G. w: F.

Hegel
,
ESTETICA

Traducción de
Hermenegildo Giner de los Ríos

¡iJ,
BIBLIOTECA

Serie «Arte y Arquitectura", 5

EDITORIAL ALTA PULLA
Barcelona
1988
 78 DE ·LO DELLO EN" EL· ARTE
II.-De la slluaci6n.
1/' La ausencia de situación.-2.o La situación determinada no
.seria.-3.o La colisión.
Para repre;entar el ideal en peroonajeo ó en uua acción,
no e:;·sólo preci,o un mundo favorable de que se tome el
",rgumeuto, sino una situaIJión.
Esta situ.tción pue:!e sel": 1.0, indeterminada, ('omo la de
muchos per3~najel inmóvile:; de la escultura antigua ó re-
ligic)s,,; 2.°, determinada, pero t)davía no fN3'ria. 'L'ales son
t'tmbién la mayor parto de la', situaciones de los personajes
<le la escultura antigua; 3.°, finalmontc, puc,le sor seria y
proporcionar materiapal'a una acci6n vordadera. Supone
-8llt-lllC83 una 0;>0 ~ición, ~Ila accióil y una reacción un CO)).-
i
;fJ icto, una eoli~¡ón. IJa belle'''' <lo] idii"al consIsto en'la'caln;¡a 1\
--.- ......-_--; . 2. . ~.-
y la perfecció.o. absolut,t·~. Ahora. bien; la colisión destruye
Lo ~:;, <;¡¡ta~arm3ii1a~':E:rÍ>roolema del arto en'"";;;;te caso consiste,
1\lJI11"».~.d~ por tanb, en hacer de suerte 3 ue laarmoníareáparezca en 3
<JI dc;enlace. J~::t poo;ía sola es capaz e esenvol\-er está
opolicíÓll, s~bre la cual gira el interés del arte trág'ico en
particula:".
Sin examiuar aquí la naturaleza de las diferentes eoli-
I ), J iliones, cuyo estudio pertenece á la teoría del arte dramáti-
\le o.~ co, debemos notar que las colisiones del más elevado género
~1 (1, t; 3..>~L~? .,!~e l~1~2:,~ ..~!!'..l\~~~é§fi~Eene~~ In'!.:.
l\b rE. II?$ :ales, com~ é~_I~:E~~~di~~\l.~~::s..;..estees el argu:u~nto
Q d61~dera "¡¡rage 1m clás:ca, á la vez moral y rehglOsa,
como se verá más adelante.
e.\ ,.,¡ ~ 11. \Así el ideal, en este grado superior, es la manifestación
.' \ de ~Jl.9J.~>lJ<!.'lL!l!2E¡¡,11'''~Y~ª~J?-.Ü<!~ll:~<!()1
()~píritu, de lo!,.
~~ (~\lll.~~~~ª()~E:~~~~i~::!~!'.~lAl~ y de loscaracteí'¡¡s)ue apa-
l?'" !tI ,recen.y se revel!lon en el desarro!IoMlarepresentación.
<'\)"l¡~t ci,,,,
11E L.'- DETJmMIN.l.CIÓN D;;L IDEAL 79
111. - De la accl6n propiamente dicha.
l." 'De las potencias generales de la acción.-2.0 De los persona·
jes.-3.0 Del carácter.
En la aceión propinmente dicha, tres cosas hay que con-
siderar como constitutivas de su objeto ideal: 1.0, los intere-
~.e..~ .qenerale$~ las ideas, lo·, principios univer¿;ale3; ~!.lX~ ppo-
"ieión constituye el fondo n~i,mo de la acción' 2.°, lo; perso-
'kajes; fO;Sü'""'earaeter y sus pa3ione3, ~]o;'"';~tiYOS que los
o
.impul8an á obmr.
n
1. L.ts POTJ<JNCIAS. GENERALES DE LA AccióN.--Los prin-
"ipios ct~ la reIíg,Oñ;<léTaíñórárcr;ia famili;a;i ,.,\
~ "
T~st,a(Jo; Jos grandes sentimientos del alma, el amor, el ho- .\r i ",
...
