablemente a quienes le criaron o necesiten ayuda, en una
forma completamente incondicional y desinteresada.
“Quien ayuda a construir un Templo está ayudando a construir
su propio Templo interior”, decía el Logos Samael.
Que gran honor es tener la dádiva de poner siquiera una piedra
en la pared de un Templo; que maravilloso es poder trabajar en
su edificación como lo hacen los gnomos y los demás miembros
elementales de la naturaleza, quienes se encuentran colaborando

constantemente en los lugares sacros.
El nombre que se le asigna a los Templos posee también una
especial significación, por expresar el valor cabalístico del
mismo, el cual influye en su vibración cósmica con equilibrio
perfecto.
Por esta razón todos los Templos tienen nombres de Maestros
exaltados, que a su vez poseen una influencia particular en su
aspecto íntimo.
Cuando un Templo es bautizado con el nombre particular de un
Maestro, este Ser queda ligado al mismo en una forma directa,
velando en su parte interna por su buen funcionamiento. Un
átomo del Maestro se hace presente entre las paredes del recinto,
colaborando como un elemento más en la enorme muralla de su
composición total.
Existen también Templos dedicados al ejercicio de la Medicina
Universal, la misma practicada por los tantos Venerables
Maestros del mismo rayo que con cuerpo físico enseñaron este
arte regio, cuya antigüedad se pierde en la memoria de todos los
tiempos.
El libro titulado “Tratado de medicina oculta y Magia Práctica”
del V.M. Samael Aun Weor, nos ilustra ampliamente sobre la
importancia y la función de estos Templos sagrados, a
disposición de los Dioses de la medicina y de todos los
enfermos que con fe acuden a esos lugares maravillosos a recibir
el bálsamo para sus adoloridos cuerpos, sintetizado por la
Medicina Universal.
Estos Templos, son construidos normalmente en las afuera de
las grandes ciudades, donde la Bendita Madre Naturaleza
todavía puede ejercer su poder y su gracia.
Son fuente de verdadera esperanza para todos aquellos fieles

que aun creen en la gracia de Dios y en los milagros que ejercen
los Maestros del invisible por medio de los oficiantes, quienes
con vocación de Apóstoles se dedican a cuidar y a trabajar en
estos lugares para ganarse el pan espiritual de cada día.
Con este premio tienen luego acceso al Templo de la Ley
Divina, donde pueden pedir por su propia salud o interceder
por algún enfermo que se encuentre en fuertes dificultades.
En los tiempos actuales se trabaja en las cadenas de curación y
en los rituales con los Maestros Paracelso, Galeno, Hipócrates,
Hermes Trismegisto, Huiracocha, Esculapio y el Angel Adonai,
pero sabemos que existen muchos Maestros dedicados a este
oficio o sacrificio, que ejercen su trabajo en el Templo de
Alden en la Quinta dimensión de nuestra naturaleza interior, de
donde envían su mágica medicina a todos los enfermos que la
pidan y la merezcan de acuerdo a la ley divina, depositándola
en su propio fondo vital.
Toda persona que pertenezca al rayo de la Medicina sentirá sin
duda una sensación especial al entrar en alguno de estos
Templos e intuirá a la vez la necesidad de servirle con los
conocimientos adquiridos en el paso por la vida. Las
vibraciones de los Maestros del invisible, relacionados con este
rayo, se sienten casi físicamente en estos lugares de maravillosa
y sencilla apariencia.
Todo individuo que entregue su vida o parte de ella, para asistir
o cuidar un Templo, es premiado con creces por este servicio
desinteresado, realizado en bien de la humanidad.
La Ley Divina premia todos los esfuerzos; nuestra mejor
recompensa es recibir el dinero cósmico necesario para cancelar
las antiguas deudas, sin seguir cometiendo errores graves, que
hacen aun más difícil nuestra supervivencia y nuestro trabajo

para lograr el acercamiento con nuestro Dios Interno.
Cuando una persona quiere visitar uno de estos Templos, debe
preferiblemente hacerse antes una limpieza con plantas y
vestirse con ropa apropiada, limpia y aseada. Es indispensable,
además, que lleve consigo una ofrenda, la cual consiste en
alguna noble acción, hecha en bien de un enfermo o de algún
necesitado, obra que le permite ganarse el mérito
correspondiente para poder pedir también para su salud.
Recordemos que para poder recibir es necesario dar.
Es importante aclarar que nunca en la historia de las
instituciones gnósticas contemporáneas habían existido tantos
Templos y Monasterios como en la actualidad. Este fenómeno
se debe a la labor continua y constante realizada por el
V.M.Lakhsmi, a quien le ha correspondido cumplir con esta
hermosa misión. Todo este enorme esfuerzo le ha permitido
obtener el nombramiento de “Restaurador de la Santa Iglesia
Gnóstica”.
El V.Maestro Samael nos mostró el camino y nos entregó los
misterios, luego su fiel discípulo continuó su maravillosa labor
concretando la creación de todos estos Templos, esenciales en
la producción de los valores energéticos y Cristicos, necesarios
para aclarar la atmósfera densa y oscura de los actuales
tiempos.
Pasando ahora al tema de los Lumisiales gnósticos, diremos que
estos lugares sagrados son también Templos, pero dedicados a
los misterios menores, donde se imparten enseñanzas
particulares, de ese mismo nivel por medio de su aura o egregor
y de sus instructores.
Este recinto sagrado representa, como el anterior, a un Maestro

cuyo cuerpo está conformado por las paredes del lugar y su
conciencia permanece en su parte interna, expresada por la luz
perpetua.
Normalmente, cuando se consagra un Lumisial gnóstico, se
procede antes a ejecutar los exorcismos, durante los cuales se
pide a los Dioses de los diferentes elementos de la naturaleza
que se hagan presentes, preparando el ambiente y permitiendo
que sea transformado en un lugar divino por medio de su poder
y de su magia.
Los Dioses Santos acuden al llamado del sacerdote oficiante y
realizan antes de toda ceremonia una limpieza en la estructura
atómica del local, eliminando de su aura los fluidos densos que
perjudican la vibración necesaria en todo lugar de oración,
meditación o actividad esotérica.
Luego los elementales de la Naturaleza trazan a sus alrededores
poderosos círculos mágicos de protección permanente,
semejantes a arco iris de colores, para protegerlos de los
continuos ataques perpetrados por los tenebrosos, quienes
permanecen al acecho con la finalidad de dañar la Obra del
Cristo donde se levante o se intente edificar.
Una vez realizada esta hermosa ceremonia litúrgica, tan sencilla
y humilde pero tan poderosa y asombrosa, se procede a
consagrar los objetos del altar para transformarlos de simples
accesorios, en poderosos “Talismanes Sagrados” al servicio del
sacerdote e isis oficiante, quienes los utilizarán en los actos de
magia practica, de teurgia o en el milagroso momento de la
transubstanciación.
En este sagrado momento el Sacerdote, como Teúrgo y

mediador entre el Espíritu y la materia, se transforma por unos
instantes en creador, hacedor y dador de vida.
Un vehículo físico compuesto por paredes ordinarias,
sencillas y completamente normales, envuelve y cubre la luz
que es asignada a ese lugar mágico por los amados Maestros de
la bendita Logia Blanca, guías de la humanidad de todos los
tiempos.
Esta luz es una conciencia evolucionada que desciende al
lugar para dirigir esa nueva creación que, semejante a un
pequeño cuerpo planetario, dispone de su Regente a partir de su
consagración, para organizar a todas las criaturas que se hacen
presentes o son habitantes de ese nuevo micro cosmos.
Los Gnomos de la tierra, las Ondinas y Nereidas del agua, los
Silfos y Sílfides del aire y las Salamandras del fuego asisten al
recinto sagrado formando su morada divina y fungiendo de
vigilantes o guardianes del Lumisial, entregando su vida si fuera
necesario, para defenderlo de las asechanzas de los tenebrosos y
de los eventuales intrusos que quieran causarle daño o violar su
integridad física y espiritual.
La fuerza, el egregor o la luz de un determinado Lumisial
dependen esencialmente de la fe, respeto, seriedad, constancia
y del trabajo de castidad que tengan sus integrantes.
Si en el Lumisial permanecen vigentes las hermosas virtudes de
la armonía, la comprensión y el Amor de los congregados, el
egregor del lugar será a su misma imagen y semejanza y podrá
ejercer en cada uno de los miembros presentes un tipo de ayuda
particular para su propio adelanto espiritual.
En cambio, cuando no existen las virtudes ante mencionadas,

reina la desarmonía, la apatía y el desamor con sus
consecuencias conocidas por todos nosotros.
La congregación entera representa un cuerpo u organismo que
en forma conjunta trabaja y realiza sus funciones para lograr la
armonía necesaria.
Basta que uno de los miembros, como representación de algún
órgano de ese cuerpo imaginario llamado Lumisial se enferme
o extravíe, para que el armonía del lugar se sienta afectada y a
causa de esto su Regente se vea en la imperiosa necesidad de
incrementar el trabajo de los demás integrantes.
La unión hace la fuerza y la organización de todos los miembros
hace la diferencia entre un lugar común y corriente y otro de
características especiales.
Para esto es fundamental el adecuado comportamiento del
personal en cada Lumisial y con mayor seriedad del cuerpo
sacerdotal, conformado por las Isis y los Sacerdotes del lugar,
quienes llevan la mayor responsabilidad.
El sacerdote y la Isis están representando al Cristo íntimo en
todo acto litúrgico, canalizando las fuerzas que vienen de las
Dimensiones Superiores, que a través de ellos son enviadas a los
feligreses presentes en el Acto Litúrgico.
El egregor de un Lumisial o Santuario Gnóstico depende de la
Mística, Seriedad y Constancia con la cual el cuerpo sacerdotal
asiste a ese lugar.
Nadie podría refutar que los chismes, el odio, la incomprensión,
la envidia y la falta de cultura esotérica, dañan el egregor de
nuestros lumisiales.
Nadie podría negar que un Sacerdote y una Isis, que no
practican con constancia y convicción objetiva la “Castidad
Científica” como casados o como solteros, tendrían poco que

aportar a su comunidad en el momento de realizar el acto
litúrgico.
La palabra “SA SER DOTE” es compuesta y significa en el
lenguaje esotérico: “SER DOTADO DEL SABER”.
Indudablemente toda persona posee en su parte interna un Ser
que Está Dotado Del Saber, pero es necesario que nosotros
preparemos nuestros cuerpos y nuestra mente para permitir que
El pueda expresarse a través de nuestro verbo y de nuestra
actitud frente al mundo y a la Humanidad.
El Sacerdote y la Isis juntos, en el momento de oficiar,
representan el Andrógino Divino, creando y volviendo a crear,
para asombro de los humanos y maravilla de los divinos.
Ungido, según las palabras textuales del V.M. Samael “es
aquel hombre o aquella mujer que ha legado su vida a la gran
causa y que después de elegir el camino de las grandes
purificaciones y a través de la dedicación y el cumplimiento de
los mandatos divinos, llega a tener la dicha de ser ungido por
Dios para convertirse en el Templo del Dios vivo, donde oficia
el Cristo, para sí mismo y para la humanidad”.
Indiscutiblemente todos los Sacerdotes e Isis del Templo, tienen
el deber de mejorar cada día en su presentación física, lenguaje,
comportamiento con los demás y, por ende, su cultura, para
tener el derecho de pertenecer a esa elite que debe trabajar en la
Obra del Padre como catalizador de las fuerzas provenientes de
los planos superiores para bien del Pueblo Gnóstico, de la
Humanidad doliente y para nuestra propia regeneración.
Es oportuno recordar que el día en que desencarnemos y nos
encontremos frente a la Justicia Cósmica, la cual juzgará
nuestros actos, sólo las buenas acciones, hechas en beneficio de
la Humanidad, podrán salvarnos de la Involución en los Mundos

Sumergidos de nuestra naturaleza inferior.
Del ejemplo que demos a nuestra Grey y a nuestros semejantes,
dependerá el éxito de nuestro apostolado en la institución.
Del ejemplo que seamos capaces de mostrar en nuestro
comportamiento como ciudadanos y como Mujeres y Hombres
dedicados al culto de la divinidad, dependerá también el triunfo
o el fracaso del sacrificio hecho por nuestro Avatara o Maestro
de Maestros, SAMAEL AUN WEOR.
De este ejemplo dependerá también la posibilidad de que
muchos aspirantes a la Iniciación, quienes todavía están “por
fuera”, ingresen a nuestras filas a conseguir unos lineamientos
de vida dignos para Seres Humanos Superiores, con la firme
aspiración de seguir conquistando “el Triunfo” como
recompensa del Sacrificio.
La Isis está presente al lado del Sacerdote como la expresión de
Dios Madre, la cual recibe del Espíritu Santo, dador de la vida,
la fecundación alquímica alcanzada en el acto litúrgico,
permitiendo que nazcan las virtudes del Alma, las cuales se van
procesando lentamente en el corazón del coro de oficiantes y
finalmente de todos los congregados.
En cuanto a la palabra “Isis”, todos sabemos que es el nombre
de la MADRE DEVI KUNDALINI, expresión de la parte
femenina de Dios.
La presencia de la Madre siempre nos llena de profunda
admiración y ternura. Ella, al igual que la madre física, da su
vida para que su hijo triunfe en todas sus aspiraciones.
Es necesario meditar en la grandeza de la Madre y extasiarse en
su presencia inmaculada llena de infinita ternura. Solo la Madre
es capaz de darlo todo para que su hijo consiga la experiencia

necesaria que le permite volver al seno del Padre bien amado.
Pero, la mayoría de las veces somos ingratos con Ella. Si
reflexionamos en nuestro nacimiento como seres humanos, nos
damos cuenta que estamos acompañados, normalmente, de
familiares y conocidos, quienes están pendientes del parto, pero
a pesar de todo, si en verdad analizamos este acontecimiento a la
luz de la profunda realidad, nos damos cuenta de que en el
fondo mas íntimo nos encontramos solos, frente a nuestra propia
verdad.
Cuando empezamos a crecer, a desarrollarnos, a vivir, a trabajar;
cuando nos casamos y procreamos para la continuidad de la
especie; cuando nos desenvolvemos como seres racionales y
actores principales del drama profundamente doloroso de la
existencia, llena de infinitos obstáculos y de espantosos
precipicios, por dentro y por fuera, a pesar de estar
acompañados por un gran numero de amigos y seres queridos, si
lo estudiamos en una forma objetiva y profunda,
comprendemos que en el fondo nos encontramos solos con
nosotros mismos.
En el momento cumbre de nuestra muerte física, cuando
yacemos extendidos en nuestro lecho, sin hálito de fuerza para
emitir el último suspiro que nos separa del mundo de la materia,
a pasar de la asistencia de hijos, esposa, familiares y amigos,
nos damos cuenta de que en el fondo, nos encontramos solos,
frente a frente con nuestra propia realidad intima.
Solo la Bendita Madre Devi Kundalini, la serpiente Sagrada de
Luz, comparte con nosotros el milagroso momento de nacer;
nos acompaña en cada paso durante todo nuestro recorrido por
la vida; está en el momento de desencarnar y luego nos sigue
acompañando en los mundos suprasensibles de conciencia, hasta

la eternidad.
Sin embargo en muy contados momentos nos acordamos de
Ella; raras veces en el día nos percatamos de su presencia a
nuestro lado para dirigir las ideas correctas necesarias por
medio del lenguaje de la intuición y de la inspiración.
Si tuviéramos conciencia despierta, aunque fuese por unos
contados instantes, no dudaríamos en sentenciar que somos hijos
ingratos con nuestra Madre que vela, llora, sufre, clama, y ora
por nosotros.
Profundizando ahora un poco más en el estudio de un Lumisial
diremos que las columnas con sus dos letras “J” Jachin “B”
Boaz, simbolizan respectivamente el cuerpo mental y el cuerpo
astral del Ser que permanece en ese lugar sagrado.
La piedra o el Ara del Altar simbolizan el sexo sagrado, son la
piedra de tropiezo mencionada por las escrituras, representan el
corazón de donde emanan los hálitos divinos encargados de
preñar la conciencia de los participantes.
El Sacerdote simboliza al Padre que como Demiurgo media
entre la materia y el Espíritu para lograr la condensación de los
átomos Crísticos en el pan y en el vino, colocados sobre el altar
al comienzo de toda ceremonia litúrgica, viva representación del
cuerpo y la sangre del Cristo, nuestro redentor.
El Vigilante primero representa el Cuerpo Mental del Maestro
que como tesorero de los conocimientos del mundo de la Mente
Universal o mundo de Netzath, aporta sus poderosas efluvios
para lograr el gran advenimiento o fruto de la
transubstanciación.
El Vigilante segundo simboliza el Cuerpo Astral, también
presente en el Lumisial como encargado de viajar a los diversos
planos supraconcientes, imitando al Dios Hermes de los

misterios Griegos, el mensajero de los Dioses, y conectarse con
los Seres del invisible invitándonos a la concentración de las
fuerzas Cristicas, impregnando el ambiente con vibraciones
resplandecientes, las cuales son parte del ignoto universo de la
perfección divina.
El Guardián es la expresión del vehículo físico, quien debe estar
siempre atento “como el vigía en época de guerra” para
preservar la seguridad del Templo en las continuas embestidas
perpetradas por los tenebrosos. Este no puede distraerse ni
descuidarse, al igual que nosotros, porque sería suficiente un
instante de flaqueza o desubicación para fracasar en la lucha
contra quienes se oponen a nuestra redención.
Los Feligreses representan las virtudes del Alma, que acuden
con fe para recibir el alimento o el “maná del desierto” y a
nutrirse del manantial de vida que nunca se acaba,
permaneciendo incólume e imperecedero por los siglos de los
siglos.
Sin embargo, cuando, estos feligreses están identificados con el
mundo externo, con cualquier debilidad de tipo psicológica o
simplemente cuando están distraídos pueden simbolizar a los
múltiples defectos que habitan en nosotros.
En el caso de un acto litúrgico con misa el Acólito es la
expresión de la conciencia superlativa del Ser.
Algunas personas se preguntan, a veces, cuál es la diferencia
entre un Santuario, un Lumisial y un Templo gnóstico. Nos han
enseñado al respeto, que un lugar sagrado como este puede ser
llamado indiferentemente Templo o Santuario, a menos que se
trate de un Templo de Misterios, el cual posee otro nivel de Ser.
El Lumisial, en cambio, es la parte esencial de un Santuario,

