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El Nuevo Nacimiento - Kindle
El Nuevo Nacimiento - Kindle
Nacimiento:
¿Qué es, cómo se
produce y cuáles
son sus frutos?
Julio C. Benítez
El Nuevo nacimiento: ¿Qué es, cómo se produce y cuáles son sus frutos?
Medellín, Colombia
2
Contenido
El Nuevo nacimiento: Condición fundamental para entrar al
Reino de Dios. Juan 3:1-8 ............................................................ 4
El Nuevo nacimiento: ¿Cómo se produce? Juan 3:1-8 .............. 23
El Nuevo nacimiento: Sus efectos y la Soberanía del Espíritu al
producirlo. Juan 3:1-8 ................................................................ 40
El Nuevo nacimiento: Una doctrina celestial, del maestro
celestial. Juan 3:1-8 ................................................................... 58
El Nuevo nacimiento: Su fuente, Agente, provisión y
consecuencias. Juan 3:14-15 ..................................................... 78
El amor infinito de Dios: La esencia del Evangelio. Juan 3:16 ... 96
BIBLIOGRAFÍA .......................................................................... 126
3
El Nuevo nacimiento: Condición fundamental para
entrar al Reino de Dios. Juan 3:1-8
Introducción:
4
acercamiento inicial a Cristo sea débil y titubeante, cuando
hay sinceridad, Dios lo convertirá en un creyente fuerte y
decidido.
5
profético. Posiblemente esta mirada era a la distancia, en
oculto, pues, los líderes religiosos debían ser cuidadosos de
no identificarse con cualquiera que aparecía en la escena de
Israel anunciando cosas nuevas.
6
conservadora y ortodoxa frente a la introducción de las
costumbres idolátricas de los griegos en el pueblo de Dios.
En el siglo II a.C., Antioco Epífanes, persiguió a los
practicantes de la religión judía, y trató de introducir el culto
a los ídolos en Israel. Muchos sucumbieron ante esta presión,
pero los que la resistieron, y no abandonaron su fe,
recibieron el nombre de Hasidhim, es decir, pietistas o
santos. Este grupo fue el precursor de los que luego serían
llamados los fariseos, es decir, los separatistas, cuyo nombre
empezó a conocerse durante el reinado de Juan Hircano
(135-105 a. C.). Fue algo muy similar a la situación de la
Inglaterra del siglo XVII, donde aparecieron los separatistas
o no conformistas, es decir, los puritanos, quienes se oponían
al sistema de religión oficial y ritualista impuesto por la
Iglesia Anglicana.
7
obediencia externa a la Ley, pero Cristo los condenó por
olvidar el espíritu que guiaba a la Ley de Dios. La tradición
oral de los ancianos era más importante que la Ley escrita.
Jesús los confrontó en muchas ocasiones porque eran
exhibicionistas de la religión. Ellos trataban de que el resto
los vieran como personas superiormente santas. Eran,
literalmente, santurrones. Ellos creían que la Ley de Dios
debía regular cada uno de los aspectos de la vida, por lo
tanto, siendo que la Ley tiene principios generales, ellos
deducían una cantidad de reglas adicionales para cada
aspecto minucioso de la vida: “cambiaron la Ley de los
grandes principios en un legalismo de reglas adicionales
interminables”1. Enfatizaban la conducta y las cosas externas
como el vestido, las comidas, los ritos de purificación; y, en
especial, tenían numerosas reglas relacionadas con el
sábado, inventadas por el hombre, como: “las mujeres no
debían mirarse en el espejo el sábado, pues, podían verse
alguna cana y sentir la tentación de arrancársela, lo cual sería
trabajar. Estaba permitido tragar vinagre en sábado, para
curar el dolor de garganta, pero no se podían hacer gárgaras.
El colmo, quizá, era aquella regla que permitía comer un
1
Barclay, William. Comentario al Nuevo Testamento. Página 397
8
huevo puesto en sábado siempre que se tuviera la intención
de matar la gallina”2.
2
Hendriksen, William. Juan. Página 122
9
líderes religiosos. Recordemos que la Biblia nos dice que
“aún de los gobernantes muchos creyeron en él; pero a
causa de los fariseos no lo confesaban, para no ser
expulsados de la sinagoga. Porque amaban más la gloria de
los hombres que la gloria de Dios” (Juan 12:42-43). Pero,
segundo, otros afirman que Nicodemo vino a Jesús de noche,
no por temor, sino porque él sabía lo ocupado que Jesús
estaba y en la noche sería más fácil encontrarlo y conversar
con él tranquilamente sin la interrupción de las multitudes
que le seguían.
3
Henry, Matthew. Comentario Bíblico de Matthew Henry. Página 1364
10
líderes del pueblo, no sólo Nicodemo, sino otros, estaban
inquietos sobre Jesús. Es por eso que él dice “nosotros
sabemos”. Ellos tenían la convicción de que Jesús no era un
hombre común y corriente. Él debía ser un profeta, como los
del Antiguo Testamento. Jesús debía tener una comunión
especial con Dios, y sería bueno conocerlo.
11
Él es un hombre académico, pero también honesto, y no se
atreve a llegar a conclusiones hasta que no haya investigado
profundamente. Él no es como la multitud entusiasta del
capítulo 2, la cual abraza emotivamente una causa sin antes
conocerla; es por esa razón que él viene a Cristo e introduce
su conversación con estas declaraciones: eres un maestro de
Dios, quiero que me hables más de ti. No me dejes con las
dudas. Pero la respuesta que Cristo da a este buscador no era
la esperada.
4
Barclay, William. Comentario al Nuevo Testamento. Página 398
13
Cristo empieza su respuesta con la habitual introducción:
Amén, Amén. De cierto, de cierto. En verdad, en Verdad. Es
decir, Jesús quiere llamar la atención sobre lo que sigue,
porque es una verdad muy importante y fundamental: “el que
no naciere de nuevo no puede ver el reino de Dios”. Esta
respuesta dejó perplejo al pobre Nicodemo. Era un nuevo
mashal, algo así como una adivinanza, a lo cual estaban
acostumbrados los judíos académicos, como Nicodemo. Este
pasaje también puede ser traducido: “el que no naciere de
arriba”, pero es más probable que el significado contextual
sea “nacer de nuevo”, pues, Nicodemo luego responderá:
¿cómo es posible entrar en el vientre de la madre para nacer
de nuevo? Es como si Jesús le dijera: “Nicodemo, tú has
venido a mí buscando enseñanza, pero lo que en realidad
necesitas es nacer de nuevo. Es por ahí que debes empezar.