,'
llor, ete., he a'luí lo que constituye la base, el ycrdadero in- -¡lrñ ~~
¡.erés de la acción. Son los grandes y verdaderos motivos
del arte, el tema oterno a;¡;;:-g=i-lin p;;esía:""~"-''''''-
""'"'Aestos poderes legitimos y v~rdaderos, se añadon otros
;;in dn~oaeres'Oelmalriiéi'1nío<fébe"';: ser representa-
,los como coristituyendo cl fondo mismo y el fin de la ac-
"¡{ID. Si la idea, el fin,.es algo defectuoso, falso, malo de por
si; la fealdad del fondo comentirá t.oilavía menos la belleza
<le la. forma. La sofística de las pasiones puede, m2diante
tma pintura. verdadera, tratar de representar lo falso con
los colores de la verdad; pero no nos pone á la vista' más q~e
un sepulcro blanqueado. La crueldad, el empleo violcnto
d<l la fuerza, pueden soportarse en la reprosentación, pero
solamente cuando los realza la grandeza del carácter y los
. ennoblec.e el fin que persiguen los personajes. La perversi-
dad, la onvidia, la. cobardía., la bajeza no son sino repug-
nantes.
..- .. ..
El ma.l en si~--está.JlFivado
~_.... .... . . . . . ..--. ,.
de interés
~_ _--~"-->.--
verdadero
....-,~-~., ~ ~.,.!.
porque
ele lo que es falso nada.puede resultar que no lo sea; no pro-
duce más que desventura,mientras que el arte debe ofre_
oornos orden y .armonía. Los grandes artistas, los grandes
 HU DE LO -E~LLO EN EL 'A111'E
poetas de la antigüedad, no nos ofreoen nunea el espeetáeu-
lo de la maldad pura y de la perversidad.
2.° Los PERSo"M~;s.-Si las ideas y lós intereses de l.
vida humana constituy",n el fondo !le la aooión, ésta se reali.
Y.a por lJe1"80najes, en 10$ que se eonoentra el interés. Las
iflea.s ¡{enerales pueden ser ya peroonifieadas en séres .upe"
"iores' al)1Ombre, 011 divinidades oomo.lasque figuran en 1..
epopeya y la úagedia auti¡{uas. Pe.ro en el homhre roeae la
acción propiamente dioha; él ocul'l1 la escena. Ahom bien,.
¿eóIUo conciliar la acción divina con la humana, la voluutad
de. los dioses. y la del hombre? 'l'al!Os e1'.preblema contra el
cual se han estrellado llluohos al·tistas y poetas. Para man-
tener el equilibrio es 'neoesario que los dioses tengan la di-
I'ecoión suprema y que el hombre consene su libertad, su
I
independenoiaj sin lo oual, no e" más que un instrumento
pasivo de la voluntad de los dioses, y la fatalidad pesa sohro
I
í todos sus aotos. La verdadera soluoión oonsiste en mantener
la identidad de los dos términos á pesar de su diferenoia, Oll
hacer de suerte que lo que se atribuye IÍ los dioses parezn"
lÍ la vez emanar de la naturaleza intima de los personajes y
de .su oarlÍoter. Corresponde al talento del artista conciliar'
los dos aspeetos. El eorazÓn del hombre debe revelarse ea
sus dioses, personifioaoiones de los ¡{randes móviles que 1..
solioitan y gobiernan en lo interior. Es este el probleIUll
que hall" resuelto los grandes poetlls de la antigüedad: Ho"
mero, Esquilo, Sófoeles.
Los
_____principios
.~,,...~ •._"H_''''.__ generales,
,._.~,~, ...__, " , .esos gl'andes
" __ motivos
,,....,......'"~~__ que SOll
~_
.~~.e¿,de.•~a'lIoei\Í!!~.Jlor lo ·iñ~·qun"~:;_en.?;~~J~s
personajes, C()n~~ltuyen tamblen e1' fondo prOp1O.2-e ~ua-
.pz,¡;,i O}¡'Q~~¡éi§~~J.~_!~~~Ci~':~1-·:~~a:~~~~:?:?a~é7WO. Efeetiva-
"i \ mente, 'Ia paS1On, en OI sentiiTo e1evado, Ideal, no es en él
"5«l,P,,(Ilil'.,.S un movimiento arbitrario, capriehoso, desordenado, del
t'"h1¡t'1 i "Q> 1 alma; ~J~,;:L'ly.i~~~~!2J¡:~"::~.~.g!1:fu.~~~~::'~ar'
e; '1,(.;I¡;>;Il5.e~~r,.~~n una~~e. ~~e.:~~ti:~~.~~,;:!:'.~.§.o:l_.,;,!;.ít~Jl~~('!~LQJ:ll=
P Js.
