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Privado I
Privado I
EFIP I
DERECHO
PRIVADO I
Así las cosas, se puede deducir que la palabra persona hace referencia a la
personalidad jurídica –la investidura jurídica de la que goza el sujeto–, a la aptitud,
la disposición potencial para tener derechos, para adquirirlos, para ser sujeto
activo o pasivo de las relaciones jurídicas. Hombre hace referencia al sustrato o
soporte biológico de las personas humanas, que, para estar protegido, necesita de
esa personalidad jurídica.
Por último, la expresión sujeto de derecho alude a las personas cuando están
interactuando en interferencia intersubjetiva, por ejemplo cuando le están dando
vida a un contrato.
Los derechos personalísimos son “los que recaen sobre ciertos aspectos o
manifestaciones de la personalidad del hombre para proteger su libre
desenvolvimiento” Ejemplo de ellos son: el derecho al honor, a la intimidad, a la
libertad, a la integridad física, etc.
CARACTERES:
A. Son absolutos porque se dan contra todos, erga omnes, ya que todos y
cada uno de los miembros que constituyen la comunidad jurídicamente
organizada están obligados a respetar la persona de los demás.
B. Extrapatrimoniales carecen de contenido patrimonial pero tienen
repercusión económica o patrimonial en caso de su violación.
C. Inalienables estos derechos están fuera del comercio, no pueden ser
objeto de cesión o transferencia.
D. Innatos porque surgen en el origen de la persona por su solo carácter de
su ser individual, existe una unión inseparable entre el sujeto y el objeto del
derecho
CONCEPTO
La persona, en tanto tal, posee ciertos atributos que son sus cualidades
esenciales. Éstas son inherentes y consideradas a priori de la persona, es decir
que comienzan con su existencia.
NATURALEZA
CARACTERES
NOMBRE
NOCIÓN
REGIMEN LEGAL
a) corresponde a los padres o a las personas a quienes ellos den su autorización para
tal fin; a falta o impedimento de uno de los padres, corresponde la elección o dar la
autorización al otro; en defecto de todos, debe hacerse por los guardadores, el
Ministerio Público o el funcionario del Registro del Estado Civil y Capacidad de las
Personas;
b) no pueden inscribirse más de tres prenombres, apellidos como prenombres,
primeros prenombres idénticos a primeros prenombres de hermanos vivos; tampoco
pueden inscribirse prenombres extravagantes;
El art. 64 del CCCN prevé que el hijo matrimonial lleva el primer apellido de
alguno de los cónyuges; en caso de no haber acuerdo, se determina por sorteo
realizado en el Registro del Estado Civil y Capacidad de las Personas. A pedido
de los padres, o del interesado con edad y madurez suficiente, se puede agregar
el apellido del otro. Asimismo, dispone que, en caso de que un mismo matrimonio
tuviera muchos hijos, todos deben llevar el mismo que se haya decidido para el
primero.
Ahora bien, en el caso del hijo extramatrimonial con un solo vínculo filial, éste
lleva el apellido de ese progenitor.
El cónyuge viudo puede seguir usando el apellido del otro cónyuge mientras no
contraiga nuevas nupcias, ni constituya unión convivencial (art. 67).
Los arts. 69 y 70 del Código Civil y Comercial receptan la posibilidad del cambio
del prenombre y del apellido sólo de mediar, a criterio del juez, justos motivos.
Al respecto el art. 69, formula una enunciación de justos motivos:
a) cuando el seudónimo hubiese adquirido notoriedad;
b) por “la raigambre cultural, étnica o religiosa”;
c) por “la afectación de la personalidad de la persona interesada, cualquiera sea
su causa, siempre que se encuentre acreditada”.
Así, para lograr el cambio del nombre y/o del prenombre, es precisa la
intervención del Poder Judicial y esa es la regla, con excepción de los dos
supuestos contemplados en el último párrafo del art. 69.
El cambio de nombre tramitará “por el proceso más abreviado que prevea la ley
local, con intervención del Ministerio Público”, debiendo “publicarse en el diario
oficial una vez por mes en el lapso de dos meses”, a fin de que presenten las
oposiciones y se soliciten informes respecto de “las medidas precautorias que
existieren con relación al interesado”. Una vez inscrita en el Registro de Estado
Civil y Capacidad de las Personas, será oponible a terceros.
ACCIONES DE PROTECCIÓN.
“Art. 71. Acciones de protección del nombre. Puede ejercer acciones en defensa
de su nombre:
a) aquel a quien le es desconocido el uso de su nombre, para que le sea
reconocido y se prohíba toda futura impugnación por quien lo niega; se debe
ordenar la publicación de la sentencia a costa del demandado;
b) aquel cuyo nombre es indebidamente usado por otro, para que cese en ese
uso;
c) aquel cuyo nombre es usado para la designación de cosas o personajes de
fantasía, si ello le causa perjuicio material o moral, para que cese el uso.
