Como estudiante en línea, es parte de su día a día comunicarse de forma escrita;
sin embargo, puede resultarle una actividad tediosa o causarle temor, debido a la complejidad que representa expresar ideas de forma clara y congruente. Por ello, es importante que no pierda de vista que existen ciertas cualidades que deberá contemplar, las cuales le ayudarán a comunicarse mejor de manera escrita, como establecer nexos entre ideas, así como la originalidad y la extensión del contenido.
Entre las cualidades de la redacción se encuentran:
1. Claridad y sencillez: dependen del uso adecuado de términos, es decir, se
debe evitar en la medida de lo posible emplear los llamados vicios de dicción, que son resultado del uso inadecuado de las palabras.
2. Concisión en la exposición: tal como menciona Santos (2012), la concisión
es una cualidad con la que se demuestra que el autor de un texto es capaz de desarrollar un orden correcto de ideas y de argumentar, pues cada vocablo tiene un fin determinado: demostrar y conducir al lector a entender lo que se quiere comunicar. Vivaldi (citado en Comunicación oral y escrita, s. f.) propone 29 reglas para lograr concisión en la exposición: 1. Las palabras son la herramienta del escritor, es decir, el empleo de la palabra exacta, propia y adecuada. 2. Un buen diccionario no debe faltar nunca, se recomienda, además, el uso de un diccionario etimológico y uno de sinónimos. 3. Elaborar un esquema previo, siempre que sea posible (un borrador). 4. Conviene leer asiduamente a los buenos escritores, los maestros de la literatura nos ayudarán con la tarea de escribir. 5. Es preciso escribir con la convicción de que sólo hay dos categorías en el idioma: verbo y sustantivo. 6. Evitar los verbos fáciles (hacer, poner, decir, etc.), y los vocablos muletillas (o sea, este, verdad). 7. Procurar que el empleo de los adjetivos sea lo más exacto posible, no abusar de ellos y evitar la duplicidad de adjetivos cuando sea innecesaria. 8. No ponderar demasiado, los hechos narrados limpiamente convencen más que los elogios. 9. Lo que el adjetivo es al sustantivo, es el adverbio al verbo, no abusar de los adverbios, sobre todo de los terminados en -mente. 10. Colocar los adverbios cerca del verbo al que se refieren. 11. Evitar las preposiciones en cascada. 12. No abusar de las conjunciones parasitarias (que, pero, aunque, sin embargo). 13. No abusar de los pronombres y, sobre todo, cuidar el empleo del posesivo su. 14. No tergiversar los oficios del gerundio (-ando, -iendo); sustituirlos por otra forma verbal. 15. En la puntuación radica el sentido del mensaje. 16. No emplear vocablos rebuscados. 17. No abusar de los incisos y paréntesis. 18. Evitar las ideas y las palabras superfluas. 19. Evitar las repeticiones excesivas y malsonantes; sin embargo, en ocasiones, es preferible la repetición al sinónimo rebuscado. 20. Si se emplean sinónimos para evitar la repetición, procurar que sean comunes. 21. Para la construcción de frases, tener en cuenta el orden sintáctico (sujeto, verbo y complemento). 22. Como norma general, no escribir nunca el verbo al final de la frase. 23. Destacar siempre la idea principal. 24. Para la cohesión entre las oraciones, procure ligar la idea inicial de una frase a la idea final de la frase anterior. 25. Evitar saltos bruscos de ideas entre párrafos. 26. Recordar siempre que el estilo directo tiene más fuerza. 27. Las cualidades fundamentales del estilo son: claridad, concisión, sencillez, naturalidad y originalidad. 28. La metáfora sólo es aplicable cuando añade fuerza a lo que se escribe. 29. Releer siempre lo escrito como si lo hubiera redactado otra persona.