conformado por el Altar y el presbiterio, el cual a su vez
incluye las gradas y el espacio más cercano a las mismas, por
ser este el lugar donde se produce la luz: (Lumisial) Lumi-luz;
Sial -lugar.
En definitiva podríamos concluir que dentro de un Templo o
Santuario gnóstico existe siempre un Lumisial.
Uno de los símbolos mas exaltados de todo Templo o Santuario
Gnóstico está representado por la cruz tosca; Ella reúne dentro
de sí todas las fuerzas de la creación.
Es el símbolo de redención por excelencia. Nunca puede faltar
la cruz en el Templo de Dios, porque representa al mismo Dios.
La Cruz tiene el poder de ahuyentar a las fuerzas siniestras,
porque encierra a todas las fuerzas de la Naturaleza, dispuestas
por el Creador para construir el equilibrio perfecto entre el bien
y el mal, entre la Luz y las tinieblas, entre el Cristo y Lucifer.
Los elementos Agua y Aire están simbolizados en su palo
horizontal, que apuntan a los puntos cardinales este y oeste,
morada de sus Dioses correspondientes.
El palo vertical indica el sur y el norte, moradas de los
elementos Fuego y Tierra de la naturaleza, que con sus proezas
crean y vuelven a crear, cumpliendo con el proyecto de los
Devas, hacedores de la vida.
El palo horizontal y el vertical forman la santa cruz, cuyo
centro esta unido por un clavo de hierro, representación del
quinto elemento, el Éter o “Alma Mater”, hecho con el metal
característico trabajado por el Dios Vulcano en su fragua
encendida, significando el trabajo alquímico, sin duda
imprescindible para realizar la Obra.
Pasando ya al tema de los Monasterios, debemos recordar que

estos lugares fueron construidos y utilizados desde los antiguos
tiempos para el retiro espiritual del hombre y como centros de
estudios de los principios doctrinales, iniciaticos y espirituales
que llevan a la tan anhelada regeneración.
En los actuales tiempos poseemos en nuestra institución varios
Monasterios en diferentes países del mundo, donde los
buscadores de la verdad con especial deseo o vocación mística,
se preparan para ser enviados a los diversos lugares del planeta a
cumplir con su grado honorífico de Misioneros.
Los Monasterios se caracterizaron siempre por ser lugares con
formación de comunidades que trabajaban bajo un mismo
principio y finalidad, aportando cada uno sus conocimientos
personales y produciendo a la vez el alimento necesario para el
sostenimiento de todos sus integrantes.
Un Abad es siempre necesario para dirigir un lugar como este,
haciéndose responsable de la conducción de la comunidad y de
los diferentes trabajos de teurgia, liturgia, así como de las
prácticas esotéricas y físicas que se realizan en él para la
activación de los centros internos de cada uno de sus miembros.
Cada uno de los miembros activos de un Monasterio requieren
de una gran voluntad para sobreponerse a las luchas mentales y
al propio ego, que se esfuerza continuamente para sacar al
caminante de su férreo deseo de lograr un cambio radical en la
presente existencia.
Es realmente difícil poderse adaptar a la vida de un Monasterio,
a menos que no se disponga de la vocación del monje, quien con
su inmensa paciencia se doblega ante las múltiples adversidades,
para someter su cuerpo y su Alma a la conquista del Ser.
En la actualidad existen en el planeta numerosos Monasterios y

Templos de Misterios Gnósticos, dependiendo de la dirección y
guía turra del “Templo Mayor” denominado “Lumen de
Lumine”.
En España tenemos el Templo Hilarión, ubicado en el
Archipiélago Canario, resto arcaico de la floreciente Atlántida,
llamado “ Jardín de las Hespéride” por los Griegos y bautizada
“Los Elíseos” por los Fenicios, pueblo de Sabios, incrustado
en las cuevas calcáreas de Tenerife, la isla mayor, producidas
por la erupción del volcán Teide hace miles de años atrás. Este
monumental lugar sagrado fue ordenado por el Avatara hace
muchos años atrás por considerarse el punto de apoyo de la
misión en el continente Europeo, pero solo pudo concretarse
hace escasos años gracias a la titánica labor de un puñado de
mujeres y hombres voluntariosos.
En Tierra del Fuego, cercano a la localidad de Ushuaia, en el
extremo sur de Argentina, la ciudad mas austral del mundo,
escondido en un hermoso bosque de “Lengas” y con forma de
huevo se yergue majestuoso el Templo Santo Grial,
representando a la iglesia de Laodisea. Este Templo de
impresionante belleza arquitectónica, donde se respira una paz
profunda, fue construido por humildes misioneros gnósticos,
con reducidos conocimientos en estos aspectos, pero que
pudieron darle a ese lugar tanta belleza por haber permitido a la
virtud del Arte, expresión particular del Ser, dirigir su
imaginación y talento.
En Córdoba Argentina, otro Templo de inusitada belleza se
distingue entre las laderas perfumadas de la Falda: El Kou Thu
Mi. Este Templo simboliza la iglesia de Efeso, de ese
personaje imaginario constituido por el Continente Americano,
ubicada en la glándula pituitaria, el cual posee su cabeza en el

