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Llamado de Dios

1. Tengamos como gran desprecio que Dios llame a la puerta de nuestro corazón, y vuelva a llamar antes de
responderle.
2. ¿Señales claras'y seguras?
-¿Cómo no va a intentar el demonio seducirte con el deseo de exigir de Dios una señal evidente para
seguirlo fiel y ciegamente?
3. No te pares a indagar cómo has llegado, Dios usa mil medios para atraerte.
4. Su padre había muerto ese día y Jesús le dice al joven: "Sígueme, y deja que los muertos entierren a sus
muertos" (Mt.8,22).
¿Desaprensivo, tal vez?. No. Solamente quiso enseñarle que ninguna cosa es tan necesaria como ocuparse de los
negocios del cielo.
5. Lo importante es cultivar y corresponder a la primera llamada y después no preocuparse si vendrán
disgustos o frialdades.
6. "Elí, sacerdote del templo, comprendió que era el Señor el que llamaba al joven Samuell, (1 Sam. 3,8).
Tu Padre Espiritual discernirá si es Dios el- que te llama. Y, si es El quien te convoca, respóndele con la
generosidad del joven Samuel "Habla, Señor, que tu servidor escucha".
7. ¿No sabes que te encuentras en el medio del camino? y el camino no es para sentarse sino para andar,
¡síguelo!
8. Dices que eres "muy poca cosa para donarte a Dios". Y te respondo con el Evangelio: "Cada uno da de lo
que tiene, aunque sea poco". Recuerda el elogio del Señor a la viuda: "ella ha echado más que todos ...
porque ha entregado todo lo que tenla para vivir" (Mc.12,43,44).
9. No me vengas con que "me gusta" o "no me gusta". Son razones propias de una niña. Tus preguntas serán:
¿Dónde daré mayor gloria a Dios? ¿Dónde será más fácil santificarme? ¿Dónde colaboraré mejor en la obra
de la salvación de las almas?
10. -Si supiese que seré perseverante ...
- ¿Qué harías si lo supieses? Haz ahora lo que entonces, y estarás bien seguro.
11. Tal vez tu objeción sea como la de Moisés:"Soy torpe para hablar,, (Ex.4,10); o como la de Isaías: "Soy un
hombre de labios impuros" (Is.6,5); o como la de Jeremías: "Soy demasiado joven" (Jer.1,6). Y el Señor te
responde como a ellos: "No temas porque Yo estoy contigo" (Jer.1,8).
12. No andes pensando en lo que dejaste. Te lanzas a algo infinitamente superior. "El que ha puesto la mano en
el arado y mira atrás, no sirve para el reino de Dios" (Lc.9,62).
13. Aunque el camino sea duro, se hará gustoso si te entregas dócil, plena y rápidamente a la voluntad de Dios.
14. Cuando en el seno del hogar te presente el demonio la batalla mostrándote a tus padres suplicantes, con
lágrimas en los ojos, anunciadoras del dolor que tu partida deja en sus corazones, no te rindas, sino, puesta
la mirada en Dios, resiste valerosamente, porque si logras la victoria en el ataque del amor paterno no habrá
ya amor en el mundo capaz de volverte atrás.
15. Dios permite muchas dificultades en los que lo sirven, pero nunca permiten que sucumban bajo el peso de la
carga, mientras confíen en Su ayuda omnipotente.
16. Mal andarían los cristianos, "soldados de Cristo", sin sus capitanes, los sacerdotes. Pronto el enemigo se
adueñaría de sus almas.
-Convéncete: es necesario que trabajes, según tus fuerzas, para que haya santos y sabios sacerdotes.
17. ¡Firme resoluci6n de no abandonar jamás a Dios! Ese será el contrapeso para mantener tu alma en la santa
igualdad, ante las desigualdades de los movimientos propios de la vida.
18. Examina y obra con prontitud ... Mira que Dios lo quiere ...
19. La virginidad consagrada a Dios es por sí misma una expresión tan grande de fe en el reino de los cielos y
una prueba tal de amor al Divino Redentor, que no te debes maravillar que produzca enormes frutos de
santidad en aquellos que se consagran.
20. Me recuerdas al joven rico (Mt.19,16-22): "cumples" con todo, eres puro, dialogas con Dios, ayudas al
prójimo, sientes deseos de perfección... ¿Cuáles son los lazos que te atan? ¿A qué temes renunciar?