Has de nacer de lo alto. Si no es así, nunca podrás ver el reino
de Dios”5, del cual tanto interés tienes.
5
MacDonald, William. Comentario Bíblico de William MacDonald.
Página 661
14
que para ver el reino de Dios es necesario que una persona
nazca de arriba; o sea, que el Espíritu Santo debe implantar
en su corazón la vida que tiene su origen no en la tierra sino
en el cielo. Que no se imagine Nicodemo que las dignidades
terrenales o nacionalistas le capacitarán a uno para entrar en
este reino. Que tampoco piense este fariseo que un
mejoramiento de la conducta externa – una conducta en
completa concordancia con la Ley- es todo lo que se
necesita. Tiene que haber un cambio radical. Y a menos que
uno nazca de lo alto, no puede siquiera llegar a ver el Reino
de Dios; es decir, no puede experimentarlo y participar de él;
no puede poseerlo y disfrutarlo (Cf. Lc. 2:26; 9:27; Jn. 8:51;
Hch. 2:27; Ap. 18:7)”6.
6
Hendriksen, William. El Evangelio Según San Juan. Página 143
15
cambiar a una persona en hijo de Dios precede a la
conversión y a la fe (véase también 1:12)”7.
7
Hendriksen, William. El Evangelio Según San Juan. Páginas 143, 144
8
Barclay, William. Comentario al Nuevo Testamento. Página 398
16
Nicodemo debe entender que su apego a la Ley, su
moralidad, su conocimiento correcto de la doctrina y la
dignidad de sus funciones eclesiásticas no podían ser
consideradas como un reemplazo del nacimiento espiritual.
¡Con cuánta facilidad los seres humanos que nos acercamos
a la iglesia somos engañados por nuestro corazón!
Pretendemos ser aceptados por Dios a través de nuestra
conducta, una reforma de las cosas externas, llenarnos de
mucho conocimiento doctrinal, someternos a reglas estrictas,
que incluso van más allá de lo que la Biblia dice de una
forma clara, convertir el día del Señor y el Evangelio en una
serie de prohibiciones, verter la vida cristiana con un color
gris; en fin, todo esto es producto del fariseo que llevamos
dentro, del Nicodemo que piensa entrar al Reino de Dios por
sus propias fuerzas; pero Jesús le dice: ¡NO! Si al Reino de
Dios deseas entrar, de nuevo has de nacer. Este es un
nacimiento de arriba, porque no puede ser producido por el
hombre. No se trata de un cambio superficial y pasajero, “No
es una mera reforma, una corrección, un cambio moral o una
alteración exterior de la vida. Es un profundo cambio del
corazón, de la voluntad y del carácter. Es una resurrección.
17
Es la implantación en nuestros corazones de un nuevo
principio procedente de lo alto”9.
9
Ryle, Juan Carlos. Meditaciones sobre los evangelios. Juan 1-6. Página
160
18
resurrección que le sigue a la muerte, muerte al pecado y
resucitados o re-creados en Cristo para andar en vida nueva
(Ro. 6:1-11). “En el reino de Cristo sólo pueden entrar
aquellos cuyas vidas han sido cambiadas. Ya que Su reinado
será en justicia, sus súbditos han de ser también justos. Él no
podría reinar sobre gentes que permaneciesen en sus
pecados”10.
Aplicaciones:
10
MacDonald, William. Comentario Bíblico. Página 662
11
Henry, Mattew. Comentario Bíblico de Matthew Henry. Página 1364
19
centrándose en los milagros y lo espectacular; pero Cristo
desvía la conversación hacia lo más importante: la salvación,
el cambio radical de la vida. Igualmente, los hombres de
todos los tiempos, cuando se interesan por Cristo, casi
siempre buscan conocer aquellas cosas que no son
fundamentales para su salvación. Quieren hablar de
milagros, del color de su piel, de su estatura; y de cosas que
satisfagan la curiosidad de una mente inquieta; pero los
ministros y creyentes no debemos caer en el juego de estas
personas, siempre debemos orientar la conversación hacia la
necesidad espiritual que ellos tienen: la salvación de sus
almas.
20
fogosa en primera instancia los que resisten durante más
tiempo y demuestran mantenerse firmes. Judas Iscariote era
apóstol cuando Nicodemo tan solo se acercaba a tientas
evitando la luz del día. ¡Sin embargo, posteriormente,
cuando Nicodemo estaba ayudando valerosamente a sepultar
a su salvador crucificado, Judas Iscariote le había traicionado
y se había ahorcado! No deberíamos olvidar este hecho”12.
12
Ryle, Juan Carlos. Meditaciones sobre los evangelios. Juan 1-6.
Página 159
21
Salvación, entregando a él todo el ser y esperando Su gran
salvación.
13
Ryle, Juan Carlos. Meditaciones sobre los evangelios. Juan 1-6.
Página 161
22
El Nuevo nacimiento: ¿Cómo se produce? Juan 3:1-
8
Introducción:
23
Los hombres, en el fondo de su ser, saben que la divinidad
no los aceptará tal y como son, por lo tanto, requieren de
algunas ceremonias de limpieza y purificación.
25
Cuánto temor debemos tener a la hora de leer e interpretar
las Sagradas Escrituras, no importa si somos doctos en las
Sagradas Letras o si apenas estamos empezando la vida
cristiana, siempre existe la tentación de interpretarlas
inadecuadamente; esto sucede especialmente cuando vamos
confiados en nuestros conocimientos técnicos y las
interpretamos sin la dependencia total del Espíritu Santo.
Cuántos teólogos, cual Nicodemo, se creen doctores en
Biblia, pero sus almas y sus mentes están lejos de lo que Dios
quiso decir, pues, tienen una confianza carnal en su ciencia
humana.
14
Henry, Matthew. Comentario Bíblico. Página 1364
26
de la obligación de los preceptos evangélicos, bajo el
pretexto de que son difíciles de comprender”15.
15
Henry, Matthew. Comentario Bíblico. Página 1364
16
Ryle, Juan Carlos. Meditaciones sobre los Evangelios. Páginas 171-
172
27
bautismo, y el espíritu con la regeneración. Pero es difícil
encontrar sustento bíblico para ello.
17
Ryle, Juan Carlos. Meditaciones sobre los Evangelios. Juan 1-6.
Página 174
29
dijo del Espíritu que habían de recibir los que creyesen en
él” (Juan 7:39).
32
adecue al Reino de Dios, es preciso que entre en ella un
poder exterior: Lo que es nacido del Espíritu, espíritu es”18.
18
Ryle, Juan Carlos. Meditaciones sobre los evangelios. Juan 1-6.
