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1. PROFETAS.

¿Qué era un profeta? Cuando el Señor comisiona a Moisés para liberar a su pueblo de la
esclavitud de Egipto Éx. 4:10-16. Moisés alega que no estaba en condición de entrar en la
presencia de Faraón y ser el portavoz de Dios por su incapacidad de hablar claramente; el
Señor designa entonces a Aarón su hermano como profeta de Moisés para que hablará al
pueblo. Éx. 7:1. Lo que nos da a entender que un profeta era uno que hablaba en nombre de
otro, es decir, que actuaba como su vocero.
Dios, habiendo hablado muchas veces y de muchas maneras en otro tiempo a los padres por
los profetas. Hebreos 1:1.
Desde que el hombre cayó en desobediencia Dios no se ha quedado sin testimonio, antes bien,
ha declarado sus propósitos por medio de hombres santos que él escogió, a quienes se les
llamó sus siervos los profetas, a quienes el Señor Dios les comunicó su palabra y designios de
distintas maneras. Porque no hará nada Jehová el Señor, sin que revele su secreto a sus siervos
los profetas. Amós 3:7.
La Biblia señala que en la dispensación de la conciencia, antes del diluvio, Enoc séptimo desde
Adán; profetizó y su profecía quedó registrada en la Biblia. Jd. Vs.14.
De Abraham quién vivió en la *dispensación, la de la promesa,* Dios dijo que era profeta Gn.
20:7.
Más adelante en la dispensación de la ley vemos una gran variedad de profetas y videntes que
Dios utilizó para revelar sus palabra y propósitos.
Un profeta podía hacer milagros o señales, pero, al pueblo primero le era indispensable
prestar atención al mensaje de tal profeta antes que a la señal o milagro. Dt. 13:1-5
Dios mediante continuaremos.
Geivan Zambrano
2. PROFETAS.
Dios, habiendo hablado muchas veces y de muchas maneras en otro tiempo a los padres por
los profetas. Hebreos 1:1.
En Dt. 18:15-22. Dios promete levantar una sucesión de profetas después de Moisés de entre
su pueblo Israel para dirigirlo, advertirlo, transmitir mensajes en cuanto a la revelación de Dios
y la verdadera adoración; Moisés fue seguido por diversos profetas designados por el Dios
Santo y verdadero que hablaron con fidelidad su palabra y de igual manera cumplieron su
ministerio.
A Juan el bautista, los judíos enviaron de Jerusalén sacerdotes y levitas para que le
preguntasen ¿Tú, quién eres? ¿Eres tú el profeta? Jn. 1:19-21. Mas adelante cuando el Señor
realizó el milagro de la alimentación de más de 5000 personas, aquellos hombres, viendo la
señal que Jesús había hecho, dijeron: Este verdaderamente es el profeta que había de venir al
mundo.Jn. 6:14. lo que indica que los judíos esperaban el cumplimiento de promesa hecha al
pueblo por medio de Moisés en Éx. 15:20, profecía que se consumó en la persona de Cristo
como el “Gran Profeta.” Hch. 3:22-23; 7:37.
Diversos hombres que profetizaron son mencionados en el Antiguo Testamento, el Señor los
utilizó en momentos específicos, como fue el caso de los 70 ancianos de Israel además de
Eldad y Medad, Números 11:25-26. O como algunos seguidores del profeta Samuel 1° Sa.
10:5, 6, 7, 10, 11; 19:20-21. Por otro lado, se mencionan 100 profetas rescatados por Abdías 1°
R. 18:4. También se señalan mujeres profetisas, tal es el caso de María hermana de Moisés,
Débora en la época de los jueces, Hulda en los días de Josías rey de Judá y a la esposa del
profeta Isaías Éx. 15:20; Jue. 4:4; 2° Re. 22:14; Is.8:3. Señalaremos algunos que Las Sagradas
Escrituras menciona como tales.
1. Gad vidente de David. 2° Sm. 24:11.
2. Natán 1° Re. 1:34.
3. Ahías silonita 1° Re. 11:29; 14:18.
4. Jehú hijo de Hanai 1° Re. 16:7.
5. Semaías 2° Cr. 12:5,7.
6. _Iddo 2° Cr. 13:22.