En todos los casos puede demandarse la reparación de los daños y el juez puede
disponer la publicación de la sentencia.
DOMICILIO
NOCIÓN
CLASES
Este domicilio general puede ser legal, es decir instituido por la ley o real, que es
la efectiva residencia de la persona en un cierto lugar con ánimo de permanecer
allí. El domicilio general sea legal o real, es necesario, ya que no puede faltar en
ninguna persona y es único ya que una persona no puede tener más de un
domicilio general.
El domicilio Legal
El art. 74 del CCCN define el domicilio legal como el lugar donde la ley presume,
sin admitir prueba en contra, que una persona reside de manera permanente para
el ejercicio de sus derechos y el cumplimiento de sus obligaciones.
Por último y en relación al domicilio especial, cabe poner de relieve que éste no
es un atributo de la persona, sólo lo es el general en todas sus clasificaciones.
Este domicilio produce sus efectos limitados a una o varias relaciones jurídicas
determinadas, es decir, tiene eficacia sólo para aquellas relaciones jurídicas para
las que ha sido instituido. Es elegido libremente por las partes y el domicilio
convenido tiene fuerza de ley para los contratantes, es decir que tiene efecto
vinculante, salvo que, por acuerdo común de partes, lo modifiquen.
CAPACIDAD
NOCIÓN
CLASES
CAPACIDAD DE DERECHO
“Toda persona humana goza de la aptitud para ser titular de derechos y deberes
jurídicos. La ley puede privar o limitar esta capacidad respecto de hechos, simples
actos, o actos jurídicos determinados.”
Así, la capacidad de derecho se define como la aptitud de que goza toda persona
humana para ser titular de derechos y deberes jurídicos.
CAPACIDAD DE EJERCICIO
“Toda persona humana puede ejercer por sí misma sus derechos, excepto las
limitaciones expresamente previstas en este Código y en una sentencia judicial”.
ESTADO:
Caracteres:
El estado participa de los siguientes caracteres:
a) las normas que regulan el estado de las personas son de orden
público; no pueden ser modificadas por la voluntad de los
interesados;
b) oponible erga omnes;
c) generalmente es recíproco o correlativo, porque a cada estado de
una persona le corresponde el de otro que resulta correlativo;
d) es inalienable, es decir intransmisible;
Ahora bien, esta solución no podría haber sido diferente a la adoptada, toda vez
que el art. 4.1 del Pacto de San José de Costa Rica, establece: “... Toda persona
tiene derecho a que se respete su vida. Este derecho estará protegido por la ley y,
en general, a partir del momento de la concepción…”.
Lo propio puede afirmarse sobre la Convención de los Derechos del Niño, que en
su art. 1°, establece que “niño” es todo ser humano menor de dieciocho años de
edad. Con respecto al comienzo de la vida, la Convención nada aclara, pero sí lo
hace la ley 23.849 –la de ratificación del Tratado–en su art. 2, el cual declara que,
con relación al artículo 1º de la Convención sobre los Derechos del Niño, la
República Argentina entiendo por niño a todo ser humano desde el momento de la
concepción y hasta los 18 años. Repárese que lo que goza de jerarquía
constitucional es el texto de la Convención junto a la ley de ratificación porque,
como bien lo señala el art. 75 inc. 22 de la carta magna, cada Tratado adquiere
jerarquía constitucional “en las condiciones de su vigencia”, incluyendo así a la
ratificación como una unidad que debe ser considerada de ese modo a la hora de
valorar las disposiciones con jerarquía constitucional.
niño y para atrás, a los fines de conocer cuál es la duración del embarazo.
De conformidad con el principio general que introdujo la ley 23.264 —que todas
las presunciones en materia filial son iuris tantum—, el CCyC mantiene el mismo
sistema, por lo cual, para toda afirmación relativa a hechos no precisos —como
son la concepción y el embarazo—, se establece un determinado lapso temporal,
que lo es siempre y cuando no se pruebe lo contrario.
Como se mencionó al comentar el art. 19 referido al comienzo de la existencia de
la persona humana, la interacción entre concepción y embarazo es de suma
importancia en el CCyC por su refuerzo de la trascendencia de la concepción
como sinónimo de anidación. Sucede que sin concepción-anidación, nunca podría
existir embarazo. En otras palabras, tratándose de técnicas de reproducción
humana asistida, si el embrión no es implantado en la persona jamás se podrá
anidar (concepción) y por lo tanto, no habría posibilidad de embarazo alguno. Solo
transfiriéndose el embrión en la persona se puede relacionar la noción de
concepción con la de embarazo tal como lo hace el articulado en análisis.
El CCyC no introduce modificaciones sustanciales sino que mejora la redacción. El
art. 77 CC, según la ley 23.264, no explicitaba que el plazo mínimo y máximo se
refería a la época de la concepción. En la nueva redacción, se aclara de manera
expresa que la época de la concepción es el lapso de tiempo que transcurre entre
el plazo mínimo y máximo del embarazo; es decir, entre los 300 días de máximo y
los 180 días de mínimo que sí establecía el CC y que mantiene la legislación civil y
comercial.
