En 2018, la Organización Mundial de la Salud (OMS) clasificó
el trastorno por videojuegos en su Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE-11). El ICD-11 es una lista de enfermedades y condiciones médicas que los profesionales de la salud utilizan para hacer diagnósticos y planes de tratamiento.
Según esta directriz, las personas con problemas de juego
tienen dificultades para controlar la cantidad de tiempo que pasan jugando jugando videojuegos. También priorizan el juego sobre otras actividades y experimentan efectos negativos de su comportamiento en los videojuegos.
a OMS decidió clasificar esta condición después de revisar la
investigación y consultar con expertos.
Según la definición de la OMS, una persona que tiene un trastorno
por videojuegos mostrará las siguientes características durante al menos 12 meses:
a OMS decidió clasificar esta condición después de revisar la
investigación y consultar con expertos.
Según la definición de la OMS, una persona que tiene un trastorno
por videojuegos mostrará las siguientes características durante al menos 12 meses: