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REVISTA OPER A, VOLÚMEN 4 Nº4

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el conflicto armado interno,


los cultivos ilícitos
y la gobernabilidad local
armando borrero mansilla *

INTRODUCCIÓN De manera más precisa, las conse-


cuencias del conflicto armado sobre go-
La afectación de la vida política munici- bernabilidad y desarrollo democrático se
pal por causa de la violencia, y especial- pueden tipificar de la siguiente manera:
mente la derivada del conflicto armado
interno es intensa. El desarrollo de la de- a. Las autoridades locales son condiciona-
mocracia local no sólo se ve detenido sino das por una organización ilegal y puestas
en franca regresión cuando los municipios a su servicio. La definición de preferen-
son objetivos de las disputas entre organi- cias y la toma de decisiones pasa a las jefa-
zaciones armadas ilegales y entre éstas y el turas de la guerrilla o de las autodefensas,
Estado o cuando predomina sin mayor las cuales ejercen la capacidad de definir
oposición cualquiera distinto del Estado, preferencias y decidir, de manera militar
sean las guerrillas o sean las autodefensas. y arbitraria, según sus intereses de con-
La presencia de organizaciones armadas trol territorial y poblacional.
inhibe la participación ciudadana, tanto b. Aunque no siempre las organizaciones
política como social, rompe las solidari- armadas pueden estar opuestas a cierto
dades de la comunidad y afecta negativa- tipo de movimientos sociales (especial-
mente la gobernabilidad en las localidades. mente la guerrilla cuando se trata de

Este artículo es posible gracias al apoyo de la oficina de Democracia de la Agencia de los Estados Unidos
para el Desarrollo Internacional en Colombia (USAID / Colombia). Las opiniones presentadas aquí son de la
exclusividad del autor y no reflejan necesariamente los puntos de vista de la Agencia de los Estados Unidos
para el Desarrollo Internacional (USAID).
*Sociólogo de la Universidad Nacional de Colombia, con especialización en derecho constitucional de la
Universidad del Externado y maestría en ciencia política de la Universidad de los Andes. Ha sido director
del Sistema de Prevención de Violaciones Masivas de los Derechos Humanos de la Defensoría del Pueblo
(2001-2002) y consejero presidencial para la Defensa y Seguridad Nacional (1994-1996). Ha sido consul-
tor de la Fundación Buen Gobierno, GTZ, Federación Colombiana de Municipios, PNUD, FESCOL y
USAID/ARD Colombia.

Capítulo 1
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enfrentamientos sociedad-Estado) los do porque provocan represalias de los


pobladores se inhiben, por miedo, de in- oponentes. La situación de estar “entre
tentar acciones colectivas por iniciativa dos fuegos” (a veces tres) solo permite el
propia. Prima la estrategia del bajo per- desarrollo de estrategias de superviven-
fil para evitar visibilidad social. Los mo- cia para eludir compromisos notorios. Se
vimientos sociales, cuando se dan, son vuelve peligroso manifestar preferencias
por lo general promovidos por la guerri- políticas, participar en organizaciones,
lla (ocasionalmente por las autodefen- promover acciones colectivas, en fin,
sas, como en el sur de Bolívar, con el fin ponerse de parte de algo o alguien.
de impedir una zona de distensión para
el ELN) y dirigidos a realizar acciones En cualquiera de estas situaciones, la
congruentes con los fines y objetivos del democracia local se ve afectada fuertemen-
promotor (bloqueo de vías, marchas, te. Falta, o no funcionan bien, las institu-
tomas de instalaciones). La comunidad ciones de un Estado de derecho que son
ve recortada su posibilidad de decidir y un requisito sine qua non, para la existen-
de obrar con arreglo a intereses propios. cia de la democracia: ni leyes impersona-
c. Las autoridades locales son expulsadas les, ni tolerancia para la diversidad de
de los municipios y con esto se pierde posiciones, ni justicia imparcial, ni des-
cualquier capacidad de integración so- concentración del poder.
cial que haya tenido el Estado. Las ins- Los movimientos democratizadores
tituciones pierden presencia y el poder de lo local en los años 80, los que se refle-
queda en manos de grupos que lo ejer- jaron en los nuevos regímenes departa-
cen con una lógica puramente militar mentales y municipales, en la elección de
por necesidades del conflicto mismo. alcaldes y en la consulta popular, entre
Todo se subordina a las necesidades de otras reformas que fueron integradas y
información, de abastecimiento, de re- ampliadas en la Constitución Política de
clutamiento y seguridad que tenga el 1991, han sufrido gravemente en su apli-
grupo armado en control. cación práctica. El conflicto interno tiene
d. Cuando la situación de un municipio un efecto negativo sobre la descentraliza-
es inestable en términos de control por ción y sobre el gasto público y, por tanto,
parte del Estado y de organizaciones sobre las transferencias de la nación a los
armadas ilegales, el miedo rompe las po- entes territoriales, sobre el liderazgo de los
sibilidades de organización y de parti- funcionarios regionales y locales en mate-
cipación social. Si no hay un solo poder ria de seguridad, sobre el manejo de las
en control, los pobladores temen ser regalías y sobre la capacidad de negocia-
identificados como simpatizantes de ción de las autoridades locales frente a los
cualquier grupo o como fieles al Esta- otros niveles territoriales.
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Uno de los temas más afectados ha 1. EL CONFLICTO ARMADO:


sido el del ordenamiento territorial. La EVOLUCIÓN Y GEOGRAFÍA
Constitución del 91 es ambigua en la ma-
teria, permite varias lecturas del tema y La evolución del conflicto armado co-
en los años de su vigencia no ha sido posi- lombiano en los últimos veinte años ha
ble, tras nueve proyectos de ley orgánica significado una transformación de las
de ordenamiento territorial, aprobar ese condiciones demográficas y de las con-
estatuto indispensable. Entre tanto se han diciones de vida en el campo. En un prin-
aprobado siete leyes ordinarias sobre te- cipio, durante las décadas de los años 60
mas relacionados con el desarrollo terri- y 70, la guerrilla creció lentamente en un
torial que conforman una legislación de nicho social que tenía como característi-
aspectos parciales sin la coherencia que ca la colonización y la marginalidad res-
podría darle la ley orgánica. La exacerba- pecto de las zonas más pobladas y mejor
ción del conflicto en la década pasada no integradas al mercado nacional. El creci-
solo le resta interés y aplaza el debate so- miento mayor de la guerrilla comenzó a
bre ordenamiento territorial, sino que re- finales de los años setenta y se aceleró en
fuerza las tendencias centralizadoras que la década siguiente en medio de las polí-
siempre aparecen en un Estado en guerra. ticas contradictorias del Estado en mate-
No hay interés en el nivel central por la ria de seguridad y de la inserción plena
promoción del debate sobre la cuestión te- de Colombia en el negocio del narcotrá-
rritorial y además el problema fiscal, al cual fico. Lo primero, el Estado osciló entre
contribuye el gasto en seguridad, refuerza la represión, extendida a los movimien-
la tendencia al control central: el manejo tos populares y de izquierda, y la nego-
del déficit implica la búsqueda de instru- ciación. Los gobiernos de Turbay Ayala
mentos para controlar las transferencias a (1978-1982) y de Belisario Betancur
las regiones y municipios. (1982-1986) enmarcan el período. Lo se-
En todos los sentidos, el conflicto gundo, el negocio de las drogas ilícitas
interno se interpone entre las necesidades encontró en Colombia un gran número
inmediatas del Estado central y las de más de ventajas comparativas, tanto para los
largo plazo, relacionadas con la democra- cultivos de coca (y posteriormente de
cia local. Ésta se suma a todas las tareas que amapola) como para tráfico de las sus-
en lo social, lo económico y lo político, tie- tancias procesadas a Norte América, prin-
ne aplazadas la sociedad colombiana. cipalmente, y a Europa.
La etapa subsiguiente a la tregua fir-
mada con el gobierno Betancur, fue de ex-
pansión de la guerrilla en general y
también de redefinición y depuración de

