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Civilizar.

Ciencias Sociales y Humanas


ISSN: 1657-8953
yadira.caballero@usa.edu.co
Universidad Sergio Arboleda
Colombia

Pérez, Alejandro
La metafísica como la ciencia de la esencia: E. J. Lowe y Tomás de Aquino
Civilizar. Ciencias Sociales y Humanas, vol. 13, núm. 25, julio-diciembre, 2013, pp. 177-188
Universidad Sergio Arboleda
Bogotá, Colombia

Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=100230029010

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Civilizar 13 (25): 177-188 julio-diciembre de 2013

La metafísica como la ciencia de la esencia:


E. J. Lowe y Tomás de Aquino*

Metaphysics as the Science of Essence:


E. J. Lowe and Thomas Aquinas
Recibido: 20 de febrero de 2013 - Revisado: 20 de mayo de 2013 - Aceptado: 25 de septiembre de 2013

Alejandro Pérez**

Resumen
La metafísica después de ser ignorada por años ha regresado al centro de la
escena en la filosofía contemporánea. Tomás de Aquino ha vivido una historia
muy parecida, lo que dio nacimiento al tomismo analítico. A pesar de los tra-
bajos desarrollados en esta línea de investigación, la metafísica del Aquinate
ha sido fuertemente ignorada. Sin embargo, la metafísica de Tomás de Aquino
tiene una ventaja, poco discutida entre los tomistas y tomasinos, y es la de ser
una metafísica esencialista. Así, en armonía con el trabajo del metafísico E. J.
Lowe, quien presenta su metafísica como “esencialista seria”, se quiere mos-
trar que la metafísica del Aquinate tiene las mismas virtudes del “esencialismo
serio”, lo que permite postularla como una posición válida y plausible para la
metafísica contemporánea.

Palabras clave
E. J. Lowe, Tomás de Aquino, metafísica, esencialismo, tomismo analítico.

Abstract
Metaphysics after being ignored for years has returned to the center of the stage
in contemporary philosophy. Thomas Aquinas has lived a very similar story,
which gave birth to analytical Thomism. Despite the work done in this line *
Artículo de reflexión derivado de
of research, the metaphysics of Aquinas has been heavily ignored. However, investigación de la maestría en la
the metaphysics of Thomas Aquinas has an advantage, little discussed among Universidad Aix-Marseille, Aix-en-
Provence, Francia.
Thomists and “Tomasinos”, and it is the fact that it is essentialist metaphysics. **
Doctorando de Filosofía en la École
So, in keeping with the work of metaphysical E. J. Lowe, who presents his des Hautes Études en Sciences Socia-
les de París, París, Francia. Miembro
metaphysics as “serious essentialist” it is shown here that the metaphysics of doctorando del laboratorio Institut
Aquinas has the same virtues of “serious essentialism”, which allows to postu- Jean-Nicod, París, Francia.
Correo electrónico:
late it as a valid and plausible position for contemporary metaphysics. alejotou@gmail.com.
Para citar este artículo use: Pérez, A.
Key words (2013). La metafísica como la ciencia
de la esencia: E. J. Lowe y Tomás de
E. J. Lowe, Thomas Aquinas, metaphysics, essentialism, analytical Thomism. Aquino. Revista Civilizar Ciencias
Sociales y Humanas, 13(25), 177-188.
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Introducción De igual manera sucede entre E. J. Lowe


y Tomás de Aquino, aunque el lazo que los
La filosofía analítica1 donde en un prin- une es más grande que el que unía al filósofo
cipio se rechazó la metafísica, se convirtió en austríaco con el filósofo medieval. Tomás de
un terreno próspero para el desarrollo de esta Aquino y Lowe son dos metafísicos de tradición
disciplina. Entre los pensadores más importan- aristotélica. Ambos emplean el mismo lenguaje
tes de esta corriente, se encuentra el filósofo in- y llegan a igual conclusión por vías diferentes:
glés Emmanuel Jonathan Lowe, quien postuló la sola metafísica posible debe ser esencialista
recientemente una metafísica esencialista que seria. Esto puede ayudar al lector a realizar una
se inspira en la tradición aristotélica y lockea- coral monástica donde la lectura se efectúa de
na. Su metafísica se funda en un “esencialismo los dos lados. Por tanto, no se trata de un trabajo
serio”2 y se caracteriza por mostrar una visión histórico. La razón es que sería necesario
coherente, argumentada y seria del mundo. El introducir los puntos de vista de los dos autores
tema de este artículo se centra alrededor de la dentro del contexto en el cuál se crearon, lo
posición del autor inglés. No se trata en ningún que hubiera extendido considerablemente el
momento de defender el esencialismo serio, presente artículo.
ya que esta es otra tarea, sino que se pretende
mostrar porqué Tomás de Aquino puede pen- Por ese hecho, y de manera poco habitual
sarse como un antecesor del esencialismo serio, se comenzará por dar cuenta del enfoque
tal como propone Lowe, para concluir que el metafísico de E. J. Lowe: el esencialismo serio.
tomismo analítico entra en las discusiones me- De nuevo se insiste en que no se trata de relatar
tafísicas contemporáneas. La tesis del presente la historia de esta metafísica, sino de introducirla
artículo es como sigue: explicando en qué consiste. Después de este
primer punto, se desarrollará la tesis principal de
1. La metafísica esencialista seria es una este estudio: la metafísica de Tomás de Aquino
posición válida en la actualidad. presenta las mismas ventajas y precede la
metafísica de Lowe. Para eso se mostrará cómo
2. La metafísica tomasina es una metafí- y porqué Tomás de Aquino es, sin duda alguna,
sica esencialista seria. un metafísico esencialista serio. En este sentido,
se llega a la conclusión de que el tomasino está
3. Entonces la metafísica tomasina es en su derecho de insertar la metafísica tomasina
una posición válida en el presente. en las metafísicas esencialistas serias y en las
discusiones contemporáneas en metafísica.
Aunque se pueda pensar que se trata de
un anacronismo, se mostrará que no es el caso, El esencialismo serio de E. J. Lowe
ya que las dos metafísicas son idénticas, es
decir, la misma. Este tipo de trabajo se inscri- En este artículo no se hará referencia a
be en la tradición de varios autores analíticos. las diferentes perspectivas esencialistas de la
Por ejemplo, Roger Pouivet (1997) en su li- filosofía analítica, solo se concentrará en el
bro Après Wittgenstein, saint Thomas3, indica esencialismo de Lowe4. Para comprender qué
cómo, aunque Wittgenstein no sea ni un lector es el esencialismo, se hará referencia entonces
ni un comentador de Tomás de Aquino, el filó- a la tesis del filósofo inglés, quien le atribuye el
sofo austríaco puede ser una vía de acceso a la nombre de esencialismo serio. Este esencialismo
filosofía del Aquinate. Aún más, Pouivet invita es notablemente explicado en un artículo
a leerlos juntos, lo que facilita una explicación publicado en francés, en la antología de Frédéric
mutua de los dos autores. Nef y Emmanuelle García: Métaphysique
contemporaine: propriétés, mondes possibles et

