Está en la página 1de 6

UNIVERSIDAD DEL NORTE “SANTO TOMÁS DE AQUINO” - CEOP

Materia “Evangelios sinópticos y Hechos de los Apóstoles” - Lic. en Teología


Profesor: Lic. Pbro. Luis H. Rivas - Alumno: Martín Olszanowski - diciembre 2014

Pecado contra el Espíritu Santo


Introducción
Mediante el presente trabajo se desea estudiar el pecado contra el Espíritu Santo presente en los tres evangelios
sinópticos en palabras de Jesucristo (Mc 3,28-29; Mt 12,31-32; Lc 12,10). Esta frase es contundente en los tres casos
ya que refiere a que aquel que blasfeme contra el Espíritu Santo no tiene perdón; por eso mismo se trata entonces, a
primera vista, de la falta más grave que se pueda cometer.

Sin embargo, los tres evangelistas consideran esta frase en contextos diversos dentro de su narrativa propia y, por lo
tanto, es también objeto de este trabajo intentar apreciar los matices particulares que presenta en cada caso
mediante una lectura sinóptica de los textos sagrados a fin de entrever su sentido.

Lectura sinóptica del logion del pecado contra el Espíritu Santo


Según el orden y textos en castellano de BENOIT-BOISMARD-MALILLOS, Sinopsis de los cuatro Evangelios, Tomo I, Ed.
DDB, 2º Edición, Bilbao - España, 1983.
Textos en griego tomados de NESTLE-ALAND, Novum Testamentum graece, ed. 28.

Mt 12,31-32 Mc 3,28-30 Lc 12,10


31 «Por eso os digo: 28 «En verdad os digo que
Todo todas las cosas
pecado y blasfemia
se perdonará se perdonará(n)
a los hombres. a los hijos de los hombres,
los pecados y las blasfemias,
cuanto blasfemaren;
mas la blasfemia contra el Espíritu
no se perdonará.
32 Y (a) aquel que dijere una palabra 10 «Y (a) todo aquel que diga una palabra
contra el Hijo del hombre, contra el Hijo del hombre,
se le perdonará; se le perdonará;
mas (a) aquel que (la) dijere 29 mas aquel que blasfemare mas al que haya blasfemado
contra el Espíritu Santo, contra el Espíritu Santo, contra el Santo Espíritu,
no se le perdonará no tiene perdón no se (le) perdonará».
ni en este mundo
ni en el venidero». eternamente,
sino que es reo de pecado eterno».
30 Porque decían:
«Tiene un espíritu impuro».

Mt 12,31-32 Mc 3,28-30 Lc 12,10


31 Διὰ τοῦτο λέγω ὑμῖν, 28 Ἀμὴν λέγω ὑμῖν ὅτι
πᾶςα πάντα
ἁμαρτία καὶ βλαςφημία
ἀφεθήςεται ἀφεθήςεται
τοῖσ ἀνθρώποισ, τοῖσ υἱοῖσ τῶν ἀνθρώπων
τὰ ἁμαρτήματα καὶ αἱ βλαςφημίαι
ὅςα ἐὰν βλαςφημήςωςιν·
ἡ δὲ τοῦ πνεύματοσ βλαςφημία
οὐκ ἀφεθήςεται.
32 καὶ ὃσ ἐὰν εἴπῃ λόγον 10 Καὶ πᾶσ ὃσ ἐρεῖ λόγον
κατὰ τοῦ υἱοῦ τοῦ ἀνθρώπου, εἰσ τὸν υἱὸν τοῦ ἀνθρώπου,
ἀφεθήςεται αὐτῷ· ἀφεθήςεται αὐτῷ·
ὃσ δ’ ἂν εἴπῃ 29 ὃσ δ’ ἂν βλαςφημήςῃ τῷ δὲ (βλαςφημήςαντι ↓)
κατὰ τοῦ πνεύματοσ τοῦ ἁγίου, εἰσ τὸ πνεῦμα τὸ ἅγιον, εἰσ τὸ ἅγιον πνεῦμα βλαςφημήςαντι
οὐκ ἀφεθήςεται αὐτῷ οὐκ ἔχει ἄφεςιν οὐκ ἀφεθήςεται
οὔτε ἐν τούτῳ τῷ αἰῶνι
οὔτε ἐν τῷ μέλλοντι. εἰσ τὸν αἰῶνα,
ἀλλ’ ἔνοχόσ ἐςτιν αἰωνίου ἁμαρτήματοσ.
30ὅτι ἔλεγον· πνεῦμα ἀκάθαρτον ἔχει.

