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INTRODUCCIÓN

Para el propósito de este trabajo nos centraremos en los “más nuevos”, los
derechos humanos de tercera generación.

Los Derechos de Tercera Generación también conocidos como Derechos de


Solidaridad o de los Pueblos contemplan cuestiones de carácter supranacional
como el derecho a la paz y a un medio ambiente sano. Tambien son las facultades,
prerrogativas y libertades fundamentales que tiene una persona por el simple
hecho de serlo, sin los cuales no puede vivir como tal. Existen diversas formas de
clasificar los derechos humanos, una de las más conocidas es la llamada tres
generaciones, en la que se toma en cuenta su protección progresiva. Los derechos
de tercera generación suponen una mayor participación por parte del gobierno para
lograr que efectivamente sean respetados, en muchos de los casos implican una
intervención positiva a diferencia de los de primera generación, que generalmente
exigen del gobierno una abstención, es decir que se limite a respetarlos.

Según Estrada [2006] dice que Los derechos de tercera generación también son
conocidos como de los pueblos o de solidaridad, en virtud de su carácter de
colectivos, es decir, que son de las personas, pero también de los grupos étnicos,
laborales, sociales o de cualquier otra naturaleza a los cuales pertenezcan.
DERECHOS DE “3era” GENERACIÓN

 Derecho a la autodeterminación

El derecho de los pueblos a la autodeterminación (el derecho a la libre determinación de los


pueblos) es un pilar del derecho internacional contemporáneo (véase el capítulo I). Tras la
adopción en 1945 de la Carta de las Naciones Unidas, ha constituido la base jurídica y
política del proceso de descolonización que ha visto nacer más de 60 nuevos estados en la
segunda mitad del siglo XX. Se trata de una conquista histórica, aunque coincidiera con la
voluntad de ciertas potencias internacionales de hacer estallar los “cotos privados de caza”
de los imperios coloniales de ese momento (principalmente europeos).

 Derecho a la independencia económica y política

INDEPENDENCIA ECONÓMICA: Hay dos formas básicas de visualizar el significado


político de la independencia económica: en un contexto de aislamiento o de mínimo
contacto externo, significa autobastarse en cuanto a la producción de los bienes y servicios
necesarios para la vida social, de modo que no se generen a partir de las propias
necesidades formas de dependencia política externa.

 Derecho a la identidad nacional y cultural

La identidad nacional se basa en una condición social, cultural y espacial. Es la identidad


basada en el concepto de nación, es decir, el sentimiento de pertenencia a una colectividad
histórico-cultural definida con características diversas, rasgos de cosmovisión definidos con
mayor o menor localismo o universalismo (desde la cultura a la civilización), costumbres de
interacción, organización social y política (particularmente, el Estado tanto si se identifica
con él como si se identifica contra él).
 Derecho a la paz
La paz es una aspiración universal de entrañable raíz humana. Es una aspiración fundada
en una idea común a todos los miembros de la especie humana. Constituye un valor, un
principio y un objetivo. Así como la dignidad es un elemento inherente a la personalidad
humana de todos los individuos, así como los derechos humanos, todos los derechos
humanos, son patrimonio común e inalienable de todas las personas, la idea de paz y de la
necesidad de su realización anida en la mente y en el corazón de todos los seres
humanos. Pero la esencia de la paz, la convicción de su necesidad, es y ha sido común
a todas las culturas, si se exceptúan las aberraciones que, como expresión del mal, nunca
han dejado de existir en la historia de la humanidad. La paz es un “valor”, un valor esencial
para la vida y para la realización plena de la humanidad y de cada ser humano. Es un valor
negador y destructor de todas las nefastas teorías y realidades, tantas veces dadas en el
curso de la historia, dirigidas a intentar ensalzar la guerra y la lucha bélica, así como la
violencia general carente de contenido ético.