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personnes: “la métaphysique comme science de formular la siguiente pregunta que ilustrará la
l´essence”5. dificultad: ¿es viable considerar el ADN como
la esencia de un ser vivo? Si se toma como base
E. Jonathan Lowe (2007) presenta en este un esencialismo serio, la respuesta es no, debido
artículo una metafísica digna de su nombre. Así, a que el ADN es considerado por Lowe como
en las primeras líneas se puede leer: “¿con qué una entidad. En este error parecen caer varios
método de investigación podemos esperar ad- filósofos de tradición aristotélica como Enrico
quirir un conocimiento metafísico, a condición Berti, quien afirma que Martha Nussbaum y
que un conocimiento digno de ese nombre exis- Hilary Putnam están en lo correcto cuando
ta?” (p. 85). Lowe piensa que la metafísica es piensan el ADN, como la forma dentro de la
la ciencia que estudia las categorías ontológicas teoría del hilomorfismo del estagirita (Berti,
de lo actual y de lo posible. Para llevar a cabo 2008, p. 219)6. La razón es que obligaría a
esta tarea, la metafísica debe emplearse en un tomar el ADN como una entidad suplementaria,
ejercicio intelectual a priori o ejercicio de lo po- lo que conlleva a una búsqueda ad infinitum y
sible, y su fundamento reside en un método par- absurda, y un tal conocimiento no sería posible.
ticular al que llamó: esencialismo serio. ¿Qué Es también lo que conduce a Lowe a insistir
debemos entender por esencialismo serio? en la diferencia entre necesidad metafísica y
necesidad física; por ejemplo, que “el agua es
La definición dada por Lowe es la si- H2O” es una necesidad física mas no es una
guiente: “la esencia de X es la identidad mis- necesidad metafísica.
ma de X” (Lowe, 2007, p. 88). Lowe, se inspira
en la definición de John Locke, aunque admite Si en la concepción de la metafísica se ad-
su tradición aristotélica (p. 88). X es entonces mite que es la ciencia de lo posible, esto implica
cualquier entidad perteneciente a una categoría una valiosa tesis epistemológica y ontológica:
ontológica. Dentro de la definición de la esen- la esencia precede la existencia, es decir, que
cia, también se debe destacar la existencia de la es posible conocer algo antes que exista. En
esencia general (la cual no se tratará dentro de este punto E. J. Lowe se distingue de Kripke y
su texto); así, si X es alguna cosa de la categoría de Putnam para quienes el conocimiento de la
K, X es entonces lo que es ser un K, es decir, una esencia es a posteriori. Es la razón que conduce
esencia general. Sin embargo, la esencia funda- a Lowe a afirmar que todos los hechos metafí-
mental es la esencia individual, es decir, lo que sicos, sean necesarios, posibles, existentes o no
es ser el individuo de tipo K que es X. Ahora existentes se fundan en las esencias. Conocer la
bien, ¿cuál es la necesidad de las esencias? La esencia es llegar a la identidad de algo.
necesidad se conecta con la posibilidad de ha-
blar de una manera inteligible de X, si no sabe- El esencialismo serio consiste entonces
mos lo que es X. De este modo, la esencia es lo en dos tesis: (i) ontológica, donde se asegura
que permite hablar de las cosas de una manera que la esencia no puede ser una entidad, y (ii)
inteligible, y la experiencia directa de un obje- ontológica y epistemológica, que expone que
to de pensamiento reside en capturar la esencia la esencia precede la existencia. Gracias a es-
de algo. La esencia es entonces necesaria para tas características se puede determinar si una
una posible experiencia y es el fundamento de metafísica, es o no, una metafísica digna de su
la metafísica. nombre.