7. Azarías 2° Cr. 15:8.
8. Obed 2° Cr. 28:9.
9. Samuel 2° Cr. 35:8.
10. Elías 1°Re. 18:22.
11. Eliseo 1°Re. 19:6, 2° Re. 3:11.
12. David Hch. 2:29, 30.
3. PROFETAS.
Entendiendo primero esto, que ninguna profecía de la Escritura es de interpretación privada,
porque nunca la profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios
hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo. 2° Pe. 1:20 – 21.
En la entrega anterior pudimos observar, que hubo una diversidad de profetas con oficios
diferentes, es decir, Dios los usó para una tarea especial mientras que estaban en medio de
sus demás profesiones y labores. Algunos profetas como Jeremías y Ezequiel eran sacerdotes,
Moisés y David fueron pastor de ovejas, luego David fue rey, Amós recogía hijos; Débora era
una juez que resolvía los conflictos de los israelitas en época de los jueces. Eliseo era un
agricultor; es decir, la tarea de ser profeta se le añadía al trabajo cotidiano.
Muchos profetas tenían capacidad de redacción, el profeta Natán y el vidente Gad escribieron
crónicas sobre el rey David 1° Cro. 29:29. el profeta Elías escribió una carta de 126 palabras al
rey Joram, 2° Cro. 21:12-15. el profeta Semaias junto al el vidente Iddo, escribieron libros
sobre Roboam. Iddo además escribió historia sobre Abías 2° Cro. 12:15; 13:22; pero de toda
esa cantidad de profetas Dios escogió y mandó a dieciséis de ellos a poner sus mensajes por
escrito para constituir la sección de nuestra Biblia que llamamos genéricamente los libros
proféticos del Antiguo Testamento. Esta profecía escrita, da testimonio de la la soberanía en la
elección de Dios de tales profetas y de la inspiración Divina de sus libros. Comparativamente
como también el Señor lo hizo para plasmar los libros del Nuevo Testamento y lo realiza en la
iglesia para perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación de su
iglesia. Ef. 4:11-12.
El período para escribir estos libros proféticos fue de cuatrocientos años y comenzó
aproximadamente ochocientos años antes de Cristo terminando cuatrocientos años antes de
que Él fuera manifestado en carne. Estos santos hombres de Dios dirigieron sus mensajes al
pueblo de Dios de su época, pero sus escritos tienen muchísima profecía sobre
acontecimientos posteriores, inclusive grandes eventos que están todavía para el futuro.
Además, dejaron lecciones para nuestros tiempos. 2° Pe. 1:19-21; 1° Pe. 1:10-11.
Todo lo que nos es necesario saber acerca de nuestro futuro, Dios ya lo reveló a través de su
Hijo Unigénito y de hombres santos a quienes eligió para escribir las Sagradas Escrituras. Todos
los libros de la Biblia en alguna medida contienen profecías; pero solo los llamados proféticos
hablan todo del futuro, en el Antiguo Testamento podemos encontrar dieciséis libros
proféticos y uno en el Nuevo Testamento uno llamado Apocalipsis.
Dios mediante continuaremos.
Geivan Zambrano
4. PROFETAS.
¿Se complace Jehová tanto en los holocaustos y víctimas, como en que se obedezca a las
palabras de Jehová? Ciertamente el obedecer es mejor que los sacrificios, y el prestar atención
que la grosura de los carneros. 1° S. 15:22.
Para comprender mejor a los profetas que Dios escogió para poner sus mensajes por escrito y
constituir la sección de nuestra Biblia que llamamos genéricamente los libros proféticos del
Antiguo Testamento, es necesario saber qué pasó con la nación de Israel
Después de la muerte del rey Salomón.
Y se enojó Jehová contra Salomón, por cuanto su corazón se había apartado de Jehová Dios de
Israel, que se le había aparecido dos veces, y le había mandado acerca de esto, que no siguiese
a dioses ajenos; mas él no guardó lo que le mandó Jehová. Y dijo Jehová a Salomón: Por cuanto
ha habido esto en ti, y no has guardado mi pacto y mis estatutos que yo te mandé, romperé de
ti el reino, y lo entregaré a tu siervo. Aconteció, pues, en aquel tiempo, que saliendo Jeroboam
de Jerusalén, le encontró en el camino el profeta Ahías silonita, y éste estaba cubierto con una
capa nueva; y estaban ellos dos solos en el campo. Y tomando Ahías la capa nueva que tenía
sobre sí, la rompió en doce pedazos, y dijo a Jeroboam: Toma para ti los diez pedazos; porque
así dijo Jehová Dios de Israel: He aquí que yo rompo el reino de la mano de Salomón, y a ti te
daré diez tribus; 1°Re. 11:9-11, 29-30. Los hechos como se cumplió esta palabra del Señor, se
encuentran registrado en 1° Reyes 12 y 2° Crónicas 10.
