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Cartas
Año 1983
Subíndice
8 Cartas
Enero a Diciembre de 1983
Correspondencia
desde la Cárcel de Villa Devoto a la familia
Correspondencia
desde la Cárcel de Villa Devoto a esposos
detenidos en otras cárceles del país
Correspondencia
desde la Cárcel de Ezeiza a la familia
Correspondencia
desde la Cárcel de Ezeiza a su esposo que
recuperó su libertad
Correspondencia
desde la Cárcel de Ezeiza, a través de la
familia, a compañera que ha recuperado
su libertad
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de cuero muy linda, tres pares de zapatillas topper para tres de las chicas que
necesitaban y depositaron dinero a dos. Las autoridades a ellos todavía no los
habían atendido, así que no sabían si habría alguna mejora en concreto, en
las condiciones de vida. También nos revisó el médico de la CRI, parecía un
buen profesional, coincidía por lo general en los diagnósticos de los médicos
de acá. Dale mis cariños a Olgui. Ya hace un mes que falleció papá ¿cómo te
sentís mami? Creo que el tiempo amortigua los dolores, las penas necesaria-
mente se incorporan a la vida y ¿no te pasa como que necesitás hacer un ba-
lance de todos los años? de la vida en común con papá, de las expectativas al
casarte, y de cuanto te quedará en positivo y en negativo del matrimonio? Se
me ocurre que sí, bien me gustaría compartir con vos esas conclusiones, pero
como no estoy al ladito tuyo, indirectamente por carta capaz que te resulte
más engorroso, bueno con Naty y Luis podrás hacerlo. Creo que mis herma-
nos son receptivos al diálogo, que son maduros, afectuosos y tienen calidez
para comprender esas cosas del corazón y la mente que en uno mismo a veces
resultan confusas pero cuando se las saca a la luz, se van aclarando o se vuel-
ven más cristalinas. ¿Me vas a regalar esas gotitas de agua que surgen de tu
fuente de sabiduría mamá? No te olvides que tu experiencia sirve y es de va-
lor para nosotros tus hijos, así como la nuestra supongo que servirá a nues-
tros hijos. ¿En qué andan los nietos? Cómo pasan las vacaciones? Se acuer-
dan del tatita? Contame y cuando puedas mandame la foto de todos, así los
conocen las chicas. Ayer fue el cumpleaños de Elba, 37, la “joven”, le hice dos
pastafrola, (que me dicen, te cuento soy la que más ricas las hago en el yom-
pa), la paragua hizo ñoquis, Graciela la bióloga una salsa exquisita y se sal-
varon esta vez de la cocina Irma, la Negra y Peggy porque si no, no iba a ha-
ber comensales sorprendidos. Lo pasamos muy bien, su papá vino el
miércoles a visitarla y le trajo unas chinelas de regalo. En ésta te mando un ro-
sario hecho de nuditos que nos regaló un Sr. Carlos Avellaneda que vino a re-
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ala nuestra (las puertas de las celdas, claro) permanecen cerradas y nosotras
afuera pero sin poder entrar a buscar nada, pues ocurre que a partir de que
vinieron los compañeros de la U9, o sea los presos políticos varones, para no
tener acceso a las ventanas directamente nos cierran las puertas y las abren en
los momentos en que no hay recreos en el patio, a ellos les hacen lo mismo pe-
ro del lado en que salimos nosotras al patio. Así que con ésto la mayor parte
del día lo pasamos girando por el pabellón y como somos unas cuantas (47)
es difícil encontrar un lugar para descansar, escribir una carta donde te pue-
das concentrar medianamente amén que el pabellón está en permanente des-
orden por las cosas que necesitamos sacar de nuestras celdas, te imaginás que
el 2º, 3º y 4º piso están ocupados por varones y como ahora hay cuatro horas
de externo, es a la mañana y a la tarde, yo recién hoy pude agarrar el papel y
ahora estoy en la mesada, está el panorama más tranquilo, hay gente en visi-
ta y por otro lado estaba decidida a no dejar pasar más, porque para colmo a
la noche cuando nos encierran solo quedan dos horitas y yo llego muerta del
ajetreo de todo el día, de no hacer nada, aparta hay un clima muy especial
pues han llegado esposos, hermanos, cuñados, etc, de un montón de compa-
ñeras y es lógico que después de tantos años y tantas cosas pasadas haya ga-
nas de verse, encontrarse, abrazarse ¿no te parece? Como ves nos está cam-
biando la realidad y pienso que para mejor, también hay más horas de taller,
a la mañana dos horas y luego corridas de 12 a 17, lo lógico sería todo el día
hasta que se vaya la profe, yo creo que hay posibilidades que lo den así. Bue-
no linda, quiero seguir con el Sergio así que te voy dejando acá con un enor-
me abrazo para vos, la flía. y los vecinos. MARY
Charo y Nora ya están totalmente repuestas te mandan un abrazo enor-
me. Decile a Isa que me escriba y a Coca que me tenga un poquito de pacien-
cia, que ya lo haré. Más besos y contame como andás de la conjuntivitis.