Capítulo 1
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los diversos grupos: un proceso de ajuste en el norte del país, se han extendido por
determinó los protagonistas de la década todo el territorio nacional.
siguiente. De la lucha armada salieron el Las FARC comenzaron su expansión
M-19, el ELP y algunas guerrillas meno- por los frentes de colonización del Meta,
res como el Quintín Lame y el PRT,la ma- Caquetá, Guaviare y Putumayo. También
yor parte entre 1989 y 1991. Más fueron al norte hacia la Sierra Nevada de
adelante, hasta 1994, se concretó la rein- Santa Marta. En los años 70 su presencia
serción del PRT y de una parte del ELN territorial gira alrededor del río Magda-
(la CRS, Corriente de Revolución Socia- lena y de la vertiente suroriental de la cor-
lista). En la lucha quedaron las FARC, el dillera oriental (piedemonte llanero y
ELN y una fracción del EPL que se apar- amazónico). El ELN se extendió hacia el
tó del proceso de paz. En la actualidad occidente del Magdalena (sur de Bolívar
las FARC son el gran protagonista y so- y bajo Cauca antioqueño) hizo de la Se-
brevive, debilitado, el ELN. rranía de San Lucas su epicentro y buscó
La etapa inicial de estas guerrillas fue conexión con el Caribe por los Montes
diferente. Las FARC tienen un perfil níti- de María. Hacia el sur, se extendió a lo
damente campesino, en tanto el ELN na- largo de la frontera con Venezuela desde
ció del encuentro entre jóvenes de clase Cesar hasta Arauca y por el sur de Antio-
media, muchos de ellos universitarios, con quia hacia Caldas, Valle, Cauca y Nari-
bases campesinas y sectores obreros, espe- ño, con alguna presencia en Tolima,
cialmente del petróleo. Los primeros, hun- Huila, Cundinamarca y Boyacá. Entre el
den sus raíces en las luchas agrarias de los Cesar, los santanderes y Arauca consoli-
años 20 y 30 en el Tolima, Huila, Cauca y da sus bases en pos de las rentas de su
Cundinamarca. Los segundos son hijos de principal fuente de financiación, el sec-
la radicalización juvenil inducida por la tor energético (petróleo, carbón).
revolución cubana y de las luchas de pe- No cabe aquí una reseña de todo el
troleros y colonos en el Magdalena Me- proceso de expansión geográfico, pero si
dio. La expansión de las FARC parte de su vale la pena establecer cuáles son, en la ac-
nicho inicial en las montañas de las cordi- tualidad, las áreas más disputadas para pre-
lleras central y oriental a lado y lado del ver las presiones mayores sobre regiones y
Alto Magdalena y la del ELN desde su zona municipios. Baste agregar que hoy en día,
fundacional en el Magdalena Medio, en- todo el territorio nacional está afectado,
tre el Opón y la montaña santandereana. desde luego con intensidades variables: en
Las autodefensas, si se dejan de lado algunas regiones disminuye la intensidad
algunas experiencias limitadas, nacieron en (Magdalena Medio, por ejemplo) y en otras
el Magdalena Medio y se reprodujeron en va en aumento como en Arauca, norte de
Urabá y Córdoba. Luego de desarrollarse Antioquia y zócalo del Pacífico.
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2. LAS DISPUTAS REGIONALES ELN. La disputa más fiera se dio entre las
ÁREAS DE OBTENCIÓN DE FARC y el EPL, que en la época de la divi-
RECURSOS Y CORREDORES sión del socialismo en el mundo, apare-
ESTRATÉGICOS cían como pro-Unión Soviética el primero
y pro-China el segundo. La disputa agria
Las disputas entre actores armados ilega- por las posiciones ideológicas divergentes
les del conflicto, guerrillas y autodefensas se tradujo en pugnas por el control de los
por recursos, y las que sostienen contra el sindicatos bananeros y en general del te-
Estado por corredores estratégicos y con- rritorio y la población. La bonanza bana-
tra la política oficial de erradicación de nera y las comunicaciones marítimas y
cultivos ilícitos, dan origen a un cuadro terrestres con Panamá, Centro América en
complejo de la geoestrategia de la guerra general y el Caribe, eran el atractivo de la
colombiana. En este trabajo se van a con- región: fuentes de recursos monetarios,
siderar las siguientes líneas de batalla en- población organizable, rutas de contraban-
tre unos y otros: do para todo tipo de elementos (armas,
municiones, equipos) y lugar de salida de
2.1. La región de Urabá: los frentes del drogas prohibidas. Todo esto la hizo una
Bajo Atrato y de las estribaciones del zona de conflicto con índices muy altos
Nudo de Paramillo. de violencia. La rápida expansión de la
2.2. El zócalo del Pacífico y la cordillera población favoreció todos los factores de
occidental. enfrentamiento. Desmovilizado el EPL,
2.3. El Putumayo. Las fronteras con Ecua- hicieron su aparición las autodefensas. En
dor y Perú. la segunda mitad de los años 90, las FARC
2.4. El corredor cordillera oriental - Gua- fueron expulsadas de la zona bananera de
viare - Fronteras con Venezuela y Urabá. Desde entonces la pugna de éstas
Brasil. por regresar y la contención por parte del
2.5. Arauca y Casanare. Estado y de las autodefensas por su parte,
2.6. El Catatumbo. han convertido el perímetro exterior de la
2.7. El río Magdalena y la región del Mag- zona en línea de batalla interna.
dalena Medio. Una línea imaginaria trazada así: Ba-
hía Solano, Vigía del Fuerte, Dabeiba, Pe-
2.1. La región de Urabá que, ltuango, Tarazá y Cáceres, define el
contorno. En el Chocó, al occidente, el
Urabá fue disputado durante muchos años intento de las FARC se realiza por el río
por tres guerrillas de orientación diferen- Atrato de sur a norte y desde la parte nor-
te, las FARC, el EPL (Ejército Popular de te de la costa Pacífica (Juradó) hacia el
Liberación, desmovilizado en 1991) y el Urabá. El Estado mantiene fuerzas que

Capítulo 1
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controlan el Urabá antioqueño y parte del có tienen en común, la posibilidad de ac-


chocoano hasta el Atrato - Truandó. Las ceder a la zona bananera de Urabá, bien
autodefensas tratan de controlar las riberas sea desde la costa pacífica por los ríos Sala-
del Atrato hasta Quibdó para cerrar el paso quí y Truandó que desembocan en el Atra-
de las FARC. En la parte centro - sur (Da- to o por el Atrato desde el occidente de
beiba) la disputa es por el paso del cañón Antioquia (alrededor de Vigía del Fuerte).
de La Llorona que da acceso de la zona La zona costera desde Cabo Corrien-
montañosa de Antioquia a la llanura coste- tes hasta Juradó en la frontera con Pana-
ra de Urabá. Allí han chocado repetidas má, ha cobrado mucha importancia para
veces las FARC y el Ejército. También hay el movimiento de drogas y armas. La dis-
actividad de autodefensas, las que han lle- puta es muy intensa, con ventaja aparente
gado a sitiar y ocupar el poblado de Da- para las autodefensas. Las FARC tienen pre-
beiba. Hacia el oriente, en Peque e sencia en el municipio de Juradó, pero las
ltuango, se han dado, en los últimos me- AUC están ya en Cupica y son dominantes
ses, las batallas campales más fuertes en- hacia el sur (Nabugá, Bahía Solano, El Va-
tre autodefensas y FARC. Más al occidente, lle, Jurubidá, Nuquí) de tal manera que
desde Tarazá y Cáceres, las FARC han in- disponen de más puertos para los intercam-
tentado reforzar su presencia en el sur de bios y de mejores rutas hacia el interior del
Córdoba para desde allí, por la serranía país, al tiempo que pueden intentar el ta-
de Abibe, flanquear el fortín de las auto- ponamiento de las rutas que van desde Ju-
defensas en Paramillo y llegar a Urabá. Los radó a Urabá o hacia el sur del Pacífico.
intentos del año 2001 culminaron en un Desde Cabo Corrientes hasta el Ecua-
fuerte enfrentamiento de las FARC con el dor, la disputa territorial tiende a intensifi-
Ejército en Puerto Libertador, donde las carse, sobre todo donde hay ríos navegables.
guerrillas sufrieron un revés duro. Por esta razón, la región al sur de Buena-
ventura (donde la llanura Pacífica es más
2.2. El zócalo del Pacífico ancha y, por tanto los ríos son más largos y
y la cordillera occidental discurren más lentamente que en el norte
de la costa) se ha convertido en los últi-
La costa Pacífica en toda su extensión, des- mos tres años en una frontera de confron-
de Ecuador hasta Panamá, se ha converti- tación. Desde el Naya hasta el Patía se
do en otra zona de disputa importante. lucha por los pasos de la cordillera occi-
La parte más al norte, junto a Panamá, dental y por las desembocaduras de los
participa de la disputa por el Urabá, lo ríos. Los puntos más álgidos están alrede-
mismo que el Atrato Medio, por lo me- dor de Barbacoas en el Patía y en el tramo
nos desde Quibdó y hacia el norte hasta El Tambo - El Bordo - Mercaderes (Cauca)
el golfo de Urabá. Estas regiones del Cho- y los municipios vecinos del norte de Nari-
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ño (Junín, Rosario, La Cruz, San Pablo y ses son importantes como fuentes de ma-
La Unión). Están en juego no sólo los co- teriales: explosivos y armas desde Ecuador
rredores de comunicación con el océano, y municiones, sobre todo para fusil, des-
sino un potencial grande de cultivos ilíci- de el Perú. El mayor control de la Armada
tos en zonas propicias para su desarrollo. Nacional en aguas del Putumayo y la den-
sificación de bases de patrullaje del Ejér-
2.3. El Putumayo. Las fronteras cito, complica las actividades de
con Ecuador y Perú contrabando de los insurgentes.

La región del Putumayo fue, durante los 2.4. El corredor oriental.


años noventa, la más dinámica de las zo- El papel del río Guaviare
nas cocaleras. Superó al Guaviare que
tuvo la primacía en los ochenta y se con- El río Guaviare tiene la particularidad de
virtió en área clave para las finanzas de conectar la zona histórica de las FARC (ca-
las FARC. Más de 50.000 hectáreas sem- beceras de los ríos Duda, Ariari y Guaya-
bradas de coca y una ausencia casi total bero) con la frontera venezolana. Las
del Estado en las zonas rurales hicieron condiciones de navegabilidad y su longi-
que dos frentes de las FARC, presentes tud lo hacen una vía importante para el
en la región, fueran las estrellas del se- contrabando hacia y desde Venezuela y
cretariado como aportantes de dinero Brasil. Barrancominas entre el Vichada y
para la organización. En los últimos tres Guainía, era un centro de intercambio de
años, la situación ha cambiado: el Esta- gran interés para las FARC. La operación
do se ha fortalecido y hace presencia mi- “Gato Negro” del Ejército en el año 2000,
litar con la Brigada 24, el apostadero de recordada por la captura del capo brasile-
Puerto Asís y la base de Tres Esquinas ño “Fernandinho”, fue un golpe de tal
(sede de la primera brigada antinarcóti- magnitud para las FARC que para recupe-
cos y cabeza del mayor esfuerzo de fumi- rar esta localidad, reunieron la mayor fuer-
gación adelantado en el país) El conflicto za que haya movilizado las FARC en su
se complicó también por la llegada de historia (se calcula en 1.100 hombres)
autodefensas. Este actor ilegal se hizo mandada por uno de los comandantes más
fuerte alrededor de Mocoa y hacia la fron- reputados de la guerrilla (alias Urías) quien
tera con el Cauca (alrededor de Curillo) murió en ese intento. La operación 7 de
tiene presencia en Puerto Asís y trata de agosto del Ejército, impidió el avance ha-
copar la zona de La Hormiga. cia Barrancominas y contribuyó a limitar
En el Putumayo se da otro interés, el uso de una vía estratégica para los ne-
además de la coca, y es el control de las gocios del Bloque Sur de las FARC.
fronteras con Ecuador y Perú. Ambos paí-

Capítulo 1
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2.5. Arauca y Casanare Río de Oro en el norte de la región, hasta


