Sociología de la cultura.

Es el resultado de la interacción de la sociedad con el ambiente, por lo que debe

entender que está constituida por los conocimientos, aptitudes y hábitos adquiridos por
el hombre como miembro de una sociedad. La cultura y el medio están estrechamente
relacionados: la primera es una forma de adaptación al medio, si este se transforma o
modifica, la cultura también experimenta transformaciones, cambios o readaptaciones

Podemos partir que la cultura es el resultado de la actividad humana productiva y

espiritual y que sus fases de reproducción fundamentales la componen: la creación y
producción de valores culturales, la acumulación y conservación de los mismos; la
difusión y/o circulación de esos valores y la apreciación, percepción, disfrute y/o
utilización de estos por la población.

Según “Mario Vargas Llosa” la cultura ha tenido diferentes significados y matices,

durante muchos siglos fue algo inseparable de la religión y de la teología.

En Grecia estuvo marcada por la filosofía y en Roma por el derecho, en la época del
renacimiento estuvo marcada por la literatura la escultura, el arte, en la época de la
ilustración fue marcada por la ciencia y los diferentes descubrimientos científicos.

A pesar de tan variadas ideologías y conceptos ilustrados a cerca de la cultura, a lo largo

del tiempo y hasta nuestros días, cultura es la suma de factores y disciplinas, según el
contexto social es un patrimonio de ideas, valores, conocimientos, costumbres,
ideologías y descubrimientos. En toda sociedad existen personas cultas y personas
incultas y esto se puede determinar por la forma de actuar , la forma de vestirse según
su credo y religión, su manera de ser sus ideologías y el ambiente en el cual se
desarrolla su diario vivir. En nuestros días la verdadera cultura se ha ido desvaneciendo,
aunque todas las personas se crean cultas la verdadera esencia de lo que es una persona
culta se ha ido desvaneciendo por la falta de respeto.

La sociología cultural  es la actitud o punto de vista por el que se analiza el mundo de
acuerdo con los parámetros propios de cada cultura. Su  filosofía defiende la validez y
riqueza de todo sistema cultural y niega cualquier valoración absolutista  moral y
ética de los mismos. Se opone al etnocentrismo y al universalismo cultural de carácter
positivo que afirma la existencia de valores, juicios morales y comportamientos con
valor absoluto y, además, aplicables a toda la humanidad.