7. Explicar cómo el nominalismo y el empirismo generan una crisis de la noción de persona.

Entra en crisis, porque las categorías aristotélicas de sustancia, naturaleza o esencia son rechazadas o,
al menos son cuestionadas. La clásica definición de persona se abandona, puesto que al entrar en crisis
el pensamiento metafísico se hace imposible acceder intelectualmente a la noción de sustancia.

8. Explicar los errores: racionalismo, voluntarismo, colectivismo y materialismo.

Racionalismo: Si seguimos la doctrina cartesiana según la cual “Yo soy una sustancia pensante”,
afirmamos que la sustancia es mi pensamiento, mientras que el cuerpo es otra sustancia. De esta
manera, la persona humana no se fundamenta ya en el ser personal, sino en una facultad suya y en su
correspondiente operación (pensar). Persona se entiende en términos de autoconciencia.

Voluntarismo: En la filosofía contemporánea se sigue afirmando la radicalidad personal no en el ser,

sino en el obrar. Se trata de una voluntad autónoma desligada del bien y de la verdad. El hombre no
posee un ser fundado (en Dios), sino que se trata de un sujeto fundante de la verdad y el bien.

Colectivismo: La individualidad humana sólo cobra valor y sentido en el todo del Estado. Por
consiguiente la persona ha de subordinar sus propios intereses al fin superior del Estado.

Materialismo: El individuo humano es una especie más evolucionada de un mundo que se explica en
términos materiales. No existe una preminencia sobre otros seres naturales.

9. Explicar el personalismo: qué es, qué errores intenta responder, cómo procede, qué aportes trae.

Se llama personalismo a toda la doctrina y civilización que afirma el primado de la persona humana
sobre las necesidades materiales y sobre los mecanismos colectivos que sostiene su desarrollo.

El personalismo surge como reacción a una concepción materialista y colectivista del hombre, que
tiende a disolver a la persona humana en un engranaje más del proceso de producción.

La recuperación de la noción de persona se realiza desde el método fenomenológico y no metafísico ya

que la definición sustancialista de persona tiende a ser cuestionada como el personalismo como
insuficiente, puesto que la sustancia individual connota individualidad e incomunicabilidad, mientras que
la persona es apertura, relación y diálogo. Además de reducir a la persona a substancia sería
equivalente a “cosificarla”. La persona humana no es un “qué”, no es un “algo”, sino un “alguien”
personal.

Las aportaciones del personalismo a la antropología filosófica han aplicado un método nuevo de acceso
a la realidad humana: el método fenomenológico y la metafísica.

10. Explicar el aparente conflicto entre fenomenología y metafísica,  y cómo se debe superarlo.

11. ¿Qué se entiende por la subsistencia de la persona?

Ser que subiste, que existe en sí mismo y en otro ni con otro. La sustancia posee en propiedad su acto
de ser, pero ese acto de ser no es originado por sí mismo, se trata de una sustancia fundada y no
fundante en el orden del ser. Toda sustancia subiste, pero la persona además opera por sí misma y por
eso dice que posee el acto de ser modo más propio que los otros seres naturales.
12. ¿Qué se entiende por incomunicabilidad de la persona?

La sustancia posee su propio acto de ser de manera tan intensa que no lo puede compartir con otro. Es
incomunicable porque si lo pierde se acaba con la sustancia, yo no puedo dar mi acto a otro ser. La
persona es inalienable e irrepetible.