Después de la división del reino a las 10 tribus lideradas por Jeroboam se le conoce con el
nombre de Israel, algunos profetas como Oseas emplean el nombre de Efraín, también es
llamado el reino del norte cuya capital fue Samaria; el escritor de 1° de Reyes hizo su énfasis
en este reino, ya que después de la división del reino se comienza a describir inmediatamente
las obras de Jeroboam. Unos 200 años después este reino fue llevado cautivos por el rey
Salmanasar a Asiria 2° Re. 18:9.
Por otro lado Roboam hijo de Salomón se quedó con dos tribus, a saber, Judá y Benjamín,
reino conocido de allí en adelante como Judá, también llamado el reino del sur; su capital fue
Jerusalén y unos 300 más tarde años fueron llevados cautivos por el rey Nabucodonosor a
Babilonia, solo algunos de ellos volvieron bajo Zorobabel, Esdras y Nehemías. En el libro de 2°
Crónicas desde el capítulo 11 se relata sólo las obras de los reyes de Judá.
La importancia de mencionar estas cosas es que hubo profetas que escribieron a Israel, otros a
Judá. Los que escribieron a Judá lo hicieron: antes, durante y después de la cautividad.
Dios mediante continuaremos
Geivan Zambrano.
5. PROFETAS.
Y les dijo: Estas son las palabras que os hablé, estando aún con vosotros: que era necesario
que se cumpliese todo lo que está escrito de mí en la ley de Moisés, en los profetas y en los
salmos. Lc.24:44.
En este versículo el Señor Jesucristo ordenó el Antiguo Testamento en:
1. La ley de Moisés.
2. Los profetas.
3. Los Salmos.
Pero también se resalta que dicha clasificación forma una entidad llamada las Escrituras: Y
comenzando desde Moisés, y siguiendo por todos los profetas, les declaraba en todas las
Escrituras lo que de él decían. Entonces les abrió el entendimiento, para que comprendiesen
las Escrituras. Y se decían el uno al otro: ¿No ardía nuestro corazón en nosotros, mientras nos
hablaba en el camino, y cuando nos abría las Escrituras? Vs. 27, 25 32.
Los libros proféticos, se dividen en dos partes,: Profetas mayores: Isaías, Jeremías, Ezequiel y
Daniel y Profetas menores Oseas, Joel, Amós, Abdías, Jonás, Miqueas, Nahúm, Habacuc,
Sofonías, Hageo, Zacarías y Malaquías. Esta división no se basa en que los que llamamos
mayores son de más importancia o que sus mensajes son de mejor calidad que los llamados
menores, no, se les llama así es por la cantidad de mensajes que los profetas mayores
expusieron en comparación con los profetas menores. Recordemos que el apóstol Pablo dijo:
Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para
instruir en justicia. 2° Tim. 3:16.
Veamos pues como utilizo Dios a estos profetas para plasmar su palabra.
Dirigidos a Israel (reino del norte) antes de su deportación a Asiria: Jonás (profetizó contra
Nínive), Amós y Oseas
Los profetas que ministraron a Judá (reino del sur)
1°. Antes de la deportación a Babilonia: Joel, Isaías, Miqueas, Sofonías, Nahúm, Habacuc y
Jeremías.
2°. Durante el exilio en Babilonia: Daniel, Ezequiel y Abdías.
3°. Después del cautiverio: Hageo, Zacarías y Malaquías con un mensaje para ambos reinos o
toda la nación de Israel.
Dios mediante continuaremos.
Geivan Zambrano.
6. PROFETAS.
Entendiendo primero esto, que ninguna profecía de la Escritura es de interpretación privada,
porque nunca la profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios
hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo. 2° Pe. 1:20 – 21.
En la sección anterior se hizo una clasificación de los 16 profetas que Dios utilizó para plasmar
su palabra y constituir la sección de nuestra Biblia que llamamos genéricamente los libros
proféticos del Antiguo Testamento, ahora, observemos donde se encuentra el contexto
histórico de ellos en las Sagradas Escrituras.