Ahora bien, ¿Es posible pensar la esencia Un esencialismo así descrito, conlleva a
como una entidad? Este interrogante es sin duda la afirmación de que (iii) la esencia es el fun-
importante para la reflexión de toda metafísica. damento de toda verdad modal (Lowe, 2007, p.
Siguiendo el ejemplo dado por Lowe, cabe 107), es decir, que lo que se dice de las cosas

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se expresa en relación con su naturaleza y no de Jan Aertsen (2003) que en el siglo XIII la
en cuanto al lenguaje. Gracias a la indispensa- metafísica se transforma en una ontología (p.
bilidad de las esencias, el esencialismo serio es 126), gracias a esta distinción realizada por
una tesis interesante frente a las modalidades Tomás de Aquino.
metafísicas (iv), ya que la noción de esencia no
presupone entidades modales como lo hace la Es en el opúsculo De ente et essentia
teoría de los mundos posibles. (DEE) escrito hacía el año 1256 (uno de los
primeros escritos del Aquinate), que Tomás de
La metafísica esencialista de Tomás Aquino sustenta las dos tesis fundamentales
de Aquino para considerar la metafísica como la ciencia de
la esencia. Así se lee en el prólogo que el ser
Un esencialismo serio comprende las te- y la esencia son lo que es inicialmente conce-
sis (i) y (ii). En cuanto a (iii) y (iv), son conclu- bido por la inteligencia11; sin embargo, es im-
siones metafísicas de este esencialismo. Aquí se prescindible distinguir la primera conclusión
quiere mostrar que (i) y (ii) son cruciales en la metafísica de nuestro conocimiento, la cual es
metafísica de Tomás de Aquino y que, por con- el ser (Aquino De, 1972, QDV, q.1, a.1)12, y el
siguiente, (iii) y (iv) se aplican a la metafísica objeto de la inteligencia, es decir, la esencia.
del Aquinate. La relación entre el ser y la esencia es profun-
da, ya que la noción de ser incluye la noción
Para comenzar este estudio de la meta- de esencia. De esta manera se encuentra en la
física del Aquinate se determinarán el sujeto Suma teológica (ST): “en cambio, el objeto pro-
(subjectum) y el fin (finis) de la metafísica, es pio del entendimiento humano, que está unido
decir la naturaleza de esta ciencia. Tomás de a un cuerpo, es la esencia o naturaleza existente
Aquino sostiene que: en la materia corporal” (Aquino De, 1889, ST,
Ia, q. 84, a. 7, ad respondeo)13. Más adelante
[…] el sujeto de una ciencia es en efecto, se tratará con mayor profundidad este opúsculo.
aquello de quien se busca las causas y las pro-
piedades y no las causas mismas del género Ya se formuló la tesis según la cual la me-
estudiado, ya que el conocimiento de las cau- tafísica de Tomás de Aquino puede valorarse
sas de cada género es el fin al cual una ciencia como la ciencia de la esencia, lo que implica
puede llegar7 (Aquino, In Meta8. prol).9
reflexionar sobre un conocimiento metafísico,
que es un conocimiento esencialista. ¿Qué se
Siguiendo el texto del Aquinate, debemos debe designar como conocimiento metafísico?
concluir que la metafísica es la ciencia que
considera el ens in quantum ens como su sujeto, En la cuestión 84 del primer tomo de la
y Dios como el fin al cual la metafísica puede ST, el Aquinate analiza la pregunta sobre “cómo
llegar. Así, la teología es la ciencia que estudia el alma, unida al cuerpo, entiende lo corporal,
a Dios, porque Él es el sujeto de esta disciplina, que le es inferior” (Ia, q. 84). En el primer artí-
sin embargo en la metafísica Dios es, por así culo de este texto se analiza si “el alma, ¿cono-
decirlo, un encuentro accidental. Ahora bien, ce o no conoce lo corporal por el entendimien-
también se puede decir que la metafísica es la to?” (Ia, q. 84, a. 1). En el sed contra del primer
ciencia del ens commune. Tomás de Aquino es, artículo, el autor expone una objeción que lo
en este punto, un innovador frente a Avicena, llevará a mantener su tesis principal:
Siger de Brabante y Duns Scoto, para quienes
Dios entraba de algún modo en la noción del En cambio está el hecho de que la ciencia se
ser en general, por ende, convirtiéndose en el encuentra en el entendimiento. Por lo tanto, si
sujeto de la metafísica10. Así se lee de la pluma el entendimiento no conoce lo corporal, hay