Página 180
33
nuevo nacimiento del Espíritu que nuestro Señor describe
dos veces a Nicodemo”19.
19
Ryle, Juan Carlos. Meditaciones sobre los Evangelios. Juan 1-6.
Página 180
34
Todo aquel que desee ser reconciliado con Dios, primero
debe nacer del Espíritu Santo. Sólo de esta manera somos
unidos a Cristo: “Pero el que se une al Señor, un espíritu es
con él” (1 Cor. 6:17). Solo de esa manera sabemos que
somos hijos de Dios: “Porque todos los que son guiados por
el Espíritu de Dios, éstos son hijos de Dios. Pues no habéis
recibido el espíritu de esclavitud para estar otra vez en
temor, sino que habéis recibido el espíritu de adopción, por
el cual clamamos: ¡Abba, Padre!” (Ro. 8:14-15). Somos
renacidos del Espíritu para que el pecado no nos gobierne
más: “No reine, pues, el pecado en vuestro cuerpo mortal,
de modo que lo obedezcáis en sus concupiscencias; ni
tampoco presentéis vuestros miembros al pecado como
instrumentos de iniquidad, sino presentaos vosotros mismos
a Dios como vivos de entre los muertos (renacidos por el
Espíritu), y vuestros miembros a Dios como instrumentos de
justicia” (Ro. 6:12-13). Nacer del Espíritu es necesario para
no andar conforme a los principios de la carne o la naturaleza
pecaminosa: “Digo, pues: Andad en el Espíritu, y no
satisfagáis los deseos de la carne” (Gál. 5:16). “Los valores
e intereses celestiales han de prevalecer sobre los de este
mundo”20.
20
Henry, Matthew. Comentario Bíblico. Página 1364
35
El nuevo nacimiento es llamado “espiritual” porque todo
aquel que es objeto de esta regeneración experimenta un
despertar real y verdadero hacia Dios, hacia Su Palabra,
hacia su santidad, hacia su Ley, hacia Cristo, hacia la Iglesia,
hacia el pueblo de Dios. Ahora odia lo que amaba, y ama lo
que odiaba. Ahora disfruta lo que antes aborrecía, y aborrece
lo que antes disfrutaba. Ahora llora por lo que antes le
causaba alegría, y se alegra por lo que antes le causaba
tristeza. La mente, el corazón, los afectos, las emociones, la
voluntad, los deseos; que antes estaban inclinados hacia el
mal, ahora son llevados a lo celestial, a lo espiritual, a lo
verdadero, a Cristo.
36
Aplicaciones:
Padres, nunca den por sentado que sus hijos son creyentes
por el hecho de haber nacido en un hogar cristiano, o porque
durante algún tiempo tienen un comportamiento acorde con
las normas cristianas; ellos nacen siendo pecadores
depravados, muertos espiritualmente y con una mente
carnal. Ellos también necesitan nacer de nuevo. No
descuides un solo día en compartirles el Evangelio,
recordemos que el Espíritu utiliza a la Palabra de Dios para
dar el nuevo nacimiento.
39
El Nuevo nacimiento: Sus efectos y la Soberanía del
Espíritu al producirlo. Juan 3:1-8
Introducción:
40
porque eso implica morir a sí mismo, vivir en santidad,
ejercitarse en la piedad y ser odiado por el mundo.
No hay nada más trágico que el que una persona se pase toda
la vida estudiando la Biblia y la doctrina cristiana, pero al
final se pierda en el infierno.
41
enseñado que ésta es un don de Dios, la cual empieza con un
acontecimiento en el cual el hombre es totalmente pasivo.
21
Hendriksen, William. Juan. Página 145
42
puede producir la regeneración, y que, por lo contrario, su
corazón es corrupto. “Os es necesario nacer de nuevo” es un
absoluto, es decir, sin el cumplimiento de esta condición
universal nadie podrá entrar al Reino de Dios.
43
el agua, y ahora compara su acción soberana y los efectos
que produce con el viento.
44
Cristo luego dice, así es todo aquel que es nacido del
Espíritu. El Espíritu actúa de una manera soberana,
incomprensible y misteriosa. “!Qué gran lección era ésta
para un hombre que se había criado en la creencia de que una
persona podía y debía salvarse a sí misma mediante una
obediencia perfecta a la Ley de Moisés y a una multitud de
preceptos fabricados por el hombre!”22. Pablo mismo afirma
esta verdad cuando dice: “En él asimismo tuvimos herencia,
habiendo sido predestinados conforme al propósito del que
hace todas las cosas según el designio de su voluntad” (Ef.
1:11); “Pero a cada uno de nosotros fue dada la gracia
conforme a la medida del don de Cristo” (Ef. 4:7).
22
Hendriksen, William. Juan. Página 146
45
manifiestos; y es misterioso, porque sus caminos son ocultos
e incomprensibles para la mente humana; cómo reúne y
esparce, cómo levanta y abaja, resulta para nosotros un
enigma”23.
23
Henry, Matthew. Comentario Bíblico. Página 1365
46
no creen… Por esto os he dicho que ninguno puede venir a
mí, sino le fuere dado del Padre” (v. 64-65).
24
Phillips, Richard. Reformed Expository Commentary. John. Página
155
49
Ahora, ¿cuáles son los efectos del nuevo nacimiento? ¿Cómo
se evidencia? La Biblia menciona varios efectos de este
cambio espiritual: Primero, se evidencia en una real fe en
Cristo y en el Evangelio. Todos los que han nacido de nuevo
vendrán, indefectiblemente, a Cristo buscando la salvación,
creerán todo lo que la Biblia dice, defenderán la doctrina que
la Biblia enseña.
51
Juan no se refiere al nacido de nuevo como alguien que no
tiene pecado, pero si, alguien en cuya vida el pecado es cada
vez menor. En otras palabras, todo aquel a quien el Espíritu
Salva, a éste también santifica. Esto toma toda la vida, pero
ellos crecen progresivamente en santidad, sin la cual nadie
verá al Señor (Heb. 12:|14). Todos los que han nacido del
Espíritu desarrollan el fruto del Espíritu, porque ellos
aprenden a caminar en el Espíritu: “Amor, gozo, paz,
paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre,
templanza” (Gál. 5:22).
53
Aunque no vemos el viento, no se puede negar su presencia,
por los efectos que produce; igualmente, aunque no podemos
ver una marca externa visible en los que han nacido de
nuevo, los demás pueden ver los frutos de la presencia del
Espíritu y del nuevo nacimiento. Así como el viento, cuando
sopla, no puede ser ocultado, el nacido de nuevo no puede
ocultar su nueva realidad espiritual.