El año quince de Amasías hijo de Joás rey de Judá, comenzó a reinar Jeroboam hijo de Joás
sobre Israel en Samaria; y reinó cuarenta y un años. El restauró los límites de Israel desde la
entrada de Hamat hasta el mar del Arabá, conforme a la palabra de Jehová Dios de Israel, la
cual él había hablado por su siervo Jonás hijo de Amitai, profeta que fue de Gat-hefer. 2°Re.
14:23, 25.
Este es el mismo profeta Jonás que viajó a la ciudad de Nínive Jonás 1:1-2. Notamos que
desarrolló su ministerio profético durante el reinado de Jeroboam hijo de Joás, también
llamado Jeroboam II. Muchos profetas hubo en Israel antes de Jonás, pero ninguno dejo
profecías escritas y que forman parte de la Biblia. Fue en la época de Jeroboam II que Dios
permitió que se comenzará a escribir los libros proféticos que se encuentran en la Biblia.
Hablando de los profetas que escribieron al reino del norte, cotejemos 2° Re. 14:25. con Oseas
1:1 y Amós 1:1. Observamos que Jonás sería el primer libro profético escrito, seguido de los
profetas Oseas y Amós, y que estos tres profetas eran contemporáneos. Luego veremos que
eran coetáneos con otros profetas que escribieron a Judá.
Es aquí en 2° de Reyes que encontramos el contexto histórico de los profetas; 2° Crónicas, sólo
menciona a los reyes de Judá. Hageo y Zacarías debemos ubicarlo en el libro de Esdras
capítulos 5 y 6. El profeta Malaquías predicó en una época cuando no había autoridad en la
nación; ese periodo probablemente es cuando Nehemías fue gobernador de Judá e hizo
algunas reformas y cuando regreso de nuevo a Babilonia.
Dios mediante continuaremos.
Geivan Zambrano.
7. PROFETAS.
Porque no os habéis acercado al monte que se podía palpar, y que ardía en fuego, a la
oscuridad, a las tinieblas y a la tempestad, al sonido de la trompeta, y a la voz que hablaba, la
cual los que la oyeron rogaron que no se les hablase más, porque no podían soportar lo que se
ordenaba: Si aún una bestia tocare el monte, será apedreada, o pasada con dardo; y tan
terrible era lo que se veía, que Moisés dijo: Estoy espantado y temblando; Hb. 12:18-21.
Este era el escenario en el monte de Sinaí cuando Israel iba a recibir la ley, el pueblo se llenó
de susto y por eso Dios promete colocar intermediarios entre Él y el pueblo para comunicarles
su palabra y propósitos Dt. 18:16. Deuteronomio 18:15-22. legisla sobre los profetas y se
destacan tres cosas:
1.° Vs. 9-14 Muestra la manera inapropiada de buscar la voluntad de Dios para la vida.
La tendencia de la naturaleza humana es querer explorar lo desconocido, saber acerca del
futuro. Hay un deseo insaciable de explorar lo misterioso; nos gusta ampliar el conocimiento
en nuevas áreas. No sólo hacemos esto en el espacio, sino también queremos hacerlo en el
tiempo. La memoria nos puede hacer retroceder al pasado, pero no hay un vehículo similar
que nos lleve al futuro, esto hace evidente que el ser humano tiene grandes limitaciones en
cuanto al tiempo y al espacio.
Para poder satisfacer este anhelo insaciable, se levantaron entre los paganos hombres tales
como espiritistas, magos, agoreros, falsos profetas, entre otros; así como también surgieron
diferentes métodos de adivinación. Dios advirtió a Su pueblo en cuanto a estas cosas y
cualquier forma en la que estos paganos ejercen su función porque se relacionan con la
idolatría y son satánicas en su origen y empleo.
2.° Vs. 15-22 Describen la manera apropiada de establecer el conocimiento de Dios y sus
propósitos para su pueblo.
Se promete que habrá en Israel profetas, es decir, Dios levantaría personas en cuya boca
estuvieran las palabras del Señor para su pueblo.
