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“AÑO DEL DIALOGO Y LA RECONCILIACIÓN NACIONAL”

LAS PERUANAS EN EL ÁMBITO DEL CONFLICTO


ARMADO INTERNO PERUANO (1980 – 2000)

CURSO
PROBLEMAS Y DESAFÍOS EN EL PERÚ ACTUAL

INTEGRANTES
Apellidos y Nombres Código Estudiante

CARRASCO AGUILAR, Jesús Johann U17204383


GONZALES ESPINOZA, Ángel Álvaro U17302475
PILLPE QUISPE, Paola Eliana U17205780
QUEQUEZANA MANRIQUE, Glenis Carolina U17204965

DOCENTE:
FISCHER ENRIQUE, Sayre Lujan

Lima, 07 de Julio del 2018


INTRODUCCIÓN

TEMA DELIMITADO
El tema de esta investigación es Las peruanas en el ámbito del conflicto
Armado Interno Peruano (1980 – 2000)

PREGUNTA DELIMITADA
Las preguntas de esta investigación radican en saber lo siguiente:
− ¿Cuál fue la importancia del rol de la mujer peruana dentro el ámbito del
conflicto armado interno?
− ¿Cómo se vieron afectados los derechos de las mujeres durante la
guerra interna?
− ¿De qué manera afectó el conflicto armado a la vida de mama Angélica
y cómo participó en el desarrollo de la Asociación Nacional de Familiares
de Secuestrados, Detenidos y Desaparecidos del Perú (ANFASEP)?
− ¿Cómo se realizó esta participación de las mujeres en las
organizaciones populares durante el conflicto armado y cuál fue su
reacción con respecto a los grupos terroristas?

POSTURA
La postura de este trabajo de investigación responde a las preguntas,
afirmando que el rol de la mujer peruana en este período fue determinante para
el posterior desarrollo de los acontecimientos en esta época. Su presencia en
SL y las asociaciones civiles antiterroristas influyeron en estas organizaciones y
su respectivo accionar.

DEFINICIONES BÁSICAS
El terrorismo en el Perú fue una lucha violenta que se cobró con vidas
humanas, fue encabezado por el grupo de Sendero Luminoso que sembraba el
terror para así llegar al poder.

CONTEXTUALIZACIÓN
Sus inicios fueron en la década del 80 en Ayacucho, lugar que más cifras de
muertes y desapariciones registró.
PREGUNTAS:
1. A partir de su visita al Lugar de la Memoria, la Tolerancia y la
Inclusión social, explique en qué consistieron las acciones que
cumplieron las mujeres en Sendero Luminoso y por qué
participaron en este grupo terrorista. Incluya citas, referencias y
material del museo y de las lecturas revisadas.
D
Las carencias económicas, sociales y políticas sufridas por la población
llevaron a muchas jóvenes mujeres peruanas a buscar una opción radicalmente
diferente de militancia política y modelo de Estado. Estas son expuestas por la
autora Raffo como:

«…las crisis económicas, la pobreza, las numerosas dificultades que el


Estado tuvo para cumplir con sus obligaciones básicas para con los
ciudadanos, teniendo vacíos de poder en amplias zonas rurales,
especialmente andinas, el entumecimiento de los partidos políticos, la
ausencia de organizaciones partidarias, los gobiernos dictatoriales,
entre otras». (Raffo 2017: 5)

De esta manera, Sendero encontró un asidero de posibles nuevos reclutas en


los jóvenes provincianos de escasos recursos que veían como el Estado era
incapaz de subsanar su condición de marginación económica y social. Esta
situación se acentuaba más aún en las jóvenes andinas, puesto que vivían en
una sociedad patriarcal donde la importancia dentro de la comunidad se daba
por ser hombre y tener mayor edad que los demás.

Asimismo, el uso de la educación superior como medio para subir en la escala


social en las zonas urbanas fue aprovechado por el cabecilla senderista
Abimael Guzmán, quien inició el conflicto armado siendo un catedrático de la
Universidad de Huamanga, para difundir la idea que la revolución comunista
solucionaría los problemas del Perú entre los futuros profesionales
ayacuchanos.

