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29-07-2013

Coherencias e incoherencias en el espionaje mundial de la NSA y GCHQ

La otra cara del "Gran Hermano"


Alberto Rojas Andrade
Rebelión

David Brooks, corresponsal del diario mejicano La Jornada hace unos días se
preguntaba sardónicamente respecto a toda esa parafernalia de espionajes ilegales,
muertes con artefactos voladores a control remoto llamados drones, persecución
implacable a quienes osen revelar los secretos de la intromisión en todos los
aspectos de la vida, y discurso bélico pertinaz antecediendo diversos actos de
agresión por parte de las autoridades de EE.UU., encabezadas justamente por su
jefe de estado.  ¿Por qué será que uno se siente tan inseguro con tanta seguridad?
 
El mundo entero se encuentra inseguro una vez se ha informado y no precisamente
por declaraciones oficiales, que en aras de sustentar dicha elusiva seguridad, es el
campo de maniobra de una penetración electrónica en la vida privada en muchos
pueblos, especialmente aquellos cercanos al poderío de Washington. Es decir, se
espía a aliados y vasallos, pero así mismo al propio pueblo estadounidense. El lema
oficial una vez descubierto el ocultamiento es que se trata de seguridad, algo así
como ‘por tu bien transgredimos tus derechos’.
 
Obviamente, no todo es del interés del imperio para ser objeto de pesquisa, sólo
aquello que pueda ser de utilidad económica, militar e industrial, y previsiblemente
lo que en ciertos niveles tenga la función de forma de eficaz chantaje; empero,
poco o casi nada se escapa a ser auscultado. Los únicos límites a este totalitarismo
son la propia tecnología y el dinero; y uno y otro es lo que poseen los EE.UU. y su
fiel escudero Gran Bretaña, como centros comerciales y financieros parasitarios de
occidente.

No parece ser una coincidencia que dichas naciones desarrollen sistemas de control
de tan amplios espectros; más bien sorprende que sea el mismo gobierno de
Londres quien ostente un ente de naturaleza evidentemente orweliana, con
mayores alcances de lo que será la misma Central de Datos de Utah próximamente
al servicio del gobierno de la Casa Blanca; la británica alberga una tecnología digna
de ser empleada en mejor causa, originada en el Government Communications
Headquarters (GCHQ por su sigla en inglés)[1]. Su objetivo es espiar Europa
continental, fundamentalmente Alemania.

La Agencia Nacional de Seguridad (NSA) de EE.UU. y el GCHQ británico, son


quienes a la cabeza de otras agencias del mismo corte en Europa, desarrollan
virtualmente motu propio pues no existen controles públicos, procedimientos
tecnocráticos a fin de cubrir las comunicaciones de la mayor cantidad de seres
humanos posible, no ahorrando esfuerzos en ello. Por ejemplo han establecido una
base de datos de entre 30 y 40 mil palabras clave para cribar textos en varios
idiomas[2] con sus ultra veloces máquinas, las cuales al ser utilizadas en mensajes
por medios electrónicos, pueden hacer a cualquiera objeto de sospecha. La
discrecionalidad de la cifra en cabeza de burócratas de la represión demuestra el
poder y la autonomía de que gozan aquellos entes, a la par de su intención
dictatorial de abarcar a la totalidad de la población.

Centros de captura almacenamiento, análisis de material espiado, junto con la


creación de invasivos programas informáticos del tipo PRISMA (EE.UU.) o TEMPORA
(Gran Bretaña), forman parte de un minucioso propósito de intromisión y control
planetario que incluye satélites, submarinos, aviones teledirigidos, y otros
artilugios[3], destinados a anticipar nuestros comportamientos a través de la
información intercambiada con nuestros semejantes, lo cual a su vez no puede
estar desligado de la acentuada tendencia militarista de nuestro tiempo (el director
actual de la NSA es un militar activo, el teniente general. Keith B. Alexander). Ello
en consonancia con parámetros castrenses pentagonales, los cuales estipulan que
sus funciones se basan en la obtención de lo que denominan ‘inteligencia’ de
grandes poblaciones.

El asunto de acuerdo a lo revelado por estos días adquiere dimensiones de


universalismo paranoico: “La NSA –explicó Edward Snowden– ha construido una
infraestructura que le permite interceptar prácticamente cualquier tipo de
comunicación. Con estas técnicas, la mayoría de las comunicaciones humanas se
almacenan para servir en algún momento a un objetivo determinado”[4].
 
