GLOBALIZACION – SANTIAGO URIBE JAIMES

Para bien o para mal nos vemos propulsados a un orden global que nadie comprende del todo, pero que
hace que todos sintamos sus efectos.

La difusión global del termino testimonia las mismas tendencias a la que se refiere. En los negocios de
habla constantemente sobre este término.

Pero las economías globalizadas sean cuales sean sus beneficios, tormentos y desafíos, no es diferente a
las de periodos atrás. El mundo funciona de manera parecida a como ha sido por muchos años.

Los escépticos, afirman, por ejemplo, que buena parte del intercambio económico se da entre regiones
y no netamente mundial. Como el comercio en los países de la Unión Europea, Norteamérica, entre
otros. Además, tienen a situarse en la izquierda política.

Para ellos la idea de globalización es una ideología propagada por librecambistas que quieren
desmantelar los sistemas de bienestar y recortar los gastos estatales.

Por otro lado, los radicales dicen que el termino globalización es muy real y que sus consecuencias
pueden verse en todas partes. Como la economía electrónica global, muy de moda, que puede transferir
grandes cantidades de capital de un lado del mundo a otro con el botón de un ratón.

El valor del dinero que podamos tener en nuestro bolsillo o nuestras cuentas bancarias cambia por
momentos según las fluctuaciones de estos mercados.

Pero ambos grupos consideran el fenómeno casi exclusivamente en términos económicos, pero es
influida, sobre todo, aspectos tecnológicos y culturales aparte de la económica.

La existencia de la comunicación electrónica instantánea no solo una manera de transmitir información

o noticias rápidamente, sino que modifica o altera la textura misma de nuestra vida, es decir, a
globalización también influye en los aspectos íntimos y personales de nuestras vidas

La globalización también es un fenómeno revolucionario que se ven en los países y sociedades, donde
antes eran leyes radicales o leyes que simplemente la mujer no tenía toda libertad. Pero ahora con la
continua globalización los países ceden a tener una mayor igualdad.

También es la razón del surgimiento de identidades culturales locales y zonas económicas. Estos
movimientos que se ven como en Escocia, Barcelona, Hong Kong impulsan a una independencia. Sin
embargo, estos cambios se ven impulsados por otro factores más históricos y específicos.

El comercio necesita siempre un marco de instituciones, al igual que otras formas de desarrollo
económico. Los mercados no pueden ser creados con medios puramente económicos, y el grado en que
una economía cualquiera debiera ser expuesta al mercado mundial debe depender de un conjunto de
criterios.

Es inevitable que la globalización no nos toque. Estamos trastornando nuestros modos de vida. De tal
manera que muchos se sienten atenazados por fuerzas sobre las que no se tiene poder alguno. Pero se
puede imponer voluntad propia a este fenómeno. No eliminarla ni bloquearla porque es inevitable, pero
si maneras como reconstrucciones o creaciones nuevas instituciones para no hacer de ella algo
prescindible en nuestras vidas.