3.° Se promete la venida del Señor como el profeta por excelencia 18:15, 18, 19. Cuya venida
la esperaban los judíos *Mt. 21:11, 46; Mr. 6:15; Lc. 7:17; 13:33; 24:19; Jn. 4:19; 6:14; 7:40;
9:17; Hch. 3:22.*
El Señor Jesucristo dijo una y otra vez que las palabras que hablaba no eran Suyas, sino del
Padre. Jn. 10:14. y muchas veces dijo que Él no vino para hacer Su propia voluntad, sino para
hacer la voluntad del Padre. Jn. 5:30; 6:38. Y al terminar su ministerio terrenal, oró en aquella
gran oración sacerdotal diciendo: Yo te he glorificado en la tierra, he acabado la obra que me
diste que hiciese. Ahora han conocido que todas las cosas que me has dado, proceden de ti;
porque las palabras que me diste, les he dado; y ellos las recibieron,Jn. 17:4, 7, 8. Habló todo lo
que el Padre quería que dijera Es como si él estuviera dando un reporte al Padre.
Sólo Dios puede hablar sobre el futuro, esto le pertenece a Él. Ése es el carácter singular de la
Biblia; viene desde el pasado y llega más allá del presente; la prueba más grande de que la
Biblia es la Palabra de Dios, es que una gran porción de esa profecía ya se ha cumplido, Dios ha
registrado profecías en cuanto a ciudades y naciones, grandes imperios mundiales,
acontecimientos y que aparecerían falsos profetas, tal como han surgido en la actualidad que
quieren tener el estado legal y la posición que perteneció a los verdaderos profetas; pero, en
este momento Dios no diría nada que ya haya dicho en su palabra.
Dios mediante continuaremos.
Geivan Zambrano.
8. PROFETAS.
Porque no hará nada Jehová el Señor, sin que revele su secreto a sus siervos los profetas.
Amós 3:7.
Hubo falsos profetas entre el pueblo. 2° Pe. 2:1. Tenemos cuatro cosas que tienen que ver con
los profetas que Dios utilizó para plasmar su palabra y constituir la sección de nuestra Biblia
que llamamos genéricamente los 16 libros proféticos del Antiguo Testamento:
1°. El Periodo de los profetas: Fue de 400 años, comenzando con el profeta Jonás 2°Re.
14:23, 25. y terminando con el profeta Malaquías unos 400 años antes de que Dios se
manifestara en carne por medio de su Hijo unigénito.
2°. El Propósito de los profetas: Dios no envió exclusivamente a uno de sus mensajeros, sino
a varios de ellos, los que él en su soberana gracia escogió para formar el canon sagrado, estos
santos hombres de Dios no menguaron por la fatiga y con gran esfuerzo velaron y madrugaron
para exponer y revelar los planes secretos del Señor, sus consejos, admoniciones y
advertencias. _2° Reyes 17:13 - 23; Amós 3:7._
3°. La Prueba de los profetas: En el antiguo testamento se encuentran 3 criterios que
identificaba a un profeta:
3.1.° Cuando no se cumplía o se hiciere lo que había dicho. Dt. 18:21 – 22.
3.2.° El Contenido de su mensaje. Dt. 13:1 – 5; Jer. 28:9.
3.3.° El modo de vida debía ser santo. Jer. 23: 11 – 17; Miq. 3:5 – 7. Es parte de nuestro
deber tener un criterio sano y correcto para probar la palabra que oímos, y saber cuándo el
Señor nos habla. Todo lo que se oponga al sentido claro de las Sagradas Escrituras o lo que de
favor o estímulo al pecado o libertinaje, a la avaricia o mercadería, cundo no se quiera sufrir
la sana doctrina, podemos estar seguros que es algo que Dios no nos ha hablado. Lea 2° Tim.
4:1 – 4.
4.° La Palabra de los profetas: 2° Pe. 1:19 – 21.
El Espíritu Santo inspiró a hombres santos con distintas culturas, personalidades, caracteres y
en diferentes tiempos para hablar y escribir. Él los asistió, los dirigió para entregar de forma
verbal y escrita, con toda claridad lo que ellos habían recibido de Él.
Todo el poder y toda la propiedad de las palabras y expresiones de ellos vienen de Dios, y
están plasmadas en las Escrituras, a saber La Biblia, a ella debemos tratarla como las palabras
del Dios, y estimarla con reverencia como libro escrito por hombres santos enseñados por el
Espíritu Santo.
Continuaremos Dios mediante
Geivan Zambrano.

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