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que deducir que no puede haber ciencia de lo Tomás de Aquino (1889) es entonces
corporal. De esta forma, la ciencia natural, que un crítico de la teoría materialista del conoci-
trata del cuerpo móvil, desaparece14 (Aquino miento. Como se puede leer en la ST: “que los
De, 1889, ST, Ia, q. 84, a. 1, sed contra). primeros filósofos que investigaron la naturale-
za de las cosas, pensaron que en el mundo no
De Aquino piensa en Heráclito, quien existía nada fuera de lo corporal” (Ia, q. 84, a.
sostuvo que “no es posible tocar dos veces 1, ad respondeo). Esta es la tesis según la cual
el agua de la corriente de un río15” (Ia, q. 84, “lo semejante es conocido por lo semejante”
a. 1, ad respondeo). Teniendo en cuenta la (Ia, q. 84, a. 2, ad respondeo). No obstante, el
tesis de Heráclito, quien sostiene que todo es Aquinate no adhirió a esta posición. Según él,
puro devenir, De Aquino adoptará la tesis de “lo semejante es conocido por lo semejante”
Aristóteles. Según el estagirita, todas las cosas implica que las cosas exteriores al alma puedan
están compuestas de acto y potencia. Dicha conocer sus semejantes. Pero no puede ser el
afirmación permite a Aristóteles desarrollar caso. Anthony Kenny anota que:
su teoría del hilomorfismo, según la cual todo
está compuesto de una materia y una forma. Los materialistas modernos identifican el alma
Así el Aquinate adhiere al hilomorfismo, lo con el cerebro. Esto quiere decir que identi-
que le permite sostener que puede haber un fican el problema de explicar cómo la mente
conocimiento del mundo material que se halla conoce X con el de explicar cómo X está en
en un cambio constante. El conocimiento el cerebro (no literalmente, sino en forma ci-
implica entonces algo que no cambia: frada). Una vez demostrada la presencia de un
“código” de X en el cerebro (o mejor dicho,
De la misma manera, la forma sensible se en- la presencia posible, por lo que nosotros sa-
cuentra diversamente en lo exterior al alma y bemos, de ese “código” de X), creen haber ya
en el sentido que recibe las formas de lo sen- explicado nuestro conocimiento de X; pero,
sible inmaterialmente. Ejemplo: el color del de hecho, la dificultad subsiste, ya que el pro-
oro sin el oro. Igualmente, el entendimiento blema del conocimiento es precisamente el de
percibe las especies de los cuerpos materiales codificar una estructura (Kenny, 2000, p. 98).
y móviles, inmaterial e inmóvilmente, según
su propia naturaleza, pues lo recibido está en Al contrario de los materialistas, el
quien lo recibe según el modo de ser de este. Aquinate sigue la tesis de Aristóteles. Kenny
Por lo tanto, hay que concluir que el alma co- habla de esta como la “vía media” entre el
noce lo corporal por el entendimiento inma-
idealismo innato de Platón y el crudo empirismo
terial, universal, y necesariamente16 (Aquino
De, 1889, ST, Ia, q. 84, a. 1, ad respondeo).
de Demócrito17, así se lee en la ST:

Aristóteles mantuvo una postura intermedia.


Al explicar el proceso del conocimiento,
Con Platón admite que el entendimiento es
llama la atención el hecho de que el conocimien- distinto del sentido. Pero sostuvo que el sen-
to puede ser meramente inmaterial. Sin embar- tido no ejerce su operación propia sin que in-
go, no se piensa que para saber no se necesita tervenga el cuerpo, de tal manera que el sen-
de la materia, sino que se afirma su necesidad, tir no es un acto exclusivo del alma, sino del
ya que la inteligencia recibe la especie del cuer- compuesto […]. Aristóteles concuerda con
po material. El conocimiento es entonces inma- Demócrito en decir que las operaciones de la
terial ya que solo se puede conocer realmente parte sensitiva son causadas por impresiones
algo por esta vía. Es por eso que se dice que el de los objetos sensibles en el sentido, pero no
conocimiento es metafísico, puesto que su obje- a modo de emanación, como sostuvo Demó-
to es la esencia, es decir, algo sin materia. crito, sino por medio de una operación […].
Nada corpóreo puede influir en algo incorpó-
reo. De este modo, según Aristóteles, para que
se produzca la operación intelectual no basta

