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UNIVERSIDAD JUÁREZ DEL ESTADO DE DURANGO

FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS


DIVISIÓN DE ESTUDIOS DE POSGRADO E INVESTIGACIÓN

Materia: Técnicas de la enseñanza del derecho

Control de lectura
La ciencia jurídica como objeto de estudio

Catedrático: Dr. Manuel Jiménez López

Alumnos: César Emmanuel Montiel Santos

Victoria de Durango, Dgo., a 29 de agosto de 2018


CONTROL DE LECTURA

La ciencia jurídica como objeto de estudio

Atendiendo a las palabras de Hans Kelsen, el derecho es un fenómeno social, pero la


sociedad es un objeto por entero diferente de la naturaleza: uno y otro conexionan sus
elementos respectivos de modo radicalmente diverso. El derecho parece radicar, en parte al
menos, en el reino de la naturaleza; aparentemente, posee una existencia del todo natural.
En concluicion Hans Kelsen supone que el derecho es una ciencia.

Por otro lado y entendiendo el derecho como una concepción indispensable para una sana
convivencia social y visto desde una perspectiva nacional debemos atender a lo dispuesto
por el artículo 39 de nuestra carta magna, que establece que “La soberanía nacional reside
esencial y originariamente en el pueblo. Todo poder público dimana del pueblo y se
instituye para beneficio de éste. El pueblo tiene en todo tiempo el inalienable derecho de
alterar o modificar la forma de su gobierno.”1; al respecto y entendido la soberanía según
la concepción clásica de Hans Kelsen, “soberano, bien se trate de un orden, o bien de una
comunidad, o bien de un órgano, o bien de un poder, debe ser considerado como lo más
alto, como lo supremo, por encima de lo cual no puede haber autoridad más alta que limite
la función de la entidad soberana, que obligue al soberano”, el pueblo representa lo más
alto en la toma de decisiones en la nación, su interés está por encima de todo si se busca su
beneficio.

Ahora, el derecho es una forma de poder y de dominio, éste entendido no como un aspecto
negativo, si no como una solución a un problema de desorganización; luego, para
aplicación efectiva del derecho debemos subordinarnos aun poder encargado de
administrar, proveer derecho y ejecutar la ley, ello a través de los gobernantes y
representantes populares, es entonces que podemos afirmar que todo gobernante busca
legitimidad de su encargo, gobernabilidad con el fin primordial de entregar buenas cuentas
y diversos aspectos pueden, durante la administración de un gobernante, desarmonizar ésa

1
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, Art. 39.
búsqueda. Jaime Ross Bravo en su obra “Bases para una Filosofía de la Ley”, establece que
el poder es una necesidad social que ha de ser obedecido, ninguna sociedad humana
progresa sin una autoridad que guíe el camino de sus gobernados, si faltara la autoridad, la
sociedad simplemente se dispersaría, la naturaleza de la sociedad requiere a una autoridad
que una las fuerzas de los gobernados y que guíe su camino. 2

Más adelante el mismo autor refiere que el hombre no pude llevar una vida humana
si no se asocia con otros.3 Ésta idea particular resulta interesante si vemos al hombre como
un animal más que como un ser racional, en el sentido de que un hombre desde un punto de
vista morfológico es débil en un ambiente salvaje, poseemos una piel delgada y desprovista
de pelo, susceptible a sufrir quemaduras por calor o frío, no tenemos garras o diente
afilados, tampoco somos muy fuertes o muy rápidos nuestros sentidos y habilidades
parecen limitados en comparación con otros animales, es por ello que la supervivencia de
los hombres depende de un agrupamiento de masa, el hombre sólo, es débil, pero en
conjunto es capaz de dominar su entorno, pero sólo con una autoridad que lo guíe.

Como bien lo refiere Jaime Ross Bravo, la autoridad en una colectividad tiene una razón de
ser que es la de propender al bien común y si se desentiende de esto, desnaturaliza su
misión, y es cuando resulta apropiado y justo no obedecer.4

2
Cfr. Ross Bravo, Jaime. Bases para una Filosofía de la Ley. Biblioteca del congreso nacional, 1° Ed.
Santiago de Chile, 1945. p. 175.
3
Cfr. Ross Bravo, Jaime. Op. Cit. p. 185.
4
Cfr. Ross Bravo, Jaime. Op. Cit. p. 207-208.

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