Por último, cabe destacar otra modificación de tipo metodológico. El CCyC primero
regula lo relativo al plazo de duración del embarazo y la época de la concepción y,
en el articulado que le sigue (art. 21), la incidencia o importancia del nacimiento
con vida. Por el contrario, en el CC era a la inversa. Se entiende que es más
adecuado o correcto la modalidad que observa la nueva legislación debido al
orden cronológico: primero se debe aludir a las cuestiones referidas a la
concepción y embarazo, y después al nacimiento, siendo esta la secuencia
temporal que acontece en la realidad.
4. AUSENCIA DE LA PERSONA.
DEFINICIÓN
El Código Civil y Comercial contempla en seis artículos (79 a 84) las normas
sustantivas y procedimentales correspondientes a la simple ausencia y al
procedimiento previsto a los fines de obtener tal declaración. El fin último de esta
regulación es la protección del patrimonio del ausente, pues lo que se pretende es
la designación de un curador especial a los bienes para que estos puedan ser
administrados en debida forma mientras dure el estado de ausencia.
PRESUPUESTOS JURIDICOS
“Si una persona ha desaparecido de su domicilio, sin tenerse noticias de ella, y sin
haber dejado apoderado, puede designarse un curador a sus bienes si el cuidado
de éstos lo exige. La misma regla se debe aplicar si existe apoderado, pero sus
poderes son insuficientes o no desempeña convenientemente el mandato.”.
REQUISITOS:
Como se advierte, la ley no exige que haya transcurrido plazo alguno para
peticionar ante el juez competente la declaración de ausencia simple, ni que la
desaparición se vincule con un hecho extremo del cual se presuma la muerte del
ausente; sólo se impone que existan bienes para cuidar, de manera tal que se
adopten aquellas medidas necesarias para proteger el patrimonio del ausente.
que declara el fallecimiento presunto son idénticos a los de la muerte, pero la ley
establece diferencias fundadas en la eventual reaparición del declarado muerto
presunto y en la necesidad de proteger sus intereses.
“La ausencia de una persona de su domicilio sin que se tenga noticia de ella por el
término de tres años, causa la presunción de su fallecimiento aunque haya dejado
apoderado.
El plazo debe contarse desde la fecha de la última noticia del ausente”.
Ahora bien, si, entregados los bienes, aparece el ausente o se tiene noticia cierta
de su existencia, queda sin efecto la declaración de fallecimiento, procediéndose a
la devolución de aquéllos a petición del interesado.
“…aptitud de que goza toda persona humana para ser titular de derechos y
deberes jurídicos. Esta aptitud se vincula con la personalidad humana, por ello
decimos que es un atributo y por lo tanto no puede concebirse una incapacidad de
derecho absoluta, porque sería contrario al orden natural. (Borda, 2008).
Esta capacidad está expresamente prevista en el art. 23 del código, que establece
“Capacidad de ejercicio. Toda persona humana puede ejercer por sí misma sus
derechos, excepto las limitaciones expresamente previstas en este Código y en
una sentencia judicial.”
INCAPACIDAD DE EJERCICIO
CONCEPTO. CARACTERES.
ENUMERACIÓN LEGAL.
DEFINICIÓN
Es decir que todas las personas, desde su nacimiento hasta que cumplen
dieciocho años, son “menores de edad”, especificando la denominación de
“adolescente” a la persona menor de edad que ha cumplido la edad de trece años.
a) TRATAMIENTOS NO INVASIVOS
Por último, el art. 26 establece que la persona mayor de dieciséis (16) años es
considerada como un adulto para las decisiones sobre el cuidado de su propio
cuerpo.
De esta manera, se reconoce una anticipación de la capacidad de los menores
para dar consentimiento o asentimiento para ciertos actos de intrusión en su
cuerpo.
Estas reglas generales que se agrupan en la norma rigen todo lo referido a las
restricciones al ejercicio de la capacidad jurídica de las personas, y son producto
especialmente de la aprobación de la Convención sobre los Derechos de las
Personas con Discapacidad (ley 26.378) y de la Ley Nacional de Salud Mental (ley
26.557).
La persona con capacidad restringida es, por regla, una persona capaz y sólo no
podrá ejercer por sí sola determinados actos que se especifiquen en la sentencia
(art. 24 inc. “c”).
El o los apoyos que se designen no tienen por misión sustituir la voluntad del
sujeto, sino todo lo contrario; promueven la libertad, la autonomía, “la
comunicación, la comprensión y la manifestación de la voluntad de la persona
para el ejercicio de sus derechos”.