54
Santo. Esta es una obra de gracia y misericordia para con
algunos, y de condenación para con los que no creen. Pero
es deber de todos creer.
Aplicaciones
55
Hermano, ya sabes que si creíste en Cristo es porque el buen
Espíritu, de manera Soberana, tomó tu corazón corrupto, lo
transformó en un corazón sensible y te dio el nuevo
nacimiento. Esto debe conducirte a caer, constantemente,
postrado ante el Dios de la salvación, suplicando de él más
gracia para que el fruto del nuevo nacimiento, de la presencia
del Espíritu, sea más evidente en ti. Hemos pecado contra
Dios, hemos sido perezosos en nuestra lucha contra el
pecado, hemos sido indolentes en usar los medios de gracia
para crecer en santidad y en el carácter de Cristo; pero el
mismo Dios que nos llamó soberanamente, también nos dará
las fuerzas para crecer en Cristo. Ven a él constantemente y
entrégale tu vida, tus debilidades, tus pecados, tus fracasos,
tus vicios, tus luchas; y Él hará.
56
57
El Nuevo nacimiento: Una doctrina celestial, del
maestro celestial. Juan 3:1-8
Introducción:
25
Hendriksen, William. Juan. Página 146
61
efectuada por el Espíritu Santo. Tercero, le mostró la
necesidad del nuevo nacimiento a causa de la corrupción
moral del hombre. Cuarto, ejemplificó la obra Soberana del
Espíritu usando la analogía del viento. No obstante,
Nicodemo sigue sin comprender, no por alguna debilidad en
el maestro o en la doctrina, sino por la incapacidad innata del
hombre y su falta de deseo en aceptar las verdades
espirituales de Cristo. “No hay nadie más ciego que el que
no quiere ver. Cuando uno se deja dominar por sus ideas
preconcebidas, se estorba mucho la adquisición del
conocimiento. Literalmente, uno tiene que vaciar su mente
antes de poder recibir nueva verdad”26.
26
Robertson, A. T. Comentario al Texto Griego del Nuevo Testamento.
Página 206
62
creen aunque jamás hayan podido comprender,
perfectamente, o juzgar el objeto de su fe”27.
27
Clarke, Adam. Comentario de la Santa Biblia. Tomo III. Página 167
28
Hendriksen, William. Juan. Página 146
63
de un nuevo nacimiento y tú todavía ignoras la causa,
necesidad, naturaleza y efectos de ese nuevo nacimiento?29”
29
Clarke, Adam. Comentario de la Santa Biblia. Tomo III. Página 167
30
Henry, Matthew. Comentario Bíblico. Página 1365
64
Indudablemente, estas palabras de Cristo son también un
reproche para todos aquellos que tienen el oficio de enseñar
a otros las verdades del Evangelio, pero ellos mismos son
ignorantes de ellas y no las han experimentado en sus vidas.
Estas palabras también son un reproche “para los que gastan
el tiempo en nociones y ceremonias de religión o en
minucias y curiosidades acerca de la Palabra de Dios, pero
descuidan lo esencial y lo práctico”31.
31
Henry, Matthew. Comentario Bíblico. Página 1365
65
épocas, el número de sucesores de Nicodemo es mucho más
elevado que el de los sucesores de S. Pedro. No hay punto en
el que la ignorancia religiosa sea tan común como en la obra
del Espíritu Santo. Ese viejo escollo con el que tropezó
Nicodemo sigue siendo tan ofensivo hoy en día como en
tiempos de Cristo: “El hombre natural no percibe las cosas
que son del Espíritu de Dios” (1 Corintios 2:14). Afortunado
aquel a quien se ha enseñado a probar todas las cosas con la
Escritura y a no llamar maestro a nadie en la Tierra”32.
32
Ryle, J. C. Meditaciones sobre los evangelios. Juan 1-6. Página 184
66
saber era muy débil, pues, estaba siendo influenciado por las
interpretaciones terrenas, humanas y defectuosas de una
teología que no estaba basada en la comunión real con Dios.
Por el contrario, Jesús tiene un conocimiento profundo y
certero de las realidades espirituales porque no sólo era un
conocimiento abstracto en su mente, sino que él mismo la
había visto.
67
parecerle a Nicodemo”33. El gran comentarista anglicano,
Juan Carlos Ryle, dice que el significado de este versículo
parece ser el siguiente: “Declaro con autoridad y doy
testimonio de verdades que he visto y conocido desde toda
la eternidad como Dios junto al Padre y al Espíritu Santo. No
hablo (como todos los ministros terrenales deben hacer) lo
que otros me han enseñado. No testifico de cosas que haya
recibido como siervo de Dios, como han hecho los profetas
comunes, y que no habrían conocido sin la inspiración de
Dios. Doy testimonio de lo que he visto con mi Padre y he
sabido desde antes del comienzo del mundo”34.
33
Robertson, A. T. Comentario al Texto Griego del Nuevo Testamento.
Página 207
34
Ryle, Juan Carlos. Meditaciones sobre los Evangelios. Juan 1-6.
Página 192
68
la verdadera e inextinguible felicidad, la plena realización de
nuestra existencia.
69
Espíritu, un día pasamos de muerte a vida. A pesar de los
millones de testigos que pueden afirmar esto, el hombre
natural no puede ni quiere recibir este testimonio, pues, para
él es muy duro reconocer que está muerto en sus delitos y
pecados, que es totalmente depravado, que sólo un milagro
soberano del cielo lo puede salvar. Cuando el hombre oye
que la salvación es totalmente de Dios, se siente ofendido y
rechaza ese mensaje. La incredulidad en la mayoría de las
personas frente a la predicación del Evangelio no es algo que
nos deba sorprender, es lo usual entre los hombres, sea que
les prediquemos en nuestra debilidad, o sea que Cristo
mismo les predique, como en el caso de Nicodemo y los
miles de Judíos mencionados en los Evangelios.