1
Crítica literaria y de los géneros
Esta frase o logion no puede considerarse aisladamente para su estudio, sino que han de tenerse en cuenta las
unidades narrativas que la contienen en cada relato evangélico. En los tres evangelios sinópticos, el marco en que se
cita este logion es dentro de un discurso de Jesús ante una gran audiencia. No obstante, los casos son distintos, por lo
que es necesario explicitar entonces la delimitación de las perícopas atendidas para este estudio.

 Mc 3,20-35: En esta fase del evangelio la identidad de mesiánica de Jesús todavía debe permanecer oculta para las
mayorías (cf. 1,44; 3,12). Después de la institución de los Doce, el v.20 comienza una nueva perícopa con “De vuelta
1
a casa , se aglomeró otra vez la muchedumbre, de modo que no podían comer”; y una discusión con “los escribas
que habían bajado de Jerusalén” es la circunstancia en que se nombra el logion acerca del pecado contra el Espíritu
Santo, vv.28-30; concluye con una reflexión -ligada a lo anterior- acerca de la verdadera familia de Cristo. Queda
evidente el cambio de temática y estilo del discurso por las primeras palabras de 4,1: “Una vez más se puso a
enseñar a orillas del mar” y la enseñanza ahora en una seguidilla de parábolas, comenzando por la del sembrador y
su explicación.

 Mt 12: Este capítulo del evangelio de Mateo, en el contexto de incomprensión del Reino, es en el cual se pronuncia
el logion. Se inicia “Por aquel entonces” (v.1) con dos controversias acerca del sábado, que continúan en otro sitio a
partir del v.15 ante “una gran muchedumbre”, mientras que el contexto restringido del logion (vv.31-32) comienza a
partir del v.22 y, como en el caso de Mc, concluye con una reflexión acerca de la verdadera familia de Cristo (vv.46-
50) y posteriormente todo el capítulo 13, sobre las Parábolas del Reino (comenzando por la del sembrador y su
explicación), tienen consecución precisamente “Aquel día” (13,1).

 Lc 12,1-12: El contexto lucano es el del cap. 12, durante el camino de Jesús a Jerusalén. Se trata aquí de un discurso
ante “miles y miles de personas” (v.1) posteriormente a concurrir a la mesa de un fariseo (cf. 11,37). Si bien
continúa la escena, se considera hasta la perícopa hasta el v.12 debido al cambio de temática introducido por “Uno
de los presentes” (v.13).

Se observa entonces que, al estudiar los entornos del logion, se tratan de unidades literarias de diferente tenor y
longitud, con sucesos comunes pero con evidentes diferencias. Por lo dicho, se puede ver que el texto de Mt, en este
caso, es bastante fiel al esquema narrativo propuesto por Mc; por su parte Lc ya sitúa esta situación en el contexto de
la subida a Jerusalén.

Con respecto a los géneros utilizados por los evangelistas para este logion puede decirse que el marco común de los
tres relatos pertenece al género deliberativo (que se ocupa especialmente de persuadir temor o esperanza acerca de
2
una actitud en vistas de una consecución en el futuro).

Logion en Mc
En Mc 3,22 se enuncian conjuntamente las dos acusaciones proferidas por los escribas contra Jesús, que aunque “están
3
relacionadas y reciben una respuesta conjunta en los vv.24-30, no tratan precisamente de lo mismo.” Estas
acusaciones tienen cabida ya en esta etapa del desarrollo de la narración a partir de que desde 3,6 se confabularon
contra él para ver cómo eliminarlo. Ellos decían:

- “Está poseído por Beelzebul”: Esta forma se basa en 2 R 1,2 donde aparece con el significado de “el señor de las
4 5
moscas.” Es una deformación del hebreo «Baal Zebul» -Baal el Príncipe o Señor de la Morada-, divinidad cananea.”
Estar poseído por demonios implicaba, entre otras cosas, ser reo de la mentira (cf. Jn 8,44).

