El día 15 de septiembre practicamos el valor de libertad, al decidir qué actividades
realizaríamos y con qué personas la realizaríamos.
Preparamos una cena consistente en pozole y tostadas de pollo y tinga, entre
todos ayudamos a preparar los alimentos, posteriormente nos arreglamos para cenar y asistir al tradicional “grito” en la “Plaza de los Mártires”, nunca habíamos esperado a que saliera el gobernador, fue muy gratificante ver a Jimena su cara de asombro al ver tan de cera los juegos artificiales y al estar tan cerca del palco donde salió el gobernador del Estado de México. Nos desvelamos platicando como celebrábamos de niños su padre y yo en nuestras casas este día.
El 16 de septiembre nos levantamos temprano para asistir al tradicional desfile.