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LA COMUNA ES LA

CÉLULA TERRITORIAL
DEL SOCIALISMO
 federicochimo  Sin categoría  11 abril, 2019 19 Minutes

[Entrevista a Gsus García, Vocero de la Comuna Socialista Altos


de Lídice]
Caracas, 5 de abril de 2019

Federico Simonetti: Primero lo primero. A la experiencia que


ustedes vienen desarrollando la han llamado “Comuna
Socialista Altos de Lídice”. Socialista. ¿Por qué socialista? ¿Qué
entienden ustedes por socialismo?
Gsus García: Una nueva forma de hacer las cosas. Una forma distinta a la
que nos criaron. Una forma distinta a la que nos acostumbraron a hacer las
cosas. A nosotros desde un punto de vista científico quizá, todavía nos falta
mucho por avanzar en la idea de nuestro socialismo. Chávez dio
muchísimas ideas. Pero creo que en la Comuna, el mejor ejemplo de
construcción del socialismo se da desde la práctica, desde el hacer, desde el
andar. Quizá uno de los grandes errores de la revolución bolivariana es no
tener una buena sistematización de todos esos procesos. Ahí ha avanzado
Reinaldo [Iturriza], Reinaldo sí ha avanzado mucho en eso.
Cuando trabajamos la colectivización del hacer, desde todo punto de vista,
en la salud, en lo social, lo económico, lo productivo; ahí sí estamos
construyendo socialismo. Claro, seguimos teniendo muchas relaciones en
lo que respecta a lo financiero, muchas relaciones de orden meramente
capitalista. Pero cuando la ganancia que se genera con nuestro trabajo se
reparte en partes iguales o va directamente a la inversión social, cuando no
se piensa en tener una ganancia suprema sino mas bien en solventar los
problemas que hay en la comunidad, creemos que estamos creando algo
nuevo. Porque eso no ocurría antes.
Cuando antes en el barrio alguien invertía en alguna ayuda social o
celebraba el día del niño, se pensaba: “ah bueno, ese chamo es pana, ese
chamo es fino, ese chamo es buena gente”. ¡No! Aquí eso de buena gente no
va más, eso tiene que convertirse en un sistema de gobierno. Y cuando lo
convertimos en un sistema de gobierno territorial, estamos construyendo
socialismo, estamos seguros de eso. Y no hemos encontrado en el marco
del capitalismo una figura como esa. Entonces creemos que es ahí en la
Comuna, es ahí en el sistema de trabajo territorial, es ahí en la Comuna
socialista donde estamos pariendo el socialismo.
FS: Chávez planteaba que había que ir hacia el socialismo. Pero
reconocía esto que vos decís con toda claridad, actualmente
siguen imperando las relaciones capitalistas. Entonces entre el
capitalismo y el socialismo tiene que haber un proceso de
transición. ¿Cuál es el rol de la Comuna en esa transición del
capitalismo al socialismo?
GG: Es la célula. Es la célula donde eso nace, hay que parirlo. Es el espacio
de experimentación, el espacio ideal de creación, no hay otro. Es en el
territorio o no es. Es en la comuna o no es. La comuna no es más que esa
fábrica donde estamos todos como unos trabajadores, como unos obreros,
echando tuercas, echando llaves, echándole aceite a esta máquina,
echándole aceite a aquel motor. Lo decía Chávez, la Comuna es la célula
del socialismo, es la célula territorial del socialismo.
Bueno, si hay algunos tanques pensantes, intelectuales y gente que le gusta
pensar fuera del territorio, ¡ah bueno! esa es su forma de hacer las cosas.
Pero nosotros pensamos, hacemos, corregimos, pensamos, hacemos,
corregimos y ahí vamos. Si no experimentas ¿Cómo creas el socialismo? La
Comuna es eso, es el espacio de experimentación per se del socialismo.

FS: El otro día en la Mesa de salud expresabas algo que me


quedó grabado. Dijiste algo así: “hay que superar el viejo
Estado” ¿Qué es esa idea del viejo Estado? ¿Qué es el Estado hoy
en Venezuela?