- “por el Príncipe de los demonios expulsa los demonios”


(expulsiones que en Mc hacen referencia a los exorcismos previamente narrados en 1,23-27.32-33.39)

1
“Casa” se refiere a Nazareth, donde aún vivían los parientes de Jesús.
2
cf. SKA-ALETTI-GILBERT-DE VULPILLIÈRES, Vocabulario razonado de la exégesis bíblica, Ed. Verbo Divino, Navarra, 2007, p.94-95
3
BROWN-FITZMYER-MURPHY (eds.), Nuevo Comentario bíblico San Jerónimo, Navarra, Ed. Verbo Divino, 2004, p.27-28
4
Ibíd.
5
LÉONARD, Philippe, Evangelio de Jesucristo según san Marcos, Ed. Verbo Divino, Navarra, 2010, Cuadernos Bíblicos, nº133, p.22-23
2
Lo acusan ciertamente de acciones gravísimas y Jesús les responde inmediatamente. La respuesta se realiza en primera
instancia por medio de parábolas, que forman parte de las etapas de “invención” comienzo de la “argumentación” en la
6
“disposición” del discurso . De esta manera, ya desde aquí en los textos se “prepara la enseñanza mediante parábolas
7
que realizará en Mc 4,1-34” Lo mismo se puede decir respecto de Mt (acusación en 12,24 y parábolas en Mt 13).
8
Propiamente el logion se trata, especialmente en Mc (y en Mt), de una frase conclusiva, a modo de “exitus” de la
argumentación. Ciertamente presenta un tono de amenaza (contrario al macarismo) aunque con el matiz de una
9
especial advertencia en orden a la salvación.

El logion se inicia en Mc 12,28 con la significativa palabra Ἀμὴν, que “se utiliza con λέγω para hacer una declaración
10
solemne. En el NT es usado así solamente por Jesucristo” . Esta declaración se refiere a una afirmación del perdón
universal: “todas las cosas se perdonará(n) a los hijos de los hombres, los pecados y las blasfemias”. Por ‘pecados’ se
11
entenderían las faltas contra los demás hombres, mientras que las ‘blasfemias’ serían las faltas contra Dios” . En este
punto cabe mencionar que la Ley judía prohibía explícitamente la blasfemia (cf. Ex 22,27a; Nm 15,30-31) y condenaba al
blasfemo a lapidación (Lv 24,10-16). En efecto, buscan los escribas algún motivo que condujera a Jesús a la muerte,
alguna falta gravísima, especialmente alguna falta contra Dios. Ya en 2,7 durante la primera controversia relatada por
Mc, lo acusaban a Jesús de blasfemia por perdonar pecados, obra que solo Dios puede realizar. Finalmente, durante su
proceso en Jerusalén, será la blasfemia el principal motivo de acusación dirigida por el sumo sacerdote contra él
(14,64). Jesús aquí, sin embargo, se muestra ante ellos con poder para declarar el perdón de los pecados y, más aún, el
perdón de cualquier blasfemia.

“Pero en el v.29 se introduce una excepción: la blasfemia contra el Espíritu Santo no tendrá perdón jamás. Para este
evangelista la blasfemia contra el Espíritu Santo consiste en atribuir al espíritu impuro la acción salvadora que realiza
12
Jesús por estar dotado del poder divino.”

Mc hará hincapié respecto de la primera acusación (Jesús poseído por Beelzebul) aclarando en el v.30 el motivo del
pronunciamiento del logion, a diferencia de Mt y Lc que no realizan ninguna aclaración semejante. El motivo de la
omisión en Mt puede provenir de que se unen en su evangelio los temas de las dos acusaciones de Mc en una sola:
“Éste no expulsa los demonios más que por Beelzebul, Príncipe de los demonios” (Mt 12,24).

Verdadera familia en Mc
Como se comentó en el apartado de crítica literaria, la controversia de Jesús con los escribas (3,22-30) donde se
nombra el logion se intercala en la reacción de la familia de Jesús con respecto a él (3,20-21.31-35). Esta construcción
13
por encajamiento “sugiere al lector que interprete un relato a la luz del otro.” Así, Mc “prepara en su lector la idea de
una ruptura, o al menos de una seria distancia, entre Jesús y su familia carnal. Ésta se queda «fuera» (v.31) del
14
«círculo» (v.34) de su nueva familia, constituida por aquellos que hacen la voluntad de Dios” La vinculación que el
tema de la familia de Jesús tiene con el logion se encuentra en la relación a la primera acusación ya que “sus parientes,
al enterarse, fueron a hacerse cargo de él, pues pensaban que estaba fuera de sí” (v.21), y como se dijo, es respecto de
esta primera acusación que se hace la aclaración del v.30.

