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Nutrición Hospitalaria

ISSN: 0212-1611
info@nutriciónhospitalaria.com
Grupo Aula Médica
España

Álvarez Hernández, J.
Desnutrición y enfermedad crónica
Nutrición Hospitalaria, vol. 5, núm. 1, mayo, 2012, pp. 4-16
Grupo Aula Médica
Madrid, España

Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=309226797002

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Nutr Hosp Suplementos. 2012;5(1):4-16


Nutrición ISSN 1888-7961 • S.V.R. 28/08-R-CM

Hospitalaria
SUPLEMENTOS

Desnutrición y enfermedad crónica


J. Álvarez Hernández
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Universitario Príncipe de Asturias. Alcalá de Henares. Madrid. España.

Resumen MALNUTRITION AND CHRONIC DISEASE

La Desnutrición Relacionada con la Enfermedad


(DRE) es una patología altamente prevalente con graves Abstract
consecuencias sobre distintos órganos y sistemas. Empe-
ora el pronóstico en la evolución del paciente incremen- Disease-related malnutrition (DRH) is a highly preva-
tando su morbimortalidad, y produce deterioro de la cali- lent pathology with severe consequences on different
dad de vida, sin olvidar la importante carga que supone organ systems. It worsens the patient’s outcomes by
para el sistema sanitario. La nueva definición de desnu- increasing the morbimortality and reducing the quality
trición y clasificación propuesta pone en valor el papel del of life, as well as it represents an important burden on the
ayuno, y la respuesta inflamatoria sistémica presente en health care system. The new proposed definition and clas-
la enfermedad aguda y crónica, como responsable de los sification of malnutrition highlights the role of fasting
cambios estructurales y metabólicos asociados. Es evi- and the systemic inflammatory response present in the
dente, que resulta fundamental identificar los pacientes acute and chronic disease, being responsible of the asso-
en riesgo de desnutrición o desnutridos para establecer ciated structural and metabolic changes. It is evident that
medidas de prevención y tratamiento. El Consenso Multi- it is paramount to identify those malnourished patients or
disciplinar para el Abordaje de la Desnutrición Hospita- at risk for malnutrition in order to establish the preven-
laria en España, revisa todos los aspectos relacionados tive and therapeutic measures. The Multidisciplinary
con la prevención, diagnóstico, monitorización y trata- Consensus for the Management of Malnutrition in Spain
miento de la desnutrición en distintos ámbitos asistencia- reviews all the issues dealing with prevention, diagnosis,
les, y establece una serie de recomendaciones ad hoc que monitoring, and management of malnutrition at different
sirven de guía actualizada a todos los profesionales que se health care levels, and establishes a set of ad hoc recom-
aproximen con interés al problema. El concepto actual de mendations that represent an updated guideline for every
desnutrición relacionada con la enfermedad, la denuncia healthcare professional with an interest on this topic. The
continua de los datos inaceptables de desnutrición en los current concept of disease-related malnutrition, the
centros sanitarios de los países desarrollados, el interés del continuous communication of inacceptable figures of
colectivo de profesionales dedicados a la Nutrición Clínica malnutrition at health care facilities in industrialized
agrupados en equipos multidisciplinares y las campañas de countries, the collective interest of healthcare professio-
Lucha contra la Desnutrición, orquestadas en distintos paí- nals focused on clinical nutrition composing multidisci-
ses Europeos, constituyen una oportunidad de mejora que plinary teams, and the campaigns against malnutrition
pasa por el desarrollo de un Plan Integral de Lucha contra orchestrated in different European countries represent
la DRE en todos los ámbitos de asistencia sanitaria, aten- an opportunity for improvement that would imply the
ción primaria, residencias socio-sanitarias y hospitales. development of an Integral Plan to Fight Against DRM at
all the health care settings, from primary health care,
(Nutr Hosp Supl. 2012;5(1):4-16) nursing homes, and hospitals.
Palabras clave: Desnutrición. Enfermedad. Inflamación. (Nutr Hosp Supl. 2012;5(1):4-16)
Consenso.
Key words: Malnutrition, Disease, Inflammation, Consen-
sus.

Interacción desnutrición y enfermedad Este es un concepto clásico que relaciona una adecuada
alimentación con un correcto estado nutricional, una
La Organización Mundial de la Salud reconoce que buena funcionalidad del individuo y una mejor recupe-
la nutrición es uno de los pilares de la salud y el desa- ración de las enfermedades.
rrollo. En personas de todas las edades una nutrición Cuando hablamos de desnutrición, en el ámbito de la
mejor permite reforzar el sistema inmunitario, contraer salud pública mundial, hacemos referencia a la desnutri-
menos enfermedades y gozar de una salud más robusta. ción asociada a la hambruna fruto de los conflictos béli-
cos, la pobreza extrema o los desastres naturales. El bajo
Correspondencia: Julia Álvarez Hernández. peso, el retraso de crecimiento, las situaciones debilitan-
Servicio de Endocrinología y Nutrición.
Hospital Universitario Príncipe de Asturias.
tes, los retrasos de crecimiento intrauterino, los déficits
Alcalá de Henares. Madrid. España. de hierro, yodo, zinc, vitamina A etc., son situaciones clí-
E-mail: julia.alvarez@movistar.es nicas denunciadas en la población infantil de los países