GG: ¡Uf! ¡Una vaina horrible, huevón! (risas) Es una estructura muy
burocrática, muy lenta. Que no se adapta a los procesos de las
comunidades. Ahorita mismo nosotros tenemos unos procesos que van
muy rápido, porque deben ir rápido, porque los tiempos ameritan que sea
rápido, estamos en medio de una guerra, no podemos ir lento. Entonces,
cuando a una institución tú le presentas un proyecto te dice: “¡No! Esto
tiene que pasar primero por aquí, luego por aquí, luego aquel firma, luego
firma aquel otro, y después yo.” Y así ha pasado un año y no se ha
aprobado.
El Estado es como una estructura ya gris. Cuando Chávez impulsa las
Misiones, justamente lo hace para crear un Estado paralelo, que fuese más
rápido, que llegara más adentro, que no tuviera tanta burocracia. Chávez lo
decía en 2012, que ahora venía la fase de transición al socialismo, y que
teníamos que hacerlo a nivel territorial, a nivel de las Comunas, por eso el
Golpe de timón. Lamentablemente eso se ha difuminado en el tiempo.
El Estado no es más que un obstáculo, ese viejo Estado es un obstáculo con
el cual tenemos que combatir. Y buscar siempre que cada Comuna tenga el
auto-sustento y la organización suficiente para depender lo menos posible
de ese Estado. Porque Comuna que depende del Estado es como un
humano en estado vegetativo, con una bomba de oxígeno, operada por
electricidad. Un humano que cuando no tenga ni electricidad ni planta
eléctrica, se va a morir. La Comuna no puede morirse porque falte el
Estado. La Comuna tiene que ser Estado, tiene que gobernar el territorio y
no puede depender del Estado burocrático, sino muere.
FS: A lo largo de la historia ha habido muchas experiencias de
Poder Popular en el mundo. Y siempre han sido atravesadas por
un debate crucial, sobre si el Poder Popular se tenía que
desarrollar hacia dentro del Estado o en paralelo al Estado.
¿Cómo ves esto? ¿Cómo ve la experiencia venezolana esta
cuestión?
GG: Bueno, ahí hay visiones encontradas. En lo particular he pasado por
las dos. Por la visión en la cual creo que a veces tenemos que estar en el
Estado para poder destruirlo por dentro, como lo hizo Chávez. Meterse en
el Estado para poder desenmarañarlo por dentro, y a su vez ir
construyendo lo paralelo. Yo creo que son ambas. Por ejemplo, mucha
gente criticaba a Ángel [Prado] de El Maizal, porque su propia gente lo
postuló alcalde. “Si es comunero ¿para qué va a ser alcalde?”. Bueno,
justamente porque necesitamos un infiltrado ahí, que vaya transfiriendo
todo el poder que pueda al Poder Popular, y que ese Poder Popular vaya
construyendo paralelamente el nuevo Estado. Que cuando venga el otro
alcalde dentro de cuatro años a gobernar diga: “¿y ahora qué hago yo aquí
si este pana le transfirió prácticamente todo a la Comuna? ¿Qué voy a
hacer yo aquí?” Bueno ¡no sé loco! Irás a utilizar esa sede para jugar ping
pong, no sé (risas).
Yo creo que hacen falta las dos cosas. Ahora, comunero o comunera,
revolucionario o revolucionaria, que entre en el Estado sin una idea clara
de lo que va hacer, sino simplemente con la mera presunción de que va a
construir el socialismo, está muerto, muerto. Si yo voy a entrar, aunque sea
en el “Ministerio de asuntos sin importancia”, tengo que tener claro que en
ese Ministerio yo tengo la función de transferirle todo el poder al pueblo.
Sin la claridad en el objetivo, me pierdo en ese mar. Porque ese mar tiene
placeres, tiene lujos. Tiene cuatro paredes que te encierran. Y piensas que
estás ahí dentro construyendo el socialismo. Pero no, estás cumpliendo la
agenda del Estado burocrático, del Estado burgués. Entonces, yo creo que
hay que estar en los dos espacios, para destruir uno y para construir el
otro paralelamente.