Es más, tal como lo explica la autora Kirk, no eran muchas las mujeres que se
matriculaban en la universidad y estaban en un entorno que facilitara su
ingreso. Por estas razones, ellas eran uno de los grupos estudiantiles más
aplicado y dispuesto a demostrar su valía:
«Las familias pobres están más dispuestas a sacrificarse para enviar a
uno de sus hijos varones a la universidad. Pero también las chicas
empezaron a matricularse (en la universidad de Huamanga). Ellas
fueron las más brillantes, las más ambiciosas, deseosas de desafiar la
tradición. De los 1451 estudiantes matriculados en 1968, 403 eran
mujeres. Más de la mitad eran ayacuchanas». (Kirk 1993: 31)

A nivel nacional, esta nueva generación de profesionales fue comprendiendo


con mayor claridad la estructura económica-social gracias al acceso a la
educación superior, sin embargo no contaban con los espacios sociales para
canalizar sus proyectos de vida (puestos de trabajo acorde a su nivel
académico, voz dentro del Estado). Esto generó un sentimiento de impotencia y
la búsqueda de justicia social para su comunidad.

Respecto al rol de las mujeres en Sendero, la investigación de la autora Kirk


resalta el número de camaradas senderistas y sus cargos dentro de la
organización:

«Según autoridades penales peruanas, la tercera parte de los


acusados de atentados terroristas de SL son mujeres. Desde 1990, la
inteligencia policial documenta la presencia de 8 mujeres entre los 19
miembros del clandestino Comité Central del Partido (...). De hecho, lo
más corriente es que sea la mujer la encargada de dar el tiro de gracia
a los oficiales policiales y militares atacados por los escuadrones de
aniquilamiento de SL. El senderismo declara que el 40 por ciento de
sus militares son mujeres». (Kirk 1993: 14)

Siguiendo esta línea, la figura de Edith Lagos resalta como la primera


senderista convertida en mártir. Se le presentó en la prensa escrita como una
mujer violenta, experta en armas y fría, que atacaba a puestos policiales y
campamentos mineros para robar dinamita. Al morir en 1982 (a los 19 años),
su sepelio agrupó en la Plaza de Armas de Ayacucho a más de 10 mil
personas que acompañaron su ataúd hasta el cementerio. 1

Augusta La Torre fue la primera esposa del cabecilla Abimael Guzmán, alumna
de la universidad de Huamanga y provenía de una familia afín a la ideología
comunista soviética. En primera instancia, fue la conexión carismática de
Guzmán con la cultura local (hija de hacendado y quechua-hablante) y fue ella
quien organizó el Movimiento Femenino Popular, el cual planificaba los

2
Cfr. Huerta 2015: 188
llamados aniquilamientos selectivos. Llegó a ser conocida como la camarada
Norah y formar parte del Comité Central del Partido.

Maritza Garrido Lecca era una senderista, bailarina de profesión, que


albergaba al cabecilla Abimael Guzmán en su domicilio de Surquillo al
momento de su captura. Ella se convirtió en un personaje mediático porque fue
presentada junto a Guzmán ante la prensa internacional poco después de su
captura. Su caso fue paradójico para la época porque provenía de una familia
limeña católica, acomodada y daba clases particulares de danza en Miraflores
y Chacarilla.2

2. Luego de haber visitado el Lugar de la Memoria, la Tolerancia y la


Inclusión social y de haber revisado bibliografía complementaria,
explique de qué manera se vieron afectados los derechos de las
mujeres durante la guerra interna. Incluya referencias, testimonios
y citas en la redacción de la respuesta.