Ahora bien, se considerará una persona incapaz de ejercicio absoluta cuando:
a) se encuentre imposibilitada de interaccionar con su entorno y expresar su
voluntad por cualquier modo, medio o formato adecuado y
El artículo 33 del Código Civil y Comercial establece quiénes son las personas
legitimadas y, en primer lugar, autoriza al propio interesado a iniciar la acción. De
ser éste quien lo solicite, deberá presentarse con abogado; de no hacerlo, se le
deberá nombrar un asesor que lo represente.
Asimismo, están legitimados los parientes dentro del cuarto grado, sea que se
trate de un parentesco por naturaleza, por métodos de reproducción humana
asistida o por adopción, en línea recta o colateral y, si fueran por afinidad, sólo
hasta el segundo grado.
Por otro lado, el art. 36 contiene una norma de competencia procesal y establece
que el juez competente para entender en la causa es el correspondiente al del
domicilio de la persona o el de su lugar de internación.
REGISTRACIÓN DE LA SENTENCIA
Una vez que las restricciones sean dejadas sin efecto, o bien modificadas por una
nueva sentencia dictada, se deberá ordenar la inmediata cancelación o inscripción
registral, respectivamente.
REVISIÓN
El plazo de los tres años es un plazo máximo; es posible instar su revisión con
anterioridad si las circunstancias del caso así lo aconsejan.
CESE DE LA INCAPACIDAD
4. INHABILITADOS.
De conformidad al art. 48 del Código Civil y Comercial, podrán ser inhabilitados los
pródigos, es decir aquellos a quienes, por la mala gestión de sus bienes, en el
sentido de dilapidar, malgastar, expongan el patrimonio familiar a que se vea
menoscabado.
El mencionado artículo define a la persona del pródigo como aquélla que padece
una alteración funcional permanente o prolongada, física o mental, que, en
relación a su edad y medio social, implica desventajas considerables para su
integración familiar, social, educacional o laboral.
Lo que la ley pretende es justamente proteger al grupo familiar –es decir a las
personas del cónyuge, conviviente, hijos menores de edad o con discapacidad–de
la pérdida del patrimonio, legitimando a promover la inhabilitación al cónyuge,
conviviente, ascendientes y descendientes.
EFECTOS DE LA DECLARACIÓN.
La figura del apoyo es necesaria a fin de evitar que el inhabilitado realice actos de
otorgamiento que puedan perjudicar la integridad del patrimonio y perjudicar así a
las personas del cónyuge, conviviente e hijos menores o con discapacidad.
NOCIÓN
“Son personas jurídicas todos los entes a los cuales el ordenamiento jurídico les
confiere aptitud para adquirir derechos y contraer obligaciones para el
cumplimiento de su objeto y los fines de su creación.”
Según Buteler Cáceres (2000), las personas de existencia ideal son abstracciones
que se originan en la realidad social y representan la posibilidad de los hombres
de unir sus esfuerzos en pos de un fin común; por ello, estos entes se encuentran
provistos de personalidad jurídica y están dotados de capacidad para adquirir
derechos y contraer obligaciones.
CLASIFICACIÓN
a) las sociedades;
b) las asociaciones civiles;
c) las simples asociaciones;
d) las fundaciones;
e) las iglesias, confesiones, comunidades o entidades religiosas;
f) las mutuales;
g) las cooperativas;
h) el consorcio de propiedad horizontal;
i) toda otra contemplada en disposiciones de este Código o en otras leyes y cuyo
carácter de tal se establece o resulta de su finalidad y normas de funcionamiento.
NOCIÓN.
Hemos señalado que la persona jurídica tiene personalidad jurídica y que, por
ende, posee atributos: el nombre para individualizarse, el domicilio para
determinar la ley aplicable y la jurisdicción donde puede demandar o ser
demandada, la capacidad siempre de derecho y limitada al objeto para el que se
constituyó y el patrimonio, a los fines del cumplimiento de sus fines.
El nombre o razón sociales un atributo de las personas jurídicas, toda vez que es
necesario a los fines de su individualización y designación que permita
distinguirlas.
De acuerdo a lo normado en el art. 151 del Código, el nombre debe reunir los
siguientes requisitos:
a) aditamento de la forma jurídica utilizada para que los terceros conozcan
la naturaleza y extensión de la responsabilidad, por ejemplo “SRL”, “SA”.
b) cumplir con los recaudos de veracidad, novedad y aptitud distintiva, ello
así a los fines de que se distingan entre las personas jurídicas.
c) no contener términos contrarios a la ley, el orden público o las buenas
costumbres.
d) no inducir a error sobre la clase u objeto de la persona jurídica.
e) la inclusión en el nombre de la persona jurídica del nombre de personas
humanas requiere la conformidad de éstas, que se presume si son sus
miembros.
Por otro lado, el precepto establece que la persona jurídica que posee muchos
establecimientos o sucursales tiene su domicilio especial en el lugar de dichos
establecimientos, pero sólo para la ejecución de las obligaciones allí contraídas.
Por último, prevé que, para el caso que se quiera cambiar el domicilio, debe
modificarse el estatuto, y si se quiere cambiar la sede, puede ser resuelto por el
órgano de administración.
