María Alejandra Mantilla C.

Marzo 17, 2020.

Ponencia.

Comunicación y Cultural Maker.

Resumen: Desde hace pocos años se comenzó a escuchar sobre la Revolución 4.0 y nos ha
causado cierta incertidumbre su significado, a partir de este término se logra resaltar la
palabra Cultural Maker, la cual desempeña ciertas funciones alrededor de la tecnología y su
impacto a través de los años, los makers como se hacen llamar quienes hacen parte de este
trabajo, tienen la necesidad de realizar sus propios objetos para servicio tanto de la
comunidad como propio, es por esto que la palabra innovación se ve inmersa en este mundo
de conocimiento y aptitudes.

Palabras clave: Cultural Maker, sociedad, internet, innovación.

La revolución 4.0 involucra muchas tecnologías como la robótica, Big Data, sistemas
autónomos, internet de las cosas e inteligencia artificial. Para dar un abrebocas al cultural
maker, se debe hablar un poco de los inicios de la revolución, comenzando por la
revolución industrial en 1784, la cual se caracterizó por la producción instituida en
maquinaria y por la aparición de transportes de carga masiva como el tren a vapor, esto fue
gracias a la energía hidráulica (se obtiene a partir del agua de los ríos) y la energía a vapor;
estos inventos permitieron que la cantidad de producción aumentaran de manera intensiva.
En 1870 se da la segunda revolución industrial, esta época se caracterizó por el
descubrimiento de la energía eléctrica y la línea de ensamblaje, como, por ejemplo, el
creador de Ford redujo 3 veces el precio de los autos por la rapidez de producción de los
insumos para construir este mismo, estas mejoras hicieron posible la producción en masa y
permitió que los precios de los productos se redujeran a un gran porcentaje.
A partir de 1969, se da la revolución 3.0 la cual estuvo representada por la producción
automatizada usando la electrónica y las tecnologías de la información y la comunicación
(TIC), es en esta etapa cuando las personas comienzan a trabajar con computadoras y con
robots, por último se encuentra la famosa industria 4.0 la cual es caracterizada por un
sistema de producción inteligente con decisión autónoma, es decir, que las computadoras
están tomando sus propias iniciativas sin la necesidad de la intervención del humano. Una
de las páginas más importantes de definiciones a nivel mundial, Wikipedia, muestra 4 tipos
de tecnologías que apoyan esta revolución, la primera es Internet de las cosas, el segundo,
Sistemas ciberfísicos, el tercero, Cultural Maker y por ultimo Fábrica 4.0.

Según la página de internet Cultura digital, la definición de Cultural maker “es una cultura
o subcultura contemporánea que simboliza una extensión basada en la tecnología de la
cultura DIY (Do it yourself o hágalo usted mismo)” (Cultura Digital, 2019). Esta se interesa
en actividades encaminadas a la ingeniería, a la robótica, al arte, carpintería, entre otros
oficios. Cultural Maker permite que las personas se encarguen de fabricar y reparar cosas
de manera propia, un elemento importante que desglosa del tema principal es socializar el
conocimiento, esto quiere decir que existe una construcción colectiva, en donde puedes
aprender gracias al aporte de múltiples “hacedores” que trabajan sobre un mismo tema.
“Este factor unido por espacios orientados a la colaboración como los Fab Labs,
Markerspaces o Media Labs, trabajan en distintos proyectos basados en la producción y en
la innovación social atrayendo viarias instituciones interesadas en la educación, la ciencia,
la tecnología y la sostenibilidad” (Tabáres, Gutiérrez, R. 2018).

El movimiento que genera el cultural maker ha marcado durante los últimos años la
importancia de la innovación dentro de nuestro circulo social, emocional y sustentable
(hablando económicamente). Estas transformaciones a nivel tecnológico nos han permitido
a nosotros como seres humanos avanzar y obtener mas conocimiento de forma eficaz y
tangible, es decir que se puede percibir de manera clara y precisa. La innovación y la
enseñanza deben venir de la construcción de las generaciones recientes, la idea es potenciar
la fabricación física de objetos, uno de los elementos mas importantes que se han creado
durante los últimos años ha sido la impresora 3D de escritorio, este tipo de maquina es la
que permite que una persona pueda fabricar cualquier cosa en unas pocas horas y con un
muy bajo costo.