 Derecho a la coexistencia pacífica


La política de coexistencia pacífica, fundamento actual y generalmente admitido de las
relaciones entre las naciones pertenecientes a sistemas socioeconómicos diferentes, se
deriva de la concepción socialista del mundo y corresponde al interés primordial de los
países socialistas de mantener una paz firme y duradera. La política de coexistencia
pacífica consiste en admitir y reconocer que junto a los viejos Estados capitalistas, surgen
y se desarrollan nuevos Estados socialistas. Siendo diferentes en cuanto a su régimen
económico éstos pueden no solamente existir simultáneamente, sino establecer relaciones
económicas, culturales y políticas entre ellos. Es también el reconocimiento de que los
conflictos entre los Estados pueden resolverse a través de negociaciones pacíficas y no
por la violencia.

 Derecho a el entendimiento y confianza


Principio de la Confianza Legítima: La figura que analizamos, va a constituir la base de
una nueva concepción de los vínculos que los poderes públicos (Poder Legislativo,
administraciones públicas, orden judicial) y los entes de autoridad en general, poseen
frente a los ciudadanos, cuando a través de su conducta, revelada en sus declaraciones,
actos y doctrina consolidada, se pone de manifiesto una línea de actuación que la
comunidad o sujetos específicos de ella, esperan se mantenga.
 La cooperación internacional y regional

La cooperación internacional configura un amplio campo de movilización de recursos


asociativos, técnicos y financieros basados en compromisos de apoyo mutuo donde
concurren donantes, gobiernos, la sociedad civil y el sector privado. Cooperar supone un
marco de entendimiento sobre objetivos y compromisos entre actores; y la disponibilidad
de mecanismos y procedimientos para el acceso a los recursos, los que generalmente
consisten en proyectos de financiamiento, procesos de apoyo técnico y articulación de
redes de conocimiento, incidencia y fomento de valores y buenas prácticas.

 La justicia internacional

Promover la justicia internacional contra la impunidad de los delitos más graves (genocidio,
crímenes contra la humanidad, crímenes de guerra, tortura o secuestros) contribuye a
restablecer el respeto de los derechos humanos y de la norma jurídica en la sociedad y a
hacer efectivos los derechos de las víctimas. La FIDH documenta estos delitos, asiste a las
víctimas ante los tribunales y defiende la puesta en marcha y el funcionamiento efectivo de
procesos independientes y de mecanismos judiciales eficaces.

 El uso de los avances de las ciencias y la tecnología

Así lo reconoce desde 1966 la Carta Internacional de los Derechos Humanos, en el artículo
15 del llamado Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, que
cuenta con la firma de 160 países. Todos ellos “reconocen el derecho de toda persona a
gozar de los beneficios del progreso científico y de sus aplicaciones”. Además, los
ciudadanos tienen derecho a “beneficiarse de la protección de los intereses morales y
materiales que le correspondan por razón de las producciones científicas”. Es más, los
estados firmantes deben tomar las medidas “necesarias para la conservación, el desarrollo
y la difusión de la ciencia” y se comprometen a respetar la indispensable libertad para la
investigación científica”.
 El medio ambiente

Los Derechos ambientales o de la naturaleza pertenece a la rama del derecho público y


es un sistema de normas jurídicas que regulan las relaciones de las personas con la
naturaleza, con el propósito de preservar y proteger el medio ambiente en su afán de
dejarlo libre de contaminación, o mejorarlo en caso de estar afectado. Sus objetivos son la
lucha contra la contaminación, la preservación de la biodiversidad, y la protección de los
recursos naturales, para que exista un entorno humano saludable. Es una rama del
Derecho muy reciente, pero de gran desarrollo y futuro, surgiendo a mediados del siglo XX
por la concienciación de la sociedad a consecuencia de algunos desastres ecológicos.

 El patrimonio común de la humanidad

Patrimonio de la Humanidad. También conocida como Patrimonio Mundial, es una


categoría instituida por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la
Ciencia y la Cultura, que distingue bienes específicos de relevancia excepcional —cultural
o natural— para la herencia común de la humanidad. Dichos bienes conforman la Lista del
Patrimonio Mundial, avalada por la Convención sobre la protección del patrimonio mundial
cultural y natural.

A Convención sobre la protección del patrimonio mundial cultural y natural clasifica los
bienes patrimoniales como:

 Monumentos: Se considera monumento a la obra


arquitectónica, escultura, pintura y las piezas o estructuras de carácter arqueológico,
inscripciones, cavernas y grupos de elementos que tengan un valor excepcional
desde el punto de vista histórico, artístico o científico.

