Está en la página 1de 2

La escuela “domesticadora” Equipo 3.

Contener e Instruir en el portarse bien: la moral de la foca. También el efecto puede ser
contención mediante un premio y su ausencia o privación, un castigo. Su provisión discrecional
opera en ausencia o privatización, un castigo. Su provisión discrecional opera como instrumento
de control. Te quiero si haces lo que te dispongo la foca recibe el pez en la boca. Si el niño
responde a las directivas o se comporta como debe de ser recibe atención y reconocimiento. Jules
Henry 1967 plantea de la siguiente manera a consecuencia de la idea de que los maestros de la
escuela elemental deben de ser padres afectuosos la ternura sea convertido en una defensa
contra los impulsos de los niños. La maestra demuestra afecto y hace que sus niños teman
perderlo si se portan mal. Afecto, miedo a perderlo y culpa se convierte en un muro de contención
de unos contra otros.

La escuela “hogar”
Contener e incluir “Por qué me duele si me quedo, pero me muero si me voy.”
Las funciones de transmisión y recreación cultural, inclusión socialización homogenización y
promoción social de la escuela que aun hoy y a pesar de todo siguen vigentes como demandas
sociales, adquieren otro sentido tanto para los docentes como para los alumnos y sus familias. La
inclusión puede manifestarse como un pertenecer y participar o como un simple estar ahí.
Puiggrós aporta el testimonio de una maestra que dice que los desertores están dentro de la
escuela; los desertores van a comer, los desertores van a buscar ropa, los desertores van por que
no tienen otro lugar, por lo que hay fuera de la escuela es un caos.

La escuela “escuela”
Contener y comprender: la construcción de las redes sociales.
Todos compartimos preocupaciones por que vivimos en el mismo mundo y tratamos de
contenernos mutuamente, de entender que no somos enemigos, alumnos y profesores. Estamos
en la misma, tratando de salir adelante. La escuela contiene porque es comunidad en la medida en
que sostiene los objetivos que la legitiman. También cuando genera reciprocidad, estructura
social, compromiso mutuo, porque se piensa como una comunidad en la diversidad. Todos los
miembros están involucrados solidariamente en generar un continente donde cada uno es parte
esencial del drama. No hay sujeto a asistir, que debe ser vigilado, protegido, custodiado, amado o
guardado sino gente que trata de convivir y de enredarse vinculare en la red con aquellos con
quienes convive. Hay redes que más que más que sostener, trasmiten hacen circular energía y dan
textura a la vida social, la inclusión y el ejercicio de la ciudadanía.

La escuela comunidad.
La “escuela receptáculo” Enseñanza indudablemente la enseñanza a aprender del control y de la
asistencia de otros enseña vulnerabilidad y necesidad, enseña a desear un contenedor, un otro
que me separe del mundo que me diga que hacer, donde esta o cómo comportarme. Nada más
distante en la escuela que se concibe a sí misma como comunidad, red de relaciones, no ya
receptáculo, que piense a sus directivos y docentes como socios como carceleros, vigilantes,
padres amorosos, pastores o agentes del control del Estado. La mirada que cada escuela se dirige
así misma con el contexto de la comunidad en la cual esta inserta.
Incluir en serio.
Escudriñar el significado o más bien, los usos de la manida expresión que sostiene que “La escuela
debe contener a los niños jóvenes” permite advertir la urgente necesidad de ampliar las
concepciones modalidades, recursos y estrategias de inclusión de la misma. También permite
desocultar las prácticas discriminatorias etnocentricas, o que impiden francamente la subjetividad
que alientan las carencias deterministas acerca de las trayectorias posibles de los sujetos en
general y en particular las de aquellos pertenecientes a ciertos sectores o grupos sociales.

También podría gustarte