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Arqueología Histórica: visión de cambio en América Latina

Arqueología Histórica: concepto y alcances

Tomando como base la discusión de Senatore y Zarankin (2006), podríamos decir que la
arqueología histórica ha sido entendida desde dos diferentes perspectivas, una basada en
el estudio de individuos y sociedades que utilizaran la escritura y el segundo tomando el
concepto de modernidad, es decir el estudio de la sociedad moderna, ambas según ellos
señalan, se han utilizado de forma conjunta y no son mutuamente excluyentes.
Reconocen que la disciplina ha sido dominada desde un principio por investigadores
anglosajones y que se ha vinculado al estudio de la sociedad blanca, principalmente en
Estado Unidos. Comentan además las múltiples definiciones que se le dieron en un
principio y aceptan el hecho de que la mayoría de los investigadores la entiende como la
arqueología de la dispersión de las sociedades europeas por el munso hasta la actualidad
(Senatore y Zarankin, 2006). Es importante, sin embargo, rescatar unas cuantas ideas
(de las multiples que se encuentran en el texto) que surgen de sus comentarios; en
primer lugar vale la pena hacer notar el problema de quien debe de proponer el concepto
para definir lo que es la arqueología histórica y su aplicabilidad en los diferentes
contextos. Los autores exponen que es muy posible que el hecho de que un anglosajón
que realiza estudios en su propio país, limite la capacidad de aprehensión necesaria para
elaborar un concepto apropiado con el fin de definir la rama de estudio y que esto
provocaría un sesgo a la hora de aplicarlo a las diferentes realidades, puesto que está
pensado para una en particular y muy diferente de la latinoamericana. Ahora si
analizamos un poco este argumento, nos damos cuenta de que nos remite sin duda a
pensar, en aquellos arqueólogos pioneros de la disciplina, los cuales llegaban a estudiar
civilizaciones exóticas (y todavía lo hacen los arqueólogos europeos al realizar estudios
en América), estos proponían teorías acerca del desarrollo de la cultura y otras. Sin
duda, este es un factor que puede llegar a distorsionar las apreciaciones que hace un
arqueólogo, puesto que los conceptos están pensados para realidad muy diferentes a las
nuestras, están hechas desde las sociedades que tienen un tradición de dominadores.

Los autores plantean un segundo problema en torno a la arqueología histórica, en lo que


respecta al uso de las fuentes documentales y su relación con la arqueología. Algunos
proponen que los materiales arqueológicos y los textos son muy diferentes y que un
arqueólogo no puede pretender utilizar ambos desde una misma perspectiva, sin
embargo y como plantean los autores, los arqueólogos entienden los restos materiales
como texto que les permite extraer la realidad a través de las diferentes técnicas; los
textos, los datos, las palabras nos permiten un acercamiento diferente, pero
complementario para tener una visión más clara de la vida de una sociedad. Al igual que
la historia se nutre de la arqueología para tener una mejor visión del panorama de unja
época y un lugar, la arqueología puede hacer los mismo, al contrastar y completar sus
datos con lo documentado. Asimismo, la arqueología histórica tiene la capacidad no
solamente de mostrar lo comprobado y estudiando a través de los diferentes textos, sino
de mostrar las diferencias, tiene la capacidad de mostrar las heterogeneidades que
existían en el pasado y que se invisibilizan a través del discurso de la dominación, los
cuales representan la historia desde su perspectiva.

La arqueología histórica permite comprender los procesos de cambio social generados


después de la invasión europea a nuestro territorio y el como se han gestado las
identidades existentes en nuestros días, entendiendo nuestro presente como parte de un
proceso que se ha gestado desde mucho tiempo atrás.

Arqueología Histórica como forma de comprensión del colonialismo y el


capitalismo

Según Fournier (1998), la arqueología histórica estudia “los procesos sociales


asociados con el surgimiento y consolidación del capitalismo y el desarrollo de
formaciones económica-sociales bajo este marco, con base en la evidencia material”
Esto supone que la arqueología histórica se dedica al estudio del “colonialismo,
eurocentrismo, capitalismo y modernidad” (Funari, 1996), todo esto desde las
repercusiones para América Latina. Como es claro todos estos procesos han marcado el
desarrollo de la historia nuestros países.