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en vías de desarrollo con un importante impacto sociosa- cubre sus elevados requerimientos. En un periodo
nitario mundial. Todas se relacionan con una ingesta ali- inicial no existen signos clínicos de pérdida de
mentaria escasa y una elevada carga de morbilidad1. depósitos que hagan sospechar la desnutrición y
Por el contrario, cuando hablamos de desnutrición rela- debemos considerar otros parámetros (deficiencia
cionada con la enfermedad (DRE) estamos incluyendo en de proteínas viscerales, inmunosupresión etc.).
el concepto una variable más, nos referimos al compo- 3. Desnutrición mixta, desnutrición proteicocaló-
nente inflamatorio que acompaña a los pacientes que rica o kwashiorkor marasmático. Como su nom-
padecen esta situación en la práctica clínica habitual. bre indica combina los dos tipos de desnutrición
La DRE tiene graves consecuencias sobre distintos anteriormente descritos. Parece claro que es la
órganos y sistemas, empeora el pronóstico en la evolución resultante de una agresión aguda en un paciente
del paciente incrementando su morbimortalidad, produce previamente “marasmático”. Este es el tipo de
deterioro de la calidad de vida, sin olvidar la importante desnutrición que podemos ver de forma más fre-
carga que supone para el sistema sanitario. Pero el men- cuente en el medio hospitalario. Por ejemplo, un
saje más importante es no olvidar que es evitable. Hoy en paciente con un adenocarcinoma de colon que
día tenemos herramientas suficientes para ser capaces de tiene que ser sometido a intervención quirúrgica
prevenirla o minimizar su impacto, si identificamos los aguda por perforación o por obstrucción.
pacientes desnutridos o en riesgo y los tratamos.
Todos estamos de acuerdo en que la desnutrición La realidad es que estas definiciones, y la caracteri-
condiciona enfermedad y la enfermedad empeora la zación de los distintos tipos de desnutrición, tienen su
desnutrición, por eso tiene interés analizar el binomio origen en la clasificación de la desnutrición infantil
“Desnutrición-Enfermedad”. Sin embargo, definir la descrita en los países subdesarrollados. De ahí la nece-
desnutrición no es fácil como lo demuestra el hecho de sidad de adaptar los conceptos a la realidad de los
los múltiples intentos que se han venido realizando a lo pacientes con desnutrición en un contexto de enferme-
largo de los últimos años2,3. Una de las definiciones más dad también en los países desarrollados. De cualquier
aceptadas ha sido la del Prof. M Elia “se trata de un manera, el interés en revisar la tipología de las formas
estado de nutrición en el que una deficiencia de ener- de desnutrición tiene que ver con el planteamiento de
gía, proteínas y otros nutrientes causa efectos adversos una determinada estrategia terapéutica según los
medibles en la composición y función de los tejidos/ requerimientos de cada paciente.
órganos y en el resultado clínico”4. Hace dos años, un grupo de expertos de ASPEN
Clásicamente se han distinguido tres tipos de desnu- (American Association for Parenteral and Enteral Nutri-
trición: tion) y ESPEN (European Society for Clinical Nutrition
and Metabolism), en un intento de actualizar los concep-
1. Desnutrición calórica, tipo marasmo. La que se tos prácticos relacionados con la desnutrición y la enfer-
desarrolla cuando existe una deficiencia crónica de medad asociada, publicaron un Consenso sobre la defi-
energía y proteínas, aunque los sujetos mantienen nición y clasificación de la DRE y el ayuno en pacientes
una proporción entre la cantidad de energía y de adultos en base al diagnóstico etiológico5. Este informe
proteínas. Se caracteriza por la pérdida de las pone en valor el papel del ayuno y la respuesta inflama-
reservas corporales de masa muscular y muy espe- toria sistémica presente en la enfermedad aguda y cró-
cialmente de grasa. Es la que solemos observar en nica, como responsable de los cambios en órganos y teji-
el ayuno prolongado y el aspecto de los pacientes dos, que condicionan la presencia de desnutrición. Así,
es ciertamente caquéctico. En general este tipo de se establece en este trabajo que, en la práctica clínica la
desnutrición lo encontramos en pacientes que pre- ingesta de nutrientes, en adultos, puede estar comprome-
sentan enfermedades crónicas (cáncer, enferme- tida en algunas situaciones:
dad pulmonar obstructiva crónica, caquexia car-
diaca, anorexia nerviosa, etc.) 1. Inanición crónica pura sin inflamación (ej: condi-
2. Desnutrición proteica, tipo Kwashiorkor. La pre- ciones médicas como la de los pacientes con ano-
sentan los individuos que tienen una alimentación rexia nerviosa).
escasa y basada fundamentalmente en cereales 2. Enfermedades crónicas o condiciones que pre-
como fuente de energía con muy escaso aporte pro- sentan inflamación en grado leve o moderado (ej:
teico. Este tipo de desnutrición ha sido descrito fun- fallo de algún órgano, cáncer de páncreas, artritis
damentalmente en los países subdesarrollados. reumatoide u obesidad sarcopénica).
Podríamos establecer cierto paralelismo al cuadro 3. Enfermedad aguda o estado lesional que cursa
que pueden presentar pacientes, sanos previa- con una marcada respuesta inflamatoria (ej:
mente, que bruscamente presentan una agresión infección grave, quemados, traumas o trauma-
(enfermedad aguda como sepsis, politraumatis- tismo cráneo encefálico cerrado).
mos, traumatismo craneoencefálico grave u otras
situaciones que pueden requerir ingreso en unida- Por todo ello proponen el uso de una terminología
des de cuidados intensivos) y sólo reciben hidrata- basada en la etiología para el diagnóstico de desnutrición
ción intravenosa o una alimentación escasa que no en los pacientes adultos. La tabla I recoge la clasificación

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Tabla I
Clasificación de desnutrición relacionada con la enfermedad. Consenso ASPEN-ESPEN
de propuestas de definición con base etiopatogénica

1. “Desnutrición relacionada con la inanición”, cuando la desnutrición se produce como consecuencia de un ayuno crónico sin
inflamación. El mejor ejemplo es la anorexia nerviosa
2. “Desnutrición relacionada con la enfermedad crónica”, cuando la desnutrición se produce en pacientes con un grado leve o
moderado de inflamación. Como por ejemplo en los casos de fallos de algún órgano (insuficiencia renal, hepática, cardiaca
etc.), cáncer pancreático, artritis reumatoide u obesidad sarcopénica.
3. “Desnutrición relacionada con lesión o enfermedad aguda”, cuando la desnutrición se produce en pacientes con un grado de
inflamación grave. Buen ejemplo de este tipo de desnutrición es la que presentan grandes síndromes como los sépticos, que-
mados, traumas en general y traumatismos cráneo encefálico cerrado en particular.

propuesta. No se trata de una clasificación estática, ya que como su principal causa, en la desnutrición relacionada
los pacientes podrán variar su diagnóstico según el con la enfermedad destacamos varios factores implica-
momento evolutivo de su enfermedad y las medidas adop- dos como el propio ayuno, la propia enfermedad (situa-
tadas. Este planteamiento pretende ayudar a comprender ciones clínicas que condicionen la falta de ingesta, el
un mejor abordaje de la desnutrición que presentan los aprovechamiento de los nutrientes, o el aumento de
pacientes con enfermedades crónicas que empeoran de requerimientos, el componente inflamatorio), sin olvi-
forma brusca. Éstos presentan un mayor componente dar los aspectos relacionados con la falta de sensibili-
inflamatorio que agrava la situación clínica, o bien, modi- dad y formación de los profesionales sanitarios y las
fican su estatus nutricional por la falta de nutrientes. No en instituciones incapaces de pensar en este problema
pocas ocasiones esta última circunstancia es fruto de iatro- para estar atentos a su prevención y tratamiento. El
genia durante los ingresos hospitalarios cuando se mantie- abuso de ayunos terapéuticos, la falta de evaluación
nen periodos de ayuno para la realización de pruebas diag- nutricional de los pacientes a su ingreso o de monitori-
nósticas o como medida terapéutica. zación de la ingesta y la implementación de equipos
multidisciplinares en la Unidades de Nutrición Clínica
y Dietéticas en todos los centros sanitarios constituyen
Mecanismos de desarrollo de la desnutrición claras áreas de mejora en la calidad asistencial de nues-
asociada a la enfermedad, papel de la inflamación tros centros (fig. 1).
en su fisiopatología Parece evidente que la desnutrición condiciona una
serie de modificaciones de la composición corporal y
Mientras que en la inanición que observamos en las del estatus metabólico que se traducen en disfunciones
áreas de hambruna distinguimos la falta de nutrientes de órganos y sistemas. Sabemos que muchos de los

Fig. 1.—Factores implicados


en el desarrollo de la desnu-
trición relacionada con la
enfermedad.