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la simple impresión de los cuerpos sensibles, ên einai o en latín quod quid erat esse), es decir,
sino que se precisa algo más digno, porque, la esencia?:
como él mismo dice, el agente es más digno
que el paciente. Sin embargo no en el sentido Es esencial a la naturaleza visible existir en un
de que la operación intelectual sea produci- individuo que no es tal individuo sin materia
da en nosotros, como sostuvo Platón, sino en corpórea, como es esencial a la naturaleza de
cuanto que un agente superior y más digno, la piedra existir en esta piedra, y a la natu-
llamado entendimiento agente, y del que ya
raleza del caballo es esencial existir en este
dijimos algo, por medio de la abstracción hace
caballo. Por lo tanto, de forma verdadera y
inteligibles las imágenes recibidas por los
completa no se puede conocer la naturaleza de
sentidos18 (Aquino De, 1889, ST, Ia, q. 84, a.
la piedra o la de cualquier otro objeto material
6, ad respondeo).
si no se la conoce existente de forma concreta.
Lo concreto lo percibimos por los sentidos y
Se hace referencia a la vía media del por la imaginación. Consecuentemente, para
Aquinate cuando se habla de un conocimien- que el entendimiento entienda en acto su
to metafísico, ya que lo sensible, como él lo objeto propio, es necesario que recurra a las
decía, es de alguna manera la causa de la ma- imágenes para descubrir la naturaleza univer-
teria. Por tanto, el conocimiento es meramente sal como presente en un objeto particular. En
metafísico. cambio, si el objeto de nuestro entendimiento
fuesen las formas separadas, o si las natura-
lezas de las realidades sensibles subsisten in-
Mostrando que el conocimiento es inma-
dependientemente de lo concreto, como dicen
terial, se define por ende que es metafísico, y
los platónicos, no sería necesario que nuestro
esto es debido a que su objeto es la esencia: “en entendimiento recurriera siempre a las imáge-
cambio el objeto propio del entendimiento hu- nes para entender19 (Aquino De, 1889, ST, Ia,
mano, que está unido a un cuerpo, es la esencia q. 84, a. 7, ad respondeo).
o naturaleza existente en la materia corporal”
(Aquino De, 1889, ST, Ia, q. 84, a7, ad respon- El saber es entonces metafísico, ya que
deo). Lawrence Dewan (2006) expresa que: para conocer de una manera real y perfecta, se
“un artículo sobre la naturaleza como objeto de requiere conocer la esencia. La metafísica de
la metafísica, es como lo veremos, un artículo Tomás de Aquino es la ciencia del ser en cuan-
sobre la esencia” (p. 205). Los términos “na- to ser, pero como lo pensaba Aristóteles, a sa-
turaleza” y “quididad”, son dos sinónimos de biendas de que conocer una cosa es conocer su
“esencia”. La esencia es lo que hace que algo ousia, es decir, la esencia. El ser primero, en
sea lo que es, incluso si su materia cambia. Así, el sentido inicial, dice Aristóteles (1982), in-
la esencia es en la teoría del hilomorfismo, lo dica precisamente la substancia (1028a12-14).
que Aristóteles y Tomás de Aquino, llaman Se cree que De Aquino es un estudiante fiel de
la “forma” (del griego morphè) de la materia Aristóteles en este punto, según el cual, la me-
(hylè). Además, se puede decir que los térmi- tafísica de Aristóteles es esencialista, enfoque
nos: a) naturaleza (del latín natura y del griego que adopta el Aquinate, como se asegura en este
physis); b) quididad (del latín quidditas y del artículo.
griego to…einai con un nombre en el dativo, o,
to ti ên einai); c) forma (a partir del latín forma A propósito de lo que se acaba de de-
y del griego eidos); d) esencia (del latín essen- cir, cabe resaltar la interpretación de Eleonore
tia y del griego to ti esti); e) causa (del latín Stump, quien enuncia respecto de la noción de
causa y del griego aition), y f) substancia (del “especies” que:
latín substancia y del griego ousia) pueden, de-
pendiendo de su contexto, significar lo mismo: El intelecto recibe las especies a través de una
¿qué hace que algo sea lo que es (en griego to ti recepción espiritual, sin embargo ésta no es

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en sí un cambio en algo material, ya que el Hay en nuestra conclusión una tesis de carác-
intelecto no opera en un órgano corporal, se- ter histórico: en los autores mencionados no
gún Aquino. Por otra parte, como mis ejem- se encuentra –algunos lo han querido ver– la
plos anteriores lo demuestran, es perfecta- distinción real entre esencia y existencia, y,
mente posible tener la recepción espiritual de por lo tanto, no se da el hallazgo de la dimen-
una forma inmaterial que consista en ciertos sión existencial que se da en Santo Tomás.
cambios en la materia, tales como las líneas (Beuchot, 1992, p. 27).
impresas en el mapa de la calle. Los eruditos
han contestado este punto de vista, pero creo Por esa razón, E. J. Lowe viene a ser el
que los textos son decididamente a favor de predecesor de Tomás de Aquino.
la conclusión de que, para los sentidos, la re-
cepción espiritual de las especies sensibles se
En el estudio del opúsculo De ente, la
produce es un cambio en la materia del órgano
corporal del sentido20 (Stump, 2003, p. 253).
cuestión de la esencia y la existencia es inevita-
ble. Como se ha mostrado, este punto es funda-
mental para pensar la metafísica como ciencia
Entonces, la recepción de las especies, se-
de la esencia en De Aquino. La diferencia en
gún Stump, es inmaterial, no obstante, consiste
sí es crucial en la metafísica del Aquinate: esta
en un cambio material de un órgano corporal.
consiste en la distinción real entre el ser y la
esencia en todas las cosas, excepto en Dios. La
La distinción real del ser y la esencia dificultad de este argumento es su interpreta-
ción. Una de las interpretaciones por parte de
Este tema es central para entender que los tomistas, es la garantía de que la diferencia
el esencialismo serio es idéntico al esencialis- real entre una cosa y su ser, en todas las cosas
mo tomasino. Mauricio Beuchot expresa lo si- excepto en Dios, es una conclusión a la que se
guiente sobre la distinción en el Aquinate: llega desde el conocimiento de la existencia de
Dios. Esta interpretación inferencia se basa en
La tesis que deseamos sostener es la de que un texto del De ente que trata la naturaleza de
Santo Tomás de Aquino da la mejor solución la esencia de todas las sustancias inmateriales.
a este problema. Dice que en los entes crea-
No vamos a entrar en una explicación profunda
dos la esencia y la existencia (o esse) tienen
una distinción real, pero no real de tipo físi- de porqué esta afirmación es incorrecta. Sin em-
co, como cosas que se separan una de otra, i. bargo, se estudiará el texto para probar que hay
e. como cosa-y-cosa separables, sino real de una distinción real entre el ser y la esencia, y
tipo metafísico, esto es como co-principios de que no ha sido posible para el hombre discernir
una cosa […]. Procuraremos hacer ver que en entre el ser y la esencia vía el conocimiento de
los escolásticos anteriores a él se dieron in- la existencia de Dios. En efecto, leemos:
tentos, forcejeos para descubrir y precisar esa
distinción, pero sin alcanzarlo. Asimismo, nos Estas sustancias, si bien son formas sin mate-
esforzaremos por mostrar que incluso después ria, no tienen sin embargo la simplicidad de
de él hubo desviaciones e imprecisiones por cualquier punto de vista, por lo que serían acto
parte de sus mismos seguidores (Beuchot, puro, sino que tienen mezcla de potencia, y
1992, pp. 8-9). eso se muestra así. Todo lo que no es del con-
cepto de la esencia o de la quididad proviene
Como Beuchot lo quiere dejar ver, Tomás fuera y entra en composición con la esencia,
de Aquino es en la historia de la filosofía el puesto [que] ninguna esencia puede conce-
primer filósofo en comprender esta concepción birse sin sus partes esenciales. Sin embargo,
correctamente. Así Mauricio Beuchot, luego de cada esencia o quididad puede entenderse sin
que nada sea pensado sobre su existencia, de
estudiar a Mario Victorino, Boecio, Gilberto
hecho: yo puedo, en efecto, concebir lo que es
Porretano y Hugo de San Víctor, afirma: el hombre o un fénix y sin embargo ignorar si