FS: El otro día leía una publicación tuya en Facebook muy buena
sobre algunas dificultades de la parroquia[1]. Hacías muchas
críticas al poder público, al Estado. Mencionabas la burocracia,
las demoras. ¿Cuánto crees vos que hay de ingenuidad (de falta
de comprensión del rol estratégico del Poder Popular) y cuánto
de disputa de intereses (de lucha de clases), en la no
priorización del desarrollo comunal por parte de funcionarios
del Estado?
GG: Depende el tema. En lo económico hay una lucha de intereses, porque
hay dinero en juego. Quienes son ministros de las áreas económicas en este
país, no son ingenuos. Saben que cuentan con las comunas, saben que
Chávez dio al pueblo una gran cantidad de tierras para que fuesen
productivas, que se las dio a las comunas y a los consejos campesinos,
saben que eso existe. Cuando deciden no articular con la Comuna y
priorizar a las grandes empresas, no es por ingenuidad.
Ahora, en algunos otros sí es por falta de comprensión de la importancia
estratégica de las comunas. Por ejemplo, cuando una institución frena una
transferencia de competencias, sea en transportes, en agua, en cualquier
servicio; a veces es porque no entiende que viabilizando eso estaría dando
un paso súper importante en el rol histórico que como individuo le toca en
la revolución, que logrando eso se estaría dando un salto sumamente
cualitativo en la construcción del socialismo. Muchos compas no lo saben.
El partido de gobierno ha hecho esfuerzos, pero muy escuetos en el tema de
la formación, el debate sobre el socialismo, el debate fuerte, sincero,
totalmente descarnado sobre la construcción del socialismo.
Un funcionario público que asume cargos de dirección no puede estar ahí
porque sabe hablar bonito, porque tiene un buen discurso, porque es pana
de este o pana del otro. Tiene que hacerlo porque comprende el proyecto. Y
muchos no lo entienden. Entran y quieren hacer gestión. ¡No,
hermano! ¡Tú no tienes el Estado para hacer gestión, tú tienes el Estado
para hacer revolución! Y para hacer revolución tú tienes que dar el poder
al pueblo. Y hay leyes, hay de todo para darle poder al pueblo.
En lo económico es muy distinto. En lo económico hay una pugna de
intereses marcada, de clase, ahorita mismo, hay una lucha de clases dentro
de todo el tema económico venezolano. Entre lo que se dice la nueva
burguesía, que para mí es la misma burguesía, lo que se dice la burguesía
roja, los boliburgueses, etc. Hay una lucha entre ellos y el campesinado, los
comuneros, etc. Hay una lucha de clases constante, evidente, descarnada.
Pero en otras cosas es que no entienden la importancia de darle la
centralidad a la Comuna. Eso es.
FS: La Comuna tiene la tarea estratégica de, en un punto, ayudar
a desarmar al Estado burgués, pero hoy el Estado está
conducido por el chavismo. Entonces hay una tensión, porque
por un lado hay que dar la pelea con ese Estado, pero por otro
hay que defenderlo, porque si se pierde esa conducción se viene
algo mucho peor. ¿Cómo ven ustedes esa tensión? ¿Es una tarea
defender al gobierno en la estrategia Comunal?
GG: Un pana decía, “este Estado, sea lo que sea, es un muro”. Una gran
pared que nos permite a nosotros de este lado de la pared, del lado
izquierdo de la pared, construir lo que estamos construyendo. Cuando a ese
muro empiezan a caérsele los ladrillos porque se pone blandengue, hay que
ver cómo se le echan sus pegotes de cemento para tapar esos huecos.