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estudios clínicos demuestran la relación entre la reduc- proteica (esqueleto y vísceras) que pueda afectar a fun-
ción en la masa libre de grasa, siendo éste el compo- ciones esenciales para el organismo. La movilización
nente más importante de la masa celular corporal proteica afecta a la proteólisis que sufren las enzimas
(MCC), y el deterioro en la calidad de vida, de la capa- digestivas dejando de cumplir con sus funciones, por
cidad de curación o recuperación y aumento de la mor- otro lado, se deja de sintetizar algunas proteínas plas-
talidad. Sin embargo la masa muscular esquelética, que máticas como la albúmina y se degradan las proteínas
constituye el componente mayoritario de la masa celu- contráctiles como las enzimas del músculo con el con-
lar corporal, es un determinante de la capacidad de siguiente impacto en la disfuncionalidad del músculo4.
ejercicio y resistencia de los músculos respiratorios y Cuando el ayuno se prolonga, el organismo responde
periféricos. Está claro que ambas cosas, desnutrición y mediante un proceso de adaptación para que la supervi-
actividad inflamatoria, pueden causar una franca dis- vencia no se vea amenazada ante la degradación pro-
minución de la MCC6. teica. Este proceso se expresa con cambios en la reduc-
La desnutrición sin enfermedad asociada condiciona ción de la neoglucogénesis hepática y en la proteólisis,
una reducción de todos los órganos con un ahorro rela- junto con el descenso del gasto energético. En este
tivo de MCC, porque los mecanismos de adaptación al momento la movilización masiva lipídica facilita nive-
ayuno economizan las pérdidas proteicas. Sin embargo les elevados de cuerpos cetónicos que atraviesan la
la masa grasa se pierde y la evolución del proceso barrera hematoencefálica y pueden ser utilizados por el
depende en parte de la cantidad de tejido adiposo dis- cerebro en un fenómeno de cetoadaptación, permi-
ponible para cubrir los requerimientos energéticos del tiendo así reducir la neoglucogénesis y atenuar las pér-
individuo. La mayor pérdida de MCC puede responder didas de masa muscular. Estos cambios metabólicos se
a una agresión, enfermedad o trauma, en definitiva relacionan de forma directa con una serie de cambios
situaciones que condicionan estrés al individuo7. hormonales claramente definidos, como la disminu-
Como ya hemos comentado el deterioro funcional ción de la conversión de T4 (tiroxina) en T3 (triyodoti-
del organismo tiene relación con estas modificaciones ronina) y el aumento de la conversión de rT3 (triyodoti-
de la MCC y del estado metabólico del individuo. En ronina reverse), lo que condiciona una reducción del
los periodos de ayuno y de agresión la respuesta del metabolismo basal. Junto a estos cambios, merece la
individuo en función de sus necesidades se modifica, pena destacar, que también se produce un aumento de
estableciendo un proceso de adaptación, que tiene la secreción de glucagón y hormona de crecimiento y
como objetivo obtener la energía de los sustratos con el una disminución de la secreción de insulina, se reduce
mínimo consumo. así la lipolisis y la cetogénesis8. Además, la desamina-
La utilización de los distintos sustratos varía según ción renal de aminoácidos origina paralelamente la for-
la duración del ayuno. Así podemos distinguir un mación de restos hidrocarbonados que se utilizan para
periodo de ayuno nocturno, el que mantenemos diaria- formar glucosa, aumenta la neoglucogénesis renal,
mente, un segundo periodo de ayuno breve o de corta mientras se reduce la neoglucogénesis hepática.
duración, que hace referencia a un periodo de tiempo Para entender la fisiopatología de la desnutrición
inferior a 5 días, y por último un periodo de ayuno pro- relacionada con la enfermedad debemos recodar que
longado, cuando el ayuno supera los 6 días. durante la agresión (trauma, infección, quemadura,
Durante la situación de ayuno breve se producen cirugía, enfermedad) se desarrolla una respuesta infla-
una serie de cambios metabólicos caracterizados por matoria reparadora, que es beneficiosa cuando es bien
un aumento en la producción de glucosa endógena pro- controlada y se autolimita con la resolución del proceso.
cedente de la glucogenolisis y la neoglucogénesis, y Pero en ocasiones, cuando persiste el estimulo agresor o
por un incremento en la movilización lipídica (lipoli- la agresión se prolonga por otras complicaciones rela-
sis). Los tejidos periféricos como el músculo esquelé- cionadas, el proceso inflamatorio queda fuera de con-
tico, cardiaco, riñón, etc., utilizan fundamentalmente trol produciéndose un síndrome de respuesta inflamato-
como combustible los ácidos grasos libres, y en menor ria sistémica con consecuencias metabólicas graves
proporción los cuerpos cetónicos que se forman a nivel para el individuo. La respuesta inflamatoria está
hepático a partir de los ácidos grasos libres. El cerebro mediada por la producción de citoquinas, con acciones
y las células sanguíneas requieren glucosa que procede proinflamatorias e inmunológicas. Las más conocidas y
del glucógeno hepático (se consume en las primeras estudiadas en diversos procesos patológicos son el fac-
16-20 h) y del glicerol procedente de los triglicéridos tor alfa de necrosis tumoral (TNF alfa) y las interleuci-
del tejido adiposo, y fundamentalmente, de los aminoá- nas 1, 2, 6 y 8. Todas estas sustancias son responsables
cidos musculares a partir de neoglucogénesis hepática. de los cambios metabólicos que se producen, en los que,
A partir del músculo y de algunos órganos (proteólisis) a diferencia de la situación de ayuno, se produce un
se provee al hígado de alanina y glutamina (aminoáci- aumento del gasto energético, así como un aumento en
dos glucogénicos). Esta utilización de aminoácidos del la liberación de aminoácidos del músculo que se utili-
músculo se traduce en una pérdida proteica y una ele- zan tanto para la neoglucogénesis como para la síntesis
vada excreción de nitrógeno urémico. Después de las de proteínas, necesarias en ese momento para el sistema
primeras 48 h la degradación proteica con fines neoglu- inmunológico y para la reparación de los tejidos afecta-
cogénicos disminuye para evitar una gran depleción dos por la agresión. En estas circunstancias, algunos

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aminoácidos como la glutamina experimenta un con- Prevalencia de la desnutrición