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tienen la existencia en la naturaleza. Por tanto, la posibilidad de un solo ser (Non potest esse
es claro que la existencia [o el ser] es distin- nisi una). La obra parece mostrar que es erróneo
to distinta de la esencia o quididad21 (Aquino considerar la distinción del ser y la esencia a
De, 1933, DEE, cap. 3). partir del conocimiento de la existencia de Dios.
A pesar de que no se analizan los documentos
La dificultad aquí consiste en si hay una en los que se basa Joseph Owens, se puede
distinción de razón o real. Como se verá, De afirmar la imposibilidad de este argumento,
Aquino habla bien de una distinción real entre apoyándose en el texto de Tomás de Aquino:
la esencia y la existencia. De hecho, en la com- “yo puedo, en efecto, concebir lo que es el
prensión intelectual de la esencia, la existencia hombre o un fénix y sin embargo ignorar si
no está incluida en el sentido de una existencia tienen la existencia en la naturaleza23” (Aquino
presente. Lo que estamos diciendo con esto, es De, 1933, DEE, cap. 3.). El razonamiento en
que la esencia no incluye la existencia. No obs- contra de la tesis de Owens, se centra en el
tante, existe un caso donde no hay distinción real possum (puedo) enim intelligere (conocer). De
entre esencia y existencia: se trata del ser donde Aquino habla claramente de la posibilidad de
hay una identidad de esencia y existencia: un conocimiento y no de un razonamiento, es
decir no se discute sobre un conocimiento de
No podría ser de otra manera que en una rea- razón. Si fuera meramente viable mediante el
lidad cuya esencia sea su propia existencia; conocimiento de la existencia de Dios, Tomás
pero una tal realidad sólo puede ser única y
de Aquino no habría expresado la posibilidad
primera [...] Sin embargo, si asumimos una
realidad que es sólo la existencia, de tal ma- de conocer la esencia sin la existencia, y
nera que sea el existir mismo subsistente, este hubiera demostrado que la distinción que hace,
existir no recibirá ninguna adición de diferen- es una distinción de razón. Por lo anterior, la
cia; ya que entonces no sería sólo el acto de distinción real de la esencia y la existencia,
ser, pero el acto de ser y además una forma además de la posibilidad de conocer la esencia
alguna. Aún menos recibirá la adición de la sin la existencia, evidencia que no se alcanza
materia ya que no sería un existir subsistente el conocimiento de la esencia a través del
sino material. Así que si partimos de una rea- conocimiento de la existencia de Dios.
lidad que es su propia existencia, sólo puede
ser uno. Así que es necesario que en cualquier
otra realidad fuera de esta, otro sea su acto de Conclusión
existir, y otro su esencia o naturaleza o for-
ma22 (Aquino De, 1933, DEE, cap. 3). En Aquinas on being (2002), Anthony
Kenny sembró una crítica de la metafísica de
Este texto confirma la diferencia real Tomás de Aquino que acarrearía sin duda una
entre la existencia y la esencia, por “la unidad ausencia de trabajos metafísicos dentro del
de una realidad cuya esencia sería el existir” tomismo analítico (Kenny, 2002, p.154; Kerr,
(Lallement, 2001, p. 449), es decir, Dios, como 2012)24. Se espera con este artículo haber mos-
se señala en el escrito, Non potest esse nisi trado que un tal vacío no es justificado. Si se
una. La obra que se acaba de mencionar, es el quiere desacreditar la metafísica tomasina como
resultado del primer documento. Esto demuestra obsoleta o anticuada, primero se tiene que des-
la consistencia que tiene la argumentación de acreditar la metafísica esencialista contemporá-
la distinción real entre existencia y esencia. nea, que es una de las soluciones más atractivas
En primer lugar, el Aquinate proclama la en la actualidad.
afirmación de la distinción, entonces demuestra
apelando a una realidad donde no se puede Este estudio permitió formular la meta-
identificar la esencia con la existencia. El texto física del Aquinate como esencialista seria. En
clave se encuentra, parece, en la afirmación de efecto, como es el caso en Aristóteles, la esencia