11\0./,,1 ,!,!.l~~~:,!arés Ia"paslónde Antígona, el amor sagrado por
Sll liéñliano. la venganza en Orestes. ~.~ uE:J!?d~:...d~~
DE LA. DETERMINACIÓN DEL IDEAL 81
e~lmli.!~l~,g!tim.9 ciue encierra uno de los principios
eternos de la razón y de la voltmtad. '1'al es también, en este
caso, el ideal, el ver(ladOl:Q.i<:!!!.al, aun euando aparezea bajo
la formade-;'"iia'p;;~¡{~~:Lllele~:;;;;I~·e;;;;;'oor¡'ceYIap;ll:íB.cii~
ciíííiiiñlcáñCIó"<:re'"sté mo<lo IÍ la acción un iuterés serio y
proflUldo.
En este sentido, la pasión ("""JO,) constituye el centro y
el dominio verdaclOl"O"doT"iii:te; ¿s';J- prllCííJí¡}'uo":r;¡-'ollw":'
"ioñ,'1itfñemollél,·¡jWlálle'i'ópalélico.
3.° EL CAUÁCTER.-Ahora bien, esta verda<ln)oral, este
principio eterno.<lue <lescíencle al corazón del hombre y ell
él toma la forma de una pasión grancle y nohle, idelltilicán-
<lose eon la voluntad <le los personajes, eonstituye ÍllmbiéÍt
". _"""""'-'E_""'I<'''''''''~_~_._=-
~n carli{;tel'. ~~~~~~~(~' .~c1?':;"~,i~~",,,~~:~~~~~J2,?,r~,.x_~~
base á.W E!!~);:' .n;:>l,:~I.ci]~~~~~·, El ollr¡íotel' es
el punto elilminllnte ,le la representllcwn ideal, y resumo
todo lo anterior. En la ereación ele los cal'acteres es donde
se despliega el genio del artista ó del poeta.
t(l~ '1'res elementos prineipales deben reunirse 1'arl1 formar
el ear.ícter ideal; la 1"ÍquRZ'(l.la vitali:lad y la fijeza.l.° La ri-
(.¡l(i,S· qneza eonsiste en no~Iimítarse'1u;~sola cuarr.:iaJ, que ha-
1~(' ~ $. ría del personaj e una' abstracción, un sér alegóríeo. ~
euali<lad dominante debe, pues, unirse todo un eonjllllte de
~~Wle hagañ<rerpersonaje oaellJéroeüi'íTíOllii');~
real y completo, eapllZ de desenyolverse en situaoiones di-
Yersas y bajo diferentes aspeetos.. 2.° ,............",_.
Semejante
-,..,__
variedad
..
puede únieamente, dar vitalídad al cai"ácter. 'No basta, sin Of,'S.,'J.;¡l; ..
,.>t""~ ~""",_
ombargo; es preeiso que"est:a¡¡--cu:¡;:"liá;;:(¡esse eombinen de \,'(¡,,~
modo que formen, no una simple reunión y un todo eom-
pIejo, sino Wl-.~2!~,Jr«>. _~.~~~r~",~!~9-i~~:ll21~ con ~~a.. fis<?~i~'
propia, original. Es lo
que oeurre cuando Ull sentimiento
pmíC~~.R.~~~~~0íñii;~~t~Z~~i2.~:¡;r1:"a.:~¡o.:~~~~~~E~e
del
~
caráeter de un personaJe;1e señala un fin deterl!llu;¡.do
=.•.• "'~='~""~'''''#''''_''''_j'''_''''''',",,,,,,,", ... ,,,,,..,,.4d''''''''"A'''-': "'''''~''''''''''''.<,,>< ....,.;m'''''.'-'>'''"''''':- ...