Sur, la morada del elemento fuego y tiene sus extremidades
inferiores en el Norte, habitáculo del Dios Kitichi, cuya columna
vertebral esta conformada por la cadena montañosa de los
Andes.
Más al este, ubicado en un hermoso y perfumado bosque de
eucaliptos en un precioso valle, se encuentra el Templo de
Uruguay, el Quetzaltcoatl, donde la presencia de los
elementales de la naturaleza se entremezcla con el dulce cantar
de las numerosas aves que habitan libres entre los árboles.
Mágico recinto para meditar en las fuerzas maravillosas de
Venus, el luminoso planeta del radiante Arcángel Uriel; es el
Templo de la Mística, lugar en el cual basta la más sutil
concentración para saborear el sentimiento sublime del Amor
rebosando en los nobles corazones.
Un poco más arriba, en el Perú, vemos al Templo Calusuanga,
hecho de piedras al pie del Misti, atemorizante volcán cercano a
la ciudad de Arequipa, con sus parajes ensoñadores que
recuerdan la magia de los pueblos y Dioses Incas, guerreros
verdaderos con Espíritu de Gavilanes. El corazón tranquilo
percibe en su interior la dulce fragancia del severo Dios y el
tierno rostro de la bendita Madre, que en un connubio de suaves
expresiones incitan a la reflexión profunda, al respecto
verdadero, al pensamiento augusto, al fuego abrasador, al verbo
austero.
Luego en el Brasil, el Templo Mória, con sus espectaculares
columnas a semejanza del arte Egipcio, donde se percibe un aire
de majestuosidad y misticismo, productos de la imperiosa
edificación que recuerda tanto los Templos de los Faraones y las
catacumbas de los Cristianos Romanos. Es un Templo cuya
virtud sobresaliente es la “Fuerza” que produce en la agobiada

conciencia del buscador intrépido la seguridad eternamente
buscada para sobreponerse a las terribles debilidades de la
imperfección humana; es el refugio esperado por ese pueblo
enorme de corazón rebosante de fe, que desde lejanos tiempos
esperaba ese original presente.
En Ecuador el Templo Sanat Kumará sobresale por su esbelta
elegancia, por sus paredes estucadas y lisas que incitan a
reflexionar en la perfección y en la calificación de la Obra,
construido en las proximidades de las pirámides de Cochasquí,
antiguo asentamiento de los Incas que peregrinaban a ese lugar
misterioso para venerar al sol en el solsticio de Marzo, rodeado
por unos cuantos volcanes, nevados que infunden respeto y
admiración profunda en el centro de la Tierra.
En el mar Caribe, en la gran isla de República Dominicana,
encontramos el Hércules Santuario, Templo de inconfundible
belleza sostenido en su interior por una sola columna central con
forma de mano y su techo pintado a semejanza del cielo, con
nubes y espacios azules, apoyado a su alrededor sobre otras
doce columnas, aludiendo a los doce trabajos de Hércules. Este
imponente Templo posee tanta fuerza que el cabello de los
congregados se eriza durante la práctica litúrgica, cuando muy
ubicados y atentos se acercan a la piedra cúbica del Altar.
En Colombia, tierra de grandes Iniciados, tenemos el Templo
Ra Hoor Ku, construido en Pamplona, ciudad hermosa, de
clima fresco y de población generosa, atenta y culta. En el
también la Fuerza y la Mística se sienten por medio del sentido
de la inspiración. Su nombre sagrado del Crestos influye
poderosamente en su luminoso egregor que transporta al feligrés
a altos niveles de conciencia cósmica para encontrarse
finalmente con la Luz Astral, característica divina del mismo.

Este lugar infunde mucho respeto por los enormes sacrificios
exigidos a ese pueblo hermano con profundos esfuerzos y
continuas pruebas.
En México, antigua tierra natal del Logos Samael, en las
cercanías de la ciudad industrial de San Luis Potosí y a escasos
metros del “Valle de los Fantasmas, lugar misterioso descrito
por nuestro amado Maestro Samael en su paso por ese
hermoso país, ubicado en la cúspide de una delicada montaña de
contenido rocoso, esta clavado en las entrañas de la perfumada
tierra de los antiguos Aztecas, el ultimo de los once, el Templo
Samael, construido recientemente y entregado a la Venerable
Logia Blanca el 27 de octubre del año 2000. Este Templo
representa para nosotros la corona de la Obra dejada por el
Maytreya y terminada por su incansable discípulo el V.M.
Lakhsmi.
Terribles dificultades, en la mayoría desconocidas por la grey,
se tuvieron que superar para plasmar este nuevo bastión
espiritual, honor indiscutible para el Maestro Samael quien dejó
diseminados en esas tierras de antiguos sabios, científicos y
ocultistas verdaderos, los átomos de la libertad espiritual que
como ínfimos guerreros del invisible luchan en las reconditeces
más oscuras de la existencia y aguardan ansiosos por el regreso
de sus discípulos al crepúsculo dorado del Templo excelso de
los hijos del Sol.
Finalmente en Venezuela, en el epicentro de las montañas
Andinas, en el actual Himalaya de los Andes, se levanta
majestuoso el Lumen de Lumine, Templo Padre que como
anciano permanece en su lugar en continua meditación y
profunda reflexión, enviando como lo dijera el Avatara,
“destellos de luz para todos los demás países que necesitan de su

ayuda”.
En ese lugar de entrañable hermosura, de apariencia poética, de
montañas empinadas y recubiertas por verdes prados naturales,
el Anciano espera por sus hijos para darles la bienvenida entre
sus brazos.
Es el Templo Iniciático por excelencia, donde hombres y
mujeres de razas e ideologías variadas, de idiosincrasias
distintas signadas por las ancestrales influencias de la raza
humana, llegan para ser niveladas por el exigente entrenador de
estos tiempos, topándose en su interior con el divino Daimón
que como manso dragón con su mirada de sabiduría, lleva al
Iniciado promovido en su carruaje astral a las altas esferas de la
luz para que pueda saborear la inefable sensación de las alturas
del desconocido universo y de la ciencia oculta. Es un mágico
lugar, guardián de los secretos tesoros de Tebas y Caldea, de
Atenas y de Roma, de Asia y de Europa, de América y de
África.
Es costumbre, desde siempre, su recibimiento por medio de los
extraños y agudos movimientos de las nubes sutiles, a veces
transparentes, de inusitado revuelo y mágica rapidez y del ligero
viento que con el auxilio del sol dibuja continuamente en el
cielo obras de arte que luego borra para imprimir otras, aun más
preciosas, indicándonos con ello que no existe espacio suficiente
para pintar toda la sapiencia que los Dioses de la naturaleza nos
muestran en forma tan sencilla y gloriosa, para expresar en el
visitante atento, todas las infinitas posibilidades reunidas en lo
mas profundo de cada ser humano.
El Lumen es el Padre de los otros Templos, quienes son los
hijos bienamados de una “Familia Divina” (la Sagrada Familia),
que vino a la Tierra en esta época de indefinible complicación, a