PATRIMONIO
Es por ello que el artículo 154 del código de fondo estatuye: “la persona jurídica
debe tener un patrimonio”
CAPACIDAD DE DERECHO.
Esta capacidad, sin embargo, tiene sus limitaciones en razón del principio de
especialidad y de la naturaleza de las cosas.
Las personas jurídicas desarrollan su actividad por medio de personas físicas que
actúan en su nombre y por su cuenta, de modo tal que su gestión es atribuida a la
misma entidad.
Así, las personas jurídicas actúan a través de sus órganos, es decir aquellas
personas autorizadas a manifestar la voluntad del ente y a desarrollar la actividad
jurídica necesaria para la consecución de sus fines.
El artículo 159 establece una pauta general a la cual debe adecuarse la conducta
de los administradores sociales, disponiendo que los administradores deben obrar
con lealtad con la persona que les encarga la función de administrar sus intereses
y con diligencia, es decir con idoneidad, con aptitud profesional para el exitoso
desenvolvimiento de la clase de actividad que constituye el objeto social.
El deber de obrar con lealtad tiene por fundamento la obligación de fidelidad del
mandatario (art. 1324 CCCN), que se extiende a todos los casos de
representación de intereses ajenos, y el deber de buena fe (art. 9 CCCN).
El deber del administrador de actuar con diligencia debe examinarse según las
circunstancias de las personas, el tiempo y el lugar, debiendo tenerse en cuenta
los siguientes aspectos: 1) La dimensión de la sociedad. 2) El objeto social. 3) Las
funciones genéricas que le incumben y las específicas que le hubieran confiado. 4)
Las circunstancias en que debió actuar. 5) La aptitud que es común encontrar en
personas que administran negocios similares.
Responderán ilimitadamente con todo su patrimonio por los daños que produzcan
a la persona jurídica, pues quien causa un daño debe repararlo, y solidariamente
entre los administradores que faltaren a sus obligaciones de lealtad y diligencia en
los casos de administración plural.
En las relaciones que tienen por contenido los derechos personalísimos o los
derechos humanos, el objeto está dado por las diversas manifestaciones o
proyecciones que integran la personalidad de la persona humana, como su honor,
libertad, integridad física o espiritual; en las que tienen por contenido los derechos
Por otro lado, en las relaciones jurídicas que recaen sobre derechos personales o
de crédito, el objeto se proyecta sobre la conducta del deudor, denominada
prestación y por último, en los derechos intelectuales el objeto es la obra científica,
literaria o artística, la expresión de ideas, procedimientos, es decir, el producto del
intelecto humano.
En una palabra, objeto de las relaciones jurídicas puede ser: cosas, hechos u
objetos inmateriales. (Tagle, 2002).
LAS COSAS: se las define como los objetos materiales susceptibles de tener un
valor.
El artículo 16 del código único prevé que los derechos individuales pueden recaer
sobre bienes susceptibles de valor económico. Los bienes materiales se llaman
cosas y las disposiciones referentes a las cosas son aplicables a la energía y a las
fuerzas naturales susceptibles de ser puestas al servicio del hombre.
DISTINTAS CLASIFICACIONES.
Mientras que el contrato de mutuo, por ejemplo, sólo puede recaer sobre cosas
fungibles, pues el mutuario, al término del contrato, no estará obligado a devolver
lo mismo que recibió sino igual cantidad de cosas de la misma calidad y especie
(art. 1525).
CRITERIOS DE DISTINCIÓN.
INMUEBLES Y MUEBLES.
Art. 226: Inmuebles por accesión. Son inmuebles por accesión las cosas
muebles que se encuentran inmovilizadas por su adhesión física al suelo, con
carácter perdurable. En este caso, los muebles forman un todo con el inmueble y
no pueden ser objeto de un derecho separado sin la voluntad del propietario.
El precepto mencionado (art. 226) establece la regla general de que “los muebles
forman un todo con el inmueble y no pueden ser objeto de un derecho separado
sin la voluntad”, por lo que, celebrado un negocio jurídico sobre el inmueble, todo
lo que esté en él, adherido e inmovilizado con carácter perdurable, forma parte de
la contratación, salvo acuerdo en contrario.
Art. 227: “Cosas muebles. Son cosas muebles las que pueden desplazarse por sí
mismas o por una fuerza externa”
Este concepto engloba las cosas que pueden transportarse fácilmente de un lugar
a otro, movidas ya por una influencia extraña, como son los automóviles, o por sí
mismas, como son los animales que se denominan semovientes.
Cosas divisibles. Son cosas divisibles las que pueden ser divididas
en porciones reales sin ser destruidas, cada de las cuales forma un
todo homogéneo y análogo tanto a las otras partes como a la cosa
misma.