21. Es la Voluntad de Dios. Aquí estoy Señor, sin demora, sin reserva, para siempre, por amor.
22. Aquellos a quienes Dios elige para algo, los prepara y dispone, de modo que se hallen idóneos para lo que
son elegidos.
23. "Subió a un monte, y llamando a los que quiso vinieron a El" (Mc.3,13). Llamó a los que quiso; ésa es la
respuesta a tus "¿por qué a mí?".
24. "La mies es mucha y los obreros pocos" (Lc.10,2) nos dice Jesús, susurrándonos al corazón.
Y el alma del joven se estremece con agitación extraña: -le entregaré mi vida a Cristo para que no se
pierdan más mieses que otros sembraron y yo no he sido capaz de recoger.
25. San Pedro era un hombre tosco, grosero, ignorante; San Juan, un joven distinguido, agradable y culto. Sin
embargo Dios prefiere a aquél para Pastor Universal.
-No seas soberbio. Dios no te elige por tus bondades, sino porque quiere ...
26. ¿Por qué Dios escoge instrumentos tan débiles para negocio tan alto? Para que el hombre no confíe en sí, ni
tenga ocasión de atribuirse nada y así ponga toda su confianza en Dios.
27. Dios llama por mensajeros: A María por el Arcángel Gabriel (Lc.1,26), a Pedro por su hermano Andrés
(Jn.1,41), a Natanael por Felipe (Jn.1,46), a San Agustín por el clamor de su pueblo.
-¿Ves que no eres el primero?
28. La consagración a Dios implica la aceptación de cualquier sacrificio, por amor al que le entregaste la vida
entera. "Las zorras tienen guaridas, y las aves del cielo nidos; pero el Hijo del hombre no tiene donde
reclinar la cabeza" (Lc.9,58).
29. Anda con sencillez por el camino de tu vocación, preocupándote más por recorrer tu camino que de buscar
el más fácil.
30. No quieras hacer ni más ni menos de cuanto se te ha asignado en el camino donde Dios te ha puesto,
procurando cumplir tu propio deber con la mayor exactitud posible.
31. ¿Qué mayor privilegio y cuál más inmensa responsabilidad? Ser "alter Christus -otro Cristo-. Por eso, "el
que os escucha a vosotros, a Mí me escucha; y el que os rechaza, a Mí me rechaza" (Lc.10,16).
32. ¿Quién te dijo que la "entrega" es fácil? La decisión implica renuncia a otras cosas, y toda renuncia lleva
algo de muerte para ganar la Vida. "Si alguno quiere venir en pos de Mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz
y sígame (Mt.16,24).
33. Dios, como un rey, beneficia y honra a los que elige como capitanes -los sacerdotes- y se compromete
mucho llamándolos. Ruega que nunca lo defrauden.
34. Cuando Dios llama, te está mostrando cual es tu fin. Negarte a seguirlo te condenará a ser un fracasado.
35. ¡Desengáñate! Nadie ha habido en el mundo que haya resistido la Voluntad de Dios y haya tenido paz.
36. Tus excusas son excelentes, pero no por eso dejan de ser lo que son: excusas.
37. ¡Síguelo!, te digo, sin otra parada que el fin de tu vida; mientras ella dure, corre detrás del Salvador, corre
con entusiasmo.
38. No se da El, si tú no te entregas a El.
39. Dejar riquezas y afectos, muchos paganos lo hicieron. Pero ofrecerse a sí mismo y entregarse todo a Dios,
eso es propio de los seguidores de Cristo.
40. Signo de vocación sacerdotal, más que un sentimiento del corazón o una atracción del gusto, es querer
consagrarse absolutamente al servicio de Dios y a la salvación de las almas.
41. Si Cristo ha pasado a tu lado y te ha convocado,bo cabe otra respuesta que la de Mateo que, sin palabras ni
preguntas, Mejándolo todo, se levantó y lo siguió" (Lc.5,28).
42. "Yo quisiera esto o aquello", "yo estaría mejor allá".
Es tentación ... El Señor sabe lo que hace, hagamos lo que El quiere, quedémonos donde El nos puso.
43. Una mañana -¡inolvidable día!- escuché la Palabra que ilumina: "¿de qué le sirve al hombre haber ganado el
mundo entero, si él mismo se pierde o se arruina?" (Lc.9,25); y decidí soltar el vuelo, en vez de quedar
atado a los pobres afectos de esta tierra.

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