Logion en Mt y Lc
Este logion se nos ha transmitido tanto en la forma de Mc como en la de “Q”. Como gran diferencia, se aprecia que la
versión de Mc no incluye la aseveración acerca de “aquel que dijere una palabra contra el Hijo del hombre, se le
perdonará” (presentes Mt 12,32a y Lc 12,10a). Así, “en Mt y Lc vemos una oposición entre el pecado contra el Hijo del
hombre, que se perdona, y el pecado contra el Espíritu Santo, que es imperdonable. Probablemente nos encontramos
aquí en un estadio ulterior de la tradición: el de los primeros predicadores cristianos que comprendían la ceguera de
algunos durante el ministerio de Jesús antes de Pascua (Jesús en su humillación como Hijo del hombre), pero

6
cf. SKA-ALETTI-GILBERT-DE VULPILLIÈRES, Vocabulario razonado de la exégesis bíblica, p.98-100
7
BROWN-FITZMYER-MURPHY (eds.), Nuevo Comentario bíblico San Jerónimo, p.28
8
cf. SKA-ALETTI-GILBERT-DE VULPILLIÈRES, Vocabulario razonado de la exégesis bíblica, 3º parte - cap. II, p.101
9
KRÜGER-CROATTO-MÍGUEZ, Métodos exegéticos, ISEDET, Buenos Aires, 2006, p.155-156
10
ALFRED E. TUGGY, Léxico Griego-Español del Nuevo Testamento, Ed. Mundo Hispano, El Paso (EEUU), 1º Ed. 1996, p.57
11
RIVAS, Luis H., El Espíritu Santo en las Sagradas Escrituras, Buenos Aires, Ed. Paulinas, 3º ed, 2009, p.36-37
12
Ibid.
13
LÉONARD, Philippe, Evangelio de Jesucristo según san Marcos, Cuadernos Bíblicos, nº133, p.22
14
Ibíd.
3
consideraban imperdonable la negativa a convertirse a la palabra de los primeros predicadores cristianos después del
15
acontecimiento pascual.”

Es aquí oportuna la voz de san Juan Crisóstomo al comentar que “ciertamente dice [Jesús] que tiene excusa la blasfemia
contra Él, porque no lo veían sino como un hombre despreciable; pero que no tendrá perdón la dirigida contra Dios, y la
blasfemia contra el Espíritu Santo es contra Dios, porque el reino de Dios es obra del Espíritu Santo. Por esto, pues, dice
16
que es irremisible la blasfemia contra el Espíritu Santo.”

Otra formulación de esta misma máxima se encuentra en el Evangelio copto según Tomás, 44: «Al que blasfeme contra
el Padre se le perdonará, y al que blasfeme contra el Hijo también se le perdonará; pero al que blasfeme contra el
Espíritu Santo no se le perdonará ni en la tierra ni en el cielo». “Evidentemente, se trata de una formulación tardía, ya
17
que refleja los primeros pasos de una incipiente reflexión trinitaria”.

Particularidades de Mt
La argumentación del discurso que contiene el logion en Mt incluye decisivamente el tema central de su evangelio: el
Reino. Jesús contesta ante la acusación del v.24: “si yo expulso los demonios por el Espíritu de Dios, señal de que ha
llegado a vosotros el Reino de Dios” (v.28). Mt usa el verbo ἔφθασεν (ha llegado) que viene de φθάνω y “significa
«llegar antes», «preceder»; además aparece solamente aquí en todo el evangelio de Mt: implica que el Reino ha
llegado realmente, que se ha anticipado en el ministerio de Jesús. Aquí radica el fundamento de la llamada escatología
18
realizada, pero no excluye la llegada futura del reino en plenitud” (cf. Mt 6,10 en el Padrenuestro). Esta irrupción del
Reino en relación a los necios que niegan al Espíritu remite al capítulo 32 del profeta Isaías sobre el ejercicio de la
justicia del Rey futuro: “El necio profiere necedades y su mente planea insensateces, cometiendo impiedades y
profiriendo contra Yahvé desatinos” (32,6) mientras que el verdadero Reino no llegará “hasta que se derrame sobre
nosotros un espíritu que llegará de lo alto” (32,15). Es Jesús quien cumple, completa lo anunciado en el Antiguo
Testamento e interpreta verdaderamente la Ley en los tiempos que el Reino de Dios comienza, por eso excede a
cualquier maestro judío.