La época del terrorismo o también conocida como “Conflicto Armado Interno


del Perú” se desarrolló entre los años 1980 y 2000, en el que grupos
revolucionarios se instalaron en el centro y sur de nuestro país. Esta fue la
época de mayor duración, la más crítica, siendo las mujeres las más afectadas
durante todo ese tiempo, ya que fueron víctimas de abusos sexuales,
maltratos, atentados contra sus derechos humanos y su dignidad como mujer
por parte de militares y terroristas. Por lo que, en el informe que presentaron
los autores Gloria Cano, Carlos Loarca, Pedro Díaz y Luz del Carmen Ibáñez
detallan lo siguiente:

«La comisión de la verdad y reconciliación CVR, detalló en su informe


la utilización de la violencia sexual como método de tortura y el impacto
que este tuvo en las mujeres. Las mujeres detenidas en el cuartel los
Cabitos y en otras bases contrasubversivas sufrieron este tipo de
agresiones que en efecto ha dejado una marca en su vida, la violencia
sexual estuvo presente en cada "interrogatorio" al que fueron
sometidas las mujeres detenidas». (Cano, Loarca, Díaz y Ibáñez
2014:26)

Por lo dicho, el cuartel Los Cabitos fue la sede principal del frente político
militar de Ayacucho, en donde se llevaron a cabo varios sucesos inimaginables
de maltratos, torturas, violaciones, etc. Interrogaban a las mujeres con tal
crueldad que si no respondían les pegaban, quitaban la ropa y sin compasión

2
Cfr. Huerta 2015: 188
las violaban. Usaban la excusa de que aquellas pobres mujeres tenían
información acerca de los terroristas o las culpaban que sus familiares
formaban parte de ellos, y por venganza las atacaban.
Asimismo, muchos de los militares llegaban a los pueblos para realizar
incursiones militares, aprovechando esto tomaban a las mujeres a la fuerza,
entraban a las casas y se las llevaban a sus bases, las violaban dentro de sus
propias casas; las atacaban en donde se las encontrasen. Por ello, en los
testimonios redactados en la revista de la Comisión de los Derecho Humanos
“Democracia y Derechos Humanos” se narra el testimonio de Inés, que cuenta
como su hija quedo luego de sufrir abuso por parte de los militares:

«Mi hija se fue cargando su quipe de naranjas, para vender y comprar


sal para nuestra comida…por eso se fue al frente a Canaria. Cuando
regreso mi hija estaba sin poder hablar bien… Se había encontrado
con los soldados, le habían gritado «terruca por que estas caminando
por estos lugares, seguro que estas caminando en contra de nosotros»
diciendo esto le habían violado como 30 soldados delante de su
hermana menor… Mi hija tenía 13 años, a causa de ese hecho mi hija
no puede hablar, habla sin pronunciar bien, ha perdido la inteligencia,
ha quedado medio sonsa. Ahora vive en Lima… Hasta ahora se traba
su boca, por eso hasta su esposo le insulta… de pura muda le odia, le
resondra y le pega a mi hija…». (Falconi y Agüero 2003:12)

Así como este hecho, sucedieron muchos más, en donde la principal víctima
era la mujer, dejándolas con grabes secuelas y traumas. Varias de ellas
quedaron embarazadas, sufrían de abortos forzados, prostitución e incluso les
realizaban esterilizaciones en contra de su voluntad. La mujer en ese entonces
era considerada para los militares como un trofeo de guerra en contra de los
enemigos.

Del mismo modo, en la investigación que realizaron los autores Gloria Cano,
Carlos Loarca, Pedro Díaz y Luz del Carmen Ibáñez está el testimonio de NH,
una estudiante que no revela su nombre completo por temor y vergüenza, ella
fue detenida en julio de 1983 por grupos militares:

«Me pusieron parada porque estaba recontra torturada, hinchada la


cabeza, todo el cuerpo, morado, todo me metieron, pero en el segundo
día también he sido víctima de que se abusaron de mi persona (...) Era
un teniente, pero no recuerdo, ni lo veo, no lo reconozco porque era de
noche. Como estaba mal no podía ni pararme ni moverme, entraron
dos personas hombres y empezaron a violarme». (Cano, Loarca, Díaz
y Ibáñez 2014:27)

Durante todos esos años, la mayor parte de atentados en contra de la mujer


fueron realizados por miembros del ejército peruano, quienes arrestaban a las
mujeres y las torturaban de la peor manera, no les importaba si eran menores
de edad. Muchos de estos casos hasta la fecha no han sido juzgados por la
justicia como se debe, siguen impune.