35
Henry, Matthew. Comentario Bíblico. Página 1365
71
no sea una experiencia consciente, como el nuevo
nacimiento o la conversión. Estas cosas suceden dentro del
hombre. Nicodemo debió ver su propia necesidad del nuevo
nacimiento. Pero si estas cosas son rechazadas, cuánto más
aquellas que son celestiales, por ejemplo, el Decreto divino,
el pacto de gracia o de redención en el cual Dios el Padre
envía al Hijo al mundo para redimir a un pueblo para él
mismo. “Estas cosas celestiales están completamente fuera
del alcance de la experiencia del hombre. Son tan
majestuosas y trascendentes en su concepción y origen que
nunca hubieran pasado por la mente finita del hombre. Si,
pues, las cosas terrenales han sido rechazadas, ¿cómo se
puede esperar que se acepten las cosas del cielo que son
mucho más misteriosas?36” O como dice el comentario de
Matthew Henry: “Si no estás dispuesto a creer algo que es
experimentable aquí abajo, mediante el cambio radical de
una persona, ¿cómo estarás dispuesto a creer misterios
invisibles, al dar crédito únicamente a mi palabra?37”
36
Hendriksen, William. Juan. Página 147
37
Henry, Matthew. Comentario Bíblico. Página 1365
72
verdades básicas y también las sublimes de la fe. Era un
doctor en ignorancia. Es posible conocer las lenguas
bíblicas, las normas exegéticas, los contextos históricos y
culturales en los cuales se escribió cada libro de la biblia; es
posible ser un versado en los manuscritos bíblicos, doctor en
Biblia; y con todo eso, tener la incapacidad espiritual para
comprender y aceptar las verdades más elementales de la fe,
las cuales les pueden guiar a la salvación. ¡Qué lástima que
algunos se la pasen estudiando sobre la Biblia en esta tierra,
y al final estarán eternamente separados del Dios de la
Biblia, al cual no conocieron personal e íntimamente!
73
realmente nadie con el Padre cuando se trazó el plan que se
centra en el decreto de enviar al Hijo al mundo para
sobrellevar la maldición y libertar a los hombres? Sí, había
uno, el que descendió del cielo, a saber, el Hijo del
Hombre”38.
38
Hendriksen, William. Juan. Páginas 147-148
39
Ryle, Juan Carlos. Meditaciones sobre los evangelios. Juan 1-6.
Página 194
74
Nicodemo vino a Jesús llamándole maestro, pero Cristo,
ahora, se da el título de Hijo del hombre, un apelativo claro
en el Antiguo Testamento para referirse al Mesías. Además,
este título habla del Verbo hecho carne. Nicodemo no podía
entender la verdad del nuevo nacimiento, mucho menos
comprendería que el Dios eterno, invisible, Espíritu puro e
infinito; se haya encarnado en un hombre.
Aplicaciones:
75
Espíritu, a través de la fe en él. No sigas en esa crasa
ignorancia espiritual en la que yaces, escucha a Jesús,
síguelo, cree en él, confía en él, obedécelo, ámalo; y
encontrarás el camino seguro que te llevará a la felicidad y
realización eterna que sólo produce la presencia de Dios.
77
El Nuevo nacimiento: Su fuente, Agente, provisión y
consecuencias. Juan 3:14-15
Introducción:
81
Esto era un símil del nuevo nacimiento. Los israelitas
estaban prácticamente muertos, sólo les esperaba la tumba,
no tenían posibilidad alguna de curación. Todo el que era
mordido por la serpiente ya era reo de muerte y estaba
condenado a sufrir las dolorosas consecuencias de esta
infección mortal. El germen de la muerte estaba creciendo
en ellos y poco a poco iban muriendo. Era una muerte lenta,
pero segura. Así como todos los hombres han sido mordidos
por la serpiente antigua y ahora sufren bajo los estragos
deformadores y dolorosos del pecado, que es el contenido de
su poción venenosa; y sólo les espera la tumba y la eterna
condenación. “La naturaleza mortífera y destructiva que
posee el pecado… se implica aquí. La culpa del pecado es
como la mordedura de una serpiente venenosa; el poder
corruptor del pecado es ese veneno que se difunde por toda
la persona del pecador. Las maldiciones de la Lay son como
feroces serpientes, pues, todas ellas son señales de la ira de
Dios”40.
40
Henry, Matthew. Comentario Bíblico. Página 1366
82
nacimiento. Cristo fue levantado para nuestra salvación. Hay
dos es necesario en Juan 3. Jesús dice, “Es necesario nacer
de nuevo” (Juan 3:7). Pero él añade, “Así es necesario que el
Hijo del Hombre sea levantado” (3:14). Estos dos necesarios
van juntos”41.
41
Philips, Richard. Reformed Expository Commentary. John I. Página
163
42
Hendriksen, William. Juan. Página 149
83
Lo representado por el tipo, es trascendido con creces por el
antitipo, el cumplimiento. En el caso de la serpiente de
bronce los beneficiarios se enfrentaban con una muerte
física, pero en el caso de los beneficiarios del nuevo
nacimiento, con una muerte espiritual y eterna. En el caso de
los moribundos del desierto, sólo se les requería una mirada
física hacia la serpiente de bronce, pero en el nuevo
nacimiento se requiere una mirada espiritual; la cual el
hombre no puede hacer sino es por la gracia de Dios que lo
regenera. La serpiente de bronce no tenía poder real para
curar, pero en el caso del antitipo, Cristo, es quien tiene el
real poder para curar le herida mortal que el hombre lleva.
84
fácil; podemos, si queremos, evitar la cruz que nos
corresponde a todos los cristianos; pero si lo hacemos,
perdemos la gloria. Es una inquebrantable ley de vida que
sin cruz no hay corona”43.
43
Barclay, William. Comentario al Nuevo Testamento. Página 400
85
Es importante resaltar que Jesús usa aquí el título Hijo del
Hombre para referirse a él mismo. Muchos creen que este
título resalta la humanidad de Cristo, pero realmente su
significado incluye mucho más. Este título es usado en el
libro de Daniel con una connotación muy prominente. Daniel
tuvo el privilegio de mirar cosas en el cielo, así como Juan
recibió la revelación en Apocalipsis. Él vio al “Anciano de
Días”, una clara referencia a Dios el Padre, sentado en su
trono celestial. Luego, dice el texto: “Miraba yo en la visión
de la noche, y he aquí con las nubes del cielo venía uno como
un hijo de hombre, que vino hasta el Anciano de Días; y le
hicieron acercarse delante de él. Y le fue dado dominio,
gloria y reino, para que todos los pueblos, naciones y
lenguas le sirvieran; su dominio es dominio eterno, que
nunca pasará, y su reino uno que no será destruido” (Dan.
7:13-14). Daniel vio la ascensión de Jesús al cielo, luego de
su resurrección. Por lo tanto, “Hijo del hombre” es un título
para el Príncipe glorioso del cielo, quien se humilló a sí
mismo cuando bajó a la tierra y tomó la carne humana por
morada, y quien, habiendo completado la obra de nuestra
salvación, ascendió al cielo en una nube de gloria para recibir
Su reino del Padre.
86
Ahora, es interesante observar que el remedio para el mortal
veneno que afectaba a los israelitas era parecido a lo que
causaba su mal: serpientes les mordían y a través de la
mirada a una serpiente serían sanados. Igualmente, Jesús
vino en semejanza de carne de pecado, más sin pecado (Ro.