sumo llamativamente elevado, siendo considerado por asociada a la enfermedad
ello un aminoácido esencial en situaciones de estrés
(aminoácido condicionalmente esencial). Podríamos decir que una de las mejores contribucio-
Paralelamente, en respuesta a la agresión, se produ- nes científicas que da solidez al concepto de desnutri-
cen unos cambios hormonales que contribuyen a modi- ción relacionada con la enfermedad se la debemos a las
ficar la respuesta metabólica. El aumento de los niveles reflexiones de Hiram O Studley, un cirujano de Cleve-
de insulina hace que disminuya la producción de cuer- land, que en la primera mitad del siglo XX, veía como
pos cetónicos y su utilización como sustrato a nivel los pacientes que habían perdido un 20% o más de su
cerebral. Sin embargo, no mejora la utilización de glu- peso habitual antes de haberles intervenido por un
cosa, desarrollándose una resistencia a la acción de la ulcus péptico tenían una mortalidad postoperatoria de
insulina que conduce a la hiperglucemia que ha sido un 33,3%, cifras claramente superiores al 3,5% que
relacionado como factor de mortalidad9. Estos cambios presentaban los que habían perdido menos del 20% del
metabólicos se completan con la hipertrigliceridemia peso habitual12. Mediante las técnicas estadísticas
que presentan los pacientes agredidos por el aumento actuales se podría establecer que el riesgo relativo de
en la lipolisis y en la oxidación de ácidos grasos. Por mortalidad se multiplicaba por 9,613. Pero aún faltaron
último es importante destacar que durante la agresión 40 años más, para que los estudios de Bristian y Black-
aumenta el número y la actividad de las células del sis- burn se hicieran eco de estas y otras reflexiones simila-
tema inmunológico y se incrementa la proliferación de res, demostrando la realidad del momento, en relación
células intestinales, imprescindibles para mantener el con el fenómeno de la desnutrición en los hospitales de
papel de defensa de la barrera intestinal protegiendo la época14. El 50% de los pacientes ingresados, por pro-
del paso de microorganismos al torrente circulatorio blemas médicos o quirúrgicos, presentaban signos de
evitando el desarrollo del proceso séptico10. desnutrición y sucumbían a sus consecuencias15.
Desde hace años ha sido evidenciado el papel de Estos trabajos iniciaron una senda de investigacio-
muchas de estas citoquinas. Se trata de sustancias que nes hasta hoy, permitiendo llamar la atención sanitaria
expresan la condición inflamatoria de la enfermedad sobre el impacto de la DRE. En la actualidad la preva-
con claras consecuencias nutricionales, como el decli- lencia de la desnutrición relacionada con la enferme-
nar de la masa celular corporal. Su implicación ha sido dad que evaluamos en medio hospitalario se cifra en un
referida en las situaciones de enfermedad aguda y cró- rango entre un 20%-50% dependiendo del área geográ-
nica como el daño intestinal, la enfermedad inflamato- fica, la población estudiada, así como del método
ria intestinal, las lesiones periodontales, las heridas, los empleado y los criterios elegidos para establecer el
traumas, la sepsis, el síndrome de distrés respiratorio diagnóstico, siendo en nuestra opinión estos dos últi-
del adulto, el fallo multiorgánico, la artritis reuma- mos aspectos los más importantes a considerar. Estas
toide, la obesidad, el síndrome metabólico, la enferme- cifras alcanzan valores más elevados en algunos nichos
dad cardiovascular, el cáncer, la infección por el virus de población como los pacientes ancianos y los oncoló-
de la deficiencia humana, la anorexia nerviosa y hasta gicos16 y se establece entre el 6 y el 51% de los niños
el propio proceso de envejecimiento entre otros. Algu- hospitalizados de países desarrollados17.
nos autores como Jensen GL, cuando analizan el papel Es evidente que en general la prevalencia de la des-
de la inflamación en el desarrollo de la desnutrición nutrición no ha cambiado en los últimos 20 años. Esta
relacionada con la enfermedad, llegan a escribir “ if circunstancia podríamos atribuirla a tres razones. Por
you favorite disease is not here, it probably will be un lado la media de edad de los pacientes ingresados ha
soon! “ destacando la importancia del proceso inflama- aumentado de forma clara, en segundo lugar, porque
torio presente en las enfermedades agudas y crónicas, tampoco han cambiado sustancialmente las pautas
los cambios metabólicos que condiciona y su estrecha terapéuticas de muchas enfermedades, a excepción
relación con la desnutrición11. hecha de los tratamientos antirretrovirales de alta ren-
La realidad es que estos cambios metabólicos, fun- tabilidad de los pacientes con infección por el Virus de
cionales y estructurales concentran el interés de los clí- la Inmunodeficiencia Humana , reduciendo el riesgo de
nicos desde hace años. De su observación crítica pode- “wasting síndrome” y de algunas terapias antitumora-
mos aprender que el uso del soporte nutricional de les, que si han cambiado la expectativa de vida de
forma aislada no es capaz de revertir, por si sólo, la des- muchos pacientes permitiendo optimizar su estado de
nutrición relacionada con la enfermedad, se necesita salud en general, y en especial su estado nutricional.
tener en consideración el manejo de la inflamación Por último, creemos que sigue faltando sensibilidad y
para realizar un abordaje integral más eficaz del pro- formación para sospechar este grave problema sociosa-
blema. Las medidas planteadas en esta línea abarcan nitario, no olvidamos que en condiciones de práctica
desde soporte nutricional con dietas “antiinflamato- clínica habitual las cifras de diagnóstico de desnutri-
rias” (fórmulas con farmaconutrientes), el estricto con- ción descienden a un 3%13,18.
trol de la glucemia, la actividad física, el uso de estimu- La media de los estudios Europeos y Americanos
lantes del apetito, agentes anabolizantes, agentes establece que el 31% de los pacientes ingresados en un
antiinflamatorios, anticotoquinas hasta de probióticos. centro hospitalario presentan desnutrición o están en

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Fig. 2.—Mecanismos de desa-


rrollo de la desnutrición aso-
ciada a la enfermedad y con-
secuencias clínicas. Adaptada
de Norman K et al. Clin Nutr
2008; 27: 5-15.

situación de riesgo. La mayoría de los estudio excluyen trascendentales. Es de destacar su implicación en la


pacientes en la unidades de cuidados intensivos. El alteración de la función del sistema inmune, el retraso
estudio de Korfal G et al., realizado en 29.139 pacien- en la curación de las heridas y en los periodos de con-
tes de 34 hospitales de Turquía, utilizando como valecencia de la enfermedad de base y en la disminu-
método diagnóstico el NRS 2002 (Nutritional Risk ción del estatus funcional lo que contribuye a un
Screening), estableció una prevalencia de desnutrición aumento de la morbimortalidad (fig. 2). Los efectos
elevada en estas unidades (52%) frente a valores bajos deletéreos sobre la masa celular corporal y la actividad
en pacientes ingresados en servicios de otorrinolargin- inflamatoria también se extienden a la calidad de vida
logía (3,9%)19. de los pacientes. En las personas con edad avanzada y
Es de interés para nosotros destacar los datos del los pacientes con enfermedades crónicas clínicamente
estudio PREDYCES® (Prevalencia de la Desnutrición estables, la expectativa de vida y el rendimiento físico
Hospitalaria en España y sus Costes Asociados), que están claramente disminuidos cuando han perdido
ha evaluado la situación de 1.707 pacientes, seleccio- masa, resistencia y fuerza muscular y cuando la activi-
nados aleatoriamente de 31 hospitales de los distintos dad inflamatoria está presente. Esto también es aplica-
niveles de atención hospitalaria representativos de todo ble a la función cognitiva. El tamaño del músculo y la
el estado español, en condiciones de práctica habitual. actividad inflamatoria son factores de riesgo indepen-
En este estudio se excluyeron los pacientes ingresados dientes en la evolución de eventos estresantes y en la
en unidades de cuidados intensivos, quemados, obste- calidad de vida del individuo16.
tricia, oftalmología, dermatología, psiquiatría, unida- Como ya hemos comentado la desnutrición tiene
des de trastornos del comportamiento alimentario, efectos deletéreos sobre diferentes órganos y sistemas.
paliativos, urgencias, así como unidades de corta estan- El corazón y el hígado pueden perder hasta un 30% de
cia20. Los resultados mostraron que la prevalencia de su peso habitual, los riñones, el páncreas o el bazo tam-
DRE en los hospitales españoles es de un 23%, alcan- bién reducen su tamaño. Las alteraciones estructurales
zando un 37% entre los pacientes mayores de 70 años. miocárdicas como la disminución del número de miofi-
Los pacientes desnutridos presentaban prioritaria- brillas cardiacas, la aparición de necrosis o infiltrados
mente enfermedades neoplásicas, respiratorias y car- inflamatorios, edemas etc., junto a los déficits asocia-
diovasculares. dos de micronutrientes (tiamina), condicionan disfun-
ciones graves. De igual manera, a nivel del músculo
esquelético, los cambios estructurales (pérdida de masa
Consecuencias de la desnutrición muscular, atrofia parcial de las fibras musculares no
aeróbicas tipo II) se asocian a cambios funcionales
Si la DRE es importante es porque condiciona una como la alteración de la concentración intracelular de
serie de cambios en la estructura y función de distintos electrolitos, de micronutrientes o de compuesto ricos
órganos y sistemas que tiene consecuencias clínicas en energía (ATP), los defectos en los canales del calcio

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Tabla II
Consecuencias clínicas de las alteraciones funcionales de órganos y sistemas en el paciente desnutrido

