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Poned La Mira En Las Cosas De Arriba

Tema: Debemos Pensar El Las Cosas Eternas


Si, pues, habéis resucitado con Cristo, buscad las cosas de
arriba, donde está Cristo sentado a la diestra de Dios. Poned
la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra.
Colosenses 3:1–2 (RVR60)
Plan De Lectura Diaria
Juan 7:1–8:20
Versiones De La Biblia:
Colosenses 3:1–2 (NTV) — 1 Ya que han sido resucitados a
una vida nueva con Cristo, pongan la mira en las verdades del
cielo, donde Cristo está sentado en el lugar de honor, a la
derecha de Dios. 2 Piensen en las cosas del cielo, no en las de
la tierra.
Colosenses 3:1–2 (DHH-LA) — 1 Por lo tanto, ya que ustedes
han sido resucitados con Cristo, busquen las cosas del cielo,
donde Cristo está sentado a la derecha de Dios.2 Piensen en
las cosas del cielo, no en las de la tierra.
Pensamiento De Devoción:
Si en verdad hemos resucitado con Cristo, entonces debemos
buscar las cosas de arriba. Aquellas verdades eternas que
tienen gran valor, y no las cosas temporales y pasajeras. Mi
recuerda lo que nos dice 2 Corintios 4:18, “no mirando
nosotros las cosas que se ven, sino las que no se ven; pues
las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven
son eternas.” Muchas veces es fácil caer en el error de solo
estar pensando en las cosas que se ven, en nuestra vida
terrenal, en aquellas cosas que no tienen valor eterno.
El Señor nos recuerda en este día que nuestra ciudadanía no
es de este mundo, “Mas nuestra ciudadanía está en los cielos,
de donde también esperamos al Salvador, al Señor Jesucristo”
(Filipenses 3:20). Por esta razón nuestra mente se debe de
continuamente ocuparse cosas que van a traer provecho a
nuestra vida espiritual. Si en todo lo que se ocupa nuestro
pensamiento es el lo material, en las cosas de este mundo,
¡nuestra mentalidad nunca será renovada! y como resultado
nunca vamos lograremos experimentar una transformación
verdadera. Debemos aspirar mas allá de lo natural y vivir con
una mentalidad de fe con nuestros pies sobre la tierra, pero
nuestra cabeza en el cielo!
Nuestro objetivo y meta como creyentes debe estar en las
cosas eternas, y no pasajeras. Nosotros somos responsables
por nuestros pensamientos, ¡en que ocupamos nuestra
mente! Dios nos a dado la autoridad de someter todo
pensamiento a su voluntad, como nos dice 2 Corintios 10:5,
“derribando argumentos y toda altivez que se levanta contra
el conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento
a la obediencia a Cristo.” Hoy es el día de ya no dejar que
nuestra mente se inunde de las cosas que no edifican nuestra
vida espiritual. Decidamos poner nuestra mira en las cosas de
arriba, las cosas verdaderas, en su Palabra eterna que tiene el
poder para transformar nuestras vidas.
Escrituras Fundamentales Del Tema:
Filipenses 3:19 (RVR60) — 19 el fin de los cuales será
perdición, cuyo dios es el vientre, y cuya gloria es su
vergüenza; que sólo piensan en lo terrenal.
Filipenses 3:20 (RVR60) — 20 Mas nuestra ciudadanía está en
los cielos, de donde también esperamos al Salvador, al Señor
Jesucristo;
Mateo 6:21 (RVR60) — 21 Porque donde esté vuestro tesoro,
allí estará también vuestro corazón.
Mateo 16:23 (RVR60) — 23 Pero él, volviéndose, dijo a Pedro:
¡Quítate de delante de mí, Satanás!; me eres tropiezo, porque
no pones la mira en las cosas de Dios, sino en las de los
hombres.
Las cosas de arriba son todo lo contrario a las cosas de abajo.

Dejen que el cielo sature sus pensamientos, y no pierdan el


tiempo en las cosas de este mundo”.
¿Dónde debe estar la mirada del Cristiano?
Hebreos 12:2
           “Puestos los ojos en Jesús, el autor y
consumador de la fe”

¿Cuando esta nuestra mirada en la dirección equivocada?

Cuando enfocamos nuestra mirada en:

El hombre: Cuando confíamos en el hombre y ponemos


nuestra mirada en el ser humano, estamos expuestos a ser
decepcionados y retroceder. Cuando nos fallan los líderes
entonces nos vamos de la iglesia. La palabra de Dios en
Jeremías 17:5 nos enseña: "Maldito el hombre que confía en
el hombre".

El Mundo: Si nuestra mirada esta puesta en el mundo, en los


afanes del mundo y todo lo que nos ofrece, no podemos
agradar a Dios: "El que quiere ser amigo del mundo, se
constituye enemigo de Dios", Santiago 4:4 lo dice.

Sí mismo: Si tu confianza está puesta en ti, en tus


capacidades, en tu propia sabiduría, en tus fuerzas, entonces
tu mirada esta en un sentido errado, el Señor nos dice en su
palabra según el Evangelio de San Juan 15:5 "separados de mí
nada podéis hacer".

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