Puerto Santander en el límite sur del Ca-
Otra región importante para la financia- tatumbo junto a los valles de Cúcuta. Ex-
ción de la guerrilla es Arauca - Casanare. traoficialmente se habla de 35.000 o más
El ELN inauguró la extorsión a las petro- hectáreas de coca en la región.
leras y las FARC siguió el ejemplo años Las ventajas comparativas del Cata-
después. Además, hay cultivos de coca, tumbo para la producción de cocaína son
aunque no tan grandes como en el sur, y notables. Los insumos básicos para la pas-
ganadería. En los años noventa, el Ejército ta de coca son más baratos en Venezuela
creó las brigadas 16 y 18 en Casanare la (gasolina y cemento), se contrabandean
primera y en Arauca, la segunda. En el año intensamente y, además, en el Norte de
2001, las autodefensas que ya eran fuertes Santander abundan las calizas y la produc-
en Casanare, comenzaron su penetración ción artesanal de cal. En el sur del país, en
en Arauca, a lo largo de la línea Tame - cambio, se depende del cemento nacio-
Puerto Rondón - Cravo Norte, y al parecer nal. El lavado de dólares se facilita en la
se preparan para avanzar sobre una línea frontera y también el transporte de la dro-
paralela a la mencionada, entre Arauca - ga por la región venezolana de El Zulia.
Arauquita - Saravena. Esto significa la dis- La disputa por el Catatumbo ha sido in-
puta de otra zona productora de recursos y tensa en los últimos años. Desde 1995 las
la dificultad para los intercambios en la autodefensas se enfrentaron a la guerrilla,
frontera colombo -venezolana. primero al ELN y luego, cuando éste fue
desplazado por las FARC (a veces de mane-
2.6. La región del Catatumbo ra violenta) a las mismas FARC. El Estado
ha aumentado su presencia, sobre todo en
El Catatumbo tiene condiciones ideales Tibú, en La Gabarra, en los campamentos
para desarrollarse como área cocalera, cen- petroleros de la región y a lo largo del oleo-
tro de narcotráfico y de actividades de toda ducto Caño Limón - Coveñas.
suerte de grupos armados. Por una parte, La tendencia de la disputa actual se
es zona de colonización reciente y, por dirige hacia la provincia de Ocaña y pare-
otra, zona de frontera internacional difí- ce ser que las autodefensas buscan con-
cil de controlar por tratarse de una llanu- trolar los accesos al Magdalena Medio para
ra abierta. Como zona cocalera, ha tenido encontrarse con los grupos de las AUC que
un desarrollo rapidísimo e iba camino de dominan el sur del Cesar y completar así
ser otro Putumayo. En 1994 se detecta- la tenaza sobre la serranía de San Lucas en
ron unas 350 hectáreas de coca y para el el sur de Bolívar. Por otra parte, las auto-
año 2000 el Estado tenía como cifra ofi- defensas dominan ya el corredor Cúcuta -
cial 9.000 hectáreas, distribuidas entre el Puerto Santander y las áreas marginales
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urbanas de la conurbación Cúcuta - El y sur de Bolívar) se da una disputa inten-


Zulia - Los Patios - Villa Rosario. La gue- sa entre autodefensas, FARC y ELN. El área
rrilla resiste en el norte del Catatumbo, urbana de Barrancabermeja, antes domi-
en la provincia de Ocaña y en la zona ca- nada por el ELN, fue copada en el 2001
fetera del Norte de Santander, pero estas por las autodefensas. Otra línea de dispu-
son las áreas más deprimidas económica- ta se da hacia el oriente de la misma ciu-
mente del Departamento. Un indicador dad en la ruta hacia Bucaramanga y entre
de la situación que merece una evaluación ésta y la región de Ocaña en el Norte de
cuidadosa, es la disminución de los aten- Santander con ventaja aparente para las
tados al oleoducto caño Limón - Coveñas autodefensas. El Ejército ha logrado con-
en los últimos meses. trolar la zona montañosa de Santander
(vertiente occidental) en mejor forma que
2.7. El Magdalena Medio en el pasado (San Vicente de Chucurí,
Sabana de Torres).
El Magdalena Medio fue la cuna del ELN Finalmente, la subregión del sur de
y de las autodefensas. Allí se implantó tam- Bolívar, zona aurífera y también de pro-
bién el frente 4 de las FARC en los años ducción de coca, está en disputa intensa
setenta y al grado de descomposición su- entre las autodefensas y las guerrillas de
frida por este grupo se atribuye al naci- las FARC y el ELN. Esta subregión tiene
miento de las autodefensas de Puerto otra importancia: si las autodefensas logran
Boyacá, posteriormente influidas por el establecer un pasillo continuo a través de
narcotráfico. Este último le dio dinámica la serranía de San Lucas, habrán consegui-
a la violencia en la zona durante los años do una presencia continua desde el Pacífi-
ochenta. En el gobierno Barco (86-90) se co hasta la frontera con Venezuela. En otras
decidió que el Magdalena Medio era la palabras, aislar la Costa para dificultar el
región más estratégica del conflicto inter- contacto entre los frentes guerrilleros del
no y con la creación de la Brigada XIV, norte y los del centro y sur del país.
orgánica de la V División del Ejército, se
logró la mayor densidad de tropas en una 3. TENDENCIAS DEL CONFLICTO:
región del país y se mejoró el control esta- FACTORES FAVORECEDORES
tal desde La Dorada hasta Puerto Berrío y DE LA EXPANSIÓN
el sur de Barrancabermeja.
En la actualidad, la guerrilla resiste en En el punto anterior se hizo énfasis en lo
el oriente antioqueño, norte de Caldas y estratégico-regional como una derivación
norte del Tolima. La llanura se ha pacifi- de la búsqueda de rentas por parte de los
cado en términos relativos y al norte de actores armados y de necesidades milita-
Barrancabermeja (Yondó, Puerto Wilches res, bien sea de protección de retaguar-

Capítulo 1
294

dias o de necesidades de movilidad. En • Latifundio tradicional consolidado:


este punto se hará énfasis en las condi- Bolívar, Sucre, Córdoba, Cesar, Mag-
ciones que favorecen la expansión de los dalena, con presencia dominante de
actores armados de uno u otro signo. El para-militares y en menor escala del
Informe de Desarrollo Humano de las ELN;
Naciones Unidas, hace, en su capítulo se- • Colonización “histórica” del pie de
gundo, una descripción de la expansión monte de la Cordillera Oriental y el
regional del conflicto. La intención es de- Magdalena medio, que constituyeron
finida como más ilustrativa que estadís- las zonas de origen de las FARC;
tica por cuanto no es fácil precisar el • Por cabildos de autoridad tradicional
momento en el cual se inicia el conflicto en resguardos de propiedad comuni-
en una zona particular y, además, los lí- taria, con presencia de guerrillas. Co-
mites regionales son borrosos y la movi- lonización reciente (los 70, los 80, los
lidad geográfica es connatural a los 90) en disputa entre guerrillas y para-
actores armados. militares, localizada i) en casi todos los
Para reseñar los factores que favore- pie de monte de las cordilleras (Ura-
cen la presencia y permanencia de organi- bá, en el sur de Córdoba, serranía de
zaciones armadas, el estudio mencionado San Lucas en el sur de Bolívar, Cata-
destaca cómo una región es más propen- tumbo en Norte de Santander, el Sa-
sa a albergar estos grupos, según su for- rare en Arauca, medio y bajo
ma de organización económica (la cual Putumayo, bajo Caquetá, y región del
define las fuerzas sociales principales) y Patía en Nariño); ii) en la Sierra Neva-
el tipo, extensión e intensidad de los con- da de Santa Marta, y iii) en las regio-
flictos sociales asociados con esa estruc- nes de expansión de la frontera agraria
tura económica. Textualmente, el hacia el oriente, como Guaviare, Guai-
informe presenta las siguientes tipologías: nía y Vichada.
• Latifundio campesino en descomposición
a. “Forma de organización económica. A (Boyacá, Cundinamarca, Nariño, eje ca-
partir de la literatura, tan abundante fetero), con presencia tardía de las Farc,
como dispareja, sobre conflicto y re- seguida luego por los paramilitares.
gión, así como de las visitas y estudios • Minifundio indígena típico del Cauca,
preparados para este Informe, se pro- regido de las Farc y el ELN y una más
pone una tipología de siete formas de reciente incursión de paramilitares.
organización económica donde tienden • Agricultura moderna de plantación (Va-
a hacer presencia los grupos armados. lle, Tolima) con incursiones irregulares
De modo por demás esquemático, di- de las Farc y del ELN, y respuestas de
chos tipos serían: los paramilitares.
295

• Centro urbano mayor -particularmen- cultural, equilibrio ambiental, etc.).


te en comunas o barrios periféricos • Régimen laboral en zonas rurales (con-
donde existen pandillas- como en los tratos de “plante”, de aparcería, etc.) o
casos de Medellín, Cúcuta, Bucara- en industrias de enclave (petróleo, pal-
manga, Cali o Bogotá, donde las Farc ma de aceite, etc.).
o el ELN tienen milicias y donde los • Acceso al aparato y los recursos del Es-
paramilitares penetran rápidamente. tado en regiones periféricas (puestos de
trabajo, regalías y transferencias, casi
b. Conflicto social predominante. Tanto siempre mechadas por clientelismos y
Las guerrillas como los paramilitares gamonalismos).
dicen luchar en interés de ciertos esta- • Ubicación y radio de beneficios de
mentos o pobladores de la región. Y grandes obras de infraestructura (por
aunque cabe discutir si en efecto lo ejemplo, hidroeléctricas en el oriente
hacen o hasta dónde lo hacen, de si antioqueño).
“representan” o cómo “representan” al • Servicios públicos en ciudades-bonan-
campesino o al hacendado, parece cla- za de la “Otra Colombia” (Apartadó,
ro que los grupos armados se instalan Yopal, Saravena, entre otros).
y actúan con más intensidad en zonas • Distribución (de rentas extraordinarias
o en momentos de aguda polarización derivadas de recursos mineros (petró-
social. Así, al revisar la historia y estu- leo, carbón, oro, esmeraldas) o de bo-
diar las regiones, se encuentran ciertas nanzas agrícolas (coca-amapola,
variedades del conflicto social local banano, palma de aceite).
donde típicamente tienden a incidir los
grupos armados. Estos conflictos-tipo La mayor parte de los conflictos lo-
giran alrededor de: cales son expresiones o combinaciones
particulares y diferentes de ciertos temas
• Disponibilidad y costo del capital de comunes. En efecto, los conflictos de los
trabajo (como decir los anticipos al co- cuatro últimos tipos de esencia son dis-
lono o al minero de la primera fase de putas sobre el monto y reparto de dineros
la colonización). públicos o dineros de bonanza, mientras
• Propiedad de la tierra (latifundio con- los tres primeros básicamente giran en tor-
solidado versus campesinos sin tierra; no a la propiedad y formas de tenencia de
terratenientes en expansión versus co- la tierra, y tocan a la esfera laboral. En el
lonos, etc.). Capítulo 5 volveremos sobre el punto”1.
• Derechos de las comunidades nativas La caracterización anterior orienta la
(indígenas o afro-descendientes) fren- construcción de tipologías municipales
te a los inmigrantes (tierra, identidad que pueden ser útiles para la tarea de for-