8:3; He. 4:15; 7:26). La serpiente de bronce no tenía veneno,
así como Cristo hombre no tenía pecado. “Lo que
debiéramos ver especialmente en Cristo crucificado es
nuestro pecado depositado en él, y Él contado como pecador,
tratado como pecador y castigado como pecador para nuestra
Redención. De hecho, en la Cruz vemos nuestros pecados
castigados, crucificados, soportados y llevados por nuestro
Redentor”44. “¡Qué gran misterio! Dios el inmortal
muriendo en la cruz entregó su ser; ni mente humana ni
angelical jamás lo pueden comprender. Inexplicable es el
infinito amor que demostró mi salvador”45.
44
Ryle, Juan Carlos.. Meditaciones sobre los evangelios. Juan 1-6.
Página 199
45
Wesley, Charles. Celebremos Su Gloria. Himno 166
87
contra del pecador. ¡Qué glorioso plan de redención! Dios es
el centro del mismo y no el hombre. La gloria de Dios brilla
salvando a miserables pecadores.
88
como en Números 21:5-9, tenemos todos los elementos que
integran el proceso de la salvación: el pecado que nos
domina, el necesario cambio de mentalidad o
arrepentimiento para reconocer la perdida situación en que
nos hallamos, alzar a Dios los ojos en demanda de socorro,
la provisión del remedio por parte de Dios y la utilización de
dicho remedio por parte de todo aquel que, compungido en
su corazón por la operación del Espíritu Santo (comp. Con
Hch. 2:37), suspira por la salvación y recibe con alegría la
Buena Noticia de que hay salvación para el perdido, por
medio de la fe viva en Jesucristo como único salvador
necesario y suficiente (v. Hch. 4:12) y único Mediador entre
Dios y los hombres (v. 1 Ti. 2:5)”46.
46
Henry, Matthew. Comentario Bíblico. Página 1366
89
los unos a los otros. Cada cosa en este mundo muere, y las
multitudes sufren todo el tiempo. Esta es la razón por la cual
los filósofos se desesperan, porque no hay esperanza dentro
de este mundo. Mucha gente culpa a Dios por la tiranía e
injusticia y sufrimiento, pero la verdad es que nosotros
somos culpables. Dios mismo ha condenado al mundo por
causa de su pecado. En los tiempos de Noé “vio Jehová que
la maldad de los hombres era mucha en la tierra, y que todo
designio de los pensamientos del corazón de ellos era de
continuo solamente el mal” (Gén. 6:5). La humanidad no ha
mejorado desde entonces, y Dios todavía mira al mundo y ve
gran y continua maldad”47.
47
Philips, Richard. Reformed Expository Commentary. John I. Página
163
90
nuestros pensamientos o en nuestras palabras? ¿Qué mira
Dios en nuestra forma de hacer negocios? ¿Qué observa Dios
en nuestro diario andar? Indudablemente, iniquidad y
perversión. Mas, el amor de Dios por la humanidad es tan
grande que decidió darnos la gracia inconmensurable del
nuevo nacimiento, de la salvación, enviando a su Hijo
Amado para que fuera levantado, como la serpiente de
bronce de Moisés, en una despreciable cruz, la cual se
convierte en la fuente y agencia del nacer espiritual, a través
del cual entramos al reino de Dios.
48
Henry, Matthew. Comentario Bíblico. Página 1366
49
Roberson, A. T. Comentario al texto griego del Nuevo Testamento.
Página207
92
de inmediato en su corazón una semilla de vida eterna, recibe
la acreditación plena para una vida eterna de gloria y
bienaventuranza en el cielo y entra en esa vida tras la muerte.
La salvación del Evangelio es sobremanera plena. No es
meramente ser perdonado. Es ser considerado
completamente justo y hecho ciudadano del Cielo”50.
Aplicaciones:
50
Ryle, Juan Carlos. Juan 1-6. Página 201
93
cruz ¿Quieres saber si él te ama? Cree en él y verás que te
salvará de tus pecados.
51
Ryle, Juan Carlos. Juan 1-6. Página 201
94
darnos la salvación completa. No más dudas, si hay
confianza sólo en él.
95
El amor infinito de Dios: La esencia del Evangelio.
Juan 3:16
97
puedan creer que Jesús es el Mesías, el Hijo de Dios, el
Redentor. Su propósito de alcance es universal, y no sólo se
enfoca en una etnia o en un tiempo determinado. El
evangelio es la buena nueva de salvación para todos los
hombres.
52
Henry, Matthew. Comentario Bíblico. Página 1367
98
3. El objeto de este amor infinito
53
Hendriksen, William. Juan. Página 150
99
o un gran éxito, o una grande experiencia. El amor de Dios
es infinito, eterno, perfecto, santo, práctico, de una clase
superior al más grande amor que se pueda expresar en la
tierra. Por eso Pablo oró al Señor para que los creyentes sean:
“plenamente capaces de comprender con todos los santos
cuál sea la anchura, la longitud, la profundidad y la altura,
y de conocer el amor de Cristo, que excede a todo
conocimiento, para que seáis llenos de toda la plenitud de
Dios” (Ef. 3:18-19).
54
Hendriksen, William. Juan. Página 151
100
Amar es propio de la naturaleza de Dios, pues, “Dios es
amor” (1 Juan 4:16). Para él es imposible no amar. Él no
tiene que hacer esfuerzos para hacerlo. Como dijo Spurgeon:
“Esta corriente de amor fluye de su propia fuente secreta en
la Deidad Eterna, y no le debe nada a ninguna lluvia
procedente de la tierra, ni a ningún riachuelo; brota de debajo
del Trono eterno, y se abastece de las fuentes del infinito.
Dios amó porque él quiso amar. Cuando nos preguntamos
por qué Dios amó a este hombre o a ese, tenemos que
regresar a la respuesta de nuestro Salvador a esa pregunta:
“Sí, Padre, porque así te agradó”55.
55
Spurgeon, Charles. El Amor sin medidas. Extraído de:
http://www.spurgeon.com.mx/sermon1850.html, En Marzo 18 de
2016
101
nosotros siempre tiene como último propósito llevarnos a
una gloriosa condición santa.
102
paciencia y tolerancia. Si su amor no es inmutable,
podríamos perecer”56.
56
Owen, John. Communion with God (Edinburgh: Banner of Truth,
1991). Pgs. 29-30
57
Philips, Ricihard. John, Volume I. página 170
103
os ha querido Jehová y os ha escogido, pues vosotros eráis
el más insignificante de todos los pueblos: sino por cuando
Jehová os amó, y quiso guardar el juramento que juró a
vuestros padres” (Deut. 7:7-8).
