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16-09-2012
Recuperación de tierras e industrias nos son mostrados por ello campos y ciudades son
escenarios de estas luchas frecuentemente con lutos del lado de los populares, los ‘muertos
de hambre’. Se cuestiona todo, desde el trabajo como tal hasta la forma en que ha de
realizarse; sus protestas contra la burocracia por su negligencia y corrupción en sus labores
de prestación de servicios básicos nos dan una perspectiva de su independencia, carácter y
conciencia como organizaciones populares.
¿Qué tanto alcance podrán tener estos colectivos en movimiento a nivel nacional? ¿Cual
sería su efecto a nivel latinoamericano? No lo sabemos, aún luchan por fortalecerse. Son la
materialización de ‘se hace camino al andar’ de Antonio Machado. La historia enseña que
una revolución no es un asunto realizable de una día para otro, es un trasegar que puede
tomar varias generaciones, pero cuyos primeros frutos, así sean pequeños deben apreciarse
a las primeras de cambio.
La patria de nacimiento de Bolívar ha enfrentado desde hace trece años una estructura
represiva y burocrática continuación del modelo Puntofijista, con vicios de corrupción,
clientelismo, cobardía, y arribismo pueblerino. Las circunstancias actuales han llevado a la
conjunción de proyecto revolucionario en marcha de múltiple vertiente, cohabitando con un
capitalismo de la era del saqueo neoliberal marcado culturalmente por el consumismo
mediatizado más absurdo (banalidad, derroche). El mismo poder popular incipiente en
veces ha sido impulsando y otras frenado por un aparato estatal creciente pero poco activo,
mientras en buena medida el poder económico impertérrito continúa su estólido festín.
¡Vaya paradojas!
Las clases adineradas con el trabajo de la mayoría por sus valores capitalistas se atemorizan
y manifiestan junto con algunos arribistas clasemedieros, que se está generando el mismo
‘sistema de Cuba’. Como era de esperarse en su visión de país no hay lugar a un mínimo de
justicia, renuncian hasta a un capitalismo keynesiano; tan ligados se encuentran al ideal
neoliberal de Washington que no quieren soltar lo más mínimo de lo apropiado. En realidad
los oligarcas como núcleo de la oposición venezolana carecen de discurso propio
expresando uno con evidentes muestras de ser originado en agencias de espionaje de los
EE.UU., sin poder evitar añejos comportamientos abiertamente racistas
(http://www.youtube.com/watch?v=Lki_5IweSmI&feature=related). Al mismo Presidente
de la República elegido y ratificado mayoritariamente bajo las reglas existentes no le bajan
de ser un zambo, militarote, pobre, etc. Es ostensible que sin presión popular no
renunciarán a sus privilegios.
Los poderosos venezolanos tienen toda la libertad de la que se puede tener en una
verdadera democracia, algo no visto ni en EE.UU. con sus represivas leyes antiterroristas o
en Europa con los despojados de dignidad, trabajo y bienes y hoy dados de palos por
cuerpos policiales verdaderamente brutales lindando con el fascismo. A su vez, la censura
de la que hablan medios extranjeros como BBC, CNN, DW y demás, es difícil encontrarla
en Venezuela en los espacios de medios de comunicación en su mayoría de propiedad de
recalcitrantes capitalistas criollos. De hecho existe un latifundio mediático al servicio del
capital, el cual como es natural difunde el modelo opuesto al de cualquier revolución
popular montando falacias rocambolescas. Allí está la explicación de muchos votos que van
a candidatos que están en contra de los intereses de los mismos votantes, como reales
operaciones psicológicas antigubernamentales. De su parte el gobierno venezolano emite
desde una pequeña fracción del espacio radioeléctrico intentando mostrar su apreciación de
la realidad pero desafortunadamente con las formas propias de los medios del capital; de su
lado los medios de difusión populares dan su lucha con buena fortuna teniendo en cuenta
los recursos a disposición.