Órganos y sistemas Funciones


Reducción del gasto cardiaco
Cardiovascular Reducción de la capacidad de respuesta al ejercicio
Insuficiencia cardiaca y arritmias
Reducción del flujo plasmático
Reducción del filtrado glomerular
Renal
Reducción de la capacidad de excretar agua y sal
Aumento de líquido extracelular
Disminución de la capacidad vital
Incremento de la resistencia al flujo aéreo
Incremento del volumen residual
Respiratorio Aumento del trabajo respiratorio
Menos fuerza para la tos
Retraso en la recuperación respiratoria
Aumento de días en ventilación mecánica
Aumento de la fatiga
Reducción del índice de relajación máxima
Descenso de actividad física
Músculo
Aumento de riesgo de caídas
Factor de riesgo para úlceras por presión, complicaciones postoperatorias
en cirugía gastrointestinal y fractura de cadera
Depresión
Ansiedad
Neurológico
Alteraciones cognitivas (Síndrome de Wernicke-Korsakov)
Ataxia, espasticidad, alteraciones sensitivas secundarias a mielopatía
Malabsorción
Digestivo Alteraciones de la barrera intestinal
Esteatosis hepática
Inmunitario Inmunosupresión
Bajo peso al nacer
Retraso del crecimiento y desarrollo (talla baja)
Retraso madurativo
Endocrino Amenorrea secundaria
Disminución de la tasa metabólica basal
Aumento de agua corporal
Retención hidrosalina
Alteraciones tróficas de la piel y faneras
Falta de elasticidad
Cicatrización Queratosis
Cabello y uñas quebradizas
Úlceras por presión
Alteración de la respuesta termogénica al frío
Reducen la respuesta vasoconstrictora
Termorregulación
Predisponen a la hipotermia
Pérdida de la respuesta febril fisiológica en situaciones de infección

y en la bomba Na/K, alteraciones en los potenciales de y secreción de distintos grupos de hormonas (hormona
membrana etc.. Todas estas alteraciones tienen graves del crecimiento, insulina, glucagón, gonadotrofinas
consecuencias clínicas para el individuo. A nivel respi- etc.). Durante el ayuno prolongado se activa el eje
ratorio, merece la pena destacar una disminución del hipotálamo-hipofiso-suprarrenal y se inhiben los ejes
número de macrófagos alveolares y un descenso en los gonadal y tiroideo que contribuyen de forma directa a
niveles de surfactante haciendo al individuo más sus- los cambios funcionales21. En definitiva diferentes alte-
ceptible a la agresión. Y en el sistema endocrinológico raciones funcionales con claras consecuencias clínicas
destacan las modificaciones sustanciales en la síntesis (tabla II).

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Tabla III
Impacto de la desnutrición en la estancia media hospitalaria. Modificada de M. Brosa. Aspectos económicos de la
nutrición clínica. En: Gestión en nutrición clínica. J. Álvarez y P. P. García eds. Editorial Glosa, S.A., 2009

Diferencias de estancia
Autor y año N.º de pacientes Servicios atribuible a la DRE
(días)
Cederholm, 1995 205 Geriatría 25

Edigton, 2000 850 Varios 3,2

Correia, 2003 9.348 Varios 6,6

Pérez de la Cruz, 2004 650 Varios 4,3

Kyle, 2004 652 Varios 5,1

Ockenga, 2005 541 Gastroenterología 4,2

Pirlich, 2006 1.886 Varios 4

Amaral, 2007 469 Varios 7,1

PREDYCES®, 2010 1.707 Varios 7,2

El aumento de morbilidad de los pacientes desnutri- Pero no sólo la estancia hospitalaria se prolonga y es
dos, en enfermedades crónicas o agudas, es fiel reflejo más costosa, sino que además los pacientes muestran
de estas consecuencias clínicas. La DRE afecta signifi- elevadas tasas de reingresos (17%-48%) a los 15, 30,
cativamente al periodo de convalecencia de la enferme- 90 días y hasta los 6 meses después del alta hospitala-
dad de base, de la cirugía a la que haya sido sometido el ria23,24,25.
paciente o de la agresión traumática. La curación de Por último, desde hace años sabemos que existe una
heridas y la consolidación de fracturas se retrasan. En estrecha relación entre DRE y mortalidad en enferme-
los pacientes desnutridos la fase aguda inflamatoria se dades crónicas como el SIDA (Síndrome de Inmunode-
prolonga, y se produce un descenso en la proliferación ficiencia Adquirida), enfermedad hepática crónica,
de fibroblastos, en la síntesis de colágeno y en la angio- enfermedad renal terminal, cáncer, enfermedad pulmo-
génesis. La desnutrición ha sido asociada con un ele- nar obstructiva crónica, o en situaciones agudas como
vado riesgo postoperatorio, en particular con el riesgo fractura de cadera o cirugías de pulmón, cardiaca o en
de infección nosocomial, en especial neumonías, insu- el trasplante hepático16. Además el empeoramiento del
ficiencia renal aguda, fallo respiratorio, y aumento de estado nutricional de pacientes ancianos, durante la
días de ventilación mecánica y estancia en UCI16,22. estancia hospitalaria, y que son dados de alta desnutri-
Es evidente que este aumento de morbilidad tiene un dos, parece ser un factor de riesgo independiente de
impacto sanitario importante condicionando un aumento mortalidad a los 4 años y medio siguientes al alta26.
de la estancia hospitalaria y del consumo de recursos.
Son muchos los estudios que muestran prolongación de
estancias hospitalarias, desde 2 hasta 25 días, según los Identificación de la desnutrición o riesgo
distintos autores (tabla III). El estudio PREDYCES®, de desarrollarla en el paciente
ya comentado anteriormente, ha evidenciado cifras con inflamación crónica
similares a la media, pero además muestra que el 9,6%
de los pacientes que se desnutrían durante su estancia A la luz de los datos anteriormente comentados
hospitalaria duplicaban los días de estancia cuando se parece razonable pensar que el desarrollo de planes de
comparaba con pacientes no desnutridos (15,2 ± 9,2 vs prevención, cuidados y tratamiento de la DRE tendrán
8,0 ± 5,2 días). Un periodo más prolongado de estancia un impacto positivo en la morbimortalidad de los
hospitalaria y un tratamiento más intensivo del proceso pacientes, mejorando la calidad de vida de los pacien-
y las complicaciones del paciente desnutrido, tiene tes y reduciendo los costes por proceso. Es necesario
importantes y gravosas consecuencias económicas ya poder identificar a los pacientes desnutridos o en riesgo
que para el mismo GRD (Grupo Relacionado para el de desnutrición para poder actuar precozmente.
Diagnóstico) puede duplicar su coste16. En esta línea el Existen más de 60 cuestionarios estructurados para
estudio PREDYCES® demostró que el coste de la estan- realizar un cribado nutricional que sea capaz de identi-
cia de los pacientes desnutridos al alta versus los no des- ficar aquellos sujetos candidatos a completar una valo-
nutridos fue un 50% adicional (6,408 €vs 12,237 €). ración nutricional más específica e implementar un

