Está en la página 1de 30

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la

izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas
os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la
izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas
os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la
izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas
os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la
izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

os imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la


izquierda, marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les
relaciona? Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del
caballito de mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo,
sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estasos
imágenes, dos hipocampos: a la derecha, un pez teleósteo; a la izquierda,
marcada con cifras y letras, una región cerebral. ¿Qué les relaciona?
Probablemente su forma. Fíjese bien, ¿reconoce la silueta del caballito de
mar en el corte coronal de un encéfalo humano? Yo, sinceramente, no.
En cambio, Julio César Arancio fue de otro parecer. El catedrático de
anatomía de Bolonia, quien viviera entre 1530 y 1589, preparó
posiblemente un cerebro a semejanza del que aparece sobre estas

También podría gustarte