Por ello, el impacto de la violencia que sufrieron y vivieron las mujeres en ese
entonces se manifestó de diversas formas y no se puede reparar. Hasta la
fecha el total de desaparecidos es incierto e incluso hasta ahora siguen
buscando justicia por sus familiares desaparecidos, sin obtener respuesta
alguna.
«También fueron las mujeres quienes se vieron afectadas por la
detención, desaparición o muerte de sus esposos, hijos, padres y
hermanos. Fueron ellas las que tuvieron que hacerse cargo de la
búsqueda y de presentar las denuncias y reclamos ante la justicia por
sus familiares detenidos o desaparecidos. Fueron ellas las que tuvieron
que acercarse a dependencias públicas, cárceles, bases militares y
dependencias policiales, donde muchas veces fueron víctimas de
maltratos y humillaciones por su condición de mujeres, indígenas,
pobres y quechua hablantes, y donde frecuentemente fueron objeto de
violaciones de sus derechos humanos, como detenciones, torturas y
hasta actos de violencia sexual». (Salazar 2006:187)

Por consiguiente, todos estos sucesos afectaron a las mujeres tanto de manera
física como mental, ya que se encontraban solas sin tener el apoyo por parte
del Estado Peruano. A consecuencia de los atentados que sufrieron sus
esposos y familiares cercanos, estas mujeres se vieron obligadas a buscar la
manera de salir adelante, ya que muchas de ellas quedaron viudas con hijos,
buscando la forma de escapar de todo ese terror que se vivía en ese entonces.

3. Escuchar el testimonio de la mama o mamacha Angélica, es decir


Angélica Mendoza de Ascarza, el cual se ubica al fondo del primer
piso, en la sala de las pantallas del Lugar de la Memoria, la
Tolerancia y la Inclusión social. Con la información del testimonio y
bibliografía complementaria, responde a la siguiente pregunta: ¿De
qué manera afectó el conflicto armado a la vida de mama Angélica y
cómo participó en el desarrollo de la Asociación Nacional de
Familiares de Secuestrados, Detenidos y Desaparecidos del Perú
(ANFASEP)?

4. Después de visitar el inicio del segundo piso del Lugar de la


Memoria, la Tolerancia y la Inclusión social donde se exhibe una
sección sobre la participación de las organizaciones populares en
el contexto del conflicto armado, y de revisar bibliografía
complementaria contesta la siguiente interrogante: ¿Cómo se
realizó esta participación de las mujeres en las organizaciones
populares durante el conflicto armado y cuál fue su reacción con
respecto a los grupos terroristas? Profundizar en el caso de María
Elena Moyano.

Entre 1980 y los años 1990 se vivía en el Perú una época de miedo y terror
causado por los grupos terroristas que también intentaban establecerse en las
barriadas, sectores sociales menos favorecidas y donde se vivía en
condiciones de pobreza puesto que no contaban con los servicios básicos ni
seguridad policial, esto sería aprovechado por los miembros de Sendero
Luminoso para establecer sus centros de operación y difundir las ideologías del
pensamiento Gonzalo.

Como respuesta a estas acciones las mujeres se organizan de tal manera que
formaron organizaciones populares como la federación popular de madres, los
comedores populares, el vaso de leche y los clubes de madres en conjunto con
las autoridades y la policía que ya estaban detectando la presencia de los
grupos senderistas, aprovechándose de las condiciones paupérrimas en las
que vivían los pobladores de esta parte de la capital.