El escritor Chris Anderson en su libro La nueva Revolución habla de la facilidad que ofrece
internet, “cualquier persona, en cualquier momento puede crear una empresa que
posiblemente tenga un impacto a nivel mundial, da el ejemplo de Mark Zuckerberg y
Facebook; hay muchas posibilidades de fracasar, pero el impacto de la pérdida económica
no va a ser tan dramática” (Anderson, C. 2013). Hay que reconocer que la fabricación local,
la micro fabricación y redes locales de distribución reemplazan el lugar del modelo
industrial que ya se conocía, este se basa en la capacidad de las personas en fabricar sus
propios objetos. Es importante identificar que el Cultural Maker se ha corporizado, sin
embargo, las herramientas que posee se desarrollan indiferentemente del apoyo de el
gobierno, de la universidad o de una corporación.

Este movimiento viene desde la misma ciudadanía, personas que están interesadas en
construir sus propias soluciones, ya sea para la casa, el vecindario o el país y aquí es en
donde se empieza a enfocar la importancia de los makers y su aporte a la sociedad. Los
agentes activos, en este caso los makers son personas que manipulan los recursos existentes
a su alcance para satisfacer sus necesidades y las de su entorno, algo muy importante es que
la tecnología ha impulsado este movimiento y en teoría se puede decir que los makers son
artesanos modernos y empoderados. Si analizamos la propuesta que se hace alrededor de el
Cultural Maker tiene ideas planteadas bastante interesantes para involucrar en proyectos
que no tenga tantos recursos económicos, personal para trabajar e insumos o materiales,
hoy en día es mucho más simple y fácil adquirir máquinas que son económicamente de
fácil acceso y más poderosas.

La constante transformación y obtención de conocimientos ha sido muy importante para

“crear” muchas páginas en internet, estas están dedicadas a subir videos de tutoriales para
realizar distintas actividades. El trabajo en equipo y el servicio a la comunidad ha logrado
que hoy en día obtengan ciertos aprendizajes, no hay que dejar de resaltar la importancia de
la tecnología en todo este proceso, pero algo muy significativo que se aleja de lo digital son
los eventos, conferencias las cuales están dedicadas a la a la invención, también a clases
presenciales, entre otros. Es indispensable darles importancia a movimientos emergentes ya
que permiten una crítica de manera positiva a la sociedad, lo cual permite involucrar
alternativas de desarrollo tecnológico y condescender a la sociedad otorgándole un propio
empoderamiento a las nuevas culturas de innovación. Por último, hay que resaltar que este
movimiento genera cambio y hace parte importante de la innovación, pero trata más de
cambiar la mentalidad y entender que desarrollar todas estas ideas en comunidad ayudan a
generar un cambio, a crecer como individuos y explotar nuestras capacidades mentales y de
diseño.

Bibliografía:

Cultura digital, la hibridación de las artes y las ciencias. (2019, octubre 27). Recuperado
de https://culturadigital.cosasweb.co/puntos-de-vista/cultura-digital-la-hibridacion-
de-las-artes-y-las-ciencias/

Saintotte, M. (2018, septiembre 7). ¿De qué hablamos cuando hablamos de "Cultura
Maker" o "Cultura Hacedora"? Recuperado de https://ikitoi.com/hablamos-
cuando-hablamos-cultura-maker-cultura-hacedora/

Tabáres, Gutiérrez, R. (2018). La importancia de la cultura tecnológica en el movimiento

maker. Arbor, 194 (789): a417. Recuperado de
http://arbor.revistas.csic.es/index.php/arbor/article/view/2284/3252

Anderson, C. (2013). Makers: La nueva revolución industrial. Recuperado de:

https://www.leadersummaries.com/ver-resumen/makers