BOLIVAR
LITERATURA Y POLITICA
Harold Alvarado Tenorio
Liainmensa obra guerreray politica de Simén
Bolivar no tendrialamismasignificacion de haber
desaparecido su no menos gigantesca obra lite-
raria, representada en los discursos, proclamas y
cartas, que Vicente Lecuna recopilé a través de
veinte afios,
Raramenteredactados por su propia mano, asom-
bra sin embargo cémo, en m
enel desierto, entre las host
climas o la navegacién por
descuidara en la composi
i de productos nacidos en una
mente excepcional, de un pensador y orador de
primer orden en su tiempo. Si
Fernandez de Lizardi, Jovellanos, Lafinur, Larra,
Mesonero Romanos, Mexia, Miranda, Moreno,
2
Narifio, O'Higgins,
hablar de una renovacién literaria bolivariana,
Hablaba mucho y bien -dice O'Leary-; poseta
el raro don de la conversacién y gustaba de referir
anécdotas de su vida pasada. Su estilo era florida
y correcto. Sus discursos y sus escritos estan llenos
de imagenes atrevidas y originales. Sus proclamas
‘son modelo de elocuencia militar. Ensus despachos
Iucen a la par la galanura del estilo, la claridad y
la precisién. En las érdenes que comunicaba a sus
tenientes no olvidaba ni los detalles mds triviales;
todo lo calculaba, todo lo preveta. Tenia el don de
Ja persuasién y sabia inspirar confianza.
‘Mientras en algunos de sus contemporaneos do-
regidos férreamente por su alma extraordinaria,
ara expresar ideas y actitudes revolucionarias
con un lenguaje fulgurante de frases cortas y
apasionadas, con adjetivos, imagenes y tropos
espontaneos que inflaman o enfrian el tono de
acuerdo con las necesidades. Sus proclamas y
iscursos son unas veces persuasivos, otras lu-
S08; sus documentos equilibrados y arméni-
cos, perdiendo brillantez donde ganan en pro-
fundidad.
Yo no he podido hacer ni bien ni mal: fuerzas
irresistibles han dirigido la marcha de los sucesos;
atribuirmelos no seria justo, y seria darme una
importancia que no merezco -dijo en Angosturaen
1819, colocandose a la cabeza del pensamiento
social moderno- ¢Queréis conocer los autores de
los acontecimientos pasados y del orden actual?
Etautores Doctor on Letras de a Universidad Complutense de Madrid.
Poeta y ensayista, Profesor Asociado de Literatura Hispanoamericana
en Universidad Nacional
UNIVERSITAS Humanitica
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ap ‘oyndsgy ap sappun sol puxnsuogsario un gobierno centralizado y uni-
tario, un “terrible poder” que derro-
tara los realistas. El federalismo era
débil y complejo para una América
que exigia unidad y fuerza.
Porotra parte, gqué pats del mun-
do, por morigerado y republicano que
sea, podré, en medio de las facciones
intestinas y de una guerra exterior,
regirse por un gobierno tan complica-
doydébilcomo el federal? No es posible
conservarlo en el tumulto de los com-
batesy delos partidos. Es preciso que el
Gobierno se identifique, por decirlo
asi, al cardcter de las circunstancias,
de los tiempos y de los hombres que to
rodean, Siéstosson présperos yserenos,
Al debe ser dulce y protector; pero ison
calamitosos y turbulentos, 61 debe
mostrarse terrible y armarse de una
firmeza igual a los peligros, sin aten-
der a leyes, ni constituciones, interin
no se restablece la felicidad y la paz.
Desde Cartagena, Bolivar:
iento de que una ver, ter
guerras de liberacién,
itegrado el continente,
UNIVERSITAS Humanistica
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El Imperio Espafiol que conocieron
Bolivar y sus contempordneos fue
resultado de las reformas de los mi-
de Carlos V habia quedado roto con
Januevaestructuraadministrativaque
virreinatos de Nueva Grana-
day Rio de la Plata, y dopté el sistema
intendencial a fin de centralizar el
poder en la cabeza del monarca, Iue-
Ta burocracia, como en las
y el comercio, los Criollos se vieron
desplazados,
ero constante, por
cos ajenos a las tr
coloni
tor de la nobleza hispanoamericana.
Todas las formas posibles de hacer
pagar a los americanos las guerras
espaftolas en Europa fueron validas,
ciones para el comercio coloni
tre 1765 y 1775, se constituyé en mo-
Losestribosy ponchosdelos gauchos
terminaron por ser fabricados en
Londres,
Aese estado de cosas se refiere Bol
var en la primera carta que escribi
en Jamaica dando respuesta a las
quietudes del
La exclusion
los de los cargos administrativos y
politicos, enssu propia tierra,no podia
ser interpretada de manera diferente
aun renovado y pasivo vasallaje.
Se nos vejaba con una conducta
que ademas de privarnos de los dere-
chos que nos correspondian, nos deja-
manente con respecto a las transfor-
maciones piblicas. Si hubiésemos si-
quiera manejado nuestros asuntos do-
mésticos en nuestra administracién
mos también de la conside-
racién personal que imponea los ojos
del pueblo cierto respeto maquinal que
es necesario conservar en las revolu-
ciones. He aqui por qué he dicho que
estdbamos privados hasta deia tirania
activa, pues no nos era fermitido
ejercer sus funciones. Los americanos,
enel sistema espaiiol que esté en vigor,
Y quizd con mayor fuerza que nunca,
no ocupan otro lugar en la sociedad
que el de siervos...
nada, o la comandada por el mulato
José Leonardo Chirinos,
Con la creacién de las Juntas Ameri-
canas fomentadas por é
Bolivar afirma, si
mento desarrollado por ServandoPp epunuosd peansnent
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SeIpuy ap Sadaq Se ua anb ‘oundsy
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ua wuiand AvSapON AVA ap Lsezay,curso donde declara que ut
de gobierno, basado en principios
republicanosy representativos; cuyo
paradigma sean las instituciones de
laantigtiedad clasica, redi
fiadasen
constitucién briténica, suprimiendo
privilegios, aboliendo la esclavitud,
con eleccién por sufragio censatario,
un ejecutivo fuerte central y un parla-
mento aristocratico, es lo que mejor
conviene al momento de las nuevas
repiblicas.
Mas que aspirar a “rey sin corona”,
supo que sélo mediante la creacién
de un inmenso estado,
presidencia vitalicia no hereditaria, -
es decir él, las nuevas naciones
saldrian del atraso colonial. Las ex-
tensas dictaduras -que prolongaron
“T= el diecinueve hasta bien entrado el
. sigloveinte-dieron raz6n, historica, a
los razonamientos de Angostura y a
la Constitucién de Bolivia.
presidente vitalicio, la igualdad ante
\n, ylibertad de cultos, con una
SupremaCortey una Camarade Ce
sores donde las opiniones del pueblo
serian oidas para adelantar, las re-
formas sociales y politicas, que las
necesidades de 1a hora fuesen de-
mandando. La Cémara de los Tri-
bunos -representantes directos del
pueblo- crearia los impuestos,
sejtalaria lasnecesidades,jusgaria
cas de las instituciones,
decretaria la paz y la guerra, es-
tableceria el sistema monetario, las
alianzas con extranjeros, ett.
Nueve afios después de la Carta de
Jamaica, con representantes de
México, Centroamérica, Colombia y
Peni, ylaasistencia de observadores
icos y norteamericanos, se ins-
tal6 el Congreso de Panama. Dabaast
los primeros pasos para realizar la
utopia que habia expuesto en 1815:
Es una idea grandiosa