Filosofía.

3. Del texto 3, realice un texto argumentativo, de extensión de una

hoja y una página de libreta, en el que desarrolles y argumentes la
siguiente tesis: “Eichmann dijo: “No soy el monstruo en el que
pretendéis transformarme… soy la víctima de un engaño”. Recuerda
que u n texto argumentativo tiene una introducción (presentación de la
tesis y tema), un Desarrollo (los argumentos que sustentan la tesis) y
una conclusión (cierra el texto haciendo un resumen de las ideas
principales planteadas o cierra el texto planteando soluciones al
problema propuesto)

Holocausto.
¿Justo o injusto?; ¿Severo o ligero?; ¿Cómo es la situación por la que paso
Eichmann por la cual muchos pueden estar pasando? ¿Se le dio su merecido o
merecía más?

Acusado por asesinar a cientos de hombres, mujeres, niños y niñas; Eichmann se

niega de la forma como fue acusado; se declaró “inocente, en el sentido en que se
formula la acusación”. Según la acusación, Eichmann no solo había actuado
consciente y voluntariamente, lo cual él no negó, sino impulsado por motivos
innobles, y con pleno conocimiento de la naturaleza criminal de sus actos.

Se le considero culpable por las miles de muertes que ejecutó; el día 15 de

diciembre de 1961 se le dicto fallo de pena de muerte a pesar de que se le
consideraba un hombre completamente normal; y además de normal uno ejemplar
para su familia y personas del rededor.

Del gobierno Nazi muchos al igual que Eichmann han tenido que ser sentenciados
a pena de muerte por ejecutar el proceso de muerte de los judíos en el tiempo de
violencia por el que paso este país.

Muchos no tenían problemas con los judíos, puede que los consideraran personas
al igual que ellos, pero esto de ejecutarlos era parte de su trabajo; se veían
obligados a tener que cumplir con ello, pero las personas no lo ven así. Al asesinar
a los judíos eran tachados o enmarcados como asesinos, sin importar como era su
conducta ni la razón por la que debían hacer eso.

Eichmann al estar siendo juzgado mencionó “No soy el monstruo en el que

pretendéis transformarme… soy la víctima de un engaño”. Todos lo veían
como un monstruo despiadado que asesinaba personas sin importarle la parte
moral. Pero en cambio él se sentía una víctima más, una víctima del régimen
alemán en donde debía obedecer órdenes de parte de los “superiores” en donde
se le pedía ejecutar a cientos de judíos.
Para concluir; las millones de muertes llevadas a cabo en la Alemania nazi,
tuvieron paso por las ordenes que altos mandos le daban a ciertas personas que
pertenecían a estos conjuntos, aunque algunas como Eichmann no tenían ningún
problema con los judíos pero de todas formas fueron vistas como monstruos
asesinos. Sin importar sus normas ni su conducta.