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plan terapéutico ad hoc. El método de cribado debe dose a caballo entre el cribado y la valoración nutricio-
reunir unos determinados criterios de calidad. Debe ser nal completa. Durante los últimos años ha venido
preciso (válido para la población que se pretende eva- sufriendo diferentes adaptaciones para facilitar la reali-
luar, sensible y específico), efectivo, fiable, reproduci- zación por el propio paciente como la Valoración Glo-
ble, práctico (fácil y que precise poco tiempo para su bal Subjetiva Generada por el Paciente (VGSGP) o la
realización) y estar ligado a un algoritmo de actuación. Scored-VGS, en la que se puntúan de 1 a 4 los compo-
Lo ideal es que se realice al ingreso del paciente en el nentes de la VGSGP en función del impacto del sín-
centro hospitalario o sociosanitario o en la primera toma sobre el estado nutricional27. Este método puede
consulta de atención primaria y se establezca un calen- ser utilizado en cualquier nivel asistencial.
dario de reevaluaciones según la situación clínica del
paciente y los resultados del mismo.
Se han descrito métodos clínicos, automatizados y Nutritional Risk Screening (NRS 2002)
mixtos. La mayoría de los métodos clínicos recogen
variables como peso, talla, IMC, cambios en la ingesta, Se trata del método de cribado nutricional recomen-
comorbilidades, etc. Los métodos automatizados se dado por ESPEN (European Society for Clinical Nutri-
basan fundamentalmente en métodos analíticos (coles- tion and Metabolism) para aplicar a pacientes hospita-
terol, linfocitos, albúmina, proteínas totales) aunque lizados. Resulta sencillo, rápido y fácil de realizar. Está
captan otros datos (diagnóstico, edad, duración y evo- estructurado en dos etapas, que se completaran depen-
lución del proceso, recursos aplicados, etc.) disponi- diendo de las respuestas a las 4 primeras preguntas.
bles en las bases de datos del hospital. A nadie se le Como la VGS incorpora datos clínicos relacionados
escapa la dificultad que existe para conseguir seleccio- con el IMC, cambios en el peso y la ingesta y la grave-
nar los parámetros que sean capaces de predecir el dad de la enfermedad. La edad se considera un factor
estado nutricional. Mientras los métodos clínicos pare- de riesgo si supera los 70 años. Este es un método vali-
cen más asentados en la literatura científica, los méto- dado para detectar pacientes que se puedan beneficiar
dos que se basan en determinaciones bioquímicas son de un soporte nutricional especializado, pero no cate-
más controvertidos. Una de las razones fundamentales goriza el riesgo de desnutrición21,28.
es la consideración de que el uso aislado de estos pará-
metros bioquímicos (albúmina, prealbúmina etc.)
induce a posibles errores diagnósticos, ya que la infla- Malnutrition Universal Screening Tool (MUST)
mación per se puede ser responsable de una dramática
reducción de niveles de estas proteínas en 24 h en Este método de cribado fue desarrollado en 2003 por
pacientes que no presentan ningún grado de desnutri- la BAPEN (British Association for Parenteral and
ción. Su utilidad pronóstica refleja su valor como indi- Enteral Nutrition) para identificar a los pacientes adul-
cador en la evolución de la agresión, trauma o enferme- tos malnutridos (desnutridos, sobrepeso y obesos) o en
dad, responsable del proceso inflamatorio. riesgo de desnutrición en el ámbito comunitario, insti-
A continuación describiremos algunos de los méto- tucionalizados en residencias o en hospitales29. Es
dos más utilizados en la actualidad en ámbito hospita- capaz de predecir la estancia hospitalaria, el destino al
lario, sociosanitario y ambulatorio. alta y la mortalidad en los pacientes hospitalizados. Es
un método tremendamente sencillo y muy fácilmente
aplicable, que no necesita de especial capacitación,
Valoración Global Subjetiva (VGS) salvo el entrenamiento en la toma de medidas antropo-
métricas para estimar la talla y el IMC en aquellos
Es el método recomendado por la ASPEN (Ameri- pacientes a los que no se les pueda tallar y pesar. Incor-
can Society for Parenteral and Enteral Nutrition). Fue pora datos clínicos como el IMC, la pérdida de peso no
diseñado por Baker en 1982 como un proceso de valo- intencionada y el efecto de la enfermedad aguda que
ración estructurado y sencillo que incluye datos de la aqueja el paciente. Uno de los valores de mayor interés
historia clínica, de la enfermedad actual y de la explo- que en nuestra opinión tiene este método es que pre-
ración física. Clasifica a los pacientes en tres categorías senta protocolos de actuación ligados a recomendacio-
bien nutridos (A), sospechoso de desnutrición o desnu- nes para el tratamiento con un cronograma de actua-
trición moderada (B) y desnutridos graves (C). Utiliza ción considerando que la ubicación del paciente sea su
algunos datos relevantes de la historia clínica como son domicilio, este institucionalizado o esté ingresado en
los cambios del peso corporal y de la ingesta, síntomas un centro hospitalario de agudos.
gastrointestinales y capacidad funcional del individuo,
por último hace referencia a la enfermedad de base y el
grado de estrés por su implicación en los requerimien- Mini Nutritional Assessment (MNA)
tos. Hoy en día es el método de referencia para el cri-
bado nutricional pero precisa un entrenamiento para La Mini Evaluación Nutricional es un método
los evaluadores y podríamos considerarlo como algo estructurado de valoración, sencillo y validado para
más completo que un simple método de cribado situán- población geriátrica. Fue diseñado para formar parte de