Capítulo 1
296

talecer los municipios y para entender las nar la concentración municipal de la acti-
relaciones entre las organizaciones arma- vidad armada, tanto de las guerrillas como
das y las poblaciones. Los informes regio- de las autodefensas. La información dis-
nales adelantados en el 2002 por el sistema ponible mejor estructurada para el efecto,
de Alertas Tempranas de la Defensoría del es la del Observatorio del Programa Presi-
Pueblo, introducían en su metodología dencial de Derechos Humanos y DIH.
una variable principal relacionada con los Esta información, publicada y analizada
conflictos locales, según que se diera un hasta el año 2002, permite precisar cuáles
grado alto de integración social (resisten- son los municipios más afectados en la
te a la expansión de la violencia) o un gra- historia reciente y da elementos para fo-
do bajo (favorecedor de la misma) y la calizar el apoyo que se les debe brindar.
evidencia empírica de los distintos tipos La información es diferente para las gue-
de relaciones entre actor armado y pobla- rrillas y para las autodefensas. En el caso
ción civil, variaban de acuerdo con esa ma- de las primeras se cuenta con el número
yor o menor integración, en un continuo absoluto de incidentes de diverso tipo. En
que iba de la contención (en las comuni- el caso de las autodefensas, el Observato-
dades integradas) a la permisividad (en las rio publicó una afectación basada en el
desintegradas). Las formas de organización grado de intensidad (grado determinado
económica condicionan grados de integra- por una escala de 3 niveles de intensidad)2.
ción social y de movilidad de las pobla- La información llega hasta el año 2001 y
ciones que pueden apoyar la comprensión, permite ver las tendencias a lo largo de
y previsión de los procesos locales. más de una década en el caso de las auto-
defensas. En el caso de las guerrillas, FARC
4. AFECTACIÓN MUNICIPAL y ELN, se refiere a tres años (1999-2001),
POR LA ACTIVIDAD DE ACTORES pero igualmente da cuenta de la geografía
ARMADOS ILEGALES actual de la intensidad del conflicto. Una
información más actualizada está en pro-
En el numeral anterior se señalaron ten- ceso de consolidación, pero no cambia sus-
dencias geoestratégicas del conflicto arma- tancialmente el mapa del conflicto. Eso
do que permiten suponer afectaciones sí, la intensidad ha tendido a disminuir
regionales en términos generales. Pero una en todo el territorio por causa de la dismi-
mayor precisión de la afectación, en el ni- nución de las tomas de pueblos y de la baja
vel municipal, por ejemplo, exige exami- de los índices de secuestro, baja bastante

1. PNUD, “El Conflicto Callejón con salida”, Informe Nacional de Desarrollo Humano para Colombia-
2003,Bogotá, 2003.
2. Programa Presidencial de Derechos Humanos y DIH, Observatorio, Colombia: Conflicto Armado, Regio-
nes, Derechos Humanos y DIH, 1998-2002, Vicepresidencia de la República, Bogotá, 2002.
297

notoria en 2003 y en lo corrido de 2004 Acciones armadas por departamento.


(cerca del 67% en tomas y 50% en secues- Distribución porcentual
tro, según el Ministerio de Defensa)
1998 - 2001

4.1. La concentración municipal 1. Antioquia 17%


2. Arauca 10%
de la actividad de las Farc
3. Santander 7%
y del ELN (1999-2001)
4. Norte de Santander 7%
5. Cauca 6%
Los datos del Observatorio del Programa 6. Cesar 5%
de Derechos Humanos (Anexos al final del 7. Cundinamarca 4%
texto) muestran situaciones bien interesan- 8. Tolima 4%
tes. Debe advertirse que la estadística suma 9. Valle 3%
incidentes sin valorar la intensidad de los 10. Meta 3%
mismos y en ese sentido la jerarquía mu- 11. Bolívar 3%
nicipal es aproximada. Pero, por ejemplo, 12. Putumayo 3%

muestra claramente la situación del De- 13. Casanare 3%

partamento de Arauca. Cinco municipios


Fuente: Presidencia de la República, Sala de Estra-
araucanos están en la lista de los 40 mu- tegia Nacional.
nicipios donde se concentra el 34% de la
actividad armada de las FARC. Los cinco Si a la concentración municipal de
están entre los doce primeros de la lista la actividad de las FARC se suma la del
(Arauca tiene siete municipios) y dos, Arau- ELN, Arauca aparece nuevamente con
quita y Saravena, ocupan los dos primeros una participación elevada, 4 municipios,
lugares, de tal manera que Arauca resulta coincidentes todos con los de actividad
con la mayor afectación municipal relati- FARC, lo cual coloca a este departamen-
va en el conjunto de los departamentos. to como el más gravemente afectado por
Más todavía, Arauca ocupa el segundo la guerrilla en términos proporcionales a
lugar en acciones del conflicto armado su número de municipios y población.
después de Antioquia (período 1998- Antioquia nuevamente aparece, ahora en
2001), pero este último departamento tie- primer lugar de afectación por el ELN con
ne casi veinte veces más municipios que quince municipios, pero a diferencia de
Arauca. Para poner en contexto el análisis, Arauca solamente coincide uno (Medellín)
puesto que los demás casos no son tan evi- con afectación alta por los dos actores. Este
dentes como el de Arauca, vale la pena resultado es congruente con la mayor se-
transcribir la distribución porcentual de las paración de escenarios FARC y ELN en
acciones armadas por departamentos entre Antioquia. Un caso que llama la atención
1998 y 2001 (todos los actores). es el de Santander: es el tercer departa-

Capítulo 1
298

mento en afectación total por acciones factores de vulnerabilidad social y políti-


armadas de todos los actores, pero en la ca además de la violencia, varios munici-
información discriminada por FARC y pios de los 40 listados por el Observatorio,
ELN sólo coincide uno, el municipio de están también entre los 209 de alta vulne-
Barrancabermeja (70 incidentes por ELN rabilidad del informe de Naciones Uni-
y 22 por FARC, en el período). Es un das. Así Betulia, Anorí, Dabeiba, Mutatá,
municipio extenso, de larga tradición en San Carlos y Urrao del Departamento de
materia de conflicto armado y con pre- Antioquia, listado entre los de mayor ac-
sencia fuerte del ELN en el área urbana tividad de las FARC, están también en la
durante cerca de veinte años, hasta el año lista de municipios vulnerables de NN.UU.
2001 cuando fue desalojado de ésta por También San Luis, Cocorná, San Francis-
las autodefensas. co, Segovia y Amalfi, de la lista del ELN,
La comparación de las afectaciones más Anorí que repite, están igualmente en
según uno y otro actor muestra la escasa la de NN.UU. Arauca, por su parte, com-
presencia del ELN en el suroriente de país. parte 4 municipios en las dos listas.
De la Orinoquía y la Amazonía, solamen-
te dos departamentos (precisamente los 4.2. La afectación municipal
petroleros) Arauca y Casanare, aparecen por causa de la actividad
representados en la afectación por ELN. de las autodefensas
El suroriente es claramente, la retaguar-
dia de las FARC. El Observatorio del Programa de Derechos
Los datos, si bien no permiten la ela- Humanos es nuevamente la fuente de la
boración de una escala de rango exacta información para el caso de las autodefen-
(sería necesario ponderar las acciones con sas. A diferencia de la afectación por causa
información de intensidad) si sirve para de las guerrillas, el listado para el accionar
orientar la acción de apoyo a los munici- de las autodefensas se basa en un índice de
pios y para establecer casos críticos de re- intensidad construido a partir del número
giones altamente afectadas, como el de homicidios cometidos por las autode-
anotado de Arauca. fensas en los municipios y agrupados en
Una constatación de la validez de esta los períodos 1988-1991, 1992-1996 y
orientación se obtiene al comparar los 1997-2001. Las intensidades son baja,
municipios de más alta afectación con la media y alta según que las víctimas están
lista de los municipios más vulnerables del entre 2 y 6 (baja) entre 7 y 15 (media) y 16
Informe de Desarrollo Humano de las o más (alta).
Naciones Unidas. Si bien los índices utili- Se destaca en la clasificación, que la
zados por este informe tienen otros pro- actividad de las autodefensas es mayor en
pósitos y en su composición concurren el norte del país, como era de esperarse,
299

pero período tras período, tiende a exten- ga. La droga a su vez, se convirtió en un
derse por todo el país y así en el período factor de ampliación y aceleración del con-
de 1997-2001 aparecen más incidentes en flicto. Una vez instalado el negocio en el
el Meta, Casanare, Vichada, Putumayo, país, la causalidad revierte. Los cultivos,
Arauca, Guaviare y Guainía. Los tres pe- las instalaciones, las rutas del tráfico, el
ríodos, sin embargo, indican que sobresa- control de las pistas aéreas clandestinas,
len el Magdalena Medio, la Costa Caribe, etc., se convierten en motivos de disputas
el norte de Antioquia, lo mismo el norte violentas.
chocoano y el Departamento Norte de Una vez establecida la droga en Co-
Santander. Esta información coincide con lombia, ha cumplido un papel de genera-
el análisis del punto 3 sobre las disputas dora directa de violencia porque la
territoriales. En el sur, son el Putumayo, ilegalidad obliga a resolver las disputas no
Meta, Guaviare, Casanare y Arauca, los por vías institucionales sino de violencia
más afectados. En general, el análisis del privada; y de manera indirecta, porque
Observatorio valida las hipótesis sobre las atrae, como todo negocio ilegal, a los gru-
tendencias actuales del conflicto. pos que tengan el poder y la capacidad para
proteger y regular el negocio. Los grupos
5. NARCOTRÁFICO armados protegen los cultivos y regulan
Y CONFLICTO ARMADO las condiciones del negocio. Con las ren-
tas obtenidas se fortalecen y cumplen
Las relaciones entre la producción y co- mejor el papel de eliminar competidores
mercialización de drogas ilegales y el con- y de crear condiciones para el alejamiento
flicto interno colombiano son complejas del Estado. De esta manera, guerrillas y
y problemáticas. La versión simplista de autodefensas han entrado en una dinámi-
estas relaciones es concluir que el narco- ca que lleva, por fuerza de los hechos, a
tráfico es el motor de las violencias colom- copar cada vez más etapas del negocio ile-
bianas. Bien pudiera ser que, al revés, las gal: asumen la función de los eslabones
violencias colombianas fueran el motor del medios, de los procesadores y se relacio-
narcotráfico. Tampoco esta última mane- nan directamente con los exportadores
ra de expresarlo lleva todas las explicacio- mayores y llegan hasta exportar directa-
nes. Existe una causación circular entre mente. El copar más y más eslabones del
ambos fenómenos, pero ni el uno ni el otro negocio lleva también a ingresar de ma-
son la explicación completa del fenóme- nera más amplia y dinámica en el tráfico
no de conjunto. La violencia precedió a la de armas, de insumos químicos y al lava-
droga en Colombia y es una (no la única) do de activos en los circuitos financieros
de las causas favorecedoras de la implan- internacionales.
tación y extensión del negocio de la dro- El primer auge de cultivos ilícitos en