¿Hasta cuándo hay que cargarle los ladrillos al Estado? Bueno, hasta que
esté muy blandengue. Cuando uno sepa que ese muro ya no sirve de nada,
cuando uno ya prácticamente ve lo que hay del otro lado, es porque ya no
es un muro. Pero mientras siga siendo muro, mientras no nos maten por
ser comuneros, mientras la policía no nos dé rolazo por ser comuneros, por
construir, por tener autogobierno, hay que defender ese muro. Porque
sabemos que muchísimas de las cosas que hoy nos parecen cotidianas y
normales, en un gobierno de derecha no van a ser ni cotidianas, ni
normales. Y ejemplos hay por doquier ahorita mismo en toda
Latinoamérica.
Hay que proteger ese muro mientras se pueda. Porque además cuando el
enemigo estratégico, histórico, está arremetiendo de una manera
desenfrenada, como lo está haciendo ahorita mismo el imperialismo
norteamericano, no es casualidad. Por algo lo hacen. Claro que sabemos
que hay gente que negocia, bueno está bien, unos cuantos ladrillos que se le
caen al muro, hay que ver cómo le ponemos un ladrillo nuevo y ya está.
FS: Chávez proyectaba que el poder pase completo a la Comuna,
incluso a nivel nacional. El poder tiene muchas facetas,
pensemos en tres bastante importantes. La soberanía
alimentaria, la FANB (Fuerza Armada Nacional Bolivariana) y
los sectores estratégicos de la economía. ¿Cómo se relaciona la
Comuna con esos tres ejes?
GG: Este 2019 es el año en el cual nos hemos dispuesto dejar de ser una
Comuna simplemente urbana, que organiza muy bien el tema social, el
tema de salud, para pasar a ser una Comuna productiva. Si queremos tener
independencia tenemos que ser una Comuna productiva. Tenemos previsto
sembrar un montón de rubros y sobre todo crear un buen banco de
semillas para los años venideros. Para poder sembrar no sólo en los
territorios de la Comuna, sino también en los cercanos. Y que toda esa
población tenga la posibilidad de tener esos alimentos allí. Debe
comprenderse que la Comuna es productiva o no es.
En lo que respecta a lo estratégico de la economía también queremos
meterle al tema de los servicios públicos. Queremos ver cómo por lo menos
un servicio público pasa a estar bajo control de la Comuna. La recolección
de desechos sólidos a través del reciclaje, el tema del agua, el tema
eléctrico. Sobre todo pensamos el tema del reciclaje, creemos que se puede
crear una buena cantidad de recursos ahí y, en el marco de la guerra y el
bloqueo, saber reutilizar muchas de las cosas que botamos, es ahora algo
providencial. El tema del reciclaje toma una importancia estratégica. No es
simplemente reciclar por salvar al mundo que también es un objetivo del
Plan de la patria, sino también reciclar porque si no estamos fritos. Si no
vamos a seguir importando e importando.
El tema de la seguridad es algo que honestamente todavía no hemos tocado
en profundidad. En la Comuna hay milicianos y milicianas, sí los hay. Sin
embargo, no hemos creado el “cuerpo combatiente de la Comuna”. Ese
proceso hay que llevarlo a cabo, con mucho cuidado, porque tampoco
queremos espantar a la gente. Pero es un proceso que hay que hacer. En la
Comuna hubo una sola vez una protesta importante hace como tres años,
no éramos todavía Comuna como tal. Después de eso dijimos: “eso no
vuelve a pasar aquí, no vuelve a haber una guarimba”. En verdad fue un
poco más abajo de la Comuna, en los linderos, pero nos dijimos que eso no
se podía repetir. Y con la conformación de la Comuna comenzamos a
prevenir y evitar que eso pase.
FS: ¿Y la FANB deja hacer a la Comuna? ¿Deja que se arme ese
cuerpo? ¿Ayuda? ¿Cómo es?
GG: Si. Son las cosas que te decía del muro. El muro permite que podamos
hacer eso. Imagínate que con un gobierno de derecha nosotros digamos
que armamos un cuerpo combatiente de la Comuna. ¡No! Al minuto tienes
ahí todos los allanamientos. Ni me quiero imaginar lo que pasaría.
FS: El artículo 3 de la Ley orgánica del Poder Popular dice algo
muy interesante. Plantea que el desarrollo del Poder Popular
está atado al nivel de conciencia y organización del pueblo.
¿Cómo es eso, la relación entre el desarrollo de la conciencia y el
ejercicio directo del poder?
GG: Yo creo que parte de lo individual. En la comuna hay voceras y voceros
muy activos, compañeros y compañeras a los que les gusta ayudar al otro,
dedican su vida a ayudar al otro. Y algunos (los menos) no se identifican
como revolucionarios. Hay otros, la gran mayoría, que sí se califican como
revolucionarios, como chavistas, y que lo hacen porque comprenden el
proceso que están llevando a cabo. Pienso que en ambos casos hay un
proceso de crecimiento de la conciencia. Yo creo que tu eres consciente en
la medida que comprendes que si no ayudas al otro ¿Para qué coño viniste
a este mundo? ¿Para joder? Porque si todo lo vas a hacer en torno a ti y
nada más que a ti ¿Qué consciencia puedes estar teniendo? Ninguna.
Y solo porque hay personas así en la Comuna, solo porque eso está muy
dentro de la idiosincrasia del venezolano, de la venezolana, es que es
posible que esta revolución exista. Sin esa solidaridad, ese compañerismo,
esa vecindad, ese apoyar al otro, yo creo que sería difícil que aquí hubiese
una revolución como la que planteó Chávez.
Hay gente que tiene la idiosincrasia de ayudar al otro y hay gente que más
allá de la idiosincrasia tiene la convicción que este es el camino. Y cuando
esas dos voluntades se unifican, avanzan las instancias de Poder Popular,
los consejos comunales, las comunas, los colectivos. Pura idiosincrasia
comunitaria, echarle la mano al otro. Ahí tienes el ejemplo que estamos
viviendo ahorita con el agua. Tú te metes ahora por Lídice, que está
llegando agua a la parte baja de la Comuna, y todas las casas son un
llenadero, todo el mundo saca una manguera para que el vecino de un poco
más arriba que no le ha llegado el agua vaya y llene. Hasta las doce de la
noche, preparando café, dándote agua, “¿estás cansado? ¿Te falta pipote?”
Ayudando al otro. Y eso se debe a que justamente Chávez planteó eso como
la cotidianeidad, antes era algo excepcional, hoy ya es cotidiano en la
revolución bolivariana.
Es un hecho importante de consciencia, que cuando se traduce en la
búsqueda del poder por parte de la Comuna, estamos creando socialismo.
Porque ya la idiosincrasia pasa de ser idiosincrasia a ser proyecto
territorial. Estamos pariendo otra vaina, otra cosa.
FS: En el mundo se está desarrollando una revolución feminista
con mucha fuerza. El rol histórico de las mujeres se está
poniendo en cuestión, el machismo. Cuando fuimos a la Comuna
vimos que la mayoría son compañeras, ejerciendo espacios de
poder. ¿Cómo es el rol de la mujer en la Comuna?
GG: Sin mujeres no hay Comuna. Así de simple. No es meramente una
consigna, es real. Buena parte de las comunas en Venezuela, sino todas,
están comandadas por mujeres en todas sus instancias. Son las mujeres las
que empujan los procesos políticos en este país. En la Comuna las mujeres
practican el feminismo combatiente, militante, pero quizá no estén
conscientes de eso. Ellas hacen su trabajo, son la mayoría en todas las
asambleas, en todas las reuniones, en todas las instancias. Pero muchas de
ellas quizá no estén conscientes de la importancia de su rol como mujeres
en la sociedad y en la Comuna.
Creo que ese es un trabajo que hay que saberlo hacer. Porque a veces hay
muchas corrientes feministas que quieren venir desde afuera del territorio
“a organizar a las mujeres”. ¡No! Métete allí, entiende el proceso, trabaja
con ellas, sufre con ellas, pare con ellas. Y a partir de eso, luego que
entiendas ese proceso que ellas viven, plantea algo, canaliza cosas. Pero no
vengas a imponer ideas tuyas o de tu grupo, porque tú fuiste para
Argentina, o fuiste para Chile, y viste que allá las mujeres hacen tal cosa.
No, tienes que ver cómo es la cosa aquí, y a partir de ello creas las
condiciones, trabajas las condiciones, filosofía, etc.
Uno tampoco es quizá el mejor ejemplo para impulsar procesos feministas.
Pero creo que a veces las mujeres no están al tanto del poder que tienen.
Hay que buscar la manera para que ellas se den cuenta que sin ellas no hay
nada.
FS: En el Golpe de timón Chávez dice que la Comuna no puede
ser una isla socialista en un mar capitalista, porque sino el mar
se la termina tragando. ¿Cómo es eso en la Comuna? ¿Cómo es la
articulación con otras comunas? ¿Cómo se da ese proceso?
GG: Lo estamos creando ahora. Creo que vamos bien, siendo que nuestra
Comuna está recién parida. Tenemos apenas dos años de existencia y ya
estamos haciendo un montón de cosas. Ahorita mismo, a través sobre todo
del alimento, estamos buscando establecer relaciones económicas con otras
Comunas del país. Buscando impulsar organización comunal en el punto y
círculo de la Comuna. Tratando que los lugares cercanos a la Comuna se
vean impactados por su política. Que sea un Estado, un gobierno, que
pueda ayudar a sus países vecinos, por dar un ejemplo geopolítico. Con las
toneladas de papa que trajimos hace dos semanas, pudimos darle papas a
un precio económico a los Consejos Comunales cercanos. Lo mismo
queremos hacer con otros alimentos, todo lo que podamos compartir con
otros Consejos Comunales, lo vamos a compartir.
También queremos ayudar para que se construyan más Comunas en la
parroquia, porque la nuestra es la única en toda la Pastora. Estamos como
solitos en ese mar, remando solos. En este contexto en que el poder
comunal ha ido disminuyendo, tenemos que juntarnos los poquitos que
creemos en la idea. Tenemos que echar pa’ lante.
FS: Chávez se caracterizó por caminar paso a paso, con los pies
en la tierra, pero siempre mirando al horizonte, lejos. ¿Cómo se
debiera estar en diez años si todo saliera bien?
GG: ¿Aquí es la parte donde lloro? (risas) Chamo, primero no creo que
pueda pensar egoístamente. A mí me gustaría que por lo menos todo Lídice
tuviese Comunas, eso sería esencial, que la Comuna pueda impulsar otras
Comunas más. Segundo, que todas las instancias de autogobierno
funcionen, y que funcionen bien, que no sean una copia del viejo Estado,
que sean el nuevo Estado. Tercero, que tuviésemos independencia, creo
que eso es la clave, la independencia. Lo decía Chávez. Tenemos que ver
cómo una Comuna a nivel territorial lucha por la independencia. Cómo
puede administrar los servicios, cómo puede administrar su economía
productiva, cómo administra su dinámica social, cómo protege a cada uno
de sus habitantes con diversas políticas, cómo la participación en cada uno
de los procesos electorales comunales alcanza más del 60%. Tenemos que
lograr que la gente participe, no solamente votando. Necesitamos nuevos
espacios de participación.
Yo creo que para que las Comunas sean el gobierno del futuro, deben
acercarse al futuro. Porque si siguen pensando como Comunas de la Unión
Soviética estamos jodidos. No podemos seguir pensando como Comunas de
la Unión Soviética cuando tenemos telefonía, celular, cuando ya casi los
chamos se comunican más por estos aparatos que cara a cara. Ese es el
futuro, metámonos ahí. ¿Hay que crear una red social? La crearemos. ¿Hay
que crear nuevas formas de interacción? Hay que crearlas. Pero no nos
podemos quedar en el papel, en el cartelito pegado en la pared. La Comuna
debe acercarse al futuro, debe ser el futuro, debe ser el gobierno del
futuro. Así lo veo yo.