Las cosas no pueden ser divididas si su fraccionamiento convierte en
antieconómico su uso y aprovechamiento. En materia de inmuebles,
la reglamentación del fraccionamiento parcelario corresponde a las
autoridades locales.
Concepto:
La primera característica es poco importante puesto que casi no hay cosas que no
puedan dividirse materialmente, por algún tipo de proceso más o menos
complicado. En este sentido, sólo los átomos no serían divisibles, aunque esta
misma circunstancia puede hoy en día ponerse en duda ya que por lo menos en
teoría se pueden conformar partículas subatómicas a partir de la división de los
átomos.
En principio son divisibles todos los inmuebles, regla que admite excepciones.
El dinero es divisible y, en general, lo son los granos y los líquidos.
Las cosas que perderían su esencia de ser divididas, como un libro, son
indivisibles.
Es decir que aun cuando una cosa pueda ser de hecho dividida y, además, las
cosas obtenidas sean análogas entre sí y respecto del todo, tendrá el carácter
jurídico de indivisible si la división convierte en antieconómico su uso. Esta
circunstancia no es exclusiva de los inmuebles, pero se aprecia particularmente en
ellos: de acuerdo a las características productivas de la tierra, una superficie
menor a determinada área la convertiría en antieconómica porque el costo de
hacerla producir superaría al beneficio. No se puede hacer generalizaciones en
este punto, puesto que el carácter antieconómico de la explotación de una fracción
depende de la fertilidad del suelo: cuando éste es de excelente calidad, muy
pequeñas superficies pueden conformar una unidad económica, mientras que
cuando es infértil, la extensión de la unidad económica debe ser mucho mayor. Es
por ello que, con toda razón, se deriva a la reglamentación local el fraccionamiento
de la unidad económica inmobiliaria: depende de las características de cada suelo
y de cada clima determinar cuál es la cantidad de tierra mínima que puede
razonablemente ser explotada, lo que el código denomina "fraccionamiento
parcelario".
Para que una cosa sea divisible deben darse los siguientes presupuestos:
- Que la cosa pueda dividirse de hecho.
- Que las cosas obtenidas formen un todo homogéneo.
- Que sean análogas a las demás partes y a toda la cosa.
Las cosas no podrán ser divididas, aunque se den todos los requisitos
desarrollados anteriormente, si su división convierte en antieconómico su uso.
Esto puede ocurrir con una colección de monedas, por ejemplo, o con la división
de la tierra en parcelas que impidan su adecuado aprovechamiento (en tal caso,
ello dependerá de las características del suelo, pues puede influir, para determinar
si es divisible o no, cuán fértil sea la tierra o la extensión del terreno o el clima).
FRUTOS Y PRODUCTOS.
Frutos son los objetos que un bien produce, de modo renovable, sin
que se altere o disminuya su sustancia.
EL PATRIMONIO.
DEFINICIÓN.
4.2 CARACTERES.
Por otro lado, los patrimonios especiales son conjuntos de bienes que están
afectados a un fin determinado y sujetos a un especial régimen legal. En cuanto a
sus caracteres, podemos decir:
Los hechos jurídicos son todos los acontecimientos que, según el ordenamiento
jurídico, producen el nacimiento, modificación o extinción de relaciones o
situaciones jurídicas (art. 257 CCCN).
Cuando nos referimos a los hechos jurídicos como causa eficiente, debe
entenderse que el suceso o acontecimiento está previsto de antemano por la ley,
para que, según las circunstancias y siempre que se reúnan los requisitos que
impone una determinada norma, produzca efectos jurídicos.
Por ejemplo, el nacimiento con vida es causa eficiente porque, luego de que se
produce, el ser humano adquiere automáticamente, con carácter definitivo e
irrevocable, la personalidad jurídica.
Simple acto lícito como la acción voluntaria no prohibida por la ley, de la que
resulta alguna adquisición, modificación o extinción de relaciones o situaciones
jurídicas” Art. 258. Ej. Pared medianera, alambrado campo, escribir una canción.
Acto jurídico y refiere que “es el acto voluntario lícito que tiene por fin inmediato
la adquisición, modificación o extinción de relaciones o situaciones jurídicas.”
EL DISCERNIMIENTO.
CONCEPTO.
Esta aptitud depende del grado de madurez que se haya alcanzado y puede faltar
por la edad o por cuestiones de salud mental.
La falta de discernimiento determina la falta de aptitud del sujeto para hacer uso
de la autonomía privada y no se produce a raíz de vicio alguno sino por una
circunstancia inherente a la aptitud intelectual general del sujeto.
Respecto a la privación de razón, ésta puede ser de dos clases según la falta de
razón refleje alguna clase de patología más o menos permanente o bien un
oscurecimiento del intelecto temporal o accidental y sólo relacionado con el acto
en cuestión; circunstancias que incidirán en los extremos a acreditar en un
eventual juicio y, todo ello, debiendo tener en cuenta los alcances concretos de la
inhabilidad del sujeto en caso de que hubiera sido objeto de una declaración
(Rivera y Medina, 2014).