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una valoración geriátrica integral y en la actualidad es el mina, colesterol, linfocitos totales, evolución del pro-
método de cribado recomendado por ESPEN para esta ceso). El grado de alerta de desnutrición llega a diario
población. Consta de dos partes, una propiamente de cri- directamente al médico con el resultado de los análisis
bado (MNA Short Form) que se completa dando res- que ha solicitado. En el caso del CONUT , los casos de
puesta a 6 preguntas que hacen referencia a los cambios alerta moderada o alta llegan a la Unidad de Nutrición,
de apetito, ingesta y pérdida de peso, al IMC, a la funcio- al objeto de poder seguir el protocolo establecido sobre
nalidad (movilidad), a la presencia de problemas neu- valoración de riesgo nutricional. En el caso del FIL-
ropsicológicos y a la coexistencia de enfermedad aguda NUT que utiliza los datos seleccionados por CONUT
o estrés psicológico en los últimos 3 meses. Si la puntua- incorporando el valor de proteínas < 5 g/dL, con el
ción en el cribado es igual o inferior a 11 puntos se debe resultado obtenido se elabora un documento informe
completar la evaluación contestando al resto de pregun- (INFORNUT) que incorpora una respuesta automática,
tas, un total de 17. Este segundo bloque de preguntas con orientación diagnóstica y terapéutica, así como una
hace referencia a los hábitos alimentarios, aspectos propuesta de codificación según recomendación de la
sociales y funcionales, así como a algunos parámetros oficina técnica de la CIE-9 MC del Ministerio de Sani-
antropométricos (circunferencia braquial y de la panto- dad, Servicios Sociales e Igualdad32.
rrilla). La valoración distingue los pacientes normonutri- Recientemente se ha publicado el Consenso Multidis-
dos aquellos con puntuaciones > 24; en riesgo de desnu- ciplinar de Abordaje de la Desnutrición Hospitalaria en
trición los que tienen entre 17 y 23,5 puntos y España (CMADHE)33. Este documento liderado por
desnutridos los que puntúan < 17. Es un método con alta SENPE (Sociedad Española de Nutrición Parenteral y
sensibilidad (96%), especificidad (98%) y valor predic- Enteral) y suscrito por 21 sociedades científicas (englo-
tivo positivo (97%). El mayor interés de este método es bando más de 30.000 profesionales sanitarios), la Fun-
que es capaz de detectar a la población de mayores en dación de Nutrición y el Foro del Paciente, establece 30
riesgo antes de que se alteren cambios más visibles30. recomendaciones para la prevención y el manejo de la
desnutrición hospitalaria. Aborda la actuación clínica
en prevención, cribado, diagnóstico, tratamiento y
Short Nutritional Assessment Questionarie (SNAQ) seguimiento de la DRE en el ámbito hospitalario. Las
recomendaciones se extienden a otros niveles asisten-
Se trata del método de cribado establecido por la el ciales como la comunidad (atención primaria) y las ins-
Grupo Directivo de la Desnutrición Holandes. Este tituciones socio-sanitarias (residencias).
grupo fue creado en 2005 para desarrollar una metodolo- En este documento se aconseja que se debe realizar
gía de trabajo en la lucha contra la desnutrición relacio- cribado nutricional en todas las áreas de actuación clí-
nada con la enfermedad en Holanda. El proyecto que nica cuando se identifiquen factores de riesgo nutricio-
estructura toda esta metodología ha sido premiado por la nal o sospecha clínica de desnutrición. En el ámbito
ESPEN en 2010 como la mejor iniciativa en la Lucha hospitalario se deberá hacer en las primeras 24-48 h del
contra la Desnutrición. Este grupo ha diseñado un test de ingreso hospitalario (Grado de recomendación A). La
cribado que ha sido validado para la población adulta valoración nutricional deberá diseñarse y realizarse de
holandesa con alguna modificación para la población acuerdo a los recursos disponibles en cada centro, dis-
geriátrica. El test valora la condición de riesgo nutricio- poniendo de protocolos de actuación33.
nal y la necesidad de intervenir considerando las res- En los pacientes que presentan un cribado positivo
puestas a 3 preguntas relacionadas con la pérdida de es obligatorio realizar una valoración completa del
peso no intencionada, la ingesta alimentaria y la situa- estado nutricional. Ésta se completará con parámetros
ción de intervención nutricional actual del paciente antropométricos (cambios del peso, IMC, estudio de la
(toma de suplementos o utilización de nutrición enteral). composición corporal), evaluación dietética (hábitos,
Es un método sencillo, muy fácil de aplicar y fiable, que historia dietética, “liturgias” alimentarias, historia de
permite evaluar colectivos de personas en el ámbito de la soporte nutricional especializado), evaluación de la
comunidad, los hospitales y las residencias geriátricas31. funcionalidad (dinamometría, espirometría, evalua-
ción del tiempo de la marcha, número de veces que se
puede levantar de una silla, test de equilibrio) y pará-
Métodos Automatizados: CONUT (Control metros bioquímicos (albúmina, prealbúmina, y prote-
de Nutrición) Y FILNUT (Filtro de Nutrición) ína ligada al retinol, etc.). Con la actual conceptualiza-
y proceso INFORNUT ción de la inflamación en el eje central de la DRE, la
proteína C reactiva se posiciona como un elemento útil
Como ya hemos comentado se trata de dos métodos en la valoración nutricional por lo que algunos autores
liderados por clínicos españoles que establecen un pro- proponen su inclusión de forma protocolizada en la
ceso de cribado automatizado de detección sistemática evaluación nutricional. Se trata de una proteína reac-
e identificación precoz de pacientes desnutridos al tante de fase aguda que aumenta durante el proceso
ingreso hospitalario. Recogen información de las bases inflamatorio y puede ayudar a discernir si existe activi-
de datos del servicio de admisión (filiación, edad, fecha dad inflamatoria durante la evaluación, ya que la albú-
y duración del ingreso) y del laboratorio central (albú- mina o la prealbúmina pueden verse descendidas, no

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sólo cuando el paciente está desnutrido, sino también forma de hacer las cosas, curiosamente sin costes eco-
como parte de la respuesta sistémica inflamatoria34. nómicos adicionales. Solo con el conocimiento de cuál
es la situación clínica real, y de cómo es la ingesta de
nutrientes, podremos establecer la necesidad de SNE
Estrategias terapéuticas del soporte con suplementación, nutrición enteral o parenteral y el
nutricional en estos pacientes resto de medidas terapéuticas complementarias (orexí-
genos, antiinflamatorios, anabolizantes etc.). El éxito
Karl Adolph von Bassedow (1799-1854) mandó de la respuesta terapéutica en la DRE estriba, en gran
escribir en su epitafio “He fed fevers”, en una época en medida, en tener en consideración que la valoración
la que el ayuno y la sangría eran la pauta terapéutica de nutricional y los aspectos de los cuidados y tratamien-
elección, se empeñó en dar de comer a sus pacientes tos nutricionales forman parte de la asistencia integral
febriles, siendo esta una de sus mejores contribuciones del individuo enfermo.
a la historia de la medicina, en el campo del soporte El CMADHE recomienda que ante ingestas insufi-
nutricional. La alimentación forma parte del trata- cientes de individuos institucionalizados o pacientes
miento integral de cualquier situación patológica. hospitalizados se deberán evaluar las posibles causas y
Las estrategias terapéuticas de soporte nutricional en registrarlas sistemáticamente. Así mismo, se deberán
pacientes con DRE deben proyectarse de forma indivi- individualizar los menús y enriquecerlos adaptándolos si
dualizada. Para su diseño es esencial conocer la situa- fuera necesario para que cubran los requerimientos
ción clínica del paciente, el diagnóstico y pronóstico de (Grado de recomendación A). Se recomienda prescribir
la enfermedad de base y de la situación actual, las posi- suplementación nutricional si las modificaciones de la
bilidades de uso del tubo digestivo, el grado y tipo de dieta no consiguen cubrir las necesidades nutricionales
desnutrición, sus requerimientos, las características de (energía, proteínas, vitaminas, minerales, etc.). Si se
los distintos tipos de soporte nutricional especializado valora la prescripción de suplementos nutricionales ora-
(SNE), los riesgos y beneficios de las distintas medidas les, su selección atenderá a los requerimientos del
posibles, el tiempo estimado de cuidado y tratamiento, paciente, las patologías que presente, las condiciones
el coste del mismo, la calidad de vida y por último las fisiológicas y patológicas y la adecuación a la situación
preferencias del pacientes o sus sustitutos. clínica y los gustos de cada paciente (Grado de recomen-
La valoración de las ingestas alimentarias de los dación A). Por último en caso de que la ingesta oral sea
pacientes con DRE constituye uno de los primeros inadecuada, a pesar de las modificaciones de la dieta y
pasos en la estrategia nutricional. La eficacia del los suplementos nutricionales orales, se deberá valorar la
soporte nutricional especializado (SNE) tiene relación administración de nutrición enteral, siempre que, a jui-
con una adecuada cobertura de requerimientos. La rea- cio del clínico, el tracto gastrointestinal sea funcional,
lidad es que en los centros socio-sanitarios y en los hos- tanto desde el punto de vista de su capacidad absortiva
pitales, las organizaciones de los servicios de alimenta- como de su motilidad (Grado de recomendación A).
ción centralizados han supuesto un avance en la Por último todas las intervenciones formarán parte de
restauración colectiva de nuestros pacientes o residen- un plan de soporte nutricional a los pacientes que lo pre-
tes. Los códigos de dietas, el control estricto de los cisen tras la valoración nutricional. El profesional o
puntos críticos de las cocinas, la distribución en cinta equipo responsable del tratamiento deberá ser identifi-
del emplatado controlada, el uso de bandejas isotérmi- cado así como establecer protocolos de intervención
cas etc., son medidas que nos han permitido mejorar la nutricional en cada nivel asistencial. Se implicará al
calidad y la seguridad alimentaria en nuestros centros. equipo médico y de enfermería (enfermeras y auxiliares)
Sin embargo, seguimos teniendo muchas lagunas en el en los centros en los que no exista unidad de soporte
ámbito de la alimentación de los pacientes ingresados nutricional para el manejo de los pacientes en riesgo
en hospitales y residencias. En ocasiones, para imple- nutricional y/o desnutridos. El equipo responsable
mentar los cuidados en la alimentación de un paciente deberá estar identificado (Grado de recomendación D)33.
basta con conocer lo que come diariamente y monitori- El diagnóstico de desnutrición y los procedimientos
zar su evolución en esta materia. Esto implica levantar utilizados para su tratamiento, deberán ser registrados
la tapa de la bandeja antes de devolver la misma a la y codificados según las recomendaciones de la Oficina
cocina del centro. Es imprescindible educar y formar Técnica del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales
en nutrición clínica a los equipos sanitarios de los cen- e Igualdad (Grado de recomendación D)33.
tros para poder mejorar nuestras actuaciones en este
campo. Circunstancia extensiva a todos los cuidadores
y población en general y punto clave en la prevención. Aspectos legales y organizativos de su
El control del peso regularmente y la evaluación de implementación en la práctica clínica habitual
la ingesta diaria son medidas esenciales en el cuidado
nutricional de los pacientes. Sin embargo, no se prodi- Parece claro que la desnutrición es un problema
gan en el cuidado y monitorización de los pacientes común en todos los niveles de la atención sanitaria,
desnutridos en los centros hospitalarios. Implementar desde atención primaria a especializada y en centros de
estas medidas exige cambios estructurales en nuestra atención geriátrica. Se trata de un problema universal en