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son muchos, lo que más nos costó fue el desprendimiento con los compañe-
ros, después de reencontrarnos durante quince días volver a separarnos, y ha-
bía esposas hermanas, cuñadas, que se yo, esto fue lo más doloroso de todo.
Acá todavía no está muy claro cómo va a funcionar esto, acá todo el personal
que teníamos allá hasta el médico fue trasladado con nosotras, el régimen va
a ser el mismo adaptado a las condiciones edilicias, en esto podemos perder o
ganar según la buena “voluntad” de las autoridades así que veremos lo que
pasa. Hoy domingo para amainar el temporal hicimos con Elsa a la mañana
pizzas, la otra Elsa con Graciela tortas que acaban de comerse con el café que
lo hizo la Negra, a todo esto no te he dicho que es la tardecita, como la celda
tiene una mesadita diminuta, estoy con una silla (elemento importante para
sentarse debidamente) que conseguí en el baño, es la única, de música de fon-
do tengo las conversaciones más diversas, desde juicios sobre el café, la torta,
la enfermera que viene a preguntar de quiénes son unos medicamentos sin
nombres, las libertades, etc., etc., etc., todo mezclado mire doña. Bueno vieji-
ta adorada te di un pantallazo general de cómo es esto pero tan desorganiza-
do como lo estoy yo en estos momentos así que espero me entiendas, deciles a
Isa y Coca que ya les escribiré que me esperen un poquito ¿eh? Te mando con
ésta una tarjera para tu cumple es un trabajo en equipo me lo regaló Alicia una
cordobesa que como es grandota, es decir alta, le decimos Alizota, Elsa mi
amiga compinche de cocina la armó y yo la escribo y la mando ¿qué tal? O
sea que todas estamos un poquito con vos y ahora sí mi vieja la dejo pero que-
dándome un poco con Ud., sabe que tiene que estar bien y esperarme que ya
falta poco. Sabés que al arribo de ésta, o sea en los dos primeros días de estar
aquí se fueron 3 compañeras con libertad condicional? Cómo no voy a espe-
rar que me la den también a mí? Yo creo que se abren muchas posibilidades,
así que a ser optimistas. Las chicas todas te mandan un abrazo fuerte, un feliz
cumpleaños, yo uno bien apretado y fuerte. MARY
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10 de marzo ´83
Hija querida! al fin tuve tus garabatos conmigo, sí, la Batia estuvo con
la petisa en tu tarde de lluvia. ¡Cómo te extraño desgraciadita! Aquí, en
Ezeiza, nos dejan la luz encendida hasta las 24 y es casi esa hora mientras te
escribo, la leí varias veces, imaginaba tu cara, muchas veces, tu sonrisa y tu
ironía reflejada en esos carbones hermosos. la petisa y yo quedamos en pi-
sos distintos pero nos vemos en el gimnasio y en el taller. “Sigo firme en la
convicción de lo mal q´ hace el existencialismo...” mon Dieu, q´cosas debe
una anciana madre escuchar ¿ q´me le han hecho hijita? dígame quien fue
q´ lo mato - Sí, sí, ya veo q´está decidida a no verduguear a la figueiredo pe-
ro dígame ¿q´piensa reservarme par la salida? ¿de q´voy a curarla?, y así, sin
más, decidió Ud., no dejarme lugar p´aconsejarla, bah!, críe uno hijos y ...
¿querés con pañuelo? es para tu arroyito seco porá ¿sabés? ni un momento
dejo de pensar en vos y tus aerosillas tan geniales, pero no, nada de fomen-
tarlas, prohibido dar paso a la nostalgia, ¿q´és eso? ¿alguna vez escuché esa
palabra? (ILEGIBLE)
De los informes médicos q´te comenté volvieron a rechazar a varias y só-
lo firmaron 4; la Uli, la Delia Galara, Ana Inés y Eva Pihen. Rebotaron la Ne-
gra que habla francés, Alizota y Mechi Flores. Será p´ la amnistía? Las que se
fueron hace unos días con condicional son : Milagros Castro, Cristina Bernal
y la Negra Beguán. ¿Sabés algo de la Chueca?. Pucha que se hace rogar, che.