Capítulo 1
300

Colombia fue el de la marihuana en los Área de cultivos de coca en Colombia


años 70 y afectó, principalmente, a la cos- 1994-2002
ta Caribe. La marihuana se extendió por 1994 44.700 hectáreas
el mundo en virtud de su adaptabilidad 1995 50.900 hectáreas
(se desarrolla en gran variedad de climas 1996 67.200 hectáreas
y condiciones) y pronto la colombiana 1997 79.400 hectáreas
salió del mercado. La coca es un cultivo 1998 101.800 hectáreas
diferente, difícil de aclimatar en las zo- 1999 160.000 hectáreas

nas templadas y se ha mantenido en Bo- 2000 163.000 hectáreas


2001 145.000 hectáreas
livia, Perú y Colombia como franja
2002 102.000 hectáreas
propicia. Los narcotraficantes colombia-
nos fueron primero comercializadores, Fuente: United Nations Office on Drugs and Cri-
me, UNO DC, 2003-09-17
luego procesadores y finalmente ingresa-
ron en el cultivo. A comienzos de los años
Los datos de la Embajada de los Es-
80 ya existían cultivos apreciables en el
tados Unidos difieren ligeramente, pues
Guaviare, el Meta y el Caquetá. La re-
reportan 113.850 hectáreas en 2003, lo
presión a los cultivos en Bolivia y Perú,
cual implicaría una menor velocidad en
estimuló a los traficantes colombianos
la disminución.
para fomentar el cultivo en Colombia
Como se ve en las cifras, el crecimien-
(típico efecto “globo”). Este se extendió
to de los cultivos fue muy rápido en la
rápidamente hasta el año 2000 cuando
segunda mitad de los años 90 y su punto
comenzó una reducción paulatina, como
más alto se dio en el año 2000. A partir de
se verá más adelante. La amapola, final-
ese momento, la superficie ha comenzado
mente, encontró condiciones propicias en
a disminuir por la acción de las fumiga-
zonas de agricultura tradicional en las
ciones aéreas: la preocupación de quienes
vertientes de las cordilleras y se desarro-
siguen de cerca la evolución de los culti-
lló gracias a las ventajas comparativas de
vos, es que la caída de las hectáreas sem-
Colombia frente a las fuentes asiáticas,
bradas sea sucedida muy pronto por la
tanto por la cercanía al mercado norte-
recomposición regional de los cultivos,
americano como por la productividad.
como ha sucedido en el pasado, y la baja
El cultivo de coca es el más extendi-
se explique por el rezago inicial que se pro-
do por el país y el que más superficie de-
duce en el efecto “globo”. El cultivo pue-
manda: su evolución en los años recientes
de estar en este momento en una situación
ha sido la siguiente:
de migración a otras zonas de la frontera
agrícola o a zonas del interior del país cu-
yos cultivos tradicionales hayan entrado
301

en crisis como el café y otros renglones de cultivos comienzan las disputas (en el caso
la agricultura comercial. El informe de la mencionado entre las FARC y las autode-
UNODC, la Oficina de las Naciones Uni- fensas del Magdalena Medio) por el con-
das para las Drogas y el Crimen, basado trol de las rentas.
en imágenes satelitales y en observación Además de las áreas detectables por
aérea, muestra como, si bien el total dis- medios satelitales, hay en Colombia miles
minuyó, con un énfasis grande en el Pu- de cultivos pequeños en Nariño,el Tolima
tumayo, en lugares como el Guaviare, y Huila. En estos últimos tres departamen-
Nariño y Arauca, las áreas sembradas cre- tos, en el piso climático frío, hay cultivos
cieron. En el Guaviare pasaron de 17.600 de amapola.
en agosto de 2000 a 27.400 en diciembre Los municipios ubicados en zonas de
de 2002, en Nariño, durante el mismo cultivo tienen problemas serios de gober-
período pasaron de 9.350 a 15.130 y en nabilidad. Sólo con el apoyo de la fuerza
Arauca de 978 a 3.0303. Este último dato, pública, suficiente y permanente, pueden
según observadores locales, se queda cor- funcionar los municipios de la periferia
to y en Arauca se habla de entre 9.000 y donde están los cultivos extensos que son
11.000 hectáreas. también poblaciones alejadas con presen-
Afirma también el mismo informe cia débil de Estado. Las políticas para el
que se han detectado cultivos pequeños desarrollo de la gobernabilidad, la parti-
en áreas que están fuera de la frontera agrí- cipación ciudadana y el fortalecimiento
cola en Guainía, Vaupés y Amazonas en institucional en general, tocan necesaria-
el sur, y en el norte, en la Guajira y en el mente con el tratamiento que se de a la
Chocó. Igualmente informa de cultivos en producción y comercio de las drogas.
zonas de economía campesina de la costa
Caribe y en el eje cafetero. Sobre esto últi- 6. LA POLÍTICA DE ERRADICACIÓN
mo existe información inquietante de la DE LOS CULTIVOS ILÍCITOS
franja norte de Caldas y del sur de Antio-
quia, donde se alternan los plantíos de café La erradicación de los cultivos ilícitos se
y coca en una forma difícil de detectar, y ha adelantado en Colombia con el apoyo
por supuesto de erradicar. Como siempre, y bajo la dirección de los Estados Unidos.
la violencia acompaña estos cambios y los El método prevaleciente ha sido la fumi-
sucesos de áreas entre la cordillera central gación con glifosato de los cultivos. En
y el Magdalena, por ejemplo: municipios ocasiones se ha usado la destrucción ma-
como Samaná (Caldas) y Argelia (Antio- nual, pero su incidencia ha sido marginal.
quia) muestran que una vez instalados los También se han dado casos de destrucción

3. Estadísticas de la Dirección Antinarcóticos de la Policía Nacional, 2003.

Capítulo 1
302

de cultivos por iniciativa de las propias La Vega ............................................................ 64.00


comunidades (el caso de algunas comuni- Balboa ............................................................ 632.31
dades indígenas del Cauca es el más nota- Departamento de Nariño Total .. 32.249.71
ble), pero la aspersión aérea es casi el ciento Tumaco .................................................... 12.873.75
por ciento. En el último año se ha acelera- San Antonio ................................................. 473.73
do el programa de fumigaciones y los da- Roberto Payán .........................................7.567.26
tos de la Policía Nacional sostienen que la Maguí (Payán)............................................3.510.16
superficie de siembra se ha reducido sus- Barbacoas ..................................................6.826.83
tancialmente: en el 2001 se detectaron El Charco ....................................................... 410.03
135.930 hectáreas de coca y 4.273 de ama-
Francisco Pizarro .......................................... 90.74
pola. En el año 2002, las cifras fueron, res-
Olaya Herrera .............................................. 497.21
pectivamente, 102.071 y 4.153. En el año
Departamento del Putumayo Total .... 8.342.86
2003, a noviembre 17, se detectaron 68.365
Orito .............................................................1.860.41
has. de coca (no se obtuvo dato de la ama-
Valle del Guamués ..................................2.206.04
pola) lo cual, si la vigilancia satelital es efec-
tiva, sería un avance enorme porque por San Miguel ................................................2.728.03

primera vez habrían dejado de crecer los Villagarzón ................................................... 115.64

cultivos y estarían en franca reducción. Puerto Guzmán .......................................... 319.20


La aspersión ha aumentado el ritmo Puerto Asís ................................................1.113.54
y los datos revelados por la Policía son los Departamento del Meta Total .... 5.151.36
siguientes por departamentos y munici- Vista Hermosa ............................................. 716.64
pios (datos que de paso revelan cuáles son Puerto Rico ................................................... 312.00
los municipios más comprometidos) Puerto Concordia ................................... 1.209.49
Mapiripán ..................................................1.834.33
• Aspersión de cultivos de coca por departa- Puerto Lleras ................................................ 930.60
mentos y municipios (hectáreas, año 2003)
Mesetas ......................................................... 148.30
Departamento del Caquetá Total .....1059.56
Departamento de Guaviare Total .. 34.602.54
Cartagena del Chairá .................................... 30.01
El Retorno ..................................................5.821.28
Curillo ................................................................. 16.93
Miraflores ................................................ 13.892.86
San Vicente del Caguán ............................... 69.05
San José ......................................................4.209.25
Solano .............................................................. 175.91
Calamar ................................................... 10.679.18
Valparaíso ....................................................... 267.66
Departamento de Arauca Total .... 9.078.99
Departamento del Cauca Total ....1.307.94
Fortul .......................................................... 1.611.67
Argelia.............................................................115.19
Arauquita ...................................................7.467.32
El Bordo ......................................................... 105.03
Departamento de Santander Total ............ 5.00
Mercaderes .................................................. 391.41
Cimitarra ............................................................ 5.00
303

Depto. de Norte de Santander Total ... 13.822.06 Algeciras .......................................................... 31.62


Tibú ........................................................... 12.350.46 Colombia ........................................................ 31.68
Sardinata ......................................................... 75.79 Departamento del Cauca Total ........ 462.45
El Tarra ............................................................ 797.47 Bolívar .............................................................. 48.82
Teorema ......................................................... 198.34 Santa Rosa ...................................................... 52.00
Departamento de Antioquia Total .... 9.835.30 Guachicono .................................................. 208.00
Argelia ............................................................ 337.80 San Sebastián ................................................ 22.25
Anorí ............................................................... 181.13 La Vega. ........................................................... 97.81
Cáceres .......................................................... 822.34 La Sierra. .......................................................... 33.57
Yondó ............................................................. 405.27 Departamento de Nariño Total ........ 724.97
Zaragoza ....................................................... 772.25 El Tablón ........................................................ 609.60
Tarazá ..........................................................6.776.47 Buesaco ........................................................... 88.78
El Bagre .......................................................... 540.04 La Cruz ............................................................. 22.00
Departamento de Bolívar Total .... 4.783.04 Leiva ..................................................................... 4.59
Cantagallo .................................................... 678.44 Departamento del Cesar Total .........835.84
San Pablo. ..................................................1.886.85 Codazzi .......................................................... 304.00
Simití ............................................................... 528.06 Manaure ........................................................ 335.00
Santa Rosa del Sur. ................................ 1.689.69 La Paz ............................................................. 196.84
Departamento de Córdoba Total ........ 549.90 Departamento de la Guajira Total .......... 75.00
Puerto Libertador ...................................... 549.90 Villanueva ....................................................... 75.00