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La metafísica como la ciencia de la esencia: E. J. Lowe y Tomás de Aquino 185

no puede entenderse como una entidad y, como Charles Martin, George Molnar, George Bealer,
Tomás de Aquino fue el primero en sostenerlo John Bigelow, Caroline Lierse, Evan Fales,
en el De ente, la esencia precede la existencia. Crawford Elder, Nicholas Maxwell, Nancy
Estas dos tesis permiten considerar la esencia Cartwright, John Heil, Brian Ellis, y otros (Ellis,
en Tomás de Aquino y en Lowe, como el fun- 2001). Otra corriente es en la que se inscribe
damento de toda verdad modal, convirtiéndose el presente artículo, donde se halla a filósofos
en una opción frente a la teoría de los mundos como: Gary Rosenkrantz, David S. Oderberg,
posibles. Kit Fine, Emmanuel Jonathan Lowe, Tuomas
E. Tahko, Mauricio Beuchot, entre otros (Fine,
Si alguna vez se ha dicho que en la filoso- 1994; Oderberg, 2007; Tahko, 2012). Se puede
fía medieval no existió un tratado de metafísica, distinguir una última corriente, donde se afilian
se puede responder que De ente forma parte de autores como: David Wiggins y Alvin Plantinga
los grandes escritos metafísicos en la historia de (Beuchot, 1992).
la filosofía. Como se quiso exponer aquí, la me-
tafísica presente en uno de los primeros textos 5
El texto está disponible en inglés: Meta-
del Aquinate, es una posición metafísica rigu- physics as the Science of Essence (2006) en:
rosa y seria. De esta manera, se quiere postular http://ontology.buffalo.edu/06/Lowe/Lowe.pdf.
la metafísica esencialista del Aquinate a ser un
elemento constitutivo del tomismo analítico, 6
Una objeción de Berti, es que por su par-
pensado no como una exégesis estricta o una te no considera el ADN como una entidad. No
hermenéutica correcta de Tomás de Aquino, obstante en su tesis parece hallarse varias difi-
sino como un pensamiento contemporáneo que cultades. Se puede pensar en dos hermanos ge-
se inspira en la filosofía del intelectual medie- melos que tienen el mismo ADN; siguiendo el
val. La lectura simultánea de los dos autores en planteamiento de Berti, se concluye que tienen
estudio confirma la intuición de algunos escri- la misma forma, por ende, igual identidad, lo
tores de tradición analítica: Tomás de Aquino que acarrea un grave error.
(pero también los pensadores del pasado) puede
ser leído en paralelo con los filósofos contem- 7
“Hoc enim est subiectum in scientia,
poráneos. Así, el manejo de la metafísica del cuius causas et passiones quaerimus, non au-
Aquinate hace posible adentrarse en la lectura tem ipsae causae alicuius generis quaesiti. Nam
de E. J. Lowe y este último facilita una lectura cognitio causarum alicuius generis, est finis ad
actual del filósofo de la Edad Media. quem consideratio scientiae pertingit”.

Notas 8
In duodecim libros Metaphysicorum
Aristotelis expositio (In Meta).
Para un estudio de la filosofía analítica,
1

véanse Chico y Barroso (2007) y Glock (2008). 9


Las traducciones son de nuestra autoría
salvo indicación (Cf. Bibliografía).
Más adelante se explicará qué es el esen-
2

cialismo serio. 10
Para un estudio de esta cuestión, véase
John F. Wippel, “Essence and existence” (1982,
El libro ha sido traducido al inglés y
3 pp. 385-410).
próximamente al español.
11
“Quia parvus error in principio magnus
Existen varias corrientes en el esen-
4 est in fine, secundum philosophum in I caeli et
cialismo contemporáneo. En la primera se en- mundi, ens autem et essentia sunt quae primo
cuentra filósofos como: Sydney Shoemaker, intellectu concipiuntur, ut dicit Avicenna in

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186 Alejandro Pérez

principio suae metaphysicae, ideo ne ex eorum ita quod sentire non sit actus animae tantum,
ignorantia errare contingat (…)” (Aquino, DEE, sed coniuncti. Et similiter posuit de omnibus
prol.). operationibus sensitivae partis. Quia igitur
non est inconveniens quod sensibilia quae sunt
“Illud autem quod primo intellectus
12
extra animam, causent aliquid in coniunctum,
concipit quasi notissimum, et in quod concep- in hoc Aristoteles cum Democrito concordavit,
tiones omnes resolvit, est ens, ut Avicenna dicit quod operationes sensitivae partis causentur
in principio suae metaphysicae”. per impressionem sensibilium in sensum, non
per modum defluxionis, ut Democritus posuit,
“Intellectus autem humani, qui est co-
13 sed per quandam operationem. Nam et Democritus
niunctus corpori, proprium obiectum est quid- omnem actionem fieri posuit per influxionem
ditas sive natura in materia corporali existens; atomorum, ut patet in I de Generat. Intellec-
et per huiusmodi naturas visibilium rerum tum vero posuit Aristoteles habere operationem
etiam in invisibilium rerum aliqualem cognitio- absque communicatione corporis. Nihil autem
nem ascendit”. corporeum imprimere potest in rem incorpo-
ream. Et ideo ad causandam intellectualem
“Sed contra est quod scientia est in in-
14 operationem, secundum Aristotelem, non suf-
tellectu. Si ergo intellectus non cognoscit cor- ficit sola impressio sensibilium corporum, sed
pora, sequitur quod nulla scientia sit de corpo- requiritur aliquid nobilius, quia agens est
ribus. Et sic peribit scientia naturalis, quae est honorabilius patiente, ut ipse dicit. Non tamen
de corpore mobili.” ita quod intellectualis operatio causetur in no-
bis ex sola impressione aliquarum rerum su-
15
“non est possibile aquam fluvii curren- periorum, ut Plato posuit, sed illud superius et
tis bis tangere.” nobilius agens quod vocat intellectum agentem,
de quo iam supra diximus, facit phantasmata
“Et per hunc etiam modum forma sensi-
16 a sensibus accepta intelligibilia in actu, per
bilis alio modo est in re quae est extra animam, modum abstractionis cuiusdam”.
et alio modo in sensu, qui suscipit formas sensi-
bilium absque materia, sicut colorem auri sine “De ratione autem huius naturae est,
19