58
Morris, Leon. El Evangelio según San Juan. Vol. I. Página 271
105
amor grande quiebra el vaso de alabastro y derrama su
valioso perfume”59.
59
Spurgeon, Charles. Amor sin medida. Extraído de:
http://www.spurgeon.com.mx/sermon1850.html en Marzo 18 de
2016.
106
hijos de los hombres”60. Aunque esta imagen gloriosa que
Dios puso en los seres humanos, luego fue distorsionada por
causa del pecado en el que cayó, El Señor aún sigue viendo
en ellos su obra de arte. Pero la palabra “mundo” no debe ser
interpretada como diciendo que Dios amó con amor glorioso
y eterno a todos y cada uno de los seres humanos, sino que
Dios amó a los hombres en un sentido internacional, es decir,
Dios amó a hombres y mujeres de todos los pueblos, lenguas,
naciones, entre otros. Luego, Juan aclarará que el amor
Salvador de Dios al entregar a Su hijo está limitado a los que
creen, pues, los incrédulos están excluidos, mientras que los
creyentes están incluidos.
60
Hendriksen, William. Juan. Página 151
107
encontrar un versículo más maravilloso en toda la Biblia!
Que Dios ame a un mundo malvado como éste en lugar de
odiarlo; que le ame como para proporcionar la salvación…
¡Todo esto era ciertamente maravilloso! Esta era ciertamente
una cosa celestial”61. Como dijo Spurgeon: “¿Qué había en
el mundo para que Dios lo amara de esa manera? No había
nada amable en él. Ninguna flor fragante crecía en ese árido
desierto. Enemistad en contra de él, odio hacia su verdad,
desprecio hacia Su Ley, rebelión en contra de sus
mandamientos; esas eran las espinas y zarzas que cubrían la
tierra baldía; ninguna cosa deseable florecía allí”62.
61
Ryle, Juan Carlos. Meditaciones sobre los evangelios. Juan 1-6.
Páginas 201-202
62
Spurgeon, Charles. Amor sin medida. Extraído de:
http://www.spurgeon.com.mx/sermon1850.html en Marzo 18 de
2016.
108
en general, a los hijos de Adán, así como Pablo afirma en
Tito 3:4: “Pero cuando se manifestó la bondad de Dios
nuestro Salvador, y su amor para con los hombres”, o como
dice 2 Pedro 3:9: “El Señor no retarda su promesa, según
algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para
con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que
todos procedan al arrepentimiento”. El Señor amó a los
hombres de tal manera que envió a Su hijo Jesucristo, para
darlo en sacrificio y propiciación. Eso es la muestra de amor
más grande para con toda la humanidad. Jesús es un don del
cielo para la tierra, específicamente, para los hombres que
habitan la tierra.
63
Calvin, John. Calvin´s Commentary on the Bible. John. Extraido de:
http://www.studylight.org/commentaries/cal/view.cgi?bk=42&ch=3
En Marzo 19 de 2016
111
“… que ha dado a su Hijo Unigénito”. Es interesante ver que
en la redacción original, en el griego, dice: “Que a su Hijo,
el Unigénito, dio”64, enfatizando la calidad del don del amor
de Dios: Su Hijo; pero no uno entre muchos hijos, sino su
único, su unigénito. Dios no dio a la humanidad caída un
ángel de entre miles, sino que él quiso mostrar el amor más
grande entregando a su Único Hijo. Aquí parecen resonar las
palabras de Génesis 22:2 “Toma ahora tu hijo, tú único,
Isaac, a quien amas, y vete a tierra de Moriah, y ofrécelo allí
en holocausto sobre uno de los montes que yo te diré”; esta
escena tipificó lo que Dios hizo con Cristo. Su amor hacia la
humanidad lo llevó a entregarlo a estos mismos hombres que
quería salvar, para que lo despreciaran, lo humillaran y
trataran como al peor criminal; y por último, lo sacrificaran
en el Monte Calvario sobre una cruz. ¡Incomprensible amor
el del Padre Dios! “El don del Hijo es la culminación del
amor de Dios”65.
64
Hendriksen, William. Juan. Página 152
65
Hendriksen, William. Juan. Página 152
112
malo. En la eternidad, el ser del Padre encontraba el máximo
deleite en la comunión íntima y perfecta con Dios el Hijo. El
padre experimentaba la máxima complacencia en Su Hijo
eterno. Dios habló muchas veces del amor que tenía hacia su
Hijo, y el Hijo habló en muchas ocasiones del amor que tenía
por el Padre. Pero su amor fue tan grande que no escatimó
esa relación eterna, sino que lo envió para hacerse como uno
de nosotros, mas sin pecado. “Por lo cual debía ser en todo
semejante a sus hermanos, para venir a ser misericordioso
y fiel sumo sacerdote en lo que a Dios se refiere, para expiar
los pecados del pueblo” (Heb. 2:17). “He aquí el infinito
amor de Dios hacia la humanidad y el amor de Jesucristo
que, antes de querer ver a los hijos de los hombres perecer
eternamente, Él quiso enviar a su Hijo para tomar nuestra
naturaleza sobre Él y así sufrir cosas terribles. En esto Dios
muestra su amor… Le plació al Padre quebrar a su Hijo y
derramar Su sangre. Aquí está el amor de Dios y de
Jesucristo”66.
66
Burroughs, Jeremiah. Gospel Worship (1648; repr., Morgan, PA: Soli
Deo Gloria, 1990), Página 353
113
muestra de amor más grande jamás expresada. Dios quería
dar el mejor regalo a la humanidad, un regalo eterno y
divino, “El Hijo es el regalo que Dios hace al mundo; es el
regalo por antonomasia. No hay más regalos divinos aparte
o fuera del Hijo”67. Spurgeon lo puso en estas palabras: “Si
deseas ver el amor de Dios en este gran procedimiento, debes
considerar cómo dio él a su Hijo. Él no entregó a su Hijo,
como tú lo podrías hacer, a alguna profesión en la
consecución de la cual podrías gozar de su compañía; sino
que mandó a su Hijo al exilio entre los hombres. Lo envió a
la tierra a aquel pesebre, unido en una perfecta humanidad,
que al principio estaba contenida en la forma de un infante.
¡Allí dormía, donde se alimentaban unos bueyes de largos
cuernos! El Señor Dios envió al heredero de todas las cosas
para que trabajara en el taller de un carpintero… Lo envió en
medio de escribas y fariseos, cuyos ojos astutos lo vigilaban
y cuyas lenguas viperinas lo azotaban con viles calumnias.