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todo el mundo y en Europa, como ya reconoció el Con- Por último uno de los aspectos más debatidos y que
sejo de Europa en su resolución ResAP (2003)3 sobre ali- más preocupa a los profesionales de la Nutrición Clí-
mentación y cuidados nutricionales en los hospitales35. nica, tiene que ver con la regulación de la financiación
Como ya hemos visto la desnutrición aumenta las de la Nutrición Artificial Domiciliaria y Ambulatoria
cifras de morbilidad, mortalidad, ingresos hospitalarios (NADyA). Se trata de una terapia necesaria y útil pero
y duración de la estancia. Estas cifras más elevadas infrautilizada en nuestro país a pesar de un incremento
suponen lógicamente un aumento del uso de recursos en su empleo en los últimos años.
sanitarios. Su coste sobrepasa los 120.000 millones de En España, según se especifica en el Real Decreto
euros anuales en Europa. Según la European Nutrition 1030/2006, de 15 de septiembre, por el que se establece la
Health Alliance (ENHA) en Europa hay 20 millones de cartera de servicios comunes del Sistema Nacional de
personas que sufren desnutrición. Países como Holanda, Salud y el procedimiento para su actualización, la nutri-
Dinamarca o el Reino Unido han desarrollado Planes ción parenteral está incluida en la cartera de servicios
Estratégicos Integrales para luchar contra la desnutri- comunes de atención especializada tanto en el medio
ción desarrollando e implantando guías, estableciendo intrahospitalario como extrahospitalario (NPD) y, por
cribados obligatorios en los ingresos y altas hospitala- tanto, está financiada por el Sistema Nacional de Salud.
rias, en las residencias en ancianos, etc. El paciente puede recibir su tratamiento en su domicilio
A pesar de los avances en los últimos años, España, por un servicio de catering contratado por el centro sani-
aún tiene un largo camino por recorrer en este sentido. tario responsable de su tratamiento nutricional o bien
Adolecemos de una uniformidad en la formación pre y debe acudir a recoger el tratamiento nutricional (bolsa de
postgrado en Nutrición que nos permita asegurar una nutrición parenteral, fungible, medicación, etc.), a la far-
adecuada formación a los colectivos de profesionales macia hospitalaria, según la modalidad de gestión esta-
sanitarios que en primera instancia están al cuidado de blecida en cada centro para este recurso terapéutico. Sin
los pacientes desnutridos. Se hace necesario un amplio embargo, a diferencia de la nutrición enteral domiciliaria
programa formativo para médicos de atención prima- (NED), no existe una normativa reguladora de la misma.
ria, generalistas, geriatras, distintos especialistas, etc., La NED es una prestación del Sistema Nacional de
así como para los equipos de enfermería que nos asegu- Salud regulada por una Orden Ministerial de 11 de
ren una optimización en la prevención y tratamiento de junio de 1998 que ha sido revisada y adaptada, a la luz
la desnutrición. de los nuevos avances científicos y nuevos productos,
Por otro lado, aunque todos coincidimos en destacar en el Real Decreto 1030/2006, de 15 de septiembre, por
la necesidad de que existan equipos mulitidisciplina- el que se establece la cartera de servicios comunes del
res, bien formados, en cada centro hospitalario, esta Sistema Nacional de Salud y el procedimiento para su
circunstancia hoy en día supone una asignatura pen- actualización.
diente. No en todos los centros contamos con Equipo Por otro lado, la Orden SCO/3858/2006, de 5 de
de Soporte Nutricional (ESN) o Unidad de Nutrición diciembre, por la que se regulan determinados aspectos
Clínica (UNC) multidisciplinar. En muchos centros la relacionados con la prestación de productos dietéticos
unidad es de uno, o ni siquiera existe como tal. En algu- del Sistema Nacional de Salud, ha concretado los crite-
nos casos ese uno al que nos referimos es un médico rios que definen los tipos de productos que, por sus
formado en nutrición clínica o en su defecto una enfer- características, serían susceptibles de financiación
mera, excepcionalmente se trata de una dietista. En pública, de acuerdo con las patologías, situaciones clí-
general, existe una declarada ausencia de dietistas, tec- nicas y demás requisitos que regula el Real Decreto
nólogos de los alimentos o bromatólogos en la UNC de 1030/2006. Además, ha supuesto la revisión de todos
los hospitales públicos españoles. No existe un modelo los productos dietéticos que a la fecha de entrada en
único de gestión de las UNC. La dotación de los cen- vigor de esa orden eran susceptibles de financiación
tros hospitalarios de ESN tiene beneficios económicos por el Sistema Nacional de Salud, para verificar si
y de calidad asistencial. La presencia de personal entre- cumplían los requisitos establecidos en la misma.
nado y formado en nutrición permite reducir el número La realidad es que la normativa actual que regula la
de complicaciones infecciosas relacionadas con el Nutrición Enteral Domiciliaria ha dado lugar a aplicacio-
soporte nutricional. nes distintas y no contempla toda la realidad clínica asis-
Entendemos que sería muy recomendable disponer tencial, quedando excluidas de la financiación patologías
de protocolos de actuación y guías clínicas en todos los subsidiarias de esta modalidad terapéutica. La SENPE ha
niveles asistenciales que establezcan, de forma consen- denunciado que existe una clara disociación entre reali-
suada y a la luz de la evidencia científica, los pasos a dad y regulación: nutrición enteral por sonda; suplemen-
seguir para la prevención y el tratamiento de la desnu- tos orales; productos para disfagia. Parece necesario ade-
trición relacionada con la enfermedad y así lo mani- cuar la normativa regulatoria a la realidad actual, como
fiesta el Consenso Multidisciplinar para el Abordaje norma generalizada en todo el estado que asegure la equi-
Nutricional anteriormente referido. Esta manera de dad de esta prestación a todos los ciudadanos36.
hacer las cosas es la más adecuada y resulta imprescin- El concepto actual de desnutrición relacionada con
dible en los centros donde no hay equipos de nutrición la enfermedad y el papel relevante de la inflamación en
clínica específicos. esta asociación, la denuncia continua de los datos ina-

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02. Desnutrición.qxd:02. SINDROME.qxd 11/04/12 12:47 Página 16

ceptables de desnutrición en los centros sanitarios de 18. Singh H, Watt K, Veitch R, Cantor M, Duersken DR. Malnutri-
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en equipos multidisciplinares y las campañas de Lucha 19. Korfal G, Gündogdu H, Aydintug S, Mois Bahar, Besler T,
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