auro. Et similiter intellectus species, corporum, quod in aliquo individuo existat, quod non est
quae sunt materiales et mobiles, recipit im- absque materia corporali, sicut de ratione na-
materialiter et immobiliter, secundum modum turae lapidis est quod sit in hoc lapide, et de
suum, nam receptum est in recipiente per mo- ratione naturae equi quod sit in hoc equo, et
dum recipientis. Dicendum est ergo quod anima sic de aliis. Unde natura lapidis, vel cuiuscumque
per intellectum cognoscit corpora cognitione materialis rei, cognosci non potest complete
immateriali, universali et necessaria”. et vere, nisi secundum quod cognoscitur ut
in particulari existens. Particulare autem ap-
“Más adelante, Tomás alaba a Aristóteles
17
prehendimus per sensum et imaginationem.
por adoptar la vía media entre el idealismo inna- Et ideo necesse est ad hoc quod intellectus
to de Platón y el crudo empirismo de Demócri- actu intelligat suum obiectum proprium, quod
to” (Kenny, 2000, p. 100). convertat se ad phantasmata, ut speculetur na-
turam universalem in particulari existentem.
“Aristoteles autem media via processit.
18 Si autem proprium obiectum intellectus nos-
Posuit enim cum Platone intellectum differre a tri esset forma separata; vel si naturae rerum
sensu. Sed sensum posuit propriam operatio- sensibilium subsisterent non in particularibus,
nem non habere sine communicatione corporis; secundum Platonicos; non oporteret quod in-

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tellectus noster semper intelligendo converte- oportet quod in qualibet alia re praeter eam
ret se ad phantasmata”. aliud sit esse suum et aliud quiditas vel natura
seu forma sua”.
20
“The intellect receives species with
spiritual reception, but that spiritual reception “possum enim intelligere quid est homo
23

is not itself a change in something material, vel Phoenix et tamen ignorare an esse habeat in
because intellect does not operate in a bodi- rerum natura”.
ly organ, according to Aquinas. On the other
hand, as my examples above make clear, it 24
Véanse las críticas del libro de Anthony
is perfectly possible to have the spiritual re- Kenny hechas por Klima (2004) y Dewan
ception of an immaterial form that consists in (2005).
certain changes in matter, such as the lines
printed on the street map. Scholars have dis- Referencias
puted the point, but I think that the texts are
decisively in favor of the conclusion that, for Aertsen, J. (2003). La filosofía Medieval y los
the senses, the spiritual reception of sensible Trascendentales, Un estudio sobre Tomás
species is a change in the matter of the bodily de Aquino. Pamplona: Universidad de
organ of the sense”. Navarra.

21
“Huiusmodi ergo substantiae quamvis Aquino De, T. (1889). Summa Theologiae.
sint formae tantum sine materia, non tamen En Corpus Thomisctium. Recuperado
in eis est omnimoda simplicitas nec sunt ac- de http://www.corpusthomisticum.org/
tus purus, sed habent permixtionem potentiae. sth0000.html.
Et hoc sic patet. Quicquid enim non est de in-
tellectu essentiae vel quiditatis, hoc est adve- Aquino De, T. (1933). De ente et essentia. En Cor-
niens extra et faciens compositionem cum es- pus Thomisticum. Recuperado de http://
sentia, quia nulla essentia sine his, quae sunt www.corpusthomisticum.org/oee.html.
partes essentiae, intelligi potest. Omnis autem
essentia vel quiditas potest intelligi sine hoc Aquino De, T. (1971). In duodecim libros Meta-
quod aliquid intelligatur de esse suo; possum physicorum Aristotelis expositio. En Cor-
enim intelligere quid est homo vel Phoenix et pus Thomisticum. Recuperado de http://
tamen ignorare an esse habeat in rerum natu- www.corpusthomisticum.org/cmp00.html
ra. Ergo patet quod esse est aliud ab essentia
vel quiditate”. Aquino De, T. (1972). Quaestiones disputatae
de veritate. En Corpus Thomisctium. Re-
22
“Nisi forte sit aliqua res, cuius quidi- cuperado de http://www.corpusthomisti-
tas sit ipsum suum esse; et haec res non potest cum.org/qdv10.html.
esse nisi una et prima: […] Si autem ponatur
aliqua res, quae sit esse tantum, ita ut ipsum Aquino De, T. (1990). Suma de Teología.
esse sit subsistens, hoc esse non recipiet ad- Madrid: Biblioteca de Autores Cristianos.
ditionem differentiae, quia iam non esset esse
tantum, sed esse et praeter hoc forma aliqua; Aristóteles. (1982). Metafísica de Aristóteles.
et multo minus reciperet additionem materiae, Madrid: Gredos.
quia iam esset esse non subsistens sed mate-
riale. Unde relinquitur quod talis res, quae Berti, E. (2008). La notion de forme individuelle
sit suum esse, non potest esse nisi una. Unde comme condition d’identité changeante.

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