manifestar su gloria ante los ojos atónitos de quienes saben leer
en donde nada está escrito, en quienes saben descubrir la
grandeza de Dios en las cosas sencillas de la vida, en aquellos
individuos que aprendieron a inspirarse en los detalles casi
imperceptibles existentes a su alrededor.
No existen palabras adecuadas para definir la paz que se respira
en el “Lumen de Lumine” cuando este Templo esta solo, sin el
natural murmullo de la gente, donde el silencio casi absoluto,
envuelve las verdes montañas que lo acompañan.
Solo la experimentación directa de estos momentos mágicos y
del contacto intimo con la voz profundamente oculta del
silencio, pueden hacernos descubrir la esencia de todo lo divino
que ha sido depositado en las reconditeces más sublimes del
noble corazón, por gracia de nuestro Ser.
La vivencia inigualable y la magia del llamado Sum Yata, que
nos transporta al umbral del Templo de la extasiante inspiración,
producen cambios inmutables en las partículas estructurales de
nuestra creación interna, haciéndonos diferentes para siempre,
con más sensibilidad y más atuendo para comprender los
Misterios de la Vida y de la Muerte, bases primordiales de la
inmortal Sabiduría de los siglos.
CONCLUSIONES
Al finalizar este trabajo, hemos considerado oportuno

traer a nuestra memoria los resultados de las múltiples
experiencias realizadas por todos nosotros en el continuo ir y
venir por la vida, en las innumerables existencias
experimentadas, para poder analizar las condiciones actuales en
las cuales nos encontramos.
Necesitamos, inevitablemente, hacer un profundo
análisis de conciencia para darnos cuenta de nuestro nivel de Ser
y descubrir por medio de ello la posición ocupada por nosotros
en el infinito escalafón de la humanidad, perteneciente al
Universo entero.
El Venerable Maestro Samael dice que somos todos
chispas de una enorme hoguera, desprendida de la inmensa
llamarada contenida en el océano de Vida de nuestra Galaxia, la
vía Láctea y enviadas al mundo de la materia en los diferentes
Sistemas Solares, por nuestra personal solicitud.
El recorrido comenzó por el mundo del Akhas, donde
aparece la vida en su aspecto puramente espiritual, para luego
atravesar con estrepitosa velocidad los mundos Tawicos,
recibiendo en su estructura primigenia las características
especificas o particulares de cada uno de los elementos que los
componen.
Se sumergieron luego en los mundos causal, mental y
astral de la naturaleza, para aparecer en el entorno etérico,
donde envueltos por los diferentes éteres lumínico, reflector,
químico y de vida, pudieran existir en el mundo tridimensional
de la materia, revestidos con un cuerpo físico de carne y huesos,
para iniciar un ciclo de evoluciones e involuciones,

comenzando en los reinos mineral y vegetal, para continuar con
el animal y finalizar ese interminable recorrido en el humano,
para aquellos seres capaces de conquistar este estado o nivel de
conciencia.
La pregunta que incuestionablemente aflora en este caso
es: ¿Por qué, si esas esencias vivían en un mundo de inmensa
dicha y felicidad en el seno del Padre Cósmico Común, en el
corazón de la Galaxia, se propusieron abandonar ese estado
privilegiado de inigualable condición, para venir al mundo
tridimensional a realizar un terrible esfuerzo, envuelto de
espantosos precipicios y peligros de insospechadas
características?
Los Sabios enseñan que los habitantes de los diferentes
reinos existentes en nuestro hermoso planeta, no se percatan del
elemento natural en el cual se desenvuelven.
Los peces viven en el agua pero no ven, ni perciben a
ese elemento, solo respiran en él, se mueven y desarrollan, sin
percatarse del fluido que los envuelve y los alberga. Para ellos
ese mundo es lo natural.
Las lombrices y los múltiples insectos que viven en las
capas de la tierra tampoco se dan cuenta del elemento en el cual
se encuentran. Simplemente viven en ella, respiran, se
reproducen, cumplen el papel encomendado por la Naturaleza y
luego mueren, sin darse cuenta que lo hicieron en un ambiente
en el cual otros seres, probablemente, no habrían sobrevivido.
Lo mismo ocurre con el elemento aire, que respiramos y
ni siquiera vemos, o con la luz y el calor producidos por los
rayos del sol, elemento fuego, que nos permiten vivir con sus
maravillosas funciones, casi imperceptibles ante nuestros

sentidos físicos.
Cuando nuestra esencia pura y prístina, se desenvolvía
en el Sagrado Espacio Abstracto Absoluto, vivía en la felicidad
más asombrosa pero no estaba consciente de la dicha
disfrutada, ni de lo maravilloso que resultaba ser parte de ese
estado de inconmensurable armonía; era sencillamente el mundo
natural de su existencia.
Algo parecido ocurre con las personas cuando nacen en
el seno de una familia acomodada y reciben desde el primer
momento de su existencia todos los cuidados, los mimos, los
alimentos y demás condiciones necesarias para una vida sin
mayores inconvenientes.
Estas criaturas al hacerse hombres no han podido
reconocer el mundo en que viven porque no han conocido la
pobreza, el hambre, el dolor, la miseria, la vejación, el sacrificio,
la desolación, la barbarie, el llanto, el frío, el abuso, la
explotación, la soledad, el abandono, la humillación, etc.
Estos individuos nunca podrán darse cuenta del estado de
felicidad en que se encuentran porque no han conocido su
opuesto. En cambio, aquel ser humano que haya pasado por
todas las dificultades mencionadas anteriormente, al encontrar
un instante de paz o armonía en su camino, lo percibe de
inmediato y se hace consciente de ello. “Nadie sabe lo que tiene
hasta que lo pierde”, dice un axioma.
La Esencia, cuando sale de su habitáculo original,
necesita precisamente de esta vivencia, hacerse consciente de la
increíble felicidad existente en su mundo para poderse reconocer
y por ende, comprender el sentido real de Dios, la Unidad
Múltiple Perfecta, que la abriga en su seno y la envuelve en la