GRAN TOTAL NACIONAL ...................... 120.788.28 Los datos anteriores muestran el ma-
yor esfuerzo de aspersión hecho en la his-
• Aspersión de cultivos de Amapola por de- toria de la represión a los cultivos ilícitos
partamentos y municipios (hectáreas) de coca y amapola en Colombia (En lo
Departamento del Tolima Total ........ 213.73 corrido del 2004 según informaciones de
Planadas .......................................................... 25.00
prensa, se han erradicado 16,800 hectáreas)
y revelan el cuadro de los municipios más
Chaparral ........................................................ 69.00
afectados por los mismos. Una compara-
La Herrera ....................................................... 13.00
ción con las anotaciones del punto 3, mues-
San Antonio ................................................... 81.97
tra como coinciden estos municipios, sobre
Anzoátegui ..................................................... 24.79
todo los que tienen coca, con las zonas
Departamento del Huila Total ........ 217.65
más afectadas por las disputas entre acto-
Gigante ............................................................ 98.95 res armados ilegales y entre éstos y el Esta-
Santa María .................................................... 42.56 do y, por consiguiente, con los municipios
Neiva ................................................................. 12.84 de mayores problemas de gobernabilidad.

Capítulo 1
304

7. DEMOCRACIA LOCAL por medio no democráticos: “Manu mi-


Y GOBERNABILIDAD litari” estas organizaciones asumen fun-
ciones por sí y ante sí, por encima de la
El conflicto armado es uno de los obstá- institucionalidad y sin la participación
culos más serios para el avance de la de- ciudadana.
mocracia local y de los procesos de b. El plano de lo material, aquel referido
descentralización, las presiones de los ac- a la distribución del excedente econó-
tores armados sobre las autoridades lo- mico, se ve afectado por la inexistencia
cales, los asesinatos de alcaldes, del monopolio estatal sobre la tributa-
personeros y concejales, la acefalía guber- ción. Las organizaciones armadas reali-
namental que produce el desplazamien- zan exacciones sobre la población y sobre
to de las autoridades, la destrucción de los presupuestos municipales y, por su-
instalaciones, la obstrucción de las elec- puesto, sin control democrático alguno.
ciones, los condicionamientos y la depre- c. En el plano de la dominación, es decir
dación en el manejo de los recursos, etc., de la capacidad de determinar preferen-
son factores todos de ingobernabilidad. cias y escoger alternativas y cursos de
Afectan de manera directa los elementos acción, las autoridades municipales se
fundamentales de la gobernabilidad: la ven, o condicionadas parcialmente o so-
institucionalidad estatal y la integración metidas del todo por organizaciones ar-
social de las comunidades. madas. El poder de la sociedad civil
El primer elemento, las instituciones, tampoco se puede expresar, bien porque
o bien dejan de tener presencia o funcio- se le prohiba expresamente, o porque el
na de manera condicionada. Municipios miedo generalizado determine conduc-
sin policía no pueden sostener la presen- tas de inhibición en la expresión y en la
cia de otras agencias del Estado o, si están participación, mediante las cuales las per-
presentes, no pueden tener independen- sonas buscan reducir su visibilidad so-
cia alguna. Se afectan tres planos de la fun- cial. La presencia de grupos armados sin
ción del Estado a saber: sujeción alguna a derecho, inhibe la ca-
pacidad de decisión y, por tanto, el de-
a. El plano de lo funcional. Éste se refiere sarrollo de la política en las localidades.
a la pregunta ¿quién hace qué? Normal-
mente se presentan diferencias y con- 8. POLÍTICAS PARA
flictos acerca de si una función debe ser EL DESARROLLO
cumplida por el Estado o por la empre- DE LA DEMOCRACIA
sa privada o por factores solidarios o co-
munidad organizada. Pero la presencia En un contexto de violencia, las políticas
de actores armados resuelve el asunto que pueden estimular el desarrollo demo-
305

crático son aquellas que en primer lugar, anterior (funcional, material y de la do-
mitiguen y reduzcan la violencia y refuer- minación), resulta un cuadro de políticas
cen la autonomía, tanto de las autorida- bastante coherentes dirigidas a aumentar
des locales como de las comunidades. Unas la legitimidad del Estado, fortalecer la par-
pueden ser estatales de tipo general, na- ticipación social y la descentralización,
cional, que le den respaldo a las institu- superar las economías ilegales y proteger
ciones y a los funcionarios, otras pueden y promover los derechos humanos.
ser locales, dirigidas a fortalecer la inte-
gración social, el bienestar y la economía. 8.1. El plano de lo funcional
En conjunto, se pueden distinguir:
a. En la estructura y en la presencia esta-
a. Políticas dirigidas a aumentar la presen- tal las propuestas giran en torno a:
cia del Estado, las cuales implican una
combinación de instituciones de con- • El fortalecimiento de la presencia de la
trol social, de protección y de desarro- fuerza pública en los municipios, lo cual
llo administrativo. implica principalmente presencia poli-
b. Políticas de desarrollo económico: fomen- cial. Sin esta presencia básica, se entien-
to de actividades productivas, construc- de que la estructura estatal no puede
ción y mejoramiento de infraestructura. funcionar.
c. Políticas de desarrollo social (aumento • Fortalecimiento administrativo para
del capital social) centradas en fortale- mejorar la eficacia del Estado. Se insis-
cimiento del tejido social, educación, te en sistemas de información eficien-
capacitación, salud, seguridad social, tes para mejorar la cobertura y la calidad
cultura y esparcimiento. de los servicios, y para posibilitar la vi-
d. Políticas de control de los cultivos ilíci- gilancia ciudadana sobre las actuacio-
tos con un componente internacional nes de las autoridades.
(apoyo de los consumidores a las ini-
ciativas de sustitución, por ejemplo), b. En las funciones del Estado, se destacan:
subsidios a la agricultura, vinculación
efectiva al mercado nacional y, en ge- • Establecimiento de mecanismos para
neral, fomento de las alternativas via- proteger y promover los Derechos Hu-
bles para sustituir la economía ilegal. manos.
• Continuidad de los programas y pro-
Si se aplican las propuestas hechas por yectos, y líneas permanentes en el dis-
los asistentes a los talleres regionales, se- curso público.
gún los tres planos de la relación Estado- • Creación de redes institucionales y so-
sociedad mencionados en el punto ciales de protección de las comunida-

Capítulo 1
306

des con participación del Ministerio • Aumentar la legitimidad estatal me-


Público (Defensoría del Pueblo, espe- diante la lucha contra la corrupción y
cialmente) y de organizaciones no gu- el aumento de la eficiencia de la admi-
bernamentales. nistración.
• Elevar los niveles de participación polí-
8.2. El plano de lo material tica de la población, tanto en la toma
de decisiones como en la ejecución de
a. Se insiste en todos los talleres, en la nece- proyectos y estimular la vigilancia so-
sidad de acciones concretas para enfren- bre el manejo de lo público.
tar el desempleo. Fomento a las • Incluir a las minorías étnicas, respetar
actividades productivas, reducción de cos- las visiones del mundo y sus tierras.
tos para la agricultura, y apoyo nacional e • Abordar los problemas de integración
internacional para el establecimiento de social en las áreas de colonización, me-
alternativas a los narcocultivos. diante la extensión de la acción de las
b. Una acción enérgica contra la extorsión instituciones para incluirlos en un teji-
para que los excedentes económicos se do social fuerte.
puedan fortalecer y dirigir a la inversión • Fortalecimiento del poder judicial para
en los municipios. Este punto se rela- mejorar la calidad de la resolución de
ciona con el primero de los menciona- conflictos y la legitimidad. Presencia de
dos en el plano de lo funcional y también los organismos de control del Estado
con los siguientes sobre gobernabilidad para mejorar la transparencia en el ma-
en el plano de la dominación. nejo de los recursos.
c. Darle a la comunidad posibilidades de • Estímulo a la resistencia civil frente a
participación en la ejecución de las obras los violentos.
públicas y de veeduría para asegurar la
transparencia en la contratación pública. 8.4. Los cultivos ilícitos

8.3. El plano de la dominación Los cultivos ilícitos merecen un comenta-


rio aparte. En general, la opinión de los
En el plano de la dominación, que es el participantes en los talleres se inclina por
más claramente político, los problemas formas concertadas de resolver el proble-
planteados y las líneas de política sugeri- ma, particularmente en las áreas de mini-
das son sobre todo alrededor de la go- fundio, en las cuales la fumigación aérea
bernabilidad, la legitimidad y la inclusión causa demasiados daños por la imposibi-
de la población en los procesos políticos lidad de no afectar áreas diferentes a las
y sociales. de los cultivos de coca o amapola. Lo más
importante para destacar es la declaración
307