Podemos decir que el colonialismo fue la primera forma de capitalismo que se aplicó
para Latinoamérica, este concepto como señala Furari (1998), no debe entenderse como
la relación mercantil sino como la relación de poder que el mismo implica. El
colonialismo como una forma de producción a través de la explotación esclavista de los
individuos, con los mismos mecanismos empleados en la actualidad para mantener en
regla a las personas. El capitalismo, según Quesada 2003, entre el s. XVI y XIX, se
apoyó considerablemente del colonialismo, el cual define como “la rapiña y
destrucción social y física de pueblos enteros”. Para el caso de Latinoamérica, la
destrucción fue paulatina, puesto que en nuestro caso específico el colonialismo que se
inició culminó en capitalismo (lo cual según Quesada no siempre sucede), puesto que
los conquistadores utilizaron a los indígenas para explotar su fuerza de trabajo,
iniciando así la relación de mercantilización de la misma. Por supuesto para ese
momento los indígenas eran más esclavos que trabajadores. Estas relaciones de poder
iniciadas desde la conquista han perdurado hasta nuestro tiempo, de diferentes maneras,
con diferentes centros de poder. La historia desde este momento se comienza a escribir
desde la élite, reflejando solamente lo que se quiere que se vea, invisibilizando a los
pobres, a los esclavos, a los diferentes. Es por todo esto que la arqueología histórica
pasa a jugar un papel tan importante para nuestro continente, por que visibiliza todas
estas diferencias, le da voz a todos los que tienen voz; la arqueología tiene la capacidad
de mostrar todas esas heterogeneidades y logra aplicarlas a toda la historia que
pensamos que conocemos.

La Arqueología Industrial

Podemos decir que por las características temporales de la arqueología industrial, forma
parte del estudio, más amplio, que comprende la arqueología histórica. En primer lugar
por que la creación de industrias (como forma de explotación de un producto) para el
área de Latinoamérica comenzó después de la llegada de los europeos, con el inicio de
la expansión capitalista por el continente. A partir del deseo de producir más con costos
más bajos se comienzan construir las diferentes fábricas que todavía encontramos. Para
Luis Molina (2007), utilizar el término de “arqueología industrial” no es el más
adecuado, principalmente por que se encuentran industrias tan antiguas como las
coloniales y el por su parte asocia más el término a los sitios asociados con la
revolución industrial. La arqueología industrial consiste de esta forma en el estudios de
las sociedades, conformadas a partir de la colonia, en las cuales se evidencia las
influencias capitalistas (desde la base del colonialismo) en sus medios de producción y
obtención de ganancias.

Uno de los ejemplos más interesantes con respecto a este tema tiene que ver con la
explotación de añil en Centroamérica, pues marca el cambio en la producción del
mismo, en el consumo y a la vez impacta positiva y negativamente en las personas. El
añil sin duda fue todo un descubrimiento para los europeos, los cuales encontraron
múltiples ventajas en el producto, sin embargo repercutió negativamente en las
poblaciones nativas, puesto que significó esforzarse más en la producción de acuerdo a
la demanda, repercusión en daños a la salud y en reducción de la población indígena,
impactó inclusive en la forma de vestir de los mismos indígenas (Batres, de Batres,
Garnica, Martinez, Valle, sin fecha). La arqueología industrial tiene la posibilidad de
descubrir todas estos detalles que los textos históricos no nos permiten observar con
claridad, comparte las características que definen a la arqueología histórica pero
centrándose en un solo punto.

Para el área de Latinoamérica, la arqueología industrial posee un gran potencial puesto


que existen multitud de fábricas abandonadas y en deterioro, como vimos en el ejemplo
anterior existen restos tan antiguos como los coloniales y otros mucho más recientes. Es
cuestión de focalizarse en el estudio de los mismos.

Intereses en la Arqueología Histórica

La arqueología histórica es una subrama de la arqueología que permite trabajar y


alcanzar la comprensión de múltiples cosas. Como estudiante de antropología y
arqueología considero que todos los temas son de suma importancia y aportan multitud
de verdades y conocimientos a nuestra historia

La arqueología histórica nos permite terminar de completar el panorama histórico de


nuestros países, nos permite comprender los diferentes procesos que ocurrieron en la
zona y las consecuencias de ellos para la actualidad. Como futura arqueóloga no tendría
problemas en trabajar ninguno de los temas relacionados con la arqueología histórica
siempre y cuando pueda ligarlos, con los temas de identidad, poder y formas de
pensamiento actuales. Es por esto que uno de los temas que me parecen más
interesantes es el que tiene que ver con la colonia, puesto que este proceso marcó las
pautas para todos los que llegaron a continuación, es la base de estos tres temas que
tanto me interesan, sin duda estos tres conceptos enmarcan la mayoría de los problemas
que vivimos en la actualidad

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