Eternidad del Éxtasis.
Esas esencias, después de un recorrido de 108 vidas
como humanos y después de haber involucionado en los
mundos sumergidos de la Naturaleza Inferior, para conocer en
carne propia sus infradimensiones, donde se alejan hasta el
límite de la luz del Padre, vuelven a conquistar el nivel de
humanos, después del paso por los reinos mineral, vegetal y
animal.
Inician un nuevo ciclo de 108 vidas, hasta completar un
total de 3000 vueltas por estas mismas experiencias, con la
finalidad de reconocer hasta la saciedad, los diferentes aspectos
que componen a Dios en sus múltiples manifestaciones y poder
luego, por intermedio del trabajo Iniciático, emprender
conscientemente el camino de regreso hacia la inmensa
felicidad, con la plena convicción de que no existe Reino mas
preciado que el original, el mundo del cual salimos hace
millones de años, en busca de la Maestría.
Si la esencia es capaz de sobreponerse a las inmensas
dificultades interpuestas por las tinieblas y se hace “Reina de la
Naturaleza”, regresa a su lugar de Origen como Maestro para
cumplir con cargos de mando en el mundo que habitará. Estos
tipos de Seres Sagrados resultan fundamentales para la creación
y el equilibrio en los reinos de los diferentes rincones del
Universo.
En el caso contrario, regresa simplemente como esencia
despierta, consciente de su estado y de su Creador, a fusionarse
con Él, para ser parte del mismo Dios pero sin características
especificas sobresalientes, sin “rango” para cumplir roles
particulares en la organización y en las múltiples creaciones del

Universo Infinito.
Es la hora de emprender el regreso hacia el
Omnimisericordioso, quién anhela nuestra presencia y nuestro
calificativo. Pero solo existe un camino para esta meta de
inigualables proporciones, se trata del “camino difícil y angosto
que conduce al reino del Dios Tum, lleno de inmensos peligros
y precipicios por lado y lado”.
Sólo a través del camino de la Iniciación podremos
regresar en un recorrido inverso, desde el mundo físico de la
materia, desde el mundo etérico, astral, mental, causal, pasando
por el reino de los Thatwas y del Akhas, a fusionarnos
nuevamente con Dios en una eterna paz.
Bajar es fácil, lo increíblemente difícil estriba en subir el
trecho bajado para nuestra propia gloria, haciendo un esfuerzo
sobrehumano donde, sin la ayuda de los amados Maestros del
invisible, seria mas que imposible lograr esta incomparable
hazaña.
No nos queda más remedio que agachar la cabeza para
no mirar el empinado camino y estar atentos en cada paso que
demos para superar cada obstáculo, sin identificarnos con los
mundos que centellean con inusitado vigor para inducirnos a
detener nuestro paso augusto y firme en el escarpado sendero
que conduce al reino de la eterna Luz.
En el paso crucial por el desierto árido del pensamiento
humano, impuro y temeroso, solo se percibe muerte y
desolación, pero también se siente el perfume de la tierra fértil
y fecunda en aquellas etapas relacionadas con el nacimiento de
nuestras virtudes, donde abundan el trigo y las inmensas
cosechas del sagrado maíz, junto al aroma de las flores
exquisitas de los azahares, al perfume del Incienso de la oración

y al inconfundible olor de la Mirra, símbolo de justicia y de
equidad.
Después de todo lo aprendido hasta ahora en el paso por
la presente vida repetiremos, como lo hiciera otrora el Amado
Maestro Samael: “La Iniciación es la misma vida sabiamente
vivida”.
No es únicamente con tantos métodos y prácticas, ni con
continuos sometimientos al dolor voluntario, que nos
regeneramos.
Hay que ser prácticos y aprovechar todas las actuaciones
de la vida en forma bien planificada, realizando esfuerzos bien
encausados, sacrificios dirigidos con inteligencia hacia un
mismo propósito o un mismo fin.
De nada nos serviría practicar vocalizaciones y ejercicios
rúnicos o pránicos las veinticuatro horas del día, si en un
instante de pasión perdemos la fuente excelsa de nuestra Obra
contenida en la Energía Creadora.
De nada nos valdría meditar o transmutar todas las horas
disponibles, si ante un hecho para el cual necesitamos
ponderación y equilibrio, nos dejamos llevar por el estallido del
volcán de nuestra mente.
De nada nos ayudaría llevar el mensaje Gnóstico de
puerta en puerta por todos los rincones de la Tierra, si no nos
proponemos a cambiar nuestra forma de pensar, sentir y actuar
en las diferentes ocasiones de la vida y sirvamos de ejemplo
ante las personas que necesitan del mensaje y que a veces, por
culpa de nuestros malos hábitos y escasa moral, huyen de los
centros gnósticos porque piensan que todos son iguales a
algunos de sus instructores.
De nada nos serviría orar día y noche sin descansar, si no