reiterada de los voceros de las comunida- va se puede estimular en comunidades


des en el sentido de aceptar los programas muy integradas con niveles altos de iden-
de sustitución de cultivos, aun si la alter- tidad y homogéneas culturalmente. Esto
nativa no es tan rentable como el cultivo asegura que se muevan al unísono en caso
ilícito. Las comunidades sienten que los de emergencia.
problemas que les genera la economía ile- Cuando la integración no sea tan ele-
gal en violencia, corrupción de la juven- vada, lo aconsejable, para evitar mayores
tud, daños ecológicos y fumigaciones, son peligros, es estimular la colaboración con
una carga excesivamente pesada. las autoridades y las formas pasivas de re-
sistencia. Finalmente, cuando las comu-
8.5. La resistencia civil nidades presenten niveles bajos de
identidad e integración, el trabajo debe di-
El planteamiento de la resistencia civil fue rigirse al fortalecimiento del tejido social.
debatido y se pueden diferenciar varios
matices. Una es la resistencia abierta, la
que enfrenta a los actores armados ilega- BIBLIOGRAFÍA
les con acciones de movilización social y
confrontación, y otra la que apela a diálo- Borrero, Armando, Análisis geoestratégico del con-
gos, recursos simbólicos y propuestas de flicto colombiano, Medios para la Paz,
actuaciones alternativas a los violentos. Bajo www.mediosparalapaz.org, Bogotá, septiem-
la primera óptica, las comunidades reali- bre de 2002.
zan acciones como las vistas en cabildos Departamento de Estado de los Estados Unidos,
indígenas del Cauca: movilizaciones masi- Programa de Información Internacional, “Ser-
vas para cerrarle el paso a los grupos arma- vicio Noticioso desde Washington”,
dos, seguimiento masivo a los mismos en www.usinfo.state.gov/espanol/colombia, mar-
caso de secuestros, exigencia directa de no zo de 2004.
hacer presencia en el territorio, etc. Información de la Policía Nacional de Colombia,
Otras formas, menos confrontadoras, Dirección Antinarcóticos, noviembre de 2003.
son los diálogos, la exigencia de explica- PNUD, Informe Nacional de Desarrollo Humano:
ciones, el manejo de símbolos de paz, crevista opera, volÚmen 4 nº4revista opera,
muchos extraídos de la cultura popular y volÚmen 4 nº4allejón con salida, Capítulo
la desobediencia social a las imposiciones 13, Bogotá, 2003.
de los grupos ilegales. Vicepresidencia de la República, Programa Presiden-
La política debe distinguir la situa- cial de Derechos Humanos y DIH, Primera
ción de las comunidades y estimular de parte, numerales 3,4,5, Bogotá, 2002.
manera selectiva las diversas opciones. En
términos generales la resistencia civil acti-

Capítulo 1
308
REVISTA OPER A, VOLÚMEN 4 Nº4
309

c omentario al artículo
de armando borrero mansilla:
El conflicto armado interno, los cultivos ilícitos
y la gobernabilidad local

bernardo pérez salazar *

LA “OTRA COLOMBIA” personas, lavado de dinero, fraude y mal-


versación de fondos públicos, extorsión,
Utilizando criterios que coinciden con los secuestro y “mercados de protección”, en-
utilizados en el Informe Nacional de Desa- tre otras actividades.
rrollo Humano para Colombia (2003), Ar- Si bien las economías ilegales son con-
mando Borrero describe en su artículo “El sustanciales a la historia del país desde la
conflicto armado interno, los cultivos ilí- época de la Colonia, la “Otra Colombia”
citos y la gobernabilidad local en la “Otra es un fenómeno reciente. En buena me-
Colombia”, los territorios que algunos de- dida, es el producto del fracaso de políti-
signan con el término no muy afortuna- cas de fomento de la urbanización
do de la “Otra Colombia”. Como bien los acelerada a la cual le apostó el país duran-
caracteriza Borrero, en general, se trata de te las últimas cuatro décadas del siglo XX,
aquellos territorios que en el pasado re- en aras de crear economías urbanas que
ciente han sido disputados por grupos ofrecieran oportunidades más productivas
guerrilleros y paramilitares. No está por de empleo e ingreso, las cuales a su vez,
demás señalar que uno de los motivos que incrementarían la demanda de productos
anima la disputa militar por esos territo- agrícolas para dinamizar una agricultura
rios es que parte significativa de los ingre- mecanizada de alta productividad, “en lu-
sos locales que allí se generan dependen de gar de una nación llena de campesinos
economías ilegales: cultivos de uso ilícito, propietarios” (Currie, 1965, 37).
contrabando, mercados ilícitos de armas Como resultaron las cosas, las econo-
pequeñas y ligeras, maderas preciosas y fau- mías urbanas de centros industriales como
na silvestre, tráfico de migrantes y trata de Bogotá, Medellín, Cali y Barranquilla que

* Comunicador Social de la Universidad del Valle. Magíster en planificación del desarrollo regional del
ISS (Institute of Social Studies, La Haya). Docente y Director del Observatorio del Manejo del Conflicto
de la Facultad de Economía de la Universidad Externado de Colombia. obsconflicto@uexternado.edu.co

Capítulo 1
310

recibieron el grueso de la migración cam- estas zonas: la coca en tierras calientes de


po-ciudad -y donde desde los años 80 se colonización reciente localizadas en Gua-
concentra más del 30% de la población viare, Putumayo, Caquetá, Meta, Casana-
colombiana al igual que más del 70% de re, Arauca, Magdalena Medio, Norte de
valor agregado en el país-, fueron incapa- Santander, Sierra Nevada de Santa Mar-
ces de absorber esas migraciones de ma- ta, Chocó y Nariño, y la amapola en las
nera productiva. Los excedentes de mano tierras frías de minifundios en descompo-
de obra sin calificación, con los consecuen- sición y resguardos indígenas en recom-
tes bajos ingresos para el grueso de la po- posición en Cauca, Huila, Valle, Tolima y
blación en esa condición, condujeron al Cesar. La incorporación de estas econo-
surgimiento de demandas de bienes y servi- mías ilegales a dinámicas de economía de
cios con reducida capacidad adquisitiva en guerra subordinadas a grupos armados ile-
los centros urbanos. Ello, a su vez, contribu- gales, es la situación común a muchos de
yó a la propagación de unidades económi- los lugares que hoy se identifican con el
cas minúsculas, de bajísima productividad y mote de la “Otra Colombia”. Simultánea-
escasez crónica de capital, cuyos resultados mente muchos lugares menos marginados
son completamente dependientes de la de los departamentos que hoy pertenecen
“auto-explotación” de sus operadores: el a esta “Otra Colombia”, han vivido la “des-
Censo Económico Multisectorial realizado agriculturización” (800.000 hectáreas de
por el DANE en 19901, encontró que a fi- tierras cultivables se abandonaron duran-
nales de la década del 80 en Colombia más te la década de los 90) y la “desindustriali-
del 90% de las unidades productivas del zación” (25% del empleo industrial se ha
país clasificaban como microempresas, y perdido en el mismo período) (Sarmien-
de esas unidades, el 47% estaban inte- to, 2003, 12-13).
gradas por un solo trabajador, 39% en-
tre 2 y 5 trabajadores y 5% entre 6 y 10 LA GOBERNABILIDAD LOCAL
trabajadores. EN LA “COLOMBIA EN PROPIEDAD”
Consiguientemente, parte de la ex-
pansión de la frontera agrícola que se dio La Colombia que se contrapone a la
en Colombia durante las décadas de los “Otra Colombia”, es la de centros con
80 y 90, fue alimentada con migraciones economías locales y regionales en expan-
urbano-rurales en búsqueda de mejores sión como Bogotá, Cartagena y Pereira,
condiciones de ingreso. El explosivo cre- entre otros, donde durante los decenios
cimiento de cultivos de uso ilícito duran- más recientes se ha presenciado una cre-
te este período, tuvo lugar en muchas de ciente concentración espacial de la inver-

1. Ver: Departamento Nacional Planeación www.dnp.gov.co/01_CONT/INDICADO/MICROEMP.HTM#2


311

sión, la actividad económica y el ingre- que se consolida en la “Colombia en pro-


so. Centros como estos ofrecen entornos piedad”, es decir, donde las condiciones
propicios para negocios por la presencia de seguridad permiten la acumulación y
de demandas elásticas al ingreso, así como expansión de economías locales y regio-
de externalidades positivas de la aglome- nales “exitosas”.
ración como la cooperación entre empre- Pero es dudoso que con el cumpli-
sas, los efectos de diseminación no miento de los objetivos de la política de
comercial de información y conocimien- seguridad democrática se vaya a modifi-
to y los mercados laborales flexibles y car la realidad palmaria de que estos luga-
poco regulados. Estas dinámicas regiona- res no disponen de condiciones de
les de crecimiento y acumulación tam- demanda ni de entornos propicios para los
bién han transformado la naturaleza de negocios que dinamizan los centros con
las estructuras de gobierno local en estos economías locales y regionales en expan-
centros, las cuales tienden cada vez hacia sión. Como se señaló al principio, la acti-
modelos neocorporativos de “Estado vidad económica más dinámica en la
empresarial”, es decir, gobiernos dispues- “Otra Colombia”, tiene que ver con ne-
tos a asociarse con iniciativas privadas y gocios ilegales y está subordinada a las es-
cívicas en la planeación y promoción del tructuras de poder propias de entornos de
desarrollo en el ámbito local y regional baja gobernabilidad en el país. Es decir,
(Moncayo, 2003, 55-59). donde el poder se administra por medio
de relaciones altamente personalizadas y
LA SEGURIDAD DEMOCRÁTICA poco institucionalizadas y las organiza-
Y LA GOBERNABILIDAD LOCAL ciones públicas juegan un papel mucho
EN LA “OTRA COLOMBIA” más predominante en el juego del poder
de lo que sucede en los principales cen-
No es de sorprender que hoy en día le co- tros regionales de expansión económicas,
rresponda a la “Otra Colombia” ser el es- donde las organizaciones privadas y sus
cenario principal donde el gobierno de juntas directivas predominan (Ogliastri,
Uribe aplica su política de seguridad de- 1988, 37).
mocrática, cuyos objetivos son combatir No hay que olvidar que fue particu-
el terrorismo y el narcotráfico, restablecer larmente en lugares que hoy pertenecen a
el control del territorio y proteger a la po- la “Otra Colombia” donde se vivió la vio-
blación. El argumento con el cual el go- lencia política más intensa durante la ex-
bierno soporta este esfuerzo es la noción periencia de descentralización política y
de que el modelo de Estado y gobierno administrativa en la década de los 80. El
local que se va a configurar en esos luga- desafío político, representado por los mo-
res, será de la misma naturaleza que aquel vimientos independientes que desde fina-

