Está en la página 1de 1

Haradai Capazul

Nací en una pequeña comunidad elfica, llamada Arboluna, en el límite oeste del bosque de
Cormanthor. La centenaria comunidad es el hogar de muchas familias Ar-Tel-Quessir (elfos
solares) Los Tau-tel-quessir, (elfos lunares ), siempre están de paso, excepto por mi madre, que
llegó un día y conoció a mi padre, haciendo de Arboluna su hogar hasta hoy.

El interés por la magia fue estimulado en mí y en mis hermanas, por mamá, poseedora de cierto
conocimiento arcano. Mientras que la familia de nuestro padre nos legó una pesada herencia…
Muchos de mis ancestros fueron grandes personalidades en el antiguo y lejano reino de Myth
Drannor, así que puedo decir que el amor por la espada y el combate nació en el fuego del hogar,
escuchando increíbles historias sobre los legendarios y valientes caballeros de aquel mítico reino.

En mi infancia y juventud estudié dedicadamente la historia de mi pueblo. Puedo hablar de su


llegada a este mundo desde el Reino de las Hadas, de la guerra contra los Dragones antiguos y de
la fratricida guerra de la Corona… Del exilio y del retorno. Por supuesto también estudié muchos
aspectos del cambiante mundo de Abeir-Toril. Me jacto de ser un erudito, sin embargo, sé que
solo conozco el mundo a través de los ojos de mi pueblo y siento que hay otra historia allí afuera…

Partí de Arboluna en Mirtul… El camino me ha llevado a la ciudad portuaria de Phlan, al otro lado
del Mar de la luna. Realmente tengo problemas para relacionarme con los “N Tel Quess” (la no
gente) Noto que mis palabras no siempre son bien escuchadas… Tendré que encontrar la manera
de vincularme mejor con ellos si quiero mirar con sus ojos la historia de mi pueblo y de Toril.

Por fortuna Corellon Larethian camina conmigo… He encontrado un buen grupo de N Tel Quess
que al parecer escuchan mis palabras de buen grado y aprecian mi habilidad con la espada…
Seguiré con ellos por un tiempo…

También podría gustarte