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ro ... veremos afuera. Con esta te mando una tarjeta delas q´el hace, me
mandó 3 p q´ las reparta como más me guste.
Pichona, no recuerdo si te conté q´en los canteros del patio - además de flo-
res - hay plantado orégano, achicoria, perejil, me vieras cómo disfruté llevan-
do a la mesa el perejil fresco, regando las plantas, tomando sol a lo loco, q´va
a hacerle no soy mina de cemento y esto me hace aproximar más a mi ilusión
del huertito que alguna vez te comenté. También se lo comenté a Norberto y
en eso estamos, me parece q´es una ardua discusión la que iniciamos, ya te iré
contando, quería trascribirte párrafos de su última pero no lo tengo aquí, está
con la enana, asiq´será en la próxima con parte, también, de mi respuesta.
En cuanto a la autoamnistía se cree q´saldrá tirando algunos huesos
para aquí y q, en ese caso, serían mayormente consejos, en general no hay
mucho embale, por lo menos los pen estamos algo escépticos, salvo que el
calor de marzo haga aflojar los candados, pero... por ahora, o mejor dicho,
por las dudas no me engancho ¿ viste ?. Me curé, aunque no del todo , ya
que sigo loquísima como siempre.
Bueno hermosa, la dejo por hoy, si le es posible mandar una foto la
pondré sobre la cabecera de mi cama ¿si? La quiero, extraño y necesito un
montón, besísimos. CHUICK. Mami
Un abraso para toda la familia. Aquí te mando algo q´es tuyo, quizás
quieras conservarlo. “Che Jesús...vos q´sos bueno / vos q´ renacés esta noche
/ vení / las puertas de n/pueblo están abiertas / pasá... / estás en tu casa : / en
esta silla falta un padre / en aquellas ... faltan hijos / los mejores de nosotros
/ Pero no hay tristeza / y por ellos te juramos q´la confianza sobra / y está aquí
... / apretada en nuestras manos / este hoy / creciéndonos el pecho / esta noche
/ estallando en este grito / repartiéndose en una promesa: / seguir trabajando
por la justicia / seguir construyendo las bases del amor / seguir amasando la
alegría final - 6-12-82. Otro beso
Ezeiza, 20/9/83
Buenas noches mi dulce flacucho, qué tal? Yo estoy metida en la cama
fumando un particulares y pensando en vos. Tenemos las puertas abiertas
para ver televisión, pero ya no tengo ganas de estar con ese aparato, y pen-
sé que sí tenía muchas, muchas ganas de estar con vos. En fin, son ganas
que ya nos desbordan, para que seguir nombrándolas, no? Quiero darte un
beso antes de seguir escribiendo, y otro más mientras pienso en el renglón
siguiente, porque no sé como seguir, mejor dicho sí sé, pero esto se transfor-
maría en una enumeración de ganas y deseos que vos y yo conocemos de so-
bra. Tengo que imaginarme que te tengo al lado, que puedo acariciarte y
mimarte y mirarte cuanto quiera, sólo así puedo después decirte otras co-
sas. Contarte todo lo lindo que fue este luminoso domingo de sol, aunque
demasiado tiempo pensé en vos, en cómo te sentirías, en la urgencia que te-
nemos de compartir la vida y en la bronca multiplicada por cada día de ya-
pa que se está llevando este “maravilloso” y tambaleante proceso. En po-
cas palabras, hoy sentí tu ausencia -y lo que es peor sentí que vos
seguramente estarías igual- y sabés? me sorprendió encontrarme pensando
todo esto con rabia pero también con serenidad, con la serenidad que da el
saber que hay un trecho todavía, pero que éste es el fin. Yo puedo conser-
var ese sentimiento, me es fácil, vos lo alimentás cada día dándome todo lo
que sos, que es mucho más de lo que cualquier necesitado podría reclamar.