La disminución de actividades vedadas al escrutinio público en cuanto a la vida,
honra y bienes por parte de entes adscritos a la Casa Blanca o en connivencia con
esta, en territorios bajo hegemonía imperial, se produce no a diario sino por
segundo y se mide en terabytes. Nada pueden esperar los estadounidenses de sus
representantes políticos con medios de control cooptados como el Congreso
estadounidense; el resto debemos actuar con el realismo de siempre.
Un clima de estas características, tal vez no visto desde la edad media, en cuanto a
irrespeto a las actividades de interrelación humana, es alimentado “a diario por los
políticos, las autoridades, los medios, los "expertos" y toda una industria de
relaciones públicas dedicadas a esto–, la sensación es de un país bajo sitio”[5]. O
más bien, un estado de sitio planetario.

Y este estado de cerco, es ubicado como facultante de cualquier abuso: “Varios


funcionarios y periodistas más están bajo investigación por filtrar información
"oficial" secreta al público, con las mismas acusaciones; de hecho, ningún otro
gobierno en la historia moderna del país ha realizado tantas investigaciones en este
rubro que el de Obama.[6]”.

Recopilar frenéticamente datos es lo establecido oficialmente como letanía


justificatoria del gasto de dineros públicos en los dos lados del Atlántico norte,
empleando ciencias aplicadas erigidas como panóptico cibernético. Se argumentará
en favor del espionaje ilimitado, que existe en Estados Unidos una justicia
especializada encargada de verificar la legalidad de dichos rastreos efectuados al
interior de causas judiciales, esto es la  Foreign Intelligence Surveillance Court
(Tribunal de Vigilancia de Inteligencia Extranjera), por sus siglas en inglés FISC; sin
embargo, esta corte pletórica de un secretismo kafquiano con sus marcas
insuperables de aprobación de indagaciones secretas, es en la práctica un avalista
de los planes en la materia de la Casa Blanca.
Así como en 1971 el analista de la Rand Corporation Daniel Ellsberg, sacara a la luz
pública la real historia de la Guerra de Vietnam ignorada por el público, con la
publicación de los ‘Papeles del Pentágono’, razón por la cual fue perseguido
judicialmente con el argumento de ‘revelar secretos de estado’, declarado como el
‘hombre más peligroso de América’ por parte de altos funcionarios de entonces y
acusado por el presidente Richard Nixon (1969-1974) de haber ‘ayudado y
consolado al enemigo’[7], en este tiempo asistimos a una nueva comprobación de
la verdadera política pública aplicada, con nuevos personajes osados denunciando
una colosal estructura de abusos.
 
De idéntica forma como fue acusado Ellsberg, Snowden había advertido que sus
revelaciones iban a ser tomadas por el US Goverment para “decir que he roto la
Ley de Espionaje y ayudado a nuestros enemigos"[8]. Se evidencia la continuidad
en el malestar de las élites de estadounidenses cuando es menguado su
antidemocrático secretismo.
 
¿Y aquel término ‘nuestros enemigos’? ¿Quiénes son estos seres tan
demencialmente temerarios como para que sean vistos como tales por el aparato
de guerra y espionaje más colosal de nuestro tiempo, destructor implacable de
quien se le oponga?

Para los capitalistas por esta época, hostiles a sus ambiciones son potencialmente
quienes no pertenezcan a minorías depredadoras; los despojados que vamos siendo
el resto, somos enemigos cada vez menos potenciales y más reales. Y claro,
aquellos tienen razón, no existe incongruencia alguna en sus planteamientos; las
mayorías se oponen de una u otra manera al orden social impuesto. La historia es
clara al respecto. El joven analista Snowden ha revelado al dominio público
proyectos de intromisión ilegal en pleno desarrollo, es decir a enemigos, si, a
quienes leen The Washington Post, o The Guardian y subsecuentemente otros
medios por doquier, gente peligrosa si se une y organiza.

El presidente de EE.UU., ha intentado justificar este maremágnum de violación a


principios inveterados de dignidad humana y privacidad, con la artificiosa paradoja
esgrimida mecánicamente por cualquier jefe represivo: ‘no puedes tener 100%
seguridad y a la vez 100% privacidad’[9]. Un falso contrasentido al interior de
cualquier sistema democrático efectivo.