Mt, a diferencia de Mc y Lc, reproduce de dos formas el logion (vv. 31 y 32) según la siguiente estructura:

a) Todo pecado y blasfemia se perdonará a los hombres.


b) mas la blasfemia contra el Espíritu no se perdonará.

a’) Y (a) aquel que dijere una palabra contra el Hijo del hombre, se le perdonará;
b’) mas (a) aquel que (la) dijere contra el Espíritu Santo, no se le perdonará, ni en este mundo ni en el venidero.

Esto demuestra una profundización y ampliación de sentido en la dupla a’-b’ respecto de a-b. Como toda repetición, la
intención aquí es resaltar la importancia del contenido que se dice. La frase referente al perdón universal (v.31a) se
corresponde en la lectura sinóptica con lo citado en Mc 3,28, que no aparece (llamativamente) en el contexto del logion
de Lc.

Asimismo, se observa que Mt realiza una mejora en la redacción con respecto a Mc, especialmente en 12,31a al
reorganizar la afirmación sobre el perdón universal y allí mismo al utilizar solamente “se perdonará a los hombres” y en
vez de a los “hijos de los hombres” de Mc (título que Mt en este contexto reserva con mayúsculas para Jesucristo, v.32).
Así también en sus versículos finales del logion: “no se le perdonará, ni en este mundo ni en el venidero” mejora la
redacción agregando una hipérbole mesurada al “eternamente” de Mc y cambiando el tiempo verbal de presente al
futuro en voz media οὐκ ἀφεθήσεται (al igual que Lc, ya que dependen aquí de la misma fuente).

Tal como sucedía con los distintos grupos respecto a la verdadera familia de Jesús en Mc, en Mt “a través de todo este
conjunto se va precisando el drama; estos capítulos resultan conmovedores porque nos damos cuenta de que también
nos interpelan a nosotros, que somos también según los casos «fariseos» o «discípulos». En la vida histórica de Jesús,
tal como nos la presenta Mt, se adivina ya que las suertes están echadas, que cada uno ha optado, que está casi
19
consumada la división entre Israel «generación malvada» y el «verdadero Israel».”

15
JEREMIAS J., Teología del Nuevo Testamento (cit. en LAURET-REFOULÉ (dir.), Iniciación a la práctica de la Teología, Tomo II,
Madrid, Ed. CRISTIANDAD, 1984, p. 315)
16
san JUAN CRISÓSTOMO, Homilia in Mattaeum, hom. 42
17
FITZMYER, El Evangelio según san Lucas, (4 tomos); Madrid, Cristiandad 1986/2005, Tomo II, p.434
18
cf. BROWN-FITZMYER-MURPHY (eds.), Nuevo Comentario bíblico San Jerónimo, p.103
19
POITTEVIN-CHARPENTIER, El evangelio según san Mateo, Ed. Verbo Divino, Navarra, 8º ed 1987, Cuadernos Bíblicos, nº2, p.41
4
Particularidades de Lc
Por su parte, en Lc, las acusaciones contra Jesús que se formulaban los escribas y fariseos se remontan previamente a
5,21: “¿Quién es éste, que dice tales blasfemias? ¿Quién puede perdonar pecados sino solo Dios?". Esto llama la
atención debido a que las acusaciones en Mc y Mt estaban ubicadas en el entorno cercano al logion.