Y bue, ya sabes me da rabia no poder ponerme al lado de tu soledad para
que deje de serlo, y no tener más para decir que “falta poco... hay que ban-
car”. Puaj! Que plomo son las palabras cuando hacen falta hechos. Y esto
vos lo sabés de sobra, pero me lo digo a mi misma, como para convencer-
me de que no es mi inutilidad la que lo impide, sino estos tiempos que oja-
lá sean los últimos tiempos (de éstos, claro). Y cómo anda tu hígado? Te
cuidaste?, es un decir, se hace lo que se puede, porque no creo que toda esa
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ansiedad de la que me hablaste sea ajena al hígado. Ja! Ese hígado necesita
menos papas fritas y más mimos para compensar. Hola! Sigo después de un
día ¿cómo estás? Yo con toda la primavera encima, el patio era una cosa de
locos, un lujo para alta burguesía y presas de campo. Quién lo diría en sep-
tiembre tomando sol en bermuda y remera, y la piel dejando ese color blan-
co del invierno. El jardín empezó a brotar, mejor dicho las plantas están lle-
nas de hojas y tallos nuevos y hay un montón de flores chiquitas, de colores,
desparramadas por todos lados. Es una maravilla y cosa de locos tenerlo en
la cárcel. Y tuve otro día divertido: ví la final inter clubes de voley por tele-
visión, dos partidazos de locos y después un recital de un tal Rubén Blades,
un panameño que vino hace poco al país y que como dice Román, la rom-
pe. Hace música salsa, al mejor estilo caribeño y con letras que recuerdan
las viejas canciones de Carlos Puebla y la música cubana en general, un es-
pectáculo por sí mismo. Sirve a veces el aparatejo. Y más novedades, se fue
la Gringa y Liliana Teplitzky, la vamos a extrañar a la Grin, hace no sé
cuanto que estamos juntas. Pero ya no tengo ese sentimiento de desprendi-
miento que tenía antes, quizá porque lejos prima la alegría de que se vaya,
pero también por el sentimiento de corto plazo y de que nos veremos en al-
guna de esas vueltas de la vida. El sábado se va Stella ¡y quedamos 16! ¡que
maravilla!. Ah! sabes? mañana tenemos autorización para festejar el día de
la primavera en el patio con las changas de arriba, a la mañana vamos al
gimnasio y a la tarde en el patio ¡qué tal ¡quién dijo que la cárcel era abu-
rrida y monótona? Serán en total 6 horas de sol, todo un pic-nic primave-
ral, no? Bueno mi dulce y flacucho marido, te voy a dejar hasta el sábado o
hasta dentro de un ratito cuando vuelva a pensar en vos. ¿Te dije que te
quiero mucho? ¿y que te extraño? ¿y que quiero estar con vos? ¡y que sos lo
más hermoso que me sucedió en la vida?, entonces está casi todo dicho. Ah!
Sabes? acabo de leer en Clarín una nota de Terragno sobre la revolución
Sandinista, lindísima, como son todos los relatos de ese pueblo. Creo que
hacía mucho que un pueblo no se ganaba de ese modo el cariño del mundo.
En una parte cita palabras de Tomás Borge donde dice: “tendremos que se-
ducir a los pájaros para que abandonen su follaje y lo pongan al servicio de
la revolución”, decime, cualquiera diría que pertenecen a un poeta y no a
un ministro del interior, pero lo que aún me resulta más hermoso es saber
que son capaces de hacer abandonar a los pájaros el follaje. En fin, es muy
lindo, pero hay que leerlo. Chau pibito, te dejo y me quedo con vos, te be-
so a cada ratito. Te quiero siempre más. GRA
Ezeiza, 10/10/83
Mi tan querido flacucho: qué tal adorable esposo? Yo bien, sólo que
con unas ganas que no me banco de estar con vos, así que después de cami-
nar como una hora de una punta a la otra del pabellón y cuando ya me que-
dó muy claro que la cárcel me quedaba chica en el día de hoy decidí venir a
encontrarte. Una pausa para un beso ¿querés? –Yo sí, es más te amo pro-
fundamente (hum, esto no me gusta me suena a teleteatro, pero es así). Y
bueno, antes de decidirme a enclaustrarme en la celda para escribirte, me
enteré que, según las computadoras del pabellón y de acuerdo a los anun-
cios de Nicolaides, que en un mínimo de 6 días o un máximo de 66 estaría-
mos juntos. Tanta precisión me dejó volando. ¿Será posible? Si de tanta jo-
da con el asunto ya parece que siempre es parte de una broma. Pero no, esta
vez será cierto. El comité de “esposas pro-ejercicio de la profesión” está re-
almente feliz, feliz de dos cosas, primero de ejercer la profesión; segundo de
que este “proceso” llegue cuanto antes a su fin. Son dos buenas razones
¿no? Ahora quiero estar con vos, últimamente la separación después de ca-
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