Nicolás Campo Zapata/ Código: A00141704 Jimena /Código:

DESDE EL COMPLEMENTO POLÍTICO A LA REPRESENTACION

En nuestro país las mujeres representan el 52% de la población, sin embargo,
lastimosamente apenas representan el 12% de quienes ocupan cargos electorales. El
presente ensayo tiene como objetivo analizar si realmente la inclusión política de las
mujeres (pese a ser considerablemente baja en nuestro país) está dando lugar a una
verdadera y significativa representación de las mujeres colombianas. Dicho análisis se
realizará a partir de la investigación sobre el actuar político de nuestra congresista Victoria
Sandino Simanca perteneciente al partido de la Fuerza Alternativa Revolucionaria del
Común (FARC).

La congresista Victoria Sandino Simanca es una congresista, ex-guerrillera colombiana, fue

fundamental en los diálogos de paz y en la posterior implementación de los acuerdos.
Cabe resaltar que pese a pertenecer a las FARC dentro de la ilegalidad estudió periodismo
en Bogotá, es decir que es una mujer preparada profesionalmente hablando, además su
trabajo en las FARC siempre estuvo orientado a la parte política, específicamente a la
inclusión de mujeres dentro del proceso de toma de decisiones. En cuanto a su labor en
los diálogos de la paz de la Habana se esmeraba por reivindicar a la mujer dentro del
actual partido FARC, esto se evidencia en testimonios como: “Había una realidad que
transformar. Cuando los medios abordaban a una guerrillera siempre le preguntaban
cómo era la vida en el campamento, cómo era el tema del aborto, de las relaciones de
pareja. Cuando entrevistaban a un hombre las preguntas eran distintas, siempre
orientadas por lo político”. (CITAR EL TIEMPO) Evidenciándose así una ejemplificación
clara del concepto techos de cristal propuestos por Willis, pues el hecho de relacionar la
mujer con aspectos como la vida en pareja o con su función reproductiva origina
obstáculos no institucionalizados y socialmente originados que impiden que de cierta
forma las mujeres ocupen cargos directivos. En cuanto a su labor dentro de la firma de los
acuerdos, tuvo el objetivo de lograr que el acuerdo incluyera una perspectiva de género
donde se reconociera la importancia en la toma de decisiones de las mujeres
pertenecientes a las FARC, objetivo que prevalece en el partido político ya conformado.

Ahora bien, el hecho de que una mujer como Victoria sea una parte fundamental de un
partido político, que surgió a partir de la culminación de una problemática histórica de
nuestro país como lo es la guerra y la división social, crea un marco propicio para agendas
políticas inclusivas, pues se evidencia un contra público compuesto por el partido FARC en
general y por las mujeres que buscan una reivindicación socio cultural integra, pasando de
ser únicamente responsables del cuidado del hogar y la vida en pareja a ocupar puestos
determinantes en la toma de decisiones políticas. Dicho contra público origina debates y
discusiones coherentes con la heterogeneidad de nuestra sociedad colombiana surgiendo
así discusiones que valoran y reconocen la diferencia en cuanto a género, etnia, raza, etc
como punto de partida para lograr transformaciones sociales significativas mediante las
acciones afirmativas (PARAFRASEAO LIBRO INCLUSION SIN REPRE PG 52).

Consideramos que la política de la presencia permite que mujeres como Victoria asuman
cargos políticos, pues en el texto PRESENCIA se plantea que: “La aceptación de la
representación de ciertos rasgos identitarios responde generalmente a injusticias
históricas o a conflictos en sociedades profundamente divididas” CITAR. Es decir que se
evidencia una representación descriptiva en la que podemos decir que hay una
correspondencia de características adecuada, pues Victoria a lo largo de su vida se ha
enfrentado a aquellos obstáculos institucionalizados o no que impiden la participación
política de la mujer en la toma de decisiones. En cuanto a su actuar como congresista,
Victoria ha impulsado proyectos de ley relacionados con el buen vivir de la mujer
colombiana, encontrando proyectos como: “Apoyo a la mujer rural”, “fomento de empleo
en mujeres jóvenes”, “Incentiva la lactancia materna” y “Acceso a anticonceptivos”.
Evidenciando así que trabaja en pro de los intereses de las mujeres, siendo así coherente
con su postura feminista. Dicho lo anterior se evidencia que cumple con lo planteado por
Pitkin: “Representar significa desarrollar acciones de protección y promoción de los
intereses de quien no quiere o no puede actuar en nombre propio” CITAR SOBRE EL
CONCEPTO DE REPRESENTACION puesto que pese a pertenecer a un partido
históricamente opresor en cuanto a la participación de las mujeres, sus proyectos de ley
van encaminados al bienestar y a representar los intereses de la mujer colombiana sea
conservadora, ex-guerrillera o de cualquier ideal.

Para concluir, consideramos que a partir del análisis a la congresista Victoria Sandino
Simanca, la inclusión de mujeres en la política está permitiendo la representación de las
mujeres colombianas, además pese a ser poca la participación política, quienes se
encuentran por ejemplo en el congreso reflejan características diversas en cuanto a
orientaciones sexuales, ideologías y razas. Por otro lado, el hecho de que estemos en un
periodo crítico de implementación de los acuerdos de paz vuelve más oportuno el hecho
de que una mujer como Victoria participe activamente en política, con esto no queremos
decir que se deban incluir tantas mujeres conforme a cuantas colectividades diferenciadas
existan, pues se debe analizar si realmente hay una correspondencia adecuada de
características que permitan una representación de intereses de las mujeres colombinas.
Por último, creemos que la la política de la presencia que permite acabar con la
discriminación y opresión histórica y la política tradicional no deben ser términos a
escoger de manera arbitraria, pues deberían ser complementarios dentro de nuestra
sociedad colombiana, para que pasemos de ser un país cada vez más polarizado a un país
inclusivo que reconoce a la mujer y cada diferencia como punto de partida para lograr que
cada ciudadano sin importar etnia, raza, genero u orientación sexual realmente cuente
con una igualdad de derechos y deberes.