Lo envió a la tierra para que sufriera hambre, y sed, en medio
de una pobreza tan terrible que no tenía un lugar donde
apoyar su cabeza. Lo envió a la tierra para que lo azotaran y
lo coronaran de espinas, y le dieran de puñetazos y le
67
Morris, Leon. El Evangelio Según Juan. Vol. I. Página 270
114
abofetearan. Al fin lo entregó a la muerte: la muerte de un
criminal, la muerte del crucificado”68.
68
Spurgeon, Charles. Amor sin medida. Extraído de:
http://www.spurgeon.com.mx/sermon1850.html en Marzo 18 de
2016.
115
¡Qué grandes verdades contiene este corto versículo! Dios
ama a la raza humana, y en consecuencia de su amor, envió
a su Hijo para darlo en propiciación por nuestros pecados.
“Notemos que el don de Cristo es resultado del amor de Dios
al mundo, y no su causa. Decir que Dios nos ama porque
Cristo murió por nosotros es ciertamente una lamentable
teología. Pero decir que Cristo vino al mundo a consecuencia
del amor de Dios es la verdad escrituraria”69. No obstante,
siendo que Dios odia al pecado y también al que lo comete,
¿cómo podían los hombres ver de una manera clara el amor
de Dios? Sólo hasta cuando se hubiese hecho expiación por
esos pecados a favor de los ofensores. Por tal razón, el amor
de Cristo debe intervenir para que Dios sea reconciliado con
nosotros, antes de que experimentemos la bondad del Padre.
Pero, no debemos olvidar que Cristo murió como resultado
del amor del Padre hacia nosotros.
69
Ryle, Juan Carlos. Meditaciones sobre los evangelios. Juan 1-6.
Página 205
116
las cosas?” (Ro. 8:32). Cristo le dijo a la Samarita que él era
“el don de Dios” (Juan 4:10); y Pablo exalta a Cristo
diciendo: “!Gracias a Dios por su don inefable!” (2 Cor.
9:15). El apóstol Juan escribió un precioso himno que
contiene las más hermosas letras de exaltación de Cristo
cuando dijo: “En esto se mostró el amor de Dios para con
nosotros, en que Dios envió a su Hijo unigénito al mundo,
para que vivamos por él. En esto consiste el amor: no en que
nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó a
nosotros, y envió a su Hijo en propiciación por nuestros
pecados” (1 Juan 4:9-10).
117
maravilloso es el propósito de este don: para salvar a todos
los que creen en él, es decir, a los que vienen a él con
confianza y fe. Aunque el evangelio debe ser anunciado
diligente y persuasivamente a todo hombre de toda tribu y
lengua, sólo recibirán el beneficio de la muerte de Cristo en
la cruz aquellos que crean en él de corazón sincero. “La fe
en el Señor Jesús es la mismísima llave de la salvación. El
que la tiene, tiene la vida; y el que no la tiene, no tiene vida.
Podemos ayunar y lamentar nuestro pecado y hacer muchas
cosas buenas, seguir los mandatos religiosos y entregar todos
nuestros bienes para alimentar a los pobres y, sin embargo,
no recibir el perdón y perder nuestras almas. Pero si tan solo
venimos a Cristo como pecadores culpables y creemos en Él,
nuestros pecados serán perdonados de inmediato y todas
nuestras iniquidades serán completamente quitadas de en
medio. Sin fe no hay salvación; pero por medio de la fe en
Jesús, el más vil de los pecadores puede ser salvo”70.
70
Ryle, Juan Carlos. Meditaciones sobre los evangelios. Juan 1-6.
Página 187
118
santificación. La puerta de entrada al Reino de Dios es la fe
sola. Como dice Ryle “Cuidémonos de suponer que la fe
justificadora es algo más que la sencilla confianza de un
pecador en un Salvador… Cuidémonos de mezclar cualquier
cosa con la fe en lo referente a la justificación… Un hombre
justificado, sin duda, será siempre un hombre santo. La
verdadera fe va siempre acompañada de una vida piadosa.
Pero lo que hace que el hombre forme parte en Cristo no es
su forma de vivir, sino su fe. Si queremos saber si tenemos
una fe genuina, haremos bien en preguntarnos cómo estamos
viviendo. Pero si queremos saber si hemos sido justificados
por Cristo, solo podemos hacernos una pregunta. Esa
pregunta es: ¿Creemos?”71
71
Ryle, Juan Carlos. Meditaciones sobre los evangelios. Juan 1-6.
Página 188
119
¿Será que Dios me ama con amor eterno?, pero creo que la
Biblia no nos manda a estar preguntándonos eso, mas bien,
la enseñanza del Evangelio nos conduce a hacernos una sola
pregunta: ¿Creo en Cristo? Si algunos hombres se perderán
para siempre en la condenación eterna es por una sola cosa:
No creyeron en Cristo.
72
Hendriksen, William. Juan. Página 153
121
completa y terrible culminación, tanto para el cuerpo como
para el alma, hasta el día de la gran consumación”73.
73
Hendriksen, William. Juan. Página 152
74
Hendriksen, William. Juan. Página 152
122
en el discipulado y la misericordia hacia los demás. Somos
testigos del amor infinito de Dios.
Hermano, ¿te habías visto así amado por Dios? Los amigos
inconversos aún no pueden ver en sus propias vidas la
manifestación del amor infinito de Dios hacia ellos, porque,
aunque Cristo fue dado a la humanidad, ellos aún no creen
en él, y no reciben los beneficios de este divino regalo; pero
124
tú, amado y débil hermano, tú, que a lo mejor estás
empezando la vida cristiana, con trémulos y lentos pasos; tú,
has sido objeto del amor más grande e incomprensible. Para
ti fue dado este don del cielo. Eres la persona más favorecida
del mundo. Ni siquiera los ángeles santos que habitan en los
orbes celestiales han recibido un don tan excelso: Dios
mismo se dio como regalo para ti. ¿Comprendes esto? Eres
la persona más dichosa del mundo. No importa si no tienes
una profesión, sino vives en un barrio lujoso, sino tienes
auto, si no posees las cosas que los seres humanos más
buscan; eres muy favorecido. Tienes el mejor regalo y la
mejor posesión que cualquier criatura pueda tener: A Dios
mismo, quien se te entregó en una cruz. Esposa, ¿te sientes
triste porque tu esposo no te ama como debiera ser?,
consuélate saber que el esposo eterno manifestó el amor real
y práctico más puro al dar su vida por ti.
125
BIBLIOGRAFÍA
- Barclay, William. Comentario al Nuevo Testamento.
Editorial Clie. Barcelona. 1999. 1257 páginas.
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