Con respecto a la redacción, el logion en Lc se presenta muy similar al texto de Mt aunque sin repeticiones aclaratorias
ni aumentativas de sentido. También “se percibe la reelaboración redaccional del propio Lc por ejemplo en la adición
de πᾶς ὃς (todo el que) por consideración hacia sus lectores de origen predominantemente pagano, mientras que Mt se
20
limita a escribir solamente ὃς”. Es así que resulta extraño que, en una narración evangélica como la de Lc, con su
especial énfasis en el perdón de los pecados y de carácter universalista, el evangelista haya querido incorporar a su
relato estas palabras de Jesús. Esta tendencial intencional de la redacción del evangelista con respecto a la misericordia
puede, sin embargo, tener cabida aquí en el contexto del logion al omitir la nota de ‘eternidad’ (en Mc) o del ‘mundo
venidero’ (en Mt) ante el pecado contra el Espíritu Santo.

La extrañeza comentada en el párrafo anterior se explica por el contexto que tiene el logion en este evangelio, y que le
da un sentido distintivo respecto de los otros dos. El hecho de depender de la misma fuente “Q”, no implica
necesariamente que en Mt y Lc el logion tenga el mismo sentido. Lc, a diferencia de Mc y Mt, “une en un mismo
contexto dos logia de Jesús referentes al Espíritu Santo: el logion sobre la blasfemia que nunca será perdonada (12,10)
y el logion sobre el Espíritu que les enseñará a los discípulos lo que deban decir cuando éstos sean llevados ante los
tribunales (12,11-12). El resultado es que se da una nueva interpretación al texto. En este caso la blasfemia contra el
Espíritu Santo consiste en contradecir a los discípulos cuando confiesan a Jesús delante de las autoridades. La asistencia
del Espíritu a los discípulos perseguidos queda ilustrada con los ejemplos de Pedro (Hech 4,8) y Esteban (Hech 7,55). En
este último caso, los miembros del Sanedrín son acusados por Esteban porque “ustedes siempre resisten al Espíritu
21
Santo” (v. 51).”

Es de remarcar que en la unión de estos dos logia en Lc aquí da cuenta de la importancia que este evangelista da al
Espíritu Santo como gran protagonista de su obra. Para mostrar mejor lo dicho anteriormente se expone en forma
esquemática la estructura del entorno inmediato del logion en Lc:

8. Os digo que todo el que se declara por mí ante los hombres , también el Hijo del hombre se declarará por él ante los ángeles de Dios
9. Pero si alguien me niega delante de los hombres , también será negado delante de los ángeles de Dios

10a. «Y (a) todo el que diga una palabra contra el Hijo del hombre , se le perdonará ;
= temática:
10b. mas al que haya blasfemado contra el Santo Espíritu , no se (le) perdonará ». confesar a Cristo

11. Cuando os lleven a las sinagogas, ante los magistrados y las autoridades, no es preocupéis de cómo o con qué os defenderéis, o qué diréis,
12. porque el Espíritu Santo os enseñará en aquel mismo momento lo que conviene decir.

Pueden notarse en los versículos esquematizados varias figuras de elocución que Lc desarrolla para enfatizar los
matices comentados:
- isocolon (frases que tienen más o menos el mismo número de palabras y/o la misma construcción sintáctica) de
carácter antitético en los vv. 8- 9 por un lado y los vv. 10a-10b seguidamente; que en estos casos tienen un objetivo
aclaratorio. También
- elipsis (omisión de palabras) en el v. 9.

De la misma estructura, “a primera vista parece que hay una contradicción entre el v.10a y el precedente v.9. Esa
impresión se debe indudablemente a que las máximas, en su versión original, eran de carácter aislado… sólo en la
redacción de Lc han adquirido una yuxtaposición secundaria dentro de un contexto único y definido. Mientras que los
vv. 8-9 se dirigen exclusivamente a los discípulos, es decir, a los seguidores de Jesús, la formulación del v.10, con su
22
referencia explícita a «todo el que» (πᾶς ὃς) parece incluir un auditorio más complejo (semejante al auditorio del
logion en Mc y Mt).