En el caso de actos ilícitos, la ley ha entendido que el ser humano capta antes la
noción de lo bueno y de lo malo que la apreciación de lo que para él puede ser
conveniente o inconveniente y, por ello, presume, sin admitir prueba en contrario,
que los menores mayores de diez años tienen discernimiento para ejecutar actos
ilícitos y por ende habrán de responder por sus consecuencias, es decir que
responderán civilmente con su propio patrimonio. Esto, sin perjuicio de la
responsabilidad de los padres y del derecho de repetición que, en razón de este
discernimiento, estos tienen contra sus hijos (art. 1754 CCCN).
LA INTENCIÓN.
CONCEPTO.
LA LIBERTAD.
CONCEPTO.
Este concepto comprende dos aspectos: la libertad física y la libertad moral o libre
albedrío.
ELEMENTO EXTERNO
EL ERROR. NOCIÓN.
El error de hecho, tal como ya referimos, es la falsa noción que recae sobre los
elementos o circunstancias fácticas vinculadas al negocio o a la relación jurídica
de que se trate. Éste puede recaer en el contenido o presupuesto del acto, así
como en la identidad de las personas, en la naturaleza o características de las
cosas o los hechos materiales constitutivos de la conducta.
Para que el error de hecho pueda ser invocado por quien lo ha sufrido, debe
tratarse de un error esencial, espontáneo y además reconocible.
CLASES DE ERROR.
EFECTOS.
Así, tenemos por un lado la gran distinción entre error de hecho y error de
derecho; tal como señalamos, el primero recae sobre los elementos o
circunstancias fácticas vinculadas al negocio o a la relación jurídica de que se
trate, sobre el dato de hecho, contenido o presupuesto del acto, sobre la identidad
de las personas; mientras que el error de derecho consiste en desconocer la
existencia o contenido de una norma jurídica o interpretar su significado de una
manera distinta a la real o hacer una aplicación inexacta.
Dentro del error de hecho caben dos categorías: error esencial y error
accidental.
El error esencial, regulado en el art. 267 del Código Civil y Comercial, es el que
afecta los aspectos primordiales del acto. El precepto contempla distintos
supuestos.
b) Error sobre el objeto: este error se produce cuando el sujeto cree celebrar
un negocio jurídico respecto de un determinado objeto o de un determinado
hecho y, en realidad, se trata de una cosa o hecho distinto: por ejemplo, en
una venta de granos, el vendedor ha entendido que se trata de cebada y el
comprador de trigo; error sobre la cantidad, extensión o suma, este error
de cantidad no debe consistir en un mero error en el cálculo.
d) Error en la causa: se trata del error que recae sobre el elemento moral, es
decir, el motivo interno que ha inclinado a ejecutar el acto. Al pertenecer al
fuero interno de cada sujeto, los motivos sólo pueden llevar a una anulación
cuando surjan expresa o implícitamente del acto, ya que, de lo contrario, se
estaría perjudicando a la otra parte, que no tiene forma de conocer lo que
pensaba el otro. Así, quien compra un automóvil creyendo por error que el
suyo no tiene arreglo no podría, una vez advertido de la realidad de las
cosas, demandar la nulidad del acto, ya que se trata de motivos ajenos al
vendedor.
Por otro lado, el art. 270 del Código prevé el error en la declaración y el error en
la transmisión.
EL DOLO.
DOLO ESENCIAL E INCIDENTAL. EFECTOS.
Para determinar si el dolo es esencial, habrá que verificar que se reúnan los cuatro
requisitos que fija el precepto:
1. Que sea grave: la gravedad del dolo alude a la entidad del engaño, astucia
o ardid. La conducta o maniobra empleada debe ser apta para inducir a
Dolo incidental es aquel en el que le falta uno o más requisitos que exige el art.
272 para que el dolo sea apto para actuar como vicio. El dolo incidental no afecta
la celebración del acto, sino sus condiciones. Es decir, la parte que lo sufre lo
habría celebrado aun de no haber mediado el engaño, aunque en condiciones
distintas; por ende, no es causa de invalidez del acto, aunque quien lo comete
debe resarcir los daños causados.
Finalmente, debemos señalar que el dolo esencial y el dolo incidental pueden ser
directo, si es cometido por una de las partes del acto jurídico, su dependiente o
representante; o indirecto, si proviene de la conducta de un tercero ajeno a la
relación de que se trata para beneficiar a alguna de las partes. Una y otra clase de
dolo afectan la validez del acto (art. 274 del CCCN).
LA VIOLENCIA:
NOCIÓN
CLASES. EFECTOS.
Estas amenazas deben ser graves, es decir, deben tener aptitud para crear el
temor racionalmente fundado, lo que se valorará de acuerdo a la situación del
amenazado y las demás circunstancias del caso (art. 276 del CCCN).