 Conjuntos. Son grupos de construcciones aisladas o reunidas, cuya arquitectura,


unidad e integración en el paisaje les da un valor universal desde los mismos puntos
de vista que para los monumentos, se denominan conjuntos, dividiéndose éstos a su
vez en tres categorías:
1. Centros históricos, que cubren exactamente el perímetro de
la ciudad antigua, englobado hoy dentro de una ciudad moderna.
2. Ciudades históricas vivas: aquellas que pueden ser susceptibles de evolución bajo
el efecto de mutaciones socioeconómicas y culturales.

 Sitios. Son las obras del hombre o bien las obras conjuntas del hombre y la
naturaleza, incluidos los lugares arqueológicos, que tienen un valor universal
excepcional desde el punto de vista histórico, estético,
etnológico o antropológico.

 Monumentos naturales, constituidos por formaciones físicas y biológicas o por grupos


de esas formaciones que tengan un valor universal excepcional desde el punto de
vista estético o científico.

 Formaciones geológicas y fisiográficas y las zonas estrictamente delimitadas que


constituyan el hábitat de especies animal y vegetal amenazadas, que tengan un valor
universal excepcional desde el punto de vista estético o científico.

 Lugares naturales o las zonas naturales estrictamente delimitadas, que tengan un


valor universal excepcional desde el punto de vista de la ciencia, de la conservación o
de la belleza natural.
 El desarrollo que permita una vida digna

La acción que desarrollan las organizaciones no gubernamentales (ONG) reúne a cientos


de miles de ciudadanos y su peso específico en distintos acontecimientos mundiales ha
sido creciente en los últimos años, así como su notoriedad. Como fruto de la experiencia
de la última década en un mundo que acentúa globalmente las desigualdades, ha surgido
el debate -dentro y fuera de esas organizaciones- acerca de su función específica y de su
ámbito de acción. También, de su relación con los poderes oficiales y con la acción política.

Las organizaciones no gubernamentales son una respuesta directa de la sociedad civil al


sufrimiento de las personas menos favorecidas, y no conviene olvidar ese impulso
primigenio a la hora de evaluar su función social y sus perspectivas de futuro. Nuestro
propósito es apoyar los esfuerzos de las personas que viven en la pobreza para que
consigan su derecho a una vida digna a pobreza no es el fruto de un hado maligno o de las
fuerzas de la naturaleza, sino la consecuencia de situaciones de injusticia y de problemas
estructurales causados por prácticas y decisiones humanas, que pueden y deben ser
modificadas en atención a los derechos irrenunciables que todo ser humano posee.
CONCLUCIÓN

Ningún derecho humano es más importante que otro. Todos son fundamentales para
garantizar la dignidad de la persona humana. Por eso se dice que los derechos humanos
son universales (para todos), interdependientes (el cumplimiento de uno permite el
cumplimiento de otros), indivisibles (no se pueden fragmentar) y progresivos (la cantidad y
calidad de su disfrute tiene que ser cada vez mayor).

En los derechos humanos de tercera generación y Trabajo Social, podemos llegar a la


conclusión, simplemente teniendo en cuenta su naturaleza, principios y antecedentes, que
el Trabajo Social es una disciplina adecuada para intervenir en el ámbito de las crisis
humanitarias (y sus causas como desastre natural o conflicto armado, y consecuencias
como desplazamiento forzado) que es cuando interviene la acción humanitaria, ayudando
a la recuperación, rehabilitación y desarrollo de estas personas.

Toda persona tiene derecho a unos ingresos suficientes para que él o ella y sus familias
puedan vivir con dignidad. Bien está -ésa es la parte esencial de nuestra labor- ofrecer
formación o microcréditos a los más pobres para que puedan aspirar a un trabajo mejor
remunerado, abrir su propio negocio o aumentar el rendimiento de sus pequeñas
explotaciones agrarias, pero nuestra labor no puede limitarse a lo asistencial y aislarse de
la realidad social y política en la que se produce.

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