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SINTESIS: VITALIDAD Y CRECIMIENTO PERSONAL

La vitalidad podemos definirla como la energía y motivación que nos mantiene no


solo vivos, sino en constante crecimiento, desarrollo y actualización de nuestras
potencialidades. Una persona vital es la que crece, que cambia, que está en un
proceso de maduración, que aprende, que en consciente y está deseosa de dicho
crecimiento, cambio y aprendizaje y que no solo lo acepta sino lo ve necesaria y lo
fomenta viéndolo si acaso como el reto más importante al que haya podido
enfrentarse en su vida.

Conocimiento de si mismo

Conciencia y conocimiento de mi mismo y de mis necesidades de crecimiento y


trascendencia. Son varios los cuestionamientos que deben hacerse por una
persona vital que en la forma sistemática se este retroalimentando para
mantenerse siempre alerta, despierta consciente y conocedora de sí misma, de su
contexto y de sus necesidades de crecimiento en todos los planos.

Energía vital y salud

Este punto se refiere a que una persona debe poseer buena salud tanto física
como espiritual para rendir al ciento por ciento. El nivel de energía está basado en
un estado de buena salud que permita un adecuado funcionamiento del
organismo. “mente sana en cuerpo sano”.

Actitud de aprendizaje

La persona que se lanza a la tarea de ser vital es aquella que trata de aprender de
cualquier experiencia. “nunca acabare de aprender” es la frase que se dice una
persona en crecimiento a si mismo.

Capacidad y actitud para el cambio

El cambio es equivalente a la vida, la vida es cambio y el cambiar es signo de


vitalidad. La persona vital es aquella que tiene la capacidad de vivir y procurarse
nuevas experiencias, nuevos valores, nuevos trabajos, nuevos estilos y formas de
vida congruentes con sus deseos y posibilidades.

El sentido de logro, vitalidad y trabajo

El hombre tiene dos caminos de trascendencia: el trabajo y la relación de amor,


una persona siente vitalidad cuando logra algún objetivo el sentido de logro y el
trabajo son los determinantes más importantes en la persona vital y la mayoría de
estos está relacionada con el trabajo.
Planeación de vida y carrera

Una condición para la vitalidad de todo individuo maduro es la capacidad de


planificar su vida y carrera, es fundamental el señalamiento de objetivos vitales y
profesionales que marquen los pasos de crecimiento de una persona, es dar un
paso más allá de los sueños.

Crecimiento personal

Este es el proceso de asimilación e integración de nuevas experiencias e


información, que hacen cambiar la conducta, la capacidad, las concepciones de sí
mismo y del mundo. Ser responsable y auto dirigirse es necesario para un
crecimiento personal afectivo.

Obsolescencia y vejez

La obsolescencia implica que la persona o la organización han quedado fuera dl


contexto en relación a su medio ambiente, podría decirse que es la pérdida de
valor por que se han ido disminuyendo las capacidades o porque ya no es útil.

Equilibrio vital

El reto más importante del ser humano es el lograr y mantener un equilibrio vital
que le permita alcanzar su plenitud, el máximo de su desarrollo físico, emocional y
espiritual.

Vitalidad organizacional

Los valores humano sociales y económico productivos acortan sus distancias y en


la moderna filosofía administrativa se conciben no solo como interdependientes y
complementarios, si no como dimensiones de un mismo fenómeno: el desarrollo
del hombre y la construcción de una sociedad que promueva su crecimiento y
realización. La vitalidad organizacional tiene su enfoque fundamental en el
mejoramiento de las organizaciones mediante un sistema total de cambio
planeado, pero no una respuesta reactiva si no una respuesta proactiva.

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