trabajamos para cumplir con el deber de criar a nuestros hijos,
sostener nuestra familia, nuestro hogar, esforzándonos para
cumplir con los sagrados mandamientos de la Ley de Dios y con
las normas de comportamiento éticas y morales sugeridas por la
Gnosis como doctrina superior, que conduce al humanoide a la
conquista del estado humano y del humano al de superhombre,
grado en el cual se transforma en un Sabio y Consejero del
Pueblo de Dios.
De nada serviría que tuviéramos una Doctrina tan
perfecta y hermosa como la Gnosis, si no la pusiéramos en
práctica en aquellas partes que nos hacen vibrar, en aquellos
aspectos que nos llaman la atención de manera particular y en
aquellas prácticas que nos hacen sentir llenos de entusiasmo.
En definitiva, hemos llegado a la conclusión que resulta
necesario vivir una vida digna, sin fanatismos ni complejos, sin
desmanes ni complicaciones, recordando aquella frase hermosa
de la liturgia que dice: “Sed por eso amables, vestíos todos con
ropajes bellos, servios manjares exquisitos y bebed dulces vinos
espumosos. Llevad vuestra alegría y vuestra voluntad con Amor,
como os plazca y donde queráis ir. Sin embargo esperad en
honor mío; no esperéis nada del Oriente sino del Poniente,
aunque las criaturas no saben de ninguna cosa esperada”.
El Occidente o Poniente, representa la morada del
elemento Agua. Todo nace gracias a este componente
maravilloso de la naturaleza, por ello el ritual advierte la espera
de todas las creaciones relacionadas con las virtudes del Alma,
de la Morada de Varuna, el Dios del Agua y no del Oriente,
como representación el Elemento Aire, cuyas características son
la inestabilidad y las luchas mentales en el humano incompleto.
“ Derrumbad este engañoso fantasma de los siglos y no

encubráis vuestros pesares con maléficas palabras. Estos pesares
yo los domino, son mis servidores, mis más humildes esclavos.
Hacedlo vosotros igual y yo os premiaré ahora y siempre”.
Finalmente, diremos que la Gnosis es una Doctrina de
Regeneración determinante que sirve para mejorar al ser
humano, hombre o mujer, en sus estados anímicos internos y en
su aspecto físico.
Nosotros, los estudiantes de la Sabiduría Gnóstica,
basamos nuestra doctrina sobre cuatro pilares fundamentales
que conocemos con el nombre de Arte, Ciencia, Filosofía y
Religión.
Pero para nosotros los Gnósticos el Arte no es
únicamente aquel Arte Regio enseñado por los grandes
Maestros de la Pintura, de la Escultura, de la Poesía, de la
Escritura y de la Música.
El Arte es la capacidad de construir dentro de nosotros
mismos, imitando al Gran Arquitecto del Universo, esas
Estructuras Internas que todos necesitamos para permitir que
nuestro Ser, lo único verdaderamente Divino en nosotros, pueda
manifestarse a través de nuestro ejemplo, de nuestros hechos y
de nuestras reacciones como humanos.
Significa aprender a pintar las virtudes del Alma y la
cultura superior humana que nos conducen a las alturas de los
Seres de conciencia despierta y de comportamiento sobrio,
seguro, amable y esencialmente justo, usando para ello el pincel
y los colores brillantes de la sabia naturaleza.
Para nosotros los Gnósticos la Ciencia no se refiere
únicamente a esa Ciencia materialista u oficial, que también
respetamos porque gracias a ella se ha hecho un gran avance
tecnológico en nuestra sociedad y ha permitido que la existencia

se haya tornado un tanto más cómoda y placentera para muchos.
La verdadera Ciencia Gnóstica, a la cual nosotros nos
referimos, es la Ciencia Alquímica, la cual nos permite trabajar
en nuestro propio laboratorio interno para lograr la creación de
esos Cuerpos Existenciales Superiores del Ser, que le permiten a
nuestro Intimo manifestarse en el mundo de la materia y poseer
una ventana de observación a través de nuestro vehículo físico,
para ver y palpar las cosas de este plano tridimensional de
inigualable densidad, donde el Padre jamás podría llegar sin el
auxilio de la materia.
La presencia de estas estructuras particulares en
nosotros, nos conceden la posibilidad de transformarnos en
mujeres y hombre verdaderamente dignos de ser llamados
“Reyes de la Naturaleza”.
La Filosofía a la cual como estudiantes de la doctrina
Gnóstica nos referimos, no es únicamente el estudio de aquéllas
Obras literarias maravillosas dejadas por los grandes Maestros
de la antigüedad y por los insignes filósofos contemporáneos.
Nuestra Filosofía se refiere esencialmente a esa materia
que nos enseña a comprender a nuestros semejantes, dándonos,
además, las respuestas adecuadas a esas interrogantes que todo
ser humano se hace a menudo, como por ejemplo: ¿Quién soy?,
¿Para qué existo?, ¿Por qué estoy aquí?, ¿ Existe el cielo?, ¿
Existe el infierno? Etc.
Finalmente, la cuarta columna toral sobre la cual se
apoya y fundamenta la Gnosis, es la Religión. Pero no una
religión dogmática donde se enseña que Dios posee el aspecto
de un Anciano Venerable, que vive en el cielo y desde allá
ordena con su cetro de mando a los hombres y mujeres
vivientes en el planeta Tierra y decide su destino de acuerdo a

su propia voluntad.
Para nosotros la Religión representa el continuo buscar

de la Espiritualidad, es el acercamiento hacia Dios; significa
“religare” o sea, buscar el regreso hacia la única fuente de vida
representada por Dios.
Esa Fuerza Universal, desdoblada en los tres aspectos

sagrados de la Creación, debe manifestarse en cada uno de
nosotros. Esa Energía existe y palpita en cada ser humano, como
en cada animal, en cada planta y aunque parezca increíble, en
cada mineral.
Todos los minerales existentes están compuestos por

Materia, Energía y Conciencia y donde hay materia, donde
aparece energía y donde existe conciencia, también se
manifiesta la presencia de Dios.
Todo está a nuestro alcance, basta utilizarlo sabiamente y

tener presente en nuestro diario vivir que en los mundos
elevados de Conciencia Divina los Dioses no conocen la palabra
“descanso”.
JUAN CAPASSO

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El Camino del Hombre Auténtico 1

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Recordemos aquellas celebres frases del ritual de la

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Con el ascenso de la Primera Montaña logramos “la

Para comenzar la escalada de la Primera Montaña, es

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Cuando el Iniciado haya complementado todo el trabajo

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