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Universidad Mariano Gálvez de Guatemala

Facultad de Ciencias Químicas Biológicas


Licenciatura en Química Biológica clínica
Genética Humana
Licda. Swuanny Villagran

Jennifer Mejía 1009-18-12983


Karen Caballeros 1009-18-8875
Luz Menchú 1009-18-2182
Dennise López 1009-18-2773

ENFERMEDADES LIGADAS A X

I. INTRODUCCION

Las mutaciones son variantes en los genes, capaces de alterar la función de la proteína codificada
por el gen, de tal forma que a) no se produce, b) se produce en cantidad disminuida, c) es inestable,
d) no funciona adecuadamente, e) se incrementa su función o f) se expresa de manera inapropiada
en tiempo o sitio. Estas variantes genéticas producen un gran número de defectos o enfermedades
poco frecuentes. De acuerdo con la ubicación de los genes, se clasifican en autosómicos y ligados
al sexo, y de acuerdo a si se manifiestan en estado heterocigoto u homocigoto, se clasifican en
dominantes o recesivos (Solari, 2004).

Durante mucho tiempo, en el siglo XX, el diagnóstico de las enfermedades mendelianas se basó
únicamente en las manifestaciones clínicas y la forma de herencia. Posteriormente, se completaba
el estudio clínico de los pacientes con exámenes de laboratorio, estudios bioquímicos y de gabinete,
como radiografías, electrocardiograma, electromiografía, entre otros, para precisar lo más posible el
diagnóstico. De esta forma, se describieron las características clínicas detalladas de un gran número
de enfermedades autosómicas dominantes, autosómicas recesivas, ligadas al X dominantes y
recesivas (Oliva, Ballesta, Oriola & Clária; 2008)

Según Oliva (2004), la herencia ligada al sexo se produce cuando la mutación está ubicada en uno
de los cromosomas sexuales. La mayoría de alteraciones ligadas al sexo son debidas a alteraciones
del cromosoma X ya que este contiene muchos más genes que el cromosoma Y.

II. ENFERMEDADES LIGADAS A X

El cromosoma X contiene aproximadamente 2000 genes y compone cerca del 5% de la DNA total
en mujeres y 2,5% en hombres. Los cambios o las mutaciones de estos genes llevan a los
desórdenes que se llaman las enfermedades ligadas a X. Estas enfermedades consisten en que el
gen mutado se localiza en el cromosoma X y pueden transmitirse en forma dominante o recesiva.

Los hombres son hemicigotos para el cromosoma X (que solo tienen un cromosoma X) por lo que
tanto si es dominante o recesiva se expresará siempre en los hombres al ser hemicigoto. La
expresividad en las mujeres puede ser variable en los trastornos recesivos debido al fenómeno de
inactivación del X (Oliva, Ballesta, Oriola & Clária; 2008).
III. PATRÓN DE HERENCIA Y ÁRBOL GENEALÓGICO

Según Oliva, Ballesta, Oriola & Clária (2008), los criterios básicos para distinguir la herencia recesiva
ligada a X son los siguientes:

• La incidencia del rasgo es mucho mayor en varones que en hembras.


• Los varones afectados transmiten el gen mutado a todas sus hijas siendo éstas portadoras no
afectadas.
• Las hijas de un varón afectado tienen un 50% de probabilidad de que sus hijos varones sean
afectados.
• El gen nunca se transmite de un padre afectado a un hijo varón
• El gen puede transmitirse a través de una serie de mujeres portadoras.
• Las mujeres heterocigotas generalmente no están afectadas, pero algunas pueden presentar
alteraciones con gravedad variable. Esto es debido a que las mujeres inactivan uno de sus dos
cromosomas X. Si se inactiva el X contiendo el gen normal puede aparecer clínica dependiendo
del tejido o grupo celular afectado.

(Oliva, Ballesta, Oriola & Clária; 2008).

Genosoma X. Lyonización:

El genosoma X es un cromosoma submetacéntrico del grupo C que contiene genes somáticos


responsables de importantes funciones, y cuyas mutaciones son la causa de enfermedades
ligadas al sexo. De los dos gonosomas X de las células somáticas en la mujer, uno está sujeto
a un proceso de inactivación como mecanismo de compensación génica respecto al hombre
que es hemicigoto para el X. El proceso tiene lugar hacia el 16◦ día de vida embrionaria y es
conocido como lyonización, por ser Mary Lyon quien propuso esta hipótesis; la inactivación
produce al azar de forma que en la mujer, hay unas células que mantienen activo al cromosoma
X de la madre y otras el del padre, manteniéndose esta selección en todas las células que
derivan de la primera que sufrió la inactivación (Oliva, 2004).

Herencia dominante ligada al cromosoma X:


Es aquel tipo de herencia en la que el gen patológico se encuentra en el cromosoma X y que se
expresa clínicamente ya heterocigosis (De Castro & Pérez, 2006).

Las herencias dominantes ligadas al cromosoma X se caracterizan por:

• Todas las hijas de un padre enfermo son portadoras del carácter, pues las hijas siempre heredan
su cromosoma X.
• Todos los hijos varones de un padre enfermo son sanos, pues estos reciben el cromosoma Y.
• Los hijos de madres heterocigotas tienen un riesgo de enfermar del 50%.