Hay muchos compas que ven eso con miedo. Ven la idea de la creación de
un café que no sea como esos cafés de antaño, sino un café para los
milenials, como una cosa sin importancia. ¡No! ¿Con qué población va a
contar la Comuna en los próximos diez años si no se mete con ese grupo
etario?
Cuando Maduro lanzó el carnet de la Patria, a mí me dio un poco de
nostalgia. Porque para mí la Comuna debía haber asumido esos espacios de
tecnología y participación de una manera más territorializada. Claro,
Maduro lo hace por la necesidad de evadir quizá también el Estado
burgués, y buscar a través de una manera tecnológica llegar a la gente de
modo más directo. La Comuna tiene que verse en ese espejo.
Entonces, si pienso en el futuro yo veo una Comuna independiente, una
Comuna que no puede estar aislada, una Comuna que para ser
independiente tiene que ser productiva, y a su vez tiene que tener mayor
conexión cotidiana con cada uno de sus habitantes. Espacios de
participación nuevos. Por ahí creo que van los tiros del horizonte y del
futuro.
FS: Todo esto que decís me hace acordar a aquella frase de un
prócer de ustedes y de toda Nuestramérica, Simón Rodríguez,
cuando decía “Inventamos o erramos”, en ese tren de crear y no
seguir copiando viejas fórmulas. ¿Hay algo que no te haya
preguntado que te gustaría decir?
GG: La coyuntura actual de las comunas es muy compleja. Tenemos un
triple espacio de combate. El de la comuna como tal, sus vicisitudes, sus
problemáticas. El de la guerra que enfrentamos todos los venezolanos y
venezolanas. Pero además el espacio de disputa con el Estado burgués que
cada vez es más fuerte, cada vez es más difícil.
¿Qué vamos a hacer para no desaparecer? El movimiento comunero tiene
que pensarse nuevamente, ser movimiento. Ahorita no es movimiento,
estamos aislados. Tenemos que movernos para que el Estado sepa que
estamos aquí. El futuro que nos proponemos, más allá de la guerra, ¿es
posible alcanzarlo con este Estado? Y no me refiero al Estado burgués
desde el punto de vista filosófico, sino a concretamente cómo se comportan
los gobernantes del momento para ser más exactos. Es ahí la complejidad.
¿Cómo hacemos eso?
Los encuentros que se han sostenido hasta ahora con el presidente, han
sido espacios que continúan con la misma lógica. Se reúnen con los
comuneros dos o tres días, hacen un documento como de 20 páginas, se lo
entregan al presidente, el presidente ya tiene su agenda, y de esa agenda
aprueba tres vainas, y todos los comuneros que están allí en el acto
aplauden, se van y esperan otro encuentro con el presidente. No hermano,
eso no es. Chávez planteaba un debate. Chávez cuando se reunía con las
comunas era un debate, cualquiera se podía parar a decirle cuatro vainas a
Chávez, y él o decía sí eso es, o decía eso no es. Pero se planteaba debate,
no era un acto. Con las comunas tú no puedes plantear actos de gobierno,
no. Con las comunas tú tienes que discutir política. Porque es con esa gente
que tu vas a construir el socialismo. No es con otro sujeto. ¿Con cuál sujeto
vas a construir el socialismo? Si ese es el que tienes en el territorio. Sea
joven, sea mujer, sea negro, blanco, moreno, ateo, católico, cristiano,
protestante, sea lo que sea. Es ahí.
Lo que está ocurriendo es que las cosas cada vez se difuminan más y
estamos cayendo otra vez en el Estado, que tiene un montón de políticas de
orden nacional, sin ningún tipo de territorio. Esa es una complejidad que
creo que no se está debatiendo. Que todos la sufrimos, todos la padecemos,
todos la criticamos, todos la escribimos, pero más allá de eso, nada.
Tenemos que encontrarnos, crear un espacio de debate y de concreción, de
propuestas serias. Si no es con las supuestas mil comunas, que sea con las
treinta que estén dispuestas. Nos atrevemos. Nosotros nos vamos a atrever
a proponer otra vaina. Ese es el reto.

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