Homo sapiens es el nombre científico de nuestra especie, los seres humanos.
Nuestra especie es la última en surgir del género Homo, es decir, de los homínidos, descendientes de una especie de primates que tomó un rumbo evolutivo distinto al descender de los árboles y comenzar a caminar en sus patas traseras. Como los otros homínidos nuestra especie se caracteriza por su capacidad de inteligencia que le permite desarrollar herramientas.
¿Cuáles son sus características biológicas?
El Homo sapiens es una especie mamífera bípeda, cuyo cuerpo presenta simetría bilateral, y que presenta dimorfismo sexual: las hembras y los machos se distinguen a simple vista por las características de sus cuerpos (las mujeres tienen mamas, cinturas pequeñas y vulva; los hombres carecen de mamas, son más anchos de musculatura y tienen un pene visible). Las extremidades superiores del humano presentan manos prensiles con dedos pulgares oponibles, lo cual le permite crear y empuñar herramientas de diverso tipo. Además, su cráneo posee una capacidad cerebral de 1600 cm3 y tiene una capacidad mental sin parangón en la fauna conocida. El cuerpo del Homo sapiens tiene una altura promedio de 1,75 metros (hombres) y 1,62 metros (mujeres) y un peso de 75 kg y 61 kg (respectivamente). Su nutrición es omnívora y su promedio de vida planetario está en los 71,4 años.
¿Cuáles son sus características culturales?
El Homo sapiens rendía culto a deidades que luego dieron origen a la religión, que busca la compañía de sus semejantes. Esto influyó en el desarrollo de las capacidades físicas y mentales que permiten el lenguaje hablado, siendo la única especie animal capaz de comunicarse mediante un sistema de signos y de inscribirlo para que dure mediante diversos soportes físicos (escritura). Las sociedades humanas poseen jerarquías y ordenamientos sociales Desde edades tempranas, el Homo sapiens rindió culto a la naturaleza, imaginando en ella deidades y figuras míticas que dieron luego origen a la religión.