A pesar del desastroso panorama social que implica lo descrito, este no parece
tocar el fondo: es apenas el inicio del conocimiento de la práctica de más torvos
proyectos de control social[10]. Empero, a la vez debemos reconocer como lo
mencionó en su momento la presidenta argentina Cristina Fernández, esto es algo
que ya todos presentíamos de múltiples formas por serios indicios.

El presidente Obama con marcado cinismo ha afirmado que el amplio espectro de


intromisión en la privacidad está justificado y no viola los derechos fundamentales
en su país, como medio para evitar la materialización de amenazas, citando para
ello sus propias agencias panópticas; dicho amplio espectro es omnipresente en las
actividades humanas de nuestro tiempo en niveles inimaginables, como han
establecido las revelaciones de Snowden.

De su lado, las empresas privadas de EE.UU. del área de comunicaciones en la


primera línea de ‘batalla’, son funcionales a estos fines de servir de adornadas y
seductoras maquinarias recolectoras de información[11]. Por ello desconfiar de
Microsoft, Google, Yahoo!, Facebook, Apple, AOL, Skype, YouTube y PalTalk etc., es
perfectamente procedente si se está interesado en guardar libertades e intimidad;
allí tampoco se presenta incongruencia alguna, pues el capital tiende
instintivamente a colaborar con la represión de quienes podrían tener interés en
oponerse a su voracidad.

Empero, si pensamos que no utilizando las maquinitas electrónicas que nos


abruman estamos a salvo, debemos recordar la vigilancia de cámaras por doquier
en entornos públicos urbanos, conectadas a superordenadores siguiendo y
descifrando cada paso que damos, cada gesto que surja de nuestra personalidad;
esto también forma parte de este esquema totalitario que no deja prácticamente
nada al fuero íntimo de los habitantes citadinos fundamentalmente.

El tema es planteado desde ya como un acontecimiento climático, en otras


palabras, en la forma de hecho ineludible, por superar los esfuerzos humanos que
se le opongan. No obstante, si tenemos en cuenta los logros en materia de
libertades individuales y colectivas en ascenso desde la Ilustración, conquistados
mediante intensas luchas sociales, lo planteado de la acechanza electrónica
indeterminada y constante como ‘razón de estado’, es simple y llanamente un
hecho político con características de peligroso retroceso en la construcción de una
orden político humanístico, lo cual por supuesto puede y debe ser revertido.

También y directamente relacionado con la propaganda de guerra, no faltan en


cualquier latitud quienes aseguren que el omniespionaje es conveniente, pues para
los ciudadanos comunes es favorable que se espíe a todos esos enemigos,
protagonistas supremos de telediarios, aquellos terroristas, traficantes de
sustancias ilegalizadas, criminales, psicópatas, maleantes, violadores,
extorsionistas y delincuentes en general, que de conformidad con la insuperable
superficialidad de los medios de información, son gratuitos, tercos y malévolos
adversarios de la sociedad.
 
¡Pero un momento! ¿Esta clase personas acaso no eran las a vigilar con los más
sofisticados medios a disposición? ¿No era en procura de fieros pensamientos
criminales que se ha establecido este laberinto omnipresente de tecnología? Es
decir, ¿no eran acaso el blanco del espionaje esos peligrosos personajes y por tanto
los poderes establecidos en occidente, no estaban y están al tanto de sus fechorías
con aquella panoplia destinada a casi que hacer evidente hasta íntimos
pensamientos?
 
No obstante, de hecho en regiones enteras, fundamentalmente bajo dominio
imperial directo o indirecto, organizadas bandas de maleantes, criminales de varias
modalidades, traficantes ilegales con sus adláteres mafiosos, grupos ejecutores de
múltiples ilícitos y demás, continúan actuando a sus anchas en frecuentes casos
con gran violencia, a los cuales les es opuesta apenas una parsimoniosa y selecta
persecución oficial. Allí vemos una diáfana incongruencia entre las finalidades
anunciadas del espionaje en masa y sin límites y los resultados de disminución de
graves delitos y violación flagrante de derechos.
 
Con tanta información recaudada y si tenemos en cuenta que son la justificación de
la vigilancia despótica impuesta, ¿cuál es la razón de que no hayan sido
desmanteladas tales redes criminales frecuentemente organizadas al detalle, las
cuales figuran ampliamente en los mass-media como peligro para la sociedad
estadounidense y fuente de desestabilización de sociedades enteras, justamente en
naciones bajo control virtualmente directo del gobierno de Washington como
México, la región Centroamericana o Colombia?

Este campo anuncia una existencia notoria de grandes irracionalidades y absurdos,


exponiendo como contradictorios los fines propuestos, los medios empleados, y los
resultados obtenidos.

Caso paradigmático que es necesario poner de presente en cuanto a su


singularidad, es el de Jamaica, la famosa isla relativamente pequeña y una
población de unos dos millones setecientos mil habitantes, ubicada
estratégicamente en el Caribe, fácilmente controlable desde el punto de vista
policiaco con los abundantes medios a disposición. Allí desde hace varias décadas
se ha desarrollado un tráfico de sustancias ilegalizadas, originando robustas
organizaciones delincuenciales, las cuales en años recientes se han enfrentado al
gobierno de Kinston, dentro de un marco de pauperización social y económica
extendida.

En estas circunstancias en 2010 ocurrieron variados tiroteos causantes de la


muerte de por lo menos un centenar de personas al margen del enfrentamiento, en
el cual las fuerzas armadas jamaiquinas ocasionaron la mayoría de decesos[12]. A
manera de escenario ya visto en otras regiones del continente, las acciones
militaro-policiales causaron inexplicables víctimas inocentes, asemejándose más a
operaciones de castigo generalizado, que a esfuerzos por reducir a criminales con
métodos civiles[13], a lo cual se unió una impunidad prácticamente total al
respecto[14].

¿Es posible la generación y crecimiento de un mercado de psicoactivos en una isla


cómodamente controlable, especialmente desde el punto de vista del mencionado
ciberespionaje, sin el conocimiento de centros de su operación como la NSA y el
GCHQ? La respuesta es no. ¿Entonces como fue posible que hubiera llegado un
traficante ilegal situado un entorno vigilado y perseguido por el gobierno de EE.UU.
a un crecimiento delictual mortífero inusitado[15], desafiante del gobierno isleño
generando un estado de zozobra general en Jamaica?

¿Cómo es que más recientemente se ignora por parte de todas las autoridades
locales e internacionales, que en Jamaica se presenta un resurgimiento de
actividades delincuenciales[16]? ¿Allí como en otras acciones criminales en todo el
hemisferio, especialmente al sur de la frontera de EE.UU., la NSA por qué no
comunicó información seguramente acopiada sobre estos temas, que hubiera
evitado derramamiento de sangre en la isla?

Con un estado de incertidumbre tal, como el resaltado por Brooks, arduo es


explicar con base en las informaciones a disposición la situación política mundial en
este tema, por tanto debemos plantearnos, parafraseando al filósofo estoico
Epicuro (s. I dne), algunos interrogantes generales a manera de ejercicio, los
cuales esperamos nos ayuden de método para dilucidar tal maraña de hechos
contrapuestos:
¿Acaso están dispuestas las autoridades de EE.UU. y demás con todos sus
ostentosos artilugios que poseen a erradicar la delincuencia pero no son capaces de
hacerlo? En este caso no son tan poderosas como ruidosamente dicen ser. ¿Son
capaces pero no están dispuestas a hacerlo? Entonces son malvadas (tal vez tienen
otros planes). Por último, ¿son capaces y están dispuestas a terminar con la
criminalidad? Si es así, ¿cuál es la razón de que gravísimos crímenes persistan e
incluso se recrudezcan en determinados lugares?[17]

Es evidente la presencia de un conjunto de absurdos en el ciberespionaje masivo,


pues pareciera que a mayor extensión de este correlativamente ocurre un repunte
de algunas formas de violenta criminalidad en lugares muy específicos. La lógica
nos lleva a concluir la existencia de un nuevo engaño cuando salíamos del anterior.
 

Notas

[1] Pablo Heraklio. GCHQ el mayor centro de ciberespionaje del mundo: la red no
es segura. Kaosenlared. Julio 17 de
2013.http://kaosenlared.net/component/k2/item/63310-gchq-el-mayor-centro-de-
ciberespionaje-del-mundo-la-red-no-es-segura.html
[2] Heraklio. Ibídem
[3] Carlos Fazio menciona también el avión experimental X-37 (posiblemente un
avión rastreador de señales electrónicas ver CNN Marzo 9 de
2011.http://mexico.cnn.com/tecnologia/2011/03/06/estados-unidos-lanza-segundo-avion-
experimental-no-tripulado-desde-florida). Snowden y la cloaca cibernética orwelliana.
La Jornada. Julio 8 de 2013 http://www.jornada.unam.mx/2013/07/08/opinion/021a1pol
[4]Ignacio Ramonet. ¡Todos fichados! Le Monde Diplomatique. 08-07-
2013 http://www.monde-diplomatique.es/?
url=editorial/0000856412872168186811102294251000/editorial/?articulo=3c96f3fa-45de-
4cb1-a3d5-3a3d2e54720c  
[5] David Brooks. Un ambiente de amenaza permanente. Seguridad. http://progreso-
semanal.com/ini/index.php/eeuu/6915-seguridad
[6] Brooks. Ibídem.
[7] Ellsberg llegó a ser acusado con cargos penales que equivalían a 115 años de
prisión; al final fue absuelto de todos ellos. Ver El Hombre Más Peligroso de
América. Daniel Ellsberg y los Documentos del Pentágono. Judith Ehrlich, Rick
Goldsmith. Television’s Independent Voice.Tiempo 1:13 50.
[8] Edward Snowden: el denunciante tras las revelaciones de vigilancia de la NSA.
The Guardian. Junio 9 de 2013. http://www.guardian.co.uk/world/2013/jun/09/edward-
snowden-nsa-whistleblower-surveillance&prev=/search%3Fq%3Dsnowden%2Bprisma
%26start%3D10%26sa%3DN%26hl%3Des%26rlz%3D1T4ADFA_esCO470CO470%26biw
%3D1280%26bih%3D644
[9] Ramonet.
[10] "Snowden tiene suficiente información como para causar más daño al gobierno
estadounidense él solo en un minuto del que cualquier otra persona haya tenido
jamás en la historia de Estados Unidos", Entrevista a Glenn Greenwald, periodista
que recibió las filtraciones de Snowden. "Snowden tiene información para causar
más daño". Alberto Armendariz. La Nación. Julio 15 de 2013.
lanacion.comhttp://www.lanacion.com.ar/1600674-glenn-greenwald-snowden-tiene-
informacion-para-causar-mas-dano
[11] Salvador López Arnal. Entrevista a Edward Snowden: El Gran Hermano, sus
colaboradores y la vigilancia global-imperial. Rebelión. Junio 13 de
2013. http://www.rebelion.org/noticia.php?id=171080
[12] Lucha contra el narcotráfico deja 73 muertos en Jamaica. Agencia Telam.
Mayo 27 2010. http://www.lavoz.com.ar/noticias/sucesos/lucha-contra-el-narcotrafico-
deja-73-muertos-en-jamaica
[13] Carolyn Gomez. La ‘Mano Dura’ en Jamaica. Revista
Ideele http://www.revistaideele.com/ideele/content/la-mano-dura-en-jamaica
[14] Amnistía Internacional. Jamaica debe enjuiciar homicidios en operación contra
bandas criminales. Mayo 27 de 2011.http://www.amnesty.org/es/news-and-
updates/jamaica-enjuiciar-homicidios-bandas-criminales-2011-05-23
[15] Se trata de Christopher ‘Dudus’ Coke. El gobierno estadounidense lo acusa de
vender marihuana y crack en Estados Unidos y de ser responsable de unos 1.400
asesinatos en ambos países, y sostiene que es "uno de los narcotraficantes más
peligrosos del mundo”.  Telam. Ibídem. 
[16] James Bargent. Policía Jamaiquina Tiene Como Objetivo US$300 Millones en
Narco Bienes. Mayo 17 de 2013 http://es.insightcrime.org/noticias-del-dia/policia-
jamaiquina-tiene-objetivo-300-millones-narco-bienes
[17] Los interrogantes de Epicuro rezan así: “¿Acaso está dispuesto (dios) a
erradicar la maldad pero no es capaz de hacerlo? En este caso no es poderoso. ¿Es
capaz pero no está dispuesto a hacerlo? Entonces es malvado. Por último ¿es capaz
y está dispuesto a hacerlo? Si es así ¿por qué existe la maldad? 
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia
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