Uno de estos lugares, fue, Villa el Salvador, un distrito nuevo en formación


donde una mujer afroperuana de nombre María Elena Moyano les hizo frente a
los miembros del PCP-SL (Partido Comunista Peruano – Sendero Luminoso)
instalados en ese distrito, ella organizó a los vecinos en juntas vecinales, creó
comedores populares, vaso de leche. Con el fin de calmar el hambre, la miseria
y los problemas de seguridad ciudadana.

María Elena Moyano al igual que muchas mujeres lucharon para tener el apoyo
de las autoridades y los políticos, logrando así transformar su comunidad de un
arenal a un lugar con árboles, parques, jardines y sobre todo colegios. Tuvo
una participación muy activa para la transformación de Villa El Salvador y tener
mejores condiciones de vida para la población de ese sector del país.

Las organizaciones populares no solo dedicaron a crear comités de madres,


vasos de leches o comedores populares, además de ello realizaron muchas
actividades para transformar el lugar donde habitaban con sus familias.
«Habían comenzado a surgir comedores ligados a la parroquia y
también comités de arborización, pues Villa El Salvador siempre ha sido
un desierto. Entonces, plantar árboles tenía mucha significación en la
comunidad, porque el árbol da vida. Y esos comités de arborización eran
muy activos» (Miloslavich 1993: 19).
En esta época empezaron a surgir comedores populares con ayuda de las
parroquias religiosas, por otra parte, también había la necesidad de transforma
el arenal que era Villa El Salvador y se crearon comités para realizar la
plantación de árboles teniendo como referencia que plantar un árbol te da vida
y transformarlo en un distrito más habitable.

Las organizaciones populares cumplieron un papel importante en el desarrollo


de la guerra civil impulsada por los miembros del ejército de Sendero Luminoso
que intentaron implantar sus ideologías en los sectores pobres de la capital.

«"Sendero" ha asesinado a campesinos, a dirigentes populares. Creo


que eso ya se convirtió en parte de su actuar. Es su táctica, como ellos
le llaman. Y van a continuar. Para llegar a Lima tienen que asesinar a
dirigentes» (Miloslavich 1993: 40).
En su lucha contra el sistema de gobierno Sendero ha sido responsable
también de los asesinatos de dirigentes campesinos y dirigentes populares.
Esos actos eran hábitos de Sendero, adoptadas como tácticas para llegar Lima
y asentarse en las zonas cercanas a la Lima central.

Muchas de las mujeres de las organizaciones populares sentían un rencor o


distanciamiento con el Gobierno, lo cual venía desde antes de la creación de
los comedores y vasos de leches y lo cual acrecentó con las acciones militares
que se daban mayormente de noche.

Por ello se destaca a las organizaciones populares como actores importantes


en la periferia de la ciudad y no dejar que los grupos terroristas se desarrollen y
consigan involucrar a más personas a su movimiento armado, destacando la
figura de María Elena Moyano quien comandó estas organizaciones en Villa el
Salvador creando un distrito mejor para sus habitantes con el apoyo de
pequeños empresarios, autoridades y políticos.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

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por las víctimas, sus familiares y APRODEH. Lima: APRODEH.
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(http://archivos.memoria.website/ANFASEP_HastaCuandoTuSilencio_Web.pdf )
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HUERTA, Diana (2015) Construcción del discurso periodístico de la prensa


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Peruana de Ciencias Aplicadas
(https://repositorioacademico.upc.edu.pe/handle/10757/620557) (Consulta 15
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KIRK, Robin (1993) Grabado en piedra. Las mujeres de Sendero Luminoso.


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(http://bvk.bnp.gob.pe/admin/files/libros/444_digitalizacion.pdf) (Consulta: 05 de
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RAFFO, María del Pilar (2017) Decisiones juveniles: motivaciones que llevaron
a mujeres jóvenes a pertenecer a Sendero Luminoso (Tesis de maestría en
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(http://cybertesis.unmsm.edu.pe/bitstream/handle/cybertesis/5898/Raffo_lm.pdf
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SALAZAR LUZULA, Katya (2006) Género, violencia sexual y derecho penal en
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