Las fuerzas derechistas afirman que el gobernante actual con sus ideas y prácticas políticas
polariza el país, como si antes del comienzo de siglo no hubiera existido una vigorosa lucha
de clases manifestada en momentos cumbres como el ‘’Caracazo’ de 1989. Para aquellos la
existencia de una ínfima minoría con cuentas bancarias con muchos ceros y lujosos
apartamentos en Miami versus masas de desposeídos con apenas para una arepa, habitando
una nación plena de recursos, no implican contraste o enfrentamiento alguno. Una situación
así, ayer como hoy implica a todas luces contienda entre desposeídos y usurpadores.
Bien sabemos como la democracia siempre ha estado en las calles y espacios abiertos,
donde no es posible confinar a las masas, por ello el periodo vivido en Venezuela desde
1989 y su ‘Caracazo’, agitación civil y militar posterior, prolongándose al presente en
continuidad, ha sido amplio en movilizaciones de todo tipo y los resultados se encuentran a
la vista. ¡Y vaya si el pueblo ha estado como protagonista! Como aquel 12, 13 y 14 de abril
de 2002; pensar en un golpe de estado con la Casa Blanca y la Moncloa detrás, revertido
mediante la acción espontánea pero decidida y organizada del pueblo parece increíble y fue
realidad.
“¿Por qué nos dan a las cooperativas 100 millones y a las constructoras les dan 500 o 600
millones? El Presidente dice una cosa y pasa otra. Es como si su mano derecha lo
estuviera saboteando.”(Declaración de miembros de Consejos Comunales. Mark Aguirre.
¿Retomará el Vuelo la Revolución Bolivariana? Viejo Topo 265 Febrero de 2010. Pag.13)
Luego de un buen lapso de control del aparato estatal por parte del actual gobierno no se
han construido una cantidad de viviendas suficiente para las urgentes necesidades de las
ciudades; por ejemplo, el déficit de las mismas es muy notorio en Caracas y debe revertirse
con todos los medios a disposición: construcción, junto con profundización de la reforma
urbana y proyectos de transformación urbanística concertados con los populares Comités de
Tierras Urbanas (CTU).
Se habla de una guardia pretoriana que separa al jefe de estado de los mandantes y obtiene
beneficios, lo cual empeora el problema de un Jede de Estado como Chávez en el papel de
epicentro único de la revolución, emblema irremplazable, ícono insustituible, rozando con
el caudillismo. Sin duda alguna el Presidente Hugo Rafael es un hombre valiente, decidido,
un miembro del pueblo, impulsador de las causas de las clases oprimidas, por tanto leal a
sus postulados, su historia lo demuestra de sobra; empero él es resultado de las luchas de
varias generaciones atrás no quien las originó, ni quien las finiquitará. Es bien conocido que
la transformación de la realidad social conlleva tiempo y variados esfuerzos por lo menos
de padres, hijos y nietos, siendo siempre incompleta; por tanto el poder paulatinamente y
sin descanso debe ir recayendo en las organizaciones colectivas pasando por encima de
nefastos intermediarios, a fin de garantizar su permanencia y profundidad.
Cualquier revolución que se estime auténticamente como tal intentará por todos medios
posibles transformar la sencilla vida cotidiana, y esto en pequeño pero significativamente
está sucediendo en lugares de Venezuela con el control obrero de ciertas industrias y
campesino de algunas tierras, por su puesto como iniciativa popular en marcha.
Es una perogrullada, que en veces es indispensable nos sea recordada: el bienestar del
pueblo venezolano depende de su independencia y la de las naciones del continente y estas
a su vez se subordinan directamente a la capacidad de lograr erigir la unidad
latinoamericana, del Abya Yala o como le llamemos. El proceso que se desarrolla en
Venezuela desde hace unos treinta años, ha enseñado muchísimo en ese sentido; la
dirección del proceso bolivariano extraordinariamente ha puesto el tema en el rol de
aspecto fundamental de las relaciones de los gobiernos desde el Río Bravo hasta el Estrecho
de Magallanes. El compromiso con la liberación de neocolonialismo en el continente es una
virtud unificadora de conceptos dentro de la izquierda, aplastante de las nada ocultas ideas
de dependencia y saqueo de cualquier derecha, la cual ya no es vende-patria sino en el
neoliberalismo regala-patria.
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de
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