(De Castro & Pérez, 2006)

IV. HEMOFILIA

Según el consejo de salubridad general (2012), la hemofilia es una enfermedad hemorrágica


hereditaria caracterizada por la deficiencia funcional o cuantitativa del factor VIII (hemofilia A) o del
factor IX (hemofilia B) de la coagulación, esto debido a un defecto en los genes que se encuentran
localizados en el brazo largo del cromosoma X.

En la hemofilia A o B los hombres son los principales afectados y las mujeres son quienes portan y
transmiten la enfermedad, sin embargo, en casos raros se pueden presentar mujeres hemofílicas.
Clínicamente se manifiesta por la presencia de hemorragias principalmente en músculos y
articulaciones de intensidad variable, de acuerdo al nivel circulante del factor deficiente (Consejo de
salubridad general, 2012).

(García & Majluf, 2013)


V. CUADRO CLINICO

Según García & Majful (2013), los pacientes hemofílicos presentan:

• Hemartrosis, hematomas musculares profundos y hemorragias cerebrales constituyen 95%


de las hemorragias del hemofílico, aunque pueden afectar a cualquier parte del cuerpo,
potencialmente.
• Las hemorragias más frecuentes son, por mucho, las hemartrosis (en las articulaciones de
carga: rodillas, tobillos y codos), y le siguen los hematomas musculares superficiales y
profundos.
• Las hemofilias se caracterizan clínicamente por una tendencia hemorrágica proporcional al
grado de deficiencia del factor hemostático, aunque suele haber excepciones.
• La hemorragia reiterativa a partir de los vasos sinoviales hacia el espacio intraarticular
propicia el depósito de hierro, que dispara una reacción inflamatoria y oxidativa mediada por
citosinas, la cual resulta en proliferación vascular. Este círculo vicioso promueve la hipertrofia
sinovial y predispone a las hemartrosis repetitivas en la misma articulación (articulación
«blanco»), que finalmente lleva a la incapacidad locomotora del paciente conocida como
artropatía hemofílica.

VI. DIAGNOSTICO

Según García & Majful (2013), los aspectos clave para el diagnóstico son la historia clínica, con
énfasis en los antecedentes heredofamiliares y el patrón de herencia, la semiología de la hemorragia,
la exploración física y los exámenes de laboratorio, tanto de escrutinio como confirmatorios. El
laboratorio en el diagnóstico de hemofilia. Es conveniente iniciar con estudios de escrutinio general:
biometría hemática, frotis de sangre periférica y coagulograma básico: tiempo de protrombina (TP),
tiempo de tromboplastina parcial activada (TTPa), tiempo de trombina (TT) y tiempo de hemorragia
(TH).

VII. TRATAMIENTO

Según el consejo de salubridad general (2012), existen diferentes modalidades terapéuticas para el
paciente con hemofilia. Estos tipos de tratamientos son:

• Profilaxis primaria: es la administración del factor deficiente de manera regular y


programada. Esta más efectiva cuando se inicia antes de los 30 meses de vida y antes de
que exista un daño articular.
• Profilaxis Secundaria: consiste en tratamiento con factor de reemplazo en forma periódica
y programada, a largo plazo, por lo menos 46 semanas al año. Son candidatos a esta,
pacientes que no cumplen criterios para profilaxis primaria.
• Tratamiento oportuno o a demanda en el domicilio.
• Tratamiento a demanda en el centro hospitalario.

VIII. CONCLUSION

Las enfermedades ligadas al cromosoma X son enfermedades de herencia no mendeliana que se


transmiten a través de un cromosoma X afectado, por lo que no existirá transmisión de varón a varón.
Dado que el padre no hereda cromosomas X al hijo sino que transmite el cromosoma Y. Mientras
que las mujeres descendientes de hombres enfermos serán portadoras y transmitirán la enfermedad.
Las mujeres portadoras tienen el 50 % de engendrar hijos sanos (hombres y mujeres) y 50% de
engendrar hijos enfermos (hombres y mujeres). Por ejemplo la Hemofilia, una enfermedad causada
por una mutación en el gen que codifica los factores VIII y IX, los cuales ayudan a que ocurra la
coagulación.
IX. REFERENCIAS

1. Consejo de salubridad General (2012). Guía de referencia rápida: Diagnóstico y tratamiento de


hemofilia pediátrica. Evidencias y recomendaciones. IMSS–141–08.
2. De castro, S. & Pérez, J. (2006). Manual de patología general. Elsevier España. 769 págs.
3. García, J. & Majluf, A. (2013). Hemofilia. Gaceta médica de México. 149:308-21.
4. Oliva R. (2004), Genética médica volumen 71 Collecció UB, Edicions universitat Barcelona,346
páginas
5. Oliva, R.; Ballesta, F.; Oriola, J. & Clária, J. (2008). Genética médica. Primera edición. Edicions
universitat Barcelona. 447 págs.
6. Solari J. (2004) , Genética humana: fundamentos y aplicaciones en medicina, Ed. Médica
Panamericana, 556 páginas

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