La gravedad se valorará teniendo en cuenta los bienes jurídicos –que pueden ser
de naturaleza patrimonial o no; la vida, la salud, la honra, la reputación, la
intimidad, etc.– del propio amenazado, así como de cualquier otro sujeto en tanto
y en cuanto se demuestren aptos para alterar la conducta del afectado.
6.1 DEFINICIÓN.
2) Acto lícito: el acto jurídico debe ser conforme a los preceptos del derecho,
pues no podría concebirse que el ordenamiento tutelara actos contrarios al
ordenamiento mismo. De modo que, cuando aparece en sus elementos lo
contrario a la ley, al orden público o a las buenas costumbres, la ilicitud se
comunica a todo el acto que, en consecuencia, es inválido.
ELEMENTOS ESCENSIALES:
SUJETO – OBJETO – CAUSA- FORMA- PRUEBA.
ELEMENTOS ACCIDENTALES
a) CONDICIÓN
El artículo 343 del CCCN establece:
“Se denomina condición a la cláusula de los actos jurídicos, por la cual las
partes subordinan su plena eficacia o resolución a un hecho futuro e
incierto”.
b) PLAZO
El plazo es “la fijación en el tiempo del momento a partir del cual el acto
jurídico comenzará a producir efectos, o dejará de producirlos”(Bustamante
Alsina,2005, p. 228). En este sentido, tanto el plazo como la condición
refieren a un hecho futuro, aunque, a diferencia de la condición, en laque el
suceso es contingente (es decir que no se sabe si se va a producir), en el
plazo, el acontecimiento debe fatalmente ocurrir.
c) CARGO.
LESIÓN:
“El vicio de lesión queda configurado cuando una de las partes, explotando la
necesidad, debilidad síquica o inexperiencia de la otra, obtuviere por medio de un
acto jurídico una ventaja patrimonial evidentemente desproporcionada y sin
justificación”. (Art. 332)
PRESUPUESTOS DE PROCEDENCIA.
El vicio de lesión subjetiva origina en cabeza del lesionado o sus herederos dos
acciones. Ninguna otra persona puede ejercer esta acción; Es decir que los
sucesores singulares no pueden accionar por acto entre vivos, porque la acción es
Así, los legitimados activos tendrán la posibilidad de entablar, tanto por vía de
acción como de excepción, la nulidad, como la modificación del acto lesivo, es
decir, un reajuste equitativo del convenio. Si el lesionado opta por esta segunda
opción, el litigio queda “trabado” en ese aspecto y el demandado no puede
reconvenir por nulidad.
LA SIMULACIÓN.
CONCEPTO.
Es decir, hay simulación cuando los contratantes crean, con su declaración, sólo la
apariencia exterior de un contrato del que no quieren los efectos, o cuando crean
la apariencia exterior de un contrato diverso del querido por ellos.
CLASES DE SIMULACIÓN.
La simulación absoluta: tiene lugar cuando se celebra un acto jurídico que nada
tiene de real; el acto es completamente ficticio, irreal. Es decir, las partes no
quieren en realidad celebrar ningún negocio jurídico, sino que quieren modificar la
apariencia de una disminución del activo o un amento ficticio del pasivo de una de
las partes, en perjuicio de los acreedores; aunque a veces puede ser una
simulación lícita. Ejemplo Pedro le dice a Juan le traspaso mi finca para que
María no me la embargue, pero la finca sigue siendo mía). Algo así como
testaferrato, término más popular y conocido en nuestro país.
Por otro lado, la simulación se clasifica en lícita e ilícita, que tendrá que ver con la
causa determinante que dio origen al acto.
El artículo 335 del Código Civil y Comercial regula esta cuestión. Así prevé:
Acción entre las partes. La simulación alegada por las partes debe probarse
mediante el respectivo contradocumento. Puede prescindirse de él, cuando la
parte justifica las razones por las cuales no existe o no puede ser presentado y
median circunstancias que hacen inequívoca la simulación.
El principio generales que los simuladores del negocio jurídico carecen de toda
acción entre ellos.
Ello es así, toda vez que las partes se pusieron de acuerdo en eludir una
prohibición legal o perjudicar a terceros, por lo que pierden, en principio, el
derecho de impugnar el acto por el vicio de simulación.
El contradocumento
EL FRAUDE.
NOCIÓN.
El concepto de fraude a los acreedores hace referencia a los actos otorgados por
el deudor, que tienen como nota común una afectación de su patrimonio de tal
magnitud que provoca o agrava su insolvencia, impidiendo así la satisfacción de
los créditos concedidos con anterioridad a aquéllos y con evidente perjuicio para
los mismos. Es decir que el fraude a los acreedores es la provocación o
agravación de la insolvencia del deudor mediante actos u omisiones del deudor en
perjuicio de sus acreedores, sustrayendo bienes de su patrimonio.
LA ACCIÓN DE INOPONIBILIDAD.
Requisitos de procedencia
Son requisitos de procedencia de la acción de declaración de inoponibilidad: