decimiento a Dios al ofrecerle un sacrificio. La Biblia dice, "Entonces Noé edificó un altar al Señor...
y sacrificó un holocausto en él." 15 Debido al sacrificio de Jesús, no ofrecemos sacrificios de
animales como Noé lo hizo. En su lugar, se nos dice que ofrezcamos a Dios "el sacrificio de alabanza" 16 y "el sacrificio de acción de gracias." 17 Alabamos a Dios por lo que es y le damos gracias a Dios por lo que ha hecho. David dijo, "Alabaré el nombre de Dios con cantos y lo glorificaré con acción de gracias. Esto complacerá al Señor." 18 Algo increíble ocurre cuando ofrecemos alabanza y damos gracias a Dios. Cuando le damos deleite a Dios, ¡nuestros propios corazones se llenan de gozo! A mi madre le fascinaba cocinar para mí. Aún después de que me casé con Kay, si visitábamos a mis padres, mamá preparaba increíbles banquetes caseros. Uno de los mayores placeres de mi madre era vernos a nosotros sus hijos comer y deleitarnos de lo que había preparado. Cuanto más nos deleitábamos comiendo, más deleite ella sentía. Pero también nos gustaba complacer a mamá al expresar nuestro deleite de su comida. El deleite se expresaba mutuamente. Mientras comía de su gran banquete, yo expresaba cuánto me gustaba y alababa a mi madre. Mis intenciones eran no sólo disfrutar del banquete sino también complacer a mi madre. Todos nos sentíamos felices. La adoración funciona así también. Disfrutamos de lo que Dios ha hecho por nosotros, y cuando expresamos ese deleite a Dios, eso le produce gozo a El – pero también aumenta nuestro gozo. El libro de los Salmos dice, "Los justos se alegran y se regocijan en su presencia; se sienten felices y gritan de gozo." 19 Dios sonríe cuando usamos nuestras habilidades. Después del diluvio, Dios le dio a Noé estas simples instrucciones: "Den fruto y aumenten en número y llenen la tierra... todo lo que vive y se mueve será alimento para ti. Así como te di las plantas verdes, ahora te doy todo." 20 Dios dijo, "¡Es tiempo de continuar con sus vidas! Hagan las cosas para las que diseñé a los humanos que hicieran. Hagan el amor con sus esposas. Tengan bebés. Críen hijos. Siembren cosechas y coman. ¡Sean humanos! ¡Para esto fue que los hice!" Puede que sienta que el único momento en que Dios está complacido con usted es cuando está haciendo actividades "espirituales" – como leer la Biblia, asistir a la iglesia, orar o compartir su fe. Y puede que piense que Dios está desinteresado en las otras partes de su vida. La realidad es que a Dios le deleita observar cada detalle de su vida, ya sea que esté trabajando, jugando, descansando o comiendo. A El no se le escapa ninguno de sus movimientos. La Biblia nos dice, "Los pasos del devoto son dirigidos por el Señor. El se deleita en cada detalle de sus vidas." 21 Toda actividad humana, excepto el pecado, puede ser hecha para el placer de Dios si la hace con una actitud de alabanza. Puede lavar trastes, reparar máquinas, sembrar una cosecha y criar una familia para la gloria de Dios. PROPOSITO # 1: Usted Fue Planeado Para El Placer De Dios 65 Como todo padre orgulloso, Dios especialmente disfruta verlo usar los talentos y habilidades que le dio. Dios nos dotó a todos intencionalmente diferente para su deleite. El ha hecho que algunos sean atléticos y otros analíticos. Puede que usted sea dotado en la mecánica o la matemática o en la música o en otras de las miles de habilidades. Todas estas habilidades le pueden poner una sonrisa al rostro de Dios. La Biblia dice, "El ha moldeado a cada persona; ahora él observa todo lo que hacemos." 22 No le trae gloria a Dios ni le da placer cuando esconde sus habilidades o cuando trata de ser otra persona. Sólo le da deleite cuando usted es usted. Cada vez que rechaza cualquier parte de usted mismo, rechaza la sabiduría y la soberanía de Dios al crearlo. Dios dice, "No tienes derecho a argüir con tu Creador. Eres una mera vasija de barro formada por un alfarero. La arcilla no pregunta, '¿por qué me hiciste así?'" 23 En la película Chariots of Fire (Carros de Fuego) el corredor olímpico Eric Liddell dice, "Creo que Dios me hizo con un propósito, pero también me hizo veloz y cuando corro siento el placer de Dios." Más adelante dice, "Dejar de correr sería faltarle el respeto a Dios." No hay habilidades que no son espirituales, sólo hay habilidades que son mal usadas. Empiece a usar las suyas para el placer de Dios. A Dios también le da placer verle deleitarse en su creación. El le dio sus ojos para que disfrute de la belleza, le dio sus oídos para que disfrute de los sonidos, le dio su nariz y sus papilas gustativas para que disfrute de los colores y los sabores, y los nervios debajo de su piel para que disfrute ser tocado. Cada acto de deleite se convierte en un acto de adoración cuando le da gracias a Dios por ello. De hecho, la Biblia dice, "Dios... generosamente nos da todo para nuestro deleite." 24 ¡Dios incluso disfruta verlo dormir! Cuando mis hijos eran pequeños, recuerdo la profunda satisfacción que sentía al verlos dormir. A veces habíamos tenido un día muy problemático y con mucha desobediencia, pero cuando estaban dormidos se miraban contentos, seguros y en paz y recordaba cuanto los amaba. Mis hijos no tenían que hacer nada para que disfrutara de ellos. Estaba feliz con sólo verlos respirar, porque los amaba tanto. Mientras sus pechitos subían y bajaban, yo sonreía y a veces mis ojos se llenaban de lágrimas de gozo. Cuando está durmiendo, Dios lo mira con amor, porque usted fue su idea. El lo ama como si usted fuera la única persona en la tierra. Los padres no exigen que sus hijos sean perfectos, ni siquiera maduros, para que los disfruten. Disfrutan de ellos en cada etapa de su desarrollo. De la misma manera, Dios no espera hasta que alcance la madurez para que El empiece a deleitarse en usted. El lo ama y disfruta de usted en cada etapa de su desarrollo espiritual. Puede que haya tenido maestros o padres difíciles de complacer durante su crecimiento. Por favor, no asuma que Dios se siente así con respecto a usted. El sabe que usted es inca- 66 La Vida Conducida Por Propósitos paz de ser perfecto o sin pecado. La Biblia dice, "El ciertamente sabe de qué estamos hechos. El tiene en mente que sólo somos polvo." 25