Se ve entonces que, según la época y destinatarios de este evangelio, “el conjunto del texto se sitúa en un contexto de
23
hostilidad presente y futura” . Por ello, en Lc, en el marco de “exhortación a los discípulos, para el desarrollo de su

20
FITZMYER, El Evangelio según san Lucas, Tomo II, p.434
21
RIVAS, Luis H., El Espíritu Santo en las Sagradas Escrituras, p.46
22
FITZMYER, El Evangelio según san Lucas, Tomo II, p.436
23
SAOÛT, Yves, Evangelio de Jesucristo según san Lucas, Ed. Verbo Divino, Navarra, 2007, Cuadernos Bíblicos, nº137, p. 58-59
5
actividad apostólica, el dicho adquiere connotaciones «exhortativas» sobre la intrepidez de su testimonio,
especialmente en caso de persecución. Por su parte, los vv. 11-12 son de carácter alentador más bien que de sentido
conminatorio; su contexto no es estrictamente de «parénesis», sino predominantemente de «paráclesis»
24
(«consolación»)”.

Con respecto a Lc 12,12 (inmediatamente posterior al logion) el verbo διδάσκειν (= «enseñar») aplicado al Espíritu
Santo, aparece así únicamente aquí en toda la obra de Lc. En consonancia a esta especial enseñanza, “ya en el Antiguo
Testamento se vislumbra esta misma idea en el episodio de los colaboradores de Moisés, partícipes del mismo Espíritu
que Dios había conferido a su representante (cf. Nm 11,17; 27,18; Dt 34,9)”. También en los profetas, “especialmente,
Is 63,10-11: «Pero ellos se rebelaron e irritaron su santo espíritu, y él se convirtió en su enemigo y guerreó contra ellos.
Se acordó de los tiempos antiguos, de Moisés y de su pueblo. ¿Dónde está el que sacó de la mar, dónde el que puso en
25
medio de ellos su santo espíritu?». En similar aspecto se expresa el libro de la Didajé 11,7: “Y a todo profeta que hable
en espíritu no (le) tentaréis ni (le) discerniréis; pues todo pecado se perdonará, mas este pecado no se perdonará”.

Como enseña san Pablo en 1 Co 12,3: “nadie movido por el Espíritu de Dios puede decir «¡Maldito sea Jesús!»; y nadie
puede decir «¡Jesús es Señor!», si no lo hace movido por el Espíritu Santo”; por eso “se puede entonces relacionar este
pecado contra el Espíritu con el ‘pecado que conduce a la muerte’ en 1 Jn 5,16, y que al parecer puede designar tanto
26
un error acerca de la persona de Jesús (cf. 1 Jn 4,3)”

Conclusiones
Habiendo meditado brevemente acerca de distintas aristas del asunto sobre el pecado contra el Espíritu Santo pueden
nombrarse a modo de sumario final aquellos sentidos percibidos analíticamente sobre el logion:

1. Pecado contra el Espíritu Santo aquí es atribuir su obra al demonio (especialmente en los contextos de Mc y Mt).

2. Mt y Lc reciben también contenido de este logion de la fuente “Q” agregando al texto de Mc que “aquel que dijere
una palabra contra el Hijo del hombre, se le perdonará”.

3. Pero el contexto del logion en Lc agrega la relación de la frase con el acto cristiano de confesar a Jesús públicamente
como el Mesías salvador, Hijo de Dios y nuestro Señor.

4. Este acto de confesión pública se presenta como la principal tarea de los primeros discípulos y apóstoles, tarea
continuada por la Iglesia nacida así como templo vivo del Espíritu Santo.

5. Finalmente se declara el contexto trinitario del logion, no como lo plantea el texto citado del evangelio copto según
Tomás sino en tanto que la misión del Espíritu Santo es considerada en razón del don del amor. Por su parte, el Hijo es
la Palabra del Padre, pero no una palabra cualquiera, sino la que espira amor. Por eso, san Agustín dice que “la palabra
27
que intentamos comprender es conocimiento con amor”. Así, pues, el Hijo no es enviado solo para formar el
entendimiento, sino para que, por la formación de dicho entendimiento, aquel se transforme en amor.

Negar el obrar del Espíritu de Dios sería blasfemar su nombre, actitud que en el orden espiritual equivale al
endurecimiento del corazón que impide al hombre necio reconocer al Dios que se revela en su Hijo amado y que habla
a través de los hombres que se le unen en el Espíritu.

24
FITZMYER, El Evangelio según san Lucas, Tomo II, p.435-436
25
Ibíd., p.440
26
LAURET-REFOULÉ (dir.), Iniciación a la práctica de la Teología, Tomo II, p. 315
27
san AGUSTÍN, De Trinitate, L. IX
6

También podría gustarte