,.:.'L~l se}"e~~~~t~~~,~~~~~~51!!!!l~9}!!I~.Y,.!ill§..~~~s.U ~llcla<l
. y VIWIeUad';- senOlITez' y fecundidad, es lo que nos ofrecen
103 earacteres de Sófoeles, de Shakespeare, etc. 3.° Final-
TOMO 1 6
 82 DE LO BELLO EN EL ARTE
I
mente, lo que colistituye esencialmente el ideiüen el carác-
ter, es'la consistencia y la fijeza. Un ca.rácter illconsistentei
indeciso, lITesólUto, e¡;lá- auseñcia de carácter. Las co:,'::~.­
dicciones sin dud~: formall parte de la natura' eza humana,
ñ;~oh-~~ida<rd~1;e-ma~t~11;1~se'¡"p~~~~-d;;est~iI';¡2tua-,
ci~~e~.-.Á.igoidéntico·hádé Yél1seelitoda:'fpartes como ras-
go'fifn:damental.Saber determinarse por sí mismo, seguir
;'111 designio, ton,ar una resolución y mantenerla, es lo .quo
constituye eLIOl.ido de la personalidal1; dejarse determmar
por otro, yacilal', dudar, es abdicar de la propia voluntad;
(~o.ia.l' de ser ÜIl(} mismo, ca.recer de carácter;,e~,e~todos los
ca.sos, lo opuesto al carácter ideal.
So opondr";., sin duda, los caracteres que figuran en las
o h1'8..5 dranlá,ticas y novelas nlodel'nas~ y cuyo tipo se h<1
liiado en 'Verther.
Estos SUIRlcstos caracteres no representannlás que una,
enfermedad Clél espíritu y la debilidad misma del alma.
Ahor'1 bien, el arte verdadero y sano no representa lo que
cs f,l1so v énfermizo, lo que carece de consiste)lcia y deci-
sión, sin~ lo que es verdadero, sano y fuerte. El ideal, en
nna palabra, es )Ina idea realizada; el hombre no puede rea-
lizarla sino como persona libre, es decir, desplegaudo toda
la energía y la constancia que pueden hacerla triunfar.
III.-DE LA DETERMINACIÓN EXTERIOR DEL IDEAL
Lo que constituye el fondo del ideal, es la esencia íntic
ma de las cosas, principalmente las concepciones elevadas
del espíritu y el desarrollo de las potencias del alma. Estas
ideas se manifiestan en una acción en que se sacan á escena
los grandes intereses de la vida, las pasiones del corazón
humano, la voluntad y el carácter de los personajes. Peró
OSt'l. acción misma se desarrolla en medio de ]¿~E-Jl~l]:kc
"a exteriOl:qlle,.de'}!!.el~g~J)Xe~tlia!.ideal3!llj;gl~l·id~
'ima'for;n~ determinada. -Esta
-,. naturaleza' ámbi~ ..
_...-----~--..._~~._--,
debe,
DE LA DETERMmAmÓN DEL IDEAL 83
par tanto, ser concebida y órdenada en el sentido del ideal,
. "egún las leyes de la "egulm'-idad, de la simet1ia y de la ar-
"wnia, de que ya se ha habládo. ¿Cómo debe ser el hombre
"apresentado en sus relaciones con la naturaleza exterior?
;.De qué modo debe ser idealizada la prosa de la vida? Si <¡l
arte, en efecto, libra al hombre de las necesidades de la
vida material, no puede sin embargo eleyarle por cima dc
la.s condiciones de la existencia humana, y suprimir estas.
l"elaciones.
~renelll0ti toda.vía. quo-'distinguir on esta cuestión tres
puntos de vista diferentes:
1." Laforma abstmcttiilela "eal-idad exterior;
2." La concordancia del ideal en su existencia concreta con
la "elil-idad e;eterÚJ/';
¡J.. La forma exter'w" del ideal en su "elación con el pü-
Mitu.
l.-DE LA. FORMA. ABSTRACTA DEL MUNDO EXTERIOR (1)
En nuestros días se ha dado una importancia exagerada
á esta parte externa, haciendo de ella él objeto principal.
8e ha olvidado demasiado que el arte debe representar las
.ideas y los sentimientos del alma humana, que en ello está
el flllldo verdadero de sus obras. De aquí todas esas descrip-
ciones minuciosas, el cuidado extremado que se concede al
demento pintol:esco ó al color local, al mobiliario, á los
tmjes, lÍ. todos los medios artificiales empleados para dis-
fraza:"· el vacío y la insignificancia del fondo, la falta de
idea, la falsedad de las situaciones y la debilidad de los ca-
mcteres, la inverosimilitud de una acción.
Sin embargo, este aspecto tiene su lugar en el arte,' y
no <lebe ser descuidado. Da claridad, verdad, vida é interés
.,¡ SIlS obras por la secréta simpatía que existe entre el
(1) Á esta f¡jrmula corres.p()nde lo que .se llama color .local.