Capítulo 1
312

les de los años 70 y a lo largo de toda la ha sido acompañada en el resto del terri-
década de los 80 promovieron los paros torio por la configuración de lugares cuyo
cívicos y las movilizaciones rurales2 -al principal “atractivo económico” consiste
tiempo que el gobierno de Betancur en ofrecer custodia para mercancías ilega-
(1982-1986) promovía la elección po- les, que van desde el contrabando hasta
pular de alcaldes y la descentralización secuestrados, y la protección de activida-
política, al igual que una creciente trans- des de lavado de dinero por medio de tác-
ferencia de recursos públicos a las entida- ticas que van desde la adquisición de tierras
des territoriales como parte fundamental hasta la contratación de obras y suminis-
de su iniciativa de paz, causó alarma entre tros con el Estado en ámbitos locales. Por
las elites locales, los empresarios del nar- eso en la “Otra Colombia” es crítico para
cotráfico que comenzaban a invertir en la los intereses económicos vinculados a es-
compra de predios rurales y propiedades tas “actividades económicas dinámicas”
urbanas en todo el país, al igual que den- controlar las estructuras proveedoras de
tro de las fuerzas militares. Estos sectores seguridad y justicia, al igual que la asigna-
veían vínculos entre los movimientos cí- ción de los recursos públicos por medio
vicos y la insurgencia, que desde entonces de funcionarios y políticos a su servicio.
intensificaba la extorsión y el secuestro. La Así se consolidan zonas económicas don-
polarización política y social condujo en de estos “intereses dinamizadores” pueden
muchas de estas zonas a la organización de perpetuarse intermediando tanto en el
grupos de “autodefensa” por parte de las manejo de mercados de protección y vio-
elites y los nuevos propietarios rurales nar- lencia como en negocios comerciales y fi-
cotraficantes, así como al exterminio de nancieros no violentos. En este contexto,
movimientos políticos que competían elec- la lógica económica aconseja acumular
toralmente por el poder político local, en- activos para reducir los costos del uso de
tre ellos, la Unión Patriótica3. la violencia y, simultáneamente, elevar los
Desde entonces la concentración de costos de la competencia electoral, que
ingresos, inversión y economías de aglo- representa una amenaza excesivamente
meración en un número limitado de eco- riesgosa de perder el control de las condi-
nomías locales y regionales en Colombia, ciones críticas que garantizan el principal

2. Durante la mayor parte de este período, las poblaciones de sur del país (Nariño, Cauca, Putumayo,
Caquetá, Vaupés), Meta y los Llanos, Boyacá y la Costa Caribe, protagonizaron parte sustancial de una ola
de paros cívicos, reclamando inversión pública en servicios públicos, y movilizaciones rurales pedían el
apoyo a la producción campesina por medio de paros agrarios regionales, tomas de oficinas públicas e
invasiones de tierras. Ver Santana (1983: 122-130) citado por Helmsing (1986:181).
3. Ver: Romero M., “Democratización política y contrarreforma paramilitar en Colombia”, en Bull. Inst.
fr. Études andines, 29 (3), 2000, pp. 337-41.
313

“atractivo económico” de estas zonas4. tica, exige acciones de política pública di-
Precisamente esta combinación de cos- señadas explícitamente para invertir esa
tos bajos de competencia violenta y costos situación. Pero el sostenimiento de una
altos de competencia electoral, es la que la situación estable de “costos altos de com-
literatura identifica como la principal con- petencia violenta y costos bajos de com-
dición desestabilizadora del funcionamien- petencia electoral”, requiere no sólo de la
to de un régimen democrático: presencia de la fuerza pública y el fortale-
“Si la acción policial y judicial no lo cimiento administrativo del Estado en el
gra neutralizar a los actores violentos con ámbito local, sino también del fomento y
sentencias penitenciarias, entonces contri- diversificación de la base de actividades pro-
buye a alimentar racionalidades de con- ductivas por fuera de los actuales centros
traviolencia y mayor desprecio por la ley. regionales de expansión económica, al igual
El colapso de la democracia en Alemania que de mecanismos de participación ciu-
e Italia luego de la Primera Guerra Mun- dadana -que garanticen debidamente la
dial se inició con fuerzas policiales politi- protección de los ciudadanos que partici-
zadas y poderes judiciales débiles que se pen de ellos-, para vigilancia de las autori-
mostraron negligentes a castigar el ‘hooli- dades locales y el control de la corrupción.
ganismo’ político” (Bermeo, 2003, 164). Estas últimas condiciones implican dos
Es decir, en el ámbito de la “Otra Co- transformaciones de fondo en el pensa-
lombia” -donde la formula vigente es la miento de las elites económicas y políticas
de “costos bajos competencia violenta, en Colombia. La primera, el reconocimien-
costos altos de competencia electoral”-, la to de que los objetivos de desarrollo terri-
viabilidad de la gobernabilidad local ba- torial del país no pueden fijarse con base
sada en una institucionalidad democrá- en criterios de corto plazo, propios de los

4. Esta lógica explica la tendencia a infiltrar y “privatizar” las funciones de gobierno a favor de grupos de
interés especial en muchos ámbitos locales, lo cual se refleja en aquellos de municipios de la “Otra Colom-
bia”, donde a pesar de la elección popular de alcaldes, el poder se ha mantenido de modo ininterrumpido
en manos de un mismo grupo o coalición política, y el algunos casos, de una misma familia. Una investiga-
ción periodística conjunta realizada por siete medios de comunicación en 2002 acerca de la coalición en el
Departamento de Caldas, reveló las actividades de un puñado de políticos regionales -liderados por los
senadores Víctor Renán Barco y Ómar Yepes-, que a través de sus lugartenientes manejan 23 de los 27
municipios del Departamento y cuando actúan en forma conjunta, tienen asegurada la mayoría en la
Asamblea Departamental y el Concejo de Manizales. Según el diario La Patria, gracias a casi seis lustros de
ejercicio ininterrumpido del poder, la coalición controla en Caldas la Gobernación, las delegaciones de la
Procuraduría, la Contraloría, la Registraduría del orden nacional, la Defensoría del Pueblo, Inurbe, Sena,
Consejo Seccional de la Judicatura, Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, Plan Colombia, Instituto
de Seguro Social, Invías, Telecom, la Corporación Regional de Caldas y la Licorera de Caldas.Ver: “Las
sombras en el crimen de Orlando Sierra”, Revista Cambio, marzo 4 de 2000, en: http://www.cambio.com.co/
web/interior.phpidp=71&ids=2&ida=2861.

Capítulo 1
314

mecanismos de mercado, que predominan mundo globalizado en el que se consoli-


en el ámbito de los centros regionales de dan organizaciones criminales transnacio-
expansión económica. La sostenibilidad de nales que controlan ingresos anuales
largo plazo de estos centros regionales de- estimados por el orden de los US $1.500
penderá del reconocimiento por la diri- millardos de dólares5, es grande la vulne-
gencia política y económica del país, de la rabilidad del aparato y rentas estatales en
relevancia geopolítica de crear estructuras territorios de baja gobernabilidad a la
democráticas de gobernabilidad local en amenaza de subordinación por parte de
la “Otra Colombia”, y la necesidad de sub- intereses criminales deseosos de controlar
vencionar el establecimiento de bases pro- territorios que garanticen condiciones de
ductivas legales y legítimas para copar seguridad y protección para sus activida-
económica, social y políticamente aque- des, con la complicidad de las autorida-
llos territorios que de otra manera serán des políticas y de gobiernos locales. La
funcionales al desarrollo de mercados de presencia policial y judicial, así como de
violencia y custodia para mercancías y ac- delegados del Ministerio Público en mu-
tividades ilegales, los cuales pelechan con chos casos no ha evitado la corrupción ad-
la formula “bajo costo de competencia ministrativa y menos aún, la comisión de
violenta y altos costos de competencia abusos contra comunidades locales de
electoral”. minorías étnicas, particularmente en zo-
La segunda transformación, es el nas de influencia paramilitar como Cho-
reconocimiento que los mecanismos có, Sierra Nevada de Santa Marta y los
estatales de control de la corrupción ad- Llanos Orientales, entre otras.
ministrativa y de protección de la ciuda- Por consiguiente, es imperativo dise-
danía son, por sí solos, insuficientes para ñar mecanismos de participación públi-
sostener la gobernabilidad democrática ca-privada para el control de la corrupción
en ámbitos locales pertenecientes a la administrativa y los abusos contra la po-
“Otra Colombia”. En el contexto de un blación local en territorios de baja gober-

5. Tanto la Agencia Central de Inteligencia de EE.UU. -CIA- como la Organización del Tratado del Atlánti-
co Norte -OTAN- estiman que el agregado mundial de actividades relacionadas con el narcotráfico genera
ingresos brutos anuales de entre US $ 300 - 500 millardos. Otro rubro importante es la corrupción adminis-
trativa, cuyo costo anual para la economía mundial se estima por el orden de US $500 millardos. Entre los
“rubros menores” se destacan US $10-12 millardos por la disposición ilegal de materiales tóxicos y riesgos, US
$ 10 millardos originados en la piratería a la propiedad intelectual; otro tanto en robo de automóviles en
EE.UU. y Europa; US $7 millardos por la trata transnacional de personas y tráfico de migrantes y US $1
millardo originado tanto en el tráfico ilegal de armas, entre otros. Según la CIA, las principales organizaciones
y redes criminales están asentadas en América del Norte, Europa Occidental, China, Colombia, Israel, Japón,
México, Nigeria y Rusia y se prevé que su actividad continúe en expansión en el mundo durante las primeras
décadas del siglo XXI. Ver National Intelligence Council (2000); Boutin, C. (sin fecha).
315

nabilidad. Para ser funcionales estos me- Moncayo, E., “Nuevas teorías y enfoques concep-
canismos deben ser integrados por acto- tuales sobre el desarrollo regional: ¿hacia un
res y organizaciones no estatales con nuevo paradigma?”, Revista de Economía Ins-
suficiente autonomía y solvencia política titucional, Vol. 5, No. 8, 2003, pp. 32 - 65.
y tecno-económica para convocar, cuan- National Intelligence Council, Global Trends 2015.
do sea necesario, los recursos requeridos A Dialogue About the Future With Nongoven-
para prevenir que prosperen iniciativas ment Experts, Washington: NIC, 2000.
inspiradas en la fórmula “bajos costos de Ogliastri, E., Estructura de poder y desarrollo en once
competencia violenta, altos costos de com- ciudades intermedias de Colombia, Bogotá:
petencias electoral”. Un compromiso sóli- Universidad de los Andes, 1988.
do y de largo plazo de las elites económicas Romero M., “Democratización política y contrarre-
y políticas con los dos propósitos mencio- forma paramilitar en Colombia” en Bull. Inst.
nados, es condición necesaria para el afian- fr. Études andines 29, 2000, (3): 331-357.
zamiento en la “Otra Colombia”, de la Sarmiento, E., “El ALCA en contravía del desarro-
gobernabilidad local en un marco de insti- llo”, Economía Colombiana, No. 299, 2003,
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Capítulo 1
316

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